consciencia según la neurociencia y la filosofía

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Universidad de Costa Rica Facultad de Letras Escuela de Filosofía F-1000 Introducción a la investigación filosófica Trabajo de Investigación Tema: La consciencia en la neurociencia y en la filosofía Estudiantes: Josué Leiva Andrés Castro Steven Acuña Profesor: David Sánchez I semestre 2015

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Búsqueda de una posible convergencia entre los postulados neurológicos y la filosofía

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  • Universidad de Costa Rica

    Facultad de Letras

    Escuela de Filosofa

    F-1000

    Introduccin a la investigacin filosfica

    Trabajo de Investigacin

    Tema:

    La consciencia en la neurociencia y en la filosofa

    Estudiantes:

    Josu Leiva

    Andrs Castro

    Steven Acua

    Profesor:

    David Snchez

    I semestre 2015

  • NDICE

    ndice..1

    Introduccin..2

    Captulo I..4

    Captulo II..12

    Captulo III.20

    Conclusiones25

    Bibliografa...28

  • INTRODUCCIN

    Inicialmente, la idea de esta investigacin era exponer de manera concisa los

    diferentes postulados existentes en relacin a la consciencia, segn la Filosofa y la

    Neurociencia. En tanto esto, uno de los primeros problemas que tuvimos fue cmo

    abordar este tema tan abrumador, interesante y sumamente problemtico? Por lo que

    primero procedimos a delimitar la Neurociencia, a un campo ms especfico de la misma,

    manteniendo el rumbo discursivo que se quera lograr, al contraponerse contra la filosofa,

    buscando ese algo en comn que pudiese responder y dar sentido a este trabajo. De esta

    manera, la investigacin opt por escindir su maqueta constructiva, con el afn de admitir

    nociones preponderantes en cuanto al concepto conciencia.

    Optamos por utilizar el campo de la Biopsicologa, pues esta mantiene la idea

    inicial de exponer los diferentes procesos bioqumicos que se dan en nuestro cerebro, que

    dan como resultado (segn la misma) la consciencia. Sin embargo, segua existiendo

    demasiada tela por cortar, para poder de alguna manera dilucidar o exponer una

    concepcin de consciencia, por lo que se decidi tomar autores especficos, por ende

    obras y extractos de las mismas, que lograron acortar este problema, de tal manera que se

    convirtiese en una unidad de estudio ms manejable y menos problemtica. Dichos

    autores seran: Pinel con su libro de Biopsicologa, Chalmers con su libro The Puzzle of

    Conscious Experience, estos dentro del campo de la neurociencia; ahora bien, se decidi

    tomar a los filsofos Dennet y Damasio con sus obras La consciencia explicada y El error

    de Descartes respectivamente, para sostener una postura filosfica frente a la

    neurociencia. Con la restriccin a autores principales se limita el planteamiento de

    direccin, ofreciendo una gua de bsqueda asequible, para contraponer ambas

    propuestas.

    A lo largo de los tres captulos expuestos se desplegarn las propuestas de la

    Neurociencia y la Filosofa, en los captulos primero y segundo, respectivamente; en el

    tercer captulo se pretende establecer estas propuestas frente a frente, para buscar una

    posible respuesta al fenmeno de la consciencia, por medio de ambas ramas del saber.

    Cada uno de estos captulos se desarroll a partir de los objetivos especficos, los cuales

    conforme se fue indagando en el tema fueron cambiando de tal manera que se volvieran

    ms maleables, y dieran origen a los ya mencionados captulos.

    El panorama no parece ser lcido, pues al intentar responder a la pregunta qu es

    la consciencia? surge otra an ms comprometedora: es un salto al vaco definir la

    consciencia? Por lo que el compromiso principal de este trabajo de exponer la consciencia

    desde diferentes posturas, para as concluir en un punto en comn entre ellas.. Al elegir

    autores principales se manifiesta la intencin certera de cercar la investigacin; empero,

    al mismo tiempo se incorporarn autores secundarios, con los cuales se enriquezca el

    contenido del trabajo. As, los aportes encontrados en otros autores secundarios, se

    plasmarn en aportes breves de orientacin conceptual, exponiendo adagios acerca de la

    conciencia y sus diferentes matices.

  • CAPTULO 1

    El abordaje cientfico de la consciencia: la neurociencia en su

    aproximacin psicobiolgica

    Definiendo el campo de abordaje

    Un estudio sobre la consciencia, desde el campo cientfico, implica hablar de las

    cuestiones relacionadas con los mbitos de estudio del cerebro humano, como base para

    sostener el dato emprico, tan necesario en la investigacin cientfica. Entendido el

    cerebro como rgano sustentador de las facultades de pensamiento del ser humano y de

    las reacciones orgnicas de respuesta ante el medio, permite imaginar un campo de

    estudio en el que la investigacin del cerebro en su complejidad sea un factor esencial,

    para hablar de cualquier tema relacionado con la conducta humana; en este punto surge

    la Neurociencia como ese estudio del cerebro.

    Podemos entender a la Neurociencia como el estudio de la estructura, la funcin,

    el desarrollo de la bioqumica, la farmacologa y la patologa del sistema nervioso, de

    cmo sus diferentes elementos interactan, dando lugar a las bases biolgicas de la

    conducta, es pues, el estudio cientfico del sistema nervioso (Pinel, 2007; p.2). Bajo este

    punto de vista el estudio del sistema nervioso se vuelve tan amplio dentro del mismo

    campo de la Neurociencia, que es necesario delimitarlo, as la conjuncin de distintas

    ramas dentro de esta rea de investigacin decanta en una de especial inters para este

    trabajo: la biopsicologa o neurociencia comportamental (Pinel, 2007; p. 4), siendo que

    esta propuesta de estudio comportamental permite que las nociones sobre la anatoma

    cerebral y la fisiologa se puedan relacionar con las conductas o procesos ms complejos

    en el ser humano, como por ejemplo el pensamiento, o para el caso de inters de este

    trabajo para hablar de alguna manera sobre la consciencia.

    La Biopsicologa, como una rama de la Neurociencia, se relaciona con otras ramas

    de la Neurociencia en sus aspectos de estudio del cerebro y del sistema nervioso. Si

    hablsemos de un biopsiclogo podramos definirlo, segn Pinel (2007), como un

    integrador de datos. Esta funciona recolectando la informacin de las dems ramas, como

    por ejemplo la Neuroanatoma, la Neuroqumica, la Neuropatologa, la

    Neurofarmacologa, Neurofisiologa, entre otras. Una de las extensiones de la

    Biopsicologa es la Neuropsicologa, la cual estudia los efectos que una lesin, dao o

    funcionamiento anmalo en las estructuras del sistema nervioso central, causa sobre los

    procesos cognitivos, psicolgicos, emocionales y del comportamiento individual (Pinel,

    2007). En este sentido esa posibilidad de integracin de datos de la psicobiologa permite

    que en la perspectiva de la neurociencia, esta rama sea esencial para abordar un fenmeno

    como el de la consciencia.

    As, se rescata la postura de la neurociencia comportamental, en cuanto estos

    procesos se pueden delimitar por medio de investigaciones empricas y recoleccin de

    datos, como el de las conexiones neuronales y el cmo a partir de estas, se realizan los

    procesos cerebrales ms complejos.

    Abordando el fenmeno: la consciencia desde la psicobiologa

    Segn Pinel (2007) la Biopsicologa es el estudio de la biologa de la conducta

    (p. 4). Esto quiere decir de alguna manera, que una forma de abordar la consciencia es

    trabajarla simplemente como una nocin biolgica manifestada en las conductas. Esto

  • representara que, si se abordase de esta manera, implicara que la consciencia debe

    tratarse como algo fsico, en el sentido que sera posible delimitar su espacio en el sistema

    nervioso, a la vez que se manifiestan los procesos propios de la consciencia en las redes

    neuronales del sistema nervioso y que se volvera observable por medio del estudio de la

    conducta. Una vez conceptualizada en estos trminos, la consciencia es un fenmeno que

    se da en el cerebro, y al hablar de la misma, dentro de esta perspectiva psicolgica,

    hablamos de la mente como ese fenmeno representacional de la consciencia y que se

    puede trazar a travs de un entendimiento del sistema nervioso.

    Ahora bien podemos hacernos la pregunta cmo funcionan los elementos del

    sistema nervioso que dan origen a la consciencia?. Para ello debemos descomponer el

    funcionamiento del cerebro desde lo ms sencillo, hasta lo ms complejo, necesariamente

    pasando por la interrogante: cmo funciona la organizacin general del Sistema

    Nervioso?, respondiendo con Pinel (2007):

    El sistema nervioso de los vertebrados est compuesto por dos divisiones,

    el sistema nervioso central y el sistema nervioso perifrico. En trminos

    generales, el sistema nerviosos central (SNC) es la parte que se localiza

    dentro del crneo y la columna central. El sistema nervioso perifrico (SNP)

    es la parte que se sita, fuera del crneo y de la columna vertebral (p. 56).

    sta divisin es una divisin funcional, en cuanto intenta delimitar y enmarcar

    procesos cerebrales, que no precisamente funcionan separadamente; por el contrario, son

    procesos que ocurren en conjunto o de forma paralela, se propone el SNC y el SNP como

    formas de entender mejor un funcionamiento del cerebro y de sus procesos.

    Parte del problema que se presenta, bajo esta forma de entender los procesos

    cerebrales, es si basta con la idea de que la relacin entre neuronas da origen a la

    consciencia, por lo que se debe partir desde el punto de referencia ms pequeo, hasta la

    compleja relacin entre ellas, en sentido estricto pasar de lo micro a lo macro.

    Una persona posee alrededor de cien mil millones de neuronas (Searle, 1996;

    p.14). Entonces qu es una neurona y cmo funciona? Las neuronas son las clulas que

    componen el sistema nervioso, especializadas en recibir, conducir y transmitir seales

    electroqumicas; estas seales electroqumicas son la base para cualquier proceso a nivel

    del sistema nervioso.

    Figura 1. Representacin de una neurona del sistema nervioso central. Hilera y Martnez (2000)

    La figura 1 muestra la representacin de una neurona y su anatoma funcional.

    Las neuronas poseen el aspecto determinante en la ejecucin de la informacin que se

    recibe, desplaza y se elabora en nuestros cerebros (Searle, 1996, p. 18). Las neuronas

    reciben seales por medio de sus dendritas (receptores de impulsos nerviosos), las cuales

  • se procesan en el cuerpo celular (soma), hasta convertirse en informacin que se desplaza,

    por medio del axn, a la siguiente neurona. Esta complejidad en el desarrollo de los

    procesos mentales, tambin denota la sinfona articulada y armoniosa de las neuronas, al

    trabajar en forma correlacionada con su entorno cerebral. Los impulsos elctricos y la

    funcin de los neurotransmisores, como sustancias de traslado, denotan cmo se

    manifiestan los pequeos rasgos, de lo que llamamos consciencia. Tal como Searle lo

    describe nuestra vida mental entera es causada por el comportamiento de las neuronas, y todo lo que hacen es reducir o ampliar las tazas de seales (Searle, 1996; p. 18).

    Comprender de qu modo est compuesta una neurona, cmo se comporta con sus

    vecinas y el proceso implcito, requiere una prolija observacin de dichos compuestos; por lo que, escuetamente, se dar un breve miramiento a esa comunicacin, para

    relacionar, aunque sea de pincelada, el tema dicho:

    El sistema efector de la mayora de las neuronas est constituido por las

    especializaciones presinpticas. El aparato presinptico contiene unas vesculas

    en las que se almacena el neurotransmisor. La exocitosis del neurotransmisor es

    un fenmeno complejo que requiere la liberacin de las vesculas sinpticas de

    las protenas del citoesqueleto, la toma de contacto con la membrana presinptica

    y la fusin de las vesculas sinpticas con la membrana presinptica, que permite

    la liberacin del neurotransmisor en la hendidura sinptica y su inmediato

    contacto con el receptor especfico localizado en la neurona postsinptica o en

    la clula diana especfica, por ejemplo la fibra muscular (Ferrer, 2000, p. 42).

    De este modo, partiendo de esta breve explicacin neuronal, se puede apreciar el

    conjunto elaborado, el mecanismo minucioso que se distribuye en los interiores de cada

    una y cmo eso se desenvuelve entre una y otra neurona. Por qu es importante detallar

    estos mecanismos? La respuesta radica en el despliegue neuronal, como el sentido de una

    explicacin de la conciencia, como modelo corpuscular del cerebro. Porque en esos

    pequeos contactos se denota la amalgama de estructuras, formantes de la comunicacin

    de informacin neuronal, que establecen a un yo consciente, como depositario ltimo de

    esos procesos. Tal como lo expresa Carl Sagan, las sinapsis provocan states, que reflejan

    en la conciencia los resultados de ese lenguaje neuronal, como medio para elaborar

    estados continuos en los seres vivos: If each human brain had only one synapse we would be capable of only two mentals states and, in general, for N synapses, 2N states (Sagan, 1977, p. 43).

    A partir de la dcada de 1990, las neuronas espejo comenzaron un nuevo avance

    en el estudio del cerebro, que, en nuestro caso, puede remitirse a la evaluacin de la

    consciencia. Estas neuronas estn situadas en el lbulo frontal y en el lbulo parietal de

    nuestro cerebro, segn Jimnez (2014) se trata de un tipo de neuronas motoras

    y perceptivas que no solo se activan cuando ejecutamos una accin, sino tambin

    cuando observamos que otra persona la lleva a cabo, la cualidad esencial de estas

    neuronas estara en el hecho de la activacin al observar a otros:

    Las neuronas espejo simulan en nuestro cerebro, sin que lleguemos a realizar, la

    accin de la otra persona, lo que nos permite comprender

    de forma automtica su intencin, pues es la misma que tendramos nosotros

    al ejecutar esa accin (Jimnez, 2014; p. 74).

    De esta manera, se puede observar cmo las neuronas no solo implican la

    capacidad para crear nuestro estado consciente, sino que tambin implican la constante captacin del medio, que no necesita una aplicacin directa de nuestra conciencia; es

  • decir, nuestro cerebro elabora indecible cantidad de acciones, las cuales son ejecutables

    por el ser humano, tanto en su presente inmediato de accin consciente, como en la

    captacin de acciones que se introducen a un segundo plano del cerebro (inconsciente,

    por decirlo de alguna manera). Estas neuronas se activan sin que nosotros, como centro

    de operaciones, seamos conscientes de sus trmites, efectuando tareas que permiten, a la

    consciencia, tener la posibilidad de acceso, por medio de las seales electroqumicas, a

    vastos mecanismos de accin.

    Estas seales, ya descritas anteriormente, bsicamente se refieren a los procesos

    conocidos como sinapsis y se pueden entender como procesos de transmisin o

    comunicacin de neurona a neurona; las sinapsis a su vez pueden ser qumicas o elctricas

    (Pinel, 2007), la primera se refiere a un tipo de transmisin donde median sustancias

    qumicas conocidas como neurotransmisores (como la adrenalina, dopamina, histamina,

    glutamato, etc. ) y que se transportan a travs del espacio sinptico para llevar los

    mensajes entre neurona y neurona; el segundo tipo se refiere a impulsos elctricos

    mediados por iones de sodio (Na), potasio (K) y cloro (Cl), que debido a cambios en las

    cargas elctricas desencadenan impulsos elctricos, que se transmiten entre las neuronas

    conectadas entre s (Pinel, 2007). Este tipo de procesos implican la base del

    funcionamiento cerebral y a la vez constituyen, segn la visin psicolgica, el sustrato

    de toda conducta humana, adems de cualquier proceso cerebral sensitivo y motor del

    ser humano (Chalmers, 1995).

    Segn esto, esas transmisiones a travs de las clulas especializadas del sistema

    nervioso, se convierten en los elementos propios de cualquier proceso cognitivo; pero

    adems, las formas como estas clulas se agrupan y especializan para la recepcin y

    transmisin de los impulsos electroqumicos, tienen que relacionarse con una posibilidad

    de recibir informacin para procesar, esto implica la existencia de una organizacin del

    sistema nervioso para recibir informacin tanto a lo interno del organismo, como del

    medio en el que se desenvuelve (Pinel, 2007). Ese sistema sensitivo, en relacin con el

    medio, es la base de lo que podramos ir planteando como una posibilidad de consciencia

    dentro de esta perspectiva biolgica.

    As, la organizacin del sistema nervioso para recibir informacin del exterior es

    por medio de los sistemas sensitivos (los que conocemos comnmente como los cinco

    sentidos: vista, odo, olfato, tacto y gusto), a la vez estn organizados en la corteza

    cerebral para interpretar la informacin que les llega del exterior en: corteza sensitiva

    primaria, corteza sensitiva secundaria y corteza de asociacin (Pinel, 2007; p.172), esta

    organizacin responde a un modelo de organizacin jerrquica donde los distintos

    estmulos que llegan son procesados de manera distinta en cada nivel, complejizando

    segn su paso por los mismos. A su vez cuentan con una separacin funcional y con un

    procesamiento en paralelo, la primera implica una especializacin para estmulos

    especficos (por ejemplo: el ojo recibe la luz, el odo la vibracin de las ondas que viajan

    por el aire) y la segunda a la forma como los estmulos son procesados (como cuando

    podemos ver la luz del sol y al mismo tiempo sentir su calidez). Siguiendo esta lgica, la corteza de asociacin es la encargada de interpretar y darle un sentido a esos estmulos

    y estara implicada en la percepcin, segn Pinel (2007) la sensacin es el proceso de

    detectar la presencia de estmulos, y la percepcin es el proceso de nivel superior que

    incluye integrar, reconocer e interpretar modelos completos de sensaciones (p. 174), en

    este sentido el proceso de la percepcin es un elemento clave al hablar de procesos

    cognitivos, que implican una complejidad e integracin de elementos del sistema

    nervioso, ms amplia que el recibir un estmulo sensitivo; estos procesos cognitivos son,

    a su vez, esenciales para pensar en elementos ms complejos en el ser humano, como es

  • el caso del proceso de hablar o de comunicarse por parte de un sujeto consciente o de la

    conciencia como tal.

    Lo anterior implica que los procesos a nivel neurobiolgico, descritos

    anteriormente, son la base para toda posible construccin de una realidad del ser humano

    como cognoscente, en el sentido de percibir y procesar estmulos del medio, adems de

    hacer de ellos una red compleja de asociaciones que decantan en lo que llamamos

    pensamiento.

    As, una serie de interacciones entre las cortezas cerebrales, procesos sinpticos y

    redes neuronales conectadas entre s, es lo que permite construir ese elemento bsico de

    sensacin-estmulo-respuesta del sistema nervioso, en algo tan complejo como el

    pensamiento, y de eso a la puesta en prctica de procesos cognitivos que incluyen la

    abstraccin o los procesos creativos, siendo que la consciencia es a la vez representada

    por esas posibilidades complejas de accin, en trminos de la perspectiva psicobiolgica

    esa complejizacin es en ltima instancia una conducta, y como tal, tiene su razn y su

    posibilidad de ser estudiada en esos elementos mnimos de la neuroanatoma cerebral.

    Sin embargo, dentro de estos lmites, el asunto se centra en cmo esa serie de

    procesos anatmicos o conjuncin de sistemas procesando informacin del exterior,

    lanzando seales elctricas, qumicas y nerviosas; se puede convertir en una experiencia

    subjetiva del sujeto, al llamarse consciente, refiriendo este fenmeno a lo que Chalmers

    (1999) llam qualias (p. 26), y que refieren al hecho de que se experimenta una sensacin

    cualitativa, una cualidad asociada de experiencia, este punto de vista intenta clarificar el

    qualia como propiedades de los estados mentales internos, que adems se asocian a las

    sensaciones, o sea, son en cuanto pasan por el hecho de ser experimentados, en cuanto

    son experiencia consciente (ms all de lo fsico-anatmico), es entonces una experiencia

    que se sale de los lmites de la conjuncin bio anatmica, siendo que las experiencias

    conscientes revisten una subjetividad y particularidad que se enmarca fuera de la posible

    constitucin nicamente por la va neuroanatmica de los sujetos.

    Lo anterior trae a discusin el hecho del abordaje del fenmeno de la conciencia

    y como para hablar de este se entra en una divisin que se establece, necesariamente, por

    ese sustrato fsico, la discusin en este caso se trabaja desde lo que Chalmers (1999)

    propone como conciencia psicolgica (p.51). As, desde la puesta en discusin de la biopsicologa, la cuestin tiene un carcter centrado en nociones funcionales de la

    consciencia, que se pueden trabajar desde modelos de construccin neuroanatmica,

    llegando hasta la propuesta de modelos cognitivos que incluyen procesos como la

    atencin, control voluntario, la vigilia, la introspeccin, etc., siendo que esta perspectiva

    trabaja el problema en sus lmites neuropsicolgicos, encuadrando la discusin en este

    marco donde la experiencia fenomnica se escapa de las posibilidades del dato necesario

    para este modelo emprico

    La conciencia, pensada desde la propuesta de los qualia (Chalmers, 1999), tiene

    un carcter fenomnico que pasa por la subjetividad, por lo que se hablara de un carcter

    fenomnico de la conciencia, es decir, una conciencia fenomnica (Chalmers, 1999); este

    carcter fenomnico queda fuera del abordaje de la Biopsicologa, pues segn lo visto

    hasta aqu, el problema de la consciencia, abordado desde esta postura cientfica, se centra

    en la propuesta de abordaje desde el problema de la consciencia psicolgica, y por lo tanto

    se enmarca desde el carcter funcional de la misma, limitando el fenmeno, en cuanto

    que los procesos cognitivos de carcter complejo son remitidos a una serie de

    propiedades psicolgicas, que tendran su base en el sustrato neuroanatmico, es decir,

    en las caractersticas fsicas de la composicin del cerebro humano.

  • CAPTULO 2

    Consciencia segn la nocin Filosfica.

    Definiendo la discusin Filosfica.

    En el anterior captulo se observ cmo las neuronas, como base esencial de

    procesos sumamente complejos, determinan los flujos de sustancias, que, de forma

    prctica, transcribimos como informacin en el da a da, en este proceder de ser en el mundo. Ser? Esa manera de manifestarnos ante el mundo, como una unidad compleja,

    cubierta de innumerables procesos biolgicos. Pero es ac donde entra la pregunta nos

    basta con la explicacin biopsicolgica de consciencia, o es acaso este fenmeno algo

    ms complejo, algo ms abstracto, una sustancia metafsica?

    Lo primero que debemos hacer es preguntarnos cundo fue la primera vez que se

    registr que un pensador se plante la consciencia, como un problema a tratar. Podramos

    partir por Ren Descartes en el siglo XVII, quien empez por destacar la facultad del

    hombre por captar su propio conocimiento, adems de preguntarse a s mismo acerca de

    la consciencia como una ente fsico. Aunque, como se mencionar ms adelante, Damasio adjudica la equivocacin en el dualismo cartesiano (al igual que muchos autores

    ms). De igual manera, la discusin filosfica acerca de la conciencia repercute en

    posteriores autores, tales como Schopenhauer, que menciona la conciencia en inequvoca

    relacin con el cerebro: ... sabemos que la conciencia tiene su asiento en el cerebro, confinndose, en consecuencia, a aquellas partes cuyos nervios van al cerebro y cesando

    en ellas si dichos nervios son cortados (Schopenhauer, 1970, p. 69); siempre en el siglo XIX, encontramos a un Kierkegaard componiendo la conciencia como una contradiccin:

    La inmediatez es la realidad, el lenguaje la idealidad, la conciencia es la contradiccin (Kierkegaard, 2008, p. 100). Estos por mencionar algunos ejemplos, donde la elaboracin

    filosfica ha intentado esclarecer la conciencia y la relacin del individuo en el mundo.

    Debido a que el aporte en este campo es inmenso y que sera soberbio siquiera

    pensar en condensar toda la cantidad de informacin en relacin consciencia-filosofa,

    este captulo tomar como ejes principales en los cuales buscarn sostener que la filosofa

    an puede cortar mucha tela en cuanto a este tema. Dichos ejes son las obras de Damasio

    y Dennet, El error de Descartes y La consciencia explicada respectivamente. Utilizando

    autores secundarios como Searle o el mismo Molina para respaldar lo que se esbozar en

    este segundo captulo.

    Consciencia segn Dennet.

    La existencia se encuentra llena de una gran cantidad de misterios desde el primer

    momento en que abrimos nuestros ojos, al ser recibidos por el partero o la partera, nos

    encontramos con la nica respuesta a ciencia cierta la cual es que as como nacemos,

    moriremos en algn momento de nuestras vidas. Dennet empieza a tratar con la idea de

    consciencia como uno de esos grandes misterios con los cuales el hombre tiene que lidiar

    gracias a su infinita e imprudente curiosidad, la cual ha permitido una posible respuesta

  • a grandes incgnitas, no siendo la consciencia en plenitud al parecer una de estas. El

    hombre por necesidad necesita conceptualizar el universo y todo lo que en l yace, eso ha

    llevado a la ciencia a tomar grandes pasos, que a la postre nos han dado grandes

    beneficios, como por ejemplo el descubrimiento de la penicilina en 1928 atribuido a

    Alexander Fleming. Toda esta introduccin se da porque el hombre a travs de toda su

    historia ha intentado dominar el mundo que lo rodea, he aqu uno de los primeros

    problemas que plantea Dennet, al plantear como un paradigma la consciencia

    atribuyndole al mismo la nocin de ser an un misterio. Segn Dennet (1995) La consciencia Humana es el ltimo de los grandes misterios.(p.33). Es preocupante que la consciencia sea an un misterio para el hombre partiendo de que todo hombre, la posee y

    se encuentra dentro de cada uno de nosotros, por lo que la misma no debera de ser tan

    ajena tal es, haca el hombre. Para Dennet los misterios deben de ser entendidos como un

    fenmeno al cual aun no le hemos hallado una manera de pensar. Por lo que an existen

    diversos misterios con los cuales el hombre ha tenido que convivir, y domado algunos o

    por lo menos llegar a entenderlos, ms sin embargo otros no. Para Dennet (1995)

    Han habido muchos otros grandes misterios: el misterio del origen del

    universo, el misterio de la vida, y la reproduccin, el misterio del diseo oculto

    de la naturaleza, los misterios del tiempo, el espacio y la gravedad. stas no

    eran solamente reas de ignorancia cientfico sino motivos para la profunda

    perplejidad y sorpresa (...) Los misterios no han desaparecido, pero han sido

    domados.(p.33).

    Esta idea de que el hombre le es ms fcil domar los paradigmas ajenos a su

    consciencia es de alguna manera muy inquietante, si partimos de que la existencia, se

    analiza de manera antropocntrica, y quizs sea por lo esto mismo que entre nosotros

    como especie, no hemos sido capaces de consensuar una idea o nocin de consciencia.

    Perfectamente alguien podra concluir que todos percibimos la realidad de maneras

    muy distintas, sin embargo esta sera una conclusin muy prematura. Pero no est dems

    el preguntarnos por qu nos es ms sencillo explicar fenmenos externos a nuestra

    naturaleza que nuestra naturaleza misma?, la apuesta a la sustancia mental es sumamente

    atractiva, en trminos de consciencia para Dennet.

    Dualismo vs Materialismo: la consciencia.

    Ante todo para Dennet (1995) el dualismo es La idea de que la mente no es lo mismo que el cerebro, de que no est compuesta de ordinaria materia, sino de una

    sustancia especial (p.45). El problema de concebir a la mente como algo distinto al cerebro, es que esta idea se antepone totalmente contra los materialistas, quienes asumen

    la realidad la verdad que constituye que todo fenmeno est compuesto por materia. Por lo tanto segn los materialistas podemos explicar la consciencia de la misma manera

    en que explicamos cualquier fenmeno fsico, ya sea la nutricin, reproduccin, qumica,

    biologa, y entre muchas otras la fsica.

    El problema que afrontan los dualistas, es que ellos se deben a la tarea de explicar

    cmo se relacionan dos sustancias completamente diferentes entre en s, esto explicado

    de una manera mejor por Dennet:

    Si la mente y el cuerpo son sustancias, distintas, deben de todos modos

    ser capaces de interrelacionarse; los rganos sensoriales del cuerpo, a travs

    del cerebro, deben informar a la mente, deben enviarle o presentarles

    percepciones, ideas o datos de algn tipo, y la mente, a su vez, despus de

  • reflexionar sobre ello, debe dirigir, al cuerpo en las acciones apropiadas

    (incluida el habla).(1995, p.46)

    Es importante resaltar que la objecin citada anteriormente, segn Dennet an no

    ha podido ser vencida por ningn dualista desde el siglo XVII empezando con Descartes.

    Esto quiere decir que para un materialista, la explicacin de Pinel o Chalmers basta para

    explicar la consciencia, ya que comparten la nocin de que la misma es simplemente un

    fenmeno fsico, que se da a travs del cerebro. Ac es donde se vuelve interesante la

    discusin filosfica porque los materialistas de alguna forma tienen el derecho de dejar

    la mesa de discusin, mientras que los Dualistas an deben permanecer en ella, y sostener

    el porque la mente es una sustancia separada del cuerpo, Todo este problema se tratara a

    mayor fondo en captulo tres donde se confronten los postulados acerca de la consciencia

    segn la Biosicologa y la Filosofa; pero podramos de alguna manera ir trasladando esta

    discusin hacia una discusin meramente filosfica, como el subttulo de este extracto

    lo menciona Materialistas vs Dualistas, y es ac donde debemos evaluar si la Filosofa

    es an un medio vigente para explicar este fenmeno, o si ms bien se trata nicamente

    de un problema fsico, que interacta de manera aleatoria, contra un mundo causalmente

    abierto, y esta se ve desprovista de cualquier plano intangible o cualidad especial. A pesar

    de plantear como una propuesta estril el dualismo, Dennet enfatiza que es a lo ms alto

    que podemos apostar si queremos explicar la consciencia como algo que trasciende al

    plano meramente fsico, tal vez conceptualizar la idea de Sustancia Mental. La siguiente imagen resume, lo que hasta el momento, se ha discutido, partiendo la

    definicin de monismo vs dualismo (siendo el materialismo un subparte de la teora

    monista la otra es idealismo)

    Figura 2. Diferencia entre dualismo y monismo. Elaboracin propia.

  • Conciencia segn la propuesta damasiana

    En El error de Descartes: La razn de las emociones, Damasio realiza

    una exhaustiva bsqueda de las funciones cerebrales. Hace mencin de las neuronas y

    sus partes (dendritas, axn, cuerpo celular), as como diferentes partes del cerebro

    (lbulos izquierdo y derecho, lbulo parietal, lbulo occipital, etc.)

    Aunque tiene un nfasis intensivo de los procesos bioqumicos, tales como las

    redes que se forman entre neuronas (circuitales), la relacin entre neurotransmisores

    (serotonina, dopamina, oxitocina, etc.) y el impacto entre cuerpo y cerebro, gracias a

    estos procesos, el aporte principal de Damasio radica en interrelacionar esos mecanismos

    con la interpretacin discursiva y filosfica. Precisamente, gracias al aporte filosfico,

    se pueden vincular ciertos elementos en este trabajo.

    Para Damasio, la conciencia es un tipo de andamiaje, que soporta todas las

    disposiciones del cuerpo y del cerebro. Es una compleja asociacin de procesos, que

    recaen en actos volitivos del self, ante el mundo. Estriba su versin del self sobre la

    explicacin del claustro corporal, resultado lingstico que se apropia de una manera de

    entender al yo consciente. Segn su punto de vista, las emociones (parte fundamental de

    su libro) son la coleccin de cambios en el estado corporal, bajo el control de un sistema cerebral (Damasio, 1994, p. 163); es decir, incorporando esta explicacin a nuestro tema, la conciencia responde a esos cambios, al estado corporal y al contenido de los

    pensamientos, generando respuestas de disposicin del self. Se convierte la conciencia,

    de esta manera, en la zona que aplica la direccin de ciertos actos, como unidad de

    entendimiento en el presente. El self damasiano identifica a la unidad de accin

    individual, donde lo ubica como un sentido de manifestacin completa, articulada por

    cambios perceptibles e imperceptibles.

    Una de las ideas ms llamativas en el trabajo de Damasio, es la configuracin por

    zona en el cerebro, que ubica a las neuronas, las partes del cerebro y el resto del cuerpo,

    en reas determinadas por su disposicin de funcin. As como determina estas

    proporciones, tambin las ilustra como representaciones:

    El sustrato neural de esas imgenes es una coleccin de

    representaciones topogrficamente organizadas que suceden en

    diferentes capas corticales primarias (visuales, auditivas, otras). Dichas

    representaciones se construyen bajo la gua de las representaciones

    disposicionales contenidas y distribuidas en gran nmero en capas

    corticales superiores de asociacin (Damasio, 1994, p. 160).

    Segn estas posturas, Damasio concluye una estrecha relacin entre

    neurobiologa y emocin, que, para el objeto de nuestro trabajo, simboliza la relacin

    con la conciencia. A su vez, Damasio finaliza relatando el error en que cay Descartes.

    Su principal objecin radica en la escisin abismal entre cuerpo y mente, que, como l

    lo detalla a lo largo del libro, por el contrario al pensamiento cartesiano, simboliza una

    unin conjunta de accin. A la vez que un neurotransmisor ejecuta su desplazamiento,

    acciones se procesan en el cuerpo en correspondencia con cada conexin especfica. Por

    lo tanto, el error de Descartes yace en su separacin del self, en la divisin metafsica sin

    fundamentos.

  • La muerte de la filosofa

    La filosofa es una herramienta del pensamiento, propuesta para adquirir, construir

    y dudar acerca del conocimiento. Como tal, la filosofa se ha personificado a travs de

    diferentes autores, portadores de la coleccin histrica del saber. Ahora bien, se puede

    pregonar acerca de una muerte de la filosofa, acerca, puntualmente, del meollo de la

    consciencia? Este apartado trata, precisamente, de la funcin o la exclusin de la filosofa,

    como herramienta para explorar qu es la consciencia.

    Segn Molina (2009), la tesis de la muerte, en referencia al movimiento cientfico,

    asume estas dos posiciones: 1) las herramientas actuales de investigacin neurocientfica son suficientes para dirimir los

    desacuerdos tericos, 2) cualquier discusin de carcter no

    cientfico resulta superflua respecto del estudio de la conciencia (p. 155). Asumiendo las posibilidades cientficas, debemos descartar la posibilidad filosfica, dentro de la

    indagacin de la conciencia?

    Esta duda sistemtica subyace en cada variable, efecto y proceso que se estudia

    en la neurociencia, ya que implica indecible inquietudes, en cuanto a determinar a la

    consciencia como algo especfico. Si la neurociencia aplica su conocimiento en cada

    descubrimiento cerebral, de forma gradual en diferentes sujetos de estudio, cmo se

    emplean estos descubrimientos en el establecimiento de las qualias, es decir, de las

    cualidades subjetivas de la experiencia individual? o, cmo definir si el proceso es el

    adecuado, en el tratamiento del concepto consciencia?; precisamente, por all, la filosofa

    ingresa su duda y su indagacin, realzando su utilizacin y empleo.

    Tal como lo menciona Molina, es muy distinto tratar el tema de la experiencia

    consciente, en contraposicin a los fenmenos neurolgicos, que responden a estudios

    neurocientficos, ms que a la famosa sentencia que se siente ser un murcilago? (2009,

    p. 161) Porque crear mapas caractersticos y estadsticos del comportamiento cerebral, en

    el intento de estipular un orden a la explicacin de la conciencia, no conlleva la

    determinacin absoluta y holstica del producto final: la conciencia. Entender la relacin

    de las estructuras qumicas internas de nuestros cerebros, su composicin y su complejo

    sistema de desarrollo, no aclara el sentir propio del que experimenta el resultado de esos

    procesos, es decir, de la conciencia como centro de control del self.

    Cmo desechar la opinin filosfica, cuando se vincula, cada vez ms, en

    detectar errores en el tratamiento de la consciencia?: Aun cuando se lleguen a identificar los detalles de los patrones de activacin neural, asociados con cualquier fenmeno, es

    difcil ver cmo eso nos dara acceso a la experiencia misma (Molina, 2009, p. 161).

  • CAPTULO 3

    Filosofa y Neurociencia: entrelazando los caminos de la consciencia

    Hasta aqu se han expuesto algunas de las diferentes nociones propuestas por la

    Neurociencia y la Filosofa, que hacen mencin a la consciencia. Se han trabajado con

    autores especficos, para delimitar el campo de trabajo, ya que un tema como la

    consciencia, es osado simplemente tener la idea de brindar en este trabajo si quiera la

    mitificacin o la desmitificacin de muchos paradigmas que giran entorno a ella.

    Exponer las teoras, esbozadas en el captulo primero y en el segundo, ha tenido

    el propsito de ser la antesala de este captulo, en donde especficamente se desmenuzan

    dichas teoras para buscar un punto en comn entre ellas o dilucidar un camino por el cual

    transitar (por as llamarlo) hacia una concepcin ms acertada de consciencia, por lo que

    no solo se contrastar, todo lo anterior si no que se buscar sintetizar una respuesta a

    nuestra pregunta inicial.

    Con lo anterior, llegamos a este punto con la propuesta desde la biopsicologa, de

    una conciencia constituida neuroanatmicamente y que sus bases centrales se encuentran

    en la anatoma cerebral, siendo que los fenmenos que se contemplan, se dan gracias a

    una serie de redes neuronales que se comunican por procesos sinpticos, creando redes

    de comunicacin y de transmisin qumico-elctrica. Esta base de funcionamiento, de

    alguna manera, no devela completamente y esclarece procesos ms complejos, como la

    memoria, el pensamiento y, por supuesto, la conciencia. Es decir que el fenmeno de la

    conciencia queda igualmente sumergido en una serie de procesos biologicos y fisicos, que

    al da de hoy, an se encuentran en estudio y en construccin de hiptesis, que permitan

    comprender su funcionamiento y la especificidad en la composicin neurobiolgica.

    Hasta aqu se ha visto que el punto de partida de la biopsicologa es dar una

    construccin del cerebro y de sus componentes bsicos, para partir de esos elementos e

    hilar procesos ms complejos relacionados con esos procesos bsicos de funcionamiento

    cerebral. Con Pinel (2007) se construye una propuesta donde la anatoma del cerebro

    permite dar un soporte o base para aventurarse a decir algo de procesos ms complejos, como la memoria o el pensamiento, y que son factores necesarios para poder hablar luego

    de una experiencia subjetiva del sujeto o del fenmeno consciente del individuo. Es aqu

    donde cabe la pregunta de si esa propuesta puede ser coherente o congruente con una

    postura desde las aristas filosficas tomadas en cuenta en el captulo 2; sin embargo,

    tambin cabe preguntarse si es una postura que se sostiene para construir o hablar del

    fenmeno de la consciencia.

    Lo anterior permite proponer con Chalmers (1999) que se hablara de una

    propuesta reductiva de la conciencia (p. 156), en cuanto que existen una multiplicidad de

    fenmenos que al parecer se salen de la concepcin desde esta postura, fenmenos como

    el pensamiento complejo o la creatividad del ser humano, se escapan de explicaciones

    basadas en simples modelos neuroanatmicos. La propuesta de Chalmers (1999), se

    sostiene desde el punto de vista de que las teoras a raz de modelo neuroanatmico, tienen

    en su base un supuesto de correlacin, entre un fenmeno cualquiera del cerebro y la

  • experiencia consciente; en este sentido cada modelo lo que propone es relacionar lo que

    ocurre a nivel neuroanatmico y propone o mantiene una hiptesis de que esos factores

    tienen una relacin directa con la experiencia de la conciencia, en este punto el punto de

    vista sobre la construccin desde la biopsicologa propone entonces hablar

    hipotticamente sobre la conciencia, teniendo como parmetro el dato emprico u

    observable de los procesos cerebrales descritos. Lo anterior segn Chalmers (1999), est

    enmarcado en un modelo de comprension cientifica de la conciencia, pero que aun asi

    evade el problema principal o el hard problem sobre el fenmeno de la conciencia. Es decir lo que se mantiene como propuesta de la conciencia desde el modelo cientfico dado

    por la biopsicologa, es un modelo basado en hiptesis de una correlacin directa entre

    un proceso observable (como la sinapsis al momento de recibir un estmulo exterior) y un

    fenmeno lejos de esa experiencia observable directa: la conciencia; por lo que cualquier

    modelo construido desde esta perspectiva agota sus posibilidades de ofrecer una respuesta

    consistente sobre la experiencia del fenmeno conciente. Sin embargo se mantiene una

    propuesta que por su contenido puede relacionarse con una postura filosfica, donde el

    contar con ese sustrato anatmico-cerebral, permitira hablar de una concepcin

    materialista del trasfondo sobre el fenmeno de la conciencia.

    Continuando con el recuento del trabajo, la propuesta de Damasio gira en torno a

    la distincin del self, con la idea perspicaz de un conjunto de acciones, que permiten

    elaborar una estado consciente. Las clulas de nuestro organismo se comunican por medio

    de lenguaje, al cual identificamos como esa serie de neurotransmisores, que se habilitan

    por medio de las relaciones qumicas-elctricas, las cuales estn en constante movimiento

    para elaborar la conciencia. Esta elaboracin conjunta entre cuerpo y cerebro simula una partida de ajedrez, donde hay una reparticin de funciones, que implica (elevando un

    poco la idea) la misma participacin del agente de control (ser humano). Imaginemos una

    partida perenne, donde el ser humano funcione como la conciencia y las piezas como

    rganos, neuronas, etc. Para poder crear una nocin ms amplia, ese ser humano juega

    contra s mismo, en tanto que su juego se complementa con la ejecucin de lo que las

    piezas proveen, tal como lo hace la conciencia con las funciones del cuerpo, puestas ah

    desde que somos expulsados a la vida. Visto de esta manera, la conciencia juega con lo

    que se le ofrece, teniendo un acceso global (mediante el conocimiento de s, en tanto

    cuerpo, cerebro, etc.) del tablero, pero con la limitacin de tener control sobre procesos fragmentados (uso de pieza (s)), que vienen a identificar la forma en que podemos dirigir

    nuestra conciencia a utilidades limitadas: podemos escribir un poema, pero difcilmente

    podemos hacer al amor a la misma vez.

    Hasta este punto el tema de la consciencia se ve reducido, a la lucha de los

    dualistas contras los materialistas. Por qu hacer esta distincin?, pues si el sentido de

    este trabajo, es encontrar la convergencia de la Neurociencia y la Filosofa, podramos

    atrevernos a decir que los materialistas, quienes en este caso, pertenecen a la rama de la

    filosofa, podramos decir que se sienten muy complacidos con las explicaciones de Pinel,

    pues al final, todo est compuesto de una misma materia, por lo que es totalmente

    razonable decir que la consciencia no es ms que la suma de diferentes procesos

    bioqumicos, que se dan en nuestro cerebro, y que la interaccin de dichos procesos,

    generan una transformacin de dicha materia, la cual termina siendo lo que podramos

    denominar la consciencia.

    Sin embargo, para el dualismo, la idea de que la mente y el cuerpo, son la misma

    sustancia bajo el contexto antes mencionado, no es posible. Dnde cabra pues en esta

    discusin la sustancia mental? Este problema no solo es tratado por Dennet (1995), en La

  • consciencia explicada sino tambin por Orman Quine (1980), tres dcadas atrs, quien

    tambin problematiz la sustancia mental cuanto hizo referencia al problema ontolgico

    detrs de la creacin de materia mental; l trabaj con el viejo rompecabezas platnico

    del no ser, por medio del ejemplo de la creacin mental de Pegaso. Con esto podramos

    adentrarnos a definir lo que no es como algo que es, el problema comnmente conocido como la barba de Platn, en el cual no ahondaremos en este trabajo. Sin embargo si se imaginara una taza blanca, con lneas blancas y negras, que contiene caf,

    esta existe o no? Si nos inclinamos porque esta s existe, entonces estaramos hablando

    de una taza con caf en un plano no fsico que s es, por otro lado, si nos inclinamos hacia

    la idea de que la taza no existe, entonces porque discutimos de su existencia, y cmo

    definimos algo que no es? Es por esto que la idea dualista, a pesar de ser considerada

    estril por Dennet (1995), en el segundo captulo de su obra La consciencia explicada no

    parece ser descartable en primera instancia, pues debemos de ser capaces de comprobar

    que la mente no crea materia mental, sino que sta funciona por medio de

    representaciones o recuerdos que no se definen as mismas como materia, pero si no

    definen de esta manera, entonces pues de qu manera se definen?

    La idea de que nuestra consciencia es simplemente la interaccin de neuronas, se

    asemeja mucho a lo que Searle (1996) llama la comparacin Mquina-Cerebro. La cual

    consiste en concebir a la mente como el software detrs del hardware fsico (cerebro),

    dejando de lado que las computadoras funcionan a partir de algoritmos y nuestra mente,

    de manera semntica; se puede abordar este problema desde una perspectiva materialista,

    pues el software est constituido por bits que son nada ms que una manifestacin de

    materia, as que si se aceptase la idea, de esta dualizacin mquina-cerebro, los

    materialistas (y en particular los biopsiclogos) parecen tener la delantera, en esta

    discusin, y el nico punto en comn que podra compartir la Neurociencia, con la

    Filosofa, es que ambas a la hora de explicar la consciencia deben de ascender desde un

    plano fsico. Encontrndose sus discrepancias en que uno lo aborda en el mismo plano

    (fsico), mientras que el otro sigue ascendiendo a un plano intangible, que no puede

    sostenerse argumentativamente por s solo, sin recurrir a explicaciones metafsicas

    especficas de carcter ontolgico.

  • CONCLUSIONES

    Conforme se fue investigando e indagando en las obras y autores, que se han

    venido trabajando, se fue descubriendo que uno de los problemas detrs de una posible

    convergencia entre filosofa y neurociencia, es la modalidad para captar y crear

    conocimiento, por sus intencionalidades en el manejo de la captacin, anlisis y

    construccin de informacin.

    La Filosofa tiene dos maneras de entender la materia, y estas se encuentran en

    desarrollo de exploracin entre los Dualistas y los Materialistas. Los biopsiclogos

    pueden definir toda su nocin de consciencia por medio del filtro del Monismo,

    entendiendo a la consciencia como la suma de procesos fsicos que dan como resultado

    un fenmeno meramente fsico. La Filosofa en cuanto a definiciones de consciencia,

    posee dos que son totalmente opuestas Dualismo por un lado y Materialistas por el otro,

    por lo que no se podra contrastar toda la Filosofa ante la Neurociencia, ya que no existe

    una nica manera de hacer duplas, en ese sentido se hablara de pares Biopsicologia-

    Dualistas o bien Biopsicologa-Materialistas.

    Bajo este contexto, la Neurociencia ha logrado consensuar, dentro de s misma,

    una explicacin material de consciencia, mientras que este consenso parece no existir en

    la Filosofa. De hecho, la necesidad de conceptuar la conciencia, como aquello que dirige

    al self, responde, por un lado, a la percepcin qumica estudiada en la neurociencia, as

    como, por el otro lado, a la indagacin especulativa de las disertaciones filosficas: he

    all el problema. En esta separacin se establecen movimientos espurios, tanto

    argumentativamente, como ontolgicamente; es decir, una buena respuesta a la

    conciencia debera ser creada en la interdisciplinariedad, trasladando el conocimiento

    neurocientfico a la duda filosfica, para evitar establecimientos inquisitoriales,

    dictatoriales y coercitivos, en la relacin con la adjudicacin descriptiva de un concepto.

    A la luz de las afirmaciones anteriores, es posible hablar de una convergencia

    entre la Filosofa y la Neurociencia, en tanto los neurocientficos (y ms especficamente

    los biopsiclogos) abordan este tema a partir del pensamiento de los Filsofos

    materialistas; sin embargo, si los mismos deciden abordar este tema con algn dualista,

    hablar de convergencia sera nefasto y estril, pues no se llegara a ningn punto en

    comn, ms que el cuerpo es un ente fsico, cuando existe evidencia emprica de la relacin intrnseca entre cerebro, cuerpo y conciencia. Pero a la hora de hablar de la

    mente, se apela a la misma como una sustancia mental explicada por medio de la

    metafsica y el otro, como una sustancia fsica, explicada por la Neurociencia.

    As, la propuesta de construccin posible desde un orden del conjunto

    neurociencia-filosofa, conlleva a ampliar el punto de discusin sobre el fenmeno de

    la experiencia consciente; en este sentido dentro del mismo campo de investigacin

    cientfica los espacios de discusin no se abren y se convierten en posturas cerradas que

    no aceptan una construccin sin tomar como base las propuestas o teoras que se

    construyen desde el mismo modelo neuroanatmico.

    Segn lo anterior se continua por un lado hablando de una conciencia psicolgica, desde donde se aborda todo lo concerniente a anatoma cerebral, comunicacin sinptica, procesos cognitivos, etc., y por otro lado tratando de vincular

    esto con una concepcin de una consciencia fenomnica, que intentara dar cuenta de la experiencia subjetiva del sujeto de todos esos procesos y de cmo se vincula con su

  • mundo existente. En este sentido el posible vnculo de posturas debera sostenerse desde

    la propuesta chalmersriana de resolver el problema duro de la conciencia y proponer algo ms que hiptesis de correlacin entre los procesos cerebrales y el fenmeno de la

    conciencia, pues el supuesto de correlacin no permite construir algo alejado de la

    continuidad fisiolgica de construccin de la experiencia consciente; en este sentido el

    paso por una idea de conciencia debe necesariamente construirse abordando la

    experiencia subjetiva del fenmeno, algo que por la misma naturaleza de los modelos

    cientficos, es insalvable desde una postura cientfico-emprica de abordar los fenmenos.

    As mismo la discusin filosfica se mantiene desde la construccin de un

    dualismo, en contraposicin a otra perspectiva (como la materialista), en este punto lo

    que se refleja es ms una defensa por sostener una postura filosfica, que una postura para

    construir una propuesta de la conciencia o la experiencia consciente, es decir, se plantea

    la explicacin ms por defender la postura filosfica, que por dar una respuesta definitiva

    de lo que es la conciencia.

    En este punto, lo que queda es una sensacin de que el tema, ms all de una

    convergencia, lo que implica tratarlo es una lucha por posicionar tal o cual postura sobre

    las otras, en este sentido el punto de discusin abre ms y ms interrogantes sobre cmo

    debe tratarse el tema de la conciencia y que posturas son ms convenientes de rescatar.

    En este punto lo que queda es proponer que la investigacin sobre este tema depender

    de lo que se quiera abarcar, es decir, no se puede privilegiar tal o cual postura y arrancar

    desde ah como verdad absoluta sobre la conciencia, sino ms bien, poner en perspectiva

    lo que se quiere abordar o decir del fenmeno y darle matices de acuerdo a lo que ms

    interesa rescatar sobre el tema.

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