conc~ptos hugo grocio los· rector luis garrido …€¦ · risprudence hollandaise par hugo este...

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* ORGANO DE LA UNIVERSIDAD NACIONAL AUTONOMA DE AfEXICO * VOLUMEN JI MEXICO, JULIO DE 1948 NUMERO 19 Hugo Gracia POR EL DOCTOR RAFAEL ALTAMIRA De antiquitate. Reipublicae Batí-. vi cae, que se editó no sólo aparte, sino también en un volumen titu- lado Antiquitates Germanicae 01 Hoogduitsche Ondtheden.,. com- puesto de la Historia patria que mencioné antes y de una traduc- ción de Tácito en holan- dés; el de Vetere Iure Germanicf> et Suevico, que es solamente' una. parte de la obra que termina esta. enumeración, a sabet, la HiStoriam. Gothorum. Pero no es' de esas his- . -torias de lo que voy a ocuparme: en el presente artículo, sino de otro escrito del gran jurista batavo que interesará.a los lectores ameri..: canos, por tratarse ,de un se refiere a los comienzos de'la ;i- da social del Nuevo Mundo' que los europeos descubrieron al del siglo xv y comienzos del XVI' .! Grocio y los· Americanos Hugo Aborígenes I Aunque no hubiera otros moti- vos, ser jurista y vivir en Holanda impone a Hugo Grocio, por lo menos. Así lo hice yo y no sólo una vez, sino muchas. Pero Grocio no fué únicamente cultivador de la filosofía y la historia del Dere- cho. Fué también historiador de otras materias; y esto me movió a estudiar su' bibliografía entera y algunos de los libros que, en ella, lo acercan más a mi afición predomi- , Incluir plenamente todas las notas que fuí reuniendo año tras año, sería tarea larga; sobre todo si piensa uno en lo que consiente una revista que no es especial, sino general. Me limitaré pues a citar los libros históricos que publicó Grocio y que son los siguientes: UNOS DEL RECTOR LUIS GARRIDO En el curso de un acto de simpatía al licenciado Luis Garrido, que' al- canzó resonancia por lo caluroso de la demostración y la calidad de quienes lo animaron, el actual dirigente de nuestra Casa de Estudios tuvo ocasión de concretar en breves cláusulas su concepto de la Universidad ideal y, en con- secuencia, las normas que estima esenciales para el debido desenvolvimiento de la vida académica de la lnstit"ución en el tiempo venider¿. La preocupación del hombre, de 10 hámano, debe prevalecer en cuanta acción universitaria se despliegue, porque esa es la raíz y la meta de todo es- fuerzo creador. Según 'Sus palabras, las grandes instituciones de cultura no sólo deben fomentar el saber, sino que han de trabajar también por la causa de la libertad, pues sin ella sería imposible la difusión del conocimiento y la búsqueda de nuevos principios. La era industrial y mecanizada que ahora vivimos ha inclinado a al: gunos centros de enseñanza a recargar el acento en las disciplinas de tipo cívi- co o de aplicación econcimica, con daño de las humanidades, ese superior recurso que favorece el carácter, los gustos y los ideales de las mentes jóve- nes. Ese es un desatino manifiesto: tan importante es para el espíritu hu- mano el conocimiento de los clásicos como el adiestrarse en las ciencias físico- matemáticas. El Rector Garridó, dando a su pensamiento una expresión mds categórica, afirmó: "La educación universitaria debe realizar un armonioso equilibrio entre lo estático ylo dinámico, entre el pasado y lo presente, en- tre el ideal y la práctica, entre lo bello y la materia." Pero en toda la etapa de la preparación profesional de los elementos que se cobijan al amparo de la Universidad, debe impartirse a éstos aigo más que las fórmulas escuetas de la sabiduría y la técnica estrictamente fa- cultativa. Precisa ir modelando en su's conciencias la noble servidumbre de servir al prójimo, de desentenderse de la tentación del lucro, de ejercitar la piedad y la simpatía humana con amplitud, ya que "ciencfa sin conciencia es la mUerte del alma". Ya para cerrar su conciso y enérgico discurso, el licenciado Garrido pro- nunció unos conceptos que le fueron largamente aplaudidos. Refiriéndose a la experienciaobrenida de la última crisis que trastornó la vida de la Uni- versidad Nacional de México, y aludiendo a que la lucha por las ideas puso siempre manchas de sangre en las páginas de la historia, proclamó que todos los elementos de la Casa de Estudios debemos trabajar ahincadamente, infa- tigablemente, por la divisa más preciada: la tolerancia. A ese mismo propósi- to, expresó con un persuasivo poder de síntesis: "Todas las ideas humanas son discutibles sin excepción alguna. No hay idea completamente justa ni completamente falsa, decía el filósofo. Sepamos entenderlas y valorizarlas bien. Procuremos fortificar en los jóvenes el espíritu de libre examen. No alentemos el fanatismo ni aun por las verdades adquiridas, pues el conoci- miento de hoyes la falsedad del mañana." El mensaje del Rector Garrido puede considerarse como un testimonio válido acerca de las orientaciones generales que han de privar durante su ges- tión al frente de la Universidad, y señala a los profesores y alumnos de la misma un programa de acción tan levantado cuanto generoso, y a tono con los. primordiales privilegios del espíritu. UNIVERSIDAD DE MEXICO * 1

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Page 1: CONC~PTOS Hugo Grocio los· RECTOR LUIS GARRIDO …€¦ · risprudence Hollandaise par Hugo este mIsmo SIglo xx. de Groot et le droit actuel de l'Afriquedu Sud (Actorum Aca Jerniae

* ORGANO DE LA UNIVERSIDAD NACIONAL AUTONOMA DE AfEXICO *VOLUMEN JI • MEXICO, JULIO DE 1948 • NUMERO 19

Hugo Gracia

POR EL DOCTOR RAFAEL ALTAMIRA

De antiquitate. Reipublicae Batí-.vicae, que se editó no sólo aparte,sino también en un volumen titu­lado Antiquitates Germanicae 01Hoogduitsche Ondtheden.,. com­puesto de la Historia patria quemencioné antes y de una traduc­ción de Tácito en idio~~ holan­dés; el de Vetere Iure Germanicf>et Suevico, que es solamente' una.parte de la obra que termina esta.enumeración, a sabet, la HiStoriam.Gothorum. Pero no es' de esas his- .

-torias de lo que voy a ocuparme:en el presente artículo, sino deotro escrito del gran jurista batavoque interesará.a los lectores ameri..:canos, por tratarse ,de un te~a qu'~se refiere a los comienzos de' la ;i­da social del Nuevo Mundo' quelos europeos descubrieron al fin~idel siglo xv y comienzos del XVI'

.!

Grocio y los·Americanos

HugoAborígenes

I

Aunque no hubiera otros moti­vos, ser jurista y vivir en Holandaimpone relee~ a Hugo Grocio, porlo menos. Así lo hice yo y no sólouna vez, sino muchas. Pero Grociono fué únicamente cultivador dela filosofía y la historia del Dere­cho. Fué también historiador deotras materias; y esto me movió aestudiar su' bibliografía entera yalgunos de los libros que, en ella, loacercan más a mi afición predomi­nam~ ,

Incluir plenamente todas lasnotas que fuí reuniendo año trasaño, sería tarea larga; sobre todosi piensa uno en lo que consienteuna revista que no es especial, sinogeneral. Me limitaré pues a citarlos libros históricos que publicóGrocio y que son los siguientes:

UNOS CONC~PTOS DELRECTOR LUIS GARRIDO

En el curso de un acto de simpatía al licenciado Luis Garrido, que' al­

canzó resonancia por lo caluroso de la demostración y la calidad de quienes

lo animaron, el actual dirigente de nuestra Casa de Estudios tuvo ocasión de

concretar en breves cláusulas su concepto de la Universidad ideal y, en con­

secuencia, las normas que estima esenciales para el debido desenvolvimiento

de la vida académica de la lnstit"ución en el tiempo venider¿.

La preocupación del hombre, de 10 hámano, debe prevalecer en cuanta

acción universitaria se despliegue, porque esa es la raíz y la meta de todo es­

fuerzo creador. Según 'Sus palabras, las grandes instituciones de cultura no

sólo deben fomentar el saber, sino que han de trabajar también por la causa

de la libertad, pues sin ella sería imposible la difusión del conocimiento y

la búsqueda de nuevos principios.

La era industrial y mecanizada que ahora vivimos ha inclinado a al:

gunos centros de enseñanza a recargar el acento en las disciplinas de tipo cívi­

co o de aplicación econcimica, con daño de las humanidades, ese superior

recurso que favorece el carácter, los gustos y los ideales de las mentes jóve­

nes. Ese es un desatino manifiesto: tan importante es para el espíritu hu­

mano el conocimiento de los clásicos como el adiestrarse en las ciencias físico­

matemáticas. El Rector Garridó, dando a su pensamiento una expresión mds

categórica, afirmó: "La educación universitaria debe realizar un armonioso

equilibrio entre lo estático ylo dinámico, entre el pasado y lo presente, en­

tre el ideal y la práctica, entre lo bello y la materia."

Pero en toda la etapa de la preparación profesional de los elementos

que se cobijan al amparo de la Universidad, debe impartirse a éstos aigo

más que las fórmulas escuetas de la sabiduría y la técnica estrictamente fa­

cultativa. Precisa ir modelando en su's conciencias la noble servidumbre de

servir al prójimo, de desentenderse de la tentación del lucro, de ejercitar la

piedad y la simpatía humana con amplitud, ya que "ciencfa sin conciencia

es la mUerte del alma".

Ya para cerrar su conciso y enérgico discurso, el licenciado Garrido pro­

nunció unos conceptos que le fueron largamente aplaudidos. Refiriéndose a

la experienciaobrenida de la última crisis que trastornó la vida de la Uni­

versidad Nacional de México, y aludiendo a que la lucha por las ideas puso

siempre manchas de sangre en las páginas de la historia, proclamó que todos

los elementos de la Casa de Estudios debemos trabajar ahincadamente, infa­

tigablemente, por la divisa más preciada: la tolerancia. A ese mismo propósi­

to, expresó con un persuasivo poder de síntesis: "Todas las ideas humanas

son discutibles sin excepción alguna. No hay idea completamente justa ni

completamente falsa, decía el filósofo. Sepamos entenderlas y valorizarlas

bien. Procuremos fortificar en los jóvenes el espíritu de libre examen. No

alentemos el fanatismo ni aun por las verdades adquiridas, pues el conoci­

miento de hoyes la falsedad del mañana."

El mensaje del Rector Garrido puede considerarse como un testimonio

válido acerca de las orientaciones generales que han de privar durante su ges­

tión al frente de la Universidad, y señala a los profesores y alumnos de la

misma un programa de acción tan levantado cuanto generoso, y a tono con

los. primordiales privilegios del espíritu.

UNIVERSIDAD DE MEXICO * 1

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UNIVERSIDADDE MEXICO

RECTOR:

Lic. Luis Garrido

GERENTE:

Germán Pardo García

Organo oficial de la UniversidadNacional Autónoma de México

o1 .145' .

71011

. 12

1415

·171922

Págs.

1 .

11.

RA·M

Informa~ión universitaria.

das de Hugo Grotius; en que se V:ázquez, «Decus illud Hispa­trata de las controversias d-e éste nzae» , no obstante hallarnos en­con Juan de Laet ac~rca de los ~onces en plena guerra con Espa­orígenes ,de los amerindos. '(Tomo na. Cuando, como yo lo he visto,VII de la citada Biblioteca holan- se publicó en 1609 un capítulodesa) . . de aquel. escrito, el autor corrigió

Para terminar esta bibliografía un pasaje para dejar claramenteque, por de contado, no compren- . establecido que era contra· Espa­de más que los libros que encon- ña y no contra Portugal que setré en la Biblioteca Nacional de dirigía la publicaci6n; pero no re­La Haya y otras ciudades, men- tocó el pasaje lleno de admiracióncionaré un tratado de R. W. Lee dedicado a Vázquez «Decus illudsopre otra cuestión que Grocio Hispaniae». Esa gran distincióntambién estudió y' que importa a con que Grocio trató a sus enemi­los juristas: L'intrQduction ti la Ju- gos, ta.l vez .conserva su valor enrisprudence Hollandaise par Hugo este mIsmo SIglo xx.de Groot et le droit actuel del'Afrique du Sud (Actorum Aca­Jerniae Universalis Jurispruden- La cita de van Eysinga que pre­tiae Comparative, volumen 1, Ber- cede, enlaza intelectualmente conlín, 1928, páginas 63-70). La lo que voy a decir de Grocio enmenciono principalmente por el cuanto a su escrito sobre los pue­hecho análogo que presenta la con- blos americanos aborígenes. .servación del Derecho antiguo es- En efecto, el gran jurista ho­pañol (la materia del derecho fa- landés debió una buena parte demiliar) en Californi<y: segundó su opinión sobre ese tema a uncaso de' perdurar· un,a' legislación eclesiástico español que en 16Q7extranjer.a en un pueblo it¡glés. . , publicó en: Valencia (en casa de

Todavía añadiré ~a cita lnte~ Pedro Patricio Mey) un libro cu­resante,' de uno de los juristas ho- 'ya portada dice así: Origen de losla:ndeses 'coI~:teinporá:tl~Os, nii com:.;,indios de el Nuevo Mundo e In­pañero en el Triburial de La Haya, dias Occidentales. Averiguado conprofesor Van Eysinga,. que ha es-' discurso de opi1lÍones por el Padretudiado .profundam:ente las obras presentado Fray GregorioGarcía,de Grocio. Refiriéndose' especial- . de la Orden de Predicadores. 'En el

.. V' «proemio" (página 6)\ " y despuésment~ a~vestro JUf1st~ azqpez"ha escrito. Ván Eysinga en la Re- dedecirc6niola novcdadde lasvista de Derecho liit§~national y cosas .de las Indias movió la curio­JeLegisl(ición Comparada (192f, sidad de muchos, añade ql,le "nopágina 274 y siguientes): "Fre- todos. los que han ido a las Indiascuentemente. se. -ha" hecho. notar andabaJ1 bUscando, oro y plata; al­que Grocio conserva. todo su va- gunos había que buscaban el teso­lor, incluso en nuestro tiempo. r'o deJa ciencia y conocimiento deEsta 9bservación se aplica también . todo lo que hay en el mundo nue­a su cortés' actitud para 'quienes vo; teniendo por mayor riquezadiSentían ide sUS opiriiones y aun a esto, que no el oro, y pLlta." .(Ellos que pertenecían a .una n~ción autor pasÓ nueve años en el Perú.)

En su investigación sobre los abo­enemiga y aunque ésta sostuvieserígenes, .empleó el procedimiento

una guerra dura con su patria ho-landesa. Podrí;ln contarse muchos' de comparar costumbres, ritos y

ceremoni~ y (en el capítulo VI)ejemplos de esta. clase, pero sólo expresamente leyes como la cir-citaré uno. Cuando· Grocio escri- cuncisión, prohibiciones de .matri­.bió en 1604-1605 sobre' el Dere- monio entre parientes, la vida ma­cho de captura, no dejó de expni- rital en ciertos períodos, el pecadosarse en términos de la mayor ad- nefando, la prohibición de cohabi­mir'ación .hacia el autor español tar con esclavas, la pena del adul-

. Unos conceptos del 'Rictor Luis Garrido.'. . . . . . .Hugo Ciocio y.los aborígenes americanos.-DR. RAFAEL ALTAMIRA .

Francisco Orozco Muñoz.-·AI.FllEDo GÓMEZ PE LA VEGA.

Actualidad universitaria.' . . . . . . . . . . .Diálogo con 'Alfonso Teja.Zabte.-RAFAEL HELlODORO·VALLE.

Sobre enseñanza musical.-DR. JESÚS C. ROMERO.

Hechps; letras, personas;-A. A. E. . . . . . , .La exposición' de Raúl Estrada Discua.-JUSTlNO FERNÁNDEZ.

N olicias de la Direccirn General de Difusión Cultural.Un homenaje al Rector Garrido, . . . . . , . . .Por el mundo de los libros.-Notas de RAFAEL HEUODORO VALLE.

Panorama cultutal.--SALvÁDoR. DOMÍNGUEZ ASSIAYN.

Pulso de la América fJniversitliria.-Nota~ de ARGOS.

es decir, la famosa y discutida "Di­sertación sobre el origen de los ha­bitantes de América". La papeletabibliográfica dice. así: HugonisGrotií, Dissertatio De origine gen­tiu:m Americanomm, 1642. Es unfolleto de trece páginas incluyen­do la portada. En la página 4 dice(traducción mía): "Desde que leívarios de los escritores españoles,franceses, ingleses y holandeses queestuvieron en esas tierras, penséque no sería una labor infructuosasi yo comunicase a mis contempo­ráneos y a la posteridad, lo que meparece más probable." A conti­nuación examina la hipótesis escitao tártara, la normanda o escandi­nava (germana), la judía y la chi­na. Se inclina a creer escandina­vos los amerindos del Norte dePanamá, y chinos a los del Sur.·En 1643 apareció una nueva edi­ción de esa monografía (Disser­tatio altera de origine gentiumAmericanorum, adversus obtrec­tarem opaca quem bonum pacisbarba, 30 páginas con la portada).Le siguió una edición parisiensemás' extensa que la primera de1642: "Parisiis, Apud SebastianumCramoisy, Typographum Regiumvia Iacobea, subciconiis. MDCXLIU".

En ella 'tita; a menudo autores es­pañoies: Cómara, Garcilaso, Acos­ta;Herrera,. Angleria, Alvarez..

. El te~a interesó a otros escrito­re:{ (aparte los hispanos), comoPe~erAlbinus, historiador sajónque falleció en 1598. Combinan;.

" do éste con .Grocio, hacia fines del'siglo XIX se publicó un curioso li­bro inglés cuya portada dice: Bi­'.blioteca Curiosa•. On the originof the N ative races· of America.A Dissertation by 'Hugo Grotius.Yo Wich is' added 'aT,reatise onForeign Languages flndunknownIslands. By Peter Albinus. Trans­lated from the original latin, andenriched with Bibliographical N 0-

. '. tes and Illustrations by EdmundGoldsmith, F.R.R.S., PrivatelyPrinted, Edimburg, 1884. Porcierto que el señor Goldsrriith ig­noraba muchas cosas elementales.Por ejemplo,en la página lO diceque no le has~do posibl~ encontrarla lc;>calidad de Nomen Dei, 10 cualindica que no ,sOspechó siquiera S,nut;s~ro, Nombre de.Dios;en lap~gina 51 pareCe tragarse la for­mid;lb1e equivocación' de Albinusque hac,ede la. p<ilabra española"Almirant~'" (4d~ir~1, ep. inglés)un <;1erivado de uá4mirar", y dice

.que se aplicó a Colón' porque lasmuestras de. respeto con que lerecibió (en Barcelona) Fernandoel Católico, admiraron a las gentes.En 1928 se publicó en la Bibliote­ca Visseniana que se edita en Ley­den y de la que poseo muchos vo­lúmenes, una monografía de Her­bert F. Wright cuyo título es (eninglés): Algunas noticias conoci-

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Federico K. G. Mu/lerried .Edmundo O'Gorman

Enrique Juan PalaciosSalvador PinedaSamuel Ramos

Víctor RicoFrancisco Roias González

Isaac Roias RosilloJesús C. Romero

J. Ignacio Rubio MañéJosé SilvaJulio Torri

.Manuel ToussaintEmilio Uranga

.Luz VeraLeppoldo leo

UNIVERSIDAD DE MÉXICO

aparece mensualmente.lA correspondencia, can;e o valores debenremitirse· así: Revista "Universidad de Mé­

xico", Justo Sierra 16, México, D. F.

Precio del ejemplarSubscripción anual

2 * UNIVERSIDAD DE MEXICO

, ."

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, .

"1',

'.

L a s mamposterías júnteadas. con mezcla de cal y" arena han'

Caido en desuso, porque la" ex~

trema lentitud con que adquie-l

ren resistencia es incompatible:con la economia Yel ritmo ace·;lerado que singularizan la! vida'social contemporánea. (U namezcla de cal alcanza .difícil­mente una resistencia a lacam·presión de 5 kilos por centíme~

tra cuadrado a los 3 dias de he:cha, y requiere por lo menps 5años para alcanzar una resisten-'

da de 100 kilos) .

SOKILO.S

Un concreto hecho con un buencemento porUand normal (a bao:se de 30 litros de ag~a por caPa50 kilos de cemento) alcanza alos 3 dias una resistencia a lacompresión de 80 kilos por cen- 'timetro cuadrado Y requiere 15dias para alcanzar la resistencia'que se obtiene con super ce·mento a los 3 dias. Un buen ce·mento portland normal es el in·dicado para toda clase de obras'o trabajos en qoe el factor tiem.

po es menos importante.

:,

140KILOS

Un concreto hecho oonsuper'cemento (a base de 30 litros de'aguafponcada 50 kilos de ce­:mento) alcanza a 1053 dias una:resistencia ¡a la compresión de140 kil'os-por centímetro cuadra­do, y permite descimbrar los co­lados (o abnr al tránsito los pa.vimentos) .a' los. 3 di"s de he­chos. El super cemento cuestamás ($140.00 por tonelada pues­to en obra dentro de la Ciudadd,e México); pero en trabajosiJ1lportantes o urgentes. ahorra

.tíempo Y.dinero. --------------•• •

(rE~]~rulI«J) [D)~ I~DAKC«J)A\([,§¿~o. _. .,

CEME'N'TO MORTEROCE·MENT'O'TOLT'E'CA TO.LlECA 'T:'OLTECA,

PORTLÁND PARA '"'UNTAS RESISTENCIA,(NORMAL) Y APLAlADOSRAPIDA(SUPER)

••

terio', el jubileo, el repudio, el ma­trimonio de las viudas sin hijos conel hermano del marido, y otras del"Levítico, Deuteronomio y Decá:.lago". también estudió, pero enmenor cantidad, las leyes y cos­tumbres romanas (Libro IV). Porotra parte, el Padre Luis Alcázar,también español, publicó en Am­beres (1614-1619) y en Lyon(1616) una larga Investigaciónsobre el sentido oculto del Apoca­lipsis, dedicada al Papa Paulo V'( 1605-1621). De ella vi en La

Haya un magnífico ejemplar de1614, cuyo título es: Rev. patrisLudovici ab Alcazar Hispalensis,a societate Iesu, theologi, et inProvintia Raetica Sacra Se¡ipturaeProfessoris, Vestigatio Arcani sen­sus in Apocalypsi. Ahora bien, es­te jesuíta hizo investigaciones so­bre los aborígenes· indianos;' yaquella investigación suya fué co-

'nacida y señalada por De Meauxen su escrito del Apocalipsis, al de­cir que del libro de Alcázar: "tomómuchas de sus ideas Gracia"..Estaafirmación se encuentra en la p~­

gina .3 3 de la edición holandesaque, si mis notas no incurrieranen error, se hizo en Leyden y en1687. y para agotar mis lecturasde este asunto, terminaré dicien­do que también el famoso Laet, dequien hablé en mi Psicología delpueblo espaiiol, a propósito de lasdiscusiones entre hispanistas y an­tihispanistas, trabajó sobre 'el mis­mo tema en su Responsio ad Dis­sertati01tUm secundam HugonisGrotii, de Origine Gentium Amer­iCaJwrum. Cum Indice ad utrum­quell$ libellum. Amsterrodami,A p u d Ludovicum Elsevirium.Otra edición se hizo en París, Vi­duarn Gaebielmi Pele, MDC;LIII.

Sería muy interesante escudri­ñar en los fondos de la época co­lonial española; tan abundantesen América, los ejemplares de lasobras de los PP. Gregorio Garcíay Alcázar que, muy probablemen­te, se guardan en ellas, y confron­tarlas con las de Holanda. Tal vezse encontrarían otros escritos deautores eclesiásticos y profanosque aumentasen lo que hasta aho­ra sabemos.

Bien comprendo que esta inves­tigación no tiene hoy día más queun villor puramente histórico. Laciencia moderna ha resuelto elproblema del origen étnico de losamericanos y, al parecer, de unmodo definitivo. No obstante, a lahistoria de las averiguaciones de esehecho, el episodio del siglo XVIII

que presenta este artículo mío, le .pertenece un puesto que no es dedespreciar; aunque no fuera másque en lo que toca a la proceden~

cia de investigadores españoles ylo que a éstos debió Grocio.

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