concierto de silecio (1987-1988)

14
CONCIERTO DE SILENCIOS (1987-1988) “Y así vamos hacia delante, botes que reman contra la corriente, incesantemente arrastrados hacia el pasado.” ( El gran Gastsby - F. Scott Fitzgerald ) 1 ( A Blas de Otero ) Donde nace el silencio hay un manantial de palabras en llanto, allí ahogué la atroz soledad y el viento encabritado que abatían tu semblante, allí te busqué rodeado te la eterna canción que puebla los desiertos. Las calles sonrieron con los labios abiertos al estrellado día que acunaba mi ansia de ti. Tu nombre sólo fue un poema caído en el ojo de huracán, las demás palabras las guardo en lo más hondo de la memoria, donde más duelen, para que viertan eternamente su ácido en mis venas sin mariposas, para que nunca cicatrice la herida que abrió en mi alma el filo atroz de tu verso. 1

Upload: rufolopez

Post on 28-Jan-2016

16 views

Category:

Documents


0 download

DESCRIPTION

poemario introspectivo

TRANSCRIPT

Page 1: Concierto de Silecio (1987-1988)

CONCIERTO DE SILENCIOS

(1987-1988)

“Y así vamos hacia delante,

botes que reman contra la corriente,

incesantemente arrastrados hacia el pasado.”

( El gran Gastsby - F. Scott Fitzgerald )

1

( A Blas de Otero )

Donde nace el silencio hay un manantial de palabras en llanto,

allí ahogué la atroz soledad y el viento encabritado que abatían tu semblante,

allí te busqué rodeado te la eterna canción que puebla los desiertos.

Las calles sonrieron con los labios abiertos

al estrellado día que acunaba mi ansia de ti.

Tu nombre sólo fue un poema caído en el ojo de huracán,

las demás palabras las guardo en lo más hondo de la memoria,

donde más duelen,

para que viertan eternamente su ácido en mis venas sin mariposas,

para que nunca cicatrice la herida que abrió en mi alma

el filo atroz de tu verso.

1

Page 2: Concierto de Silecio (1987-1988)

2

( puente entre mares )

una eternidad, otra eternidad,

un puente demasiado estrecho

Porque a mis veintidós años se me cierran las cárceles

y la vida se descose insultante

-la desidia llega después enmarcada en un viento metálico,

un extraño ruido de automóviles despierta tras el horizonte-

Hay pasillos que encierran todo,

los desiertos, las lágrimas, las pisadas,

los charcos masacrados por las pisadas

-la sonrisa cicatriza de ese niño color ceniza huye hacia el miedo,

las rosas duermen la siesta bajo un arco de espinas incontrovertibles-

Porque estoy sentado e medio de la noche,

si nubes, sin estrellas, sin luna, quizás también sin alba

-de nuevo este invierno punteado de heridas entristece la mañana,

las calles desabarrotadas muerden en silencio su ansia de miradas-

Ahora escapo de un mar a otro mar

y este puente se me llena de agua, huracanada a veces, en el espejo

-la nada se enrosca al cuello de hoy apastando contra el sueño deszarpado

el externo, el cleido y el mastoideo que fumaban conversablemente-

Porque en cada naufragio arrinconado hay orillas que desconozco,

puertos con los faros encendidos a espaldas de los muslos

-una niña vestida de legañas fosilizadas recoge del suelo unos versos sucios,

pamplinas al fin y al cabo de otra mentira igual que corruptible-

Sé que soy y a veces no lo creo,

pienso que existo y me asalta la duda de mí mismo entre tanto deseo desgajado,

-la presencia de la piedra en medio del camino, la mirada indiferente,

la piedra ignorando la mirada, el camino soportando el peso ingrato de la piedra-

No estoy seguro, sin embargo ese florero no ocupa su lugar más adecuado,

esa fuente debiera estar en el desierto, regando lagartijas.

¿ Qué decir en cambio de la botella vacía

o del tren que llegó puntual como dos rectas cruzándose ?

2

Page 3: Concierto de Silecio (1987-1988)

Yo prefiero mirar Exter madura,

decir me gustas más con el pecho descubierto y los muslos llenando el sol;

después dejar la vuelta envuelta e una probabilidad posible.

Porque entre suelo y suelo hay un algo indescifrable, no vomitable,

que pesa como lastre arrastrado desde siempre

-el sueño, los años, el miedo a los años que sólo fueron sueño

en la hora misma de despertar

la causa primera de las cosas, la esencia final de la nada,

esa insistencia metafísica de deseos proyectados sobre una pared enjalvegada-

Buscar motivos para gritar no es incumbencia del silencio,

me duele pensar que el nuevo día empieza después de a media noche,

también en las noches de luna llena cuando las estrellas giran semiocultas

y un accidente de calculo disuelve las sábanas en un multitudinario charco de pus.

Porque no me entristece tu sangre ni la mía, sino la sangre toda invertebrada,

ese mudo manto de sangre descalza que pisa los abrojos deshilachándose en los labios;

color rojo de eternidad prematuramente volcada;

tramo final inevitable del puente entre mares,

donde los muslos se cierran y nacen los innatos

sin mas herencia que a rienda encabritada de dos zapatos hambrientos.

Es triste, demasiado triste; se diría la tristeza toda desramificada a torrentes.

A mis mil versos rotos me canso de cenar historia,

de postrearme con literatos de tinta china;

necesito un cambio de aires y de héroes, un catecismo de cobardes bordado a mano

o una cárcel rebosante de buenos propósitos,

un billete para el infierno si caer e sentimentalismos ingenuos

-la nada en sus espléndidos veintidós años de pechos firmes me está llamando a voces,

gritos inacabables que buscan el talón mientras una caricia envuelve el vértigo de la caída-

Mendigando soledades menos frías que la tumba voy,

a veces corriendo como loco, gritando palabras que sólo yo no entiendo;

-pido una pregunta no demasiado maltrecha para tanta respuesta estática,

es igual, me dan un pedazo de pan duro y los buenos días,

y una sonrisa tapiada. Ya se sabe-

3

Page 4: Concierto de Silecio (1987-1988)

3

( verso o locura herida )

Escribo a ratos perdidos ignorando sendas trazadas y lamentos de piedra arrinconada.

Sólo busco la palabra del hombre para reposar mi palabra vacía,

ese verso desarraigado que cabalga el laberinto de la soledad.

Entre los arboles crece la ausencia de una noche sin sueños:

los tambores callan silenciosos, las guitarras se derraman en sangre

entonando antiguos himnos de muertos en pie.

¿ Os dije que no sueño ?

Imposible cuando el acantilado zozobra

ante este inmenso charco de pus que la deriva arrastra en mis ojos;

cuando las gaviotas se devoran entre sí

y los pasillos de la noche se llenan de maullidos y gatos hambrientos.

Fauces de soledad labran el paraíso no encontrado del olvido

mientras las calles rugen y fluyen infinitas hacia el final.

En medio de la muchedumbre o locura dejo mi palabra mariposa herida

rodeando este vacío que llena todo:

los pétalos de la risa, la rosa marchita y la primavera deshojada.

Dejo mis labios ensangrentados de rabia herida,

buscando acaso un verso que renazca la esperanza,

que una la ceniza de los muertos e soledad

y fuerce los átomos a ser, otra vez, palabra llena y sin odio.

No me habléis de amor, hoy no;

hoy están lloviendo los minutos que nunca viviremos,

las respuestas abandonan el nido sin preguntas cayendo sin encontrar infiernos donde existir.

Ya veis. ¡ es tan triste ! , y sin embargo

los ojos y las manos, libres siempre, escriben,

intentando matar los ratos perdidos por las sendas desde siempre conocidas.

4

Page 5: Concierto de Silecio (1987-1988)

4

( oración de despedida )

Caminaba hacia el borde de la tarde pisando los paisajes arrasados por la rabia,

buscaba algún indicio de ti, de tu presencia viva en la roca;

cayó el sol tras las montañas, alud de sombras, recuerdos del naufragio de la esperanza

ahondando la herida atroz del silencio,

de tu silencio como estrella que no existe, de tu voz sólo imaginada, nunca oída,

de tu voz apagada en la alborada del día en que nunca naceré.

Sé que un día grité tu nombre como el soldado alza la bandera, dispuesto a morir,

y que bebí la sangre que dijeron tuya, y comí la carne que supusimos tuya

sin rencor de paraísos perdidos;

también sé que fui feliz entonces, sin miedo a las sombras ni a a luz intensa,

niño con un mar eterno de olas y una playa infinita bajo el brazo para el tiempo final,

cuando el puente entre mares quede para siempre traspasado.

Del viento de la historia nació la duda,

al acecho del talón,

enroscándose al tobillo,

mordiendo la nuca,

abriendo los ojos al reflejo horrible del dolor:

madres inconsolables que herían la tarde desnuda de las trincheras,

niños vestidos de hambre arrastrando en el silencio del barro sus muertes al borde de la

desesperanza.

Allí grité tu nombre de nuevo; mas no me llegó tu voz,

sólo tu silencio empujando mi palabra

hacia un largo camio de abrojos bajo un cielo de tormentas atroces.

Entonces bebí vinagre y corrí el telón a tu farándula ya no creíble

fui infeliz, sufrí y lloré, ( no me importa confesarlo )

pero libre viví la bofetada dura de la verdad hasta domarla.

Hoy mis versos de amor son granito tosco, rudamente tallados, con perfume de rosas y sangre;

he aprendido a crecer y a amar el olvido, a escribir palabras sin ortografía,

y sin pecado ( sobre todo sin pecado )

en las ventanas abiertas de los hombres en vuelo;

y algún día, cuando la tarde duerma los paisajes de la rabia,

seré dulce sombra que me acoge y borra todo indicio de ti.

Beberé olvido hasta emborracharme,

apagando por fin el brillo de tu estrella que nunca existió.

5

Page 6: Concierto de Silecio (1987-1988)

5

( concierto de soledades )

( Solo de esfera ondulándose )

La luz del sol besando la escarcha

quietud de siglos

resquicios de madrugada escapándose en el bostezo insistente de la hierba

sollozos del granito y de la sombra

donde abandonando el alma creces incólume

rasgando el velo de la angustia su metamorfosis de heridas y llanto.

Buscas el pecho henchido de maternidad inmarchitable

allí donde la luz pierde la línea recta entre rincones oscuros

y las sombras de los ojos

en el reptar sinuoso de las calle.

Encuentras una taberna vacía

una botella vacía

un caminar cansino hacia a soledad

y tal vez la muerte a deriva en el océano del alba chamuscada.

De nuevo el sol

color de lagartijas sobre la frente

ondulándose bajo la esfera

desafiando la verticalidad imposible de la alborada

6

Page 7: Concierto de Silecio (1987-1988)

( solo de guitarra )

No hablo

no hablan las paredes

no habla la sangre ni la risa

sólo un guitarra suena en lo más hondo de la soledad del hombre:

como un silencio

como una llama

como el lamento triste de una lágrima

( solo de sangre herida )

Aún no sé si vivo;

quema tanto este desierto que piso

estas sombras que me traspasan como cristal transparente

miro hacia atrás y todo salta como sangre expulsada a borbotones

y mancha la camisa nueva

y el deseo de mí mismo se hace borroso a

penas palpable o creíble.

Á veces siento el suelo deslizarse bajo mis pies l

as palabras rasgar mi garganta herida

al despertar comprendo que soy mudo y estoy paralítico

solo e medio de la soledad.

De esta enorme soledad que me rodea pese a esa mirada tuya que cree verme

( solo de batería )

Golpes duros como crujir de huesos resbalan hacia la noche

no hay estrellas

ni siquiera estrellas de sangre

que griten en el grito de los tambores

Los tam-tanes desnudan el silencio gota a gota

de rocío o de lágrima

no importa

la alborada abraza a hombre en la soledad de un trinar de platillos

7

Page 8: Concierto de Silecio (1987-1988)

( solo de piano )

Llegaron los vi

con los cuchillos afilados entre los dientes

arcángeles negros parias de la luz

y un tumulto de relojes de arena

rotos sobre la playa de los siglos

Yo callaba estaba muerto

bailaban los dedos sin ritmo de cerebro

golpeando el relincho encabritado de un océano de desiertos

mientras un arpegio vestía de soledades

el hueco de los ojos de los hombres.

( solo de albas y ocasos )

Amanece sobre la frente de los años

retazos de luz apresurada

roban el armonioso fluir de las estrellas.

Lloras.

Anochece

pinchazos de sombra

resbalan por las arrugas de la frente

el sol se escapa irremisible.

Lloras.

Miras en lo más lejos de tus ojos desnudos

los horizontes que silencian tu palabra.

Callas. Lloras.

Sin embargo la soledad

se clava lacerando tu alma de hombre

pese a tu grito de estrellas en peno día.

8

Page 9: Concierto de Silecio (1987-1988)

( solo de flautas )

Surges como un beso

ondulado labios y trincheras

longitud de onda desplazada hacia el verso entreabierto de un silbo

sosegado en lágrimas

de viento

o de nube

o de océano encabritado

buscando la roca donde te transparentas por y para siempre.

Después bajas a a calle

y desnudas este paisaje de ratas que devoran al hombre

con dientes de soledad.

6

( desde el fondo )

Desde el fondo del abismo surge mi voz tronando la vida

los alacranes

las ausencias invertebradas que corroen por dentro

madrugadas preñadas de aguijones

albas negros como relojes sin tiempo

mujeres desnudas danzan alrededor de mi silencio

balada de muslos rodeándome saja mis pupilas

siempre la nada envolviendo la nada

las raíces donde despiertan las sedas l

os perfume la angustia de los besos

Pero el espejo se ahoga en el baúl donde vomito mi sed de añoranza.

9

Page 10: Concierto de Silecio (1987-1988)

7

( avenidas sin luz )

Mirábamos crecer la hierba desde la playa de la infancia los ojos abiertos descubriendo héroes de

leyenda espadas de madera átomos golpeándose ( media cuarta y pié ) la tierra el guas la victoria

diez cromos repetición de los días inacabablemente pequeños el hambre y el plato vacío sin

importancia menos aún las lágrimas o los besos.

Jugando al escondite con las matemáticas y el látigo olvidamos segar la hierba que creció hasta

ahogarnos. Metamorfosis de la seda en tronco encallecido donde las manos se agrietan y la

sangre mancha la camisa los bolindres se alargaban silbando taladrando el pecho y el alma. Ya no

sirven el amor ni los muslos para cicatrizar la herida abierta en el ramaje los nidos caen sin

encontrar suelo hacia el sexo que se apaga con la farola. Ahora abrimos los ojos pero el carbón

negro y las legañas no dejan ver las estrellas sólo el barro cenagoso donde las iguanas devoran

los restos de último naufragio.

Avenidas sin luz luces de ida sin vuelta baúles de chatarras encerrando un estercolero de héroes

en fosa común.

Buscamos en el diccionario de la vida el cobijo de la felicidad nos quemamos con el fuego fatuo

que consume cada página respetando tan sólo palabras sin retomo grabadas con la sangre

desteñida del animal adulto:

dolor miedo soledad muerte

8

( presencia )

Estoy aquí, en mí no hay estruendo de olas ni cansancio,

sólo vientos empujados hasta forzar la verdad.

No encerré la palabra en ningún verso,

ella legó hasta mí domada por vuestra sangre vertida mendigándome la piel.

Yo masturbé su presencia hasta el dolor y bebí el esperma duro de su grito.

Hoy voy con la sangre henchida pisando los charcos donde yace el verso sucio del hombre

y el vómito inescrutable de la palabra pura,

si pecado concebida.

10

Page 11: Concierto de Silecio (1987-1988)

9

( dejar pasar )

Dejar pasar la noche

dejar pasar las noches y los días sin prisas

todos los días y todas las noches

con la lentitud agónica de la luz en pos de lo imposible.

La guitarra se vierte en hilos de sangre acuchillada

gritando angustia la calle cobija el miedo

la cadena ata el día y la noche a un sueño mezquinamente repetido

balanzas en su fiel más opuesto eligen la verdad de las botas limpias

el rostro contraído de nuevo tiembla

próxima a caer la historia resurge de las cloacas con hambre atrasada

mientras pasan los días y las noches sin prisa

todos los días y todas las noches...

10

( pese a todo )

¡ Sangre de hombre ! ¡ Sí !

digo sangre y digo de hombre

aunque no comprendo la exactitud de la palabra ni la esencia de la lluvia

no presencié el génesis del alba ni estaré en el inicio del apocalipsis del ocaso

tampoco distingo entre caballos y arcángeles

cuando cabalgan con la luz en las ondulaciones del tiempo

y se apean de sus alas para adorar a Venus

veo llegar la luz y sé que ya es tarde para ahondar en los abismos de la tristeza

para dejar las lágrimas empapar la mirada por los ojos ausentes.

Pero los pétalos blancos de la jara están manchados con sangre,

de hombre pese a todo.

11

Page 12: Concierto de Silecio (1987-1988)

11

( seréis )

Seréis mujeres en los aluviones del tiempo

dulces gaviotas sobrevolando el perfil acantilado del deseo

grito ahogado en la penumbra de los labios

cuando los párpados giran en luna llena

y los tam-tanes de las sombras nacen arcángeles de alba

en vuestros cuerpos desnudos de mujer contra el espejo

la sonrisa forjará la cadencia de los muslos

es la hora del deseo y las prisiones

de los dioses derrotados entre el incienso y las sábanas.

Después la distancia hervirá blanquecina en vuestro regazo

y se hará sangre contra la sangre detenida

mientras las miradas se aferran al último resquicio de la madrugada.

12

( todos )

Mirad el surco y la tierra.

Romped de nuevo el silencio.

Gritad sin miedo.

Sois tantos …............................... todos

nadie si calláis… nadie... y el tiempo os aplasta.

De nuevo surge la palabra perfumada.

Rompedla.

Arriad la bandera.

Que el aire abrace el puño cerrado.

Sois todos... tantos..... siempre,

nunca si calláis... nunca... nadie... callados...

12

Page 13: Concierto de Silecio (1987-1988)

13

( tic – tac )

Tic – tac el reloj se va

tic – tac con su monótono cantar

y tú, Dios ¿ dónde estás ?

Tic – tac e reloj se paró

Tic – tac es la muerte que llegó

con su eterna canción

Y tu Dios ¿ donde estás ?

tic-tac... tic-tac

esperaremos otra eternidad

14

( para siempre )

Tu sangre, mezclada con el barro

Tu nombre, perdido para siempre

Una bala, pasada cadena

para tu débil espalda de hombre.

15

( mar )

Dónde vas mar

inmenso mar eterno

insaciable arena espuma

inasible entre los dedos

rompiendo olas contra las rocas

contra el cielo.

13

Page 14: Concierto de Silecio (1987-1988)

16

( a una bandera roja y gualda )

¡ Ay bandera si tu fueras

de mujer boca pintada de rojo color

te quemaría con mis labios

hasta tomarte morado tu labio inferior !

en fin ...........

14