competencia en el mercado crediticio en los noventa: …

21
Reservados todos los derechos. Este documento ha sido extraído del CD Rom “Anales de Economía Aplicada. XIV Reunión ASEPELT - España. Oviedo, 22 y 23 de Junio de 2000”. ISBN: 84-699-2357-9 COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA: UN ANÁLISIS CON DATOS DE LOS CLIENTES Fernando Merino [email protected] Cristina Suárez [email protected] Universidad de Alcalá & PIE-FEP

Upload: others

Post on 10-Jul-2022

3 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA: …

Reservados todos los derechos. Este documento ha sido extraído del CD Rom “Anales de Economía Aplicada. XIV Reunión ASEPELT-España. Oviedo, 22 y 23 de Junio de 2000”. ISBN: 84-699-2357-9

COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA: UN ANÁLISIS CON DATOS DE LOS

CLIENTES

Fernando Merino – [email protected] Cristina Suárez – [email protected]

Universidad de Alcalá & PIE-FEP

Page 2: COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA: …

1

COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA:

UN ANÁLISIS CON DATOS DE LOS CLIENTES

Fernando Merino Cristina Suárez

Universidad de Alcalá & PIE-FEP Universidad de Alcalá & PIE-FEP

[email protected] [email protected]

Resumen

En un mercado de producto homogéneo, las diferencias de precios son habitualmente interpretadas como señales de competencia imperfecta. Si alguna de las características de los clientes justifican precios distintos (como por ejemplo los costes de transporte), estas diferencias habrán de ser tenidas en cuenta a la hora de evaluar la competencia en ese mercado. Este es el caso del mercado de créditos, donde algunas de las características de los prestatarios justifican diferencias en precios. En esta ponencia se presenta un procedimiento sencillo para mostrar los principales rasgos relacionados con la competencia en el mercado de créditos, a través del empleo de estadísticos descriptivos. Dicho procedimiento se aplica al caso español durante la década de los noventa, en la que se experimentó un profundo proceso de desregulación y liberalización.

Page 3: COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA: …

2

1. Introducción

La competencia es, probablemente, uno de los temas que ha dado lugar a más

trabajos empíricos dentro de la microeconomía. La competencia en los mercados atrae

el interés no sólo en el ámbito académico sino también en la opinión pública que

percibe cambios importantes en los precios, calidad, etc. en relación con el grado de

competencia en los mercados. En consecuencia, existe una preocupación pública sobre

esta cuestión, y la idea de que la competencia es, en general, beneficiosa ha impulsado a

los gobiernos a desarrollar una legislación que la promueva, y a vigilar que la misma se

cumpla. Sin embargo, en el caso español, el desarrollo de una opinión favorable a la

competencia (no ya en la opinión pública, sino incluso en las autoridades políticas) ha

sido escaso y muy reciente (véase Fraile (1998)).

Aunque la competencia es importante en todos los mercados, en algunos de ellos

tiene más importancia que en otros, por las repercusiones e importancia que algunos

productos tienen sobre el resto de la economía. Por este motivo, el impulso de la

competencia en algunos de ellos ha pasado a ser elementos configuradores de la

Historia Económica (son ejemplos típicos de EE.UU. los casos de Standard Oil en el

mercado de productos petrolíferos, ATT en el de las telecomunicaciones o actualmente

Microsoft en el del software informático). El mercado de créditos es uno de esos casos

importantes, dadas sus consecuencias en las decisiones de consumo de las familias

(tanto en bienes duraderos, como en el de los no duraderos cuando estas compras son

financiadas), y en los proyectos de inversión de las empresas. Su importancia se ve

acentuada cuando se tienen en cuenta las consecuencias del mismo sobre el futuro de la

economía, dado que condiciona la formación bruta de capital fijo y por tanto las

posibilidades futuras de producción.

En la mayoría de los países europeos, los sistemas bancarios nacionales se han

encontrado tradicionalmente protegidos de la competencia exterior por una fuerte

regulación. Sin embargo, la situación cambió con la integración de los mercados

europeos y la Segunda Directiva Bancaria que ha promovido la creación de un mercado

único desde 1992. Estas políticas han sido desarrolladas partiendo de la idea de que la

competencia en las actividades bancarias mejorará los servicios y bajará los precios

(véase Vives (1991) o Dermine (1993)). Es decir los distintos sistemas bancarios

Page 4: COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA: …

3

nacionales han experimentado un fuerte proceso de desregulación, siendo los casos más

extremos Holanda (en donde menos cambios se han introducido) y España (con los más

amplios), dadas las diferentes situaciones de partida.

La aplicación de estas reformas tendrá un efecto importante sobre las economías

de sus paises, debido a la relación que tiene el desarrollo del sector financiero y el

crecimiento, inversión, demanda de empleo de los mismos (Neusser y Kugler (1998)

analizan la relación entre el desarrollo del sector financiero y el crecimiento del sector

manufacturero en los países de la OCDE). Por tanto, medir la competencia resulta

esencial para evaluar la situación y diseñar las políticas adecuadas para alcanzar dichos

objetivos.

Esta ponencia tiene un doble objetivo. En primer lugar se desarrolla una

aproximación alternativa a la tradicional para medir los cambios en la competencia en

los mercados de crédito. En segundo lugar se aplicará dicho procedimiento al mercado

crediticio español en la década de los noventa. Las aproximaciones tradicionales parten

de las diferencias en el precio que cobran las empresas. Generalmente, las diferencias

observadas en precios (por regiones, clientes, momentos del tiempo) una vez se han

considerado las diferencias en costes, se atribuyen a diferencias en la competencia. Por

tanto, evaluar el tipo de interés cargado puede ayudar a mostrar los cambios en la

dimensión competitiva de este mercado. El marco utilizado en este trabajo parte de la

idea de que diferentes grados de competencia supondrán diferencias en el margen

cargado por los bancos a sus clientes. Dada la naturaleza del producto de este mercado,

es necesario tener en cuenta la existencia de factores ligados al comprador que justifican

precios distintos para cada uno de ellos. Hay varias razones para elegir esta

aproximación: la primera y más importante, reside en que los márgenes precio – coste

marginal no tienen en cuenta la heterogenidad de los clientes. En segundo lugar, su

simplicidad para detectar cambios en la situación competitiva del mercado de crédito

entre dos momentos, dado que los estadísticos descriptivos proporcionan una visión

valiosa sobre esta cuestión. En tercer lugar, proporciona un marco de referencia para

aquellos estudios que traten de poner en relación la evolución de la competencia y

algunas variables relevantes (ratios de concentración, cambios legislativos, etc.)

empleando técnicas econométricas que requieran series temporales largas.

Page 5: COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA: …

4

El análisis de la competencia en el mercado español de créditos durante la

década de los noventa utiliza esta aproximación. Los resultados obtenidos se comparan

con otras aproximaciones tradicionales para medir la competencia (como los ratios de

concentración, el número de participantes, etc). Los principales resultados muestran que

el mercado de créditos está aumentando su uniformidad para los clientes, lo cual se

interpreta como un paso hacia una situación más competitiva dentro de la integración de

los mercados europeos.

El trabajo tiene la siguiente estructura. En la sección segunda se presentan

algunos hechos relevantes sobre la ley de precio único en el mercado de créditos y

propone una forma de medir el grado de competencia en el mismo. La sección tercera

explica la evolución del mercado crediticio español durante los noventa y presenta los

resultados. La sección cuarta contiene las conclusiones del trabajo.

2. El precio en el mercado de créditos

Una de las cuestiones esenciales para los investigadores de la Economía

Industrial ha sido el estudio de la competencia en los mercados. El interés de esta

cuestión no surge sólo desde una perspectiva académica, aunque a diferente nivel en

cada país, las autoridades económicas han prestado atención al grado de competencia en

sus mercados con la intención de impulsarla. Por esta razón, lo estudios y mediciones

sobre la competencia han encontrado una mayor demanda que otros campos de la

Economía Industrial.

La amplia literatura sobre competencia ha tratado con esta cuestión desde

distintas perspectivas. Por un lado, la existencia de un margen entre el precio y el coste

marginal ha sido considerada como indicador de competencia imperfecta (véase por

ejemplo el trabajo de Bain (1951)). Sin embargo Demsetz (1974) plantea que este

margen podría ser debido a diferencias de eficiencia en algunas empresas. Por tanto,

esta línea de investigación ha tratado en qué medida estos márgenes se deben a una

tecnología más eficiente o a la existencia de poder de mercado (Sepherd (1986),

Ravenscraft (1983) o Maudos (1998) para el mercado bancario español). Sin embargo la

Page 6: COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA: …

5

Nueva Economía Industrial Empírica ha mostrado la dificultad de identificar estas dos

fuentes del margen entre el precio y el coste marginal (véase Bresnahan (1989)).

Otra línea de análisis se ha centrado en la identificación del comportamiento de

los participantes en un mercado cuya racionalidad se basa en estrategias no

competitivas. La investigación de estos comportamientos, desde un punto de vista

teórico, ha identificado barreras a la entrada, comportamientos líder-seguidor, contratos

exclusivos, etc. como comportamientos no-competitivos. la búsqueda de este tipo de

estrategias entre los participantes en mercados concretos ha dado lugar a una amplia

investigación empírica, en muchos casos impulsada por las autoridades encargadas de

vigilar la competencia (véase Gasmi et al. (1992) o Más (1999)).

La búsqueda de distintos precios para un mismo bien en distintos segmentos del

mercado (la ley de precio único) proporciona la base de otra aproximación empírica1. La

existencia de distintos precios, a través de los segmentos de un mercado, para un mismo

bien podría señalar la existencia de una falta de competencia en ese mercado

(discriminación de precios). Sin embargo Roberts y Supina (1996) muestran que precios

distintos para un mismo bien pueden estar justificados por factores como costes

distintos para cada cliente o cualquier otra heterogeneidad inobservable. Es necesario

reiterar que aislar dichos factores es complicado cuando, incluso en la situación de

competencia perfecta, las características de los clientes justifican que haya precios

distintos. Este es el caso del merado de créditos donde algunas de las características del

prestatario (como la probabilidad de bancarrota, la posición de la empresa en el

mercado, sus activos, etc.) desempeñan un papel esencial a la hora de fijar el precio

(esto es, el tipo de interés cargado). Por este motivo, la competencia en los mercados de

crédito no se ha evaluado a partir de contrastes sobre la ley de precio único.

Recientemente se han publicado algunos trabajos empíricos que han partido de esta idea

para medir la competencia en mercados específicos: Walsh y Whelan (1999) para los

comercios tradicionales de productos alimenticios en bienes como sopa, azúcar, café,

1 Por ejemplo, la Comisión Europea analiza periódicamente las diferencias en los precios en los distintos mercados nacionales para bienes homogéneos (como automóviles, llamadas telefónicas de larga distancia, etc.) como forma de medir la competencia en estos mercados a nivel europeo.

Page 7: COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA: …

6

etc.; Haskel y Wolf (1999) para los productos vendidos por la multinacional de muebles

IKEA.

En el merado de crédito el tipo de interés cargado al prestatario i en el momento

t (es decir, el precio) puede verse como la suma de tres componentes2:

ri,t = ct + fi + λi,t (1)

donde:

ri,t es el tipo de interés cobrado al prestatario i en el momento t.

ct es el coste de los fondos prestados en el momento t . Recogerá el tipo de

interés de la economía que dependerá, fundamentalmente, de la política monetaria y los

costes generales de los bancos (mantenimiento de la red de oficinas, empleados, etc.).

fi es el efecto específico del prestatario, vinculado a los costes (de los

fondos prestados) y que estará relacionado con todos aquellas características tales como

sus activos, el riesgo de bancarrota, la capacidad de generar fondos para devolver el

crédito, la reputación, etc. que serán constantes a corto plazo. Además, muy a menudo

los bancos no reconsideran todas estas características continuamente para un cliente que

tenga una reputación ante la entidad, lo cual hace a fi constante, al menos a corto plazo.

λi,t es el efecto específico del prestatario ligado a la competencia en el

mercado. Recoge todos aquellos elementos cuya naturaleza no es específica del

prestatario (que estarían en fi ), sino a la competencia en el mercado de créditos. Aunque

pudiera plantearse que este elemento no es específico del prestatario hay dos hechos que

obligan a rechazar esta hipótesis. Por un lado, la elasticidad de la demanda de fondos no

será necesariamente la misma para todas los clientes, por lo que en el caso de que exista

algún tipo de poder de mercado por los prestamistas (vendedores) habría distintos tipos

de interés (precios) . Por otro lado, la existencia de factores específicos del prestatario

(fi ) es conocida (aunque difícilmente medible), por todos los agentes. Por tanto, no

pueden saber en qué medida están siendo “sobrecargados”. El factor esencial de λi,t es,

por tanto, que cambiará en el tiempo dependiendo la situación competitiva del mercado 2 Nótese que esta línea de análisis se puede aplicar a los depósitos bancarios, dado que existen también factores específicos que afectan el tipo que los depositantes pueden obtener del banco.

Page 8: COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA: …

7

de créditos. En la medida en que el grado de competencia cambie en el tiempo, el

margen (spread) cargado sobre el precio competitivo 3 (ct + fi ) cambiará, y esta

variación no será necesariamente la misma para todos los prestatarios.

Por tanto, el grado de competencia en el mercado de créditos en un momento t0

podría medirse por la media (en i ) de λi,t , es decir

_

t0t0

_

t0

_

f - c - r =λ (2)

Sin embargo, la existencia de fi que es inobservable, hace inapropiada la

diferencia entre t0r y ct0 para medir el grado de competencia en este mercado (que sería

el margen precio coste marginal). Nótese que si este factor no existiese, el margen

precio coste t0r - t0c mediría el grado de competencia en este mercado, tal y como se ha

hecho en múltiples estudios.

Para tratar con factores como fi , que son inobservables, distintas técnicas

econométricas sugieren aislarlos y compensarlos utilizando un panel de datos en otros

contextos. En este trabajo utilizamos la misma idea: emplear datos de un mismo

conjunto de prestatarios en dos momentos del tipo para tratar adecuadamente este

elemento. Simplemente restando dos observaciones para un mismo cliente, tendremos:

cmpi,10 = λi,t1 – λi,t0 = r i,t1 – r i,t0 – ( ct1 – ct0 ) (3)

Empleando la ecuación (1), la evolución entre t0 y t1 de la competencia en el

mercado de créditos para el prestatario i se puede valorar por la diferencia entre el

cambio en el tipo de interés cargado (ri,t1 – ri,t0 ) y el cambio en el tipo de referencia (ct1

- ct0 ) . Por tanto el valor medio (en i ) de cmpi,10 indicará la evolución de la presión

competitiva en este mercado. Los valores negativos indicarán el paso a una situación

más competitiva, mientras que los valores positivos lo contrario.

3 En este caso el precio de competencia perfecta no es el coste marginal ct, sino que ha de incluir también el factor individual fi .

Page 9: COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA: …

8

La ecuación (3) sugiere también otra medida de la dimensión competitiva de este

mercado. Si no hubiera diferencias en cmpi,10 para los distintos compradores (es decir

cmpi,10 = cmpi’,10 ∀ i ≠i’) se estaría produciendo una situación equivalente a la que

indica la ley del precio único: cada cliente mantiene el mismo precio (que en este caso

supone un precio observado distinto ri,t = ct + fi + λi,t ). Por el contrario si cmpi,10 cambia

en función de los prestatarios, es debido a que algunos de ellos ven crecer este margen

mientras que otros lo ven disminuir. Es decir están teniendo lugar algunos cambios en la

dimensión competitiva del mercado entre estos dos momentos. Para medir la variación

en cmpi,10 en i podemos utilizar la varianza de esta variable. Una varianza igual a cero

supone que no ha habido ningún cambio en el “margen” sobre-cargado entre t0 y t1 . Por

el contrario, una varianza mayor supone que el “margen” cargado a los clientes ha

cambiado entre ellos.

Además, la asimetría de la distribución de la variable cmpi,10 proporcionará una

visión de una nueva dimensión de la competencia en el mercado. Una distribución

asimétrica a la derecha4 indica la existencia de un grupo relativamente pequeño de

prestatarios que no siguen, como el resto la disminución en los tipos de interés cargados

(o lo aumentan más), es decir es posible sobre-cargar más y más a este sub-conjunto de

clientes a lo largo del tiempo. Una distribución asimétrica a la izquierda muestra lo

contrario: la existencia de un grupo relativamente pequeño de prestatarios que está

obteniendo una ventaja y reduce el margen más (o lo aumenta menos) que el resto.

3. Análisis Empírico

El mercado Español de Crédito en los noventa

A lo largo de la década de los noventa, el mercado de crédito español ha llevado

a cabo un proceso de globalización de la actividad financiera y de modernización del

marco legal. Estos cambios se reflejan, fundamentalmente, en una pérdida de regulación

para hacer el sistema financiero más competitivo y eficiente. Los cambios legislativos

más importantes son la abolición de las restricciones territoriales a las cajas de ahorro

(1989), la liberalización de los tipos de interés regulados (1987), la gradual reducción de

4 Llamada también asimetría positiva, esto es cuando la mediana es menor que la media.

Page 10: COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA: …

9

los coeficientes de caja y el fin de las restricciones a la actividad bancaria extranjera (a

partir de la integración de España en la CEE). Todos estos cambios afectan a la

situación de competencia en el mercado bancario español y, como consecuencia, a las

relaciones con los clientes.

Uno de los hechos más destacados en el cambio legislativo son las

desregulaciones de los tipos de interés en los depósitos y en los créditos, que estuvo en

la base de las llamadas “guerra de pasivos” en 1989 y “guerra de activos” en 1993.

Estos sucesos motivaron un profundo cambio en el sistema bancario español

incrementando la competencia a través de los precios y servicios. Además, se ha

producido una importante reducción en los tipos de interés oficiales, y como

consecuencia, se ha producido una reducción en el MIBOR y en los tipos de interés que

se cobran a los clientes de ocho puntos porcentuales, como puede verse en el Gráfico 1,

para las empresas clientes a las que se realiza el análisis posterior.

[GRÁFICO 1]

Aunque al final de esta década los bancos extranjeros pueden establecer

libremente oficinas y proveer servicios, no se han acomodado plenamente en el sistema

bancario español (véase Cuadro 1). Entre las razones de ello, cabe destacar el número de

oficinas que los bancos nacionales poseen, un factor altamente apreciado por los

clientes nacionales5 que puede actuar como barrera a la entrada, y, además, el mejor

conocimiento de las preferencias de los clientes por estos mismos bancos (sobre todo en

la banca minorista). Por tanto, la competencia imperfecta puede surgir en este mercado

debido a la posibilidad de diferenciar el producto y las relaciones de fidelidad que se

suelen establecer entre bancos y clientes. Estos hechos, entre otros, explican la salida de

un gran número de bancos extranjeros del sistema minorista nacional que se ha

producido en esta década (por ejemplo el banco National Westminster, Credit Lyonnais,

Banque Nationale de Paris).

[CUADRO 1]

5 Es importante señalar las situaciones heterogéneas que se producen en Europa con estructuras contrapuestas. Mientras que en el Reino Unido hay sólo 2,5 oficinas por cada 10.000 habitantes, en el caso español este ratio alcanza 9,9.

Page 11: COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA: …

10

El último cambio, aunque no menos importante, que se ha producido en el

mercado de crédito español en estos años ha sido el proceso de concentración de las

entidades. Este proceso comenzó en 1988 con la fusión del Banco Bilbao y del Banco

Vizcaya, continuando a lo largo de los noventa. Además de las numerosas fusiones

producidas en las cajas de ahorro, en 1991 se crea el Banco Central Hispanoamericano y

la reorganización de la banca pública en la Corporación Argentaria. El Banco Santander

adquirió el Banco Banesto en 1994, y en 1999 se producen dos grandes fusiones, la

primera entre el Banco Santander y el Banco Central Hispano y la segunda entre el

Banco Bilbao Vizcaya y la Corporación Argentaria. El tamaño de las entidades ha

aumentado debido al proceso de fusiones y/o adquisiciones, lo cual produce un efecto

positivo en la reputación nacional e internacional del sistema bancario español. Sin

embargo, hay que tener en cuenta que un elevado grado de concentración puede tener

efectos negativos sobre la clientela de los servicios bancarios.

La situación en 1997 se caracteriza por la reducción en el número de

instituciones que operan en el mercado. Los cuatro mayores bancos poseen el 38,6% de

la actividad relacionada con los préstamos y el 51,2% de la actividad relacionada con

los depósitos (véase Cuadro 2), y el primer banco posee el 10,4% (de los préstamos) y

el 17,5% (de los depósitos). Esta misma tendencia se puede observar en la mayoría de

los países de la Unión Europea (véase Cebrián (1997) para una comparación).

[CUADRO 2]

Todos estos cambios, estimulados por la integración en un mercado financiero

europeo, han tenido un efecto significativo en la forma en que las instituciones

financieras compiten. Los hechos más destacados son la importante reducción en los

tipos de interés oficiales, la gran concentración de los préstamos (y depósitos) en un

número reducido de instituciones y la menor importancia que la esperada, de la banca

extranjera en el sistema nacional.

La fuente estadística

La fuente estadística utilizada para el análisis es la Encuesta Sobre Estrategias

Empresariales para el periodo 1991-1997. Se trata de una encuesta anual sobre la

actividad de las empresas manufactureras españolas llevada a cabo por el Ministerio de

Page 12: COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA: …

11

Industria. Es una muestra diseñada para ser representativa de la población de empresas

manufactureras, estratificada por tamaño y sector industrial.

Esta fuente estadística posee una serie de ventajas para el análisis de la

competencia en un mercado donde los compradores presentan diferencias que justifican

precios distintos. La principal es que proporciona el tipo de interés que las entidades de

crédito cobran a las empresas por los préstamos a corto plazo. Se escoge el tipo de

interés a corto plazo por varios motivos. Uno de ellos es la gran proporción de este tipo

de deuda con las entidades de crédito en el balance de las empresas (alrededor de un

49,4% del total de deuda con coste). Hay que señalar también que el tipo de interés a

corto plazo de las entidades de crédito tiene una alta correlación con el tipo de interés

del mercado interbancario, que es el que se suele emplear como referencia para este tipo

de operaciones.

Otra característica relacionada con la variable tipo de interés, es que la misma no

se obtiene (como otras fuentes estadísticas hacen) como el cociente entre los intereses

pagados y el total de la deuda. La muestra incluye 3.853 observaciones, que

corresponden a empresas manufactureras que obtienen recursos financieros de las

entidades de crédito para cada par de años entre 1991 y 1997.

Principales resultados estadísticos

El Gráfico 2 muestra la distribución de frecuencias de la variable cmpi,10 para

cada par de años. Una visión general muestra que la media es negativa (resultado que

coincide con la reducción en los tipos de interés en España en este periodo) e, incluso

sin considerar el valor atípico en 1992-91, la dispersión se reduce.

[GRÁFICO 2]

El Gráfico 2 se completa con los estadísticos descriptivos del Cuadro 3, que

ayudan a mostrar la dimensión competitiva desde la perspectiva planteada en la sección

2.

[CUADRO 3]

Page 13: COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA: …

12

En primer lugar, se debe señalar que la media sigue la evolución del MIBOR6,

con un valor negativo para cada par de años, excepto en 1992-91 que incrementa. Esta

reducción observada es un ligeramente menor (en media), si se compara con la

evolución del tipo de interés de referencia en estos préstamos (MIBOR), con dos

excepciones: 1993-92 y 1995-94. En 1993-92 los tipos de interés disminuyeron más de

lo que lo hicieron los tipos de interés de referencia; el motivo puede encontrarse en que

1993 fue un año caracterizado por la “guerra de activos”, que supuso una competencia

en el mercado de préstamos, caracterizada por las campañas publicitarias y por

importantes reducciones en los tipos de interés que llevaron a romper las reglas

establecidas. En 1995-94 el tipo de interés de referencia aumentó, mientras que los tipos

de interés que las empresas pagaron disminuyeron; la razón de ello se encuentra en la

adaptación de España a un nuevo contexto caracterizado, por la ya comentada, entrada

de la Segunda Directiva Bancaria. Lógicamente, no es de esperar que los resultados de

los cambios producidos en el sistema tengan resultados inmediatos; de todas formas las

entidades de crédito ante estas nuevas perspectivas, pueden verse estimuladas a adoptar

estrategias más competitivas para adaptarse a los cambios en la regulación.

Las entidades de crédito han sido reticentes a transmitir las reducciones en los

tipos de interés de referencia a sus clientes, es decir, intentan utilizar esa reducción en el

coste para incrementar sus márgenes. En 1994-93 y 1997-96 estas reducciones fueron

de 3,68 y 2,12 puntos respectivamente, y sólo el 22,7% y el 25,8% de las empresas

clientes obtuvieron reducciones menores a los tipos de interés de referencia. Este

resultado es especialmente importante dada la importante concentración bancaria

producida en este periodo, pudiendo interpretarse como un indicador de que las

entidades de crédito están tomando posiciones de ventaja en las relaciones con sus

clientes7. Este resultado no debe sorprender si se presta atención a otras variables que

muestran la dimensión competitiva de este mercado. Como se ha señalado, la

6 Las diferencias observadas con el Gráfico 1 están motivadas porque los cálculos del Cuadro 3 se realizan con las empresas que piden prestado a las entidades de crédito dos años consecutivos. 7 Hay que señalar en este punto, los continuos avisos realizados por los agentes económicos (e incluso el Ministerio de Economía) en esta última parte del periodo. Señalan que las entidades de crédito son demasiado reticentes a adaptar sus tipos de interés a la evolución de los tipos oficiales, y que deben de tomarse medidas para “animarles” a ello.

Page 14: COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA: …

13

concentración ha aumentado, por tanto, los agentes han tomado la apertura del mercado

a la competencia extranjera como algo que no les iba a afectar en su desarrollo.

En segundo lugar, la dispersión en el cambio de los tipos de interés que las

empresas pagan por los recursos financieros ha disminuido, tal y como se muestra con

la varianza en cada periodo (resultado que se confirma con otras medidas como el rango

intercuartílico incluido en el Cuadro 3). Esta menor variabilidad (entre empresas) indica

que el mercado crediticio evoluciona hacia una menor discriminación entre las empresas

que obtienen recursos de las entidades de crédito8. Además, el margen que se observa en

cada periodo está vinculado a fi, características de la empresa que justifican diferencias

en los tipos de interés a corto plazo pagados, haciendo λi,t menos importante.

El análisis de la asimetría de la distribución, muestra que hay una asimetría

positiva (a la derecha, la media es mayor que la mediana) en todos los años, excepto en

1993-92 y 1995-94. La evolución de la competencia en el mercado crediticio, excepto

en esos dos años, ha influido de una misma forma a la mayor parte de participantes,

aunque hay que señalar que siempre se observa un conjunto reducido de empresas que

no se ven beneficiadas. Además, en 1992-91 el cambio en la situación competitiva

supuso que para la mayoría de las empresas, más del 60%, obtuvieran una reducción en

el spread consiguiendo una situación más favorable. En los años cuando la media del

spread disminuyó (1993-92 y 1995-94) la asimetría es negativa, mostrando la dificultad

de obtener ventajas superiores a la media en un entorno más competitivo.

4. Conclusiones

La competencia es un factor esencial para alcanzar una asignación eficiente de

los recursos. Cuando el grado de competencia en el mercado tiene implicaciones sobre

el resto de la economía (como sucede con los préstamos que condicionan los proyectos

de inversión, el desarrollo de las empresas, etc.), el interés en medirlo es mayor. Esta

ponencia se centra en la estructura del mercado crediticio español en la década de los

noventa, motivada por las importantes consecuencias de la integración de los mercados

8 Desde un punto de vista teórico, este resultado no tiene que implicar necesariamente que el mercado sea más competitivo; puede suceder que el mercado tienda hacia una monopolización.

Page 15: COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA: …

14

bancarios europeos. Los principales cambios se han llevado a cabo en un marco de

globalización de la actividad financiera, con una reducción de regulación para hacer el

sistema financiero más competitivo y eficiente, y con una apertura a la competencia

europea derivada de la Segunda Directiva Bancaria.

La propuesta de esta ponencia es analizar la evolución de la competencia en el

mercado crediticio comparando los tipos de interés pagados por las empresas. La

aproximación utilizada se basa en comprobar si las diferencias entre los tipos de interés

cobrados a las empresas están influenciados por el no cumplimiento de la ley de un

precio único. Se utilizan la comparación intertemporal para aislar y evaluar la presión

competitiva.

El estudio del mercado crediticio español ha mostrado que, durante la década de

los noventa, los tipos de interés cobrados a las empresas han tenido una disminución

ligeramente inferior a los tipos de interés que las entidades de crédito toman como

referencia. Por tanto, el spread ha aumentado, mostrando que los bancos incrementan su

posición predominante en sus relaciones con las empresas clientes. Este resultado es

consistente con el incremento en la concentración de este mercado que se había

observado. Además se han observado dos hechos importantes: una menor variabilidad

en los cambios en los tipos de interés cobrados y una asimetría positiva en la

distribución. Esto sugiere que en la industria española, sólo un porcentaje reducido de

las empresas han tomado ventaja de los cambios en la regulación del mercado crediticio,

mientras que la mayoría de ellas han tenido dificultad para ver como los tipos de interés

que pagan por los recursos financieros se adaptan a la reducción en el tipo de interés

interbancario a corto plazo; consecuentemente, pasan a tener una posición desventajosa

respecto al resto de agentes. Dado que existe un alto consenso en el papel que las

fricciones financieras tienen en las decisiones de inversión de las empresas (al incidir en

las posibilidades de internacionalización, adaptación a las nuevas tecnologías, proyectos

de inversión, etc.) muchas de sus decisiones quedarán determinadas por el coste de los

fondos externos que obtienen y se verán influenciadas por la situación de competencia

en el mercado crediticio.

Page 16: COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA: …

15

BIBLIOGRAFÍA

Bain, J. (1951). “Relation of Profit Rate to Industry Concentration: American

Manufacturing, 1936-1940”, Quarterly Journal of economics, vol. 65, págs. 293-

334.

Bresnahan, T. F. (1989). “Empirical studies of industries with market power” en R.

Schmalense and R.D. Willig (eds), Handbook of Industrial Organization, vol. 2,

North-Holland, págs. 1011-1055.

Cebrián, J. (1997). “Concentración del sistema bancario español en el período 1980-

1995”. Boletín Económico del Banco de España, págs. 79-102.

Demsetz, H. (1974). “Two systems of Belief About Monopoly”, enn H. Goldsmid et al.

(eds), Industrial Concentration: The new learning, Little, Brown and Company

(inc.), Boston, págs. 164-184.

Dermine, J. (1993). European Banking in the 1990s. Blackell Publishers.

Fraile, P. (1998). "La retórica contra la competencia en España (1875-1975)" Ed. F.

Argentaria - Visor, Madrid

Gasmi, F. et al (1992). “Econometric Analysis of Collusive Behaviour in a Soft-Drink

Market”, Journal of Economics and Management Strategy, vol. 1,num. 2, págs.

277-311.

Haskel, J. and H. Wolf (1999). “Why Does the ‘Law of One Price’ Fail? A Case Study”,

CEPR Discussion Paper num. 2187.

Más, F. J. (1999). “Dynamic Analysis of Competition in Marketing; Strategic Groups in

Spanish Banking”, International Journal of Bank Marketing, vol. 17, num. 5,

págs. 233-250.

Maudos, J. (1998). “Market Structure and Performance in Spanish Banking Using a

Direct Measure of Efficiency”, Applied Financial Economics, vol. 8, num. 2,

págs. 191-200.

Neusser, K. and M. Kugler (1998). “Manufacturing Growth and Financial

Development: Evidence from OECD Countries”, Review of Economics and

Statistics, vol. 80, (November), págs.638-646.

Ravenscraft, D. (1983). “Structure-Profit Relationships at the Line of Business and

Industry Level”, Review of Economics and Statistics, vol. 65, (Febrero) págs. 22-

31.

Page 17: COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA: …

16

Roberts, M. J. and D. Supina (1996). “Output Price, Markups, and Producer Size”,

European Economic Review, vol. 40, págs. 909-921.

Shepherd, W. G. (1986). “Tobin’s q and the Structure-performance Relationship:

Comment”, American Economic Review, vol. 76, págs. 1205-1210.

Vives, X. (1991). “Banking Competition and European Integration”, en A. Giovanny y

C. Mayer (eds), European Financial Integration, Cambridge University Press,

págs. 9-31.

Walsh, P. P. and C. Whelan (1999). “Modelling Price Dispersion as an Outcome of

Competition in the Irish Grocery Market”, Journal of Industrial Economics, vol.

47, págs. 325-343.

Page 18: COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA: …

17

CUADRO 1

Bancos Extranjeros en España

1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997

Número de instituciones

-Nacionalesa 207 206 200 197 202 198 193

-Extranjerosb 60 65 68 79 76 74 70

Número de empleados*

-Nacionalesa 238,9 234,5 228,5 224,3 225,6 222,4 221,0

-Extranjerosb 10,3 10,4 10,3 14,2 11,1 11,2 11,6

Número de oficinas

-Nacionalesa 31.288 31.668 31.412 31.229 32.215 32.868 33.260

-Extranjerosb 730 801 836 1.348 976 1.033 1.041

aLos Bancos nacionales incluyen los Bancos y Cajas de Ahorro. bLos Bancos extranjeros y asimilados (como BNP España, Barclays Bank, Chase Manhattan Bank CMB, etc.). *en miles. Fuente: Banco de España y AEB.

CUADRO 2

Concentración del Sistema Bancario Español (residentes)*

(porcentaje)

1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997

Préstamos

-CR1 17,5 15,3 14,4 13,4 12,8 11,4 10,4

-CR4 46,3 45,2 42,4 42,7 40,6 40,8 38,6

Depósitos

-CR1 13,3 13,3 13,3 14,1 14,7 15,4 17,5

-CR4 39,9 40,5 40,5 43,5 46,0 47,8 51,2

*Los datos corresponden a grupos bancarios. Fuente: Banco de España, CECA y AEB.

Page 19: COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA: …

18

CUADRO 3

Estadísticos descriptivos de la diferencia ri,t+1 – ri,t

a % de empresas. Fuente: Encuesta sobre Estrategias Empresariales.

1992/91 1993/92 1994/93 1995/94 1996/95 1997/96

Número de empresas 470 566 643 718 701 755

Evolución Mediana 0,0 -2,0 -2,0 0,0 -2,0 -2,0 Media 0,14 -2,15 -1,76 -0,40 -1,87 -1,67

Dispersión Varianza 9,05 8,93 7,95 6,06 4,43 3,00 1er cuartil -1,0 -4,0 -3,0 -1,0 -3,0 -3,0 3er cuartil 1,0 -1,0 0,0 1,0 -1,0 -1,0 Rango IQ 2,0 3,0 3,0 2,0 2,0 2,0

Asimetría Coef. Pearson 0,14 -0,16 0,25 -0,48 0,18 0,56 Variación menor que la mediaa 61,7 41,9 55,4 42,3 59,1 55,3

Diferencias MIBOR 0,11 -1,65 -3,68 1,35 -1,87 -2,12

Variación menor que el MIBORa 61,7 61,8 22,7 87,7 59,1 25,8

Page 20: COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA: …

19

GRÁFICO 1

Fuente: Banco de España y Encuesta sobre Estrategias Empresariales (Muestra total).

Evolución de los tipos de interés

4

6

8

10

12

14

16

18

1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997

Año

Tip

o(%

) MIBOR

MEDIA

1er CUARTIL

3er CUARTIL

Page 21: COMPETENCIA EN EL MERCADO CREDITICIO EN LOS NOVENTA: …

20

GRÁFICO 2

Histogramas de la variación de los tipos de interés

1992-91

0

20

40

60

80

100

120

140

160

180

-32 -30 -28 -26 -24 -22 -20 -18 -16 -14 -12 -10 -8 -6 -4 -2 0 2 4 6 8 10 12 14 16 18 20

Diferencia de tipos de interés

mer

o d

e em

pre

sas

1993-92

0

20

40

60

80

100

120

-20 -19 -18 -17 -16 -15 -14 -13 -12 -11 -10 -9 -8 -7 -6 -5 -4 -3 -2 -1 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20

Diferencia de tipos de interés

mer

o d

e em

pre

sas

1994-93

0

20

40

60

80

100

120

-20 -19-18-17-16 -15-14-13 -12-11-10 -9 -8 -7 -6 -5 -4 -3 -2 -1 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20

Diferencia de tipos de interés

mer

o d

e em

pre

sas

1995-94

0

50

100

150

200

250

-20 -19-18-17 -16-15-14 -13-12 -11-10 -9 -8 -7 -6 -5 -4 -3 -2 -1 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20

Diferencia de tipos de interés

mer

o d

e em

pre

sas

1996-95

0

50

100

150

200

250

-20-19 -18-17-16 -15-14-13 -12-11-10 -9 -8 -7 -6 -5 -4 -3 -2 -1 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20

Diferencia de tipos de interés

mer

o d

e em

pre

sas

1997-96

0

50

100

150

200

250

-20-19 -18-17-16 -15-14-13 -12-11-10 -9 -8 -7 -6 -5 -4 -3 -2 -1 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20

Diferencia de tipos de interés

mer

o d

e em

pre

sas