clasificación de áreas potenciales para reforestación en

51
Clasificación de áreas potenciales para reforestación en la serranía del Uchumachi, región Nor Yungas, departamento de La Paz, Bolivia Patrocinante: Sr. Víctor Gerding S. Trabajo de Titulación presentado como parte de los requisitos para optar al Título de Ingeniero Forestal ERICO HEINZ KUTCHARTT RUEDLINGER VALDIVIA 2013

Upload: others

Post on 25-Jun-2022

6 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

la serranía del Uchumachi, región Nor Yungas,

departamento de La Paz, Bolivia

Patrocinante: Sr. Víctor Gerding S.

Trabajo de Titulación presentado como

parte de los requisitos para optar al

Título de Ingeniero Forestal

ERICO HEINZ KUTCHARTT RUEDLINGER VALDIVIA

2013

Page 2: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

i

Calificación del Comité de Titulación

Nota

Patrocinante: Sr. Víctor Gerding S. 6,0

Informante: Sr. Óscar Thiers E. 6,2

Informante: Sr. Víctor Sandoval V. 6,0

El patrocinante acredita que el presente Trabajo de Titulación cumple con los requisitos de contenido y

de forma contemplados en el Reglamento de Titulación de la Escuela. Del mismo modo, acredita que

en el presente documento han sido consideradas las sugerencias y modificaciones propuestas por los

demás integrantes del Comité de Titulación.

_____________________________

Sr. Víctor Gerding S.

Page 3: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

ii

AGRADECIMIENTOS

Quisiera expresar mis más sinceros agradecimientos al Dr. Víctor Gerding, gran responsable de mi

interés por las Ciencias Forestales, persona que me abrió las puertas de esta Facultad cuando aún me

encontraba en mi etapa de enseñanza media, del cual he recibido un apoyo incondicional en todo mi

recorrido universitario y que ha dedicado un tiempo muy valioso en las correcciones y sugerencias de

esta tesis.

También quisiera agradecer a mis profesores informantes, Dr. Víctor Sandoval y Dr. Óscar Thiers,

por su esfuerzo y dedicación en mi formación como profesional, personas que me han motivado día a

día a esforzarme y entregar lo mejor de mí en lo académico. Muchas gracias por sus consejos y ayuda.

Agradezco también al Lic. Rubén Darío Gómez, director de investigaciones de la Unidad

Académica Campesina de la Universidad Católica Boliviana, quien me entregó todo su apoyo y

confianza en el desarrollo de este trabajo.

Asimismo quisiera agradecer a Carlos Garay y Silvia Alemán, por haberme acogido de manera

desinteresada en tierras bolivianas, su hospitalidad y solidaridad hacia mi persona, guardan un grato

recuerdo en mi corazón.

Además, agradezco a las siguientes personas por su colaboración en la recopilación de la literatura

y ayuda en la elaboración cartográfica de esta tesis, vayan mis más sinceros agradecimientos a: Stephan

Beck, Elmer Cuba, Emilia García, Francisco Mamani, Humberto Sainz, José Luis Beltrán, Pablo

Rubio, Johannes Horstmann, Silvia Diez y Paul Dassori.

Por último, quisiera agradecer a los amigos que me han acompañado durante en este largo camino,

quienes siempre me han entregado su amistad y ayuda en todo momento, vaya un especial

agradecimiento a: Federico An-der Fuhren, Manuel Rocha, Carolina Holmqvist, Luis Luna, Fernando

Navia, Alejandro Aguirre, Rodrigo Labbé, Cristian Flandes y Rodrigo Inzunza.

Page 4: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

iii

DEDICATORIA

A mis padres Erico Kutchartt y Gabriela Ruedlinger

Por su amor y apoyo incondicional

A mi tía Adriana Sánchez

Persona que me enseñó a escribir mis primeras letras

A Carolina Rosenkjaer

Quien llena mi corazón de alegría

Page 5: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

Índice de materias Página

i Calificación del Comité de Titulación i

ii Agradecimientos ii

iii Dedicatoria iii

iv Resumen iv

1 INTRODUCCIÓN 1

2 ESTADO DEL ARTE 2

2.1 Situación actual de los bosques en Bolivia 2

2.2 Bosques montanos húmedos 3

2.3 Estado actual de la serranía del Uchumachi 4

2.4 La cuenca hidrográfica del Uchumachi 5

2.5 Aplicaciones de técnicas cartográficas y de teledetección 6

3 MÉTODOS 7

3.1 Descripción del área de estudio 7

3.1.1 Clima 8

3.1.2 Suelo 8

3.1.3 Vegetación y fauna 9

3.2 Generación de la cartografía de la serranía del Uchumachi 10

3.3 Creación de capas topográficas 13

3.3.1 Modelo de elevación 14

3.3.2 Modelo de pendiente 15

3.4 Clasificación de áreas potenciales para la reforestación del Uchumachi 15

4 RESULTADOS 18

4.1 Uso actual de suelo en la serranía del Uchumachi 18

4.2 Superficie del terreno según elevación y pendiente 19

4.3 Áreas potenciales de reforestación 20

4.3.1 Cuantificación de cada categoría de área prioritaria 20

4.3.2 Identificación de estas áreas dentro de la serranía del Uchumachi 22

5 DISCUSIÓN 23

6 CONCLUSIONES 26

7 REFERENCIAS 27

Anexos 1 Mapa de Bolivia por regiones

2 Localidades en la serranía del Uchumachi

3

4

5

Red hidrográfica en la serranía del Uchumachi

Formularios de reconocimiento de suelos en la ladera oeste y este

de la serranía del Uchumachi, sectores Carmen Pampa y Cochuna,

departamento de La Paz

Sistema general de clasificación de uso de suelo

6 Mapa modelo de elevación

7 Mapa modelo de pendiente

8 Pautas para determinar la capacidad de uso en los suelos

Page 6: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

iv

RESUMEN

El bosque premontano del Uchumachi, pertenece a la región de los Nor Yungas del departamento de La

Paz en Bolivia, es un ecosistema frágil que actualmente se encuentra en un estado de conservación

crítico debido a la deforestación desproporcionada que ha sufrido en las últimas tres décadas. En una

superficie de 3.603 hectáreas, durante el período 1975-2005 se deforestaron 647 hectáreas, creando

graves problemas de erosión y degradación en los suelos e indirectamente en el recurso hídrico. Para

contribuir con información de utilidad para contrarrestar los daños, se propuso una clasificación de

áreas potencialmente reforestables dirigida a los sectores más críticos que requieran protección del

suelo en de la serranía del Uchumachi, según criterios de uso actual de suelo, pendiente del terreno y

elevación. En la cartografía levantada se identificaron 485,3 hectáreas reforestables. Se clasificaron 196

hectáreas, es decir, el 40,4 % de la superficie total a reforestar, en tres categorías: la prioridad 1 obtuvo

una superficie de 78,4 hectáreas, la prioridad 2 sumó 13,6 hectáreas y la prioridad 3 resultó con 103,6

hectáreas. Los polígonos de áreas prioritarias para reforestación se concentraron principalmente en la

ladera este y hacia el sur en el municipio de Coripata, entre las comunidades de Capillania, San Jacinto,

Cochuna, Santa Bárbara, Arapata, Trinidad Pampa y Chovacollo.

Palabras clave: uso actual de suelo, pendiente del terreno, elevación, teledetección, sistema de

información cartográfica.

Page 7: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

1

1. INTRODUCCIÓN

Los Yungas es una de las regiones ecológicas del departamento de La Paz, en Bolivia, con mayor

valoración en términos de potencialidad de recursos, calidad escénica y de prestación de servicios

ecosistémicos. Sin embargo, los ecosistemas naturales de esta región han sido prácticamente

transformados en su totalidad por la actividad humana, notándose un avance en la frontera agrícola,

consecuencia de la tala indiscriminada, el sobrepastoreo y la quema para la habilitación de los terrenos

para cultivos, principalmente de cítricos (Citrus spp.) y coca (Erythroxylum coca). La región de Los

Yungas es una importante zona agrícola del país, que proporciona a la ciudad de La Paz parte

importante de sus productos alimenticios, especialmente frutos tropicales, y también produce para la

exportación de café (Coffea spp.), cacao (Theobroma cacao), té (Camellia sinensis) y coca.

El cerro Uchumachi se encuentra dividido entre los municipios de Coroico y Coripata; es decir,

posee una división política, por lo que conlleva una administración por parte de ambos municipios, lo

que dificulta la toma de decisiones, respecto a la gestión que se desea desarrollar en dicha área. La

serranía del Uchumachi, alberga en su interior a 33 comunidades rurales, 27 de las cuales pertenecen al

municipio de Coroico. Dichas comunidades, a través del tiempo, han sufrido daños económicos y

ambientales, como sequías, erosión de suelos, cambios en la vegetación, pérdida de vegetación y,

principalmente, falta de agua para consumo y riego.

La gran problemática se centra en la disminución del abastecimiento de agua para las comunidades

rurales, siendo la serranía del Uchumachi un centro generador de agua por excelencia, debido a que es

un formador de ríos por la acumulación de nubosidad y lluvias orográficas constantes. Esta área provee

de agua a una población cercana a los 11.000 habitantes, lo que hace indispensable trabajar en

proyectos que puedan ser capaces de contrarrestar los cultivos agrícolas en las áreas inadecuadas y, por

lo tanto, mitigar los daños causados por las malas prácticas en la agricultura.

A nivel mundial, los bosques montanos húmedos son ecosistemas frágiles, lo que indica que el

cerro Uchumachi es un ecosistema de alta fragilidad ecológica, sin embargo, por lo visto anteriormente,

no ha tenido los cuidados que se requiere para un desarrollo sustentable. Es por ello que se desea

trabajar en una propuesta de clasificación de áreas potenciales para una reforestación, tomando como

objetivo central la protección del suelo.

Debido a la dificultad de reforestar un área tan extensa y heterogénea, se necesita de herramientas

que puedan facilitar y optimizar los recursos. Entre tales herramientas, es de utilidad la aplicación de

Page 8: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

2

técnicas cartográficas y de teledetección, que permiten desarrollar procesos de análisis, planificación,

gestión y control de los recursos físicos ambientales y socioculturales.

Un proyecto de reforestación sería una buena alternativa en la recuperación de bosques degradados

y permitiría evitar el proceso de erosión y degradación en los suelos. Previo a la reforestación, es

importante identificar las áreas críticas, ya que muchas veces los recursos son escasos para este tipo de

proyectos. Las prioridades deben contemplar aspectos técnicos que justifiquen la reforestación,

permitiendo así un trabajo dirigido hacia las áreas más alteradas, permitiendo de esta manera una

recuperación gradual en los ecosistemas boscosos y la protección del suelo. La presencia de bosques en

áreas de fuertes pendientes entregaría una mayor protección al suelo con respecto al uso agropecuario

actual, impidiendo los frecuentes deslizamientos de tierra y cortes de caminos, situación habitual entre

los municipios de Coroico y Coripata.

El objetivo general es identificar y clasificar áreas prioritarias para reforestación, que permitan

planificar una recuperación sectorizada de las áreas degradadas en la serranía del Uchumachi. Los

objetivos específicos son: (i) realizar un catastro que clasifique y cuantifique el uso actual en las

categorías de áreas urbanas, terrenos agrícolas, praderas, matorrales, bosques, afloramientos rocosos y

áreas desprovistas de vegetación, (ii) desarrollar un método para identificar las áreas críticas que

requieran de una protección urgente del suelo y (iii) cuantificar áreas piloto respecto a la superficie de

suelo según prioridades para la reforestación.

2. ESTADO DEL ARTE

2.1 Situación actual de los bosques en Bolivia

Bolivia es un país que cuenta con una gran variedad de formaciones vegetales, encontrándose

desde bosques amazónicos hasta vegetación altoandina. Según Killeen et al. (1993), el país posee una

superficie boscosa de 50.000.000 hectáreas, lo que equivale a casi un 44 % de la superficie del país.

Bolivia congrega cuatro regiones fitogeográficas de Sudamérica según criterios de clima, altitud y

geomorfología: Los Andes, la Amazonía, el Cerrado y el Gran Chaco (Killeen et at. 1993).

Según FAO (2004), debido a la poca claridad legislativa sobre el uso de los suelos, en el año 1995

la tasa de deforestación en Bolivia aumentó, llegando a 168 mil hectáreas, de las cuales 80 mil

hectáreas correspondían a la Amazonía, representando el 2,0 % de la tasa de deforestación del total de

Page 9: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

3

América Latina. Otro autor señala que el promedio de la tasa de deforestación entre los años 1971-2005

fue de 140.000 hectáreas anuales, alcanzando a 275.128 hectáreas en el año 2004 y 281.283 hectáreas

en el año 2005 (Muñoz 2006). Las áreas de mayor deforestación se encuentran en las ecoregiones del

bosque chiquitano, el Gran Chaco y en los alrededores de la ciudad de Santa Cruz (Cuba 2007) (cuadro

1) (anexo 1). La deforestación en estas áreas se ha generado principalmente por la colonización

extranjera a partir de mediados del siglo pasado. Los inmigrantes mayoritariamente japoneses,

invitados por el gobierno boliviano, se han transformado en el motor del desarrollo económico de la

región.

Cuadro 1. Deforestación por departamentos (modificado de Cuba 2007).

Departamento Período

(años)

Tasa de deforestación

(ha año-1

)

Fuente

Santa Cruz 2005 214.033 Muñoz (2006)

1993 – 2000 203.243 BOLFOR (2001)

1978 – 2001 66.846 Superintendencia agraria (2001)

Pando 2005 29.420 Muñoz (2006)

Beni 2005 23.978 Muñoz (2006)

Cochabamba 2005 6.905 Muñoz (2006)

Tarija 2005 3.848 Muñoz (2006)

La Paz 2005 2.344 Muñoz (2006)

1978 – 2001 17.614 La Prensa (2004)

La deforestación, acompañada normalmente de la quema, produce impactos significativos en el

suelo, como la pérdida de la estructura que se traduce en una mayor densidad aparente y en una pérdida

de porosidad (Gutiérrez 2006). Además, posterior a una quema, la cobertura de cenizas, puede ser

levantada por el viento o transportada por el escurrimiento de las lluvias, o puede haber pérdida de

bioelementos por lixiviación, mermando la fertilidad (Holdridge 2000).

2.2 Bosques montanos húmedos

Los bosques montanos húmedos pertenecen a la ecoregión Los Andes, se encuentran en las faldas

orientales de Los Andes, cubren una superficie cercana a 15.000.000 hectáreas (Kessler y Beck 2001),

lo que corresponde al 13,7 % del territorio nacional de Bolivia. Se presentan en cadenas montañosas

con lomas y laderas anchas, y con quebradas y valles estrechos. Los bosques montanos están adaptados

a suelos pobres en nutrientes y cubren sus requerimientos principalmente desde la materia orgánica

Page 10: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

4

(Bach et al. 2003). Estos suelos están marcados por acidificación muy fuerte (pH ≤ 4,5 en el subsuelo y

pH < 4 en los horizontes A y O), capacidad de intercambio catiónico muy baja (< 5 cmol kg-1

), alta

saturación de aluminio (superior al 70-90 % a profundidad ≥ 50 cm), proporción entre carbono y

nitrógeno mayor de 20 y un horizonte orgánico muy grueso, alrededor de 30 cm (Bach et al. 2003).

El clima en los bosques montanos es húmedo a subhúmedo. En la región de Los Yungas, las

precipitaciones en bosques húmedos de pie de monte, bosques montanos y ceja de monte van de menos

de 800 mm hasta más de 7.000 mm anuales (Müller et al. 2004). Sin embargo, Killeen et al. (1993)

mencionan que en bosques montanos húmedos se estima una precipitación anual entre 2.500 y 3.500

mm. La temperatura promedio anual fluctúa entre 17 °C y 24 °C (Killeen et al. 1993). Según Vergara

(2007), en un período de 10 años, la temperatura promedio más alta se dio en el mes de enero (sobre 19

°C) y, las temperaturas promedio más bajas, entre los meses de junio y julio (15 °C). Se registra una

temperatura máxima de alrededor de 25 °C y la más baja de 15 °C, mientras que la humedad relativa

del aire es del 100 % en la noche y baja a un 50 % durante el día.

Las formaciones vegetales en un bosque montano húmedo corresponden a los bosques más

diversos en Bolivia y están conformadas, principalmente, por especies de las familias: Moraceae,

Sapotaceae, Lauraceae, Euphorbiaceae, Meliaceae, Burseraceae, Sapindaceae, Piperaceae, Rubiaceae,

Leguminosae y Araliaceae (Killeen et al. 1993). La estructura de estos bosques, según Bascopé (2005),

varía en un rango de altura, entre 5 y 35 m, y en un rango diamétrico entre 10 y 60 cm, concentrándose

la mayoría de los árboles en las clases diamétricas menores. Estos bosques se caracterizan, además, por

la abundancia y diversidad de epifitas y musgos, qué bajan ligeramente hacia bosques montanos

siempreverdes (Müller et al. 2002).

2.3 Estado actual de la serranía del Uchumachi

Algunas poblaciones locales han intentado extender sus áreas de cultivo y producción hacia el área

del Uchumachi, lo que ha sido dificultado o imposibilitado por las pendientes pronunciadas que existen

en todo el contorno de este cerro (Coroico 2003). Sin embargo, en el sur del Uchumachi, por el área de

Trinidad Pampa y Arapata (anexo 2), existen mejores condiciones topográficas para el desarrollo de la

agricultura. Es por ello que se ha hecho un uso productivo de esta área a través de la construcción de

terrazas de cultivo, lo que ha provocado fuerte erosión y ha transformado a esta zona en una de las más

afectadas últimamente. Prueba de ello es la escasez de agua en las épocas secas del año, en donde el

abastecimiento de agua para la población se lleva a efecto a través de camiones aljibes.

Page 11: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

5

La tasa anual de deforestación en la serranía del Uchumachi, estimada para el período 1975-2005,

fue de 29 %, lo que significa que anualmente se deforestaron en promedio 22 hectáreas (Cuba 2007).

Es decir, se han deforestado aproximadamente 647 hectáreas en las últimas tres décadas (cuadro 2).

Cuadro 2. Deforestación en la serranía del Uchumachi por períodos (modificado de Cuba 2007).

N° Período

(años)

Bosque inicial Bosque final Diferencia Tasa

Superficie (ha) ha año-1

I 1975-1987 2.225,8 1.776,7 449,1 37,4

II 1987-1994 1.776,7 1.724,4 52,2 7,5

III 1994-1999 1.724,4 1.700,8 23,6 4,7

IV 1999-2005 1.700,8 1.579,1 121,7 20,3

Total 1975-2005 2.225,8 1.579,1 646,7 21,6

Según Cuba (2007), durante las últimas tres décadas, la superficie de cultivos de coca muestra un

crecimiento acelerado. El autor menciona que en 1975 habían menos de 2.000 hectáreas, mientras que

en el año 2005 serían más de 18.000 hectáreas en la región de Los Yungas. La posibilidad de reforestar

los terrenos dañados por el cultivo de la coca está muy condicionada, ya que áreas con asentamientos

humanos o cultivos de coca podrían no ser aceptados por los agricultores como sitios de reforestación.

Sin embargo, se tiene el apoyo de las políticas de consenso de las comunidades locales, que no

permiten cultivos a partir de los 2.000 m s.n.m (Gutiérrez 2006). Un informe de la FCDI (2007),

menciona que hay 14 comunidades rurales que participan a través de talleres en la elaboración de un

plan de manejo y conservación del Uchumachi, que busca mejorar y conservar esta área. Actividades

como fiscalización, reglamentos internos, capacitación, concientización, reforestación y agroforestería

son prioridades para la elaboración e implementación del plan de manejo y conservación del

Uchumachi.

2.4 La cuenca hidrográfica del Uchumachi

La provincia de los Nor Yungas deposita sus caudales en los afluentes de la cuenca amazónica,

siendo el río Alto Beni el principal receptor de dichos afluentes. Uno de los ríos más importantes es el

río Unduavi, que se constituye en el límite natural de la provincia, siendo posteriormente afluente del

río Tamanpaya, que recibe aguas de los ríos Peri, San Isidro y Jankho, entre otros (Cuba 2007). El río

Alto Beni alberga a la subcuenca del río Coroico, con una longitud de 130 km y que tiene sus nacientes

Page 12: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

6

en los ríos Tiquimani e Illampu, los cuales nacen de procesos de deshielo de glaciares actuales y

rebalse de lagunas de origen glacial.

El área del Uchumachi se encuentra rodeada por los ríos Coroico – San Juan al sudoeste y del río

Santa Bárbara al este. La zona del Uchumachi es muy importante por ser un centro generador de agua y

pluviogenético, es decir, formador de ríos por la acumulación de nubosidad y lluvias orográficas

constantes (Gutiérrez 2006). El río Coroico forma los ríos San José, Santa Elena, Cedro, San Juan,

Kanuquika y Huarinilla, mientras que el río Santa Bárbara forma los ríos San Cristóbal, San Jacinto,

Santa Teresa, Vagantes, Huaña Jahuira y Conlaya (Grájeda 2003) (anexo 3).

Durante el mes de octubre se produce un incremento en los caudales, que alcanzan su mayor grado

en los meses de enero y febrero, para disminuir entre abril y mayo. Los meses de enero y febrero

coinciden con las grandes riadas y avenidas que afectan fuertemente valles y terrazas bajas en las zonas

de aluvión (Coroico 2003). El período con menor actividad está considerado entre los meses de junio y

septiembre, en donde el río Coroico, en la confluencia con el río Huarinilla, tiene un caudal

aproximado de 45 m3 s

-1.

El valor de los bosques del Uchumachi para un buen estado de conservación para la calidad y

cantidad de agua es indiscutible (GTZ 2005). Un bosque, mientras más denso y multiestratificado sea,

liberará un menor excedente de agua que bosques ralos u otro tipo de vegetación menor, debido a su

alto nivel de evapotranspiración. Sin embargo, tiene la ventaja de dar una mayor regularidad en su

caudal y mejor calidad en el agua.

2.5 Aplicaciones de técnicas cartográficas y de teledetección

La teledetección espacial se entiende como la técnica que permite detectar objetos sin contacto

físico, desde un punto de vista exterior al planeta, generando avances sustanciales en un número

importante de disciplinas científicas, como en la geografía, geología, meteorología, ciencias forestales e

ingeniería, entre otras. El observador corresponde a un sensor situado en el aire o en el espacio, siendo

capaz de detectar y almacenar la información para su posterior análisis. Por otro lado, los sistemas de

información geográficos (SIG) son una importante herramienta para la gestión y análisis de

información geográfica y espacial obtenida mediante sensores remotos. Como interfase entre la

información espacial y el SIG se encuentra la fotointerpretación, que es una técnica que identifica y

cuantifica áreas (objetos) de interés, como, por ejemplo, un catastro de vegetación, en que se

categorizan ciertas áreas diferenciadas por un patrón de vegetación y se delimitan sus respectivas

Page 13: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

7

superficies. Otro campo de interés, es el sistema de posicionamiento global (GPS), sistema basado en

tecnología satelital que consiste en determinar la posición geográfica de un punto sobre la superficie

terrestre. Todas estas herramientas, facilitan y optimizan los recursos económicos para mejorar la

calidad y aumentar la información sobre los recursos naturales.

La teledetección ha sido una herramienta muy utilizada en la región de los Yungas. Según García-

Lino et al. (2006), se han elaborado mapas de vegetación, caracterizando comunidades vegetales, como

unidades naturales según su fisonomía y composición florística. El mismo autor menciona que una de

las grandes utilidades que ofrece la clasificación digital de imágenes, es documentar el cambio en el

uso del suelo, mediante la comparación temporal de imágenes de la misma área, como por ejemplo la

deforestación y fragmentación de hábitats, entre otros. Una de las limitantes de las imágenes, está

referida a la nubosidad, ya que en muchas ocasiones la presencia de nubes impide identificar el uso de

los suelos.

En la teledetección es posible clasificar áreas de manera supervisada y no supervisada (Killeen et

al. 2005). La clasificación supervisada está referida a un análisis visual, la cual consiste en una técnica

que examina la imagen analógica, con el propósito de identificar los diferentes componentes del

paisaje, basándose en criterios visuales de tono, color, textura, etc. (Mena 2005). Esto es posible

realizarlo con herramientas disponibles gratuitamente en la red. Una de estas herramientas es el Google

Earth, que permite al usuario navegar libremente por cualquier lugar de la Tierra, observando

detalladamente sus territorios a distintas escalas, basándose en datos y fotografías reales. Una

desventaja del análisis visual es el fatigoso trabajo humano y el tiempo empleado, sin embargo, el costo

de realizar éste es menor, que en un análisis digital (Mena et al. 2001).

3 MÉTODOS

3.1 Descripción del área de estudio

El área de estudio se encuentra en la serranía del Uchumachi, perteneciente a los municipios de

Coroico y Coripata, en la provincia de los Nor Yungas del departamento de La Paz, en Bolivia. Se

encuentra ubicada en el sector sudoriental, limitando al norte con la provincia de Caranavi y al oeste

con la provincia Sud Yungas (Cuba 2007). La dimensión de la serranía es de 12 km de largo en su eje

Page 14: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

8

principal y entre 3 y 6 km de ancho (Gutiérrez 2006), su superficie es de 6.000 a 8.000 hectáreas

(Ribera 2002) y su altitud varía entre 1.100 y 3.000 m (Gutiérrez 2006) (figura 1).

Figura 1. Límites del cerro Uchumachi.

3.1.1 Clima

El clima en el cerro Uchumachi es variado, puesto que presenta grandes diferencias altitudinales.

Posee un período de lluvias entre los meses de noviembre y abril, concentrándose el período seco entre

los meses de mayo y agosto. Según Vergara (2007), la precipitación media anual en la serranía del

Uchumachi es de 2.390 mm. La temperatura media es de 18,4 °C, con una temperatura máxima y

mínima de 23,3 y 12,5 °C, respectivamente, teniendo una temperatura máxima extrema de 28,6 °C y

una humedad relativa media del aire de 78,5 %.

3.1.2 Suelos

El origen de los suelos en la serranía del Uchumachi proviene del resultado de la meteorización de

rocas metamórficas de montañas, serranías y colinas. Según la taxonomía, estos suelos pertenecen a

Page 15: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

9

entisols e inceptisols (Cuba 2007). Son suelos que presentan un esqueleto pronunciado, con alta

presencia de piedras y gravas, pobres en materia orgánica, excepto en lugares con presencia de

vegetación nativa. La mayor parte de los suelos son de textura franca arcillosa y de color pardo

amarillento (Gutiérrez 2006). Según Vergara (2007), el suelo bajo bosque presenta una característica de

textura franca, con predominio de limo (42 %), seguido de arena (37 %) y arcilla (21 %). Posee

estructura grumosa en su horizonte A y, en los horizontes más profundos, llega a una estructura

poliédrica, con una consistencia firme y muy firme, en la mayoría de los casos, y con un contenido de

raíces finas fuerte en el horizonte A y leve en los horizontes B y C (anexo 4). La profundidad arraigable

varía según altitud y pendiente, observándose en las partes altas de la serranía suelos que no sobrepasan

los 15 cm de profundidad total, mientras que en las partes planas y bajas del cerro es posible encontrar

suelos más profundos, depositándose en esta parte la materia orgánica y suelo fino que deriva de la

erosión de las laderas altas del cerro. Respecto a la composición química de estos suelos, el pH es

extremadamente ácido (pH de 3,9 en agua y 3,8 en cloruro de calcio) y la capacidad de intercambio

catiónico de 7,4 cmol kg-1

de suelo, que equivale a un bajo nivel (Vergara 2007). Algunos datos no

publicados1 (cuadro 3) mencionan un alto porcentaje de carbono orgánico total y una alta saturación de

aluminio y, por contraparte, un bajo valor en la suma de sus bases.

Cuadro 3. Análisis químico de suelo en sector Carmen Pampa, departamento de La Paz.

Elemento Media CV%

pH en agua (1:5) 4,9 6,5

P (fósforo asimilable) (mg kg-1

) 5,1 93,8

Carbono orgánico total (%) 13,7 36,2

Nitrógeno total (%) 0,4 -

Calcio (cmol kg-1

de suelo) 1,8 109,0

Magnesio (cmol kg-1

de suelo) 1,4 57,3

Sodio (cmol kg-1

de suelo) 0,1 139,1

Potasio (cmol kg-1

de suelo) 0,2 47,9

Aluminio (cmol kg-1

de suelo) 3,3 37,0

Suma de bases (cmol kg-1

de suelo) 3,6 73,2

Saturación de aluminio (%) 51,9 40,4

3.1.3 Vegetación y fauna

Los bosques montanos húmedos son de mediana altura, con una alta densidad arbórea y en las

partes bajas del cerro se encuentran bosques con mayores diámetros. Dentro de estos bosques se

1 Humberto Sainz, 2013, Universidad Católica Boliviana, comunicación personal

Page 16: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

10

presentan decenas de especies endémicas, lo que demuestra la gran biodiversidad existente en esta

serranía (Killeen et al. 1993).

Según el inventario florístico realizado por Endara (2001), en un bosque húmedo tropical

premontano en el cerro Uchumachi se identificaron 39 especies, con abundancia de helechos

arborescentes e individuos de la familia Laurelaceae, además de árboles como espeke (Clusia

haughtii), leche leche (Sapium aereum) y mata palo (Ficus obtusifolia) alcanzan un DAP mayor a 100

cm y abarcan gran parte del área basal total. La especie más abundante es el helecho arbóreo (Cyathea

amazonica) con 260 individuos por hectárea, seguido por el kori kori (Clethra scabra), chojo maurel

(Nectandra membranácea), chaka chaka (Alchornea glandulosa) y pili mora (Myriocarpa stipita); por

último, también está el ambaibo (Cecropia angustifolia), que crece a consecuencia de la perturbación

natural o artificial (Endara 2001).

Cabe mencionar que estos bosques también poseen una rica variedad de fauna, albergando en su

interior a primates, roedores, marsupiales, felinos, aves y tayasuidos (chancho de monte) (FCDI 2007).

3.2 Generación de la cartografía de la serranía del Uchumachi

Se clasificó el área de la serranía del Uchumachi, según el sistema general de clasificación de uso

del suelo (anexo 5). Esta metodología fue desarrollada por el Centro de Estudios Fitosociológicos y

Ecológicos L. Emberger (CEPE de Montpellier) y es conocida como la carta de ocupación de tierras

(COT). La metodología mencionada divide el uso del suelo en nueve categorías y 37 subcategorías.

Esta clasificación se llevó a cabo a través de una imagen de Google Earth (Google Earth 2012),

mediante fotointerpretación con un rango de escala aproximada de 1:3.500 a 1:400, identificando las

categorías: área urbana, terreno agrícola, pradera, bosque, matorral, afloramiento rocoso y área

desprovista de vegetación; esta última está referida a los sitos con suelo desnudo, en que no existe

ningún tipo de cubierta vegetal.

La información proveniente del Google Earth no es estrictamente una imagen satelital, si bien

existen algunas imágenes satelitales, la gran mayoría son imágenes que se obtienen a través de aviones

o globos aerostáticos, que permite tener un mosaico de imágenes de todo el mundo. La calidad de las

imágenes ha ido en aumento en los últimos años, llegando a una alta resolución y logrando ser una

herramienta útil en el ordenamiento territorial. Para el presente trabajo se utilizaron dos imágenes, que

datan de junio de 2005 y septiembre de 2012, respectivamente. Estas imágenes permitieron distinguir

de manera confiable los atributos de interés, diferenciándose las áreas que pudieran tener cierta

Page 17: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

11

similitud, por lo que se siguió una serie de claves de fotointerpretación para su correcta categorización

(cuadro 4).

Cuadro 4. Claves para la clasificación de categorías en la fotointerpretación en la imagen Google Earth.

Page 18: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

12

Luego de fotointerpretar los sectores de interés, la capa de Google Earth que poseía un formato en

kml fue transportada a formato shp, lo que además permitió transformar de líneas a polígonos, ya que

la fotointerpretación en la capa de Google Earth se llevó a cabo en líneas. Para calcular las superficies

fue necesario transformar a polígonos, permitiendo así trabajar en un sistema de información

cartográfica. El programa utilizado para esta transformación de la capa fue Quantum GIS 1.7.3

(Quantum GIS 2013), el cual permite que la capa pueda ser trabajada en el programa ArcGIS 9.3 bajo

licencia académica (figura 2).

Figura 2. Transformación de la capa Google Earth en formato kml a shapefile en Quantum GIS 1.7.3.

En el ArcGIS 9.3 fue creada la capa de usos de suelo (figura 3). En las propiedades de la capa, se

seleccionó el comando simbología y luego categorías, donde cada atributo está representado por un

color e indica el número de polígonos por categoría. En la tabla de atributos se creó un nuevo campo,

en donde fue posible calcular la superficie de cada polígono, luego esa tabla se abrió en una planilla

Excel en un formato dbf para procesar la información. Para el correcto cálculo de las superficies, fue

necesario darle la proyección exacta del área de estudio en coordenadas UTM, correspondiente a WGS

1984 zona 19S.

Page 19: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

13

Figura 3. Capa de uso actual del suelo en la serranía del Uchumachi.

3.3 Creación de capas topográficas

Las capas topográficas están referidas al modelo de pendiente y elevación. Ellas fueron realizadas

en el programa ArcGIS 9.3 y fueron un complemento a la capa de uso actual de suelo, permitiendo

Page 20: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

14

contar con más criterios para la elaboración de la categorización de áreas potenciales para la

reforestación. Las curvas de nivel con las que se obtuvieron los modelos de elevación y pendiente, se

encuentran en el huso 19S según el sistema de coordenadas Universal Transversal de Mercator (UTM)

y poseen una equidistancia de 20 metros. A partir de estas curvas de nivel, fue posible generar la

interpolación TIN en formato tif y de esa manera derivar ambos modelos de elevación y pendiente.

3.3.1 Modelo de elevación

Este modelo se diferenció a través de los pisos ecológicos, según Bach et al. (2003), en que se

diferencian la vegetación, los suelos y el clima dentro de estos bosques de la región de Los Yungas

(figura 4). El primero es un bosque montano, que se encuentra bajo los 2.100 m de altitud, seguido por

los bosques altimontanos I y II, que se encuentran entre 2.100 – 2.600 y 2.600 - 3.150 m de altitud,

respectivamente, y, por último, un bosque tropical subalpino con una elevación entre 3.150 y 3.400 m.

De esta manera es posible entender la composición florística en cada piso ecológico y su repercusión en

una propuesta de reforestación, ya que permitió ser una variable importante para identificar las áreas

potenciales de reforestación (anexo 6).

Figura 4. Modelo de elevación del cerro Uchumachi, en metros sobre nivel del mar en formato ráster.

Page 21: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

15

3.3.2 Modelo de pendiente

El criterio utilizado para diferenciar las pendientes fue el de capacidad de uso de los suelos

(Schlatter et al. 2003) (anexo 8). De esta manera se obtuvo una segregación de las pendientes, en siete

categorías (figura 5): 0 - 3 % (capacidad de uso I), 3 – 5% (capacidades de uso II y V), 5 – 10%

(capacidad de uso III), 10 – 15 % (capacidad de uso IV), 15 – 30 (capacidad de uso VI), 30 – 58 %

(capacidad de uso VII) y > 58 % (capacidad de uso VIII) (anexo 7).

Figura 5. Modelo de pendiente del cerro Uchumachi en porcentaje en formato ráster.

3.4 Clasificación de áreas potenciales para la reforestación del Uchumachi

En la clasificación de áreas potenciales para reforestación se utilizó la matriz del cuadro 5, en la

que se combinaron los tres atributos (capas cartográficas), anteriormente mencionados: uso actual,

pendiente del terreno y elevación (figura 6). Estas capas fueron combinadas a través de la herramienta

de intercepto, que se encuentra en “herramientas de análisis” de ArcGIS 9.3 y en la cual se ingresaron

las restricciones de cada prioridad, seleccionando las áreas de interés.

Page 22: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

16

Uso actual de suelo Altitud Pendiente

¯

Figura 6. Capas utilizadas en los interceptos para identificar áreas prioritarias para reforestación.

Cuadro 5. Matriz para la clasificación de áreas potenciales para reforestación.

Atributos Prioridades

Elevación (m s.n.m) 2.600 – 3.150 2.100 – 2.600 1.460 -2.100

Pendiente (%) >58 30 – 58 <30 >58 30 – 58 <30 >58 30 – 58 <30

Área desprovista de

vegetación

1 1 2 1 1 3 2 3 3

Pradera 1 2 3 1 2 3 2 3 3

Terreno agrícola 1 2 3 1 2 3 2 3 3

1: Condiciones de mayor erosividad. 2: Condiciones de erosividad intermedia. 3: Condiciones de alta

erosividad, pero con uso actual que dificulta su conversión.

La matriz para la clasificación de áreas potenciales para la reforestación (cuadro 5) identifica todas

las posibles combinaciones entre las tres capas cartográficas, en primer orden se colocó el criterio de

elevación, seguido por las tres categorías de pendientes (fila) y las tres categorías de uso actual

(columna) y se identificó a qué tipo de prioridad correspondía cada combinación.

De esta manera fue posible crear una nueva capa con las tres prioridades para la reforestación,

identificándose las áreas de prioridad 1 de color rojo, que reúne las condiciones de mayor erosividad,

las áreas de prioridad 2 de color naranjo, con condiciones de erosividad intermedia y las áreas de

prioridad 3 de color amarillo, presentan condiciones de alta erosividad, pero con un uso actual que

dificulta su conversión. Los polígonos que resultaron con una superficie menor a 0,1 hectáreas fueron

eliminados.

Page 23: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

17

Las capas topográficas, en un comienzo poseían un formato ráster, pero debido a que la capa de

uso actual de suelo resultó en un formato vectorial, éstas se transformaron en un formato vectorial, para

calcular las áreas en que se categorizó cada modelo y además, para superponer las tres capas en un

mismo formato. Por lo general, un análisis en formato vectorial es más preciso en el cálculo de áreas,

perímetros y longitudes, que en un formato ráster, en este último existe un alto nivel de error en las

estimaciones de áreas (Mena 2005).

La matriz de prioridades aplicada a las áreas piloto en el presente trabajo consideró sólo las

variables que representan un riesgo en cuanto a la degradación y erosión en los suelos, dejando fuera la

categoría matorral, porque corresponde a una cubierta vegetal continua y permanente, y el resto de

categorías no reforestables. El uso actual de suelo se consideró como la variable que mayor predominio

tiene en la categorización. Para efectos de poner a prueba el método propuesto, fueron consideradas

solamente las combinaciones de variables indicadas en el cuadro 6.

Cuadro 6. Selección de combinaciones prioritarias para la clasificación de terrenos potenciales para

reforestación en las áreas piloto.

Prioridad Atributo

Uso actual

Pendiente del terreno

(%)

Elevación (m

s.n.m)

Prioridad 1: Condiciones de

mayor erosividad Área desprovista

de vegetación > 58 2.600 – 3.150

Prioridad 2: Condiciones de

erosividad intermedia Pradera 30 – 58 2.100 – 2.600

Prioridad 3: Condiciones de

alta erosividad, pero con uso

actual que dificulta su

conversión

Terreno agrícola 15 – 30 1.460 – 2.100

El diagrama de flujo (figura 7) resume los programas y los procesos realizados para llegar a los

resultados propuestos, mencionándose los formatos en que se obtuvieron las distintas capas en el

sistema de información cartográfica y de cómo estos se combinaron para llegar al resultado final,

siendo este el mapa de categorización de áreas prioritarias para reforestación.

Page 24: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

18

ArcGIS 9.3

Google Earth

Curvas de nivel Tin Modelo de elevación

Modelo de pendiente

Fotointerpretación Capa de uso actual de suelo

Mapa de Categorización de áreas

prioritarias para reforestación (*.shp)Formato (*.shp ) Formato (*.tif)

Formato (*.kml) Formato (*.shp)

ResultadoProgramas Procesos

Figura 7. Diagrama de flujo para la categorización de áreas prioritarias para reforestación.

4 RESULTADOS

4.1 Uso actual del suelo en la serranía del Uchumachi

De las 3.603 hectáreas analizadas en el cerro Uchumachi, el 77 % correspondió a bosques y el 23

% se distribuyó en otras seis categorías (cuadro 7). Entre estas últimas, el matorral presentó la mayor

superficie, con un tamaño promedio de polígonos de 2,4 hectáreas, y el terreno agrícola la mayor

cantidad de polígonos con una superficie promedio menor a una hectárea (cuadro 7). El 86,5 % de la

superficie correspondió a áreas no reforestables, ya que abarcaron bosques, matorral, áreas urbanas y

afloramientos rocosos. Descontadas tales áreas no reforestables, se alcanzó una superficie de 485,3

hectáreas que pudieran ser intervenidas para un proceso de recuperación de tierras degradadas mediante

reforestación. Estos terrenos reforestables representan el 13,5 % de la superficie total analizada y, son

de gran importancia si se considera la geomorfología y las limitantes que posee esta zona para el

desarrollo agropecuario.

Se delimitaron 649 polígonos en total, los cuales se distribuyeron espacialmente en forma

heterogénea, concentrándose principalmente en tres categorías (80,4 % del total): terreno agrícola,

pradera y matorral. Los que obtuvieron la menor cantidad de polígonos fueron las áreas no

Page 25: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

19

reforestables determinadas por áreas urbanas y afloramientos rocosos, estos últimos localizados en la

ladera oeste. Los polígonos de uso actual con posibilidad de reforestación se agruparon principalmente

por la ladera este de la serranía del Uchumachi y por la zona sur, en el municipio de Coripata (anexo 1).

Cuadro 7. Superficie, polígonos y porcentaje de cada categoría de uso actual de suelo.

Categoría Superficie (ha) Porcentaje (%)

Número de

polígonos

Porcentaje

(%)

Bosque 2.775,8 77,0 -* -

Matorral 276,9 7,7 114 17,6

Terreno agrícola 206,7 5,7 250 38,5

Área desprovista de vegetación 177,7 4,9 78 12,0

Pradera 100,9 2,8 158 24,3

Área urbana 40,1 1,1 29 4,5

Afloramiento rocoso 24,7 0,7 20 3,1

Total 3.602,8 100,0 649 100,0

*La superficie de la categoría bosque se obtuvo por diferencia entre la superficie total y la de aquellas de otras categorías de

uso actual del suelo.

4.2 Superficie del terreno según pendiente y elevación

La superficie presentó principalmente las categorías de pendientes 15 – 30 % (capacidad de uso

VI), 30 – 58 % (capacidad de uso VII) y > 58 % (capacidad de uso VIII), concentrando el 95,3% del

total (figura 8). La superficie restante (4,7 %) se repartió en las otras cinco clases de pendiente del

suelo. Cabe mencionar que en el cerro Uchumachi se obtuvieron todas las clases de pendiente de los

suelos, lo que refleja el relieve variado y accidentado del área de estudio

En la clasificación para la elevación se reconocieron tres pisos altitudinales, ya que la elevación

máxima fue de 2.680 m s.n.m, descartándose el piso altitudinal de bosque tropical subalpino (3.150 –

3.400 m). La elevación mínima que presentó el área de estudio fue de 1.460 m s.n.m (figura 8). Como

era de esperar, la superficie se concentró mayoritariamente en el piso altitudinal más bajo (bosque

montano por debajo de los 2.100 m), mientras que la menor superficie se obtuvo en el bosque

altimontano II, con tan sólo 33,4 hectáreas (0,9 %).

Page 26: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

20

Figura 8. Distribución en porcentaje de la superficie según pendiente (%) y elevación (m) del terreno.

4.3 Áreas potenciales de reforestación

Se obtuvieron áreas prioritarias para reforestación por un total de 196 hectáreas. Esta superficie

refleja solamente áreas críticas que requerirán intervención, con la finalidad de proteger el suelo. Las

otras 289,3 hectáreas restantes no se consideraron como áreas prioritarias, debido a su condición de uso

actual de suelo y variables topográficas. Por lo tanto, del total de la superficie a reforestar, se consideró

el 40,4 % como terrenos prioritarios para reforestación.

4.3.1 Cuantificación de cada categoría de área prioritaria

La prioridad 3 obtuvo la mayor superficie y número de polígonos (cuadro 8), debido

principalmente a la gran cantidad de terrenos agrícolas identificados en el catastro (cuadro 7). La

prioridad 2 arrojó los valores menores de superficie, por la baja superficie de pradera. La prioridad 1, se

identificó en los tres pisos altitudinales, porque la superficie registrada en el piso altitudinal bosque

altimontano II, fue despreciable por su pequeña magnitud. Por ello, en este caso se combinaron

solamente el uso actual de suelo y la pendiente; esto permitió que la superficie de la prioridad 1 no

haya sido tan baja.

Page 27: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

21

Cuadro 8. Número de polígonos, superficie y porcentaje en cada una de las prioridades.

Superficie (ha)

Prioridad

N° de

polígonos Media Desviación estándar Total (%)

1 26 3,0 4,9 78,4 40,1

2 13 1,0 1,4 13,6 7,0

3 142 0,7 1,7 103,6 53,0

Total 181 - - 195,6 100,0

La superficie de los polígonos en las áreas prioritarias varío entre 0,1 y 23,6 hectáreas (figura 9).

La superficie mínima se debe a que los terrenos agrícolas eran superficies pequeñas y al fraccionarse

con los modelos de pendiente y elevación, quedaron superficies aún menores, llegando a cifras

despreciables. La mayoría de los polígonos se concentró en la prioridad 3.

En la partición de los polígonos resultaron superficies de bajo tamaño, con un rango de 0,00001 a

0,09842 hectáreas, por lo que se eliminaron cuatro polígonos en prioridad 1, cuatro polígonos en

prioridad 2 y 46 polígonos en la prioridad 3.

Figura 9. Relación entre superficie de los polígonos y frecuencia.

Page 28: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

22

4.3.2 Identificación de áreas dentro de la serranía del Uchumachi

Las áreas prioritarias para reforestación se distribuyeron principalmente en la ladera este (figura

10), concentrando la totalidad de las áreas de prioridades 1 y 2 en esa zona. En cambio, la distribución

de la prioridad 3 se concentró en el sur, en el municipio de Coripata. Las zonas en que se distribuyó la

mayoría de estos polígonos fueron: Las Ciénagas, Arapata, San José, Trinidad Pampa, El Choro,

Chovacollo y Carmen Pampa (anexo 2).

Figura 10. Mapa con la clasificación de áreas potenciales para reforestación según prioridades.

Page 29: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

23

5 DISCUSIÓN

La metodología propuesta es sencilla y considera todas las combinaciones posibles para una

propuesta de reforestación, sin embargo, para efectos de resultados, sólo se consideraron algunas

combinaciones. Por ello, los resultados provienen de un análisis parcial de prioridades, debido a que no

se clasificó toda la superficie disponible para reforestación. No se utilizaron criterios de variables

climáticas ni edáficas para esta categorización. Es decir, datos como temperaturas, precipitaciones,

profundidad total de suelo, drenaje interno, entre otros factores, no fueron considerados en la

determinación de las áreas prioritarias, ya que la metodología propuesta solamente aplicó variables

físicas del terreno. La ventaja de aplicar esta metodología se basa en el bajo costo, debido a que no

implica gastos en salidas a terreno, ni en la obtención de información más detallada, además considera

sólo una parte del total de las áreas a reforestar, por lo que los recursos irán destinados solamente a las

áreas que requieran de una protección urgente del suelo.

De las 802 hectáreas deforestadas (sin considerar la superficie de afloramiento rocoso) observadas

en el presente trabajo, se desprende que habría una tasa promedio anual de deforestación de 19,4

hectáreas en el período 2005 - 2012. Cuba (2007) informa una tasa anual promedio de deforestación de

21,6 hectáreas, levemente superior en el período 1975 - 2005. La estimación realizada en el presente

trabajo, además de considerar solo una parte del territorio, puede estar influida por las imágenes

utilizadas del Google Earth, ya que tienen diferente fecha, siendo una del 2005 y la otra del 2012. De

ello, se infiere que podría ser mayor el área deforestada, ya que la imagen del año 2005 coincidía

justamente con el área de mayor alteración antrópica. Se presume que en esa área el uso

silvoagropecuario aumentó, debido a las favorables condiciones topográficas que presentan esos

terrenos. Si bien la información proveniente del Google Earth es una aproximación a la realidad, puesto

que el nivel de resolución es inferior que en imágenes satelitales como Lidar y Landsat, la cartografía

obtenida permite llegar a valores referenciales útiles para trabajos de ordenamiento territorial y de

decisiones de reforestación.

Las áreas prioritarias para reforestación, obtenidas en el presente trabajo, indican una superficie de

196 hectáreas, distribuidas en tres categorías. Gutiérrez (2006) identificó tres áreas potenciales para

reforestación ubicadas en la ladera este del cerro Uchumachi, las cuales se determinaron por una

fotointerpretación que solamente consideró áreas desprovistas de vegetación, sin considerar otras

categorías, como praderas o terrenos agrícolas (31 hectáreas en la localidad de Paco, 23 hectáreas en la

localidad de Capillania y 21 hectáreas en la localidad de Cochuna). El presente trabajo, ratifica que la

Page 30: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

24

problemática del área de estudio se concentra principalmente en la ladera de exposición este. Varios

podrían ser los factores que influyen en que dicha ladera sea la más degradada; una razón tiene

referencia a su topografía, ya que posee terrenos con pendientes menos inclinadas y con suelos más

profundos, siendo menos limitantes para la agricultura. La ladera oeste, en cambio, se caracteriza por

presentar terrenos fuertemente inclinados con suelos delgados y pedregosos (Yujra 2007). Otro factor

determinante es el clima, puesto que la ladera este presenta temperaturas más altas que la ladera oeste,

mientras que la humedad es más alta en esta última, ya que presenta paredes de roca que ocasionan

constantes precipitaciones orográficas por el choque de las masas ascendentes de humedad (Cuba

2007).

Las áreas prioritarias (cuadro 8) consideran una superficie algo mayor a las 75 hectáreas

propuestas por Gutiérrez (2006). Esta diferencia está dada porque ambos trabajos consideran áreas de

estudio diferentes. En el presente trabajo, la mayor superficie a reforestar se encuentra en la prioridad

3, en terrenos agrícolas, que perfectamente podría pasar a la prioridad 2 por su gran superficie (cuadro

8). Si bien la superficie no es una variable utilizada en la categorización de las áreas prioritarias para

reforestación, obtenidos los resultados, se podría replantear nuevamente su clasificación, según el

objetivo esperado. Sin embargo, la posibilidad de reemplazar sus cultivos tradicionales por

plantaciones forestales, está muy condicionada por factores socioeconómicos y culturales, ya que en

áreas con asentamientos humanos o cultivos de coca se produce un rechazo de los agricultores para su

cambio de uso, impidiendo la realización de reforestación (Gutiérrez 2006).

La superficie de cada polígono susceptible de ser reforestado varía comúnmente entre 1 y 9

hectáreas, a excepción de dos polígonos mayores (13 y 23 hectáreas). Ello facilitaría una reforestación

manual con recursos humanos locales. Polígonos con una superficie menor a 0,1 hectáreas fueron

eliminados, ya que en el proceso de delimitación y clasificación para identificar las áreas prioritarias,

los polígonos fueron fraccionados al momento de combinarse las tres capas en el sistema de

información cartográfica. Además no tendría sentido reforestar áreas tan pequeñas, tomando en cuenta

el tiempo que se debe emplear en su localización y muchas veces el acceso se ve dificultado por las

variables topográficas.

En la clasificación del modelo de elevación, el piso altitudinal bosque montano (1.460 – 2.100 m)

concentró la mayor superficie del área de estudio (figura 8). Esta zona se caracteriza por tener un dosel

que normalmente no está cerrado (Bach et al. 2003), mientras que el piso altitudinal bosque

altimontano I (2.100 – 2.600 m) concentró una superficie menor, en donde el bosque crece hasta 20 m

de altura en promedio y el dosel todavía está cerrado (Bach et al. 2003). En el piso altitudinal bosque

Page 31: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

25

altimontano II (2.600 – 3.150 m), el dosel a menudo se observa abierto y con una disminución en la

altura de los árboles (Bach et al. 2003). En este ambiente se registraron solamente 33,4 hectáreas

posibles de reforestación. Debido a que la altura máxima del cerro Uchumachi es de 2.680 m, no se

alcanzó a tener parte del piso altitudinal bosque tropical subalpino (3.150 – 3.400 m), el cual concentra

principalmente arbustos y plantas epifitas (Bach et al. 2003). Por lo anterior, se puede mencionar que el

piso altitudinal bosque altimontano I, es el que concentra la mayor densidad arbórea y que, por lo tanto,

debería ser la zona que reciba la mayor protección posible, evitando nuevas acciones de quemas y

deforestaciones.

Las pendientes del terreno se distribuyen mayoritariamente en las capacidades de uso VI, VII y

VIII, concentrando más del 95 % de su superficie total; el resto de distribuye en las cinco capacidades

de uso restantes (figura 8). Sin embargo, Yujra (2007) menciona que los en suelos de Carmen Pampa

(10 – 30 % de pendiente) las capacidades de uso pertenecen a las clases III, IV y VI. La intensidad de

uso, en el caso de la capacidad de uso VI es forestal o praderas con limitaciones, en tanto que la

capacidad de uso VII pertenece a forestal con limitaciones y la capacidad de uso VIII es para zonas de

protección sin uso agrícola ni forestal de producción (Schlatter et al. 2003). Considerando el porcentaje

de la superficie que abarcan estas tres capacidades de uso y la intensidad de uso recomendada, se puede

determinar que la serranía del Uchumachi no es un área apta para los cultivos agrícolas y requiere de un

manejo sustentable en sus bosques.

El suelo en el bosque premontano del Uchumachi presenta textura franca (Vergara 2007). Sin

embargo, datos más recientes indican que la textura es predominantemente arcillosa (59 % de arcilla,

29 % de limo y 12 % de arena)2. Las características físicas del suelo tienen gran relevancia en la

fertilidad de estos, la alta presencia de arcilla puede generar dificultades sobre el desarrollo y

penetración de las raíces (Donoso 2008). Su alta retención de agua no implica que en este tipo de

suelos haya una buena infiltración y percolación del agua, sino que generalmente presenta problemas

en este ámbito y frecuentemente se producen pérdidas de agua por el excesivo escurrimiento

superficial. Debido a estos procesos erosivos es importante realizar un plan de reforestación.

Los suelos son nutritivamente pobres (cuadro 3), por lo que sus bosques dependen en gran parte

del material reciclable de la materia orgánica. Según Yujra (2007), el aprovechamiento de la materia

orgánica en las plantas está condicionado por el relieve, debido a la exposición y ángulo de incidencia a

la radiación solar. En este sentido, la ladera este de la serranía del Uchumachi es la que recibe la mayor

radiación solar, lo que permitiría un mayor reciclaje de la materia orgánica en esa zona.

2 Humberto Sainz, 2013, Universidad Católica Boliviana, comunicación personal

Page 32: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

26

El porcentaje de carbono del suelo es relativamente alto, con un rango de 3,9 a 4,6 % (Villca 2001)

y la saturación de aluminio es muy alta, de un 40,4%, siendo un suelo tóxico para muchas plantas. Esto

último es característico de zonas sometidas a elevados índices pluviométricos, lo cual induce a pérdidas

de cationes intercambiables por lixiviación. La capacidad de intermabio catiónico también está

influenciada por la materia orgánica presente en los suelos superficiales, por lo que la baja presencia de

materia orgánica en los suelos del Uchumachi podría condicionar la capacidad de intercambio

catiónico, lo que implicaría una baja retención de nutrientes (Fassbender y Bornemisza 1994).

El recurso hídrico tiene importancia en la serranía del Uchumachi, por lo que la reforestación de

las 196 hectáreas toma un aspecto relevante para el futuro de las comunidades que se encuentran en las

faldas del cerro. Cabe mencionar que una reducción en la cubierta forestal aumenta el rendimiento de

agua al disminuir la evapotranspiración (Zhang et al. 2001). Es importante considerar esta observación

antes de comenzar un trabajo de reforestación, ya que si el objetivo es aumentar la cantidad de agua,

una reforestación podrá obrar en contrario, puesto que la evapotranspiración puede ser mayor.

Echeverría et al. (2007) observaron que la evapotranspiración en un bosque fue 2,5 veces superior que

en una pradera de comparación. Es decir, mientras mayor sea la cobertura vegetal, menor será el

excedente de agua. Esto indicaría que la reforestación no necesariamente debe llevarse a cabo con

especies forestales de rápido crecimiento, ya que el objetivo es tener un equilibrio entre la protección

del suelo y la regularidad hídrica. Por ello, una opción sería reforestar con especies forestales de

crecimiento lento o matorral arbustivo, ya que de esa manera se podría proteger el suelo y su

evapotranspiración sería menor, consumiendo menor cantidad de agua. La ventaja de identificar las

áreas potenciales a intervenir, permitiría a futuro realizar una reforestación que entregaría agua de

mayor calidad y una mejor regularidad de este recurso durante todas las estaciones del año.

6 CONCLUSIONES

En un área heterogénea con distintos tipos de uso de suelo y relieves variados, que presentan una

deforestación que va en aumento durante los últimos años, se requiere de una intervención rápida que

pueda mitigar los daños causados principalmente por la tala indiscriminada y quema. Una reforestación

es una manera de contrarrestar estos daños, sin embargo, antes de comenzar un proyecto de

reforestación, es de suma importancia reconocer y clasificar las áreas que presentan un mayor peligro

respecto a la erosión y degradación en los suelos.

Page 33: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

27

Los resultados de la cartografía del uso actual fueron útiles en la clasificación de las áreas

prioritarias para reforestación, ya que esta información no se había generado anteriormente y fue

determinante en el orden jerárquico de las prioridades de reforestación. También las variables

topográficas de elevación y pendiente del terreno permitieron determinar de mejor manera las áreas

prioritarias.

La metodología aplicada en este trabajo, si bien considera todas las posibles combinaciones entre

los atributos de uso actual de suelo, pendiente del terreno y elevación, para efectos de resultados,

solamente se consideran algunas combinaciones, por lo que solamente se obtiene alrededor del 40 %

del total de la superficie a reforestar como áreas prioritarias.

Las áreas prioritarias en los sectores piloto se distribuyen en pequeñas superficies (< 5 ha), que se

ubican principalmente por la ladera este del cerro Uchumachi, localizándose en los sectores de

Capillania, San Jacinto, Cochuna, Santa Bárbara, Arapata, Trinidad Pampa y Chovacollo. Estas serían

las principales localidades a intervenir con la finalidad de protección y conservación de suelo e

indirectamente mejorar sus condiciones hidrográficas.

7 REFERENCIAS

Asistencia Técnica Internacional en Recursos Naturales y Medio Ambiente (GTZ). 2005. Conservación

de fuentes de agua. Cuencas hidrográficas y ojos de agua en los Yungas de La Paz. Bolivia. 14

p.

Bach H, M Schawe, S Beck, G Gerold, S Gradstein, M Moraes. 2003. Vegetación, suelos y clima en

los diferentes pisos altitudinales de un bosque montano de Yungas, Bolivia: Primeros

resultados. Ecología en Bolivia 38(1): 3-14.

Bascopé F, P Jorgense. 2005. Caracterización de un bosque montano húmedo: Yungas, La Paz.

Ecología en Bolivia 40(3): 365-379.

Coroico. 2003. Creación y propuesta de gestión del área Uchumachi. Segunda parte. Municipio de

Coroico, Bolivia. 46 p.

Cuba E. 2007. Análisis multitemporal del proceso de deforestación en la serranía Uchumachi –

municipios de Coroico y Coripata (Nor Yungas – La Paz). Tesis Ingeniero en Medio Ambiente

y Recursos Naturales. La Paz, Bolivia. Facultad de Ciencias Naturales, Universidad Loyola.

145 p.

Page 34: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

28

Donoso C. 2008. Ecología forestal. El bosque y su medio ambiente. Editorial universitaria. Sexta

edición. Santiago, Chile. 368 p.

Echeverría C, A Huber, F Taberlet. 2007. Estudio comparativo de los componentes del balance hídrico

en un bosque nativo y una pradera en el sur de Chile. Bosque 28(3): 271-280.

Endara R. 2001. Inventario de las especies forestales del bosque húmedo tropical premontano del cerro

Uchumachi sector Carmen Pampa. Tesis de grado. Universidad Católica Boliviana – Unidad

Académica Campesina de Carmen Pampa. La Paz, Bolivia.

FAO. 2004. Estudio de tendencias y perspectivas del sector forestal en América Latina. Documento de

trabajo. Informe Nacional Bolivia. Ministerio de asuntos campesinos y agropecuarios.

Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación. Roma, Italia. 76 p.

Fassbender H, E Bornemisz. 1994. Química de suelos con énfasis en suelos de América Latina.

Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura. San José, Costa Rica. Segunda

edición. 420 p.

FCDI (Fondo comunitario de desarrollo integral). 2006. Plan comunal de Manejo y Conservación de la

Serranía del Uchumachi (Basado en Usos y Costumbres). USAID y Gobierno de Bolivia. Cruz

Loma, Bolivia. 12 p.

García-Lino C, A Palabral-Aquilera. 2006. Aplicación de técnicas cartográficas y de teledetección en la

investigación y conservación de los yungas bolivianos. Grazer Schriften der Geopraphie und

Raumforschung. 41: 49-58 p.

Google Earth. 2012. Consultado 11 dic. 2012. Disponible en

http://www.google.com/intl/es/earth/index.html

Grájeda J. 2003. Diagnostico ambiental. Plan de acción ambiental. Gobierno municipal de Coroico,

Bolivia. 56 p.

Gutiérrez P. 2006. Propuesta de reforestación en la serranía de Uchumachi (Nor Yungas) mediante el

análisis del proceso de colonización en dos bosques secundarios. Tesis Ingeniero Ambiental. La

Paz, Bolivia. Escuela Militar de Ingeniería MCAL. Antonio José de Sucre Bolivia. 108 p.

Holdridge L. 2000. Ecología basada en zonas de vida. Instituto Interamericano de Cooperación para la

Agricultura. San José, Costa Rica. Quinta edición. 216 p.

Kessler M, S Beck. 2001. Bosques nublados del neotrópico: Bolivia. En: Kappelle, M., Brown, A.

(eds): Bosques nublados del neotrópico. INBIO/FUA/UICN.

Killeen T, T Siles, L Soria, L Correa. 2005. Estratificación de vegetación y cambio de uso de suelo en

Los Yungas y El Alto Beni de La Paz. Ecología en Bolivia 40(3): 32-69.

Page 35: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

29

Killeen T, E García, S Beck. 1993. Guía de árboles de Bolivia. La Paz, Bolivia. Herbario Nacional de

Bolivia. Editorial del Instituto de Ecología, Universidad Mayor de San Andrés. 958 p.

Mena C, Y Ormazábal. 2001. Comparación del tratamiento visual versus el tratamiento digital de

fotografías aéreas verticales en la elaboración de cartografía forestal. Teledetección, medio

ambiente y cambio global 233 – 236.

Mena C. 2005. Geomática para la ordenación del territorio. Serie Textos Docentes. Editorial

Universidad de Talca. Talca, Chile. 314 p.

Muñoz A. 2006. Avance de la deforestación en Bolivia. Apuntes de la audiencia técnica. BOLFOR II.

Müller R, A Briancon. 2004. Identificación de sitios prioritarios para la conservación en los yungas

bolivianos. TROPICO/FAN. 118 P.

Müller R, S Beck, R Lara. 2002. Vegetación potencial de los bosques de Yungas en Bolivia, basado en

datos climáticos. Ecología en Bolivia 37(2): 5-14.

Quantum GIS. 2013. Consultado 30 ene. 2013. Disponible en http://www.qgis.org/

Ribera M. 2002. Propuesta técnica para el establecimiento de un área protegida en la serranía del

Uchumachi. ETNO–ECO tur SRL.

Schlatter J, R Grez, V Gerding. 2003. Manual para el reconocimiento de suelos. Valdivia, Chile.

Universidad Austral de Chile. 114 p.

Vergara C. 2007. Inventory of the orchids in the humid tropical premontane forest on Uchumachi

mountain, Nor Yungas Region of La Paz, Bolivia. Carmen Pampa, Coroico – Nor Yungas, La

Paz, Bolivia. LANKESTERIANA 7(1-2): 122-125.

Vergara C. 2007. Inventario de orquídeas en el bosque húmedo premontano del cerro Uchumachi

(sector Carmen Pampa y Chovacollo). Tesis de grado. Universidad Católica Boliviana – Unidad

Académica Campesina de Carmen Pampa. La Paz, Bolivia. 112 p.

Villca R. 2001. Evaluación de la erosión hídrica en un sistema agroforestal café (Coffea arábica) con

sikili (Igna adenophylla) bajo dos métodos de control de maleza con chonta y machete en

Carmen Pampa. Tesis de grado. Universidad Católica Boliviana – Unidad Académica

Campesina de Carmen Pampa. La Paz, Bolivia.

Yujra M. 2007. Evaluación del aporte de materia orgánica en un sistema agroforestal café (Coffea

arábica) con distintas especies del genero Inga y su efecto en la edafofauna de la zona de

Carmen Pampa del municipio de Coroico Nor Yungas, departamento de La Paz. Tesis de grado.

Universidad Católica Boliviana – Unidad Académica Campesina de Carmen Pampa. La Paz,

Bolivia. 67 p.

Page 36: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

30

Zhang L, W Dawes, G Walker. 2001. Response of mean annual evapotranspiration to vegetation

changes al catchment scale. Water Resources Research 37(3): 701-708.

Page 37: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

ANEXOS

Page 38: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

Anexo 1. Mapa de Bolivia por regiones

Page 39: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

0 1 2 3km

Anexo 2. Localidades en la serranía del Uchumachi (Cuba 2007)

Page 40: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

0 1 2 3km

Anexo 3. Red hidrográfica en la serranía del Uchumachi (Cuba 2007)

Page 41: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

Anexo 4. Formularios de reconocimiento de suelos en la ladera oeste y este de la serranía del Uchumachi, sectores Carmen

Pampa y Cochuna, departamento de La Paz

N S F

UNIVERSIDAD AUSTRAL DE CHILE

FACULTAD DE CIENCIAS FORESTALES

INSTITUTO DE SILVICULTURA

LABORATORIO DE NUTRICIÓN Y SUELOS FORESTALES

Fonofax 56 - 63 – 221431, Casilla 567, Valdivia, Chile

<[email protected]>

NOMBRE

Erico Kutcharttt

Guillermo Huarcacho

FECHA

17 – 02 -2011

PERFIL Nº

OT1-I

REGIÓN

La Paz

PROVINCIA

Nor Yungas

COMUNA

Carmen Pampa

LUGAR

Transepto Carmen Pampa - Cumbre

FORMA DEL TERRENO

Intermedio montañoso

POSICIÓN FISIOGRAFICA

Cerro - Monte

UBICACIÓN EN EL RELIEVE

Ladera media

FORMA DE LA LADERA

Convexa

FORMA DEL CONTORNO

Convexo

ELEVACION (m s.n.m.)

1.892

EXPOSICIÓN

Norte

PENDIENTE

27%

DRENAJE EXTERNO

Moderado a rápido

ESTRATO ARBÓREO

Sikili (15 m – 25 cm), Laurel (15 m – 20 cm),

Ambaybo (26 m y 30 cm) y Chusi (8 m y 10 cm)

ESTRATOS RESTANTES

Helechos y Heliconias

USO ANTERIOR

Bosque nativo

INFORMACIÓN CLIMÁTICA

Precipitación anual 2.390 mm

Temperatura media 18,4°C

Humedad relativa media 78,5%

OBSERVACIONES

Es un lugar húmedo y denso

Page 42: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

HORIZONTE

PROFUNDIDAD

cm

LÍMITES

Forma y

nitidez

CONTENIDO

RAÍCES FINAS

Raíces/100 cm2

ESTRUCTURA CONSISTENCIA TEXTURA PEDRE-

GOSIDAD

%

COLOR M.O.

%

pH CAA

mm

DRENAJE

INTERNO

OTROS

(Compactación)

A

B

C

0-34

34-76

76-155+

Ondulado

Claro

Lineal

claro

Fuerte

Leve

Leve

Grumosa

Grumosa

Poliédrica

Firme

Muy friable

Muy

firme

Arcilla

Arenosa

Arcilla

Arenosa

Arena

Franca

80

80

90

7,5 YR

4/4

10 YR

5/4

10 YR

5/4

Lento

Lento

Lento

MATERIAL DE ORIGEN

Sedimentos lacustres y origen volcánico

NIVEL FREÁTICO

No se observa

GRADO DE EROSIÓN

Ligera

PROFUNDIDAD FISIOLÓGICA

140 cm

PROFUNDIDAD DE RAÍCES

140 cm

FACTORES LIMITANTES:

PROFUNDIDAD PENETRACIÓN DE RAÍCES CAA TEXTURA EXTREMA CLIMA

PEDREGOSIDAD ROCOSIDAD ESTRUCTURA CONSISTENCIA DRENAJE EXTERNO

DRENAJE INTERNO PENDIENTE ERODABILIDAD NUTRIENTES SALINIDAD

RIESGO DE INUNDACIÓN

CAA Profundidad

fisiológica

CAA

Profundidad

de raíces

CAA 1 m

CAPACIDAD DE USO

Page 43: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

N S F

UNIVERSIDAD AUSTRAL DE CHILE

FACULTAD DE CIENCIAS FORESTALES

INSTITUTO DE SILVICULTURA

LABORATORIO DE NUTRICIÓN Y SUELOS FORESTALES

Fonofax 56 - 63 – 221431, Casilla 567, Valdivia, Chile

<[email protected]>

NOMBRE

Erico Kutchartt

Guillermo Huarcacho

Francy Quisbert

FECHA

19 – 02 -2011

PERFIL Nº

ET1-I

REGIÓN

La Paz

PROVINCIA

Nor Yungas

COMUNA

Cochuna

LUGAR

Transepto Cochuna - Cumbre

FORMA DEL TERRENO

Ondulado a quebrado

POSICIÓN FISIOGRAFICA

Cerro - Monte

UBICACIÓN EN EL RELIEVE

Ladera baja

FORMA DE LA LADERA

Convexa

FORMA DEL CONTORNO

Cóncavo

ELEVACION (m s.n.m.)

1.721

EXPOSICIÓN

Norte

PENDIENTE

75%

DRENAJE EXTERNO

Rápido

ESTRATO ARBÓREO

Ambaybo, Siquili (igna sp.) y Laurel

ESTRATOS RESTANTES

Helechos y Orquídeas

USO ANTERIOR

Bosque nativo

INFORMACIÓN CLIMÁTICA

Precipitación anual 2.390 mm

Temperatura media 18,4°C

Humedad relativa media 78,5%

OBSERVACIONES

Presencia de gran cantidad de rocas

Page 44: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

HORIZONTE

PROFUNDIDAD

cm

LÍMITES

Forma y

nitidez

CONTENIDO

RAÍCES FINAS

Raíces/100 cm2

ESTRUCTURA CONSISTENCIA TEXTURA PEDRE-

GOSIDA

D

%

COLOR M.O.

%

pH CAA

mm

DRENAJE

INTERNO

OTROS

(Compactación)

A

C

0-19

19-137+

Ondulado

Difuso

Fuerte

Poco

Grumosa

Grumosa

Firme

Muy firme

Arena

Arcillosa

Arena

Arcillosa

50

70

10 YR

4/4

10 YR

5/4

Modera

do a

rápido

Rápido

MATERIAL DE ORIGEN

Sedimentos lacustres

NIVEL FREÁTICO

No se observa

GRADO DE EROSIÓN

Severa

PROFUNDIDAD FISIOLÓGICA

128 cm

PROFUNDIDAD DE RAÍCES

128 cm

FACTORES LIMITANTES:

PROFUNDIDAD PENETRACIÓN DE RAÍCES CAA TEXTURA EXTREMA CLIMA

PEDREGOSIDAD ROCOSIDAD ESTRUCTURA CONSISTENCIA DRENAJE EXTERNO

DRENAJE INTERNO PENDIENTE ERODABILIDAD NUTRIENTES SALINIDAD

RIESGO DE INUNDACIÓN

CAA Profundidad

fisiológica

CAA

Profundidad

de raíces

CAA 1 m

CAPACIDAD DE USO

Page 45: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

Anexo 5. Sistema general de clasificación de uso de suelo

Categoría de Uso Clase de

Cobertura

% Recubrimiento por Tipo

Biológico

Árboles Arbustos Herbáceas

1 Áreas Urbanas e Industriales

1.1 Ciudades, pueblos, zonas industriales

1.2 Minería industrial

n. a.

n.a.

n.a.

n.a.

2 Terrenos Agrícolas

2.1 Terrenos de uso agrícola

2.2 Rotación cultivo / pradera

n.a.

n.a.

n.a.

n.a.

3 Praderas y Matorrales

3.1 Praderas

3.1.1 Estepa altiplánica

3.1.2 Estepa andina norte

3.1.3 Praderas anuales

3.1.4 Praderas perennes

3.1.5 Estepa andina central

3.1.6 Estepa patagónica

n.a.

< 10

< 25

< 10

< 25

> = 10

> = 25

3.2 Matorral Pradera Denso

Semidenso

Abierto

< 10

< 25

> 75

50 - 75

25 - 50

> 75

50 - 75

25 - 50

3.3 Matorral Denso

Semidenso

Abierto

Muy abierto

< 10

< 25

> 75

50 - 75

25 - 50

10 - 25

0 - 100

3.4 Matorral Arborescente

(Matorral con árboles > 2 m de altura)

Denso

Semidenso

Abierto

Muy abierto

10 - 25

> 75

50 - 75

25 - 50

10 - 25

0 - 100

3.5 Matorral con Suculentas

(Presencia de suculentas > 5 %)

Denso

Semidenso

Abierto

Muy abierto

< 10

< 25

> 75

50 - 75

25 - 50

10 - 25

0 - 100

3.6 Formación de Suculentas

(Presencia de suculentas > 5 %)

< 10

< 10

0 - 100

3.7 Plantación de Arbustos n. a. n. a. n. a. n. a.

4 Bosques

4.1 Plantación

4.1.1 Plantación adulta

4.1.2 Plantación joven o recién cosechada

4.1.3 Bosque de exóticas asilvestradas

n. a.

n. a.

n. a.

n. a.

4.2 Bosque Nativo

4.2.1 Bosque adulto (árboles > 8 m de altura)

Denso

Semidenso

> 75

50 - 75

0 - 100

0 - 100

Page 46: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

4.2.2 Renoval

Abierto

Muy Abierto

25 - 50

10 - 25

4.2.3 Bosque adulto / renoval

4.2.4 Bosque achaparrado (altura 2 - 8 m)

Denso

Semidenso

Abierto

Muy Abierto

> 75

50 - 75

25 - 50

10 - 25

0 - 100

0 - 100

4.3 Bosques Mixtos

4.3.1 Bosque nativo / Plantación

4.3.2 Bosque nativo con exóticas asilvestradas

Denso

Semidenso

Abierto

Muy Abierto

> 75

50 - 75

25 - 50

10 - 25

0 - 100

0 - 100

5 Humedales

5.1 Vegetación Herbácea en orillas de ríos

5.2 Marismas Herbáceas

5.3 Ñadis Herbáceos y Arbustivos

5.4 Turbales

5.5 Bofedales

5.6 Vegas

5.7 Otros terrenos húmedos

n. a.

< 25

0 - 100

0 - 100

6 Áreas Desprovistas de Vegetación

6.1 Playas y Dunas

6.2 Afloramientos Rocosos

6.3 Terrenos Sobre el Límite Altitudinal de la

Vegetación

6.4 Corridas de Lava y Escoriales

6.5 Derrumbes Sin Vegetación

6.6 Salares

6.7 Otros Sin Vegetación

6.8 Cajas de Río

n. a.

< 10

< 25

< 10

< 25

< 10

< 25

7 Nieves Eternas y Glaciares

7.1 Nieves

7.2 Glaciares

7.3 Campos de Hielo

n. a.

n. a.

n. a.

n. a.

8 Cuerpos de Agua

8.1 Mar

8.2 Ríos

8.3 Lagos, Lagunas, Embalses

n. a.

n. a.

n. a.

n. a.

9 Áreas No Reconocidas

9.1 Áreas de Acceso Restringido

9.2 Sin Cobertura Aerofotográfica

n. a.

n. a.

n. a.

n. a.

n. a. No aplicable

Page 47: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

Anexo 6. Mapa modelo de elevación

Page 48: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

Anexo 7. Mapa modelo de pendiente

Page 49: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

Anexo 8. Pautas para determinar la capacidad de uso en los suelos (Schlatter et al. 2003)

Variable I II III IV V VI VII VIIII

Pendiente (º)

(%)

< 2

< 3

< 3

< 5

< 6

< 10 1

< 9 1

< 15 2

< 3

< 5

< 17 2

< 30 4

< 30 4

< 58 10

> 30 4

> 58 10

Profundidad

fisiológica

(cm)

> 120

> 70

> 40

> 20

< 40

> 40

> 20

Cualquiera o

Inundado

Pedregosidad

(%)

< 1

< 5

< 10

< 25

< 75

< 50

< 75

0 - 100

Rocosidad

(%)

0

< 2

< 5

< 10

< 25

< 25

< 50

0 - 100

Riesgo de

Inundaciones

Ninguno a

Ocasional

Ninguno a

Frecuente

Ninguno a

Frecuente

Ninguno a

Frecuente o

Prolongado

Ninguno a

Frecuente y

Prolongado

Ninguno

Ninguno

Ninguno o

Terrenos

inundados

Susceptibilida

d a

la erosión

Ninguna a

Ligera

Ninguna a

Ligera

Ninguna a

Moderada

Ninguna a

Pronunciada

Ninguna a

Moderada

Ninguna a

Pronunciada

Ninguna a

Pronunciada

Ninguna a

Muy

Pronunciada

Nivel freático

(cm)

> 150

> 100

> 70

> 40

Superficial o

sin

---

---

Sin o

inundado

Drenaje

interno

del suelo

Moderado-

rápido

a Moderado-

lento

Moderado-

lento

Muy rápido a

Lento

Muy rápido a

Muy lento

Muy rápido a

Muy Lento

Muy rápido

a

Muy lento

Muy rápido

a

Muy lento

Muy rápido

a

Muy lento

Textura

Franca arenosa

Arena franca a

Arena limosa

Todo el rango

Todo el rango

Todo el

Todo el

Todo el

Page 50: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en

a Franca limosa Franca

arcillosa

a

Arcilla limosa

rango rango rango

Consistencia

en

Húmedo

Suelta a

Friable

Suelta a

Friable

Suelta a

Firme

Suelta a

Muy Firme

Suelta a

Muy Firme

Suelta a

Muy Firme

Suelta a

Muy Firme

Todo el

rango

Capacidad de

agua

aprovechable

Alta a

Moderada

Alta a

Baja

Alta a

Baja

Todo el rango

Todo el rango

Todo el

rango

Todo el

rango

Todo el

rango

Disponibilida

d de

elementos

nutritivos

Buena

Buena a

Moderada

Buena a

Baja

Buena a

Baja

Buena a

Baja

Buena a

Baja

Buena a

Baja

Buena a

Baja

Días libres de

heladas

>140

> 100

> 80

> 50

---

> 50

---

---

Período de

sequía estival

Corto Corto Largo Muy Largo Muy Largo Muy Largo Muy Largo Cualquiera

Limitaciones

climáticas

Ninguna Ninguna a

Leves

Ninguna a

Moderadas

Ninguna a

Severas

Ninguna a

Severas

Ninguna a

Severas

Ninguna a

Severas

Ninguna a

Muy Severas

Intensidad

de uso

Cultivos

intensos o muy

intensos

Cultivos

intensos con

ligeras

limitaciones

Cultivos con

limitaciones a

Forestal

intensivo

Cultivos con

limitaciones

pronunciadas

a Forestal

intensivo

Praderas o

Forestal con

limitaciones

Forestal o

Praderas con

limitaciones

Forestal con

limitaciones

Sin uso

agrícola;

Forestal de

protección

Page 51: Clasificación de áreas potenciales para reforestación en