Cc 1618-1620! la virginidad por el reino de Dios! 1 Co 7., 31

Las vocaciones e iluminan y complementan, muchas veces se desprecia las otras vocaciones, por no entenderlas, la iglesia es un cuerpo, y hay un equilibrio de carísimas y vocaciones, para el bien del cuerpo místico de cristo, la iglesia.

Es el espíritu santo el que fomenta las vocaciones en la iglesia.

Cristo es el centro de toda vida cristiana, el vínculo con EL, encabeza todo vínculo humano, ocupa el primer lugar sea este familiar, social, amical.

Somos seguidores de jesucristo, no de nuestra madre, padre, hermanos, amigos.

Lc 14., 26

Mc 10., 28, 31

estos textos nos habla de la prioridad de seguimiento a jesucristo, incluso el amor esponsal, de hermanos, a los padres, amigos.

Cc 2232 los vínculos familiares aunque son importantes no son absolutos, los padres deben respetar las vocaciones de sus hijos.

hay que decirle a algunos padres, que no intenten poseer a sus hijos, más aun si deciden responder a la

vocación sacerdotal oh religiosa, porque hay casos de algunos padres, no les cae bien, si un hijo oh hija decide por una vida religiosa.

¡ el que no sea capaz de dejar a su padre oh madre por mi, ese no es digno de seguirme!., el cristiano es discípulo de jesucristo, no de los padres, hermanos, u hijos, sino de Jesús.

No hay en estas sociedades que defiendan más a la familia , matrimonio, la iglesia.

Desde los comienzos de la iglesia han habido hombres y mujeres que lo han dejado todo por seguir a jesus.Ap

14., 4

El señor necesita quienes se ocupen de sus cosas.

1 Co 7., 31

No quiere decir san pablo que los que tengan ,mujer se olviden de ellas , ojo.

cita pablo, que la mujer no casada, la doncella se ocupa de las cosas de Dios, y la casada de sus hijos y marido., aunque hay casadas oh casados que saben integrar a sus vidas matrimoniales, algún servicio en la iglesia.

En la vida consagrada en virginidad, hay una ventaja, ese desposorio directo con Jesús, no este divido, servir al Señor con corazón indiviso., aunque esto no siempre

resulta así, pues hay sacerdotes que han dejado de serlo, por casarse, oh monjas que han dejado su vocación, talvez sea porque realmente no tenían el llamado a una vida religiosa, una vida centrada en Dios.

La vocación no la elegimos nosotros, es Dios quien nos la da., todos cual sea nuestra vocación estamos llamados a ser santos, cual sea el estado de vida, no solo los curas oh las monjas, todos.

Dios llama a unos al sacerdocio sacramental, a otros al matrimonio, a otros a la soltería, a otros a una vida religiosa.

La razón última del matrimonio, es la unión esponsal con jesucristo, por otro lado el matrimonio no es eterno, lo que es eterno es nuestra unión esponsal con jesucristo.

El matrimonio es un adelantar aquí, lo que en lo eterno, será por siempre, totalmente unidos a jesucristo.

En la otra vida ya no hay grado de dependencia entre un hombre y la mujer., así nos lo narra esta historia bíblica, abajo citada, hay quienes se les hace imposible

una felicidad eterna sin sus maridos, oh mujeres, pues todo lo ven desde sus afectos actuales.

Mc 12., 25

¡ No habrá más dependencias esponsales , amicales, familiares¡.

En la otra vida Dios será nuestra felicidad eterna, y debería empezar a serlo desde este mundo, así no tendríamos tantos apegos afectivos.

Muchos nos quedamos con el signo, pero no alcanzamos el significado.

la vocación al celibato, y a la virginidad religiosa, será un adelanto , de ese desposorio, eterno que todos viviremos en el Señor, estas vocaciones son un signo, para lo que todos viviremos en la eternidad.

Las realidades del celibato y virginidad por el reino, son inseparables y se apoyan juntamente.

El catecismo nos ofrece cita de los padres de la iglesia.

Juan Crisóstomo, la vocación a la virginidad en la vida consagrada, la iglesia, nunca ha minimizado la unión carnal matrimonial, que es santa y pura , aunque tiene sus etapas de virginidad oh de abstinencia.

Denigrar el matrimonio, es también denigrar la vida consagrada, cita juan Crisóstomo.

Ensalzar el matrimonio, es también ensalzar la vida consagrada.

El casado ilumina al célibe, el casado recuerda al célibe, que esa unión sacramental con Jesús, ha de vivirla en

clave esponsal, pues también van a tener muchos hijos espirituales.

Dios les da a los sacerdotes esa vocación paternal oh maternidad, al llamarles padre oh madre, y es que se entiende que su vocación esta iluminada por el matrimonio, en el de ellos, en clave de su desposorio espiritual con Dios, que es padre de todos los hombres, y los sacerdotes serán también padres de muchos hijos espirituales.

Bendiciones

Tu catequista en linea

Morayma