Candidato Independiente. Por: Juan Palomeque

El 7 de Junio del presente año, se dio de manera contundente la victoria en la carrera a la gubernatura del Estado de Nuevo León de Jaime Rodríguez Calderón, mejor conocido como “El Bronco”, quien a pesar del momento cumbre en el que se ha visto encuentra, enfrenta una gran variedad de retos en los cuales se pondrá a prueba su capacidad para gobernar uno de los estados más importantes de la República Mexicana. El principal reto al que se encuentra, más allá de no pertenecer a ningún partido político, es a la inseguridad, monstruo que asecha y ataca el Estado de Nuevo León a través de la delincuencia organizada, desde hace tiempo, pues en menos de 24 horas, revistas del medio como “Proceso” y el Periódico “El Universal” reportan 17 muertes, una de ellas en el Municipio de García, lugar donde radica actualmente “El Bronco”.

Mucho se ha especulado y dicho de sus orígenes políticos, mismos que son de extracción priista y los cuales ponen en entredicho esa buena popularidad ganada por “El Bronco”, pues es por todos conocido las estrategias que utiliza el Partido Revolucionario Institucional para sostener el control del país a costa de lo que sea, también se especula a cerca de un grupo de empresarios Nuevo Leoneses quienes costearon parte de la campaña del ahora Gobernador electo, pues en caso de que el P.R.I. no estuviera inmiscuido en esta romántica historia, serian estos personajes quienes tendrían la batuta del estado.

El segundo reto al que se enfrenta el gobernador electo, es la deuda que deja su predecesor, pues si bien es cierto que lo exime de responsabilidad penal, lo da poco margen de maniobra para poder operar en el estado de una manera óptima.

En medio de tantos dimes y diretes, lo único que podrá demostrar la franqueza y el compromiso del que se jacta Jaime Rodríguez Calderón, será que desempeñe un buen papel durante su mandato y consolide esa confianza que los gobernados han depositado en el mandatario, quienes lo eligieron en un claro ejemplo de descontento hacia los partidos políticos. El último reto y quizá el más importante, es que a pesar de haber sacudido el sistema y de haberse consolidado en la cúspide del Ejecutivo a nivel estatal, se encuentra ante una legislación totalmente opuesta pues es el único independiente que se encontrará en la próxima legislatura y tendrá que poner a prueba su capacidad de gestión y de negociación para poder trabajar en conjunto por el beneficio de los habitantes de Nuevo León.