breverías: vampiros en la niebla

8
Revista Nº 215 abril 2016 Primera publicación digital de Huéscar desde 1998 Precio 0,60 Euros Breverías: Vampiros en la niebla La niebla estimula la imaginación y la refuerza como una mujer envuelta en un velo, escribía el pintor Friedrich (1774-11840). La niebla tiene otros efectos, para los que no son pintores ni poetas, les impide ver y si nos referimos a la nebulosa de la mente, para y cuenta la cantidad de su- misiones al gran amo, cuantos ideales amasados con intereses y dineros ajenos cruzado con el viejo caciquismo y los “transparentes” cambala- ches de compadreo político. Tanta luz, información conocimientos, y tanta oscuridad en los ojos (oscuridad en intenciones, palabras y discursos), de quienes miran, expli- can y saben (o así lo creen y dicen): sin dicha, sin confianza, sin mejora. Cuánta gente esperando en la cola un "algo" que "salve" para pedir peras al olmo. Andan olvidadizos de sus tareas, quienes son votados, no para salvar, sino negociar y gestionar recaudar según principio “¡hacienda so- mos todos!”, y de otros deberes derivados de la Constitución, tan olvida- da ella; tan olvidados los derechos de vida digna, como que andan como ensimismados. Escritor de mesa cami- lla (cuento) Antonio le encanta las magdale- nas de chocolate que prepara su hija para la merienda, sus cami- natas por el paseo marítimo de Fuengirola hasta “la peseta”, y sobre todo sus creaciones litera- rias; historias, ensayos, sonetos y poemas. Página 8 www.cuadernillosdelasagra.com Memorias de Miguel López Cruz Además de asistir a las clases diarias que impartía mi tío Pas- cual, tenía otra obligación inelu- dible, la de llevar diariamente la comida a mi padre. Llevábamos la comida en una cesta de mimbre al que iba atado con un cordel un trozo de cartón. Página 3 Para entender lo que nos pasa ¿No tienes a veces la impresión de que vivimos…, si a esto se le puede llamar vida…, en un mun- do roto? Sí, roto como un reloj roto. El mecanismo funciona. Por fuera nada ha cambiado. Página 6 Parar la guerra Conferencia sobre Siria y refu- giados de guerra. Silvina Monte- ros antropóloga), nos sitúa en la historia este país y los colindan- tes incluidos en el llamado Oriente Medio sus importancia y esplendor, invasiones antigua y recientes. Página 4

Upload: ngodat

Post on 10-Feb-2017

218 views

Category:

Documents


4 download

TRANSCRIPT

Page 1: Breverías: Vampiros en la niebla

Revista Nº 215 abril 2016 Primera publicación digital de Huéscar desde 1998 Precio 0,60 Euros

Breverías: Vampiros en la niebla

La niebla estimula la imaginación y la refuerza como una mujer envuelta en un velo, escribía el pintor Friedrich (1774-11840). La niebla tiene otros efectos, para los que no son pintores ni poetas, les impide ver y si nos referimos a la nebulosa de la mente, para y cuenta la cantidad de su-misiones al gran amo, cuantos ideales amasados con intereses y dineros ajenos cruzado con el viejo caciquismo y los “transparentes” cambala-ches de compadreo político. Tanta luz, información conocimientos, y tanta oscuridad en los ojos (oscuridad en intenciones, palabras y discursos), de quienes miran, expli-can y saben (o así lo creen y dicen): sin dicha, sin confianza, sin mejora. Cuánta gente esperando en la cola un "algo" que "salve" para pedir peras al olmo. Andan olvidadizos de sus tareas, quienes son votados, no para salvar, sino negociar y gestionar recaudar según principio “¡hacienda so-mos todos!”, y de otros deberes derivados de la Constitución, tan olvida-da ella; tan olvidados los derechos de vida digna, como que andan como ensimismados.

Escritor de mesa cami-lla (cuento)

Antonio le encanta las magdale-nas de chocolate que prepara su hija para la merienda, sus cami-natas por el paseo marítimo de Fuengirola hasta “la peseta”, y sobre todo sus creaciones litera-rias; historias, ensayos, sonetos y poemas.

Página 8

www.cuadernillosdelasagra.com

Memorias de Miguel López Cruz

Además de asistir a las clases diarias que impartía mi tío Pas-cual, tenía otra obligación inelu-dible, la de llevar diariamente la comida a mi padre. Llevábamos la comida en una cesta de mimbre al que iba atado con un cordel un trozo de cartón.

Página 3

Para entender lo que nos pasa

¿No tienes a veces la impresión de que vivimos…, si a esto se le puede llamar vida…, en un mun-do roto? Sí, roto como un reloj roto. El mecanismo funciona. Por fuera nada ha cambiado.

Página 6

Parar la guerra

Conferencia sobre Siria y refu-giados de guerra. Silvina Monte-ros antropóloga), nos sitúa en la historia este país y los colindan-tes incluidos en el llamado Oriente Medio sus importancia y esplendor, invasiones antigua y recientes.

Página 4

Page 2: Breverías: Vampiros en la niebla

2

Julián el de la RUTA DEL SUR

Espuela: Se llama así a la copa final ingerida en las tabernas por supersti-ción, por no decir que es la última.

Bloodless Mary En vaso mezclador con hielo: 1 golpe de salsa worcestershire ½ jugo de limón ½ jugo de tomate, sal y pimienta Remover y pasar a vaso mediano Con ramita de menta fresca.

Vocabulario del vino

Adquiere los cuadernillos en Castro Urdiales

Biblioteca municipal y taberna la Cierbanata de Castro Urdiales, Cantabria

Y presos de una larga tradición que no se atreve ni “acometen ni el problema religioso ni el económico ni el educativo” como escribió Pérez Galdós en 1912 en un artículo que terminaba: “Tendremos que espe-rar como mínimo 100 años para que en este tiempo, si hay buena suerte, nazcan personas más sabias y menos chorizos de los que tenemos actualmente. ¡Pobres españoles lo que nos costará recuperar lo perdido!”. Fuente de inquietud preocupación por "los dineros". Unos para saquear bienes públicos, otros par vivir del dinero público, y los más con sueldos recortado y en precario y con servicios públicos en continua defi-ciencia. Qué contar. Y los dineros perdido no los de-vuelve. Siempre parece haber estado ahí la preocupación, pero ahora tocada más de cerca y abocada al descla-samiento (vieja palabra) unido a la pérdida de estatus social a la pobreza más menos disimulada. "Soy malo porque soy desgraciado" dijo alguna vez el Frankestein de Mary Shelley. Ahora cabe decir estamos en desgracia cultural y económica lo hacen mal y han declarado proscrito lo que huele a educa-ción, cultura y bienestar. Cuando apareció el libro de Frankestein, esa gran metáfora, era también una época de transformación del capitalismo, vampirismo económico y desgracia mayoritaria y angustias individuales. Como ahora. Rafa Cuevas

El mapa de tu cuerpo me desdobla El sueño y la realidad Pierdo la memoria en la bahía de tu boca Me anochece la música en la escollera de almendra Se me va la calma en la rambla del vértigo A la vuelta del silencio Se me aparecen encina y caballo El cuerpo es un mapa siempre por hacer Los dedos dibujan caminos de arena Las manos deshacen la voz callada de las heridas Rafa Cuevas

En Huéscar puedes adquirirla la revista

Cuadernillos de la Sagra en

Papelería Ana

Pastelerías el Pilar

Bar Restaurante Ruta del Sur

Caricias

Page 3: Breverías: Vampiros en la niebla

3

Fragmentos de memorias de Miguel López Cruz

comida para sus deudos encarcelados. Ese día una chica de dieciocho o veinte años esperaba en la cola con su humilde cesta. Estaba pobremente vestida y sufría una severa discapacidad en una pierna que te-nía extremadamente delgada. Posiblemente había sufrido en su niñez un ataque de polio que la dejó lisiada de por vida. El vigilante, harto de dar gritos y exasperado por la muchedumbre a la que no podía dominar a pesar de sus gritos y maldiciones, empezó a empujar de una manera brutal a todo el que se po-nía por delante. La joven que he mencionado antes, tuvo la mala suerte de encontrarse en las primeras filas y recibió uno de estos empellones. Cayó al suelo y en la caída se desparramó lo que llevaba en la cesta. Eran patatas hervidas y un cuenco de aceitunas. La imagen de la pobre coja renqueando que intentaba recoger las patatas y las aceitunas sucias de tierra mientras sollozaba, no se me ha olvidado nunca. En el campo de concentración de Albacete Llegaron detenidos mis tíos Ramón y Pepe, herma-nos de mi padre y como éste, ex –maestros. Habían pertenecido en los últimos tiempos de la contienda al SIM (Servicio de Información Militar), especialmen-te aborrecido por los vencedores; temiendo las conse-cuencias que estas circunstancias pudieran acarrear-les, los trasladaron a Alicante donde se esperaba la llegada de barcos que pudieran expatriarlos. Esta es-peranza resultó fallida. Los barcos no llegaron nunca, y centenares de aspirantes al exilio fueron atrapados como conejos en un cepo. Fueron trasladados varios días después a un campo de concentración de emergencia que se estableció en Albatera. Las bajas que allí se produjeron, según mis tíos, fue-ron incontables, tanto por las espantosas condiciones de hacinamiento como por las precarias condiciones de alimentación. Mantenidos a la intemperie, sin asistencia médica de ninguna clase, los casos de disentería eran corrientes, se deshidrataban y en pocas fechas estaban ya listos para el hoyo. En contraste con las cagaleras, estaban los casos de estreñimiento. Mi tío Ramón me relataba años más tarde que él padeció esta enfermedad, que achacaba a la ingestión de algarrobas que en muchas ocasiones fue la única dieta que pudo conseguir. A veces iba a cagar, y después de laboriosos esfuerzos lo único que conseguía era un puñado de cagarrutas, “que me hacían pensar que tal vez me convertiría en una cabra”. Las “sacas” incontroladas de presos era otra causa de la despoblación del penal. Eran frecuentes en los días de inmediatos a la terminación de la guerra. Se presentaban el campo grupos de distintas proceden-cias con listas de desgraciados a los que querían “ajustar cuentas”. Cualquier papel que viniera

La cesta de comida tirada por el suelo Además de asistir a las clases diarias que impartía mi tío Pascual, tenía otra obligación ineludible, la de llevar diariamente la comida a mi padre. Llevábamos la comida en una cesta de mimbre al que iba atado con un cordel un trozo de cartón con el nombre y el número que se le había asignado en la cárcel. El de mi padre era el nº 242, aún hoy lo re-cuerdo. Para llegar al cine, tenía que atravesar la calle Mayor, la más larga del pueblo, al igual que otros muchos familiares de los que estaban detenidos. Llegábamos al ensanche que había enfrente del cine, dejábamos las cestas numeradas en largas filas. A continuación un grupo de detenidos, custodiados por la Guardia Civil, salía y se llevaba las cestas. Seguíamos espe-rando una hora aproximadamente hasta que por el mismo conducto eran devueltas las cestas vacías y las volvíamos a recoger. Con el fin de evitar aglomeraciones y poner orden entre los que esperábamos, había una colección de “pelotas” del pueblo, deseosos de subirse al carro del vencedor, y con tal de conseguirlo estaban dispuestos a hacer cualquier cosa. Se ponían una camisa de Fa-lange y realizaban las tareas más ingratas y desagra-dables. Fui testigo de un hecho que me impactó de manera especial y cuyo recuerdo permanece en mí de forma indeleble. Uno de estos individuos “trepas”, en su juventud, ante la falta de horizontes en el pueblo, emigró a Es-tados Unidos. Estuvo trabajando en una de las fábri-cas Ford; en una de las ocasiones la empresa hizo una oferta para la adquisición de uno de los automó-viles, y aprovechó la ocasión; invirtió el dinero que había ahorrado, compró el coche y regresó con el mismo al pueblo. Éste fue de los primeros “coches punto”, como entonces se llamaba lo que hoy se co-noce como taxi. Como digo, este individuo era uno de los que se ocu-paban de poner orden entre los que acudían con la

Page 4: Breverías: Vampiros en la niebla

4

firmado por cualquier autoridad local de aquellos primeros tiempos era suficiente para la entrega de los mismos. Se iban nombrando en voz alta y se formaba un gru-po que sin más ceremonias se entregaba a los solici-tantes. Casi todos sufrían malos tratos y vejaciones, y en la vorágine del final de la contienda, de muchos de ellos no se ha vuelto a saber nada. Sencillamente des-aparecieron. Otros consiguieron salvar la pelleja por el sencillo método de no contestar cuando se les lla-maba. Pasado un tiempo, se hizo cargo del campo la Guar-dia Civil y el ejército, y las “sacas” acabaron de ma-nera tajante en cuanto se estableció un mínimo de autoridad. (Continuará) Miguel López Cruz

Parar la guerra

El quijote en la India Las aventuras del ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha ya se pueden leer completas en hindi, tras diez años de intenso trabajo de la académica india Vibha Maurya para hacer la obra universal de Miguel de Cervantes "lo más cercana posible" a los hablan-tes del cuarto idioma del mundo. "Mancha ki ek jagah mein...", así empieza "El Qui-jote" en hindi; la primera parte tradujo Maurya en 2005 y una década después ha concluido la segunda, explicó la catedrática durante su presentación hoy en el Instituto Cervantes de Nueva Delhi. Es la primera traducción completa, de las dos partes, y directa del español, no desde el inglés como hasta ahora", aseguró la profesora de estudios hispánicos de la Universidad de Delhi y miembro de la Real Academia Española (RAE) de las Letras. Esta experta en la obra cervantina reconoció que "no es fácil la traducción directa, sin pasar por una terce-ra lengua, porque tienes que ser hispanista en el sen-tido de conocer la historia, la cultura y todo el con-texto del libro", escrito entre 1605 y 1615.

“parar la guerra”. Misma expresión del personaje de “Pic-Nic” (Fernando Arrabal, 1962), me vino a la memoria. El mismo médico entre otros recuerdos nos contó de aquella criatura cuya madre encarcela-da, que nació en prisión; no había visto la luz del día ni de la noche, no había visto un pájaro ni un árbol ni el agua que corre ni… los carceleros llamaron a una enfermeras para que contara cuento a aquella criatura abandonad a su suerte. No estoy muy seguro de que miles de historias de este tipo, que a lo largo de la historia se han contado, todavía suceden, puedan motivar para parar la gue-rra. La naturaleza es bella y oculta misterios, algunos ya descifrados, pero genera muertes y catástrofes sin mirar a quien; la humanidad es hermosa, pero produ-ce fealdad y maldad; sigue leyes propias de la natura-leza y leyes propias de la condición humana en parti-cular; la guerra está instalada en los ”genes” o en los memes de las culturas de los pueblos del mundo. la paz es el ideal que más tarde se hará realidad. Es un deseo y un horizonte situados fuera del tiempo (ucronía), fuera del espacio y lugar (utopía). Lo cual siempre está por llegar. Curro

Conferencia sobre Siria y refugiados de guerra. Silvi-na Monteros antropóloga), nos sitúa en la historia este país y los colindantes incluidos en el llamado Oriente Medio sus importancia y esplendor, invasio-nes antigua y recientes, su tiempo de reformas hacia libertad y laicismo y la derivas de Asad hacia totali-tarismo que propició una revuelta popular (diría un médico emigrado entre el público) y las masacres del día a día (incluida la lucha antiterrorismo, invento y aliado para aterrorizar, mantenerse en poder y servir a las potencias deudoras de la industria de la guerra. La huida diaria y los refugiados que no encuentran refugio en esta Europa, que está dando la vuelta a los derechos, de protección y asilo en caso de guerra, (acordados en la ONU en 1961, ratificados en Gine-bra,1967). El paisanaje- público, entre compasión-impotencia para responder qué hacer, y alguna soflama verbal. Ahora, nada que ver con aquellas manifestaciones verbales y en la calle contra la invasión de Irak de 2002 (acaso gatos escardados de que entonces no se paró la guerra, como ahora tampoco). El médico asistente veía la solución:

Noticias cervantinas

Page 5: Breverías: Vampiros en la niebla

5

Tangos

Me canse de estar contigo Escucha lo que te digo

Que te quiero y te respeto Y no puedo estar contigo

Porque yo quiero ser libre Igual que la luz y el viento Que se abrazan y se besan Sin tener un documento

Y el amor ha de ser libre

Lo mismo que el pensamiento Que lleva donde quiere

Sin ningún impedimento

Porque el amor es ternura Es locura y es pasión

Son cositas que te salen De adentro del corazón

Y es que el amor nace solo Y el tiempo le hace crecer Y después somos nosotros Quien lo echamos a perder

Por eso quiero ser libre

Igual que la luz y el viento Que se abrazan y se besan Sin tener un documento

Miguel Fernández Lapaz

De un Tíbet Andaluz

Estamos esperando tú articulo, comentario o sugerencia

Anímate y escríbenos [email protected]

Sesión de tarde Subo a los tejados y se me muere la tarde, el cielo es una gran pantalla de nubes pariendo imá-genes deshaciéndose, metraje de un sueño que filmar a Buñuel. La estela del reactor es una cicatriz que la hiere, el garabato de un niño en un papel de seda…, azul. Abajo, farolillos de luz, la vida yéndose, y es una in-mensa manzana. A la orilla de los aleros, junto a espantapájaros metá-licos asustando aves migratorias, veo los ocres diluidos de la catedral, indefinidos, contagiándose de las primeras sombras de la noche, que va cercándolo todo. Lejos entre un mar blanco de pinzas y sábanas, el proyector es ahora un firmamento. Tras la neblina del biombo pintado de ícaros escarpa-dos, escondidos…, tus ojos de amapola caídos sin cuerpo que ponerse. Ahora, que ya es intermedio, bajo a quererte tanto, y enmarañarme contigo en el zaguán, a la vera de mil ramas políticas de tu pelo, y verlas… en un momento preciso. Javi Marín Sola

Poesía y Flamenco

Page 6: Breverías: Vampiros en la niebla

6

Para entender lo que nos pasa

¿No tienes a veces la impresión de que vivimos…, si a esto se le puede llamar vida…, en un mundo roto? Sí, roto como un reloj roto. El mecanismo funciona. Por fuera nada ha cambiado. Todo está en su lugar. Pero si te llevas el reloj al oído, no se oye nada; ¿entiendes? El mundo, eso que llamamos el mundo de los seres humanos…, que en otro tiempo debió tener corazón, pero pareciera que ese corazón ha de-jado de latir Gabriel Marcel (París, 1889-1973) en “El mundo quebrado, 1956 Creo que el hombre libre comienza cuando devuelve la libertad a todo el universo que le rodea…, y no cuando comienza a cogerlo para sí, y en contra de todos. Henri Laborit bioquímico ((Hanói 1914 - París 1995) Simplemente empezar a no votar a los políticos que evaden o eluden /pagar impuestos/. Tampoco debe-ríamos comprar a empresas que no pagan sus im-puestos-con trucos legales o ilegales- en donde obtie-nen sus ingresos. La multinacional Starbucks se dio cuenta del daño a su reputación que sufría, y empezó a pagar todos sus impuestos al fisco británico. Stuart Halland (1940), autor de “Contra la hegemo-nía de la precariedad” Mucho le falta a quien mucho pide. Feliz aquel a quien la divinidad, con una mano económica, ha pro-curado lo suficiente. Horacio (- 65-8 aC.), en Oda XVI Sí tengo puntos de vista muy firmes. Sé que el amor viene en todo tipo de tamaños y que nos empobrece-mos si le negamos a alguien el derecho de amar. Sé que existe la crueldad, pero también la bondad. Sé que la bondad requiere más coraje que el cinismo. Me gusta analizar qué lugar ocupa la fe en la vida de las personas, tanto en un sentido religioso como

espiritual, y la fe que los unos depositamos en los otros. Louise Penny (1958), novelista canadiense. No conozco ya los nombres de un mundo que me niega. Nítidamente leo las conchas, las hojas, las estrellas. El rencor me es superfluo en las sendas del cielo. Salvo que sea el sueño, que me vuelve a mirar, a cruzar con lágrimas el mar de la inmortalidad. Odisseas Elytis (Atenas 1911-1996), Nobel de litera-tura en 1976. Porque en una aldea un pobre mancebo hurtó solo un huevo al sol se bambolea, y otro se pasea con cien mil pleitos. Cuando pitos flautas Cuando flautas pitos. Luis de Góngora (1561-1627), en “Da bienes la For-tuna”,1581 Los dioses –dice Gibbon (1737-94)- eran verdaderos para la plebe, falsos para el filósofo y útiles para el político. Podríamos decir lo mismo de los nacionalis-mos: la clase alta los utiliza, la clase media se los cree y los emigrantes los sufren. José Álvarez Junco (1943), autor de “Dioses útiles”, 2016 Dices feminismo y aparece en el inconsciente colec-tivo una tipa amargada con una vida sexual pobre. Se diría que el feminismo está pasado de moda antes de nacer si no fuera porque la crisis ha puesto al descu-bierto la desigualdad de género con cifras clamoro-sas. No hace falta mucho interés para conocer estos datos incontestables. Clara Sanchís Mira, novelista Sufra y calle el que se atreve más de a lo que sus fuerzas le prometen. Más fuerza tiene el tiempo para deshacer y mudar las cosas que las humanas volun-tades. Miguel de Cervantes, Quijote, I, 44

Page 7: Breverías: Vampiros en la niebla

7

El blog, la blog

Ella La música había dejado de sonar, solo el sonido de la muchedumbre que deambulaban aun por las calles rompía el silencio de la noche primaveral. Sobre la mesa de la terraza dos vinos y un plato con jamón para terminar los días de fiesta, charlaba ani-mado con su pareja del futuro común, del hijo que esperaban juntos cuando oyó aquel repiqueteo de ta-cones altos que se acercaban hacia donde él estaba, al volver la vista hacia la dirección de donde llegaba el sonido de tacones la vio, era ella, aquella era la mujer por la que había perdido la cabeza, el corazón y el sentido tiempo atrás. Allí frente a él estaban los ojos en los que tanto le había gustado perderse, la sonrisa que al volver a ver descubrió que le seguía estremeciendo el alma pero que ahora era para otro. Europa Muchos vivimos aquel acontecimiento con la ilusión de la juventud Éramos los jóvenes que seriamos o éramos los padres de las nuevas generaciones, unas generaciones de chic@s que ya no aprenderían aquello de "Europa termina en los Pirineos", crecerían en la creencia y convicción de que eran iguales al resto de chic@s de Europa… pero llego la crisis y ellos y nosotros des-cubrimos que de nada había servido los esfuerzos que ellos y nosotros habíamos hecho por que se for-marán Ellos, la generación más preparada de la historia de este país, han tenido que hacer las maletas como las hicieron sus abuelos para marchar a una Europa que los ha vuelto a tratar como en su día trato a los abue-los, como mano de obra barata de la que se puede abusar y a la que explotar. ¿Para qué queremos a Europa? Rosa Chillón

El blog. La blog. El blog. ¡Sólo la blog!

¿Por qué me trajiste, letra,

para apalabrad? ¿Por qué me incrustaste

en éste lugar?

En sueños la palabreada me tira de la razón; loco quisiera estar.

Letra, ¿por qué me viniste

desatá?

Gimoteando por ver el blog, un escriturito en sierra

alza al viento lo que siento: ¡Ay mi letra traicionera;

eterna, escondida en un cuento al mirar la palabrera!

Salvador Pageo Vázquez

Estamos esperando tú articulo, comentario o

sugerencia

Anímate y escríbenos [email protected]

El rincón de Rosa

Page 8: Breverías: Vampiros en la niebla

8

Escritor de mesa camilla (cuento)

Antonio le encanta las magdalenas de chocolate que prepara su hija para la merienda, sus caminatas por el paseo marítimo de Fuengirola hasta “la peseta”, y sobre todo sus creaciones literarias; historias, ensa-yos, sonetos y poemas. Si entras en una cafetería de Fuengirola con vistas al mar, el señor de la mesa del fondo que toma café y escribe en su tablet, escuchando música (jazz princi-palmente), ese es Antonio. Nadie está a salvo de quedar atrapado en sus relatos o poemas. Es muy observador, su maquinaria literaria no solo es capaz de capturar a cualquier incauto, si no, que con facilidad es capaz de exprimir la sustancia más inesperada de la persona. Le interesan las personas, sus realidades, sueño, an-helo, esperanzas, preocupaciones... Comprometido con la sociedad de nuestro tiempo, señala de manera inequívoca a los políticos que aprueban leyes contra natura y sentido común, leyes que oprimen a los dé-biles y favorecen a los pudientes. Su sentido del humos es acido, cualquier extrava-gancia es capaz de doblegarla e introducirla en el camino de la sensatez o la más inmensa locura. Con solo unas líneas de texto te puede hacer ver una foto-grafía donde sus personajes te hablan.

Piensa Antonio que si la naturaleza es tan sabia, co-mo ha creado esa plaga de personas sin escrúpulos esclavas de lo material y los mercados, que siendo una minoría nos amargan la existencia al resto de los habitantes del planeta. Ya os comentaba anteriormen-te, Antonio cree en las personas, y tiene el convenci-miento que no esta muy lejos el día que la gente sal-ga a la calle y exija lo que le corresponde, la libertad, la igualdad y la fraternidad. La ciencia ha sido su trabajo durante muchos años con la calificación de “Cum laude” su curriculum alargaría mucho este relato (www.antonioespinosa.es). La escritura es su vida y su vida es escritura, un poe-ma de amor en una atardecer malagueño con el sol buscando el ocaso en el mar, un amanecer cariñoso el la ribera del Genil o una mañana plateada entre oliva-res rojizos a lo lejos. La claridad de la mañana de Almería le vio nacer hace ya más de setenta años. Comparte la afición de leer en una meca camilla con un librero de la plaza de la trinidad, un servidor, y muchos de vosotros. Un buen escritor posee no solo su propia inteli-gencia, sino también la de sus amigos El miedo, el peor enemigo del ser humano El conocimiento, el mayor enemigo del tirano El amor, hace que el blanco y el negro se den la mano La sencillez, en la normalidad en los poseedores de talento Federico Rodríguez 20/08/2012 cuentos con persona-les reales, Antonio Espinosa

En Huéscar puedes adquirirla la revista

Cuadernillos de la Sagra en

Papelería Ana

Pastelerías el Pilar

Bar Restaurante Ruta del Sur

Estamos esperando tú articulo, co-

mentario o sugerencia

Anímate y escríbenos [email protected]