-12- DOMINICAL Domingo 30 de abril del 2017 CÓMIC

Para la década del 50, El Comercio inició la publicación del SUPERCHOLO, obra de Francisco Miró Quesada C. y Víctor Honigman.

— PERSONAJES —

A propósito del Día del Cómic Gratis, un repaso a las principales creaciones que forman parte de nuestra cultura popular desde hace más de cien años.

Breve historia de nuestra historieta

L a historieta en el Perú tuvo como base el género de la sátira políti-ca, con las mordaces caricaturas que se apreciaron en clásicas pu-blicaciones como Variedades,

Don Lunes, Fray K. Bezón y la recordada Monos y monadas, todas ellas aparecidas en los inicios del siglo pasado. Jorge Vinatea Reinoso produjo en 1922 las Travesuras de Serrucho y Volatín, quizá la primera tira en usar los luego indispensables globos de texto o bocadillos, y condujo a la creación de otras como La semana cómica (de Pedro Challe y Alcántara La Torre) y Los esposos Mazole-tonez (de Julio César Málaga).

Si bien al país llegaban diarios y suplemen-tos argentinos como El Tony, Pif-Paf, Ra-ta-plan y El Gorrión, recién conocimos una amplia gama de personajes desde 1949, gracias a las publicaciones de la recordada editorial mexicana Novaro, que tuvo una distribución expansiva por toda América y España; y lo mejor, a un bajo costo.

Para muchos, la edad de oro llegó de ma-nos del extinto diario Última Hora, que dio cabida desde 1952 a uno de los primeros hé-roes de la historieta local, ilustrado por Juan Osorio: Juan Santos, el guerrero, un serra-no hercúleo que obtenía sus poderes gracias a una cadena de oro. Otro de los personajes sobresalientes del diario fue el infartante y siempre despreocupado Sampietri, creación del desaparecido Julio Fairlie, y todo un sím-bolo de la viveza criolla limeña.

* * *La siguiente parada es en 1953 —en pleno ochenio de Odría—, con el lanzamiento de Avanzada, una revista educativa y patroci-nada por la iglesia católica. El estudio Osito Monky, conformado por Juan Osorio y Her-nán Bartra, se encargó de poblar con variopin-tos personajes sus páginas. Entre los más des-tacados tenemos a Coco, Vicuñín y Tacachito (niños representantes de nuestras regiones naturales), el Padre Lafuente, Clymer, Lore-

to, Capitán Leiker, Juan Tiburón, Fulbito y su Pandilla, entre otros.

Para 1957, John Polar lanzó la revista Cha-racato, pionera de la historieta arequipeña, y creó además diversas tiras como Machu-chos o Poncho andino. A la par, El Comer-cio inició la publicación del inconfundible Su-percholo, obra de Francisco Miró Quesada C. y Víctor Honigman, en su primera etapa, que abarcaría hasta 1965. Argumentos di-námicos y un arte experimental que terminó de cuajar con el paso de los años llevaron al Supercholo a conocer a los vitoreados re-ferentes de la época, como el piloto Arnaldo Alvarado, el tenista Alejandro Olmedo o el futbolista Alberto “Toto” Terry, y a participar en una historia que se repitió en sus diferen-tes encarnaciones: el campeonato de fútbol interplanetario.

A partir de 1965, el diario Expreso, su su-plemento Estampa y más adelante el Escolar (1968) nos presentaron a nuevas genera-ciones de artistas, como Pablo Marcos (ilus-trando la tira Benito Puma), Gonzalo Mayo (adaptando El mundo es ancho y ajeno, de Ciro Alegría), Dionisio Torres o Willy Zeva-llos; mientras que, en 1970, la publicación pedagógica Jaimito trajo a ilustradores como Jorge Monterrey, Alejandro Lozano y Nelson Ruiz, quienes adaptaban majestuosamente cuentos peruanos y de la literatura mundial.

* * *En noviembre de 1968 —año en que se pro-dujo el golpe militar de Juan Velasco Alvara-do—, la revista Avanzada publicó su último número. En lo que sería el inicio de las expro-piaciones de los principales diarios de Lima y provincias, el equipo de Osito Monky llevó sus historias y personajes para reinventarlos en otros títulos, como Escolar, El Trome y diversos suplementos de diarios (Extra y Expreso), añadiendo a sus fi las a Chépar el astronauta y al pícaro Manyute.

También a fi nes de los sesenta, el popular artista Carlos “Crose” Roose llevó a la histo-rieta a uno de sus célebres personajes, Jarano, mientras emergía el intrigante héroe Super-sol en una publicación independiente.

FRANCO QUIROZ

Para la década del 50, El Comercioinició la publicación del SUPERCHOLO, obra de Francisco Miró Quesada C. y Víctor Honigman.

LAlcántara La Torre) y

Avanzada

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1. Chépar, de Osito Monky2. La Chola Power, de Martín Espinoza3. El Cuy y Humberto, de Juan Acevedo4. Sampietri y Pucho, de Julio Fairlie

Selva misteriosa (noviembre de 1971), la historieta ganadora de un concurso pro-movido por El Comercio, fue magistralmen-te realizada por el doctor Javier Flores del Águila, con narraciones situadas en nuestra Amazonía e incluso adaptando historias rea-les. Los años siguientes, Chascay Lucero, la leyenda inca de Dionisio Torres; y Novac, las aventuras de ciencia fi cción de Jorge Bernuy, iluminaron las páginas de diarios como La Crónica y La Prensa.

1974 fue un año particularmente difícil para la prensa escrita, ya que se decretó su confi scación; diarios como El Comercio, La Prensa, Última Hora, Correo y Ojo fueron los últimos en caer bajo esta radical medida. Muchas tiras, como Sampietri, Serrucho, Selva misteriosa, Manyute y Chépar, fueron canceladas. Mejor suer-te corrieron las tiras de La Crónica, que presentó flamantes creaciones como G-8 (protagonizada por un osado agente de policía), de Luis Sayán; y Teodosio, de Luis Baldoceda: esta última traía a los lectores a un robusto campesino, quien, junto a su in-separable compañero Piquepancho, se en-frentaba a todo tipo de situaciones, incluso sobrenaturales.

* * *El 2 de febrero de 1976, bajo el gobierno de Francisco Morales Bermúdez y a través de la Resolución Ministerial N.° 088-76, se pro-hibió la importación de revistas extranjeras por considerarlas nocivas para la formación intelectual, moral y cívica de la población. Es así que títulos como Batman, Súper Ratón, Tío Rico, entre otras (todas de procedencia mexicana y chilena), quedaron inhabilitadas para su distribución en nuestro país.

A la par, surgieron nuevas iniciativas, co-mo El Otorongo, de Flores del Águila; De-metrio Auqui el morochuco, de Armando Villanueva; El tío Carlitos, de Mesías Fag-gioni; y Yahuar el guerrero, de Jorge Ber-nuy, las cuales llegaron en las páginas de la revista política X. A estas se sumó El Cuy, de la pluma del prolífi co Juan Acevedo (1979) en el semanario La Calle. El roedor, aparte de encarnar una corriente ideológica, fue pro-tagonista de incontables aventuras junto a su amigo Humberto, y se convirtió rápidamente en un ícono e indiscutible representante de la historieta nacional.

Las biografías de héroes patrios como Mi-guel Grau, Francisco Bolognesi, José Abelar-do Quiñones, entre otros, tuvieron cuidadas adaptaciones al cómic entre 1979 y 1983 (y posteriores reimpresiones), obras de Luis Baldoceda, Montoya y Luis Sayán, respecti-vamente. 1980 fue el año de la segunda en-carnación del Supercholo, que reapareció en El Dominical de El Comercio, esta vez acompañado de un nuevo integrante, el Capi-tán Intrépido. La segunda mitad de los ochen-ta trajo una sensible debacle económica que afectó directamente a las publicaciones na-cionales que con mucho esfuerzo habían visto la luz. Entre ellas destacaron Búmm!, Viñeta, Etiqueta Negra, Luchín Gonzales y, la más duradera, El idiota.

En la década de los noventa, Carlos Cas-tellanos nos presentó la serie El fugitivo, mientras que Javier Prado hizo lo propio con La señorita Clo Clo y Carlos Crisóstomo ilustró El piscoanálisis (sic), todo en el re-cordado suplemento Nazca Cómics, del dia-

rio Página Libre. Mientras, la intermi-tente Monos y monadas continuaba

sacándonos una sonrisa con las

divertidas caricaturas y críticas al gobierno de turno.

La picante heroína Quilla (1996), creada por Roger Galván, apareció en el semanario Zoociedad; y para el 2001, los hermanos Amadeo y Renso Gonzales crearon Carbon-cito, el primer fanzine local de corte indie que recopila historietas de autores locales y extranjeros. Lo mejor de su historia es que sigue vigente.

* * *En el 2002 llegó una nueva generación de personajes: El Capitán Leo, ilustrado por Christian Rosado; La Gran Sangre, por Kike Riesco; y al siguiente año Óscar y Luichín (sic), de Andrés Edery.

Perú.21, diario que reintrodujo el cómic de superhéroes en el mercado peruano, or-ganizó en el 2008 el primer concurso Bus-cando al Superhéroe Peruano; Martín Es-pinoza triunfó con La Chola Power, serie que siguió consolidándose con el paso de los años y que fue la base para poblar su uni-verso con otros héroes como El Guachimán, Escorpiona y Descomunal. En la segunda edición del concurso (2009), el ganador fue Gino Palomino con ¿Quemier?, personaje que ya cuenta con una novela gráfi ca virtual de buena factura.

Hay que anotar también en este compen-dio la publicación de la historieta Ayar, ilus-trada de una manera muy versátil por Chris-tian Ramos en el 2012. Además, en los últi-mos años, la revolución digital ha facilitado la aparición de nuevos héroes y talentos, como El Jaguar, de Antonio Carlín; Coro-nel Perú, de Pool Andrés Aguilar; Lay Fun, de Octavio Mendoza; Cornucopio, de Juan Carlos Silva, entre otros.

1. Chépar, de Osito Monky2. La Chola Power, de Martín Espinoza3. El Cuy y Humberto, de Juan Acevedo4. Sampietri y Pucho, de Julio Fairlie

la Resolución Ministerial N.° 088-76, se pro-hibió la importación de revistas extranjeras por considerarlas nocivas para la formación intelectual, moral y cívica de la población. Es

Batman, Súper Ratón, , entre otras (todas de procedencia

mexicana y chilena), quedaron inhabilitadas

tellanos nos presentó la serie El fugitivo, mientras que Javier Prado hizo lo propio conLa señorita Clo Clo y Carlos Crisóstomo ilustró El piscoanálisis (sic), todo en el re-cordado suplemento Nazca Cómics, del dia-

rio Página Libre. Mientras, la intermi-tente Monos y monadas continuaba

sacándonos una sonrisa con las

trada de una manera muy versátil por Chris-tian Ramos en el 2012. Además, en los últi-mos años, la revolución digital ha facilitado la aparición de nuevos héroes y talentos, como El Jaguar,nel Perú, de Pool Andrés Aguilar; de Octavio Mendoza; Carlos Silva, entre otros.

1. Chépar, de Osito Monky2. La Chola Power, de Martín Espinoza3. El Cuy y Humberto, de Juan Acevedo4. Sampietri y Pucho, de Julio Fairlie

5, 6 y 7 de mayo en el Campo de Marte (av. de la Peruanidad, Jesús María).

Talleres de dibujo, conferencias, concursos de cosplay, comiteca y más.www.diadelcomicgratis.pe

DÍA DEL CÓMIC GRATIS (VII EDICIÓN)

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