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INSTITUTO DE HORTICULTURA
BIOTECNOLOGÍA AGRÍCOLA
La presente tesis titulada FENOLOGÍA Y VALOR NUTRACÉUTICO DE
DIVERSAS VARIEDADES PIGMENTADAS DE TUNA (Opuntia sp); fue realizada
por José Marcos Ramírez Ramos, bajo la dirección y asesoría del consejo
particular, aprobada por el mismo y aceptada para obtener el grado de:
MAESTRO EN CIENCIAS EN
BIOTECNOLOGÍA AGRICOLA
AGRADECIMIENTOS
A ese ser etéreo y polémico que me dio la oportunidad de vivir; que me concedió el libre albedrío para manejar mi vida e iluminó mi destino que ha estado lleno de aventuras.
Al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACyT) y a los millones de mexicanos que han financiado parte de mi formación académica
A la Universidad Autónoma Chapingo; en especial al Instituto de Horticultura, a cada uno de mis profesores que lo integran y que participaron en mi formación profesional y me permitieron alcanzar un ideal de vida. A mi familia; porque nunca me han dejado solo, respetan y apoyan cada una de mis decisiones, alentándome siempre para continuar y ser mejor en la vida. A mi jurado examinador, por su invaluable enseñanza, por compartir conmigo sus conocimientos para la realización de la presente tesis y sobre todo por la confianza y amistad brindada. Son innumerables las personas a las que debo de agradecer todo su apoyo, amistad y comprensión, espero que continuemos así.
¡ MUCHAS GRACIAS A TODOS !
1
ÍNDICE GENERAL
Lista de cuadros Lista de Figuras Resumen Abstract Introducción General 1
Bibliografía 4
CAPITULO I: Patrón de crecimiento de catorce variedades pigmentadas de tuna (Opuntia sp.) en la nopalera experimental de la Universidad Autónoma Chapingo Resumen 1.1 Introducción 8
1.2 Materiales y métodos 9
1.3 Resultados y discusión 12
1.4 Conclusiones 22
1.5 Bibliografía 23
CAPITULO II: Caracterización fitoquímica de once variedades pigmentadas de tuna (Opuntia sp.) con diferente grado de maduración. Resumen 2.1 Introducción 27 2.2 Materiales y métodos 28 2.3 Resultados y Discusión 31 2.4 Conclusiones 41 2.4 Bibliografía 42 CAPITULO III Valor nutracéutico y color de variedades pigmentadas de tuna (Opuntia sp.) en poscosecha Resumen 3.1 Introducción 48 3.2 Materiales y métodos 49 3.3 Resultados y discusión 53 3.4 Conclusiones 64 3.4 Bibliografía 64 Conclusiones generales 69
LISTA DE CUADROS CAPÍTULO I
Cuadro 1. Descripción de catorce variedades y especies pigmentadas de
tuna (Opuntia sp.) cultivadas en la nopalera experimental Dr. Facundo
Barrientos Pérez de la Universidad Autónoma Chapingo. Chapingo, Méx.
10
Cuadro 2. Crecimiento y oportunidad fenológica de catorce variedades
pigmentadas de tuna (Opuntia sp.) 16
Cuadro 3. Valores de r de Pearson entre longitud del fruto (LF),
diámetro ecuatorial (DE) de catorce variedades pigmentadas de tuna
(Opuntia sp.) con la temperatura y la precipitación
18
Cuadro 4. Características físicas del fruto de catorce variedades
pigmentadas de tuna (Opuntia sp.) en la madurez hortícola cultivadas en
la nopalera experimental Dr. Facundo Barrientos Pérez de la UACh.
19
CAPÍTULO II Cuadro 1. Descripción de once variedades y especies de tuna (Opuntia
sp.) cultivadas en la nopalera experimental Dr. Facundo Barrientos
Pérez de la Universidad Autónoma Chapingo
29
Cuadro 2. Contenido de betacianias en la fenología del fruto de once
variedades y especies pigmentadas de tuna (Opuntia sp.) en pre y
poscosecha de la Nopalera Experimental Facundo Barrientos,
Universidad Autónoma Chapingo.
.
32
Cuadro 3. Contenido de betaxantinas en la fenología del fruto de 11
variedades y especies pigmentadas de tuna (Opuntia sp.) en pre y
poscosecha de la Nopalera Experimental Facundo Barrientos,
Universidad Autónoma Chapingo..
33
Cuadro 4. Contenido de compuestos fenólicos totales en la fenología del
fruto de 11 variedades y especies pigmentadas de tuna (Opuntia sp.) en
pre y poscosecha de la Nopalera Experimental Facundo Barrientos,
Universidad Autónoma Chapingo..
36
Cuadro 5. Contenido de flavonoides en la fenología del fruto de 11
variedades y especies pigmentadas de tuna (Opuntia sp.) en pre y
poscosecha de la Nopalera Experimental Facundo Barrientos,
Universidad Autónoma Chapingo..
37
Cuadro 6. Contenido de vitamina C en la fenología del fruto de 11
variedades y especies pigmentadas de tuna (Opuntia sp.) en pre y
poscosecha de la Nopalera Experimental Facundo Barrientos,
Universidad Autónoma Chapingo.
39
. CAPITULO III Cuadro 1. Descripción de once variedades y especies de tuna (Opuntia
sp.) cultivadas en la nopalera experimental Dr. Facundo Barrientos
Pérez de la Universidad Autónoma Chapingo.
50
Cuadro 2. Características de color del fruto de once variedades de tuna
(Opuntia sp.) de la nopalera experimental Dr. Facundo Barrientos Pérez
de la Universidad Autónoma Chapingo.
54
Cuadro 3. Contenido de betalaínas totales, betacianinas y betaxantinas
en el fruto once variedades de tuna (Opuntia sp.) de la nopalera
experimental Dr. Facundo Barrientos Pérez de la Universidad
Autónoma Chapingo.
56
Cuadro 4.Contenido de compuestos fenólicos totales y flavonoides del
fruto de once variedades de tuna (Opuntia sp.) de la nopalera
experimental Dr. Facundo Barrientos Pérez de la Universidad
Autónoma Chapingo.
58
Cuadro 5. Contenido de ácido ascórbico y actividad antioxidante del
fruto del fruto de once variedades de tuna (Opuntia sp.) de la nopalera
experimental Dr. Facundo Barrientos Pérez de la Universidad
Autónoma Chapingo.
61
LISTA DE FIGURAS
CAPITULO I Figura 1. Dinámica de crecimiento longitudinal de catorce variedades
de tuna (Opuntia sp.) cultivadas en la nopalera experimental Dr.
Facundo Barrientos Pérez de la Universidad Autónoma Chapingo desde
la etapa de yemas florales hasta la madurez hortícola.
12
Figura 2. Agrupación de catorce variedades pigmentadas de tuna
(Opuntia sp.) cultivadas en la nopalera experimental Dr. Facundo
Barrientos Pérez de la UACh, en base a características morfológicas.
21
CAPITULO II
Figura 1. Agrupación de catorce variedades pigmentadas de tuna
(Opuntia sp.) cultivadas en la nopalera experimental Dr. Facundo
Barrientos Pérez de la UACh, en base a características fitoquímicas
40
RESUMEN
México es el primer productor de tuna (Opuntia sp.) a nivel mundial, donde se localiza el mayor número de variedades que producen frutos pigmentados, sin embargo, se desconoce los índices de cosecha de algunas variedades; su alta estacionalidad de la producción, impacta en bajos precios para su comercialización, de ahí surge la necesidad de estudiar la velocidad de crecimiento y el índice de cosecha comercial con la finalidad de una producción en todo el año y aprovechar eficientemente su potencial agroindustrial. Asimismo, pocos son los estudios realizados de la calidad nutracéutica de los frutos de tuna pigmentados, pero se desconoce su variación durante el proceso de maduración del fruto y su alteración en poscosecha. Los nutracéuticos son importantes porque se asocian a la capacidad antioxidante y además previenen algunas enfermedades crónico-degenerativas. Los resultados de la presente investigación se presentan en tres capítulos. Los objetivos de la investigación fueron: I) Evaluar la dinámica de crecimiento de catorce variedades de tuna pigmentadas para identificar variedades precoces y tardías mediante el registro semanal del crecimiento de cinco plantas sanas por variedad cultivadas en la nopalera experimental Dr. Facundo Barrientos Pérez de la Universidad Autónoma Chapingo, Estado de México. La aparición de las yemas florales de las catorce variedades fue asincrónica y sus frutos presentaron un comportamiento de crecimiento sigmoide en la curva de crecimiento (longitud y diámetro); la variedad más precoz fue Roja Villanueva y la más tardía Texas RF. Copena V1, Larreyi y Solferino fueron ligeramente precoces. Castilla Sonora y Sangre de Toro resultaron variedades ligeramente tardías y las siete variedades restantes presentaron maduración común. II) Determinar la variación del contenido de nutracéuticos (betalaínas, compuestos fenólicos, flavonoides y ácido ascórbico) en el proceso de maduración del fruto. Los contenidos de betalaínas y compuestos fenólicos totales aumentaron en la madurez hortícola. III) Evaluar el valor nutracéutico y el color del fruto mediante la cuantificación de fenoles totales, flavonoides, betalaínas totales, betacianinas, betaxantinas, ácido ascórbico (vitamina C) y actividad antioxidante de once variedades de tuna pigmentadas. Los valores de Hue (color) en la cáscara permitieron formar tres grupos de variedades: tunas amarillas, anaranjadas y rojas. Las variedades rojas presentaron las mayores concentraciones de betalaínas totales en la pulpa, en contraste la tunas amarillas presentaron los niveles más altos de compuestos fenólicos. En todas las variedades, la cáscara presentó el mayor contenido de compuestos fenólicos totales y flavonoides, la cual puede ser una fuente interesante de fitoquímicos. La actividad antioxidante observada en las variedades de tuna pígmentadas (0.08 – 0.460 mg ml-1) puede deberse a la presencia de betalaínas, compuestos fenólicos totales y flavonoides. La variación del contenido de estos metabolitos podría permitir la selección de algunas variedades para un aprovechamiento agroindustrial.
Palabras clave: tuna, crecimiento, madurez, nutracéuticos.
ABSTRACT
PHENOLOGY AND NUTRACEUTICAL QUALITY OF SOME VARIETIES PIGMENTED CACTUS PEAR
ABSTRACT
Mexico is the most important producer of cactus pear (Opuntia sp.) in the world. Here, the largest number of varieties that produce pigmented fruit is found. However, harvest rates of some varieties are unknown, and its highly seasonal production results in lower market prices. Thus, it is important to study the growth rate and harvest index for commercial production with the aim of year round production to make efficient use of its agro-industrial potential. Also, few studies of nutraceutical quality have been conducted with pigmented cactus pear fruit but variation is unknown during fruit ripening and postharvest spoilage. Nutraceuticals are important because they are associated with antioxidant capacity and also prevent chronic degenerative diseases. The results of this research are presented in three chapters. The objectives of the research were: I) To evaluate growth dynamics of fourteen varieties of pigmented cactus pear to identify early and late varieties by recording weekly pigmented cactus pear fruit growth of five plants per variety in the Experimental Nopal Germoplasm Bank “Dr. Facundo Barrientos Perez” at Chapingo Autonomous University, State of Mexico. The appearance of flower buds of the fourteen varieties was asynchronous and fruits showed a sigmoid growth curve (length and diameter). The earliest variety was Roja de Villanueva and the latest was Texas RF. Copena V1, Larreyi and Solferino were slightly early. Castilla Sonora and Sangre de Toro varieties were slightly late and the seven remaining varieties ripened at the same usual time. II) To determinate the nutraceutical content (betalains phenolic compounds, flavonoids and ascorbic acid) in the process of fruit ripening. The contents of total phenolics and betalains increased by horticultural maturity. III) To assess nutraceutical value and fruit color by total phenols, flavonoids, betalains total betacyanins, betaxanthins, ascorbic acid (vitamin C) and antioxidant activity of eleven varieties of pigmented cactus pear. Three groups were formed based on epicarp color: yellow, orange and red. Red varieties had the highest concentrations of total betalains in pulp, while yellow cactus pears contained the highest levels of phenolic compounds. In all varieties, the epicarp had the highest content of total phenolic compounds and flavonoids, making it an interesting source of phytochemicals. The antioxidant activity observed in pigmented cactus pear varieties was (0.08 to 0460 mg ml-1) may be due to the presence of (betalains), total phenolics and flavonoids. Content variation of these metabolites may enable selection of some varieties for agroindustrial use.
Key words: prickly pear, growth, ripening, nutraceuticals.
1
INTRODUCCIÓN GENERAL
México es uno de los pocos países que alberga dentro de su fisiografía, algunos
tipos de vegetación únicos (Rzedowski, 1978) pues se estiman 9 500 especies
endémicas, siendo la familia Cactaceae un ejemplo muy característico (Bravo,
1978; Gallegos y Mondragón, 2011)
El nopal es una planta perteneciente a la familia Cactaceae, subfamilia
Opuntioideae y subgéneros Opuntia y Nopalea. Taxonómicamente, existen
problemas en la nomenclatura debido a los escasos caracteres morfológicos, al
elevado nivel de plasticidad fenotípica, a la diversificación, a la ocurrencia de
poliploidia y a la hibridación intergenérica (Wallace y Gibson, 2002; Felker et al.,
2006; Segura et al., 2007; Caruso et al., 2010).
Actualmente en México existe una gran diversidad de nopal ubicándolo como
posible centro de origen (Caruso et al., 2010; Gallegos y Mondragón, 2011), lo que
ha incrementado la importancia del cultivo y en consecuencia, el desarrollo de
proyectos dirigidos al conocimiento, manejo, aprovechamiento y conservación;
para lograr este propósito se han formado bancos de germoplasma con
diferentes especies, variedades y cultivares (Rodríguez, 2011). Estas
circunstancias permiten seleccionar genotipos destinados a la producción de tuna,
verdura o forraje; usos que se remontan a las épocas prehispánicas (Flores y
Gallegos, 1993). Sin embargo; su empleo en la industria y la alimentación humana
se ha diversificado de tal forma que se pueden derivar productos como:
colorantes, alcoholes, vinagres, gomas, mucilagos, harinas, mieles, quesos,
dulces, etc. (López et al., 1996).
La especie de mayor importancia en el mundo es Opuntia ficus indica (L.) Mill;
se cultiva en América, África, Asia, Europa y Oceanía; sin embargo esta especie
fue domesticada en México y es donde se encuentra la mayor riqueza de
cultivares tradicionales pues sus nombres están relacionados con el lugar donde
crece la planta (Milpa Alta), ausencia de espinas - color del fruto (Rojo Pelón),
2
origen fitogenético (Copena V1), forma del cladodio (redondo), nombre nativo
(Telokaha), etc. (Reyes-Agüero et al., 2005)
Debido a que las nopaleras se han establecido principalmente en regiones
áridas y semiáridas han sufrido adaptaciones anatómicas y morfológicas únicas;
por ejemplo, la raíz se caracteriza por ser muy extendida y somera; tallos
denominados cladodios, aplanados o cilíndricos, cubiertos de cera o pelos donde
se realiza la fotosíntesis y almacena el agua; hojas sumamente pequeñas y
caducas; presencia de espinas como mecanismo de defensa y dispersión; flores
vistosas que abren por 24 hrs e inmediatamente los pétalos se deshidratan y
caen, por lo que la polinización está fuertemente asociada a insectos; fruto tipo
baya simple y carnosa formada de un ovario ínfero sumido en los tejidos del
pedúnculo y receptáculo envueltos por tejido de naturaleza similar al del cladodio
(Corrales y Flores, 2003) y con un período completo de crecimiento de 80 a 120
días dependiendo de las condiciones ambientales (Reyes-Agüero et al., 2006)
Morfológicamente, la tuna está conformada por el pericarpio que constituye del
33 % a 55 %, la pulpa del 45 % al 67 % y las semillas del 2 % al 10 %; los
porcentajes varían según el cultivar, las prácticas culturales, número de semillas
fecundadas y abortadas, periodo de luz, clima y época de cosecha (Piga, 2004).
La pulpa contiene agua en un 84 % a 90 % y azúcares reductores (10 % a 15 %),
pH entre 5.3 y 7.1, rango de azúcares de 10° a 17° Brix predominando la glucosa y
la fructuosa (Stintzing et al., 2003). Contiene de 10-410 mg.kg-1 de ácido
ascórbico (Cantwell, 1995; Piga, 2004; Figueroa et al., 2010); otras vitaminas
encontradas son tiamina, riboflavina, y niacina (Sepulveda y Sáenz, 1990). Provee
un bajo contenido de terpenoides entre los que destacan el -sitoesterol y
campesterol. Otros lípidos son el tocoferoles, vitamina K1 y -carotenos.
Macronutrientes como proteínas, minerales, cenizas, fibra, aminoácidos (serina,
glutamina, ácido aminobutírico, prolina, arginina, histidina, y metionina) (Piga,
2004), agentes antioxidantes tales como compuestos fenólicos (Magloire et al.,
2006; Figueroa et al.,2010) así como altas concentraciones de calcio, magnesio y
3
taurina, que le confieren características de un alimento funcional (Galati et al.,
2003).
Otra característica en el fruto; es la presencia de pigmentos tipo betalaínas lo que
lo hace atractivo para el consumo en fresco (Gurrieri et al., 2000), aunado a esto,
existe una creciente demanda del uso de betalaínas como colorantes naturales
para alimentos por su estabilidad a los diferentes valores de pH, lo que ha
motivado que muchas empresas, en diferentes países, se dediquen a la
comercialización de estos pigmentos (Ibarra et al., 2006). Desde hace algunos
años, la industria de alimentos incorpora colorantes y antioxidantes naturales de
tejidos vegetales debido a las restricciones legales (Weller y Lasure, 1982). En los
últimos 20 años se ha encontrado en los mercados de Europa, Japón y Estados
Unidos una marcada tendencia a consumir frutos con estas características
nutracéuticas (Pimienta, 1990).
Algunos nutraceúticos con propiedades antioxidantes son importantes porque
inhiben los radicales libres, producto del estrés que inducen enfermedades como
melanoma, desordenes cardiacos, diabetes mellitus, enfermedades inflamatorias y
neurodegenerativas, cáncer, etc. (Prakash et al., 2007; Jing et al., 2008); pero
evidencias epidemiológicas sugieren que el consumo de frutas y verduras con
actividad antioxidante, reducen el riesgo de estas enfermedades (Quintanar y
Calderón, 2009).
A pesar de la diversidad del nopal a nivel nacional, existen pocos estudios sobre la
variación de la calidad nutracéutica (Ibarra et al., 2006; Ceballos y Cisneros, 2004;
Figueroa et al., 2010,) del fruto en el proceso de maduración y poscosecha; por lo
que se hace necesario este conocimiento, para seleccionar aquellas especies,
variedades o cultivares que tengan un mayor potencial industrial. Con base en lo
anterior, los objetivos generales del presente trabajo fueron describir la dinámica
de desarrollo y evaluar el valor nutracéutico de tuna (Opuntia sp.) en pulpa y
cáscara; antes y durante la madurez de consumo y poscosecha; con la finalidad
4
de permitir un aprovechamiento agroindustrial eficiente y proveer nuevas
alternativas económicas para el sector hortícola.
BIBLIOGRAFIA
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5
Gurrieri, S.; Miceli, L.; Lanza, C. M.; Tomaselli, F.; Bonomo, R.; Rizzarelli, E. 2000. Chemical characterization of Sicilian prickly pear (Opuntia ficus indica) and perspectives for the storage of its juice. J. Agric. Food Chem. 48: 5424-5431. Ibarra, A. A.; Mauricio, N. S .E.; Rodríguez, N. S.; Trujillo, H.M.L.; Vega, C. H. R. 2006. Determinación de betalaínas de tres variedades de tuna roja. Revista Digital de la Universidad Autónoma de Zacatecas. 2:3 Jing, Z.; Nan, H.; Ya-lin, W.; Yuan-jiang, P.; Cui-rong, S. 2008. Preliminary studies on the chemical characterization and antioxidant properties of acidic polysaccharides from Sargassum fusiforrme. J. Zhejiang. Univ. Sci. B. 9: 721-727 López, G. J.J.; Rodríguez, G. A.; Pérez, R. L.; Fuentes, R. J.M. 1996. Usos del nopal forrajero en el norte de México. J. PACD. 1:10-15 Magloire, F.J.; Konarski, P.; Zou, D.; Stintzing, F.C.; Zou C. 2006. Nutritional and medicinal use of cactus pear (Opuntia spp.) cladodes and fruits. Frontiers in Bioscience. 11:2574-2589. Prakash, D.; Upadhayay, G.; Singh, B. N.; Singh, H. B. 2007. Antioxidant and free radical – scavenging activities of seeds and agri - wastes of some varieties of soyabean (Glycine max). Food Chem. 104: 783-790. Piga A. 2004. Cactus pear: A fruit of nutraceutical and functional importance. J.PACD. 1:9-22 Pimienta, B. E. 1990. El nopal tunero. Primera edición. Universidad Autónoma de Guadalajara. Jalisco, México. 237 p. Quintanar, E.M.A.; Calderón S. J.V. 2009. La capacidad antioxidante total. Bases y aplicaciones. Revista de Educación Bioquímica. 28 (3): 89-101. Reyes-Agüero, J.A.; Aguirre, R.J.R.; Valiente-Banuet, A. 2006. Reproductive biology of Opuntia: A Review. Journal or Arid Environments 64:549-585 Reyes-Agüero J.A.; Aguirre, R.R.J.; Hernández, M.H. 2005. Notas sistemáticas y descripción detallada de Opuntia ficus-indica (L) Mill. (Cactaceae). Agrociencia . 3(4):395-408.
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6
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7
CAPITULO I
Dinámica de crecimiento de catorce variedades pigmentadas de tuna
(Opuntia sp.) en la nopalera experimental de la Universidad Autónoma
Chapingo
RESUMEN
México es el primer productor de tuna a nivel mundial, donde se localiza el mayor
número de variedades que producen frutos pigmentados, sin embargo, se
desconoce los índices de cosecha de algunas variedades. El fruto (tuna) no
climatérico, se caracteriza por alta estacionalidad de la producción, impactando en
bajos precios para su comercialización. Existe la necesidad de estudiar la
velocidad de crecimiento y el índice de cosecha comercial con la finalidad de
establecer épocas de cosecha y calidad de la producción para aprovechar
eficientemente su potencial agroindustrial. El objetivo del trabajo fue evaluar la
dinámica de crecimiento de catorce variedades de tuna para identificar variedades
precoces y tardías. Se realizó el registro del crecimiento semanalmente en cinco
plantas sanas por variedad, seleccionadas aleatoriamente a partir de la etapa de
yema floral hasta madurez hortícola, pasando por amarre de fruto, cultivadas en la
nopalera experimental Dr. Facundo Barrientos Pérez de la Universidad Autónoma
Chapingo, Estado de México. Se evalúo peso total del fruto, índice de forma del
fruto, grosor y color de la cáscara. La aparición de las yemas florales de las
catorce variedades fue asincrónica y sus frutos presentaron un comportamiento de
crecimiento sigmoide en ambas curvas de crecimiento (longitud y diámetro). El
análisis de componentes principales de las características morfológicas permitió
formar cinco grupos de las variedades de tuna. Grupo I: Castilla Sonora, Copena
CEII, Copena V1, Jade, Morada, Roja Villanueva y Sangre de Toro; Grupo II:
Larreyi; Grupo III: Alteña Blanca; Grupo IV: Alteña Roja, Huatusco, Plátano y
Solferino, y Grupo V: Texas RF. Bajo las mismas condiciones edafológicas,
sanitarias y climatológicas la variedad más precoz fue Roja de Villanueva y la más
tardía Texas RF. Variedades ligeramente precoces fueron Copena V1, Larreyi y
Solferino. Castilla Sonora y Sangre de Toro resultaron variedades ligeramente
tardías y las siete variedades restantes presentaron maduración común.
Palabras clave: variedad, amarre del fruto, madurez hortícola, crecimiento.
8
1.1 INTRODUCCIÓN
Entre las angiospermas, la familia Cactaceae es la más distintiva y exitosa del
Nuevo Mundo con 1600 especies (Barthlott y Hunt, 1993) distribuidas desde
Canadá hasta Argentina siendo México el centro más importante de diversidad
con 669 especies y 244 subespecies (Bravo, 1978; Guzmán et a., 2003). Dentro
de esta área ha destacado el nopal tunero (O. megacantha, O. albicarpa, O. ficus
indica y O. streptacantha) como un cultivo alternativo importante con una
superficie total sembrada bajo riego y temporal de 57,692.55 Ha y un valor de la
producción estimado de 1,006,360.22 miles de pesos (SIAP, 2011).
Adicionalmente, Tamayo (1988) realizó un análisis corológico, con base en
sesenta y cinco especies de distribución restringida a cuatro o menos unidades
geográficas, en el que reveló dos patrones de distribución de Opuntia sp. en
México: Patrón 1; sursureste de México, con tres regiones; Golfo, Sur de México
y Chiapas, y el Patrón 2; Centro-Norte de México, con cinco regiones: Altiplanicie,
Altiplanicie-Sierra Madre, Altiplanicie-Noreste de México, Altiplanicie Septentrional-
Noroeste de México y Noroeste de México; confirmando la gran riqueza genética
en nuestro país.
En algunos países como en Estados Unidos, Sudáfrica, Italia y Brasil existen
colecciones de “nopales” in vivo (Gallegos et al., 2005). En nuestro país, existen
colecciones que ha estado financiando el Sistema Nacional de Recursos
Fitogenéticos para la Alimentación y la Agricultura de la SAGARPA desde el
2002, por medio de la Red Nopal y en las que se encuentra la nopalera
experimental “Dr. Facundo Barrientos” en las instalaciones de la Universidad
Autónoma Chapingo con el objetivo de conservar, explotar, documentar y mejorar
el fitorecurso (Bellon et at., 2009).
Para explotar este recurso de manera sustentable y evitar la estacionalidad de la
producción; es importante el conocimiento de la dinámica de crecimiento
(emergencia de yemas, antesis y madurez) y su interacción con las condiciones
del medio ambiente; además de establecer índices de cosecha que determinan la
9
calidad del fruto (Lakshminarayana et al.,1979; Cantwell, 1995; Inglese et al.,
1999 y Aounallah et al., 2009).
Actualmente el mercado de la tuna sigue dominado por un escaso número de
variedades; las tunas blancas Reyna, Cristalina y Burrona. La tuna blanca Reyna
ocupa el equivalente al 40 % de la superficie plantada debido a que es una
variedad de calidad reconocida y muy demandada por los consumidores, por lo
que se puede considerar como el estándar de la tuna mexicana. Otra ventaja de
Reyna es su época de cosecha concentrada en Junio y Agosto, lo que refleja su
dominancia al imponer una marcada estacionalidad al comercio con efectos
negativos en los precios. Paulatinamente se han introducido tunas de color rojo
(Rojo Liso y Roja San Martín) y amarillo-anaranjadas (Pico Chulo, Esmeralda,
Liria, Montesa, entre otras) las cuales poco a poco han ido ganando aceptación
entre los consumidores. Actualmente la tuna se encuentra regularmente en el
mercado de Junio a Octubre, pero este fenómeno se puede modificar con un
manejo adecuado del cultivo (Gallegos y Mondragón, 2011).
Debido a que la dinámica de crecimiento en cactáceas, específicamente en nopal,
ha sido poco estudiada (Lakshminarayana et al. 1979; Sánchez et al., 1991;
Barbera et al., 1992; Nieddu y Spano, 1992; Inglese et al., 1995).; el objetivo de
este trabajo fue describir la dinámica de crecimiento de tuna de catorce
variedades pigmentadas de Opuntia sp con el fin de identificar variedades
precoces y tardías, y determinar sus índices de madurez para su cosecha
comercial como nuevas opciones de producción.
1.2 MATERIALES Y MÉTODOS
Material vegetal y localización
Las plantas de las catorce variedades de tuna pigmentadas, poco comerciales y
estudiadas (Cuadro 1), se seleccionaron de las cultivadas en la nopalera
experimental Dr. Facundo Barrientos Pérez de la Universidad Autónoma
Chapingo, Edo. de México situada en las coordenadas 19°29´N y 98°53´O a una
altura de 2250 msnm (García, 1988). Se ubica sobre un suelo con un horizonte A
10
migajón limoso franco, un horizonte B y C arcilloso o de estructura fuertemente
desarrollada, por debajo subyace un estrato migajón limoso o franco con alta
capacidad de retención de humedad, medianamente ricos en materia orgánica y
ligeramente ácidos (Chacón citado por Ortíz, 1988). El clima predominante es
templado con verano fresco, con una temperatura media anual de 15.9 °C, la
precipitación pluvial anual es de 636 mm (García, 1988).
Cuadro 1. Descripción de 14 variedades y especies pigmentadas de tuna (Opuntia sp.) cultivadas en la nopalera experimental Dr. Facundo Barrientos Pérez de la Universidad Autónoma Chapingo. Chapingo, Méx.
Especie Variedad Origen Color cáscara
Opuntia sp. Alteña blanca Celaya, Gto. Verde
Opuntia sp. Alteña roja Celaya, Gto. Rojo
O. megacantha Salm Plátano Ojuelos, Jal. Amarillo
O. megacantha Salm Sangre de Toro Ojuelos, Jal. Morado
O. ficus-indica (L.). Mill Huatusco Huatusco, Ver. Rojo
O. ficus-indica (L.). Mill Solferino Chapingo, Méx. Rojo
O. ficus-indica (L.). Mill Roja de Villanueva Villanueva, Pue. Rojo
O. ficus-indica (L.). Mill Jade Desconocido Morado
O. megacantha Salm Morada San Martín de las Pirámides, Méx. Morado
O. ficus-indica (L.). Mill Copena CEII Chapingo, Méx. Zacatecas, Zac. Morado
O. ficus-indica (L.). Mill Copena V1 Chapingo, Méx. Morado
O. robusta Wendl Larreyi San Martín de las Pirámides, Méx. Morado
O. stricta Haw Texas RF Texas A&M Kingsville Morado
O. undulata Griffiths Castilla Sonora Cocorit, Valle del Yaqui, Son. Morado
Fuente: Cruz, M.F.M. 2011. Importancia y cuidado del germoplasma de nopal caso: Nopalera Experimental de Chapingo. Revista Salud Pública y Nutrición
Dinámica de crecimiento
Para el registro del crecimiento se seleccionaron cinco plantas por variedad sin
daños visuales de insectos u organismos fitopatógenos; se continuó con la
identificación de diez yemas florales de aproximadamente 0.5 cm. Nieddu y
Spano (1992) mencionan que en el tamaño antes mencionado es posible distinguir
microscópicamente el androceo y gineceo; a partir de este momento se registró
semanalmente la longitud (LF) y el diámetro ecuatorial (DE) hasta madurez
hortícola con ayuda de un pie de rey manual (Pretul; México). Los resultados se
expresaron en cm. Se consideró amarre de fruto, a partir del segundo día de la
apertura floral de las yemas seleccionadas (Laksminarayana et al., 1979).
11
Determinación de variables físicas
Las mediciones se realizaron en cinco frutos de cada planta. El peso total del fruto
(PT) (g), así como de la pulpa (PP) y de la cáscara (PC) del fruto previamente
desespinado de cada variedad, se determinó con una balanza electrónica (marca
Ohaus Scout Pro, China); con los datos de PT, PP, PC, LF y DE, se calculó la
relación peso pulpa/peso cáscara, el índice de forma del fruto (relación entre la
longitud y el diámetro ecuatorial) y adicionalmente el grosorde la cáscara.
Se determinó el color mediante la evaluación de L* (luminosidad), el ángulo de
tono (Hue) y la pureza de color o índice de cromaticidad (Chroma) de la cáscara
del fruto de cada variedad con un colorímetro Hunter Lab (Mini Scan XE Plus 45/
0-L, RestonVa, USA). Se obtuvieron las lecturas de L* a* y b* para identificar las
diferencias de color entre tejido y variedades en forma objetiva. Se realizó el
cálculo mediante las fórmulas siguientes: Hue = arc tan (b/a); Chroma = (a2+ b2) ½
(Mc Guire, 1992).
Datos de temperatura y precipitación
Los datos fueron colectados de la estación meteorológica de la Universidad
Autónoma Chapingo ubicada dentro de las instalaciones de la misma.
Análisis estadístico
Los resultados de las variables fueron analizados mediante un análisis de varianza
de acuerdo con un diseño completamente al azar, mediante el procedimiento GLM
y comparación de medias por Tukey (=0.05) del programa SAS (Statistical
Analysis System 9.0 for Windows). En el análisis de correlación de Pearson y el
análisis de componentes principales (ACP) se aplicó el programa estadístico
Minitab 15 (Minitab, 2007).
12
1.3 RESULTADOS Y DISCUSIÓN
En la Figura 1 se observa que la brotación de yemas florales de las catorce
variedades fue asincrónica: Copena CEII, Copena V1 y Jade, fueron las primeras
variedades en donde se observó este proceso.
0
1
2
3
4
5
6
7
8
9
Longitud (
cm
)
LA
RV
TRF
0
2
4
6
8
10
12
02-f
eb
08-f
eb
16-f
eb
22-f
eb
28-f
eb
06-m
ar
16-m
ar
23-m
ar
30-m
ar
04-a
br
13-a
br
20-a
br
27-a
br
04-m
ay
11-m
ay
18-m
ay
25-m
ay
01-ju
n08-ju
n15-ju
n22-ju
n29-jun
06-ju
l13-ju
l20-ju
l27-ju
l02-a
go
09-a
go
16-a
go
23-a
go
30-a
go
07-s
ep
14-s
ep
21-s
ep
28-s
ep
05-o
ct
12-o
ct
19-o
ct
26-o
ct
Longitud (
cm
)
CS
MO
ST
CE, V1, JA, SO
Figura 1. Dinámica de crecimiento longitudinal de catorce variedades pigmentadas de tuna (Opuntia sp.)
cultivadas en la nopalera experimental “Dr. Facundo Barrientos Pérez” de la Universidad Autónoma
Chapingo, desde la etapa de yemas florales hasta la madurez hortícola. AB: Alteña Blanca, AR: Alteña
Roja, CS: Castilla Sonora,
CE: Copena CEII, V1: Copena V1, HU: Huatusco, JA: Jade, LA: Larreyi, MO:
Morada, PL: Plátano, RV: Roja de Villanueva, ST: Sangre de Toro, SO: Solferino y TRF: Texas RF.
Fecha de evaluación
13
A la segunda semana de febrero, brotaron Alteña Blanca, Alteña Roja,
Huatusco, Plátano, Roja de Villanueva y Solferino. A finales del mes de febrero
brotaron yemas florales de Larreyi y Morada. Castilla Sonora brotó a finales de
marzo y finalmente Sangre de Toro y Texas RF a inicios del mes de abril. El
amarre del fruto también fue asincrónico y ocurrió entre los 42 y 63 días después
de la emergencia de yemas florales (Cuadro 2). Durante este período, se observó
que antes de la segunda y tercera semana del amarre del fruto (dependiendo la
variedad), fue mayor el diámetro y posteriormente hubo un crecimiento acelerado
en longitud, excepto en la variedad Larreyi, donde la longitud y el diámetro se
incrementaron casi paralelamente. Sin embargo, el período que comprende desde
la emergencia de yemas florales hasta el amarre de fruto, las catorce variedades
presentaron una curva de crecimiento tipo sigmoide, tanto para longitud como para
diámetro ecuatorial.
Durante la apertura de la flor, se observaron las siguientes características
morfológicas: perianto sepaloide compuesto de hojas verdes y un perianto
petaloide de hojas más grandes y de tonalidad amarilla (Alteña Blanca, Alteña
Roja, Castilla Sonora, Larreyi, Sangre de Toro, Solferino y Texas RF), anaranjada
(Alteña Roja, Copena CEII, Copena V1, Jade, Morada, Roja de Villanueva), rosa
(Alteña Blanca) y anaranjada con tonalidades rojizas (Plátano y Huatusco).
El crecimiento de la tuna de las catorce variedades a partir del amarre del fruto
hasta su madurez hortícola fue el siguiente: Alteña Blanca tuvo un crecimiento
lineal en longitud hasta su tamaño final de 7.2 cm promedio; no así el diámetro
ecuatorial que tuvo una fase de crecimiento lento, entre la semana sexta y décima
después del amarre, al crecer únicamente 0.2 mm, después de este período el
fruto continuó creciendo hasta la semana décimo novena, cuando alcanzó el
tamaño final promedio de 5.1 cm. Las curvas de longitud y diámetro ecuatorial de
Alteña Roja mostraron una tendencia lineal desde el amarre del fruto hasta la
madurez hortícola, en la décimo octava semana, con un tamaño final promedio
de 8 cm de longitud y 5.5 cm de diámetro.
14
Cuadro 2. Crecimiento y oportunidad fenológica de catorce variedades de tuna (Opuntia sp.). EY: Emergencia de yema floral; AF: Amarre de Fruto; MH: Madurez hortícola; LF: Longitud del Fruto; DE: Diámetro ecuatorial.
Variedad Días
EY-AM Días
AF-MH Días totales de
crecimiento Fecha de
maduración
Tamaño final
LF/DE (cm)
Oportunidad fenológica
Roja de Villanueva
56 105 161 Julio 6.8 / 5.5 Precoz
Larreyi 42 119 161 Julio 8.2 / 7.5 Ligeramente
precoz
Copena V1 56 119 175 Julio 8.5 / 5.9 Ligeramente
precoz
Solferino 53 122 175 Julio 7.3 / 5.4 Ligeramente
precoz Alteña Blanca
52 130 182 Agosto 7.1 / 5.0 Común
Alteña Roja 56 126 182 Agosto 7.9 / 5.5 Común
Copena CEII
63 119 182 Julio 8.3 / 5.3 Común
Jade 63 119 182 Julio 8.3 / 5.7 Común
Plátano 56 126 182 Agosto 7.8 / 5.4 Común
Huatusco 56 133 189 Agosto 8.7 / 6.1 Ligeramente
tardía
Morada 47 135 182 Agosto 10.2 / 6.1 Tardía
Castilla Sonora
56 112 168 Agosto 10.2/5.1 Tardía
Sangre de Toro
49 126 175 Septiembre 9.8 / 5.6 Tardía
Texas RF 49 154 203 Octubre 4.0 / 2.6 Muy Tardía
En la variedad Castilla Sonora se presentó un comportamiento atípico en la
dinámica de crecimiento respecto a las trece variedades de tuna restantes; las
curvas de longitud y diámetro ecuatorial fueron tipo sigmoide triple (Fig. 1).
Después del amarre del fruto y hasta la tercera semana, el fruto creció 1.7 % en
longitud y 4 % en diámetro ecuatorial, observándose en la Figura 1 como una fase
de crecimiento lento; posteriormente, desde la cuarta hasta la octava semana
después del amarre del fruto, la tuna aumentó 18 % en longitud y 24 % en
diámetro ecuatorial (crecimiento acelerado), para posteriormente tener una
segunda fase de crecimiento lento de aproximadamente tres semanas; después
de este período se observó nuevamente un crecimiento brusco hasta la décimo
quinta semana (madurez hortícola); el tamaño definitivo en tunas de Castilla
Sonora fue de 10.4 cm de longitud y 4.98 cm diámetro ecuatorial promedio.
15
Las variedades de la serie Copena mostraron un comportamiento de crecimiento
similar entre ellas. Copena CEII, presentó un patrón sigmoide simple después del
amarre del fruto; la longitud del fruto tuvo su etapa de crecimiento lento entre la
quinta y octava semana, no así el diámetro ecuatorial, que entre la cuarta y
novena semana después del amarre del fruto creció 5 %, es decir, lentamente.
La madurez hortícola de Copena CEII fue en la décimo séptima semana después
del amarre del fruto. Jade mostró un patrón de crecimiento similar a la variedad
CEII, pero se diferenció, porque los frutos crecieron lentamente en longitud y
diámetro ecuatorial entre la sexta y novena semana después del amarre del fruto.
Copena V1 presentó la fase de crecimiento lento de longitud entre la sexta y
octava semana después del amarre del fruto porque la velocidad de crecimiento
fue 0.1 mm por semana , ha esta misma velocidad creció el diámetro ecuatorial
entre la cuarta y sexta semana después del amarre del fruto.
El patrón de crecimiento de longitud y diámetro ecuatorial en frutos de la variedad
Huatusco se presentó como un doble sigmoide después del amarre del fruto. La
longitud presentó crecimiento lento entre segunda y tercera semana y la segunda
fase de crecimiento lento fue entre la octava y onceava semana, en ambas fases,
la velocidad de crecimiento fue de 0.1 mm por semana. Respecto al diámetro
ecuatorial, el crecimiento lento ocurrió entre la sexta y novena semana después
del amarre de fruto.
Larreyi es una variedad de frutos redondos, por lo tanto, después del amarre del
fruto las curvas de crecimiento de longitud y diámetro incrementaron
paralelamente. Entre la séptima y novena semana después del amarre del fruto
la longitud tuvo un crecimiento lento y entre la sexta y séptima semana después
del amarre del fruto el diámetro ecuatorial.
El crecimiento de longitud y diámetro ecuatorial de O. megacantha var. Morada,
mostró una tendencia lineal (crecimiento rápido) desde el amarre del fruto hasta la
madurez hortícola en la décimo novena semana con un tamaño final promedio
de 10.25 cm en longitud y 6.13 cm en diámetro ecuatorial. En O. ficus indica var.
Solferino, se presentó la misma curva de crecimiento que Alteña Roja y Morada,
16
sólo que la madurez hortícola se presentó en la décimo séptima semana después
del amarre de fruto con un tamaño promedio de 7.3 cm de longitud y 5.3 cm de
diámetro ecuatorial.
Los frutos de O. megacantha var. Plátano, presentaron un crecimiento sigmoide
simple después del amarre del fruto; entre la primera y segunda semana
después del amarre, el crecimiento en longitud fue lento de 0.15 mm; el
crecimiento lento del diámetro ecuatorial fue entre la octava y la onceava semana;
el tamaño definitivo en tunas de la variedad Plátano fue de 7.85 cm de longitud y
5.42 cm diámetro ecuatorial promedio
La variedad Roja de Villanueva, presentó la primera fase de crecimiento
acelerado entre la primera y octava semana después del amarre del fruto; la fase
de crecimiento lento se ubicó entre la octava y onceava semana y finalmente la
tuna culminó su crecimiento en la décimo quinta semana, cuando los frutos
alcanzaron un tamaño final promedio de 6.9 cm en longitud y 5.5 cm en diámetro
ecuatorial.
Sangre de Toro tuvo dos tipos de crecimiento; la curva de crecimiento
longitudinal fue lineal y acelerada después de su amarre; sin embargo, el
crecimiento ecuatorial desarrolló una curva sigmoidal simple después del amarre
del fruto porque entre la novena y décimo tercera semana se ubicó la fase de
crecimiento lento. Sangre de Toro produjo frutos de un tamaño final promedio de
9.9 cm en longitud y 5.7 cm de diámetro ecuatorial en la décimo séptima semana.
O. stricta var Texas RF, presentó el amarre del fruto en la octava semana después
que emergieron las yemas florales; en ese momento los frutos primarios habían
alcanzado el 74 % del diámetro ecuatorial y 66 % de longitud final por lo que el
crecimiento posterior al amarre del fruto fue del tipo lineal con una duración de 21
semanas para llegar a la madurez hortícola.
La tuna es un fruto no climatérico (Lakshminarayana et al., 1979; Cantwell,
1995); que inicia su crecimiento con la aparición de yemas florales cuando las
temperaturas promedio mensuales superan los 16 °C entre los meses de enero
17
y marzo (Reyes-Agüero et al., 2006). En las catorce variedades, el período
completo de desarrollo (desde brotación hasta madurez de consumo) tomó de
veintiséis a treinta semanas (161-203 días) (Cuadro 2), el cual está influenciado
por las características genéticas (Gallegos y Mondragón, 2011) y las condiciones
ambientales (Nerd et al.,1991) como se observa en el Cuadro 3; donde la
precipitación mostró una alta correlación con el tamaño del fruto(Cuadro 3) en
todas las variedades bajo estudio; no así la temperatura que mostró una
correlación menor en el crecimiento e incluso nula como en las variedades Alteña
Blanca y Alteña Roja. Al graficar el crecimiento de la variedad Alteña Roja,
Larreyi, Morada, Solferino, Plátano, Roja Villanueva y Texas RF, se formó una
curva del tipo sigmoide simple como lo describieron Lakshminarayana et al.
(1979), Pimienta (1990), Nieddu y Spano (1992), Barbera et al. (1994), Nerd y
Mizrahi (1995) e Inglese et al. (1995; 1999); esto en términos de longitud,
diámetro ecuatorial, peso y volumen. Este crecimiento también se ha reportado
en O. inermis, O. hyptiacantha, O. lindheimeri (Kuti, 1992) y O. joconostle
(Sánchez et al., 1991). Respecto a la variedad Alteña Blanca, Copena CEII,
Copena V1, Jade y Sangre de Toro el patrón de crecimiento correspondió a un
sigmoide doble con tres fases consecutivas: Fase I o de crecimiento inicial rápido;
fase II crecimiento lento intermedio y fase III crecimiento final rápido. Para este
tipo de crecimiento, Nerd y Mizrahi (1995) encontraron que la cáscara crece
rápidamente durante la fase I, las semillas tienen su máximo crecimiento en la
Fase II y el máximo crecimiento de la pulpa ocurre durante la fase II y III.
Reyes-Agüero et al. (2006) mencionan que para O. ficus-indica, hasta los
cincuenta días después del amarre del fruto, la cáscara mantiene su coloración
verde oscuro; entre los sesenta y setenta días la cáscara empieza a colorearse y
a los ochenta y cinco y cien días, tanto pulpa y cáscara están completamente
pigmentadas.
O. ficus-indica, durante los primeros veinte y treinta días después del amarre de
fruto, muestra un crecimiento vigoroso y se tiene detención del crecimiento
aproximadamente entre los cincuenta y nueve y noventa días después del
amarre de fruto (Nieddu y Spano, 1992; Barbera et al., 1994); algunas
18
variedades con pocas semillas crecen muy rápidamente porque no se
presenta la fase II (Barbera et al., 1994).
Cuadro 3. Valores de r de Pearson entre longitud del fruto (LF), diámetro ecuatorial (DE) de catorce variedades pigmentadas de tuna (Opuntia sp.) con la temperatura y la precipitación.
Variedad Alteña Blanca
Alteña Roja
Castilla Sonora
Copena CE II
Copena V1 Huatusco Jade
Temperatura LF
0.015 -0.087 -0.213 -0.211 -0.172 -0.134 -0.168
P: 0.943 P: 0.672 P: 0.133 P: 0.067 P: 0.090 0.134 P: 0.093
Temperatura DE
-0.134 -0.169 -0.269 -0.268 -0.245 -0.199 -0.235
P: 0.514 P: 0.409 P: 0.056 P: 0.019 P: 0.016 0.025 P: 0.018
Precipitación LF
0.465 0.526 0.501 0.594 0.53 0.493 0.53
P: 0.016 P: 0.006 P: 0.008 P: 0.004 P: 0.004 P: 0.008 P: 0.004
Precipitación DF
0.517 0.567 0.516 0.559 0.568 0.501 0.568
P: 0.006 P: 0.002 P: 0.008 P: 0.004 P: 0.002 P: 0.008 P: 0.002
Variedad Larreyi Morada Plátano
Roja de Villanueva
Sangre de toro
Solferino Texas RF
Temperatura LF
-0.132 -0.167 -0.168 -0.125 -0.166 -0.156 -0.119
P: 0.109 P: 0.028 P: 0.018 0.051 0.007 P: 0.008 P: 0.033
Temperatura DE
-0.189 -0.213 -0.219 -0.176 -0.206 -0.201 -0.16
P: 0.023 P: 0.005 P: 0.002 P: 0.006 P: 0.001 P:0.001 P: 0.004
Precipitación LF
0.541 0.501 0.512 0.436 0.37 0.548 0.52
P: 0.008 P: 0.008 0.008 0.038 0.069 P: 0.004 P: 0.004
Precipitación DF
0.544 0.516 0.536 0.501 0.388 0.589 0.565
P: 0.008 P: 0.008 P: 0.004 P: 0.016 0.056 P: 0.002 P: 0.002
La curva de crecimiento de Castilla Sonora correspondió a un sigmoide triple y
las variedades Huatusco y Sangre de toro presentaron una combinación de
sigmoide simple y sigmoide doble; estas ligeras interrupciones se pueden asociar
a respuestas por estrés hídrico (Cruz, 1983), debido a que en los períodos que
correspondieron a la (s) fase (s) de crecimiento lento se ubicaron entre los meses
de abril y mayo cuando la precipitación promedio mensual fue de 0.2 mm y la
humedad relativa del 39.7 %, recomienda que en áreas con una precipitación
anual menor a los 300 mm requieren suplementar con algún tipo de sistema de
riego ya que el agua tiene un efecto directo en el tamaño del fruto (Inglese et al.,
2009). Gugliuzza et al. (2002) indicaron que durante el período del desarrollo
del fruto la ausencia de lluvias no permite que se alcance el tamaño final
19
promedio. Adicionalmente, el conocimiento del efecto de la temperatura sobre el
crecimiento en nopal es crucial para el establecimiento y manejo de nopaleras
dentro y fuera de sus centros de origen tal, y como sucede en Sicilia (Inglese et
al., 2009). Nobel (2002) menciona que el intervalo óptimo para un consumo
óptimo de CO2 en O. ficus-indica es de 25/15 °C (día/noche); sin embargo,
cuando la temperatura está fuera del intervalo hay un pobre crecimiento y
producción. A temperaturas >30 °C durante la brotación de las yemas éstas se
deforman, maduran tempranamente y son susceptibles a bajas temperaturas de
almacenamiento que lleva a una vida de anaquel reducida (Inglese et al., 2002).
Cuando las temperaturas diarias promedio están por debajo de los 15 °C se
retrasa la maduración, se incrementa el engrosamiento de la cáscara, se reduce
el contenido de sólidos solubles y hay una pigmentación pobre del fruto (Inglese
et al., 2009).
Existen diversos indicadores que nos ayudan a determinar el momento oportuno
para cosechar considerando que son únicos para cada variedad y para cada
región de cultivo (Cantwell, 1995; Wessels 1988; Lakshminarayana et al., 1979)
porque dependen de la interacción genotipo – medio ambiente (Inglese et al.,
2009) además de características innatas de la planta como la edad, el vigor, la
sanidad, pobre polinización (Barbera et al., 1994) y cantidad de luz al cladodio (La
Mantia et al.,1997). En el Cuadro 4 se observan tres tipos de formas de la tuna:
alargada, redonda y oval (P ≤ 0.05), donde además de la variedad Larreyi fue la
que tuvo el mayor valor de peso total, y fue estadísticamente mayor a las
variedades Copena CEII, Copena V1, Huatusco, Jade, Morada y Sangre de Toro
que presentaron valores más bajos.
La relación peso pulpa/peso cáscara y grosor de la cáscara son variables que
impactan directamente en el rendimiento es decir, a mayor grosor de la cáscara
menor cantidad de pulpa, como sucede en Texas RF y Sangre de Toro; sin
embargo, en Alteña Blanca, Alteña Roja y Plátano, el peso de la cáscara sólo
representa el 40 % del peso total, caracterizándose como variedades pulposas.
20
Cuadro 4. Características físicas del fruto de catorce variedades pigmentas de tuna (Opuntia sp.) en la madurez hortícola cultivadas en la Nopalera Experimental “Dr. Facundo Barrientos Pérez” de la UACh.
El color de la cáscara es un atributo de importancia porque determina la
aceptación o rechazo por los consumidores. Los valores de Hue, aunque
numéricamente muy distantes, permitieron hacer agrupaciones estadísticamente
iguales (P ≤ 0.05). Los frutos de Alteña Blanca presentaron valores mayores de
Hue (100°), lo que corresponde a un amarillo verdoso. Las trece variedades
restantes se agruparon en tres categorías: a) Hue entre 50 y 60° para Huatusco y
Plátano, b) Hue de 30° típico en Alteña Roja y Solferino y c) Hue menor o igual a
22° en Castilla Sonora, Copena CEII, Copena V1, Jade, Larreyi, Morada, Roja de
Villanueva, Sangre de toro y Texas RF.
En el análisis de componentes principales (ACP) se excluyeron las variables
longitud (LF) y diámetro ecuatorial (DE), debido a su correlación altamente
significativa (P ≤ 0.01) con el peso, así como las variables luminosidad (L*) y
chroma, porque no había separación entre las variedades. Los primeros tres
Variedad Índice de forma
(LF/DE) Peso fresco total
(g) Relación PP/PC
Grosor de cáscara
(cm)
Hue de la
cáscara (°)
Alteña Blanca 1.41 bc 119.37 cd 1.60 a 0.34 ef 102.1 a
Alteña Roja 1.44 bc 123.39 c 1.40 ab 0.32 f 31.2 c
Castilla Sonora 2.00 a 85.30 d 1.23 bc 0.50 abc 10.6 f
Copena CEII 1.57 bc 137.49 bc 1.17 bcd 0.41 cdef 22.7 d
Copena V1 1.40 bc 153.70 bc 0.87 ed 0.45 bcd 19.0 def
Huatusco 1.40 cd 165.63 b 1.27 abc 0.41 bcdef 56.0 b Jade 1.46 cd 130.25 bc 1.29 abc 0.40 def 17.4 def
Larreyi 1.09 e 209.44 a 1.20 bcd 0.43 bcde 15.5 def
Morada 1.67 bc 165.04 b 1.00 cde 0.51 ab 22.4 d
Plátano 1.45 cd 126.10 c 1.40 ab 0.34 f 62.3 b
Roja Villanueva 1.24 de 125.63 c 1.04 cde 0.43 bcde 18.9 ed
Sangre de Toro 1.36 cd 153.69 bc 0.75 e 0.55 a 16.2 def
Solferino 1.35 cd 126.10 cd 1.42 ab 0.35 ef 33.9 c
Texas RF 1.49 b 9.61 e 0.16 f 0.55 a 11.4 ef
CV 5.78 11.77 12.49 7.43 10.08
CV: Coeficiente de variación. Medias con igual letra por columnas son estadísticamente iguales con base a la prueba de Tukey (P ≤ 0.05).LF: Longitud de fruto; DE: Diámetro ecuatorial; PP: Peso de pulpa; PC: Peso de cáscara.
21
componentes generados por el ACP explicaron 87.3 % de la variabilidad de los
datos. Las proyecciones de las observaciones de los componentes principales 1
(CP1) y 2 (CP2) permitieron separar en cinco grupos las variedades de tuna
(Figura 2). El CP1 presentó correlación positiva con la forma y una correlación
negativa con la relación peso pulpa/peso cáscara. El CP2 tuvo correlación positiva
con peso total y una negativa con ciclo de crecimiento de yema floral a madurez
hortícola. El CP3 (dato no mostrado) se caracterizó por tener una correlación
positiva con forma, pero una negativa con el ciclo de crecimiento.
Las variedades Copena CEII, Copena V1, Castilla Sonora, Jade, Morada, Roja de
Villanueva y Sangre de Toro conformaron el Grupo I; variedades rojas y de
normal a poco pulposas (Franco y Rodríguez, 1997), características que las
ubican cerca de los ejes.
Figura 2. Agrupación de catorce variedades pigmentadas de tuna (Opuntia sp.) cultivadas en la
nopalera experimental “Dr. Facundo Barrientos Pérez” de la UACh, en base a características
morfológicas. CP1 y CP2. ●: representa la posición de la variedad en el plano de los
componentes principales. Alteña Blanca (AB), Alteña Roja (AR), Copena CEII (CE), Copena
V1 (V1), Castilla Sonora (CS), Huatusco (HU), Jade (JA), Larreyi (LA), Morada (MO), Plátano
(PL), Roja Villanueva (RV), Sangre de Toro (ST), Solferino (SO) y Texas RF (TRF).
43210-1-2-3-4
3
2
1
0
-1
-2
-3
Primer componente
Se
gund
o c
om
pone
nte
TRF
ST
CS
MO
V1
JA
LA
RV
SO
PL
AR
AB
HU
CE
I
II
III
IV
V
FormaPulpa/Cáscara
Peso
crecimiento
Ciclo de
22
la variedad Larreyi del Grupo II, posee el mayor peso total del total de variedades
analizadas. Alteña Blanca conformo el Grupo III, variedad que se distingue por
una cáscara muy delgada y valor de Hue superior a 100°. En el Grupo IV las
variedades Alteña Roja, Huatusco, Plátano y Solferino sobresalen por un Hue
mayor a 30° y finalmente Texas RF integró únicamente el Grupo V, posee el
menor peso, sin embargo, es la variedad más tardía .
De acuerdo a NMX-FF-030-SCFI-2006 (Productos alimenticios no industrializados
para uso humano – fruta fresca – tuna (Opuntia spp.), se han establecido cinco
tipos comerciales de tuna: verdes (grupo III), amarillas, anaranjadas (grupo IV),
rojas (Grupo I y V) y púrpuras (grupo I y II). Según el peso, se establecen cuatro
códigos de tamaño: A (grupo II), B (grupo I), C (grupo III y IV) y D (grupo V).
Conforme al diámetro ecuatorial se han establecido cuatro códigos: A (grupo II), B
(grupo I y IV), C (grupo III) y C (grupo V); No obstante de que el Grupo II presenta
las mejores características físicas para la comercialización, su principal defecto es
su cáscara delgada, lo que lo hace susceptible a daños de manejo.
1.4 CONCLUSIONES
El crecimiento de las catorce variedades pigmentadas de tuna (Opuntia sp) bajo
estudio fue un proceso dinámico y heterogéneo porque la emergencia de las
yemas florales fue asincrónica; los días que requieren las yemas florales para
llegar al amarre del fruto varía entre variedades desde los 42 a 63 días y para
que se alcancé la madurez hortícola desde 105 a 154 días después del amarre
del fruto. Durante el crecimiento del fruto, desde la emergencia de yemas hasta
la madurez hortícola, el patrón que se forma es una línea sigmoide en las catorce
variedades estudiadas; sin embargo, esta línea puede ser simple, doble y triple
debido en parte a la interacción genotipo-medio ambiente.
De acuerdo con la oportunidad fenológica, las catorce variedades no comerciales
se agruparon en: maduración precoz (Roja de Villanueva), maduración
ligeramente precoz (Copena V1, Larreyi y Solferino), maduración común (Alteña
Blanca, Alteña Roja, Copena CEII, Jade, y Plátano), maduración ligeramente
23
tardía (Huatusco), maduración tardía (Castilla Sonora, Morada y Sangre de Toro)
y maduración muy tardía (Texas RF).
El análisis de componentes principales de las características morfológicas permitió
formar cinco grupos con las catorce variedades bajo estudio e indicó que la forma
y el peso fresco total presentan una correlación positiva.
1.5 BIBLIOGRAFÍA
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26
CAPITULO II
Caracterización fitoquímica de once variedades pigmentadas de tuna
(Opuntia sp.) con diferente grado de maduración
RESUMEN
Dentro de la cubierta vegetal de México el género Opuntia ha sido el más representativo de las regiones áridas y semiáridas. El fruto de nopal (Opuntia sp.) llamado tuna es un recurso fitogenético ampliamente distribuido, explotado y comercializado, sin embargo; pocos estudios se han realizado para determinar los cambios en el contenido de fitoquimicos durante el proceso de maduración y almacenamiento, útiles para emplearse como marcadores. El objetivo de este trabajo fue caracterizar once variedades de tuna con base en el contenido de betacianinas, betaxantinas, compuestos fenólicos, flavonoides y vitamina C en la pulpa y cáscara de 10 días antes de madurez hortícola, durante la madurez hortícola y durante diez días de almacenamiento después de la madurez hortícola. El contenido de betacianinas y betaxantinas mostró diferencias significativas en el tiempo únicamente en la pulpa de la variedad Larreyi y en la cáscara de Jade debido a que los pigmentos incrementan en el proceso de maduración pero disminuyen con el almacenamiento. El mayor contenido de fenoles totales y flavonoides fue en la cáscara y su variación a través del tiempo dependerá de cada variedad (P<0.05). El tejido (pulpa o cáscara) donde se acumuló la vitamina C es indistinto, sin embargo; numéricamente el almacenamiento de los frutos de tuna de algunas variedades contribuyo a la pérdida parcial del ácido ascórbico pero sin significancia estadística. El método de análisis multivariado de componentes principales permitió agrupar en cuatro clases la pulpa y cáscara de las once variedades de tuna pigmenadas, el análisis evidenció que la pulpa de Larreyi se diferenció del resto de las variedades debido a su mayor contenido de pigmentos (betacianinas y betaxantinas).La pulpa de Alteña Blanca, Aleña Roja, Huatusco, Morada y Plátano conforman el grupo con mayor contenido de Vitamina C. La pulpa de las variedades restantes de conforman un grupo, se caracterizó por la combinación compleja de fitoquímicos. Las cáscaras de las once variedades conforman un cuarto grupo compacto caracterizado por su alto contenido de fenoles y flavonoides.
Palabras clave: tuna, fenoles totales, flavonoides, vitamina C, betacianinas y
betaxantinas.
27
2.1 INTRODUCCIÓN
La característica más notable de las regiones áridas y semiáridas de México es la
gran diversidad de su cubierta vegetal, en la cual encontramos especies del
género Opuntia y que ha representado uno de los elementos bióticos más
relevantes y de mayor significancia cultural (Granados y Castañeda, 1996). El
nopal del género Opuntia sp. se encuentra ampliamente distribuido, motivo que
ubica a México como el centro de origen y dispersión (Bravo, 1978) y primer
productor del fruto de tuna a nivel mundial (Sumaya-Martínez et al., 2010;
Gallegos y Mondragón, 2011) por lo que se debe dar atención a su conservación,
mejoramiento y uso (García et al., 2006), con el propósito de solucionar
problemáticas de producción, almacenamiento y nutrición.
Sin embargo, en especies silvestres o de poco interés comercial aún se conservan
genes de rasgos cualitativos y fitoquímicos importantes que no están presentes en
las variedades cultivadas debido a que se ha encontrado una pérdida considerable
de la variabilidad genética en las variedades comerciales debido a la obtención de
las mismas a partir de progenitores comunes y a la selección artificial continua a
favor de aquellos caracteres de interés comercial. En tal sentido, las especies
silvestres ofrecen un potencial genético para su empleo en los programas de
mejoramiento con el fin de introducir genes que mejoren la calidad nutraceútica
(Valdés et al., 2010) para incrementar la competitividad de la tuna mexicana en el
mercado tanto nacional como internacional (Zegbe y Mena-Covarrubias, 2010).
La tuna aporta lípidos, proteínas, minerales, fibra, aminoácidos, agentes
antioxidantes (vitamina C, compuestos fenólicos y pigmentos betalaínicos)
(Stintzing et al., 2005; Tesoriere et al., 2005; Figueroa et al., 2010 y Sumaya-
Martínez et al., 2011); así como altas concentraciones de metabolitos secundarios
que le confieren características de un alimento funcional (Galati et al., 2003).
La amplia diversidad genética que existe de la tuna mexicana justifica el estudio
del contenido de nutracéuticos, particularmente de las variedades de tuna
pigmentadas cultivadas en la nopalera experimental “Dr. Facundo Barrientos
28
Pérez” de la Universidad Autónoma Chapingo. Así, el objetivo de este trabajo fue
caracterizar once variedades de tuna pigmentadas con base en el contenido de
betacianinas, betaxantinas, compuestos fenólicos, flavonoides y vitamina C en la
pulpa y cáscara de 10 días antes de madurez hortícola, durante la madurez
hortícola y durante diez días de almacenamiento después de la madurez hortícola.
2.2 MATERIALES Y MÉTODOS
Recolecta del material vegetal
Los frutos inmaduros y maduros de once variedades de tuna (Cuadro 1) se
recolectaron en la nopalera experimental “Dr. Facundo Barrientos Pérez” de la
Universidad Autónoma Chapingo, en Chapingo, ubicada a 19º 29’ LN y 98º 53’ LO,
a 2 240 m (García, 1988). El clima es C(Wo) (w)b (i’)g, templado moderado
lluvioso y el más seco de los subhúmedos, con lluvias en verano; la temperatura
media anual es 17.8 ºC y precipitación de 644.8 mm anuales.
Se seleccionaron cuatro plantas por variedad y de cada una cinco frutos
visualmente sanos y libres de plagas. Los frutos se desespinaron manualmente,
se separó la pulpa de la cáscara, el tejido se fraccionó en fragmentos pequeños,
éstos se congelaron por inmersión en nitrógeno líquido y se almacenaron a -20 °C,
excepto aquellos frutos maduros que previamente fueron almacenados a
obscuridad por diez días a temperatura ambiente.
Cuantificación de betacianias y betaxantinas
Se determinó el contenido de pigmentos de acuerdo al método propuesto por
Castellanos-Santiago y Yahia (2008). Se pesó un gramo de cáscara o pulpa sin
semilla congelada, a la que se le adicionaron 10 mL de agua destilada estéril; la
muestra se introdujo a un baño ultrasónico (Cole Parmer 8892, Illinois, USA) por
20 min, se incubó por 24 hrs a obscuridad a temperatura ambiente y se centrifugó
la mezcla a 2200 g por 20 min. Se leyó la absorbancia de los extractos en un
espectrofotómetro Genesys 10s a las longitudes de onda de 483 nm
29
(betaxantinas) y 538 nm (betacianinas). Para cuantificar la cantidad de
betaxantinas y betacianinas se utilizó la siguiente fórmula:
BC (mg g-1) = (A x FD x PM x V)(ε x L x P)-1
donde, BC = betaciania o betaxantina, A: absorbancia; FD = factor de dilución;
PM = peso molecular (betacianina: 550 g mol-1, betaxantina: 308 g mol-1);
V = Volumen del extracto (mL); ε = coeficiente de extinción molar (betacianina: 60
000 L mol·cm-1; betaxantina: 48 000 L mol·cm-1; P = peso del tejido; L = longitud
de la celda (1 cm).
Cuadro 1. Descripción de 11 variedades y especies pigmentadas de tuna (Opuntia sp.) cultivadas en la nopalera experimental “Dr. Facundo Barrientos Pérez” de la Universidad Autónoma Chapingo. Chapingo, Méx.
Especie Variedad Origen Días totales a
madurez hortícola
Color
Cáscara
Opuntia sp. Alteña Blanca Celaya, Gto. 182 Verde
Opuntia sp. Alteña Roja Celaya, Gto. 182 Rojo
O. megacantha Salm Plátano Ojuelos, Jal. 182 Amarillo
O. ficus-indica (L.). Mill Huatusco Huatusco, Ver. 189 Anaranjado
O. ficus-indica (L.). Mill Solferino Chapingo, Méx. 175 Rojo
O. ficus-indica (L.). Mill Roja de Villanueva Villanueva, Pue. 161 Rojo
O. ficus-indica (L.). Mill Jade Desconocido 182 Morado
O. megacantha Salm Morada San Martín de las
Pirámides, Méx.
182 Morado
O. ficus-indica (L.). Mill Copena CEII Chapingo, Méx.
Zacatecas, Zac.
182 Morado
O. ficus-indica (L.). Mill Copena V1 Chapingo, Méx. 175 Morado
O. robusta Wendl Larreyi San Martín de las
Pirámides, Méx.
161 Morado
Fuente: Cruz, M.F.M. 2011. Importancia y cuidado del germoplasma de nopal caso: Nopalera Experimental de Chapingo. Revista Salud Pública y Nutrición
Preparación del extracto para fenoles totales y flavonoides
Las muestras sin semilla se homogeneizaron en un procesador de alimentos. Se
pesó un gramo de fruto fresco triturado se disolvió en 25 mL de etanol al 95 % v/v
mediante sonificación (Cole Parmer 8892, Illinois, USA) por 15 min. Después de
24 h se ajustó el volumen a 25 mL con etanol al 80 % v/v, se centrifugó la mezcla
a 1409 g.
30
Contenido de fenoles totales
Se cuantificó el contenido de fenoles totales de acuerdo al método propuesto por
Waterman y Mole (1994). A 0.5 mL del extracto etanólico se le adicionaron 10 mL
de una solución de Na2CO3 a 10 % y se incubó a 38 °C por 15 min. Se tomó 1 mL
de esta mezcla, al que se le adicionaron 3 mL de agua y 1 mL del reactivo de
Folín-Ciocalteu:agua (1:1 v/v). La mezcla se dejó reposar por 15 min en oscuridad.
Finalmente, se tomó lectura de la absorbancia a 660 nm en un espectrofotómetro
Genesys 10s (Thermoscientific, Florida, USA). El contenido total de fenoles en el
extracto se expresó en mg equivalentes de ácido gálico en 100 g de peso fresco
(mg EAG 100 g-1 p.f.).
Cuantificación de flavonoides
Se cuantificó el contenido de flavonoides de acuerdo al método propuesto por
Chang et al. (2002). A 0.5 mL del sobrenadante del extracto etanólico preparado
anteriormente, se le agregaron 1.5 mL de etanol al 95 % v/v, 0.1 mL de solución
de AlCl3 al 10 % p/v, 0.1 mL de solución 1 M de acetato de potasio y 2.8 mL de
agua destilada. Se incubó la mezcla por 30 min. Se leyó la absorbancia en un
espectrofotómetro Genesys 10s a una longitud de onda 415 nm. Los resultados se
expresan en mg equivalentes de quercetina en 100 g de peso fresco (mg EQ 100
g-1 p.f.).
Cuantificación de ácido ascórbico
Para la determinación de ácido ascórbico (vitamina C) se pesó un gramo de
muestra (pulpa o cáscara) a la que se le adicionaron 3 mL de solución de ácido
metafosfórico al 3 % v/v, la mezcla se maceró por 3 min y se filtró. Se tomó 1 mL
del filtrado, se aforó a 10 mL con la solución de ácido metafosfórico al 3 % v/v. Se
tomaron 2 mL del sistema amortiguador para pH = 4 (ácido acético glacial: acetato
de sodio al 5 % p/v, 1:1) mezcla, se le adicionaron 2 mL del regulador de acetatos,
3 mL del dicloroindofenol y 15 mL de xileno, se agitó vigorosamente en un vortex
(Thermolyne Type 6700, USA). Se leyó la absorbancia en un espectrofotómetro
31
Génesis 10s a 520 nm. A partir de una curva estándar se obtuvo la concentración
de ácido ascórbico presente en cada muestra mediante de la siguiente ecuación:
mg ácido ascórbico total/ mg = (C x V x 100) / (A x P); donde: C = ácido ascórbico
en la muestra; V= volumen de aforo; A= mL de alícuota de la solución tomada;
P = peso o volumen de la muestra. La concentración de ácido ascórbico se
expresó en mg equivalentes de ácido ascórbico en 100 g de peso fresco (mg EAA
100 g-1 p.f.).
Análisis estadístico
Se usó un análisis de medidas repetidas con un diseño factorial y una estructura
de covarianza del tipo simétrica compuesta con cuatro repeticiones. La
comparación de medias se llevó a cabo por la prueba de Tukey (P =0.05) con el
programa SAS (Statistical Analysis System 9.0). En el análisis de componentes
principales (ACP) se aplicó el programa estadístico Minitab 15 (Minitab, 2007).
2.3 RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Contenido de betacianinas y betaxantinas
Las betalaínas son los metabolitos responsables del color morado, rojo,
anaranjado y amarillo de los frutos de tuna, son pigmentos solubles en agua que
contienen nitrógeno; se sintetizan a partir del aminoácido tirosina generando un
cromóforo común: el ácido betalámico, presente tanto en la pulpa y en la cáscara
de estos frutos, principalmente como betacianinas (responsables del color rojo-
púrpura) y betaxantinas (responsables del color amarillo-anaranjado) (Viloria et al.,
2001; Strack et al., 2003; Piga, 2004; Zrÿd y Christinet, 2004; Duru y Turker, 2005;
Hernández et al., 2005; Azaredo, H.M.V, 2006; Castellanos-Santiago y Yahia,
2008; Morales et al., 2009); muestran importante actividad antioxidante sin
efectos tóxicos en humanos (Sumaya–Martínez et al., 2011). En el presente
estudio los valores de betacianinas fueron mayores al de betaxantinas en las
variedades rojas y moradas antes de la madurez hortícola (AMH), durante
madurez hortícola (MH) y en almacenamiento (PC) tanto en pulpa como en
32
cáscara (Cuadro 2), sin embargo, en las variedades amarillas el contenido de
betaxantinas fue mayor al de betacianinas en AMH, MH y PC (Cuadro 3).
Cuadro 2. Contenido de betacianias en la fenología del fruto de 11 variedades y especies pigmentadas de tuna (Opuntia sp.) en pre y poscosecha de la Nopalera Experimental “Dr. Facundo Barrientos Pérez”, Universidad Autónoma Chapingo.
Betacianinas en pulpa Betacianinas en cáscara
Variedad / Especie
(mg 100 g-1
p.f.) (mg 100 g-1
p.f.)
AMH MH PC AMH MH PC
Opuntia sp./ Alteña blanca
0.21 c 0.31 d 0.46 d 0.27 d 0.43 d 0.50 e
O. megacantha/ Plátano
0.70 c 2.51 d 1.54 d 0.75 d 2.16 cd 2.19 e
O. ficus indica/ Huatusco
1.94 bc 2.76 d 1.81 d 1.10 d 2.26 cd 2.24 e
Opuntia sp./
Alteña roja 7.87 bc 13.15 b-d 14.36 c 9.01 bc 10.99 b 12.46 d
O. ficus indica/ Solferino
7.90 bc 6.89 cd 11.35 cd 5.50 cd 7.40 bc 15.47 bcd
O. ficus indica/ Roja de
Villanueva 8.17 bc 14.77 b-d 20.62 bc 12.86 ab 21.93 a 23.97 a
O. ficus indica/
Jade 31.78 a 25.89 bc 30.13 b 15.67 a* 17.67 a 14.80 cd*
O. megacantha/ Morada
10.61 b 11.50 b-d 20.37 bc 5.65 cd* 10.12 b 12.67 d
O. ficus indica/ Copena CEII
25.44 a 23.40 bc 29.04 b 14.35 ab 18.72 a 21.78 abc
O. ficus indica/ Copena V1
30.92 a 29.39 b 30.91 b 13.39 ab* 19.29 a 27.14 a*
O. robusta/
Larreyi 30.43 a* 59.18 a 49.15 a* 17.18 a 20.45 a 23.50 ab
DMSH 9.53 20.18 10.95 6.52 6.29 8.29
CV 27.64 47.92 23.45 30.69 21.57 23.48
AMH: 10 días antes de madurez hortícola; MH: Madurez Hortícola; PC: 10 días de almacenamiento después de madurez hortícola. CV: Coeficiente de variación. *: Variación respecto a la MH estadísticamente significativa (P ≤ 0.05). Medias con igual letra por columnas son estadísticamente iguales (P ≤ 0.05).
Solamente se encontraron diferencias significativas de betacianinas en la pulpa de
tuna 10 días antes de madurez hortícola (AMH) en las variedades Jade, Copena
CEII, Copena VI y Larreyi; en MH y en PC la variedad Larreyi presentó la más alta
concentración (59.18 y 49.15 mg 100 g-1 p.f., respectivamente); en el caso de la
cáscara de tuna en AMH en las variedades Jade y Larreyi, durante MH las
variedades con mayor concentración fueron Roja de Villanueva, Jade, Copena
33
CEII, Copena V1 y Larreyi y finalmente en PC fueron las variedades Roja de
Villanueva y Copena V1 (23.97 y 27.14 mg 100 g-1 p.f., respectivamente).
Cuadro 3. Contenido de betaxantinas en la fenología del fruto de 11 variedades y especies pigmentadas de tuna (Opuntia sp.) en pre y postcosechade la Nopalera Experimental Facundo Barrientos, Universidad Autónoma Chapingo.
Betaxantinas en pulpa Betaxantinas en cáscara
Variedad / Especie (mg 100 g-1
p.f.) (mg 100 g-1
p.f.)
AMH MH PC AMH MH PC
Opuntia sp./ Alteña blanca
0.12 d 0.39 d 0.57 e 0.19 f 0.38 g 0.50 e
O. megacantha/ Plátano
4.02 cd 8.50 bc 9.95 bc 4.39 b-e* 11.49 ab 11.83 ab
O. ficus indica/ Huatusco
2.33 cd* 5.51 b-d 2.53 de 1.45 ef 2.56 fg 2.01 de
Opuntia sp./
Alteña roja 6.31 bc 7.69 bc 8.72 c 4.71 bcd 5.60 c-f 6.74 bcd
O. ficus indica/ Solferino
4.79 cd 4.26 cd 7.74 c 3.88 cde 4.25 efg 7.74 bc
O. ficus indica/ Roja Villanueva
7.09 bc 12.30 b 14.67 ab* 8.40 a* 13.79 a 16.01 a
O. ficus indica/
Jade 12.95 a 10.59 bc 11.79 bc 8.42 a* 6.13 c-f 6.42 bcd
O. megacantha/ Morada
3.45 cd 4.53 cd 7.49 cd 2.38 def* 4.43 d-g 4.36 cde
O. ficus indica/ Copena CEII
11.12 ab 8.48 bc 11.32 bc 6.89 abc 8.14 b-e 9.79 bc
O. ficus indica/ Copena V1
11.61 ab 11.25 bc 12.82 bc 6.44 abc* 8.69 bcd 11.71 ab*
O. robusta/ Larreyi
13.12 a* 24.07 a 19.91 a* 7.43 ab* 9.30 bc 9.90 bc
DMSH 5.37 7.72 5.77 3.18 4.38 5.56
CV 31.46 35.65 24.21 26.3 26.42 28.82
AMH: 10 días antes de madurez hortícola; MH: Madurez Hortícola; PC: 10 Días de almacenamiento después de madurez hortícola. CV: Coeficiente de variación. *: Variación respecto a la MH estadísticamente significativa (P ≤ 0.05). Medias con igual letra por columnas son estadísticamente iguales (P ≤ 0.05).
Numéricamente, el contenido de betacianinas, tanto en pulpa como en cáscara,
fue mayor PC, observándose las mayores concentraciones en los frutos de color
morado, los niveles menores se observaron en las tunas verdes, amarillas y
anaranjadas (Alteña Blanca, Plátano y Huatusco) y los valores intermedios en las
tunas de color rojo (Alteña roja, Solferino y Roja de Villanueva). En la mayoría de
las variedades, el proceso de maduración favorece el incremento numérico de
34
betacianinas y el almacenamiento ocasiona tanto su perdida como ganancia, sin
embargo; en la pulpa, los cambios en la concentración de betacianinas solo es
estadísticamente significativo en la variedad Larreyi y en la cáscara en la variedad
Copena V1, Morada y Roja de Villanueva.
En relación al contenido de betaxantinas (pigmentos responsables del color
amarillo), la pulpa O. robusta var. Larreyi (color morado) presentó la mayor
concentración en AMH, MH y PC con diferencias estadísticamente significativas;
para la cáscara, Roja de Villanueva (color rojo) fue la variedad que presentó
diferencias estadísticamente significativas respecto a la acumulación a través del
tiempo. En la pulpa y cáscara de la variedad Huatusco se observó una
disminución de la concentración de betaxantinas en PC, se descarta una posible
fotodegradación por efecto de la luz visible porque todo el material estuvo
protegido, sin embargo; Woo et al., 2011 mencionan que el pH, la temperatura y
la luz UV tienen gran impacto en la degradación de betalaínas en jugos
almacenados de Hylocereus polyrhizus. Al respecto la temperatura es el factor
más importante en la estabilidad de las betalaínas durante el almacenamiento
porque se ha reportado tanto incrementos como decremento. La degradación de
betaninas es por isomerización, descarboxilación o rompimiento de la mólecula
resultando en una coloración café. Otras formas de degradación son: presencia de
-glucosidasas, polifenoloxidasas y peroxidasas las cuales actúan a pH de 3.4
(Escribano et al., 2002; Stintzing y Care, 2004); bajos niveles de oxígeno en la
atmosfera; presencia de cationes de hierro, cobre, estaño y aluminio (Sobkowska
et al., 1991). Castellar et al. (2006) mencionan que existe una relación inversa de
la estabilidad de éstos en relación al contenido de agua en los tejidos, lo cual
podría explicar la diferencia encontrada en la variedad Larreyi por una mayor
actividad acuosa (Aw), porque en las reacciones de degradadción está involucrada
el agua, la mayor estabilidad de betalaínas esta reportada en alimentos que
contienen baja humedad y actividad acuosa (Aw). Para entender el incremento,
Delgado-Vargas et al. (2000) señalan que las betalaínas son sintetizadas en los
tejidos dañados como posible mecanismo de defensa contra una infección. El
35
periodo de almacenamiento (PC) provocó un aumento en las betalaínas totales de
las once variedades bajo estudio. Chávez-Santoscoy et al., (2009) reportan
valores ligeramente inferiores (3.0 -18.9 mg 100 g-1 y 0.16 - 30.0 mg 100 g-1) de
betaxantinas y betacianinas, respectivamente, en nueve variedades de Opuntia
sp. a las encontradas en el presente trabajo (0.38-24.07 y 0.43 - 59.18 ymg 100 g-
1, respectivamente).
Contenido de compuestos fenólicos totales
Respecto a la pulpa; la cáscara de todas las variedades presentaron los niveles
más altos de los compuestos fenólicos (Cuadro 4).
El contenido de los compuestos fenólicos totales, numéricamente aumentó
durante los 10 días de almacenamiento a temperatura ambiente (PC),sin embargo,
estadísticamente solo tuvo significancia en la pulpa de Alteña Blanca, Larreyi y
Solferino y en la cáscara de Alteña Blanca, Plátano, Huatusco, Alteña Roja, Jade,
Morada y Larreyi, la excepción fue la cáscara de Solferino donde la disminución
en el contenido de fenoles totales fue significativa (Cuadro 4), lo anterior podría
explicarse debido a que el corte del fruto es una situación de estrés, se altera la
fisiología del vegetal estimulando respuestas que provocan la acumulación de
compuestos fenólicos u otros metabolitos secundarios (Pirovani et al., 2009).
Fennema (2000) afirma que con el grado de madurez del fruto, los compuestos
fenólicos disminuyen, pero aumentan como respuesta al estrés producido por
magulladuras y por infecciones fúngicas.
Las menores concentraciones de los compuestos fenólicos se encontraron en la
pulpa y en la cáscara de las variedades rojas y moradas en comparación con las
variedades Alteña Blanca, Plátano y Huatusco (amarillas y anaranjadas). En
contraste, Stintzing et al. (2001) señalan que los frutos de color rojo a púrpura
presentaron las concentraciones más altas de compuestos fenólicos totales (335 ±
19 y 600 ± 35 mg EAGL-1) en comparación con los frutos de color blanco (242 ± 13
mg EAGL-1), con excepción de dos cultivares de color púrpura en donde el
36
contenido fue menor. Figueroa et al. (2011) no observaron una relación del color
con el contenido de fenólicos en los 12 cultivares analizados.
Cuadro 4. Contenido de compuestos de fenólicos totales en la fenología del fruto de 11 variedades y especies pigmentadas de tuna (Opuntia sp.) de la Nopalera Experimental “Dr. Facundo Barrientos Pérez”, Universidad Autónoma Chapingo.
Variedad / Especie
Fenoles totales en pulpa Fenoles totales en cáscara
(mg EAG 100 g-1
p.f.) (mg EAG 100 g-1
p.f.)
AMH MH PC AMH MH PC
Opuntia sp./ Alteña blanca
156.13 a 153.18 a 165.56 a* 507.54 a 492.80 a 618.39 a*
O. megacantha/ Plátano
121.34 a-c 113.22 b-d 111.90 a 393.75 b 383.72 abc 400.82 bc*
O. ficus indica/ Huatusco
118.39 a-c 113.67 b-d 131.96 a 363.68 b 396.10 ab 425.58 bc*
Opuntia sp./ Alteña roja
120.16 a-c 107.94 b-d 120.75 a 381.96 b* 445.63 ab 486.79 ab*
O. ficus indica/ Solferino
130.78 ab 112.15 b-d 148.60 a* 356.28 bc* 450.82 ab 404.59 bc*
O. ficus indica/ Roja Villanueva
95.99 bc* 120.15 b-d 118.39 a 246.34 c 277.35 c 243.98 de
O. ficus indica/ Jade
100.70 bc 113.67 b-d 122.52 a 317.68 bc 275.23 c 374.88 bcd*
O. megacantha/ Morada
80.66 c 98.93 d 107.19 a 317.10 bc 358.96 bc 389.03 bc*
O. ficus indica/ Copena CEII
100.70 bc 106.59 cd 106.60 a 376.06 b 343.04 bc 322.99 cde
O. ficus indica/
Copena V1 131.95 ab 137.85 ab 143.74 a 379.60 b 409.90 ab 425.59 bc
O. robusta/ Larreyi
107.78 a-c*
120.15 a-c 161.43 a* 116.04 d 146.93 d 219.22 e*
DMSH 49.48 30.16 62.10 112.94 113.85 136.25
CV 17.63 10.35 19.44 13.58 12.88 14.23
AMH: 10 días antes de madurez hortícola; MH: Madurez Hortícola; PC: 10 Días de almacenamiento después de madurez hortícola. CV: Coeficiente de variación. *: Variación respecto a la MH estadísticamente significativa (P ≤ 0.05). Medias con igual letra por columnas son estadísticamente iguales (P ≤ 0.05).
Las concentraciones de fenólicos observadas en tuna (80.66 - 165.56 mg EAG100
g-1p.f. de pulpa según la etapa de desarrollo) son menores respecto a frutos de
lichies, duraznos y fresas (> 180 mg EAG en 100 g p.f.) y a vegetales como apio,
alcachofas y coles de brúcelas (>250 mg EAG en 100 g p.f.) (George et al., 2005)
37
no así la cáscara (116.04 – 618.39 mg EAG100 g-1p.f. según etapa de desarrollo)
que presenta concentraciones superiores a las mencionadas por los autores.
Aunque existen pocos estudios del contenido de estos metabolitos en tuna, es
importante mencionar los efectos benéficos de los fenoles, debido a que se
relacionan con una diversidad de acciones, como la prevención del daño oxidativo
del ADN, lípidos y proteínas, inhibición de procesos inflamatorios e inducción de
enzimas detoxificantes (Rodrigo-García et al., 2009).
Contenido de flavonoides
La cáscara en comparación con la pulpa presentó el mayor contenido de
flavonoides en todas las variedades, sin embargo, Alteña Blanca fue la única
variedad donde estadísticamente es significante la etapa de desarrollo. En las
variedades rojas y moradas el contenido numérico de flavonoides disminuyó en
la cáscara pero aumentó en la pulpa durante el almacenamiento en PC.
En las tunas amarillas se observó el efecto opuestos, el contenido de flavonoides
aumento en la cáscara y disminuyó en su pulpa en PC (Cuadro 5). No se encontró
una relación del contenido de flavonoides con el color de los frutos.
Schwin y Davies (2004) señalan que algunos tipos de flavonoides como las
chalconas, auronas y flavonoles (kaemferol) y algunas flavonas contribuyen a la
coloración de algunos tejidos de los vegetales, las primeras no identificadas en
tuna. Recientemente, Fernández-López et al. (2010) reportan la identificación de
algunos flavonoides como miricetina y luteolina, quercetina, isoramnetina
kaempferol en tuna (Kuti, 2004), flavonoides que se también se asocian con la
actividad antioxidante en varios alimentos. Se encuentra documentado (Cotelle
et al., 1996; Robards et al., 1999; Bors et al., 1999) que la quercetina es uno de
los flavonoles que presenta mayor capacidad antioxidante y ésta se relaciona con
su estructura química.
Jiménez y García (1999) mencionan que una posible pérdida de flavonoides
durante la maduración podría deberse a la degradación a través de la acción
38
enzimática. Las enzimas óxidoreductasas, polifenoloxidasas y peroxidasas,
pueden jugar un papel en la degradación de flavonoides durante maduración y
senescencia de algunos frutos (Miller et al., 1985 a y b).
Cuadro 5. Contenido de flavonoides en el fruto de 11 variedades y especies pigmentadas de tuna (Opuntia sp.) de la Nopalera Experimental “Dr. Facundo Barrientos Pérez”, Universidad Autónoma Chapingo. Chapingo, Méx.
Flavonoides en pulpa Flavonoides en cáscara
Variedad / Especie
(mg EQ 100 g-1
p.f.) (mg EQ 100 g-1
p.f.)
AMH MH PC AMH MH PC
Opuntia sp./ Alteña blanca
1.10 f * 1.34 f 1.34 f 25.36 a* 17.55 a 27.73 a*
O. megacantha/ Plátano
6.18 b 6.00 c-e 6.18 b-e 23.58 a 22.83 a 21.42 ab
O. ficus indica/ Huatusco
1.77 ef 1.85 f 2.59 ef 21.66 a 19.43 a 20.12 ab
Opuntia sp./ Alteña roja
3.76 c-e 4.32 de 4.37 c-f* 14.99 a 25.57 a 23.87 ab
O. ficus indica/ Solferino
5.73 bc* 4.08 e 3.23 d-f 20.20 a 23.80 a 22.41 ab
O. ficus indica/ Roja Villanueva
4.43 b-d* 6.88 bc 9.60 ab* 20.25 a 23.84 a 20.04 ab
O. ficus indica/ Jade
4.74 b-d* 6.27 b-d 6.69 b-d 19.72 a 20.60 a 20.04 ab
O. megacantha/ Morada
3.13 d-f* 4.59 de 6.00 b-e 16.30 a 19.45 a 17.75 b
O. ficus indica /Copena CEII
6.72 ab 6.90 bc 8.34 ab 26.74 a 24.46 a 20.73 ab
O. ficus indica/ Copena V1
6.63 ab* 9.90 ab 8.23 a-c 24.19 a 25.99 a 23.95 ab
O. robusta/ Larreyi
8.71 a* 10.20 a 11.21 a 27.54 a 22.51 a 21.79 ab
DMSH 2.34 2.18 4.09 12.46 11.52 9.86
CV 19.95 16.19 27.16 22.42 14.23 18.56
AMH: 10 días antes de madurez hortícola; MH: Madurez Hortícola; PC: 10 Días de almacenamiento después de madurez hortícola. CV: Coeficiente de variación. *: Variación respecto a la MH estadísticamente significativa (P ≤ 0.05). Medias con igual letra por columnas son estadísticamente iguales (P ≤ 0.05).
39
Contenido de ácido ascórbico
En la cáscara y la pulpa de Copena CEII, Larreyi y Roja de Villanueva no se
encontró la presencia de este metabolito (Cuadro 6) en ninguna etapa de analisis.
Lee y Kader (2000) mencionan que el contenido de vitamina C (ácido áscórbico y
dihidroascórbico) de frutas y hortalizas frescas depende de la especie, cultivar,
condiciones climáticas, prácticas de cultivo, estado de madurez y por supuesto
manipulación poscosecha.
Cuadro 6. Contenido de Vitamina C en la fenología del fruto de 11 variedades y especies pigmentadas de tuna (Opuntia sp.) de la Nopalera Experimental “Dr. Facundo Barrientos Pérez”, Universidad Autónoma Chapingo. Chapingo, Méx.
Vitamina C en pulpa Vitamina C en cáscara
Variedad / Especie
(mg EAA 100 g-1
p.f) (mg EAA 100 g-1
p.f)
AMH MH PC AMH MH PC
Opuntia sp./ Alteña blanca
9.16 c* 3.54 cd 3.74 cde 28.33 b 5.75 de 2.26 bc
O. megacantha/ Plátano
28.44 b* 23.85 b 15.49 b* 7.47 d 14.13 c 15.83 a
O. ficus indica/
Huatusco 14.15 c* 19.06 b 0.00 e* 27.43 b 14.29 bc 0.56 c
Opuntia sp./ Alteña roja
37.16 a 34.07 a 37.14 a 34.63 a 0.00 e 0.00 c
O. ficus indica/ Solferino
12.91 c 9.82 c 4.62 cd* 2.33 de 23.76 a 6.80 b
O. ficus indica/ Roja Villanueva
0.00 d 0.00 d 0.00 e 0.00 e 0.00 e 0.00 c
O. ficus indica/Jade
9.05 c* 4.74 cd 2.80 de 4.07 de 7.21 cd 14.83 a*
O. megacantha/ Morada
0.00 d 0.00 d 0.00 e 4.15 de 0.00 e 0.00 c
O. ficus indica/ Copena CEII
0.00 d 0.00 d 0.00 e 0.00 e 0.00 e 0.00 c
O. ficus indica/ Copena V1
15.65 c* 22.16 b 8.04 c* 18.27 c 21.27 ab 16.59 a
O. robusta/ Larreyi
0.00 d 0.00 d 0.00 e 0.00 e 0.00 e 0.00 c
DMSH 7.24 6.32 4.50 5.25 7.10 5.42
CV 25.8 24.29 28.22 18.69 37.02 42.95
AMH: 10 días antes de madurez hortícola; MH: Madurez Hortícola; PC: 10 Días de almacenamiento después de madurez hortícola. CV: Coeficiente de variación. *: variación respecto a la MH estadísticamente significativa (P ≤ 0.05). Medias con igual letra por columnas son estadísticamente iguales (P ≤ 0.05).
40
En las variedades en donde estuvo presente esta vitamina se encontró una
disminución de su contenido durante el periodo de almacenamiento a temperatura
ambiente, lo cual podría atribuirse a su posible degradación, en los vegetales ésta
tiene lugar durante la fase de poscosecha debido al almacenamiento, sobre todo a
temperaturas altas e inadecuadas (Lee y Kader, 2000). Según Barry-Ryan y
O´Beirne (1999) el daño físico intensifica la pérdida ácido ascórbico, Moretti et al.,
(1998) al estudiar la influencia de la lesión mecánica de la capacidad antioxidante
de diferentes tejidos vegetales, encontraron una disminución del contenido de esta
vitamina debido al corte y posible almacenamiento a 15 °C durante dos días.
La pérdida o disminución de ácido ascórbico se debe a la estructura poco estable,
debido a la presencia de oxígeno, el cual es degradado a ácido dehidroascórbico
componente minoritario de la vitamina C, sin embargo una oxidación extrema del
anillo lactónico de ácido dehidroascórbico lo degrada, resultando la formación del
ácido 2,3-dicetogulónico y por consiguiente la pérdida de la actividad de la
vitamina C (de Ancos et al., 2009).
Los contenidos de ácido ascórbico (0.0 - 23.85 mg EAA 100 g-1p.f.) encontrados
en el presente trabajo son similares a los reportados por Figueroa et al. (2010) (en
12 variedades de Opuntia sp. (5.31 – 25.0 mg EAA 100 g-1 p.f.) en madurez
hortícola.
Análisis de componentes principales
En el análisis de componentes principales (ACP), los primeros tres componentes
generados explicaron 95 % de la variabilidad de los datos. Las proyecciones de
las observaciones de los componentes principales 1 (CP1) y 2 (CP2) permitieron
separar en cuatro grupos las variedades de tuna en la madurez hortícola (Figura
1). El CP1 presentó correlación positiva con el contenido de fenoles totales y una
correlación negativa con la concentración de pigmentos (betacianinas y
betaxantinas). El CP2 tuvo correlación positiva con el contenido de vitamina C y
una negativa con contenido de flavonoides. El CP3 (dato no mostrado) se
41
caracterizó por tener una correlación positiva con el contenido de vitamina C, pero
una negativa con el contenido de betacianinas.
43210-1-2-3-4
2
1
0
-1
-2
Primer componente
Se
gu
nd
o c
om
po
ne
nte
LA-C
V1-C
CE-C
MO-CJA-C
RV-C
SO-C
AR-C
HU-C
PL-C
AB-C
LA-P
V1-PCE-P
MO-P
JA-P RV-P
SO-P
AR-PHU-P
PL-P
AB-P
I
II
III
IV
La pulpa de las variedades Alteña Blanca, Alteña Roja, Huatusco, Morada, Plátano
y Solferino conformaron el Grupo I; variedades con el mayor contenido de
vitamina C. La pulpa de Copena CEII, Copena V1, Jade y Roja de Villanueva,
poseen mayor concentraciones de pigmentos respecto a las pulpas del grupo I.
Larreyi (pulpa) conformo el Grupo III, variedad que se distingue por el mayor
contenido de pigmentos pero menor contenido de fenoles. Las cáscaras de las
once variedades integraron el Grupo IV y poseen el mayor contenido de fenoles.
Figura 1. Agrupación de once variedades pigmentadas de tuna (Opuntia sp.) cultivadas en la
nopalera experimental “Dr. Facundo Barrientos Pérez” de la UACh, en base a características
fitoquímicas. CP1 y CP2. ●: representa la posición de la variedad en el plano de los
componentes principales. Tejido: Cáscara (C), Pulpa (P); Variedades; Alteña Blanca (AB),
Alteña Roja (AR), Copena CEII (CE), Copena V1 (V1), Huatusco (HU), Jade (JA), Larreyi (LA),
Morada (MO), Plátano (PL), Roja de Villanueva (RV) y Solferino.
Vitamina C
Flavonoides
Betacianinas y Betaxantinas Fenoles totales
42
2.4 CONCLUSIONES
Los contenidos de betalaínas y compuestos fenólicos totales aumentaron en el
periodo de almacenamiento en cáscara como en la pulpa en todas las variedades,
en contraste, el contenido de flavonoides disminuyó en la cáscara pero aumentó
en la pulpa en las variedades rojas y púrpura en postcosecha. El almacenamiento
de los frutos de tuna de algunas variedades contribuyo a la pérdida parcial de
ácido ascórbico. La variedad Larreyi presentó la mayor actividad antioxidante en
madurez hortícola y se asocia el mayor contenido de betalaínas de todas las
variedades estudiadas.
2.5 BIBLIOGRAFÍA
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47
CAPITULO III
Valor nutracéutico y color de variedades pigmentadas de tuna (Opuntia sp.)
en poscosecha
RESUMEN
Estudios recientes han demostrado los beneficios del consumo de frutos por la
presencia de compuestos con propiedades nutracéuticas, con especial atención en
aquellos con actividad antioxidante, debido a que previenen algunas enfermedades
degenerativas y mantienen la buena salud de sus consumidores. La presencia de
pigmentos (betalaínas), compuestos fenólicos, flavonoides y ácido ascórbico en
algunas especies y cultivares de tuna que se cultivan en zonas áridas y semiáridas de
algunos países del Mediterráneo, África y Australia justifican sus propiedades
nutracéuticas y medicinales; sin embargo, a pesar de que México es el primer
productor de tuna a nivel mundial, pocos estudios se han realizado para determinar la
calidad nutracéutica de algunas variedades del fruto. El objetivo del presente trabajo
fue evaluar el valor nutracéutico y el color del fruto mediante la cuantificación de
fenoles totales, flavonoides, betalaínas totales, ácido ascórbico (vitamina C) asociada
con la actividad antioxidante de once variedades de tuna (Opuntia sp.). Esto podría
proveer nuevas alternativas económicas para el sector hortícola y agroindustrial. Los
valores de Hue (color) en la cáscara permitieron formar tres grupos de variedades:
tunas amarillas, anaranjadas y rojas; las variedades rojas presentaron las mayores
concentraciones de betalaínas totales. El mayor contenido de compuestos fenólicos
totales y flavonoides , tanto en pulpa como en cáscara, se encontró en la variedad
Alteña Blanca. En todas las variedades, la cáscara presentó mayor concentración de
compuestos fenólicos totales y flavonoides. La pulpa de los frutos de color rojo
presentaron las mayores concentraciones de betalaínas totales (69.09 – 19.08 mg
100 g-1
) en comparación a sus respectivas cáscaras (39.97- 19.20 mg 100 g-1
). La
actividad antioxidante encontrada en la cáscara de alteña Blanca (0.08 mg ml-1
)
puede explicarse a la presencia de compuestos fenólicos totales y flavonoides, pero
O. robusta var. Larreyi presentó la mayor actividad antioxidante (0.018 mg ml-1
) y el
mayor contenido de betalaínas en la pulpa (69.06 mg 100 g -1
p.f.).
Palabras clave: fenólicos, betalaínas, ácido ascórbico, actividad antioxidante, pulpa,
cáscara
48
3.1 INTRODUCCIÓN
Existe creciente demanda por el consumo de productos hortofrutícolas con
propiedades nutracéuticas debido a que se ha encontrado una relación inversa
entre una dieta rica en frutas y hortalizas, preferentemente frescas y a la
incidencia de enfermedades crónico-degenerativas, como algunos tipos de cáncer
(Gescher et al., 1998) y enfermedades cardiovasculares (Lairon et al., 2007),
propiedades que se han atribuido a ciertos compuestos bioactivos o fitoquímicos
(Sumaya-Martínez et al., 2010). Sin embargo, en México este tipo de estudios es
muy escaso, a pesar de que existe una enorme riqueza productiva y biodiversidad
de productos hortícolas. Un recurso fitogenético ampliamente distribuido,
explotado y comercializado en México es el nopal tunero. Por lo que es el primer
productor de tuna a nivel mundial contando con diversas variedades (Sumaya-
Martinez et al., 2010). En 2011, la superficie total sembrada de nopal tunero fue 57
692.55 ha, cuyo valor de la producción fue aproximadamente de mil millones de
pesos (SIAP, 2011). También se cultiva en otras partes del mundo como África,
Australia y algunos países del Mediterráneo debido a su sabor característico y por
los múltiples atributos nutricios y medicinales (propiedades anticancerígenas,
antioxidantes, antivirales, antiinflamatorias, antidiabéticas) (Chavez-Santoscoy et
al., 2009; Livrea y Tesoriere, 2006; Magloire et al., 2006). El fruto conocido como
tuna se consume en fresco aportando lípidos, proteínas, minerales, fibra,
aminoácidos (serina, glutamina, ácido aminobutírico, prolina, agentes
antioxidantes (ácido ascórbico, compuestos fenólicos y pigmentos betalaínicos)
(Tesoriere et al., 2005; Stintzing et al., 2005; Figueroa et al., 2010 y Sumaya-
Martínez et al., 2011); así como altas concentraciones de calcio, magnesio y
taurina, metabolitos que le confieren características de un alimento funcional
(Galati et al., 2003). Además, la presencia de pigmentos principalmente
betalaínas, en algunas especies y variedades, proporciona diferentes coloraciones
al fruto, así como propiedades antioxidantes (Figueroa et al., 2010: Sumaya-
Martínez et al., 2011). La cáscara de tuna, podría ser una fuente de fitoquímicos,
que podría ser reutilizadas por la industria de alimentos para enriquecer la calidad
nutracéutica de algunos alimentos (Sumaya-Martínez et al., 2010; Kalpna et al.,
49
2011). Con base a lo anterior, el objetivo del presente trabajo fue evaluar el color y
el valor nutracéutico mediante la cuantificación de fenoles totales, flavonoides,
betalaínas totales, ácido ascórbico (vitamina C) asociada con la actividad
antioxidante de once variedades de tuna (Opuntia sp.). Esto podría proveer
nuevas alternativas económicas para el sector hortícola y nutracéuticas para el
consumidor.
3.2 MATERIALES Y MÉTODOS
Recolecta del material vegetal
Los frutos de once variedades de tuna (Cuadro 1) se recolectaron en la nopalera
experimental Dr. Facundo Barrientos Pérez de la Universidad Autónoma
Chapingo, en Chapingo, ubicada a 19º 29’ LN y 98º 53’ LO, a 2 240 m (García,
1988). El clima es C(Wo) (w)b (i’)g, templado moderado lluvioso y el más seco de
los subhúmedos, con lluvias en verano; la temperatura media anual es 17.8 ºC y
precipitación de 644.8 mm anuales.
El criterio de cosecha fue el de madurez de consumo, es decir, al término del
crecimiento del fruto de acuerdo con los parámetros visuales comercialmente
usados regionalmente de tamaño y llenado de fruto recomendados por Cantwell
(1995). Se seleccionaron cuatro plantas por variedad, los frutos sanos y libres de
plagas se desespinaron y almacenaron a obscuridad por diez días a temperatura
ambiente Se separó la pulpa de la cáscara, y el tejido se fraccionó en fragmentos
pequeños, éstos se congelaron por inmersión en nitrógeno líquido y se
almacenaron a -20 °C para el análisis posterior de fitoquímicos.
Medición del color
Se evaluó la luminosidad (L), ángulo de tono (Hue) y la pureza de color o índice
de cromaticidad (Chroma) de la pulpa y de la cáscara del fruto de cada variedad
con un colorímetro Hunter Lab (Mini Scan XE Plus 45/ 0-L, RestonVa, USA). Se
obtuvieron las lecturas L* de a* y b* para identificar las diferencias de color entre
50
tejido y variedades en forma numérica. Se realizó el cálculo mediante las fórmulas
siguientes: Hue = tan -1(a/b); Chroma = (a2+ b2) ½ (Mc Guire, 1992).
Cuadro 1. Descripción de 11 variedades y especies pigmentadas de tuna (Opuntia sp.) cultivadas en la nopalera experimental Dr. Facundo Barrientos Pérez de la Universidad Autónoma Chapingo. Chapingo, Méx.
Especie Variedad Origen Color cáscara
Opuntia sp. Alteña Blanca Celaya, Gto. Verde
Opuntia sp. Alteña Roja Celaya, Gto. Rojo
O. megacantha Salm Plátano Ojuelos, Jal. Amarillo
O. ficus-indica (L.). Mill Huatusco Huatusco, Ver. Rojo
O. ficus-indica (L.). Mill Solferino Chapingo, Méx. Rojo
O. ficus-indica (L.). Mill Roja de Villanueva Villanueva, Pue. Rojo
O. ficus-indica (L.). Mill Jade Desconocido Morado
O. megacantha Salm Morada San Martín de las Pirámides,
Méx.
Morado
O. ficus-indica (L.). Mill Copena CEII Chapingo, Méx. Zacatecas, Zac. Morado
O. ficus-indica (L.). Mill Copena V1 Chapingo, Méx. Morado
O. robusta Wendl Larreyi San Martín de las Pirámides,
Méx.
Morado
Fuente: Cruz, M.F.M. 2011. Importancia y cuidado del germoplasma de nopal caso: Nopalera Experimental de Chapingo. Revista Salud Pública y Nutrición
Cuantificación de betacianias y betaxantinas
Se determinó el contenido de pigmentos de acuerdo al método propuesto por
Castellanos-Santiago y Yahia (2008). Se pesó un gramo de cáscara o pulpa sin
semilla congelada, a la que se le adicionaron 10 mL de agua destilada estéril, la
muestra se introdujo a un baño ultrasónico (Cole Parmer 8892, Illinois, USA) por
20 min, se incubó por 24 hrs a obscuridad a temperatura ambiente y se centrifugó
la mezcla a 2200 g por 20 min. Se leyó la absorbancia de los extractos en un
espectrofotómetro Genesys 10s a las longitudes de onda de 483 nm
(betaxantinas) y 538 nm (betacianinas). Para cuantificar la cantidad de
betaxantinas y betacianinas se utilizó la siguiente fórmula:
BC (mg g-1) = (A x FD x PM x V)(ε x L x P)-1
donde, BC = betaciania o betaxantina, A: absorbancia; FD = factor de dilución;
PM = peso molecular (betacianina: 550 g mol-1, betaxantina: 308 g mol-1);
V = Volumen del extracto (mL); ε = coeficiente de extinción molar (betacianina: 60
51
000 L mol·cm-1; betaxantina: 48 000 L mol·cm-1; P = peso del tejido; L = longitud
de la celda (1 cm).
Preparación del extracto para fenoles totales y flavonoides
Las muestras sin semilla se homogeneizaron en un procesador de alimentos. Se
pesó un gramo de fruto fresco triturado se disolvió en 25 mL de etanol al 95 % v/v
mediante sonificación (Cole Parmer 8892, Illinois, USA) por 15 min. Después de
24 h se ajustó el volumen a 25 mL con etanol al 80 % v/v, se centrifugó la mezcla
a 1409 g.
Contenido de fenoles totales
Se cuantificó el contenido de fenoles totales de acuerdo al método propuesto por
Waterman y Mole (1994). A 0.5 mL del extracto etanólico se le adicionaron 10 mL
de una solución de Na2CO3 a 10 % y se incubó a 38 °C por 15 min. Se tomó 1 mL
de esta mezcla, al que se le adicionaron 3 mL de agua y 1 mL del reactivo de
Folín-Ciocalteu:agua (1:1 v/v). La mezcla se dejó reposar por 15 min en oscuridad.
Finalmente, se tomó lectura de la absorbancia a 660 nm en un espectrofotómetro
Genesys 10s (Thermoscientific, Florida, USA). El contenido total de fenoles en el
extracto se expresó en mg equivalentes de ácido gálico en 100 g de peso fresco
(mg EAG 100 g-1 p.f.).
Cuantificación de flavonoides
Se cuantificó el contenido de flavonoides de acuerdo al método propuesto por
Chang et al. (2002). A 0.5 mL del sobrenadante del extracto etanólico preparado
anteriormente, se le agregaron 1.5 mL de etanol al 95 % v/v, 0.1 mL de solución
de AlCl3 al 10 % p/v, 0.1 mL de solución 1 M de acetato de potasio y 2.8 mL de
agua destilada. Se incubó la mezcla por 30 min. Se leyó la absorbancia en un
espectrofotómetro Genesys 10s a una longitud de onda 415 nm. Los resultados se
expresan en mg equivalentes de quercetina en 100 g de peso fresco (mg EQ 100
g-1 p.f.).
52
Cuantificación de ácido ascórbico
Para la determinación de ácido ascórbico (vitamina C) se pesó un gramo de
muestra a la que se le adicionaron 3 mL de solución de ácido metafosfórico al 3 %
v/v, la mezcla se maceró por 3 min y se filtró. Se tomó 1 mL del filtrado, se aforó a
10 mL con la solución de ácido metafosfórico al 3 % v/v. Se tomaron 2 mL del
sistema amortiguador para pH = 4 (ácido acético glacial: acetato de sodio al 5 %
p/v, 1:1) mezcla, se le adicionaron 2 mL del regulador de acetatos, 3 mL del
dicloroindofenol y 15 mL de xileno, se agitó vigorosamente en un vortex
(Thermolyne Type 6700, USA). Se leyó la absorbancia en un espectrofotómetro
Génesis 10s a 520 nm. A partir de una curva estándar se obtuvo la concentración
de ácido ascórbico presente en cada muestra mediante de la siguiente ecuación:
mg ácido ascórbico total/ mg = (C x V x 100) / (A x P); donde: C = ácido ascórbico
en la muestra; V= volumen de aforo; A= mL de alícuota de la solución tomada;
P = peso o volumen de la muestra. La concentración de ácido ascórbico se
expresó en mg equivalentes de ácido ascórbico en 100 g de peso fresco (mg EAA
100 g-1 p.f.).
Evaluación de la actividad antioxidante
El análisis se realizó mediante el método del radical libre DPPH (2,2-difenil-1-
picrilhidracilo, Sigma-Adrich; St. Louis, Missouri, USA), descrito por Amico et al.
(2008). Se maceró 1 g de pulpa o cáscara en metanol, cada muestra se mantuvo
en baño con sonificación durante 20 min. Se filtró la solución y el sobrenadante se
concentró en un rotaevaporador BüchiR-210 (Slawil, Suiza). Por dilución seriada, a
partir de la concentración más alta del extracto metanólico se prepararon las
siguientes disoluciones en metanol para obtener las concentraciones de 0.2, 0.15,
0.1, 0.05, 0.015, 0.005 mg mL-1. Se tomó 1 mL de cada una de las
concentraciones de los extractos y se le adicionaron 3 mL de una solución de
DPPH (0.1 mM). Se dejaron a temperatura ambiente durante 30 min y después se
realizó la lectura de absorbancia a 516 nm. La baja absorbancia de la mezcla de
reacción indicó alta actividad antioxidante. Se determinó el porcentaje de DPPH
53
inhibido mediante la fórmula: % DPPH =(Acontrol- Amuestra)*100/Acontrol donde; Acontrol
es la absorbancia del control (DPPH 0.1mM), Amuestra es la absorbancia obtenida
después de 30 min de cada muestra con DPPH 0.1mM. Los valores de la
concentración inhibitoria media de las muestras (CI50 = mg mL-1) se obtuvieron
graficando los porcentajes de inhibición en función de las concentraciones de los
extractos (mg mL-1) de cada muestra. La CI50 es la concentración requerida por la
muestra para disminuir la absorbancia 516 nm del DPPH al 50 %. Para la
construcción de la curva estándar de DPPH, se disolvieron en 100 mL de metanol
3.93 mg de DPPH para obtener una concentración de 0.1 mM. De esta solución se
preparó por dilución las concentraciones: 0.01, 0.02, 0.04, 0.06, 0.08 y 0.1 mM de
DPPH. La absorbancia se midió a 516 nm en un espectrofotómetro Genesys 10s.
La curva estándar se construyó con la absorbancia del radical DPPH en función de
sus concentraciones y se obtuvo la ecuación ajustada por regresión lineal.
Análisis estadístico
Se usó un diseño factorial asimétrico 2x11 (dos tejidos y once variedades) con
cuatro repeticiones. Los resultados se analizaron mediante un análisis de varianza
y prueba de comparación de medias de Tukey (P =0.05), con el programa SAS
(Statistical Analysis System 9.0).
3.3 RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Componentes del color
Todas las variedades presentaron valores de L* menores a 50 %, y se
identificaron dos grupos: las de color menos obscuro (L* 25 % - 46 %) (Alteña
Blanca, Plátano y Huatusco) y las de color más obscuro L* < 25 % (resto de
variedades) (Cuadro 2). Cabe hacer notar que estas últimas, que son mayoría,
coincidentemente presentaron significativamente mayores concentraciones de
pigmento, que las de color no muy obscuro (Cuadro 3).
54
Cuadro 2. Características de color del fruto de 11 variedades y especies de tuna (Opuntia sp.) de la Nopalera Experimental Facundo Barrientos, Universidad Autónoma Chapingo. Chapingo, Méx.
Especie/variedad Tejido
Color Luminosidad
(L) Tono (Hue)
Pureza (Chroma)
Opuntia sp./Alteña Blanca Cáscara Amarillo-verdoso 38.23 b 100.96 a 17.90 e-g
Pulpa Crema
45.83 a 88.87 b 12.03 h-j
O. megacantha/ Plátano Cáscara
Amarillo 29.25 cd 54.91 c 14.52 gh
Pulpa Anaranjado
31.08 c 43.08 d 25.56 ab
O. ficus indica/ Huatusco Cáscara
Anaranjado 25.82 ed 52.57 c 10.54 i-l
Pulpa Anaranjado
36.11 b 54.14 c 14.74 f-h
Opuntia sp./Alteña Roja Cáscara
Rosa 23.51 e 9.91 h-j 10.39 j-l
Pulpa Rojo
18.73 gh 21.25 e 27.43 a
O. ficus indica/ Solferino Cáscara
Rosa 22.83 ef 18.52 ef 11.49 h-k
Pulpa Rojo solferino
18.62 g-i 13.12 f-i 27.39 a
O. ficus indica/ Roja de Villanueva
Cáscara
Rojo 19.81 fg 4.73 j 14.21 g-i
Pulpa Rojo
19.67 f-h 15.75 e-g 23.35 bc
O. ficus indica/Jade Cáscara
Purpura 19.71 f-h 13.52 f-i 7.89 k-m
Pulpa Morado
15.29 i-k 9.01 h-j 20.38 c-e
O. megacantha/ Morada Cáscara
Purpura 19.39 f-h 12.21 g-i 8.24 k-m
Pulpa Morado
15.52 i-k 13.27 f-i 23.12 bc
O. ficus indica/Copena CEII Cáscara
Purpura 19.31 gh 14.02 f-h 6.32 m
Pulpa Morado
14.68 jk 8.54 h-j 18.47 d-f
O. ficus indica/ Copena V1 Cáscara
Purpura 19.32 gh 12.01 g-i 6.97 lm
Pulpa Morado
16.31 h-j 7.98 ij 21.70 cd
O. robusta/ Larreyi Cáscara
Purpura 19.31 gh 12.31 g-i 6.95 lm
Pulpa Morado
12.60 k 11.75 g-i 25.56 ab
CV
5.79 8.09 9.02
CV: Coeficiente de variación. Medias con igual letra dentro de columnas son estadísticamente
iguales con base en la prueba de Tukey (P ≤ 0.05).
Los valores de Hue sugirieron que hay tres grupos de variedades: tunas amarillas
(Alteña Blanca), anaranjadas (Plátano y Huatusco) y rojas (las restantes
variedades). Se observa que la cáscara de Alteña Blanca tuvo mayor Hue (color
amarillo-verdoso) que su pulpa (color amarillo). La cáscara de la variedad
anaranjada Plátano presentó mayor Hue (es más anaranjada) que su cáscara, que
es más rojiza. Para la variedad Huatusco (de color anaranjado) no se observaron
diferencias entra su cáscara y su pulpa. Dentro de las variedades rojas, en Alteña
Roja y Roja de Villanueva no se observaron diferencias entre cáscara y pulpa, en
55
las restantes la mayoría presentó de menor a mayor Hue (más y menos roja,
respectivamente) (Cuadro 2).
En relación al Chroma, la variedad Alteña Banca fue la que presentó el menor
valor en pulpa, pero al mismo tiempo también alto valor de Chroma en cáscara, en
contraste las variedades restantes presentaron un valor mayor en la pulpa que en
las cáscaras. Los valores altos de Chroma (mayor intensidad o pureza de color) se
pueden deber a un elevado contenido de pigmentos (betalaínas).
Contenido de betalaínas totales Los resultados mostraron que la proporción y concentración de los pigmentos
betalaínas son responsables del color amarillo y rojo de las diferentes variedades
de tuna estudiadas. Las concentraciones menores se encontraron en las tunas
blancas y anaranjadas, éstas fueron aumentando en los frutos rojos o púrpura, en
donde el color varió de color rojo a púrpura (Cuadro 3), lo cual coincide con los
tres grupos de variedades formados en relación al valor de Hue (Cuadro 2). La
pulpa de O. robusta var. Larreyi fue la única variedad que supero los niveles de
betalaínas totales detectados en las otras variedades (69.06 mg 100 g-1). Kuti
(2004) reporta una concentración mayor de betalaínas (81.5 mg 100 g-1) en
Opuntia sp. a la encontrada en la presente investigación. La pulpa de los frutos de
color rojo y morado presentaron las mayores concentraciones de betalaínas
totales en comparación a sus respectivas cáscaras.
La concentración de betalaínas totales comprende al contenido de betacianias y
betaxantinas, principalmente (Cuadro 3). La menor concentración de betacianias
(pigmento responsable del color rojo y morado) la presentaron las variedades
Alteña Blanca, Plátano y Huatusco, el mayor valor lo presentaron el resto de las
variedades de color rojo y morado. En relación a las betaxantinas (pigmento
responsable del color amarillo-anaranjado) los niveles mayores se encontraron en
casi todas las variedades con excepción Alteña blanca, que presentó las
concentraciones más baja en pulpa y cáscara.
56
Cuadro 3. Contenido de Betalaínas totales, Betacianias y Betaxantinas en el fruto de 11 variedades y especies de tuna (Opuntia sp.) de la Nopalera Experimental Facundo Barrientos, Universidad Autónoma Chapingo. Chapingo, Méx.
Especie/variedad Tejido Betalaínas
totales* (mg 100 g
-1)
Betacianias* (mg 100 g
-1)
Betaxantinas* (mg 100 g
-1)
Opuntia sp./Alteña Blanca Cáscara 0.99 k 0.50 g 0.50 h
Pulpa 1.03 k 0.46 g 0.57 h
O. megacantha/ Plátano Cáscara 14.02 i-k 2.19 efg 11.83 b-e
Pulpa 11.48 i-k 1.54 fg 9.95 b-f
O. ficus indica/ Huatusco Cáscara 4.25 jk 2.24 e-g 2.01 gh
Pulpa 4.34 jk 1.81 fg 2.53 gh
Opuntia sp./Alteña Roja Cáscara 19.20 h-j 12.46 ed 6.74 d-g
Pulpa 23.08 g-i 14.36 cd 8.73 c-f
O. ficus indica/ Solferino Cáscara 22.98 g-i 15.24 cd 7.74 d-g
Pulpa 19.08 h-j 11.35 d-f 7.74 d-g
O. ficus indica/ Roja de Villanueva
Cáscara 39.97 c-g 23.97 bc 16.01 ab
Pulpa 45.30 b-e 20.62 b-d 14.67 a-c
O. ficus indica/Jade Cáscara 21.21 ih 14.89 cd 6.42 e-h
Pulpa 41.41 bc 30.13 b 11.79 b-e
O. megacantha/ Morada Cáscara 17.03 h-k 12.67 ed 4.36 f-h
Pulpa 27.86 f-i 20.37 b-d 7.49 d-g
O. ficus indica/Copena CEII Cáscara 31.57 e-h 21.78 bc 9.79 c-f
Pulpa 40.36 b-d 29.04 b 11.32 b-e
O. ficus indica/ Copena V1 Cáscara 38.85 d-g 27.14 b 11.71 b-e
Pulpa 43.73 b 30.91 b 12.82 b-d
O. robusta/ Larreyi Cáscara 33.41 e-h 23.50 bc 9.90 b-f
Pulpa 69.06 a 49.15 a 19.91 a
CV
21.62 23.89 26.27
*Peso fresco. CV: Coeficiente de variación. Medias con igual letra dentro de columnas son estadísticamente iguales con base en la prueba de Tukey (P ≤ 0.05).
Es importante la relación y la concentración de los pigmentos betacianina y
betaxantina (Butera et al., 2002) debido a que son los responsables de los colores
amarillo, anaranjado, rojo y morado de los frutos de tuna (Stintzing et al., 2005).
Chávez-Santoscoy et al. (2009) reportan valores ligeramente inferiores (3.0 -18.9
mg 100 g-1 y 0.16 - 30.0 mg 100 g-1) de betaxantinas y betacianinas,
respectivamente, en nueve variedades de Opuntia spp. a las encontradas en el
presente trabajo (0.5 – 19.91 y 0.46 – 49.15 mg 100 g-1, respectivamente) (Cuadro
3). Existen estudios recientes (Tesoriere et al., 2004; Tesoriere et al., 2005) sobre
las propiedades y beneficios de las betalaínas tales como prevención de cáncer
(Chávez-Santoscoy et al., 2009) y la oxidación de lípidos de membranas y
57
hemoglobina, la disminución de la concentración de vitamina E debido a la
interacción de estas moléculas con estructuras lipídicas de las células (Livrea y
Tesoriere, 2006), lo cual explica en parte las propiedades que se le atribuyen a la
tuna.
Contenido de compuestos fenólicos totales
Únicamente se observaron diferencias significativas (P ≤ 0.05) del contenido de
compuestos fenólicos totales en la cáscara de la variedad Opuntia sp. var. Alteña
Blanca con respecto a su pulpa y a las variedades restantes. Es importante
señalar que numéricamente se encontró una concentración mayor en la cáscara
que en la pulpa de cada variedad. Chavez-Santosocoy et al. (2009) reportan
niveles menores (2.2 – 22.6 mg EAG en 100 g) en la pulpa de nueve variedades
de Opuntia sp. a los encontrados en el presente trabajo (Cuadro 4). Al respecto,
de Ancos et al. (2009) afirman que los daños mecánicos en el tejido vegetal
producidos por el pelado y cortado inducen un incremento en la síntesis de
compuestos fenólicos relacionado con un aumento de la actividad de la enzima
fenilalanina-amonioliasa (PAL) como respuesta fisiológica a los daños
mencionados con el fin de reducir la pérdida de agua y el ataque de fitopatógenos,
lo cual podría explicar el mayor contenido de fenoles totales en la cáscara en
comparación con la pulpa en todas las variedades y a los reportados por Chavez-
Santosocoy et al. (2009). Fennema (2000) afirma que con el grado de madurez del
fruto los compuestos fenólicos disminuyen, pero aumentan como respuesta al
estrés producido por magulladuras y por infecciones fúngicas.
La cáscara de la variedad Alteña blanca fue la que presentó la concentración más
alta (618.39 mg EAG en 100 g p.f.) de fenólicos (Cuadro 4). Stintzing et al. (2001)
señalan que los frutos de color rojo a púrpura presentaron las concentraciones
más altas de compuestos fenólicos totales (335 ± 19 y 600 ± 35 mg EAG L-1) en
comparación con los frutos de color blanco (242 ± 13 mg EAG L-1), con excepción
de dos cultivares de color púrpura en donde el contenido fue menor tal y como lo
menciona Sumaya-Martínez et al. (2011); no hay relación entre el contenido de
58
fenoles totales y el color de tres grupos de cultivares de tuna (púrpura, amarilla y
blanca). Figueroa et al. (2011) no observaron una relación del color con el
contenido de fenólicos en los doce cultivares analizados.
Cuadro 4. Contenido de compuestos de fenólicos totales y flavonoides en el fruto de 11 variedades y especies de tuna (Opuntia sp.) de la Nopalera Experimental Facundo Barrientos, Universidad Autónoma Chapingo. Chapingo, Méx.
Especie/variedad Tejido Fenoles totales *
(mg EAG 100 g-1
) Flavonoides *
(mg EQ 100 g-1
)
Opuntia sp./Alteña Blanca Cáscara 618.39 a 27.73 a
Pulpa 165.56 ef 1.34 f
O. megacantha/ Plátano Cáscara 400.82 bc 21.43 ab
Pulpa 111.90 f 6.19 d-f
O. ficus indica/ Huatusco Cáscara 425.58 bc 20.13 ab
Pulpa 131.96 ef 2.60 ef
Opuntia sp./Alteña Roja Cáscara 486.79 b 23.88 ab
Pulpa 120.75 f 4.37 d-f
O. ficus indica/ Solferino Cáscara 404.59 bc 22.41 ab
Pulpa 148.6 ef 3.23 d-f
O. ficus indica/ Roja de Villanueva
Cáscara 242.98 ed 20.05 ab
Pulpa 118.39 f 9.60 c-e
O. ficus indica/ Jade Cáscara 374.88 bc 20.05 ab
Pulpa 122.52 f 6.69 d-f
O. megacantha/ Morada Cáscara 389.03 bc 17.76 bc
Pulpa 107.19 f 6.00 d-f
O. ficus indica/ Copena CEII Cáscara 322.99 cd 20.74 ab
Pulpa 106.60 f 8.34 d-f
O. ficus indica/ Copena V1 Cáscara 425.59 bc 23.96 ab
Pulpa 143.74 ef 8.23 d-f
O. robusta/ Larreyi Cáscara 219.22 e-f 21.79 ab
Pulpa 161.43 ef 11.21 cd
CV 16.59 22.1
*Peso fresco. CV: Coeficiente de variación. Medias con igual letra dentro de columnas son
estadísticamente iguales con base a la prueba de Tukey (P ≤ 0.05).
Por lo tanto, las diferencias encontradas en las concentraciones de estos
fitoquímicos podrían explicarse a diferencias genéticas entre especies y cultivares
(Scalzo et al., 2005). Asimismo, la concentración de estos metabolitos se puede
ver afectada por diferentes factores, como las prácticas agronómicas, condiciones
59
ambientales y el manejo pre y poscosecha de los frutos (Hagen et al., 2007: Tsao,
2007).
Scalbert y Williamson (2000) mencionan que los fenoles son los antioxidantes más
abundantes en los alimentos, y que la ingesta diaria equivalente a un gramo,
representa 10 veces más que la de vitamina C, 100 veces más que la de vitamina
E y 500 veces la de caroteno, lo que permite inferir que los compuestos fenólicos
son los nutracéuticos que contribuyen de manera importante a la actividad
antioxidante de los alimentos frescos.
Contenido de flavonoides
La concentración de flavonoides encontrada en todas las variedades fue menor a
la de compuestos fenólicos totales, lo cual podría deberse a la presencia de
procianidinas (taninos condensados) y ácidos fenólicos (ácido clorogénico, ácido
ferúlico) como sucede en otros frutos (Cui et al., 2006), es importante señalar que
el contenido de procianidinas no se ha estudiado en tuna. Otra explicación, podría
deberse a la pérdida de flavonoides debido a la conversión metabólica de éstos a
compuestos fenólicos secundarios durante la maduración (Barz y Hoesel, 1977) o
a la degradación a través de la acción enzimática (Miller y Schreier, 1985; Jiménez
y García, 1999). Las enzimas óxidoreductasas, polifenoloxidasa y peroxidasa,
pueden jugar un papel en la degradación de flavonoles durante maduración y
senescencia (Miller y Schreier et al., 1985). Aunado a lo anterior, Shu-Chuan Yang
et al. (2007) afirman que los flavonoides se degradan a causa de una simple
fermentación por efecto del almacenamiento como ocurre en noni.
El intervalo encontrado de flavonoides fue 1.34 a 27.73 mg EQ 100 g-1 p.f. inferior
al reportado (9.5-37.4 mg EQ 100 g-1) por Chavez-Santoscoy et al. (2009). No se
encontraron diferencias significativas entre variedades (Cuadro 4), tampoco una
relación de los niveles de los metabolitos con el origen de las muestras (Cuadro
1).
60
En todas las variedades, la cáscara presentó la mayor concentración de
flavonoides igual que en los compuestos fenólicos, sin embargo; el incrementó de
flavonoides no se ve afectado por daños mecánicos como ocurre en los fenoles,
sino se debe a los días de almacenamiento o la temperatura de refrigeración,
como se ha observado en algunos vegetales (de Ancos et al. 2009). La cáscara
de la variedad Alteña Blanca presentó la concentración mayor (27.73 mg EQ en
100 g p.f.) en relación con las otras variedades. Al respecto, algunos tipos de
flavonoides son responsables de la pigmentación blanca o amarilla de algunos
tejidos vegetales (Brielman et al., 2006).
Contenido de ácido ascórbico
Se encontraron diferencias significativas en contenido de ácido ascórbico (P ≤
0.05) entre las variedades Plátano (pulpa y cáscara), Alteña Roja (pulpa), Jade
(cáscara) y Copena V1 (cáscara) con respecto a las restantes variedades (Cuadro
5). No se encontró la presencia de ácido ascórbico en cuatro variedades (Roja de
Villanueva, Morada, Copena CEII y Larreyi) y en la cáscara de la variedad
Huatusco, se descarta la posible degradación del metabolito por su estructura
poco estable ante la presencia de oxígeno (de Ancos et al., 2009), debido a que
todas las muestras se procesaron simultáneamente, por lo tanto la diferencia
quizás se podría deber a factores genéticos.
Corral-Aguayo et al. (2008) reportan la concentración de 40 mg EAA 100 g-1 en
frutos de tuna. Kuti (2004) señala niveles de 45.8 mg EAA 100 g-1 en frutos de O.
ficus-indica, niveles similares a los encontrados en la presente investigación
(37.14 mg EAA 100 g-1) (Cuadro 5), pero superiores a los niveles más altos
descritos por Figueroa et al. (2010) en el cultivar cacalote (25 mg EAA 100 g-1).
Stintzing et al. (2005) analizaron por HPLC el contenido de ácido ascórbico en el
jugo del fruto de dos cultivares O. ficus-indica y O. robusta, los autores reportan
niveles de 51.1, 70.2 y 67.9 mg L-1 para frutos blancos, anaranjados, rojos,
respectivamente, y el mayor contenido (95.4 mg L-1) para el fruto de color púrpura.
61
Cuadro 5. Contenido de ácido ascórbico y actividad antioxidante en el fruto de 11 variedades y especies de tuna (Opuntia sp.) de la Nopalera Experimental Facundo Barrientos, Universidad Autónoma Chapingo. Chapingo, Méx.
Especie/variedad Tejido Ácido ascórbico * (mg EAA 100 g
-1)
CI50 * (mg mL
-1)
Opuntia sp./Alteña Blanca Cáscara 2.26 de 0.008 g
Pulpa 3.74 c-e 0.041 c-f
O. megacantha/ Plátano Cáscara 15.83 b 0.027 e-g
Pulpa 15.49 b 0.047 c-e
O. ficus indica/ Huatusco Cáscara 0.56 e 0.019 e-g
Pulpa 0 e 0.066 bc
Opuntia sp./Alteña Roja Cáscara 2.26 de 0.039 c-f
Pulpa 37.14 a 0.032 d-g
O. ficus indica/ Solferino Cáscara 6.80 cd 0.030 e-g
Pulpa 4.62 c-e 0.036 d-g
O. ficus indica/ Roja de Villanueva
Cáscara 0 e 0.164 a
Pulpa 0 e 0.092 b
O. ficus indica/ Jade Cáscara 14.85 b 0.044 c-f
Pulpa 2.80 c-e 0.038 c-f
O. megacantha/ Morada Cáscara 0 e 0.060 cd
Pulpa 0 e 0.035 d-g
O. ficus indica/ Copena CEII Cáscara 0 e 0.018 fg
Pulpa 0 e 0.046 c-f
O. ficus indica/ Copena V1 Cáscara 16.59 b 0.022 e-g
Pulpa 8.04 c 0.025 e-g
O. robusta/ Larreyi Cáscara 0 e 0.018 fg
Pulpa 0 e 0.0183 fg
CV
34.88 25.72
*Peso fresco. CV: Coeficiente de variación. Medias con igual letra dentro de columnas son estadísticamente iguales en base en la prueba de Tukey (P ≤ 0.05).
Las concentraciones de este metabolito en tuna encontradas en la presente
investigación superan a las reportadas por Prior et al. (1998); para otros frutos de
variedades comerciales de arándano (Vaccinium spp.) (9.6-0.8 mg 100 g-1) y para
pitaya (Stenocereus stellatus Riccobono) (12.6 mg 100 g-1) (Beltrán et al., 2009),
ambas especies consideradas importantes por su contenido de ácido ascórbico
(Figueroa et al., 2010), pero similares a las encontradas para el fruto de tejocote
(49.7 mg 100 g-1 p.f.) (Nieto, 2007).
62
Al respecto, en la presente investigación, no se encontró relación del contenido de
este metabolito con el tipo de tejido (Figueroa et al., 2010; Sumaya-Martínez et al.,
2011). Las diferencias encontradas en los contenidos de ácido ascórbico se
pueden explicar debido a las condiciones de cultivo y a que las especies Opuntia
sp se desarrollan en condiciones limitadas de agua, lo cual afecta la composición
de cada variedad (Sumaya-Martínez et al., 2011).
Actividad antioxidante
Se encontraron diferencias significativas (P ≤ 0.05) de CI50 en la cáscara y la
pulpa de la variedad Roja de Villanueva con respecto a la de otros tejidos de las
variedades restantes. La mayor actividad antioxidante (menor concentración para
inhibir el 50 % de la concentración del radical DPPH) se encontró en la cáscara de
la variedad Alteña Blanca (0.008 mg mL-1), la cual superó a la detectada en la
cáscara y pulpa de la variedad Larreyi (0.018 y 0.0183 mg mL-1). Sin embargo, la
cáscara de la variedad Alteña Blanca fue la que presento la mayor concentración
de compuestos fenólicos totales y en la variedad Larreyi aunque no se encontró la
presencia de ácido ascórbico, se observó la mayor concentración de betalaínas
totales en la pulpa.
Estudios recientes (Stintzing et al., 2001; Butera et al., 2002; Tesoriere et al., 2003
y Stintzing et al., 2005) señalan que variedades de tunas rojas de origen asiático
han mostrado que los pigmentos púrpura (betalaínas) parecen ser los principales
responsables de las actividad antioxidante al reducir significativamente el estrés
oxidativo (Tesoriere et al., 2004; Tesoriere et al., 2005) y algunos tipos de cáncer
(Chávez-Santoscoy et al., 2009). Según Kuti (2004) la capacidad antioxidante de
los frutos de tuna puede deberse a la presencia de flavonoides, ácido ascórbico y
carotenoides. Galati et al. (2003) mencionan que la vitamina C aporta
aproximadamente el 15 % de la actividad antioxidante total de la tuna, sin
embargo, los compuestos polifenólicos, flavonoides y a las betalaínas contribuyen
con el 85 % restante.
63
Brat et al. (2007) mencionan que la actividad antioxidante de frutos y verduras no
solamente se asocia a compuestos fenólicos, sino también se le atribuye al
contenido de otros metabolitos como vitamina C, carotenoides y compuestos de
azufre, por lo tanto la actividad antioxidante encontrada en algunas variedades del
presente estudio puede explicarse a un efecto sinérgico por la presencia del
conjunto de fitoquímicos como lo señalan Galati et al. (2003).
Fernández et al. (2010), señalan que el extracto de fruta de O. ficus-indica
presentó la mayor capacidad antioxidante evaluada por el método DPPH, así
como el contenido del aminoácido taurina, los frutos de O. stricta fueron los más
ricos en ácido ascórbico y fenoles totales, mientras que los de O. undulata
presentaron el mayor contenido de carotenoides, ambas con menor actividad
antioxidante.
La actividad antioxidante encontrada en las variedades de tuna de la presente
investigación (0.08 – 0.460 mg ml-1) fue menor a la que reportan García y Nieto
(2011) en diferentes especies de fruto de tejocote (Crataegus spp.) (6.0-5- 4.6 -4 mg
mL-1). Álvarez (2013) señala una actividad antioxidante en xoconostle (Opuntia
matudae) similar (CI50 = 0.407±0.045 mg mL-1) a la encontrada en este trabajo.
Los resultados de esta investigación muestran las diferencias entre variedades de
tuna en relación a fitoquímicos con propiedades antioxidantes que contribuirían a
prevenir algunas enfermedades y el estrés oxidativo, por lo tanto, la variabilidad
del contenido de estos metabolitos podría permitir la selección de algunas
variedades para un aprovechamiento agroindustrial de la pulpa y de la cáscara. La
investigación fitoquímica de algunas variedades de tuna contribuirá al
conocimiento de la biodiversidad de productos hortícolas mexicanos con la
finalidad de identificar las variedades con alto valor nutracéutico y valorizar
aquellas infrautilizadas.
La cáscara, subproducto de la tuna; puede ser una interesante fuente de
fitoquímicos, los cuales pueden ser extraídos y potencialmente utilizables en la
preparación de productos de alto valor agregado para esto es necesario garantizar
64
la inocuidad del subproducto y la ausencia de pesticidas (Sumaya-Martínez et al.,
2011) y los pigmentos mayoritarios, como las betalaínas por su estabilidad,
podrían ser utilizados como colorantes naturales en algunos alimentos y otros
productos (Castelar et al., 2003).
3.4 CONCLUSIONES
Los valores de Tono (Hue) permitieron formar tres grupos de variedades: tunas
amarillas (Alteña Blanca), anaranjadas (Plátano y Huatusco) y rojas (las restantes
variedades). En comparación con su respectiva cáscara, la pulpa de cada
variedad presentó la mayor concentración de betalaínas totales, sin embargo la
betaxantina fue el pigmento mayoritario de las variedades anaranjadas y las
betacianinas de las variedades rojas. La pigmentación de la variedad amarilla no
se debe a betalaínas. En todas las variedades, el mayor contenido de compuestos
fenólicos totales y flavonoides se encontró en la cáscara. La mayor concentración
de ácido ascórbico se encontró en la pulpa de Opuntia sp. var. Alteña Roja. La
actividad antioxidante encontrada en la variedad amarilla puede explicarse a un
efecto sinérgico entre los compuestos fenólicos totales y flavonoides y en algunas
variedades rojas por el contenido total de betalaínas.
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CONCLUSIONES GENERALES CONCLUSIONES GENERALES
Las variedades pigmentadas de tuna (Opuntia sp) evaluadas en esta
investigación presentaron un crecimiento dinámico y heterogéneo: las yemas
florales, a partir de su emergencia, requieren de 42 a 63 días para llegar al
amarre del fruto y de 105 a 154 días para que se alcance la madurez hortícola. La
gráfica de crecimiento del fruto mostró un patrón del tipo sigmoidal en las catorce
variedades estudiadas; sin embargo, esta línea puede ser simple, doble y triple
debido a la interacción genotipo-medio ambiente.
De acuerdo con la oportunidad fenológica, las catorce variedades no comerciales
se agruparon en: maduración precoz (Roja de Villanueva), maduración
ligeramente precoz (Copena V1, Larreyi y Solferino), maduración común (Alteña
Blanca, Alteña Roja, Copena CEII, Jade, y Plátano), maduración ligeramente
tardía (Huatusco), maduración tardía (Castilla Sonora, Morada y Sangre de Toro)
y maduración muy tardía (Texas RF).
La pulpa de cada variedad presentó la mayor concentración de betalaínas totales
en comparación con su respectiva cáscara, sin embargo la betaxantina fue el
pigmento mayoritario de las variedades anaranjadas y las betacianinas de las
variedades rojas. En todas las variedades, el mayor contenido de compuestos
fenólicos totales y flavonoides se encontró en la cáscara. La mayor concentración
de ácido ascórbico se encontró en la pulpa. La actividad antioxidante encontrada
puede explicarse por un efecto sinérgico entre los compuestos fenólicos totales y
flavonoides y por el contenido total de betalaínas.
El aumento del contenido de betalaínas totales con la maduración y con el periodo
de almacenamiento tanto en cáscara como en la pulpa de todas las variedades
solo es numérico, en contraste, el contenido de compuestos fenólicos totales qye
durante el almacenamiento totales hubo un incremento estadísticamente
significativo. Los flavonoides disminuyen numéricamente en la cáscara pero
aumentó en la pulpa en las variedades rojas y púrpura en poscosecha. El
70
almacenamiento de los frutos de tuna de algunas variedades contribuyo a la
pérdida parcial de ácido ascórbico.