arte y locura
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ARTE Y LOCURA
“No acepto que nadie diga que descendí a los infiernos.
Simplemente conocí otra ciudad, la de los locos,
que es un arrabal, apenas, del infierno.”
Aída Carballo.
Boceto a lápiz de un autorretrato de Aida Carballo,1964
La locura es dato central en la vida y la obra de Carballo.
Autorretrato con autobiografía. 1973. Grabado que abre la exposición “Entre el sueño y la realidad”, en la Fundacion Osde (2009)
El autorretrato con autobiografia de 1973.
• Se ve la cabeza de la artista de perfil.
• Mientras el rostro muestra sólo unas pocas arrugas, líneas expresivas
• La mano esta profusa y profundamente surcada por arrugas, líneas y grietas: un mapa de las Marcas de la Vida
• Por detrás, manuscrita una leve biografía.
Entrecruza la propia vida y el contexto
“Dibujar es escribir las formas –decía–,
es la manera más pura y abstracta de la plástica, directamente ligada al
lenguaje de los sueños.”
Su obra marca un ida y vuelta entre sueño, locura, amor, cotidianidad.
La autorreferencialidad, es casi un hilo conductor en su obra, que a lo largo de su vida padeció varias internaciones psiquiátricas.
Otros temas : La ensoñación, el amor en pareja, la vida cotidiana, la ciudad.
“Pienso que lo que hago es soñar despierta –decía–, una especie de desdoblamiento de la imaginación sobre el papel.”
La palabra
desdoblamiento
resulta reveladora, una parte se asocia inmediatamente con el material (el papel), y con lo que hace la artista, y también la mención de un “desdoblamiento” es una forma de nombrar en clave la locura.
Las series que A. C. fue realizando como artista:
de los locos, los amantes,
los levitantes, los colectivos,
las muñecas, los gatos.
En la serie de los locos
• El registro de las situaciones revela por momentos sordidez y al mismo tiempo una sensibilidad conmovedoras.
• Se trata de dos series, de los años cincuenta y luego sesenta, dibujos a lápiz y a tinta y litografías.
Testimonios de la artista. “Primero fue un diagnóstico de la Clínica Modelo, de la calle Montes de Oca: amnesia nominal, delirio polimorfo, alucinación auditiva. Mientras estuve en los sanatorios privados puedo decir que eran una suerte de hoteles especiales: tenía tranquilidad y silencio. Yo había ganado buen dinero con mis actividades, pero durante esos años, impedida de trabajar, llegué a tocar fondo. Estaba permanentemente confusa y a la vez tenía una lucidez extrema. Me negué a pagar más cuentas, que en esos lugares son siempre abultadas y no había más opción que ir al Vieytes.
En el Vieytes. La primera noche fue un auténtico pavor. Aquello difería sensiblemente de lo que yo conocía.” En su diario de internación, consigna: “Lunes. Sensación de opresión. Grito. Muchas locas. Me ponen el chaleco. Noche monstruosa, día dopada. Nuevo médico atiende mi relato confuso. Lugar horrendo (...) Vinieron dos nuevos médicos. Me escucharon. Conté y relaté todo lo sucedido, entrecortada. Si supieran lo extraordinaria fuerza de voluntad que hago para sobrevivir. Todo es hostil. Siempre me mienten o casi siempre. …”
“Las locas son realmente extraordinarias, dicen cosas que a veces no sé qué pensar por lo ajustadas al mundo que me rodea... Me siento sin esperanza, tal vez por años. Sabe, quien dirige esto, cómo matar el arte”.
Serie de los amantes
• Esta serie la presentó con un poema de Macedonio Fernandez.
• Las obras exhiben parejas abrazadas, besándose, vestidas o desnudas, en las que las incomodidades de las posiciones revela siempre una urgencia apasionada en la búsqueda del cuerpo del otro
• “Hay un error en ponerle al amor una plataforma moral”.
Macedonio Fernandez(1874-1952)
• Para Macedonio la Pasión será la gran rectora del arte auténtico, de los acontecimientos genuinos y de las experiencias eternas. En este encuadre se inscribe el AMOR, capaz de provocar el almismo yoico, esto es: el encuentro de dos entre los que se disipan las fronteras del yo.
Pensador, intelectual, escritor fuera de serie.
“Si hay filosofía argentina (…) sus libros representan acaso la parte que le sería esencial”.
(Horacio Gonzalez, en “Retorica y Locura”, Colihue. 2002)
Macedonio Fernandez:
“Leccioncita de psicoestética”
(extracto)
• Como digo. Anoche – Yo…. La cosa cesa aquí, deliberadamente.Me he propuesto que el lectorllegue a darse cuenta como yomismo de que cuando alguien, unautor o un amigo, pero alguien quenos interesa, dice inicialmente alcorrer de su escrito “Anoche, yo”,hace más arte en esas dos palabrasque el que obtendría con toda lacontinuación y serie verbal… enqueresuene este “Anoche , yo”.
• Honestamente aseguro al lector que las refinadas conciencias artísticas de autores y oyentes de los humanos del futuro no tolerarán las construcciones, no usarán sino el Chiste sin contexto, la Metáfora sin contexto, la frase de la Pasión sin contexto.
Serie de los levitantes
• Las escenas de esta serie tienen un notorio clima surrealista y fantástico
• En “La sospecha” (xilografía de 1969), mientras la figura del detective asciende desde un sótano a una habitación que está en segundo plano, el criminal levita en primer plano ante la mirada sorprendida de un gato.
Flia de villa crespo
Colectivo
De los amantes. serie
Mi pepa
Salvador Dalí• La Paranoia es una voluntad,
un “deseo” de sistematización de elementos que no están ordenados y no presentan un lazo entre sí. Creando un nuevo sentido.
• Así, de acuerdo a las propuestas surrealistas. Su método hará posible sistematizar la confusión y contribuir al descrédito total del mundo de la realidad.
El Método Paranoico - crítico
El Mecanismo paranoico apunta a dos creaciones:
• El simulacro: concepto de que de que el objeto al que aspira es un objeto o imagen que simula la realidad, que aparenta las cosas del mundo, pero tiene conciencia de que no lo es.
• Es una imagen sin referente, como los sueños
El “Simulacro”
La Imagen Doble
• La Imagen Doble: “es la representación de un objeto que, sin la menor modificación figurativa o anatómica, sea al mismo tiempo la representación de un objeto absolutamente diferente…”.
• El paradigma de la alteración paranoica es el “Rostro paranoico”: una postal africana que girado 180°, presenta al mismo tiempo la imagen de un rostro.
Salvador Dalí Visage paranoïaque (Rostro paranoico) c. 1935
“El ser del hombre no sólo no puede comprenderse sin la locura, sino no sería el ser del hombre si no llevara en sí la locura como el límite de su libertad”.
J. Lacan
