¡Luchar, Vencer o Morir!P.P.P.

Año 2012

RAÍCES DE LA TIERRA-SEMILLAS DE LA VIDA VERDUGOS DE LA MUERTE

MARIANO DÍAZ ARSENIO VÁZQUEZ

“UN HOMENAJE A LOS COMPAÑEROS MARIANO Y ARSENIO HÉROES EN LA

LUCHA POR LA TIERRA, ASESINADOS POR LATIFUNDISTAS”

PRESENTACIÓN

En homenaje a nuestros compañeros de siempre, Mariano Díaz y

Arsenio Vázquez asesinados por latifundistas el 12 de julio de 1996, para

reafirmar la omnipresencia de estos compañeros dentro del Partido, así

como también de todos los explotados, obreros y campesinos, el Partido

Paraguay Pyahurã (P.P.P.), plasma en este papel una parte de la historia

revolucionaria de ambos.

Y decimos una parte, porque estamos convencidos de que la grandeza

revolucionaria de Mariano y Arsenio no podrá ser encasillada jamás en la

estrechez de algunas páginas, ya que la vida de los auténticos

revolucionarios solamente cabe en la memoria de los pueblos en lucha.

Pero este breve folleto también nos permite rendir un homenaje a

todos los campesinos mártires de la lucha por la tierra. Y una vez más

hacer nuestro el pensamiento de Arsenio y Mariano, proclamando

nuestro grito de combate al imperialismo: “Por nuestros hijos, la patria

y los pobres del mundo... ¡Luchar, Vencer o Morir!”

Eladio Flecha

Secretario General

ARSENIO VÁZQUEZ

Dedicó sus esfuerzos, su pensamiento y su vida por la construcción de Part ido Paraguay Pyahurã (P.P.P.)

Nació de una familia de a n t i g u a r a i g a m b r e campesina guaireña, un

día 12 de febrero de 1957, en la compañía Santa Elena del Guairá, donde vivió la mayor parte de su infancia acompañado de sus hermanos y padres, don Lad is lao Vázquez y doña Visitación Valdez.

De carácter tranquilo y serio, siempre dispuesto para todas las tareas, que desde muy temprano le cupo asumir luego de fallecimiento de su padre. Su vida transitaba entre chacras, la serenidad de los surcos y la voz apaciguada de su madre, a quien se hallaba muy apegado.

Su voz armoniosa lo llevó desde adolescente a formar parte del coro de la iglesia, y más tarde, por su vocac ión de se rv i c io (en l a consideración que sería un medio adecuado para luchar contra la injusticia), formó parte de un grupo de catequistas de la parroquia, en donde se des tacaba po r su responsabilidad y su carácter solidario.

Los vaivenes propios de la vida campesina hicieron que la familia Vázquez Valdez se trasladase a la l o c a l i d a d d e B l a s G a r a y , Departamento de Caaguazú, en donde Arsenio -con sus 20 años y s iempre en la neces idad de canalizar su convicción de lucha y sentimiento de justicia- ingresa como m iembro de l Se rv i c i o A r q u i d i o c e s a n o d e Comercialización (SEARCO) y

luego forma parte de la Comisión de Sin Tierra de la Asociación Regional de Productores Agr íco las de Caaguazú (ARPAC). Fue allí cuando conoció a sus compañeros de lucha y c o n o c i ó t a m b i é n m á s cercanamente aún el triste recorrido de los sin tierras en busca de un horizonte de pan, igualdad y desarrollo.

Y junto a esos compañeros, Arsenio, no satisfecho con sus compromisos concretos de lucha gremial, toma la firme decisión de asumir y contribuir para la construcción de ese sueño tan anhelado de los verdaderos luchadores, cual es la unirse a un movimiento político revolucionario, y opta por militar en el Paraguay Pyahurã (P.P.P.), en donde a partir de entonces dedica sus esfuerzos, su pensamiento y su vida por la c o n s t r u c c i ó n d e e s a s e n d a revolucionaria.

Y allí sería justo transcribir el pensamiento de un gran poeta que dice así: “Hay hombres que luchan un día, y son importantes; hay hombres que luchan siempre y son muy importantes, pero esos que luchan todos los días, esos son los imprescindibles”. Y Arsenio Vázquez es un luchador imprescindible.

Nadie podía imaginar que era a n a l f a b e t o , p o r q u e d o n M a r i a n o t e n í a u n a a l t a capacidad para interpretar los documentos del Partido y los escritos de Lenin que le leía doña Concepción, su esposa.

Es el nombre que queda grabado para siempre en el recuerdo, formando parte

de la frondosa lista de mártires campesinos cuyas sangres riegan el suelo de nuestra patria. Nacido en agosto de 1952, en el seno de una familia campesina de Coronel Oviedo. Al igual que muchos otros, ingresa como m i e m b r o d e l S e r v i c i o A r q u i d i o c e s a n o d e Comercialización (SEARCO), y más tarde de ARPAC.Su conducta seria y responsable lo llevó a ser un compañero muy importante de la Comisión Vecinal Santa Carmen, en donde ingresa desde el primer día de ocupación junto con doña Concepción Pintos de Díaz -su esposa y compañera de lucha cotidiana- y sus seis hijos, quienes lo recuerdan como un padre travieso, cariñoso, e jemplar, cuyos pr inc ip ios fundamentales se basaban en la creencia de que debían asumir el compromiso de luchar siempre a favor de los pobres y por la justicia de estos, en la perspectiva de transformar la sociedad.Y a pesar de su situación de analfabeto, como la mayoría de los marginados, situación que nadie imaginaba porque don M a r i a n o d e m o s t r a b a u n a capacidad de interpretación y expresión de los libros que le leía doña Concepción, sea así la Biblia, documentos del Partido o

escritos de Lenin. C o n fi a b a profundamente e n l a l u c h a c a m p e s i n a organizada y el compromiso de su partido, el P.P.P., con los pobres. Es por ello que no bajó la guardia desde el momento de su estadía en Santa Carmen, y se dedicó plenamente a formar la comisión vecinal como arma de lucha, a pesar de los malos ratos, e l sacr ific io d ia r io y o t ras innumerables desventuras que tuvo que atravesar en dicha ocupación. Y todo movido por el sentimiento de justicia en la seguridad de garantizar a sus hijos y a sus compañeros un mejor porvenir como muchos otros hombres, mujeres y niños, que deambulaban olvidados en su propia tierra.Más tarde, don Mariano y doña C o n c e p c i ó n ( l l a m a d a cariñosamente doña Conchita) engendrarían un futuro miembro ás de la Comunidad de Santa Carmen, quien ya no conocería físicamente a su padre pues la bala asesina del latifundista Genera l Knofe lmatcher se encargó de cegar la vida de Mariano, tres meses antes de su nacimiento; pero el testimonio de lucha de su padre es imborrable y el machete que sirvió para abrir las primeras picadas en Santa Carmen queda en manos de nosotros, sus compañeros, y de este último vástago, fruto de la tragedia, a la esperanza para abrir las sendas anchas hacia el socialismo

MARIANO DÍAZ

... Arsenio y Mariano rindieron sus vidas en el altar de la lucha movidos por la inmensa solidaridad que los caracterizó, al punto de transgredir u n o d e l o s v a l o r e s q u e m á s resguardaban, la disciplina.

ra muy reconocida en Santa

ECarmen la complementación de Arsenio y Mariano, tanto en lo

referente a la solidaridad con sus compañeros como en las propuestas de vanguardia para el fortalecimiento de la organización, fortalecimiento según ellos solamente a través de la máxima colectivización de la producción y bienes de consumo; y en este sent ido consiguieron un avance muy grande de los compañeros al punto que la colect ivización de los bienes de consumo y la distribución de acuerdo a l a s n e c e s i d a d e s p o s i b i l i t ó l a conformación de lo que en Santa Carmen llamaban “olla popular” pero que no tenía el carácter de emergencia que generalmente hace surgir este tipo de situaciones, sino un profundo contenido de relación social. Nos vimos en la necesidad de dar las respectivas explicaciones sobre este hecho, ya que es en este contexto que se produce la muerte de Mariano y Arsenio. El amanecer del día 12 de julio de 1996 sitúa a nuestros compañeros en distintas condiciones personales pero con la misma expectativa por la Asamblea de la comunidad que empezaría ese día. Mariano, como siempre, inició temprano sus actividades con el consabido mate acompañado de doña Conchita, con quienes intercambiaron opiniones respecto a la comunidad y la próxima Asamblea a realizarse. Así también, Arsenio que fuera electo por la ARPAC como delegado al Congreso Obrero Campesino que se desarrollaría en Asunción el día 14 de julio, luego de una rueda de mate con sus familiares se vió en la obligación de resolver primero el lavado de la ropa que vestiría para su viaje a Asunción, por lo

cual llegó más tarde a la Asamblea.Una vez constituída la Asamblea, teniendo en cuenta que hacía mucho tiempo que la comunidad no comía ningún tipo de carne, Arsenio propone sacrificar un chancho para la olla p o p u l a r, p r o p u e s t a s e c u n d a d a inmediatamente por Mariano y aceptada por todos. Luego del fin de la Asamblea, un grupo de compañeras consideraron la necesidad de condimentar una parte de la carne con naranja agria, por lo cual solicitaron ayuda para el efecto a uno de los compañeros, que se negó a irse debido a una disposición interna de seguridad que prohibía ir hacia el sector donde había naranjas en grupo pequeño y s in un ob je t i vo cen t ra lmen te determinado debido a la peligrosidad en relación a los paramilitares. Arsenio, que escuchó esto, se ofreció para buscar las naranjas y pidió a Mariano que lo acompañe, quien se armó de una escopeta. Partieron acompañados de cinco compañeras. Al ingresar en terrno abierto, ya a poca distancia del naranjal, se efectúa el primer disparo que hiere a Arsenio en un muslo, y al instante el segundo disparo, que da en la cabeza de Mariano, quien ante el primer disparo se había tendido en el suelo como protección para repeler el ataque. Arsenio corre algunos metros buscando refugio entre los árboles y cae sin poder continuar.De esta forma, Arsenio y Mariano rindieron sus vidas en el altar de la lucha movidos por la inmensa solidaridad que los caracterizó, al punto de transgredir u n o d e l o s v a l o r e s q u e m á s resguardaban, la disciplina.Arsenio Vázquez muere el mismo día, pocos minutos después de ser herido, debido a una hemorragia incontenible por falta de medios. Mariano Díaz, luego de un Vía Crucis por hospitales públicos y privados que se negaron a brindarle atención, al fin luego de ser internado e intervenido quirúrgicamente fallece de un derrame cerebral.

Y LLEGÓ LA HORA.. DEL PASO A LA INMORTALIDAD DE MARIANO Y ARSENIO

Y ese perro un día apareció por el

campamento con un cartel

colgandode su cogote. Letras muy

desparejas que decían “Mariano

Díaz y Félix Alfonso —que así

se llama otro compañero—

¡Bandidos! Váyanse de acá o tomaremos mate

en sus cabezas”(*).

Que la tierra que guardaestos muertos, se preña con más abono rebelde. Eso, mejorque nadie, saben los latifundistas(*).

(*)Extracto Libro Ñandekuera. Primera Edición. Cap.: 07 pág: 177 - 190

“Mariano fue un militante que asumía con mucha r e s p o n s a b i l i d a d l o s compromisos y era uno de los que llevaba en forma permanente la línea partidaria en el seno d e l a s m a s a s . S u conducta era ejemplar y trató en todo momento de no defraudar al P.P.P.”.

(Coordinador Regional Caaguazú)

“Arsenio era una persona responsable ante su organización política y exigente consigo mismo. Tenía una alta c a p a c i d a d d e c r í t i c a y globalización de la situación. Sus p l a n t e a m i e n t o s s e caracterizaban por ser claros y concretos. Se notaba su plena entrega a la lucha”.

(Coordinador Regional Caaguazú)

“Mariano era un esposo y compañero ejemplar, cariñoso y muy amigo de sus hijos”.

(Doña Conchita)

“Arsenio era una persona excelente nunca cometió ningún error, ni siquiera en lo político”.

(Compañeros de Santa Carmen)

“Arsenio propuso que se matara el chancho porque siempre su

mayor preocupación fue que nadie tuviera hambre y sobre todo los niños”

(Familiares y compañeros de Santa Carmen)

“Mariano era un compañero de franqueza absoluta, como lo demostró muchas veces y lo que más recuerdo de esa franqueza fue cuando en uno de los tantos ataques de los paramilitares, s iendo él responsable del repliegue de los niños y las mujeres a lugares más seguros y siendo su santo y seña Caraja 1, él gritó Caraja 7. Sobre este hecho él explicó en la Asamblea de evaluación que se equivocó porque se asustó del ataque, aclarando que no era por falta de coraje ni de convicción, sino por falta de experiencia en este tipo de luchas”.

(Compañero del P.P.P.)

ARSENIO Y MARIANO EN EL RECUERDO DE SUS COMPAÑEROS

“Yo no moriré con los brazos cruzados ante la injusticia, sino en la lucha contra esta”.

(Arsenio Vázquez)

“Si alguna vez faltase leña para c o c e r e l a l i m e n t o d e l o s compañeros después que yo muera, usen mis huesos como leña”.

(Mariano Díaz)

“Si yo muriese en la lucha, lloren por orgullo y no por tristeza”

(Arsenio Vázquez)

“Mi corazón se alegra cuando veo que están comiendo, si va a faltar no comeré, porque si ustedes comen es como si yo estuviese comiendo”.

(Arsenio Vázquez)

“No nos preocupemos por el niño que nacerá porque gracias a nuestra organización revolucionaria tendrá muchos padres y madres”.

(Mariano Díaz)

Epígrafe de fotoCompañeros de lucha, familiares y amigos dan el último adió a Mariano Díaz, gran luchador por la liberación del campesinado paraguayo.

ALGUNAS FRASES QUE EXPRESAN LA PERSONALIDAD DE MARIANO Y ARSENIO

¡Luchar, Vencer o Morir!P..P.P

Año 2012