arca-usa.org 2015.pdf · ^queridos hermanos y hermanas, he pensa-do frecuentemente en cómo la...

12

Upload: others

Post on 08-Oct-2019

1 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: arca-usa.org 2015.pdf · ^Queridos hermanos y hermanas, he pensa-do frecuentemente en cómo la Iglesia pue-da hacer más evidente su misión de ser testigo de su misericordia
Page 2: arca-usa.org 2015.pdf · ^Queridos hermanos y hermanas, he pensa-do frecuentemente en cómo la Iglesia pue-da hacer más evidente su misión de ser testigo de su misericordia

l Arzobispo de París, Cardenal

André Vingt-Trois, ha señalado

en un comunicado sobre los

atentados del 13 de noviem-

bre en la capital francesa que “frente a la

violencia de los hombres podemos recibir

la gracia de un corazón tranquilo y sin

odio. Que la moderación, la templanza y

el dominio del que tantos han dado prue-

bas hasta ahora se confirmen en las se-

manas y en los próximos meses”, dijo

añadiendo después: “Que las personas no

se dejen llevar por el pánico y el odio.

Pidamos la gracia de ser constructores de

paz. No debemos desesperar nunca de la

paz, si se construye la justicia”.

Y es que es tiempo de preguntarnos tam-

bién por nuestras acciones cotidianas,

preguntarnos si las nuestras son acciones

concretas desde la fe y la caridad, o son

reacciones meramente emocionales ante

situaciones como estas del terrorismo,

vengan de donde vengan.

Ante situaciones de la vida misma donde

nos enfrentamos con el dolor y la muerte

casi sin sentido, ante las preguntas sobre

la muerte de inocentes y el terrorismo

“en nombre de dios”, estamos reaccio-

nando con venganza? Con acciones de

igual “terror”? Me dejo llevar, como lo

menciona el Arzobispo, por el pánico y el

odio? O soy capaz de resignificar aún lo

que aparece sin sentido, a los ojos del

Evangelio y de la experiencia del encuen-

tro con Cristo? Somos verdaderamente, y

mucho más en lo cotidiano de nuestras

relaciones de amistad y amor, de nues-

tras relaciones familiares o laborales

constructores de paz? O estoy también yo

con mis reacciones de odio y agresión

sembrando semillas de venganza, deses-

peranza y terror?

El Arzobispo de París continúa en su men-

saje afirmando que “nuestra ciudad de

París, nuestro país, han sido golpeados de

modo particularmente salvaje e intenso.

Después de los ataques en enero pasado,

después del atentado de esta semana en

Beirut y tantos otros en el curso de los

últimos meses, sobre todo en Nigeria y en

otros países africanos, nuestro país cono-

ce de nuevo el dolor del luto y debe

afrontar la barbarie propagada por estos

grupos fanáticos. Esta mañana rezo e

invito a los católicos de París a rezar por

aquellos que han sido asesinados y por

sus familias, por los heridos y por sus más

próximos, así como por aquellos que les

socorrieron, por las fuerzas del orden

sobrepuestas a una tensión enorme, por

nuestros gobernantes y por nuestro país

para que juntos permanezcamos en la

unidad y en la paz del corazón. Pido a los

fieles de París adecuarse estrictamente a

las medidas de prudencia emitidas por las

autoridades públicas y hacer una jornada

de luto y oración.”

Nos unimos a esta invitación y pedimos a

Dios la gracia de la verdadera Paz.

│ │

¡Luz que irrumpe y transforma!

La liturgia de la santa noche de Navidad

nos presenta el nacimiento de Jesús como

una gran luz que irrumpe e ilumina la oscu-

ridad de su pueblo porque lo hace libre de

la tristeza y la derrota, de la esclavitud del

pecado y de la muerte para llevarlo a la

tierra del gozo y la alegría. En el mundo

envuelto en la tiniebla del relativismo y el

placer desenfrenado necesita sumergirse

en la luminosidad de la noche santa de

Navidad.

La historia humana está atravesada por las

tinieblas: la envidia, la violencia, las gue-

rras, el odio y la opresión. Pero también

Dios interviene constantemente en nuestra

historia para traernos esperanza para lla-

marnos a la semejanza. Somos menos se-

mejantes a Dios en cuanto encerrados en el

yo que domina todo y que conocemos co-

mo egoísmo. Los hombres y mujeres del

mundo recuperan la semejanza cuando

viven injertados en la luz de la noche santa

de Navidad, es decir cuando viven como

Dios vive para-los-otros. Dios confía en

nosotros y espera ese momento de trans-

formación interior cuya posibilidad nace

con Jesucristo esa noche santa espesa de

oscuridad e iluminada por el Dios hecho

ternura en un pesebre de Belén.

En esta Navidad acojamos al Niño de

Belén, dejemos que María su madre lo pon-

ga con ternura en nuestros brazos. Él ha

venido a buscarnos con amor indecible. En

el Niño de Belén Dios quiere acariciarnos y

sonreírnos con la frescura que solo un bebe

conoce en medio de la dureza de la vida.

Solo la gente sencilla – sin complicaciones y

dobleces- serán capaces de acoger este

don hermoso de la sencillez, de la ternura y

la luminosidad. ¡Que la Madre santa nos

muestre y nos lleve a Jesús! Ella es la señal

a los pastores. “Encontraran al Niño en

brazos de su madre.” ¡Así sea y Feliz Navi-

dad a todos!

P. Roberto J. Cortés

icen las escrituras de que de la

abundancia del corazón, habla

la boca. En esta época de

Navidad, podemos ver fácil-

mente de que tenemos lleno el corazón,

simplemente con respondernos la pre-

gunta de en que gastamos nuestro tiem-

po y nuestro dinero?. Ahora, lo importan-

te no es simplemente respondernos la

pregunta, eso es solo el comienzo. Lo

importante es: ¿qué vamos a hacer des-

pués que respondamos la pregunta?,

¿nos quedaremos igual? Las luces, los

regalos, el chocolate caliente, el turrón y

los dulces nos recuerdan la alegría más

grande que ha recibido el mundo: El naci-

miento de Jesús, el hijo de Dios.

Cuando reflexiono sobre el nacimiento

del redentor, me gusta pensar: ¿cómo era

el establo donde nació?, ¿quiénes lo reci-

bieron?, en definitiva, ¿dónde eligió nacer

mi Rey y Señor?...y las respuestas son tan

sencillas que me hacen pensar en mi ac-

tuar y proceder.

Nació en un lugar tranquilo, sencillo, sin

bullicio ni ostentoso. Entre hermanos

sencillos, gente alegre y trabajadora.

Nació junto a la naturaleza, con el herma-

no burro y las hermanas ovejas (como

diría San Francisco). Y viendo todo esto

pienso: Esta Navidad, quiero que Jesús

nazca en mi corazón de nuevo, pero para

eso, necesito, igual que los pastores, dar-

le un corazón sencillo, humilde y alegre.

Necesito también callar un poco todo el

bullicio del mundo por unos días. Todo

ese ruido que la tele, la radio, la prensa,

las vallas, el internet constantemente

sacan al aire y me hablan de todo lo que

no es importante. Te crean necesidades, y

que conste, estoy hablando con conoci-

miento de causa porque esa es mi profe-

sión y pasión. Propongámonos hacer

algunas cosas pequeñas para Jesús, chi-

quitas, siempre creo que las grandes las

hace Dios. A nosotros, nos corresponden

las más sencillas, aquí te dejo algunas

ideas, como por ejemplo: Estar alegres y

escuchar a los demás, visitar a algún fami-

liar enfermo o que este viejito, hacerle

una llamada a un amigo, llevar un dulce al

trabajo, abrazar a tus hijos, hacer la coro-

na de adviento en tu hogar e ir encen-

diéndola cada domingo hasta llegar a

Nochebuena, preparar una comida bonita

y llevarla a algún vecino...son tantas las

cosas que puedes hacer y ofrecer a Jesús,

así tu corazón se va preparando y se va

limpiando.

Tenemos una gran oportunidad esta Navi-

dad. Podemos hacerla inolvidable, pode-

mos celebrarla cristianamente, darle el

sentido que tiene y hacer que muchos, a

través de nuestro proceder, se encuen-

tren con Jesús para que de esta manera,

El renazca en cada uno de nuestros cora-

zones.

Dejarnos llevar por el odio

Haz un pesebre en tu corazón

Page 3: arca-usa.org 2015.pdf · ^Queridos hermanos y hermanas, he pensa-do frecuentemente en cómo la Iglesia pue-da hacer más evidente su misión de ser testigo de su misericordia

MANPOWER

Home Improvement Home Improvement

General ContractorGeneral Contractor

Eventos y reunionesEventos y reuniones

Page 4: arca-usa.org 2015.pdf · ^Queridos hermanos y hermanas, he pensa-do frecuentemente en cómo la Iglesia pue-da hacer más evidente su misión de ser testigo de su misericordia

“Queridos hermanos y hermanas, he pensa-

do frecuentemente en cómo la Iglesia pue-

da hacer más evidente su misión de ser

testigo de su misericordia. Es un camino

que inicia con una conversión espiritual.

Y tenemos que andar este camino.

Por eso, he decidido llamar a un Jubileo

extraordinario que tenga en el centro la

misericordia de Dios. Será un Año Santo de

la Misericordia. Lo queremos vivir a la luz

de l a palabra del Señor: “Sean misericor-

diosos como el Padre” (Lc 6,36). Y esto espe-

cialmente para los confesores, ¿eh? ¡Tanta

misericordia!

Este Año Santo se iniciará en la próxima

solemnidad de la Inmaculada Concepción y

concluirá el 20 de noviembre de 2016, do-

mingo de Nuestro Señor Jesucristo Rey del

universo y rostro vivo de la misericordia del

Padre”. (Papa Francisco)

Serán llamados así los sacerdotes que

enviados por el Papa, tendrán autoridad

para perdonar pecados especialmente

graves incluso aquellos reservados a la sede

papal; estarán presentes en todas las

diócesis "signo vivo de cómo el Padre acoge

a todo aquel que busca el perdón".

Se pone nuevamente el sacramento de la

confesión en el centro de la vida cristiana.

Porque permite vivir la grandeza de la

misericordia, en este sacramento de la

reconciliación. Dios perdona todos los peca-

dos con la mediación de la Iglesia. Acudir a la

confesión será fuente de verdadera paz

interior. Se prevé que la iniciativa 24 horas

por el Señor se incremente cada diócesis el

próximo año, el viernes y sábado antes del

IV domingo de Cuaresma.

La peregrinación es un signo peculiar en el

Año Santo, porque es imagen del camino

que cada persona realiza en su existencia.

La vida es una peregrinación y el ser humano

es viator, es un peregrino, un caminante que

recorre su camino hasta llegar a la meta

anhelada. También para llegar a la Puerta

Santa en Roma y en cualquier otro lugar,

cada uno deberá realizar, de acuerdo con las

propias fuerzas, una peregrinación.

Señor Jesucristo, tú nos has enseñado a ser

misericordiosos como el Padre del cielo, y

nos has dicho que quien te ve, lo ve también

a Él. Muéstranos tu rostro y obtendremos la

salvación.

Tu mirada llena de amor liberó a Zaqueo y a

Mateo de la esclavitud del dinero; a la

adúltera, y a la Magdalena de buscar la

felicidad solamente en una creatura; hizo

llorar a Pedro luego de la traición, y

aseguró el Paraíso al ladrón arrepentido.

Haz que cada uno de nosotros escuche como

propia la palabra que dijiste a la samari-

tana: ¡Si conocieras el don de Dios!

Tú eres el rostro visible del Padre invisi-

ble, del Dios que manifiesta su omnipoten-

cia sobre todo con el perdón y la misericor-

dia: haz que, en el mundo, la Iglesia sea el

rostro visible de Ti, su Señor, resucitado y

glorioso.

Tú has querido que también tus ministros

fueran revestidos de debilidad para que

sientan sincera compasión por los que se

encuentran en la ignorancia o en el error:

haz que quien se acerque a uno de ellos se

sienta esperado, amado y perdonado por

Dios.

Manda tu Espíritu y conságranos a todos con

su unción para que el Jubileo de la Miseri-

cordia sea un año de gracia del Señor y tu

Iglesia pueda, con renovado entusiasmo,

llevar la Buena Nueva a los pobres procla-

mar la libertad a los prisioneros y oprimi-

dos y restituir la vista a los ciegos.

Te lo pedimos por intercesión de María,

Madre de la Misericordia, a ti que vives y

reinas con el Padre y el Espíritu Santo por los

siglos de los siglos. Amén.

AÑo de la misericordia

│ │

Con el lema ‘Misericordiosos como el Padre’ se propone vivir la misericordia siguiendo el

ejemplo del Padre, que pide no juzgar y no condenar, sino perdonar y amar sin medida.

El logo –obra del jesuita Marko I. Rupnik– se presenta como un pequeño compendio

teológico de la misericordia. Muestra, en efecto, al Hijo que carga sobre sus hombros al

hombre extraviado. En el dibujo se destaca el Buen Pastor que toca en profundidad la

carne del hombre, y lo hace con un amor capaz de cambiarle la vida.

El Buen Pastor con extrema misericordia carga sobre sí la humanidad, pero sus ojos se

confunden con los del hombre.

Cruzar la

Puerta Santa

24 Horas para

el SeÑor

Misioneros de la

Misericordia

El Anuncio La Oración

Page 5: arca-usa.org 2015.pdf · ^Queridos hermanos y hermanas, he pensa-do frecuentemente en cómo la Iglesia pue-da hacer más evidente su misión de ser testigo de su misericordia

│ │

Ministerio Intercesión

Miércoles, 2 de Diciembre, 7:30 pm

San Marcos - 7501 Adelphi Rd, Hyattsville

Reunión de Coordinadores

Miercoles 9 de Diciembre, 7:30 pm

San Marcos - 7501 Adelphi Rd, Hyattsville.

Caminando con María

Misa Bilingüe

Sábado, 12 de Diciembre, 2:30 pm

Basílica de la Inmaculada Concepción

4th St. y Michigan Ave. NE Washington DC

Concierto Navideño

Viernes 18 de Diciembre, 7:00 pm

St. James

3700 Rhode Island Ave. Mt Rainer, MD

Navidad Juntos - TLR

Sábado 19 de Diciembre, 8:00 pm

San Marcos - 7501 Adelphi Rd, Hyattsville.

Noche de Película Familiar TLR

Sábado 26 de Diciembre, 8:00 pm

San Marcos - 7501 Adelphi Rd, Hyattsville.

“La Navidad es un camino para

encontrarnos con el Señor.

jLa Navidad es un encuentro!

Caminamos juntos para

encontrarnos con Jesús:

encontrarlo con el corazón,

con la vida;

encontrarlo vivo, como El está;

encontrarlo con Fe”

Que Jesús recién nacido,

encuentre en sus corazones

un lugar preparado para recibirle,

y que su bendición llegue a toda su familia.

jUna Santa y Feliz Navidad

para todos!

Page 6: arca-usa.org 2015.pdf · ^Queridos hermanos y hermanas, he pensa-do frecuentemente en cómo la Iglesia pue-da hacer más evidente su misión de ser testigo de su misericordia

│ │

L a Iglesia en su misión de ir

por el mundo llevando la

Buena Nueva ha querido

dedicar un tiempo a pro-

fundizar, contemplar y

asimilar el Misterio de la Encarnación del

Hijo de Dios; a este tiempo lo conocemos

como Adviento y Navidad.

En este tiempo los cristianos por medio del

Adviento se preparan para recibir a Cris-

to,"luz del mundo" (Jn 8, 12) en sus almas,

rectificando sus vidas y renovando el com-

promiso de seguirlo.

Durante el Tiempo de Navidad al igual que

en el Triduo Pascual de la semana Santa

celebramos la redención del hombre gracias

a la presencia y entrega de Dios; pero a dife-

rencia del Triduo Pascual en el que recorda-

mos la pasión y muerte del Salvador, en la

Navidad recordamos que Dios se hizo hom-

bre y habitó entre nosotros.

Así como el sol despeja las tinieblas durante

el alba, la presencia de Cristo irrumpe en las

tinieblas del pecado, el mundo, el demonio y

de la carne para mostrarnos el camino a

seguir. Con su luz nos muestra la verdad de

nuestra existencia. Cristo mismo es la vida

que renueva la naturaleza caída del hombre

y de la naturaleza. La Navidad celebra esa

presencia renovadora de Cristo que viene a

salvar al mundo.

La Iglesia en su papel de madre y maestra

por medio de una serie de fiestas busca

concientizar al hombre de este hecho tan

importante para la salvación de sus hijos.

Por ello, es necesario que todos los feligre-

ses vivamos con recto sentido la riqueza de

la vivencia real y profunda de la Navidad.

En familia

Al contemplar en el pesebre a Jesús, María y

José, la sagrada familia de Nazaret, se nos

proponen también como ejemplo y modelo

de toda familia, donde se transmite, custo-

dia y desarrolla la vida cristiana. Un pequeño

santuario de la vida, donde se cobija quien

es el Camino, la Verdad y la Vida.

Pasar una Navidad diferente no es tan com-

plicado como podríamos pensar. Muchas

veces el verdadero sentido de la Navidad se

pierde entre los mil pendientes que tenemos

al final de año, y el nacimiento del Niño pasa

a ser una envoltura de regalo. El Nacimiento

del Niño Jesús es tan importante en la fe de

todo cristiano, que debe ser el aconteci-

miento central del año, y por eso es la mejor

ocasión de celebrarlo en familia, con aque-

llos que están a nuestro lado, esforzándonos

por pedirle perdón a aquellos familiares y

amigos con los que nos hemos alejado, guar-

dando un hermoso recuerdo de aquellos que

no están ya con nosotros.

Algunas ideas concretas

Viva el Adviento como el dulce tiempo de

espera de Jesús, encendiendo semanalmen-

te las velas, que indican que ya se acerca.

Recuerde que Navidad es Jesús. Por ello,

pongamos el pesebre en casa; y ojalá lo

hagamos en familia, animando a cada miem-

bro a poner a San José, la Virgen, los angeli-

tos, los animalitos, dejando el lugar para que

el 24 en la noche pongamos al Niño Jesús.

Arme el árbol de Navidad con adornos y

luces, para recordar que Jesús es la ‘Luz del

Mundo’ que vino para salvarnos, y cuya

presencia llena de luz nuestra vida.

En Nochebuena trate de asistir con su fami-

lia a la Misa de Gallo. De esa manera no

sólo celebrará a Jesús sino que podrá recibir-

lo en la Eucaristía.

Esa misma Nochebuena, rece ante el pese-

bre con su familia y contemple lo que allí

se nos muestra: amor, humildad, sencillez,

unidad.

También puede aprovechar para vivir la

Navidad con tradiciones como las posadas

o pastorelas. A los niños- y por qué no tam-

bién a los grandes- les encanta disfrazarse y

ésta puede ser una buena ocasión para ello.

Los regalos son expresión de la alegría de

la Navidad. Si los tenemos disfrutémoslos,

pero recordemos que no son lo central, pues

lo más importante es que Jesús viene a

nuestros corazones.

En esta fiesta del amor de Dios, nadie deber-

ía quedar excluido. Por ello, vivamos la

solidaridad. Podemos adoptar una familia

que pasa necesidad, preparando una canas-

ta con alimentos básicos y obsequios para

que puedan celebrar una Navidad digna.

Que los saludos de Navidad reflejen su

verdadero sentido. Por lo tanto incluyamos

siempre la imagen del nacimiento del Niño

Jesús. Vivamos la Navidad en familia, es el

mejor regalo que le podamos hacer al Niño

Jesús, y a quienes amamos.

Navidad es Jesús Navidad es Jesús

Page 7: arca-usa.org 2015.pdf · ^Queridos hermanos y hermanas, he pensa-do frecuentemente en cómo la Iglesia pue-da hacer más evidente su misión de ser testigo de su misericordia

│ │

Acabo de ver un video en el que un niño con

parálisis cerebral culmina un triatlón rodea-

do de aplausos, felicitaciones y exclamacio-

nes de felicidad y admiración. Unos metros

por detrás del niño va el que suponemos es

su padre. El pequeño, en la recta final, suel-

ta el andador que le ayuda a sujetarse en pie

y trata de correr sin él con cierta dificultad,

tropezando varias veces y volviendo a levan-

tarse con decisión y rapidez. El padre no

corre tras su hijo, no se abalanza sobre él

para ayudarle a levantarse; se mantiene en

su posición, caminando lentamente con el

andador que su hijo ha dejado a mitad de

camino, dejando que sea él solo quién termi-

ne la carrera. Ese padre que, probablemente

con gran esfuerzo y luchando contra sus

sentimientos, se mantiene alejado, dejando

a su hijo caer y esperando a que se levante

por sí mismo, está realizando un acto heroi-

co que tendrá enormes consecuencias du-

rante toda la vida de ese niño. El hecho de

no acudir a él en el primer contratiempo es

la mejor forma de decirle: "tú puedes, yo

creo en ti, puedes hacerlo solo". Es la mejor

forma de hacerle ver por sí mismo todo

aquello de lo que es capaz. Y es, también, la

forma de darle las armas para que aprenda a

hacer frente a las adversidades de la vida

sin esperar un empujoncito, sino sabiendo

que los obstáculos no son malos si aprende-

mos, con cada uno, a superar los que

vendrán, sean lo grandes o duros que sean.

En definitiva, este padre le está dando a su

hijo las herramientas para que sea -en sus

limitaciones- una persona fuerte, preparada

para las duras batallas de la vida, capaz de

salir de las adversidades por sí mismo y de

confiar, como lo hace su padre, en sus pro-

pias capacidades. Y es esta actitud precisa-

mente: la de que su padre no corra a ayudar

a su hijo cada vez que tiene un problema,

una de las razones por las que este niño con

parálisis cerebral ha sido capaz de finalizar

con éxito un triatlón completito.

Así, en las vidas de nuestros hijos, me surge

la reflexión de lo importante que es a veces

no hacer nada, dejar que se las arreglen, que

se defiendan, que se levanten solitos.

En el mundo de hoy, los padres estamos

constantemente bombardeados con mensa-

jes que se oponen a este loable comporta-

miento: no podemos dejar que sufran ni un

segundo. Los mensajes educativos giran, casi

siempre, en torno al cuidado que hay que

tener de que los niños se sientan bien en

todo momento. Y esto, muchas veces, nos

empuja a sobreprotegerlos emocionalmen-

te. Nos llama la atención, quizás, un padre

que, viendo a su hijo tropezar, se da la vuel-

ta discretamente para que el niño crea que

no le ha visto y se levante solito sin llorar, o

la madre que cuando su hijo se resbala y cae

le grita desde lejos con una sonrisa: "¡ánimo,

campeón, levántate que no es nada!".

Inevitablemente, antes o después, llegará un

momento en la vida de todos nuestros hijos

en que de ninguna manera podremos librar-

les del sufrimiento. Pero sí podemos prepa-

rarles para ello, darles los instrumentos

necesarios para hacerles fuertes, capaces de

levantarse por sí mismos, para que cada

contratiempo no sea un motivo de queja y

de ablandamiento sino un camino para

crecer en humanidad y autonomía.

Susana Ariza

Page 8: arca-usa.org 2015.pdf · ^Queridos hermanos y hermanas, he pensa-do frecuentemente en cómo la Iglesia pue-da hacer más evidente su misión de ser testigo de su misericordia
Page 9: arca-usa.org 2015.pdf · ^Queridos hermanos y hermanas, he pensa-do frecuentemente en cómo la Iglesia pue-da hacer más evidente su misión de ser testigo de su misericordia

│ │

uizá en el futuro se cuente la his-

toria de cómo el mismísimo San

Francisco de Asís, el poverello,

estuvo rezando, descalzo, bastón,

de rodillas, varios días bajo la

lluvia, milagrosamente visible el 12 y 13 de

marzo de 2013 en la Plaza de San Pedro, y

cómo después un Papa hispanoamericano

salió al balcón con el nombre, insólito, de

Francisco.

Cuando se cuente esto, muchos historiado-

res lo desdeñarán como leyendas piadosas,

"típicas de inicios del siglo XXI".

Es evidente que los santos medievales no se

aparecen en los Cónclaves. Y si alguien

muestra fotos, quizá se desechen con

"montajes".

Pero la realidad es que sí había un hombre

vestido como Francisco, descalzo como Fran-

cisco, humilde y paciente bajo la lluvia como

Francisco, durante los días del conclave en la

Plaza de san Pedro.

Y muchos periodistas le fotografiaron: las

fotos que le sacó France Press llegaron a las

redacciones de los periódicos. Y algunos

periodistas lo entrevistaron, y varias perso-

nas más hablaron con él.

Se llama Massimo Coppo, es italiano, tiene

64 años. Vestía un hábito franciscano de

yute, llevaba bastón, un bolso al hombro, y

en la Plaza de San Pedro rezaba descalzo y

de rodillas bajo la lluvia y el frío.

Vino caminando desde Asís, a 180 kilóme-

tros, y aunque no parece que caminara des-

calzo toda esa ruta, sí tenía los pies hincha-

dos. Rezó y rezó.

Explicó a los periodistas que quería "un nue-

vo pontífice para los pobres y que se acer-

que a ellos, que hable de la eternidad, del

infierno y del retorno de Cristo".

Massimo no es San Francisco, pero sin duda

San Francisco puede estar satisfecho de

haber sido bien representado.

La Iglesia tiene miles de santos. Y en San

Pedro rezaban miles de personas, religiosas

de cientos de carismas distintos, devotos de

innumerables fundadores y órdenes.

Pero Massimo hacía que Francisco fuera el

más visible. Y el nuevo Papa no se llama

Domingo, ni Agustín, ni Vicente, ni Camilo. Y

sin duda los dominicos, agustinos, vicencia-

nos y camilos rezaron por el Papa estos días.

Pero a quien se vio en la Plaza con una ima-

gen profética fue a Francisco.

Y Francisco fue Papa. Y el Papa es Francisco.

Hace algunas semanas el mismo “mendigo”

ha regresado a Roma para rezar por la Iglesia

y exhortar a los fieles a hacer penitencia.

“Estoy andando aquí para hacer penitencia

por la Iglesia, para rezar desde esta mañana;

para rezar a Dios que tenga piedad de su

Iglesia, que está en una situación muy, muy

difícil, y que son un escándalo lamentable-

mente”, expresó .

A pesar de parecer a simple vista un monje

mendigo, Massimo aclaró que no es sacer-

dote, sino laico y miembro de la comunidad

Familia de Belén, creada en la tierra de San

Francisco de Asís hace más de 30 años.

Massimo vive en dicha localidad y eligió el

voto de pobreza y la vida dedicada a la ora-

ción a los 32 años. Antes de eso había vivido

su juventud en Estados Unidos, por lo que

también domina el idioma inglés. Es licencia-

do en Ciencias de la Agricultura y ha sido

profesor.

Sobre su presencia en la Plaza de San Pedro,

relató que llegó por envío de Marcelo, su

“padre espiritual”, para pedir a Dios por su

Iglesia. “He hecho mía la oración del profeta

Daniel que dice ‘Señor, hemos pecado, pero

aleja tu ira’, porque estamos en tiempos en

que Dios está juzgando a su Iglesia”, advirtió.

Por ello, exhortó a los fieles a sumarse y

hacer penitencia. “Es una palabra que no

nos gusta. Debemos hacer penitencia (…).

Cualquier cosa fea que sucede en esta plaza,

en cualquier iglesia de Roma, en cualquier

iglesia de Italia. Tenemos los enemigos ex-

ternos que son sobre todo los terroristas

islámicos; tenemos los enemigos internos,

como los llamaba el Papa Ratzinger a los que

generan escándalo dentro de la Iglesia”.

Ante esto, señaló, “solo podemos hacer una

cosa: hacer penitencia por amor a Jesús y

por amor a su Iglesia”.

Acciones proféticas de hoy

Llamando a la penitencia y a la oración

Page 10: arca-usa.org 2015.pdf · ^Queridos hermanos y hermanas, he pensa-do frecuentemente en cómo la Iglesia pue-da hacer más evidente su misión de ser testigo de su misericordia

Los Mejores precios

a Latinoamérica

Precios especiales a cual-

quier parte de México,

El Salvador, Republica

Dominicana y Colombia

Paquetes turísticos y fami-

liares a Orlando, Florida,

el Caribe y otros destinos

Llámenos

y se quedará con nosotros

│ │

Un grupo de profesionales le propuso a va-

rios niños, con edades entre los 4 a 8 años, la

pregunta ¿Qué significa amor?, y las respues-

tas obtenidas fueron más amplias y profun-

das de lo que cualquiera pudo imaginar.

Les presentamos a continuación algunas de

ellas:

“Amor es el primer sentimiento que hay

antes de que las cosas malas aparezcan”.

“Cuando mi abuelita empezó a padecer

artritis no podía pintarse las uñas de los pies;

así que m i abuelito de las pintaba todo el

tiempo aún cuando empezó a padecer

artritis en sus manos. Eso es amor”.

“Cuando alguien te ama, la forma en que esa

persona dice tu nombre es diferente. Sabes

que tu nombre está seguro en su boca”.

“Amor es cuando una muchacha se pone

perfume y un muchacho se pone colonia,

salen juntos y se huelen”.

“Amor es cuando sales con alguien a comer

y le das la mayoría de tus papitas fritas sin

hacer que esa otra persona te dé las suyas”.

“amor es cuando alguien te hace daño, te

enojas mucho, pero no le gritas porque

sabes que eso herirá sus sentimientos”.

“Amor es lo que te hace sonreír cuando estas

cansado”.

“Amor es cuando mi mamá hace café para

mi papá y ella prueba un poquito primero

antes de dárselo, para estar segura de que

sabe bien”.

“Amor es cuando besas todo el tiempo,

luego te cansas de besar, pero aún quieres

estas junto a esa persona y entonces se

hablan más”.

“Amor es lo que hay en el cuarto contigo en

Navidad si dejas de abrir los regalos y

escuchas”.

“Cuando le dices a alguien algo malo acerca

de ti mismo y tienes miedo de que no te

quieran más; pero te sorprendes de que no

solo aún te aman, sino que te aman aún

más”.

“Amor es cuando le dices a un muchacho

que te gusta su camisa y él la usa todos los

días”.

“Amor es como una viejita y un viejito que

aún son amigo después de conocerse muy,

pero muy bien”.

“Durante mi primer recital, yo estaba en el

escenario muy asustada, miré a toda la gente

que me estaba viendo y vi a mi papá

saludándome y sonriéndome; él era el único

haciendo eso, y no sentí más miedo”.

“Amor es cuando mamá ve a papi sudoroso y

oloroso y aún le dice que es más guapo que

Robert Redford”.

“Amor es cuando tu perrito te lame toda la

cara aún cuando lo has dejado todo el día

solo”.

“Yo se que mi hermana mayor me ama por-

que ella me da toda su ropa que no usa y

después ella tiene que ir a comprar otra”.

“Uno no debería decir: “Te amo”, a menos

que realmente sea así; pero si realmente

amas, deberías decirlo.

La gente se olvida de ello”.

¡Con Espíritu de Alegría y servicio!

Milton Ulloa

Tel: 240-481-1965

[email protected]

Page 11: arca-usa.org 2015.pdf · ^Queridos hermanos y hermanas, he pensa-do frecuentemente en cómo la Iglesia pue-da hacer más evidente su misión de ser testigo de su misericordia

│ │

Es Blasfemia... Es Blasfemia...

Page 12: arca-usa.org 2015.pdf · ^Queridos hermanos y hermanas, he pensa-do frecuentemente en cómo la Iglesia pue-da hacer más evidente su misión de ser testigo de su misericordia

Santa Maravillas de Jesús

Publicación de la Renovación Carismática Católica de la Arquidiócesis de Washington

P.O. Box 14832, Silver Spring, MD 20911 Gerente: Tirone Benalcázar Director: José Cortés Jefe de Redacción: Mirtha Hunter Diseño y Diagramación: José Ignacio Ramón

Colaboradores: Padre Roberto Cortés-Campos y Edwin Méndez Publicidad y Ventas: 301-339-3630 Fotografía: Oscar González; www.istockphoto.com e-mail: [email protected] / Fax: 301-422-2213

Delante de nosotros se encuentra la gran

puerta de la Misericordia de Dios, que acoge

nuestro arrepentimiento ofreciendo la gracia

de su perdón. La puerta es generosamente

abierta, pero nosotros debemos valerosa-

mente cruzar el umbral.

La Iglesia ha sido animada a abrir sus puertas,

para salir con el Señor al encuentro de sus

hijos y de sus hijas en camino, a veces incier-

tos, a veces perdidos, en estos tiempos difíci-

les. Las familias cristianas, en particular, han

sido animadas a abrir la puerta al Señor que

espera para entrar, trayendo su bendición y

su amistad.

La gestión simbólica de las “puertas” se ha

hecho crucial. La puerta debe proteger, cier-

to, pero no rechazar. La puerta no debe ser

forzada, al contrario, se pide permiso, porque

la hospitalidad resplandece en la libertad de

la acogida, y se oscurece en la prepotencia de

la invasión. La puerta se abre frecuentemen-

te, para ver si afuera está alguno que espera,

y tal vez no tiene la valentía, o ni siquiera la

fuerza de tocar. La gestión de la puerta nece-

sita un atento discernimiento y, al mismo

tiempo, debe inspirar gran confianza. Muchas

veces la sagacidad y la gentileza de la recep-

ción son capaces de ofrecer una imagen de

humanidad y de acogida de la entera casa, ya

desde el ingreso. Jesús es la puerta que nos

hace entrar y salir. ¡Porque el rebaño de Dios

es un amparo, no una prisión! Son los ladro-

nes, aquellos que tratan de evitar la puerta,

porque tienen malas intenciones, y se meten

en el rebaño para engañar a las ovejas y apro-

vecharse de ellas. Nosotros debemos pasar

por la puerta y escuchar la voz de Jesús: si

sentimos su tono de voz, estamos seguros,

somos salvados. Podemos entrar sin temor y

salir sin peligro. La Iglesia es la portera de la

casa del Señor, no la dueña. Es así que la

Iglesia deberá ser reconocida, en cada rincón

de la tierra: como la custodia de un Dios que

toca, como la acogida de un Dios que no te

cierra la puerta, con la excusa que no eres de

casa.

Los sábados:

8 – 8:30 a.m.

8:30 – 9 a.m.

9 – 10 a.m.

10 –11 a.m.

Y también los Domingos:

12 –1 p.m.

4–5 p.m.

ww

w.v

idaenabundanci

a.n

et

Cómprelo ya en la Librería Ambulante de la Renovación Carismática

(240-505-4098)

Cómprelo ya en la Librería Ambulante de la Renovación Carismática

(240-505-4098)

“Sólo en el cielo podremos comprender

todo cuanto el Señor ha hecho por nosotros”

│ │

En este libro Francisco Bermeo, predicador y

formador Colombiano, nos quiere presentar

más que un estudio teológico un recorrido

práctico por el camino de los Hechos de los

Apóstoles, analizando e Interiorizando siete

textos base que nos invitan a Comprender y

Vivir lo que es el Bautismo en el Espíritu, que

a su vez es la identidad principal de la

Renovación Carismática Católica. Con este

libro aprenderás a experimentar en tu propia

vida la presencia del Espíritu Santo, que de

forma permanente renue-

va, acompaña, inspira,

fortalece, guía, envía y le

da sentido a nuestra vida

como Cristianos Católicos,

podrás “Volver al Amor

Primero, Volver a Pente-

costés”. La invitación a

vivir nuestra vida cristiana y nuestro caminar

dentro de la Renovación como un pente-

costés que nunca muere, es para todos.

Desde 1993 el Padre Martín Ávalos,

teniendo en cuenta las exhortaciones

del Magisterio de la Iglesia y consciente

del designio salvífico de Dios, utilizó

novedosas formas de evangelización,

entre ellas la música, como herramien-

tas eficaces para difundir el Reino de

Dios.

En esta ocasión nos presenta esta pro-

ducción musical temas dedicados a

Jesús Eucaristía. Entre estos podremos

escuchar te-

mas conoci-

dos como

“Cantemos al

Amor de los

amores”, “Oh

Buen Jesús,

“Bendito, ben-

dito”, y “Alabemos al Santísimo”.

Hermoso para escuchar, para nuestra

meditación y para hacer oración.

Papa Francisco

Francisco “Pacho” Bermeo Padre Martín Avalos y Dei Verbum

De Pentecostés en Pentecostés De Pentecostés en Pentecostés De Pentecostés en Pentecostés Cantemos al Amor de los AmoresCantemos al Amor de los AmoresCantemos al Amor de los Amores