tejiendo la palabra de vida en bogota
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I. TEJIENDO LA PALABRA DE VIDA EN BOGOTÁ
II. JEISSON LEGUIZAMÓNGIOVANNY VALENCIA
BOGOTÁ D.C.UNIVERSIDAD CENTRAL
ESCUELA DE COMUNICACIÓN SOCIALJUNIO-2006
TABLA DE CONTENIDO
TEJIENDO LA PALABRA DE VIDA EN BOGOTA-
-INTRODUCCIÓN
-GLOSARIO
- PRIMERA PARTE
1. PROBLEMÁTICA EN LAS FORMAS DE RELACIONES
COMUNICACIONALES ENTRE LOS HABITANTES DE LA CIUDAD DE
BOGOTA
- SEGUNDA PARTE
2. ORIGEN DEL RITUAL DEL MAMBEO
3. ELEMENTOS QUE INTERVIENEN EN LA PRACTICA DEL MAMBEO
A. LA COCA
B. EL TABACO
C. LA MALOCA
D. EL BANQUILLO
E. LA CAHUANA
F. EL MITO
- TERCERA PARTE
1. USANDO LA PALABRA CON CORAZÓN EN BOGOTA
- CONCLUSIONES
- REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
I. TEJIENDO LA PALABRA DE VIDA EN BOGOTÁ
II. JEISSON LEGUIZAMÓNGIOVANNY VALENCIA
Monografía sobre el documental “Tejiendo la palabra de vida en Bogotá”Trabajo de grado presentado a la escuela de comunicación social y periodismo.
BOGOTÁ D.C.UNIVERSIDAD CENTRAL
ESCUELA DE COMUNICACIÓN SOCIALJUNIO-2006
INTRODUCCIÓN.
El hombre siempre se ha esforzado por ir mas allá del simple manejo del lenguaje, como
codificar con precisión su comunicación, estructurando los idiomas y dialectos,
mejorándolos y adaptándolos a los cambios sociales que se dan con el pasar de los tiempos,
sin importar la cultura que sea es ese lenguaje el que ha hecho funcionar el mundo.
Lingüistas, sociólogos, filósofos, clérigos, estadistas, médicos, siquiatras, artistas,
innumerables profesiones se han abocado a el entendimiento y el estudio de la
comunicación y sus formas, En la búsqueda del buen sistema para comunicarse y
comprenderse, continuas reflexiones y teorías, que marcan los cambios se han convertido
en una constante de la historia humana.
En el occidente la comunicación ha sido llegada a considerarse como una ciencia de
carácter hermético, y su búsqueda principal es la unificación de las sociedades y del sujeto,
ha sido la masificación de los mensajes.
La comunicación en la actualidad es de masas, es cada vez mas abstracta se aleja de la
individualidad del sujeto, y con una sola cosa se brindan múltiples significados.
“Mambear” es una practica cultural-comunicativa, que se realiza en casi toda Sudamérica,
en Colombia casi todas las tribus indígenas la practican, consiste en asambleas de discusión
con un método de intervención y aceptación de las otras ideas, no son teorías de un
determinado autor.
Es una comunicación con sentido, que formaliza un mensaje fácil de entender, este se da
gracias a la comprensión del sujeto mismo, de su postura frente a un tema, este sale a
relucir tras el orden de las propias ideas.
Nuestra actualidad social ha hecho que tanto como los indígenas y el hombre blanco hayan
decido conocerse mutuamente, por supuesto que la forma que eligieron los nativos para
comunicarse fue el mambeo, y de allí ha habido un porcentaje de personas no indígenas que
han imitado este ejercicio comunicativo, y lo han venido aplicando en distintos ámbitos,
con satisfactorios resultados.
Para las personas de la ciudad que han venido aplicando esta forma de reuniones, en
universidades, empresas, familias etc, manifiestan como se concluyen las cosas mas
facilidad, para ellos es una alternativa de comunicación que marca una gran diferencia en el
contexto de nuestra vida urbana y moderna.
En este trabajo estamos mostrando una forma de la comunicación que no pertenece, a
ningún pensador, filosofo, o a alguna escuela teórica de la comunicación, como las que
existen en el occidente.
Cuando el hombre de la ciudad ya lo practica, se descontextualiza de los asuntos
antropológicos, pues no es un asunto místico o lejano sino que está aquí entre nosotros,
hace parte de la ciudad misma, como las universidades y los bancos, con claridad y sin
tabúes.
El propósito de este trabajo es mostrar como ha incursionado en la ciudad , una practica
comunicativa diferente a las estudiadas en las escuelas de comunicación, y que hace parte
de la cultura propia del país, lo cual hace que varios nos sintamos identificados con ella.
GLOSARIO
Buinaima: Hombre sabio.
Rafue: enseñanza
Yetarafue: palabra para hacer, para comportarse o palabra de disciplina.
Cuerpo: maloca del alma
Budare: utensilio para tostar las hojas de coca
Sabedor: anciano que posee una mente previsora, despejada, lucida, en una vigilia expectante que permite el control de la realidad social y cósmica.
Canasto: elemento que simboliza el cuerpo donde se teje el saber y la palabra.
Cosmovisión: manera de ver e interpretar el mundo
Ritual: practica tradicional construido por una serie de símbolos y actos materiales.
Pagamentos: acto de agradecimiento a la madre tierra por medio de rituales
Maguare: tambores (hembra - macho) para comunicarse a largas distancias y realizar convocatorias especiales en una comunidad.
Maloca: edificación indígena, para resguardo y lugar de reunión.
Cacería: tema(s) que se llevan a un mambeadero.
Calentar la maloca: mambear.
-TEJIENDO LA PALABRA DE VIDA EN BOGOTA-
PRIMERA PARTE
1. PROBLEMÁTICA EN LAS FORMAS DE RELACIONES
COMUNICACIONALES ENTRE LOS HABITANTES DE LA CIUDAD DE
BOGOTA
Muros, concreto, asfalto, caos vehicular, inmediatez, individualismo, afán por el dinero y
la posesión, contaminación, inseguridad y un cielo gris, son solo algunas de las
problemáticas con las que nos topamos en el día a día y a través de todo nuestro devenir
histórico, de nuestro vivir y convivir en la ciudad. Costumbre? estilo de vida? resignación?
Tal vez sean el común denominador para que los citadinos afrontemos y soportemos este
ritmo de vida, que desde niños hemos debido y en cierta forma hemos sabido llevar.
Modernidad, pos-modernidad, capitalismo, globalización? Las sociedades han sabido
acoplarse a todos aquellos procesos o etapas históricas vinculadas con el acontecer
económico, social y cultural de la humanidad, en el que el estar fuera de dicho proceso da
como resultado que aquella o aquellas personas vivan en un continuo “atraso” o
“desvinculo”, que acarrea la no “inclusión” dentro de un determinado nicho social, al
menos esa es la idea que se nos vende a través de los medios, la publicidad, e incluso desde
la misma academia.
Luego que la persona ya es “incluida” o “vinculada” a las tendencias sociales actuales no
solo locales sino mundiales, empieza a asumirse como un ente de producción mas, como un
ser que debe cumplir con un rol, determinado dentro de un núcleo social y cultural, lo que
podría llevar a que la representación de dicho rol afecte no solo su estilo de vida sino
también sus diversas formas de relación y comunicación con los que le rodean.
Si hablamos del presente, de nuestro hoy y nuestro ahora, sin duda tendremos que
remitirnos al término “Globalización”. Esta etapa de la globalización se ha caracterizado
por ser como llaman algunos “una era de la información” en el que las nuevas tecnologías,
las nuevas tendencias de comunicación con el auge de algunos modelos económicos y de
poder, son los resultados que mas sobresalen en este período y en el que las personas se
ven mas preocupadas por la forma de organizar toda la información que reciben día a día. .
“La globalización es un estado o una tendencia fuerte en la sociedad y la cultura
contemporáneas. Afecta la vida en su condición de posibilidad, y a la vida humana en la
producción, el consumo y la comunicación, en tanto modos específicos de su reproducción.
Parece ya instalada y se percibe como inevitable, algo así como «ser o no ser»:
globalizarse o perecer. La globalización se presenta como promesa de vida, pero, en la
forma como ella está planteada puede ser al mismo tiempo una amenaza no intencional
«global» de muerte (Hinkelammert, 1995)”1
Al mismo tiempo que la “era de la información” invade las sociedades, algunas personas en
la ciudad buscan diversas formas y maneras de ser visibilizados, buscando alternativas que
otorguen una salida a lo común, a lo cotidiano, a lo homogéneo, encontrando sus “pares”,
ocupando territorios y no territorios, creando estilos propios y particulares de
comunicación. Tales personas hace parte de lo que algunos estudiosos denominan como
“tribus urbanas”, aquellas células sociales que se encuentran por doquier en la ciudad y que
se visibilizan algunas de forma natural y espontánea, mientras que otras lo hacen de una
forma oculta o subterránea. Actualmente las nuevas tecnologías han creado por decirlo así
una nueva tribu, ya no urbana sino virtual, condicionada por el mundo y el contexto de los
computadores, en el que los encuentros y las formas relacionales pueden darse de un lugar a
otro sin importar cuanta distancia exista entre ambos, en el que la inmediatez es su principal
beneficio. Pero que podría haber mas allá? Correríamos el riesgo de eliminar por completo
1 Acosta, Yamandú. Globalización e identidad latinoamericana. Una globalización homogeneizante y fragmentante. OPINIÓN Número 123. 24 de
abril de 2001. 22 MuHarram 1422 A.H.
el contacto “face to face”, el contacto personal con el otro, porque aunque las nuevas
tecnologías nos brindan la oportunidad de tener recursos de audio y de video en el que
estando a kilómetros de distancia podemos ver y escuchar a nuestro emisor o receptor,
habría esa necesidad natural de sentir un contacto directo con el otro. “La nueva
configuración urbana del ciudadano está caracterizada por inéditas formas de vida
pública -argumentación, estilo, tono, marcas distintivas colectivas, recursos
dramatúrgicos, usos del cuerpo, voz, gesticulación, etc.- o de viejas formas en lugares no
tradicionales, muchos de ellos no son en manera algunos lugares físicos sino espacios
virtuales, canales para la comunicación.”2, y en medio de todos estos nuevos canales de
comunicación, en medio del ritmo de vida apresurado que llevamos los citadinos, en medio
de la perdida de espacios y momentos para el dialogo y la reflexión, surgen diversas
alternativas como religiones, corrientes filosóficas e ideologías ancestrales que buscan
brindar canales para el encuentro y el re-encuentro personal que a sido relegado casi de
forma inconsciente. Aun así, algunas personas no encuentran verdaderos espacios reales y
tangibles para dar cabida a la esencia del ser humano, a lo que nos diferencia de los demás
seres vivientes: la palabra, o lo que es peor muchos ni siquiera se percatan o hacen caso
omiso de las falencias que hay en sus vidas, ya que no hay preocupación por lo espiritual o
por lo que alimenta el alma, hay cierto conformismo con tener posesiones y estabilidad
económica, “si el bolsillo esta bien, todo esta bien” dirían algunos. “La crisis actual indica
que el camino que se recorre no es el correcto. Replantear el rumbo implica conocer voces,
posibilidades y propuestas que hasta ahora han estado veladas y que, en general,
corresponden a sistemas de pensamiento apabullados por una ideología avasalladora y
reduccionista”3
“Hay un tiempo de trabajo, un tiempo para el descanso, un tiempo para el encuentro con el
otro, un tiempo para la reflexión, un tiempo para la contemplación y un tiempo para las
prácticas rituales. En fin, el tiempo está referido a la posibilidad de formarse
2 Guzmán Cárdenas, Carlos E. Las nuevas síntesis urbanas de una ciudadanía cultural(La ciudad como objeto de consumo cultural)
3 Pedraza Torres, Hilario. Ambiente, cultura y espíritu: una mirada intencional a lo invisible. Bogotá, julio de 2003.
interiormente, a la capacidad de conocerse a sí mismo, para que de esta manera los seres
humanos entiendan las leyes de la vida, se sincronicen a ella y lo expresen en sus
relaciones de unión con sus congéneres y con la naturaleza”
El ser es su palabra, pero en definitiva habla desde la obra. La comunicación es recurso
fundamental para la unión. La comunicación también exige: precisión del significado,
compromiso y unidad de propósito. Cuando funciona, propicia el entendimiento y, por lo
tanto, suscita la paz.
SEGUNDA PARTE
1. ORIGEN DEL RITUAL DEL MAMBEO
«Siempre nos sentamos en el mambeadero con el frente hacia donde se oculta el sol. El es luz y fuego, nos
ilumina y nos calienta. Ilumina nuestra mirada para diferenciar las apariencias e ilusiones. Calienta
nuestro cuerpo y lo vitaliza, Nuestra lengua transmite la palabra. Nuestra lengua es coca, es la hoja de
coca. El tronco de nuestro cuerpo es el canasto de la coca, el canasto donde se va acomodando el saber y la
palabra. Todo lo escuchado acá, todo lo aprendido acá, no se olvida nunca. Esto se comparte, es lo que se
llama palabra de amistad, palabra de cariño, palabra de consejo»
Colombia, tierra de 1.141.178 kilómetros cuadrados, tiene aproximadamente 44 millones de
habitantes, de los cuales alrededor de un 70% reside en zonas urbanas y el 30% restante en
sectores rurales.
Según el último censo poblacional realizado por el Departamento Nacional de Estadística
(DANE), la población indígena, conformada por 84 pueblos, asciende a 702 mil habitantes
que tienen presencia en 32 departamentos del país, aunque entre las organizaciones
nacionales y regionales indígenas se sostiene que la población sobrepasa el millón de
personas.
La Constitución de 1991, elaborada por la Asamblea Nacional Constituyente y en la cual
los indígenas cumplieron un papel protagónico, reconoce y protege la diversidad étnica y
cultural de la nación colombiana. Sin embargo, aunque existen pueblos indígenas que aun
mantienen su identidad social, otros han transformado sus estilos de vida, relacionándose
ampliamente con los pueblos campesinos, mientras que otros han asumido estilos de vida
urbana, tal es el caso de los muisca de Cota, Chía, Suba, Bosa, mientras que otros están en
proceso de adaptación a la ciudad como consecuencia de procesos migratorios
involuntarios derivados del conflicto armado entre grupos alzados en armas y las fuerzas
militares. Aun así, de otro lado se esta dando un proceso de recuperación de la identidad
indígena, este es el caso de pueblos como el Kankuamo, Mokaná, algunas comunidades
Muisca (Sesquilé, Tocancipá), Guane (Butaregua) e incluso de pueblos asumidos como
extintos. “Esta recuperación de la identidad ha incluido en muchos casos, permanencias y
olvidos de una tradición que se ha reinventado y resignificado de acuerdo a la nueva
coyuntura histórica y política que vive al país. (Rappaport 2000)”4
Y es precisamente que en el marco de dichos procesos de recuperación identitaria, juega un
papel relevante la recuperación de la cosmovisión de estos pueblos. En esa cosmovisión
indígena están presentes las cosmologías de cada pueblo, sus experiencias históricas y
particulares en su relación con el medio ambiente, con otras sociedades y con su propia
sociedad. “Las cosmovisiones de los grupos étnicos y comunidades locales tradicionales
muestran una naturaleza altamente simbolizada y un alto sentido de pertenencia a un
territorio y a una comunidad humana”.5 Para la conservación de esa cosmovisión, los
grupos indígenas de Colombia han resuelto que es de suma importancia volver a retomar,
reforzar, trascender y compartir todo ese conjunto de expresiones y practicas tradicionales
que han venido perdiéndose con el pasar del tiempo y que han estado presentes desde antes
del establecimiento de las ciudades, luego a través de la colonia de manera aislada y en esta
etapa histórica en los últimos 40 o 50 años con el incremento de la llegada de sabedores
tradicionales de diferentes partes de Colombia y de fuera de Colombia a las propias
ciudades. “Los principios espirituales en las culturas ancestrales son cultivados mediante
una admirable devoción ritual; obviamente, como todas las cualidades del espíritu, son de
carácter universal y, por lo tanto, aprovechables por cualquier colectividad humana que
desee emprender caminos trascendentes...no obstante, el tesoro sapiencial indígena corre
el riesgo de desaparecer si continúa ignorado o despreciado por la ideología dominante en
4 http://200.31.69.10/ArchivosWeb/Direccion_Desarrollo_Territorial/divers_etnica/indigenas/doc_interes/Pueblos_Indigenas/Capitulo_6.pdf
5 Ibíd.
la población colombiana que, en general no reconoce, o se niega a aceptar, el mestizaje
como parte substancial de la identidad nacional”6
En la búsqueda del camino que lleve a estos pueblos indígenas a recuperar sus tradiciones y
por ende su cosmovisión ancestral, los bienes naturales juegan un papel determinante, ya
que para los indígenas los bienes de la naturaleza como animales, plantas, minerales y el
agua les fueron dados a los humanos como un don, que luego deben ser retribuidos a la
Madre Tierra. Por ende si las plantas y animales son dones, se debe pagar su uso, al menos
eso es lo que diría un indígena y como se paga, se paga mediante los rituales o por medio
las ofrendas dadas a la tierra o pagamentos. Los rituales indígenas son ceremonias donde se
reproduce la historia del grupo, se aseguran los vínculos, se retoma la tradición oral, se
hacen afirmaciones colectivas y se garantiza el pasaje de una situación social a otra. La
obligación de quien recibe o participa en estos rituales es preservar y hacer un buen uso de
este legado, transmitiéndolo a las nuevas generaciones que harán parte de esa comunidad,
precisamente, a través de sus tradiciones orales y rituales. “Cuando se pierde la tradición
oral, se derrumba la cultura y se marchita la vida. Pero también es posible un sentido
inverso, es decir, propiciar la recuperación cultural o dar reversa a la aculturación
mediante la revitalización de la tradición oral; esto se consigue en los rituales, con la
ayuda de las plantas y los lugares sagrados que son recursos para activar el conocimiento
revelado y retornar a la espiral de la palabra”7
En la realización de estos rituales indígenas es común el uso de plantas sagradas. Estas
plantas sagradas que son otorgadas por la madre tierra, deben pasar por un proceso, que
consta de una serie de oraciones y pagamentos cuyo fin es conseguir la purificación y
consagración de la planta que se va utilizar ritualmente. Algunas como el tabaco se
consume en forma líquida o en resina (ambil); otras como la coca se consumen sus hojas
luego que han pasado por un proceso en el que han sido tostadas, maceradas y pulverizadas.
6 Pedraza Torres, Hilario. Ambiente, cultura y espíritu: una mirada intencional a lo invisible. Bogotá, julio de 2003
7 Ibíd.
Para otro tipo de rituales sanatorios se consumen plantas como el yagé (Banisteriopsis sp.);
los grupos indígenas como los siona y los kofán consumen la savia del bejuco yoco
(Paullinis yoco), que actúa como un estimulante. También son utilizados alucinógenos y
estimulantes provenientes de las familias Brugmansia (borrachero) y Brunfelsia. Para otros
pueblos el ritual del Yuruparí hace que se recuerden y revivan los elementos fundamentales
de su cosmovisión. Los instrumentos musicales más utilizados por estas comunidades son
las flautas, los cascabeles, los pitos de caracol, las sonajas de concha de tortuga y las
maracas. También utilizan coronas que son hechas de plumas de tucán, brazaletes, collares
y máscaras elaboradas en fibras y barro. Otros grupos como los uitoto y los muinane en el
Amazonas utilizan tambores conocidos como maguaré, uno simboliza la hembra y el otro
simboliza al macho, hechos a partir de troncos ahuecados, los cuales se utilizan para
comunicarse a largas distancias y realizar convocatorias especiales.
Todo este simbolismo mágico y trascendental esta reunido bajo un contexto propicio para
ello. Desde tiempos milenarios cada grupo indígena desde los ubicados en el sur del país,
hasta los que se concentraban en parte oriental y en la región de la sabana, poseían y
conservaban sitios sagrados en los que se llevaban a cabo sus rituales de purificación y
consagración. “Los eventos rituales eran continuos y se desarrollaban en templos cargados
de simbolismos relacionados con montañas o lagunas, donde periódicamente la población
muisca realizaba peregrinaciones y trabajos religiosos encaminados a mantener el
equilibrio y la armonía de las relaciones humanas y el buen uso del medio natural...Eran
tradicionales los pagamentos en la laguna de Guatavita donde convergían periódicamente
diferentes poblaciones de los múltiples cacicazgos del altiplano. También eran sagrados
lugares como: las laguna de Fúquene, Siecha e Iguaque; los cerros de Monserrate, Juaica
(Tenjo); las montañas del sol y la luna en Guachetá, y el cerro del Majui, que fue
fundamental dentro de la cosmogonía del antiguo cacicazgo de Cota”8
8 Pedraza torres, Hilario. Reflexiones sobre el devenir muisca. cota, noviembre de 2001.
Hoy en día algunas comunidades indígenas además de conservar parte de sus territorios
sagrados, también siguen conservando y entregando de generación en generación, algunos
sus tradiciones orales y sus practicas rituales que protegen y orientan sus vidas tanto
individual como grupal de estas comunidades. Tal es el caso del ritual del mambeo,
conocido también como el ritual de la palabra, ritual de la coca, ritual que ha surgido del
renacer de varias comunidades indígenas como la muisca, y que además ha sido
acompañado por los ancianos murui muinane del amazonas que aun poseen la cultura del
mambeo, también es acompañado por los ancianos de la sierra nevada que tienen su propia
cultura de mambeo, los ancianos del cauca que también tienen otra forma de mambear, otra
cultura alrededor de la hoja de la coca y de la sabiduría que allí esta guardada por varios
años y también se encuentran los uwas que también tienen su cultura orientada en el
acompañar de la coca. “...estas comunidades las denominan Plantas Maestras, por que son
utilizadas dentro de una concepción cultural y medicinal...entre ellas esta la hoja de coca,
la cuál hace milenios la siembran y consumen...Las comunidades bolivianas y peruanas
expresaron la importancia en su cultura milenaria de “mambear coca”... en Bolivia hay
dos millones de nativos consumidores de hoja de coca, en Perú tres millones y en Colombia
cien mil indígenas de diferentes etnias, que la consumen por tradición sagrada”9 La coca,
planta utilizada por excelencia en el mambeo desde tiempos milenarios ha tenido una
extensión bastante grande en Colombia; la prueba de la enorme extensión es que ha sido
utilizada ritualmente desde la Sierra Nevada de Santa Marta con los indígenas kogis,
arhuacos, hasta Nariño, el Vaupés, la sabana, y hasta el sur en el trapecio amazónico.
Prácticamente en todo el territorio colombiano se mambeaba y aun hay muchas
comunidades que todavía lo usan. Sin embargo han surgido nuevas políticas antidrogas que
han establecido que el uso de la coca, de uso milenario por los indígenas en algunas
regiones sea erradicada. Estas políticas afectan enormemente no solo la cultura de estos
pueblos sino las pequeñas industrias que han desarrollado con la hoja de coca productos
como el te y productos de uso medicinal. Aun así, en medio de la “satanización” por la que
se ve implicada la coca y su uso, estas comunidades mantienen su ritual de la palabra, ya
9 Bastidas Passos, Lucy Amparo. Foro Andino Amazónico. Popayán, Cauca. Septiembre 29 de 2004.
que el mambeo es uno de los principales recursos para comunicarse que tienen los pueblos
indígenas, no solo colombianos sino de otras regiones de América.
Pero que es el mambeo? El mambeo es un ritual nocturno en el que se consumen las plantas
sagradas de la coca y el tabaco. Es un espacio sagrado y de comunicación en el que una
comunidad se reúne para “mover la palabra” o “calentar la maloca” como llaman ellos a la
dinámica del mambeo. Allí se reúnen en una maloca10 para dialogar sobre alguna
problemática, ya sea que afecte a alguien en particular o en forma colectiva. Allí un anciano
que por lo general es el más sabio de la comunidad, direcciona el ritual mediante la palabra
o Rafue11, haciendo alusión constante a la metáfora y al mito como herramientas de
enseñanza y orientación a su comunidad. El tema o los temas que el anciano o los asistentes
lleven al mambeadero se conoce como “cacería”12, por tanto entre mayor cacería tenga el
mambeo mas provechoso será el ritual. Por lo general las personas que participan en el
mambeo están sentadas sobre banquillos, los cuales están ubicados en forma circular o
semi-circular. Allí adoptan una postura de concentración y de atenta escucha a las palabras
que el “sabedor” esta mencionando. Su postura es relativamente inmóvil, abren sus piernas
y ubican sus codos sobre ellas, su rostro esta direccionado hacia el piso y constantemente
mueven su cabeza en sentido de afirmación a lo que el sabedor esta mencionando. “En este
sentido, sentarse es por excelencia una técnica del pensamiento (Pineda, 1993). El abuelo,
al sentarse, adopta una postura fetal, a través de la cual se establece, como en un eje, la
comunicación entre los diferentes niveles del mundo: en esta posición, el cuerpo canasto se
sienta en la punta de la historia (Pineda, 1986, 122)”13
10 Templo ceremonial indígena.
11 Actividad mediante la cual las palabras se transforman en cosas...una palabra que nombra lo que busca, una palabra con “poder”; hacia el final
de la actividad, rafue se manifiesta como “Cosas” –comida, cacería, criaturas, etc., lo que se buscaba...si esa palabra no genera “cosas”, no es propio rafue, es
solo bakaki “cuento”. Echeverri, Juan Álvaro-Candre Kinerai, Hipólito. Tabaco frió, coca dulce: palabras del anciano Kinerai de la Tribu Cananguchal para
sanar y alegrar el corazón de sus huérfanos. Santa fe de Bogota, Colcultura 1993.
12 La misma Palabra de vida es la cacería del espíritu de tabaco....esa Palabra “se formara” y “se vera” como “Cosa verdadera” (úa rafue) –quiere
decir que se invoca al espíritu del tabaco para que primero se manifieste esa palabra, luego para que se reciba, para que se convierta en acción. Ibíd.
13 Pineda, Roberto. Los bancos taumaturgos. Departamentos de antropología universidad de los andes y universidad nacional de Colombia.
La palabra es la que genera la dinámica del mambeadero, no es un conversatorio porque no
hay un tema definido sobre el cual se va a hablar, el tema surge de lo que se escuche, así
que mambear para las comunidades indígenas tiene un significado cotidiano, es una
actividad permanente, nosotros pensamos y no necesariamente actuamos, mientras que para
los indígenas que mambean, pensar, hablar y actuar es una sola cosa, es una alternativa de
acceder al conocimiento y a su construcción colectiva, es un espacio donde lo que se habla
no es lo que se habla cotidianamente, es filosofar. “Su fuerza y profundidad son tales que
posibilita a esos pueblos mantener un sentido de vida fundado en el amor, la paz, la
libertad y la felicidad”14
Según la tradición de estos pueblos, el mambeo empieza con una palabra bastante libre por
la gente, con una conversación cotidiana, podríamos decir que se hace lo que nosotros
llamamos una “lluvia de ideas”, sobre cosas cotidianas que están sucediendo en la
comunidad o que le sucedan a alguien en particular. Luego la segunda etapa, si habláramos
de etapas implica la identificación del factor común de esa lluvia de ideas, el hilo
conductor y de unión a todo eso que está hablándose, y una tercera etapa seria aquella en la
que interviene el sabedor, quien ha estado sentado todo el tiempo en su banquillo de
sabiduría escuchando la “cacería” que se trajo, recoge y establece las conexiones entre lo
que se ha estado diciendo para ir “tejiendo el canasto”, ya que para ellos, el cuerpo es un
canasto y en el, el saber y el conocimiento se van tejiendo poco a poco. “Cuando algunas
sociedades indígenas dicen, por ejemplo, que tejer un canasto es tejer el mundo o tejer la
historia, o que la tierra es un sombrero kuarimpoto que flota sobre el agua, no se trata de
un símil, de una comparación, de una metáfora o una figura literaria -como algunos han
creído-, sino de la expresión de una realidad”15 Entre las personas que participan en el
mambeo, algunos son los encargados de preparar el mambe, que es un polvo de color verde,
resultado del proceso de tostar y cernir las hojas de coca. Cuando ya se ha cernido el polvo
14 Pedraza Torres, Hilario. Ambiente, cultura y espíritu: una mirada intencional a lo invisible. Bogotá, julio de 2003.
15 Vasco Uribe, Luis Guillermo. “El concepto de producción cultural indígena”. (Escrito en 1994 como introducción conceptual al libro inédito Del
barro al aluminio. Producción cultural embera y waunáan).
de la coca, se mezcla con ceniza de yarumo. El que está a cargo de preparar el mambe, pasa
la primera cucharada al anciano sabedor para que la pruebe y si da su visto bueno, esa es la
señal de que todos se deben sentar en el círculo sagrado. Allí, el da a cada uno de los
participantes del circulo su parte, que por lo general son dos, para cada mejilla, cada parte
es distribuida en ambas mejillas, formando así dos pequeñas bolas que se van disolviendo
poco a poco. Mientras que el tabaco es consumido en forma semilíquida o ambil16 o
también algunas veces es fumado. El ambil es depositado en frascos o receptáculos,
“yeraque” en huitoto, y el que quiera debe untar el dedo y lamerlo lentamente. Luego, el
anciano sobre la base de lo que ha escuchado se refiere a esas situaciones por medio del
consejo.
Generalmente relata un mito determinado, el cual tiene episodios similares a los que
ocurrieron, para que los que están involucrados en esa situación sin ser señalados vayan
“tejiendo su canasto”, ya que el mambeo y su palabra no señala a nadie y no juzga a nadie,
es una palabra para todos y los que tienen que recibirla la recibirán. Allí se comparte la
“palabra de vida” o en términos huitotos el “Comuilla Uai”17 que es como un cono y en la
base del cono esta la “palabra de vida” que comienza a ascender y se convierte en
“palabra de consejo” o yetárafue18, y esa palabra de consejo se convierte en “palabra de
trabajo”, luego sigue el ascenso a la “palabra del buen manejo de la abundancia” y
termina en “palabra de comunidad” y “palabra de gobierno”, pero la base de la dinámica,
lo que inspira toda el mambeo es la palabra de vida y esa palabra de vida se ramifica en
16 “Ofrecer el ambil es signo de amistad entre hombres y un acto de hostilidad el rechazarlo”. Echeverri, Juan Álvaro-Candre Kinerai, Hipólito.
Tabaco frió, coca dulce: palabras del anciano Kinerai de la Tribu Cananguchal para sanar y alegrar el corazón de sus huérfanos. Santa fe de Bogota,
Colcultura 1993
17 Comuilla Uai: “Palabra de crecimiento, hacer crecer de la nada, raíz de toda la palabra. Voy a existir, voy a crecer, voy a multiplicarme y
humanizarme, y me manifestaré al mundo en abundancia que es amor, respeto, paz y convivencia; es trabajar, servir, ayudar, instruir, aconsejar y conducir a
todos mis hermanos... progreso humano equilibrado con la Voz del Padre Creador y la plenitud de la Madre Tierra; palabra para neutralizar todo lo que nos
amenaza, para conocer, controlar y aprovechar las fuerzas y energías de todo lo creado. De la nada a la abundancia”. Pedraza Torres, Hilario. Ambiente,
cultura y espíritu: una mirada intencional a lo invisible. Bogotá, julio de 2003.18 Yetàrafue: algunos indígenas traducen como “Palabra de consejo”, pero yo prefiero la connotación mas fuerte de “disciplina”....El yetárafue es
uno de los temas más complejos del pensamiento indígena. Echeverri, Juan Álvaro-Candre Kinerai, Hipólito. Tabaco frió, coca dulce: palabras del anciano
Kinerai de la Tribu Cananguchal para sanar y alegrar el corazón de sus huérfanos. Santa fe de Bogotá, Colcultura 1993.
consejo. “De la visión espiritual emana la sabiduría y esta sabiduría se cultiva, se aplica y
se comparte mediante el verbo, la palabra, que señala el camino del amor y, por lo tanto,
es Palabra de Vida”.19 El consejo tiene una gran importancia, ya que es lo que forma
realmente y hay consejo para todas las actividades de la vida, para el trabajo, para la
comunidad, para la relación con los demás, para el manejo del territorio, etc., entonces el
mambeo es el uso diario de la palabra, el tejido diario de la palabra y de la estructura que de
ella se deriva. “La conversación en el mambeadero es lenta, reflexiva, serena – lo que no
impide que tome una forma jocosa, cómica, en ciertas situaciones-. Los asuntos de
importancia se asumen con gravedad. Uno de los presentes toma la iniciativa en la
conversación, mascullando las palabras entre la coca, mientras que otra persona adopta el
rol de interlocutor “oficial”, pronunciando ciertas interjecciones o repitiendo –en señal de
interés- las ultimas frases de su discurso”20
En el mambeo es de suma importancia precisar los conceptos y los significados; si van a
hablar de amor primero charlan sobre el significado del amor, si van a hablar de paz que es
la paz, si es de felicidad que es la felicidad, todo eso para poderse entender. También están
otros elementos como el compromiso, la palabra compromete y una vez que se expresan se
comprometen consigo mismos, con los otros y con el padre creador. “La palabra indígena,
en su sabiduría, es precisa e iluminante, conlleva significado y compromiso: lo que se
piensa se lleva al corazón, se dice y se hace. No hay lugar a elucubraciones, hipótesis o
teorías, pues la palabra cobra vida es con la obra, el aprendizaje es correlativo con la
acción. De no ser así, la tradición oral se habría anarquizado y las culturas derrumbado.
El contenido de esa palabra, entonces, es un torrente de eficacia que se constituye en el
instrumento central para inducir el cambio de mentalidad”21 El mambeo también requiere
el cultivo de la paciencia, de la atención, de la tolerancia, de la concentración, de la
mentalidad abierta, de la aceptación, del escuchar. “...los muinane distinguen la Palabra
19 Pedraza Torres, Hilario. Ambiente, cultura y espíritu: una mirada intencional a lo invisible. Bogotá, julio de 2003.
20 Pineda, Camacho. Roberto. Etnografía del mambeadero: espacio de la coca. Texto y contexto (Bogotá). No 9 (sep./dic. 1986).
21 Pedraza Torres, Hilario. Ambiente, cultura y espíritu: una mirada intencional a lo invisible. Bogotá, julio de 2003.
Fría, propia del líder y del buen mambeador, la cual «es respuesta al calor del mundo y de
la gente» (Ibíd., 89). El hombre de Palabra Fría debe ser frío (siiku); esto significa que, de
acuerdo con los muinanes, es una persona «calmada; pocas cosas la hacen enfadarse,
regañar o criticar. Hace las cosas sin afán, pues sabe que las cosas grandes e importantes
se demoran para 'amanecer', para volverse sustancia tangible. Acepta lo que sucede a su
alrededor sin crear problemas; así algo no le guste él dice: 'está bien, las cosas son como
usted dice'. No obstante, es una persona sabia, que si desea corregir el proceder de otro lo
hace sin generar más calor (...) Si es líder, desde su 'asiento frío' acepta 'dulcemente'
cualquier apoyo que se le dé, así sea poco, y es tranquilo y reflexivo al observar el
comportamiento de su comunidad y tanto más al corregir sus errores”22 Siempre un
mambeadero tiene que terminar con un acuerdo total, si hay desacuerdos es que no se
mambeo bien, todos tienen que estar de acuerdo sobre lo que se hablo. Luego se pasa a la
obra, la obra para estos pueblos es la medida de la palabra, toda palabra que no termina en
obra es palabra vacía, entonces de ahí se deriva el amor al trabajo, tal vez es por esto que
los pueblos indígenas son tan eficaces en sus labores cotidianas. “El pensamiento se lleva
al corazón para imprimirle amor, luego se expresa con palabra dulce, y debe concluir en
actos u obras de servicio a la comunidad. Todo comienza en el pensamiento y termina en la
obra. Cuando no resulta obra, se malogra la comunicación porque, al no tener efectos, la
palabra se fue en vacío. En últimas, se habla desde la obra (por sus frutos los conoceréis y
ellos se conocerán a sí mismos), de tal manera que sin ésta es imposible la
comunicación”23
En el grupo del mambeadero participan únicamente hombres, las mujeres y los niños no
mambean, aunque algunas veces, las mujeres pueden estar presentes dentro de la maloca
ubicándose en un rincón, prestado mucha atención en la palabra de los hombres que están
en el circulo del mambeadero. Aun así la mujer esta presente simbólicamente, no solo por
la coca sino también por la bebida extraída de la yuca dulce conocida como cahuana, con la
22 Pineda, Roberto. Los bancos taumaturgos. Departamentos de antropología universidad de los andes y universidad nacional de Colombia.
23 Pedraza Torres, Hilario. Ambiente, cultura y espíritu: una mirada intencional a lo invisible. Bogotá, julio de 2003.
cahuana se endulza la palabra del mambeadero y se direcciona la palabra si llegase a
desviarse. Es por esto que la palabra que se mambea no es palabra vana, palabra vacía,
porque esa palabra se convierte en cosas, en acciones, en producción, en vida y con ella
retoman su memoria ancestral y se convierten un solo elemento, en una sola sustancia de
las plantas rituales utilizadas.
2. ELEMENTOS QUE INTERVIENEN EN LA PRACTICA DEL MAMBEO
El Padre Creador es la coca y su sangre el tabaco.
Como es el Pensamiento del Padre Creador, los ancestros dicen: “Ésta es la palabra con que se va a
proteger y multiplicar, Palabra de Vida y de trabajo
Al pueblo se le hacía difícil confiar en esa palabra. El Padre decretó que toda la sabiduría quedaba
depositada en esas dos plantas que tienen que ser cuidadas como el árbol de la Ciencia del bien y el mal.
Encarga la vigilancia a Jiturui Fayueni, luego se desaparece del planeta, hacia el cosmos, y queda la
palabra
Sin embargo mantiene conexión con el tabaco. Si el anciano se prepara bien, al consumir la planta Él lo
ilumina. (Génesis Uitoto. Parte del mito, narrado por Antonio Kiriyateke)24
24 Pedraza Torres, Hilario. Ambiente, cultura y espíritu: una mirada intencional a lo invisible. Bogotá, julio de 2003
Las plantas sagradas de la coca y el tabaco forman una sola unidad, un solo elemento, un
solo canal entre lo humano, lo divino y la naturaleza. En el Amazonas es común que estas
dos plantas sean consumidas en el ritual sagrado del mambeadero. Estas plantas son fuente
de sabiduría y conocimiento, también son medios de pago en los rituales y en las ocasiones
especiales. En el ritual del mambeo la coca (Erythroxylum coca) y el tabaco o ambil
(Nicotiana tabacum) deben pasar por un proceso de purificación y de consagración desde el
momento en que son sembradas sus semillas hasta el momento en que son consumidas en
los rituales, ya que cada planta debe cumplir con un propósito especifico, además cada
planta sagrada por pequeña que esta sea tiene un dueño, un dueño espiritual al cual se debe
pedir permiso para poder hacer uso de dicha planta. “El uso de las plantas enteogénicas25
americanas, como la coca, el tabaco, el yopo, el yagé, el sanpedrito y la datura
(borrachero), dentro de la tradición cultural indígena exige cuidados rituales en su
cultivo, recolección y preparación, que se hacen mediante “dietas” mentales y corporales
acompañadas de la conjura (oración), una manipulación restrictiva y un propósito
trascendente, para asegurar efectos positivos en su consumo. Cuando se ingieren,
realmente se accede a un alimento espiritual que conduce al entendimiento de la vida”26
Para los pueblos indígenas tanto la coca como el tabaco, tienen una representación y un
significado. Por ejemplo, la hoja de la coca es muy similar a la forma de una lengua
humana, por lo tanto la coca es por excelencia el símbolo de la palabra, mientras que el
tabaco simboliza el espíritu, ya que su fruto tiene la forma de un corazón y en su interior
tiene numerosas y diminutas semillas que simboliza un pueblo con corazón. La unión de
ambas plantas coca y tabaco usados en el ritual del mambeo como mambe y ambil forma
entonces la palabra de un pueblo con corazón, la palabra de un pueblo con amor y con esa
palabra se va formando el verdadero ser y con ambas sustancias se suaviza y se domina el
25 Son plantas que, al consumirlas en su contexto ritual sagrado, generan en una experiencia de comunicación con Dios.
26 Pedraza Torres, Hilario. Ambiente, cultura y espíritu: una mirada intencional a lo invisible. Bogotá, julio de 2003
poder y la fuerza de la palabra. “La coca y el tabaco constituyen para los huitotos el
soporte material del ritual, actividad que fundamenta y da sentido a su comportamiento
tanto extraordinario como cotidiano. La necesidad de utilizar elementos intermediarios
entre el hombre y los poderes que lo trascienden se llena con la coca y el tabaco. Las
plantas rituales le abren un mundo en el cual casi todo es posible". Fernando Urbina
Rangel.”27
En la tradición de los indígenas muinane, la coca simboliza a la mujer, mientras el tabaco
simboliza el hombre, mientras que entre los uitotos, es al contrario.
A. LA COCA
“...La coca es una planta muy antigua. La mitología dice que ella puede traer paz para quien la pueda
manejar y orientar. Para nosotros la coca es la coca de la vida, de la esperanza, es la coca dulce. La coca
somos nosotros, lo humano, es la materialización del conocimiento, de la palabra...”
Cristhian Díaz – Fundación Hemera
En los últimos años, los medios de comunicación no solo de Colombia sino en el mundo,
han abordado en profundidad sobre la cocaína, pero muy poco sobre la coca, en especial en
lo que respecta a su uso y su significación para las culturas indígenas en donde ocupa un
puesto preferencial, por lo tanto en las grandes metrópolis aun el término coca es
satanizado socialmente al ser confundido o al ser vinculado directamente con la cocaína,
cerrando así las posibilidades para dar una discusión abierta y ajustada a los referentes
culturales de los pueblos indígenas. Es distinta una mata de coca en países como Bolivia y
Perú o en algunos sitios donde las comunidades indígenas le dan un uso ancestral, que una
mata de coca para la transformación química en cocaína, para financiar el terrorismo como
sucede en nuestro país. “La coca es una planta que sabiéndola utilizar, conociendo sus
orígenes, trae bienestar, pero aquel que abusa de ella, como lo hacen los occidentales,
27 De la Peña, Fabio. Etnias: Huitotos. Los Murui Muinane.
violan la ley de origen, y la coca se convierte en destrucción, guerra y sangre. Esa coca ya
no es vida. El problema es humano, y nosotros lo estamos diciendo. El blanco se enamoró
de esa mujer que no conocía, y por eso el problema, la guerra y la contaminación de la
madre tierra”28
El significado sagrado que tiene la coca es preservado por los ancianos sabedores, ellos
están encargados de mantener viva esta planta. La coca no se siembra como sembrar
cualquier planta, sino que tiene que ser autorizado por los sabedores y las personas que han
recibido la autorización son quienes deben sembrarla, por lo tanto, la coca para los
indígenas es una planta sagrada de la cual se origina su ideología y cosmovisión del mundo,
es decir, el desarrollo de la ideología de las comunidades que la utilizan depende de plantas
ancestrales como la coca.
La planta de la coca es originaria de América del Sur, aunque también es cultivado en las
naciones de Sri Lanka, India y en la Isla de Java. Alcanza una altura aproximada de 1 a 2
metros, con ramas rectas y hojas parecidas a las del te. Para los indígenas la coca si es bien
utilizada, trae infinitos beneficios, según ellos, si es orientada para el fin que el Padre
Creador la puso en la tierra, esta planta sagrada podría llegar a traer la paz.
La coca se considera fuente del saber entre diversos grupos étnicos como los kogi, los
paeces, huitoto, tucano, entre otros. La coca (hibie en huitoto, Ipadu en lengua tanimuka, hi
´pie en idioma andoque) es sembrada por los pueblos indígenas en casi todos los campos de
cultivo o chagras, intercalada con otras plantas no solo rituales sino también industriales y
alimenticias. Los adultos siembran sus injertos y después de 6 meses arrancan sus hojas,
amontonándolas en canastos que cuelgan de sus hombros.
Habitualmente, los indígenas siembran, recogen, secan y tuestan la hoja de coca a través de
un horno. La hoja no se masca sino que se consume en forma de polvo mezclada con
cenizas de la hoja del árbol yarumo (Cecropia sp.), allí la mezcla se introduce en un pilon,
el cual sirve para machucar o macerar las hojas, y de allí pasa a ser cernida para obtener
28 Díaz, Cristian. Coca de vida, coca de esperanza, coca de paz. Fundación Hemera. Mayo 08 de 2003.
finalmente un polvo fino, cuyo consumo se da a medida que se diluyen dos bolas de masa
de coca que colocan en los pómulos.
La coca es utilizada en el trabajo porque aumenta la agilidad muscular, mitiga la sensación
de hambre e incrementa el calor corporal. Los médicos tradicionales la consumen como
parte del sistema de diagnóstico de las enfermedades. Actúa como vehículo para alcanzar
altos estados de concentración y de comunicación con antepasados y otros seres
sobrenaturales. Eso quiere decir que la utilización de la coca a la manera indígena, puede
llegar a ser útil como alimento y sobretodo como un estimulante esencial, que no genera
adicción sino óptimos resultados al agilizar el pensamiento, la oralidad y la memoria.
B. EL TABACO
“El Creador es la planta de tabaco y todos nosotros somos sus ramas”
Liberato Kudirueamena (Ñuesillama). Anciano Uitoto, clan Hormiga Arriera29
Hace unos 2.000 años, los nativos americanos usaban el tabaco como medicina, como
alucinógeno en las ceremonias religiosas y como ofrenda a los espíritus que adoraban.
Actualmente, hay más de 70 especies de tabaco, 45 de las cuales son originarias del
continente americano.
Desde su primer descubrimiento hasta aproximadamente el inicio del siglo XVIII, el uso
del tabaco estaba restringido a las prácticas shamánicas del conjuro y la curación, y era por
lo general objeto de tabú para el común de la gente. Luego a través del devenir histórico de
las culturas amerindias, estas lo fueron incorporando cada vez más en sus rituales e incluso
29 Pedraza Torres, Hilario. Ambiente, cultura y espíritu: una mirada intencional a lo invisible. Bogotá, julio de 2003
se fue fusionando con otras plantas sagradas. En el continente americano se le encuentra
entre tribus del extremo septentrional de los Andes, en Colombia y Venezuela y en ciertos
lugares del noroeste amazónico.
El tabaco que se utiliza en el mambeo, se consume en forma de cigarro o de manera
semilíquida denominada ambil. El ambil es una especie de gelatina o jalea gruesa y negra
que se obtiene a partir de la cocción de hojas de tabaco que dura varias horas e incluso
hasta días. El producto es espesado añadiendo algunas veces almidón de mandioca
(Manihot esculenta Crantz) o de arrurruz (Maranta arundinacea L) La pasta es guardada
de diversas maneras, envuelta en hojas, tubos de bambú, cáscaras de nueces, pequeños
cántaros y en la actualidad, botellas de vidrio y tarros de lata o plástico. Bien guardado, el
ambil se conserva durante varios meses antes de que deba ser reemplazado por uno más
fresco.
El ambil es puesto en la boca sumergiendo un dedo o extrayendo una pequeña cantidad con
una espátula o uña del dedo y frotándola sobre los dientes, las encías, o la lengua. Aunque
se consume solo, el ambil es a veces ingerido simultáneamente con otros productos del
tabaco. “Algunas tribus de la Montaña los lamen en conjunto con la coca (Erythroxylum),
ayahuasca (Banisteropsis caapi) y posiblemente otros alucinógenos”30. Entre las
comunidades indígenas y sobre todo las amazónicas es muy común la unión de la coca y el
tabaco; l mismo tiempo que mambean consumen el tabaco sagrado que a su vez es
mezclado con otras sustancias.
C. LA MALOCA
30 http://www.antro.uu.se/acta/sample_significado.html. El significado cultural del uso de tabaco en Sudamérica. Por Johannes Wilbert.
“Esta casa grande es la Mujer, la mujer de sabiduría, allí colocando sus cuatro extremidades sobre la
tierra, aquí está el Utero, donde se acrisola la vida, donde se recrea la vida, allí están sentados los
ancianos, en el Mambeadero”31
En un amplio porcentaje de las comunidades indígenas de Colombia aun se conservan las
grandes casas llamadas malocas. Allí viven un grupo de personas pertenecientes a una
misma familia emparentadas unos con otros, como los abuelos, hijos, padres, nietos, tíos,
etc., donde se desarrollan actividades lúdicas y se transmite el conocimiento. Cada
integrante de la familia cuenta con unas funciones: hay un cantor, un chamán, un
preparador de coca y aprendiz de la tradición, así como las hijas célibes y otros conjuntos
de parientes.
La maloca es considerada un templo que alberga un microcosmos, ya que es un espacio
espiritual que se alimenta diariamente por medio de danzas y rituales orales, como el ritual
del mambeo o ritual de la palabra; en el que se convoca a los hombres que hacen parte de
la comunidad.“Es la arquitectura simbólica del cosmos en la que se controlan y canalizan
todas las energías del universo por medio del Ritual de la Palabra. Es el escenario donde
se imparten los conocimientos para formar el Ser a imagen de Su creador. Es sitio de
oración y curación, de alimentación espiritual y material. Allí los vivos descansan en paz y
los muertos viven en la palabra de la tradición. La maloca simboliza el útero de la madre
porque allí se gesta la vida, y su puerta de salida la vagina, porque quien sale, ha
renacido”32
El dueño o el jefe de la maloca es la máxima autoridad de la misma, esa autoridad está
basada en el saber tradicional y en los tipos de rituales que promueve.
31 ? Daza Antonio. El Sendero de la Palabra, artículo en el libro: La Maloca (Casa Grande). Jardín Botánico de Bogotá. 1998. P. 101 –102.
32 Pedraza Torres, Hilario. Ambiente, cultura y espíritu: una mirada intencional a lo invisible. Bogotá, julio de 2003
D. EL BANQUILLO
“Si una persona carece de «criterio fijo se dice que 'no tiene banco', 'no sabe sentarse"»;
así se dice, también, de alguien que«no encuentra lugar para reflexionar, que es
inestable y desconfiable (...) El banco es, pues, el símbolo de la estabilidad y la
sabiduría»33
Para las comunidades indígenas que practican el mambeo, el banco (rairaibiki) es uno de
los elementos materiales más importantes en este ritual, puesto que no es visto solo como el
“pedazo de un tronco” que sirve para sentarse y descansar en el, sino que el banco también
es visto como un elemento de reflexión, de pensamiento, que soporta no solo el cuerpo
físico sino también soporta el saber y el conocimiento, no solo de un individuo sino
también el saber y la tradición de una maloca, de una familia y de una comunidad.
En el ritual del mambeadero, la ubicación de los banquillos esta establecida bajo ciertos
parámetros. En los cuatro costados de la maloca, son ubicados cuatro bancos cuyos
ocupantes son los encargados de realizar una especie de vigilancia interna. El banco del
dueño o el jefe de la maloca esta ubicado frente a la entrada principal de la maloca,
mientras que los bancos de los hombres sobresalientes deben estar situados en un costado
diferente, para poder proteger la maloca. En cada costado se ubica una banca larga donde se
sientan los niños, las esposas y las personas invitadas. Los demás bancos se sitúan en forma
de círculo o semicírculo, teniendo como referencia el banco del jefe de la maloca. También
cabe señalar que debido a que no existe una participación directa de las mujeres en el ritual
del mambeadero, estas se reúnen en la parte posterior de la maloca, y desde allí prestan una
cuidadosa atención al tema que los hombres están mambeando.
Los hombres que están sentados sobre los banquillos generalmente adoptan una postura
erguida, su cabeza generalmente esta agachada, direccionando su mirada hacia el piso, los 33 Pineda, Roberto. Los bancos taumaturgos. Departamentos de antropología universidad de los andes y universidad nacional de Colombia.
brazos se apoyan sobre sus muslos y sus manos están entrelazadas. Las personas que no
están sentadas en los banquillos, se sientan apoyándose en sus talones. El sentarse en un
mambeadero es sinónimo de concentración, de reflexión y de escucha para poder tejer el
pensamiento y el saber. «Sentarse quiere decir lamer tabaco, mambear coca, poner
cuidado al corazón y afuera»34
E. LA CAHUANA
La cahuana, además de la coca, es el símbolo del mambeadero que representa por
excelencia la mujer. La cahuana es el jugo que se extrae de la yuca dulce, una planta que es
altamente ritualizada, ya que su función en el mambeadero consiste en endulzar la palabra
cuando esta se va tornando fuerte o dispersa.
La cahuana es preparada por las mujeres que aunque están situadas en la parte posterior de
la maloca, no participan del mambeadero, ellas básicamente están muy atentas de la palabra
que se va tejiendo y su participación se limita además de solo escuchar a la elaboración de
esta bebida. Sin embargo, cuando la mujer de mas conocimiento se da cuenta que la palabra
de los hombres que están en el circulo del mambeadero se ha desviado, les lleva una totuma
con cahuana, esto simbólicamente es un llamado de atención en el sentido de que deben
revisar su palabra porque no esta bien direccionada dentro del principio ritual, así que la
cahuana endulza la palabra, la mantiene en su centro y en su pleno nivel espiritual.
F. EL MITO
34 Echeverri, Juan Álvaro-Candre Kinerai, Hipólito. Tabaco frió, coca dulce: palabras del anciano Kinerai de la Tribu Cananguchal para sanar y
alegrar el corazón de sus huérfanos. Santa fe de Bogota, Colcultura 1993.
En las culturas indígenas, el mito, es un elemento por excelencia didáctico, el cual sirve
para entender las enseñanzas que se desean transmitir de generación en generación. En el
se encuentra el origen de todas las cosas, su significado y función de cada una de ellas. Es
un elemento de mucha riqueza y de carácter multifacético, que se lleva al mambeo para
iluminar la palabra de consejo y orientación frente a los problemas que hay en la
comunidad.
La tradición se gesta en el mito, ya que este expresa la esencia de los elementos y
comportamiento adecuados con ellos. En el caso del mambeo remitirse al origen condiciona
el fin de la practica, así como la comprensión de cada uno de los procesos comunicativos de
estas reuniones.
Ya que la tradición indígena, es plenamente oral, el mito se ha conservado durante siglos de
esta forma, pasando de generación en generación demostrando ser una pedagogía única y
eficiente, que ha sabido mantener un gran patrimonio cultural e histórico dentro de la
cultura indígena de nuestro país.
El mito es esencial cuando se mambea, pues el método de enseñanza en esta practica es
completamente conformado por mitos. Cuando se mambea sobre algo en una asamblea
indígena, se utiliza el mito como ejemplos para exponer o resolver una situación, así como
cuando alguien ha cometido alguna infracción a las reglas de la comunidad, se utilizan
mitos como enseñanzas correctivas a las personas en cuestión, esto con el fin de cumplir
con uno de los propósitos esenciales del mambeo, que es no señalar ni juzgar a nadie.
En el caso de los grupos indígenas, aun es el eje que conecta el origen con el futuro, ya que
es también una filosofía, el conocer estas historias genera pensamientos y entendimientos
que ayudan a mantener el orden social y de vida, sin que decaigan en cultos religiosos.
MITO SOBRE EL ORIGEN DE LA COCA 35
Después de las inundaciones, no quedo nada porque todo fue barrido por el agua; solo
existía un hombre llamado Buinaima. El, al verse solo, buscaba la manera de restablecer la
humanidad que había desaparecido del mundo donde existiera tiempo atrás; porque él sabia
que antes de las inundaciones hubo gentes buenas que poblaron la tierra y habían
desaparecido desde el castigo de Juziñamui.
Buinaima se trasnochaba mucho haciendo invocaciones a Juziñamui, pero la inteligencia no
le daba más allá de donde él quería y el esfuerzo le causaba mucho sueño. Fue así como
buscó la manera de vencer el sueño y para que se le abriera la inteligencia comenzó a
indagar.
Buinaima comenzó a tostar hojas de varias matas, como de maraca (Theobroma bicolor
H.B.) y cacao (Theobroma cacao L.), ñame (Dioscorea alata L.), ortiga o pringamoza
(Urera baccifera L.), yuca (Manihot spp.) y otras de monte. Después de tostar se puso a
pilar, luego a cernir en una talega fabricada con tela de corteza, y luego se puso a mambear
en polvo. Con eso pudo dominar un poco el sueño, pero no le valía nada, porque no le abría
la inteligencia y no encontraba lo que buscaba cuando hacia invocaciones.
Al ver que no le servía de nada, buscó por la orilla de los ríos la coca-de-la-boa y con ésta
pudo ver un poco y la sabiduría le estaba llegando y con eso seguía haciendo invocaciones
y aguataba el sueño. Ya el espíritu le conversaba por medio del sueño pero no le revelaba
todavía aquello que él quería.
Entonces le nació una niña y le puso el nombre de Búinaiño, que quiere decir Madre de los
hombres. Esa niña fue la coca. Así llegó; ahora vamos a ver cómo se vio la mata.
La niña iba creciendo. Cuando estuvo grandecita fue con la mamá a la chagra. Cuando
llegó, se sentó sobre un palo, en la mitad, se sacudió y peinó los cabellos y dejo caer unas
liendres. Sembró así la coca porque ella sabía que eso era lo que faltaba a su padre.
35 URBINA, Fernando. Las hojas del Poder. Universidad Nacional de Colombia. Bogota, 1992.
Fue de esta forma como nació la coca. La niña fue la dueña de la coca, por eso nosotros
cuidamos la coca como cuidar a una hija; si maltratamos la planta nos enfermamos.
Ella, al volver al otro día, se dirigió al lugar sembrado y noto que había nacido una matita.
Muy contenta se puso la niña porque vio crecer lo que el mundo necesitaba para combatir el
mal y tener al mundo sano y a la gente honrada; pero ni la mamá ni el papá sabían por qué
estaba tan contenta pues la niña no decía cuál era el motivo de su alegría. Era un secreto
que no podía revelar a nadie hasta que ella viera vencer el mal.
Al volver por la tarde llegó a la casa con alegría y dijo al papá:
-Papá: hazme unos canasticos para yo cargar.
Y el papa le contestó:
-Bien hija, los haré para que ayudes a tu mamá a traer yuca.
Terminado el canastico se lo dio a la niña y ella se puso muy contenta y al otro día se fue
con la mamá para la finca al lugar donde estaba la coca; allí encontró la mata con tres hojas.
Ella las cogió y las puso en el canasto. Por la tarde regresó con la mamá a la casa, con la
coca dentro del canasto, y le dijo al papá:
-Papá: hay que poner la olla más grande y tostar la cosa que te traje. Te he visto comer coca
que no se debe comer, porque de esas hojas sólo comen los animales. De hoy en adelante
mambearás buena coca y veras y aprenderás muchas cosas, porque es un don de dios para
salvar la humanidad.
Con estas palabras Buinaima se puso muy contento. Colocó en el fogón la olla y cuando
estaba bien caliente le preguntó a la niña:
-¿Dónde está la coca?
Y la niña contestó:
-Al pie del pilón que tú manejas y en el canasto que tú me hiciste.
Rápidamente buscó la coca pero no encontró sino tres hojas desconocidas y dijo:
Aquí no hay sino tres hojas. ¡Que es esto para semejante olla! Mas vale poner una chiquita
en lugar de una tan grande.
Y dijo la niña:
- No desconfíes y ponte a tostar el nombre de Juziñamui nombrando a toda la gente que
existió en el mundo, así: la coca que comía Bora, ¡Venga aquí! La coca que comía Okaina
¡Venga aquí! La coca que comía Gidone, ¡Venga aquí! …
Y así siguió nombrando todas las cocas. Así fue como Buinaima comenzó a tostar, y
cuando tostó bien ya estaba llena la olla. Fue el primer milagro de la coca, que con tres
hojas se lleno la olla.
Después pregunto Buinaima que mezcla se ponía y ella dijo que fuera a la quebrada, que
allí había un palo de yarumo (cecropia spp.), que la hoja seca se quemaba y la ceniza se
debía mezclar con la coca pilada.
El papa fue a buscar las hojas; pero en el lugar indicado solamente encontró un gavilán
grande. Volvió a la maloca sin nada, y la niña le dijo:
esa es la hoja, no es ningún animal, agarra una vara y ¡bajala!
Volvió el papa hizo como le había indicado la niña y trajo la hoja. Así fue. El hombre
comenzó a comer la coca buena. Ya el hombre se sentó mas firme y busco lo que quería. Y
encontró. Y comenzó la invocación a Juziñamui. El señor le dio el poder para dominar el
mal en la tierra. Se presento el espíritu, le revelo todo y le dijo:
tú puedes recobrar lo perdido; lo que tanto has buscado. Lo encontraras. Ya con esa buena
coca comenzó a pensar para que todo saliera bien en el futuro.
Buinaima vivía en su maloca siempre invocando a Juziñamui este le revelaba todo lo que el
deseaba. Comenzó a hacer bailes de frutas (Yuai) para aumentar las gentes que venían
naciendo.
Cuando ya hubo mucha gente llego la envidia sobre Buinaima. Resulta que se supo que
Buinaima mambeaba coca y venían gentes de todas partes para conocer y mambear la coca.
Había en ese entonces un capitán de grupo. Ese capitán se llamaba Búruziema (30); el llego
a saber y mando a uno de sus “huérfanos” por la coca. Este se fue bien tranquilo creyendo
que la traída era fácil. Cuando llego donde Buinaima, como a las 8 de la noche, dijo:
Tío: estas?
Buinaima le contesto:
si, estoy.
Luego el concertado dijo:
mi capitán me mando a llevar coca.
Contesto Buinaima:
si, yo tengo coca, buena coca.
El concertado, pensando que ya le iba a dar, se quedo muy contento. Entonces comenzó
Buinaima a contar todas las historias del mundo hasta la madrugada y por último dijo:
- pues yo no soy el dueño de la coca: la verdadera dueña es mi hija, la que esta dormida en
esa hamaca. Si vienes a llevar entonces tendrás que llevártela a ella. No debes afanarte; si
quieres puedes ir a dormir con ella hasta que amanezca y mañana se van.
Convencido el hombre al ver a la muchacha tan bonita, se quedo. Ya cuando el fue a
dormir, ella se levanto y s fue a bañar. El permaneció en la hamaca de la muchacha y se
quedo dormido.
Ya ese día se fue la muchacha a la chagra, de nuevo, con la mama y trajo mas coca.
Ese mismo día el captan de los Buru, al ver que no llegaba su “huérfano”, mando otra
condición. También llego con las mismas palabras, como la anterior y Buinaima la recibió
de la misma manera. Así fue mandando mas y mas comisiones y todo el que iba no
regresaba pues se quedaba en la casa de Buinaima amañado y oyendo los cuentos y
consejos que dictaba. Buinaima se volvió como un maestro de escuela, hasta que se quedo
sin personal el capitán de los Buru. Ya todo el personal estaba al lado de Buinaima.
Búruziema, por ultimo, resolvió ir solo en busca de su personal y coca, entonces le dijo a la
mama que se quedara en la casa cuidando hasta que el volviera. Ella le dijo que no fuera
por que todo su personal había ido y no había vuelto. Sin embargo el le replico que se iba y
que regresaría dentro de cuatro días, y se fue en busca de su gente.
A los dos días llego a la casa de Buinaima y lo encontró rodeado de su personal, oyendo los
cuentos. Uno tostaba las hojas de coca, otro las pilaba, otro quemaba las hojas del yarumo
para obtener la ceniza que otro mezclaba con la coca pilada, y uno mas cernía la mezcla
mientras que todo el resto del personal contestaba las preguntas que hacia Buinaima.
Llego el capitán de los buru y dijo:
-Tío: estas?
Buinaima contesto:
Si, estoy.
Vengo por tus cosas y por mi gente.
Dijo Buinaima:
Si, yo tengo, ahora lleva.
Comenzó a hablar Buinaima con Búruziema y este preguntaba a todos.
A lo último Buinaima dijo que aquel que se llevara a la hija tenía que ser un hombre muy
capaz de todo. Así tuvo durante tres días con sus noches sin descansar a Búruziema. Ya sin
comer, el capitán de los Buru se enflaqueció. Buinaima por ultimo sintió lastima y le dijo:
- no tengo ninguna coca. Si quieres puedes llevarte a mi hija, porque ella es la duela de la
coca. Pero te aconsejo que vayas a jugar con ella por el camino, no vayas a mirarla. Ella es
muy juguetona y “tentativa”. Cuando llegues a tu casa puedes hacer lo que quieras con ella
de lo contrario no.
Fue así como, a los cuatro días, el papa dijo a la hoja que se alistara para irse con el hombre
que venia a llevarla. Alisto todo y se fueron. Búruziema viajaba en canoa. En ese entonces
tomo el nombre de Juma.
Ella por el camino iba jugando, haciendo tentación y el le decía que no molestara, pues
tendría tiempo en la casa para jugar. Al aproximarse a la casa se le olvido el concejo del
suegro y creyéndose seguro volteo a mirar. Cuando miro nuevamente hacia el frente, ella
se tiro al agua y regreso a la maloca de Buinaima diciendo que si ese hombre la venia a
llevar de nuevo, no iría mas con el pues la había tratado muy mal.
Juma, creyendo que ella iba detrás de el, se fue a la casa donde su mama le esperaba. El
volteó a ver cuando llego y ella ya no venia; regreso a la canoa, tampoco estaba ni se veía
por el rio abajo. Regreso a alcanzarla y no pudo. Donde ella iba poniendo las manos
quedaba la coca verde por todos los ríos, por todas las lomas. El siguió buscándola hasta
que llego de nuevo donde el suegro. Llego, vio la muchacha y dijo:
Suegro, yo vine a llevar esa muchacha que se ha devuelto.
Ella insistía en no ir. Por ultimo Buinaima dijo:
Yo no tengo más hijas. Ya te llevaste la única y la trataste mal, no cumpliste mi concejo.
Juma, furioso, dijo que si no entregaba a la hija era porque el propio Buinaima la quería
para mujer. Se puso a lanzar maldiciones. Entonces el cacique termino echándolo de la
maloca con ayuda de sus concertados. De todas manera Juma se quedo escondido por ahí.
A media noche, después que Buinaima acabo de hacer, mando que regaran los afrechos
afuera diciendo:
¡Abuelo: para usted! Esta es su parte.
Entonces Juma cogio los afrechos, se los restregó en las canillas y se fue a su casa.
Cuando llego a la maloca no encontró a la mama. Ella estaba en la finca llorando por el hijo
que no volvía. Al no verla en la casa, maldijo a la mama que esta se volvió en Tupida un
gavilán que anda haciendo “tapias” y el se convirtió en garza, andando por las orillas de los
ríos.
Por su parte Buinaima escogió la gente para enseñarle bien, así: coloco aparte a dos
hombres bonitos mientras que a otros dos los encerró debajo de la olla grande porque eran
muy feos. A los demás los maldijo, así: a un animal verde lo echo afuera ese se llama
Jeruki, era un pájaro, el que cernía la coca y como le caía polvo encima quedo de ese color;
a uno de los que comía demasiado lo volvió Iyípuitiño (hormiga arriera) y al otro Amuiyíkí
(libélula); por eso son cachetones. A los dos más bonitos les enseño bien, mientras que los
otros permanecían presos debajo de la olla. Por ultimo les hizo preguntas. Meí, que es un
pajarito de color azul, no le contesto nada. Godovie que es un pajarito de color verde,
tampoco le contesto nada. Entonces les dijo:
Como son tan brutos andarán por la selva sin saber (decir) nada. Entonces le abrió a
Júayima y este le dijo:
A mi no me enseño nada, ¿Qué puedo yo contestar? Solamente hablare como loco.
Volvió y abrió a otro, a Zírogoma, también conocido con el nombre de arrendajo (casicus
spp). Este dijo:
a mi no me enseño nada; me tenia encerrado y diré que hablare como los picaros.
A estos dos, Buinaima los felicito y les dio el poder de remedar toda clase de voces.
Fue así como se conoció la coca. Con ella se hace bailes y trabajos y sirve para cualquier
enfermedad y para cuidar a los hijos, pero no para hacer mal a nadie. Fue un concejo de
Juziñamui.
TERCERA PARTE
1. USANDO LA PALABRA CON CORAZÓN EN BOGOTA
“Para llegar a conocer lo que nos rodea primero hay que conocerse a si mismo”, es una de
las premisas de varias corrientes filosóficas e idealistas, incluso la cosmovisión indígena
esta regida por este principio. En los contextos urbanos no damos mayor importancia en
resolver o por lo menos tratar de resolver esta pregunta, tal vez interfieren asuntos como los
roles que cada uno desempeñamos dentro de un núcleo social, también están factores como
la inmediatez, la búsqueda de posesiones materiales, el caos, la envidia, el no respeto por el
otro, entre otras tantas cosas. A diferencia de nosotros los citadinos, los pueblos indígenas
están mucho más cerca de la respuesta, la respuesta al quien soy. Esa respuesta es buscada
a través de diferentes medios, entre ellos sus rituales tradicionales. Algunos de esos rituales
han venido incursionando en la ciudad, lo que ha llevado a que muchas personas que están
en busca de esa gran respuesta a la pregunta del ¿Quién soy? se acerquen a la búsqueda de
esa respuesta en primera medida y luego a aclarar un poco acerca de su origen y a la
búsqueda de sus raíces. “Hace dos décadas no existía conciencia histórica en el colectivo
social ni en los practicantes de las disciplinas sociales sobre la larga tradición de
presencia indígena en Bogotá. Desde entonces, el panorama del conocimiento, de la mano
de los procesos que han acompañado al reconocimiento, se ha transformado de manera
notable”36
Un periodo que abrió el camino para la incursión de prácticas tradicionales indígenas en la
ciudad, se dio cuando en la Alcaldía de Bogotá estaba Antanas Mockus y posteriormente
Paúl Bromberg. El director en ese entonces del Jardín Botánico Hilario Pedraza, había
tenido numerosos encuentros y experiencias con comunidades indígenas, eso lo llevo
pensar que seria una buena oportunidad para empezar a realizar intercambios culturales
entre el hombre de la ciudad y el hombre indígena; por lo cual remitió algunas invitaciones
a diferentes sabedores y mamos de varias comunidades indígenas para realizar algunas
charlas en la ciudad. Con el tiempo esas charlas se volvieron mas frecuentes pero al mismo
tiempo no había un sitio indicado para poder realizar reuniones, ya que por lo general estas
se hacían en auditorios muy grandes. De ahí surgió la necesidad de construir un sitio en el
que estos sabedores se sintieran mas tranquilos y mas a gusto al momento de compartir sus
conocimientos, entonces se opto por la construcción de la replica de una maloca indígena
en las instalaciones del Jardín Botánico de Bogota. Esta se dio en 1998 como parte de un
programa de investigación de Biodiversidad. A partir de esta fecha se fueron creando varios
puntos de encuentro que fortalecían aun más este intercambio cultural y comunicativo
Una de las cosas más importantes de realizar sesiones de mambeo en la ciudad, es que se
presenta como un puente entre las dos culturas y su funcionamiento es una manera
dinámica de conocimiento mutuo del mundo de la ciudad y las culturas indígenas.
El llamado “hombre blanco” o de ciudad no tiene muchas dificultades para participar y
acoplarse a una dinámica como el mambeo, tan solo tiene que respetar los principios
36 Zambrano, Martha. “Contratiempos de la memoria social: reflexiones sobre la presencia indígena y en Santa Fe y Bogotá”. Universidad Nacional
de Colombia.
básicos del ritual como los son la de mantener una actitud de respeto, escuchar, prestar
atención, estar concentrado y tolerar el discurso de los demás, además de aplicar o de
convertir en acción o en hechos la palabra que se tejió en la sesión.“Las distintas formas
del discurso han sido testigos de las variaciones sociales entre los actores sociales como en
los grupos; esto significa que el discurso es influido por las características de los cambios
culturales. Así, "narrar", "cumplir una orden", expresar cortesía", o "cambiar de tema",
por citar ejemplos, se pueden hacer de modos diferentes dependiendo de los valores,
normas, relaciones sociales, o instituciones y la forma que adoptan o tienen determinados
contextos socio-culturales”37. En las sesiones de mambeo que se efectúan en la ciudad
asisten estudiantes y docentes en su mayoría de humanidades, antropólogos, filósofos o
simplemente curiosos que han encintrado en el mambear la vía en busca de su
autoconocimiento.
Para algunos indígenas como Walter Morales de la comunidad Uitoto Muruy, ya estaba
predestinado que llegaría el tiempo en el que se sentarían el indígena y el hombre blanco
para mambear y así efectuar un acercamiento comunicativo y social entre ambas culturas,
precisamente como la que se da hoy en día con la incursión de varios rituales como el
mambeo en la ciudad y la apropiación y práctica de algunas personas de la ciudad. Sin
embargo para el Filosofo y Antropólogo de la Universidad Nacional Fernando Urbina, no
están de acuerdo con la “prostitucion” o “comercializaron” como el lo denomina, de estas
practicas tradicionales indígenas en la ciudad, asegurando que tales tradiciones no tendrían
el mismo beneficio y no cumplirían con sus objetivos en la ciudad al no ser efectuadas en
su contexto natural y al no tener las personas de la ciudad la misma capacidad de
entendimiento, dedicación y respeto que los indígenas al momento de practicarlas; además
agrega que lo fundamental está en aislarse y convivir con estas comunidades en su
contexto autentico para entender realmente lo que se esta haciendo en tales rituales. .
37 Silva, Omar. El análisis del discurso según Van Dijk y los estudios de la comunicación. Razón y palabra. Revista electrónica – abril-mayo 2002
Aun así, rituales como el mambeadero, convoca cada vez mas personas que se acercan por
curiosidad o por convicción, ya que no necesariamente el ritual de la palabra se efectúa en
las malocas ubicadas en sitos aledaños a la ciudad cargados de historia muisca, como
Sesquile, Gachancipa, Cota y Tabio; este ritual también es practicado en universidades
como la Universidad Externado, donde se realizan continuos estudios indígenas en las
ramas de sociología y antropología y están las sesiones de mambeo de la Universidad
Nacional de Colombia, donde surgen los mambeaderos con facilidad, compuestos
especialmente con la presencia de estudiantes indígenas, docentes y alumnos inicialmente
de las carreras de humanidades y artísticas, o también de visitantes ajenos a la institución.
Estas sesiones se pueden apreciar con mucha facilidad gracias a las amplias zonas verdes de
la ciudad universitaria, que cuenta con el entorno brindando cierta tranquilidad. Igualmente
algunas sesiones de mambeo son realizadas en casas y apartamentos, entre citadinos e
indígenas residentes en la ciudad.
Por otra parte, la incursión de algunas practicas tradicionales indígenas en la capital aunque
de forma lenta y reservada se viene efectuando desde los años setenta, por medio de la
integración de indígenas y académicos, haciéndose mas notoria con los surgimientos de las
escuelas de antropología en algunas universidades públicas, lo que permitió un mayor
acercamiento entre la academia y nuestras culturas aborígenes.
Una de los objetivos mas importantes, para los impulsadores del mambeo actual en la
ciudad y sus alrededores, es hacerle entender a la gente de la región que el origen de ellos
es indígena, y que deben valorar las sabias tradiciones que allí hubo alguna vez y que por
supuesto deben retomarse, pues tierras como Cundinamarca y la Sabana de Bogotá fueron
territorios indígenas.
Al mambeo en la ciudad, se integra gente de toda clase de ideologías, credos, culturas y
etnias, normalmente se mambea sobre algún tema que las personas que integran el circulo
quieran aclarar o profundizar, o bien trayendo algún invitado, en fin, se hacen reflexiones
sencillas sobre las experiencias de cada día, se charla sobre la vida. Se podría decir
entonces que se presenta un “Consumo Cultural” por parte de las personas que mambean.
En este aspecto, es importante retomar el concepto de Consumo propuesto García Canclini,
que puede resultar aplicable en particular para este caso en el consumo de sustancias
psicoactivas. En ese sentido, Canclini define Consumo como "... el conjunto de procesos
socio-culturales en que se realizan la apropiación y los usos de los productos" es decir que
el consumo es algo más que un comportamiento superficial, el consumo además de ser un
comportamiento que aporta a la construcción de una identidad, es un lugar en el cual se
recrean significaciones y sentidos grupales, por ejemplo en el caso del mambeo el repartir
la coca y el repartir el tabaco tiene un significado especial para cada una de las personas
que hacen parte del circulo. En ese orden de ideas, García Canclini continúa afirmando que,
el consumo puede ser entendido desde por lo menos cuatro racionalidades: una racionalidad
económica, una racionalidad socio-política e interactiva, una racionalidad que involucra
aspectos simbólicos y estéticos, y una racionalidad integrativa y comunicativa de una
sociedad. ¿Pero como podría llegar a impactar la practica del mambeo en la vida cotidiana
de las personas que vive en la ciudad?
Sea donde sea, en cualquier parte, tejer la palabra de vida tiene los mismos principios y el
mismo proceso, pero no se puede negar la evolución que ha tenido en la ciudad, pues se ha
transformado y apropiado para las necesidades del contexto urbano. Cada quien recoge su
discurso de vida y lo lleva al mambeadero, allí encuentra no solo un puente oral sino
también un puente de signos que forman un complemento extraordinario para permitir que
en unas cuantas horas ese discurso cambie, se apropie y se interprete otro desde una visión
mas profunda como lo es la indígena. “Van Dijk plantea que si queremos explicar lo que es
el "discurso", resulta insuficiente analizar sus estructuras internas, las acciones que se
logran, o las operaciones mentales (procesos cognitivos) que ocurren en el uso del
lenguaje. En este sentido es necesario dar cuenta que el discurso como acción social
ocurre en un marco de comprensión, comunicación e interacción que a su vez son partes de
estructuras y procesos socio-culturales más amplios”38
Cabe señalar, que un elemento que se transforma en la ciudad, es la figura del sabedor o del
anciano, es decir quien encabeza las sesiones de mambeo y ayuda a mantener el orden
dentro de la misma. En la ciudad, esta situación es mucho más sencilla. En los
mambeaderos de Bogotá el papel de sabedor lo realizan indígenas residentes en la ciudad
junto a aquellos que conocieron personalmente esta actividad en territorios aborígenes. Sin
embargo, se mantiene igual el hecho de que si se necesita indagar o enterarse sobre algún
tema al respecto, se invita a quien tenga el conocimiento del mismo para que lo exponga de
la mejor manera ante el círculo y luego responda las inquietudes de los participantes. En ese
caso esa persona hace el papel de sabedor.
El cuidado y los estudios del medio ambiente y la ecología también forman parte de los
temas mas tocados en las sesiones de mambeo, de la misma manera temas científicos
actuales como la medicina, la veterinaria, la agricultura, la genética y la bioética, ya que los
grupos indígenas tienen interesantes códigos de conducta hacia la naturaleza y su
conocimiento del trabajo con la misma. Incluso, algunas veces se ha mambeado sobre la
posibilidad de trasladar el mambeo a las aulas de clase. ¿Seria esto viable?
El funcionamiento de las sesiones de mambeo en la ciudad cumple prácticamente con el
mismo protocolo; se presenta la cabeza del conversatorio quien sería el sabedor o dueño de
maloca, a su alrededor por ambos lados los mas antiguos del grupo, como lo harían los
miembros de una comunidad pues su posición esta dada para repartir elementos como la
coca y el ambil, junto a comidas y bebidas que se compartan como la chicha.
38 Silva, Omar. El análisis del discurso según Van Dijk y los estudios de la comunicación. Razón y palabra. Revista electrónica – abril-mayo 2002
En general, las sesiones de mambeo que se realizan en la ciudad, difieren a las que se
realizan en los territorios indígenas en aspectos como:
En una comunidad indígena el procesamiento de la coca en mambe y el del tabaco en
ambil se efectúa en horas de la mañana, para que estos elementos sagrados estén listos al
finalizar la tarde y así poder ser consumidos en horas de la noche en el ritual de la palabra.
Normalmente en la ciudad se compran estos elementos ya preparados a indígenas que los
traen desde el Amazonas o la Sierra Nevada. Muy pocas personas por no decir que ninguna,
se dedican a crear su propia “chagra” o su propio cultivo, quizás debido a la dificultad que
hay en la ciudad o en sus alrededores para estos procesos.
Podría correrse el riesgo que la palabra que se teja en un contexto urbano, sea una palabra
vacía y banal, puesto que luego de participar en una sesión de mambeo cuyo principio es
hacer de la palabra una obra, las personas retomarían sus roles sociales, llevando un estilo
de vida acorde a su rol, olvidando o dejando de lado la esencia y el espíritu que busca
construir por medio del mambeo. El mambeadero es la expresión de una pequeña
comunidad y una comunidad que está interconectada permanentemente como sucede en un
contexto indígena. La ciudad establece otro tipo de vínculos, de relaciones distintas donde
son más amplias, más dispersas. Esto quiere decir que la comunidad indígena está viendo
los efectos del mambeadero, de lo que se habló anoche hoy se está viendo la obra. En ese
sentido hay grandes diferencias, en la ciudad se conceptualiza más lo que se habla, pero
difícilmente se pone en obra, mientras que en una comunidad indígena es casi una ley
acompañar la palabra de la acción.
Como ya se señaló, en las comunidades amazónicas el mambeo se hace normalmente
durante toda la noche, en el día la comunidad mambea cuando es indispensable hacer una
reunión por algo de interés general, o un problema que requiere rápida solución. En el caso
de la ciudad, los mambeaderos suelen ser espontáneos, como los que surgen en las
universidades, hay muchos que en realidad se hacen de día, aunque las personas que ya
tienen esta práctica como parte de su vida, programa reuniones en las noches durando hasta
el amanecer.
La participación de la mujer en el mambeo entre indígenas se limita a elaborar la cahuana
que es el jugo de la yuca dulce para ofrecerlo en las sesiones. La razón por la que no son
activas participes, es por que en estos grupos, la mujer crece muy unida y conciente
siempre de su naturaleza (femenina), ubicadas en labores que solo son para ellas, por lo
cual hay conceptos de hombres y conceptos de mujeres, mientras que en el entorno de los
blancos la palabra está fusionada. Para los indígenas la coca es femenina y el tabaco es
masculino por ende la mujer es coca y el tabaco es hombre, como la mujer es creadora de
vida, tiene muy consiente su papel y no necesita de mambear coca ya que tiene muy claros
sus conceptos, mientras que la mujer en la ciudad tiene que aclarar y construir un concepto
femenino, pues su mundo está totalmente unido a el de los hombres, ese es el motivo
principal por el que hay mujeres de la ciudad que hacen parte de esta costumbre, se
reconocen que ellas son coca, que son mujeres, que tiene una naturaleza que las diferencia
de los hombres y que no deben tratar de ser como ellos.
En las malocas de los territorios indígenas, normalmente una sesión se abre y se cierra con
música, esta también aparece durante los intervalos al concluir un tema, o cuando se hace
un alto para reflexionar sobre un concepto recién expuesto. El caso en el contexto urbano
no es la excepción, son principalmente los jóvenes aquellos que se encarguen de que la
música esté presente en sus malocas o sitios de mambeo, el gusto musical es una de las
razones mas poderosas por la cual los jóvenes se sienten atraídos para ir a sentarse en un
mambeadero. La música es la que convoca a una reunión, es la invitación tanto para los
nuevos y desconocedores como para los que sean mamos, el ingrediente musical se
mantiene muy vivo, puesto que muchas personas que se integran saben interpretar un
instrumento musical, si lo cargan consigo en el momento de una reunión se integraran a lo
que sonará entonces. Aunque el hilo musical son los ritmos indígenas, principalmente
instrumentos de viento o percusión, a ellos se acopla una gran variedad de otras clases,
como las cuerdas e instrumentos clásicos, sonajeros e incluso cantos y movimientos vocales
de los que se encargan especialmente las mujeres. Como lo hace Michel Zavala, artesano,
estudiante de la Nacional, mambeador de origen Muisca quien carga su “quena” a todas
partes, desde que aprendió a dominar este instrumento Andino de viento, ha podido
amenizar con agradables sonidos una gran cantidad de momentos, algunas veces
acompañados por los cantos de su esposa. En el caso de las universidades, tanto las
reuniones como la música son algo muy relajante, tras la salida de una jornada de clases o
investigaciones, igualmente para alumnos como para maestros.
Un gran complemento de la maloca urbana, vienen siendo las artesanías, específicamente
los tejidos, pareciera extraño, pero de la misma forma en que las manualidades y la
jardinería mejoran la tranquilidad de las personas en doctrinas orientales como el Zen, el
Yoga, o Feng Shui, lo mismo sucede cuando se hace tejer en los mamos.
Para participar en un mambeadero, se debe dejar de lado el estrés, el afán, y la
intranquilidad, una persona que mambea normalmente aprende a tejer porque este ejercicio
aclara su mente, sus ideas y su comportamiento, para los indígenas, es ver simbólicamente
como funciona la maloca, ese ejercicio se puede realizar en cualquier momento, puede ser
durante el momento de agrupación, (que no entorpece la situación en lo absoluto) como en
tiempo libre. Ahora, es curioso por qué los hombres de la ciudad están tejiendo, una
explicación es por que esta actividad antiestrés puede ser llevada a cualquier parte, aclara
los pensamientos de todo lo que se habla durante el mambeo igual que los pensamientos del
presente de cada quien, es también una conexión elemental con las capacidades artísticas de
la persona, especialmente aquellos que nada han tenido que ver con el arte, y finalmente,
ayuda a comprender muchas cosas sobre las mujeres, ya que el tejido en el mundo ha sido
una tarea común mente femenina.
Rituales indígenas como el mambeo puede que no sean para todas las personas y sobretodo
en contextos tan grandes y dispersos como la ciudad, aun así, este tipo de dinámicas están
abiertas a todos y su incursión y apropiación por parte de personas que quieren abrirse de
corazón y convertirse en mejores personas hace que sea una herramienta para profundizar
mas en esa humanidad que cada uno lleva por dentro y en nuestras formas de comunicarnos
con los demás, formas que por el mismo entorno en que vivimos hemos dejado a un lado.
El debate esta abierto, dinámicas indígenas o no indígenas para rescatar la palabra y la
comunicación están por doquier, lo importante es no dejarlas pasar, y aunque como podría
ser obvio los indígenas no están del todo tranquilos con la incursión de sus tradiciones en la
ciudad, porque como dicen ellos, todo lo que llega al blanco tarde o temprano termina
dañándose, ojala el ritual de la palabra sea la excepción.
CONCLUSIONES.
El mambeadero no ha sido ni estudiado ni comparado oficialmente con alguna escuela de
comunicación, y tan solo se le ha estudiado desde la antropología.
Pero cuando vemos como este proceso genera tantas cosas a el interior de las comunidades
indígenas, no se pude negar que puede servir como punto de concertación y de
organización social en nuestra sociedad.
El mambeadero es el punto de partida y formador de las sociedades indígenas, tradiciones
culturales ágrafas, pero plenamente comunicativas desde su lenguaje, la tradición oral en la
cual se mantiene toda una cultura y una enseñanza, es una demostración de la mas sencilla
y útil forma de comunicación.
Es la esencia natural de hablar y ponerse de acuerdo, aquello que siempre se ha buscado,
concertar, cuando surgen los constantes inconvenientes entre las personas, que pude ser
aplicado dentro de las bases sociales, como la familia, la empresa, la academia, bueno sería
inclusive la incursión del mambeadero en las instituciones, como el congreso, los concejos
municipales etc.
Lo mas importante que le otorgaría el mambeo a nuestra sociedad, es la concertación,
ponerse de acuerdo, así conservar la individualidad de las ideas del sujeto, frente a las cada
vez mas masificadas de los medios de comunicación.
El ejercicio de la palabra misma de cada ser humano, que piensa que contribuye que opina,
que construye, que vive lo que ocurre a su alrededor y reacciona frente a eso, mas no una
conciencia universal que se está vendiendo pero que no es clara, y es muy incierta hacia su
objetivo, ya que no es claro, la palabra de vida, es una forma de estructurar desde lo
individual hacia lo mas grande; la sociedad humana.
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