piedad filial en la eneida de virgilio y otros textos latinos

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JIMÉNEZ LÓPEZ, Antonio AlfonsoLiteratura latina clásica. Filología Hispánica

Proyecto de innovación docente Virtus inter ParesUniversidad de Jaén, 2010/11

1. Introducción. ¿Qué somos? ¿Quiénes somos?

2. Piedad filial en la literatura latina clásica.

Representación simbólica.Representación literaria.Representación artística.

3. Conclusiones.4. Bibliografía.

Para entender la raíz de la Piedad filial reflejada en los textos latinos, reflexionemos sobre el ser humano - desde un punto de vista biológico

- sobre sus características sociales.

1.1. ¿Qué somos?

Superreino Eucariotas: nuestro material hereditario está en un núcleo celular rodeado por doble membrana.

Reino Animal de entre los 6 reinos de la naturaleza. Subreino Eumetazoos Bilaterales: las células de nuestro

organismo están organizadas en tejidos, y tenemos simetría bilateral.

Superfilo Deuterostomados porque nuestro aparato digestivo se abre en una cavidad que no deriva del blastoporo embrionario.

Filo Cordados porque tenemos una estructura cordada dorsal que le protege el aparato digestivo y le da rigidez cuerpo.

Subfilo Vertebrados porque esta estructura se organiza en forma de columna de vértebras.

Intrafilo Gnatostomados porque tenemos mandíbulas articuladas.

Superclase Tetrápodos porque tenemos cuatro extremidades.

Clase Mamíferos: aseguramos la viabilidad de la cría con aporte nutricional a través de glándulas mamarias.

Subclase Teria porque el embrión humano se desarrolla en el interior de un útero.

Infraclase Placentaria: el embrión se nutre a través de una estructura placentaria con alantoides.

Superorden Eucontoglires y Orden Primates. Suborden Haplorrinos, no tenemos membranas en torno a la

nariz. Infraorden Simioformes: por nuestra postura corporal. Parvorden Catarrinos Euarcontas: por tener los orificios

nasales abiertos hacia abajo. Familia Homínidos: por ser primates bípedos. Subfamilia Hominiae junto a los otros grandes primates: los

gorilas, chimpancés y australopitecos.

Tribu Hominini, que tiene dos Subtribus: la Pan de chimpancés y bonobos, y la Hominina o Humana.

Sólo sobrevive un género, el Homo, y de nuestro género sólo nuestra especie no se ha extinguido aún, la sapiens;

De nuestra subespecie se extinguió, la H. sapiens idaltu o anciana, sólo queda la H. sapiens sapiens

Biológicamente significa “humano capacitado para reflexionar acerca de lo que conoce”.

1.2. ¿Quiénes somos?

Evolución de nuestro comportamiento: • Teoría del desarrollo psicosocial humano del

psicoanalista y escritor Erik Ericson (1902-1994).

• Estudia la formación de las virtudes básicas del hombre en 8 etapas.

¬ Confianza básica vs. Desconfianza. (0 a 18 meses). Sensación física de confianza que proporcionan los padres. Virtud: esperanza, la "creencia perdurable en la posibilidad de realizar deseos fervientes".

d Autonomía vs. vergüenza y duda (18 meses a 3 años). Ligada al desarrollo muscular y el autocontrol del cuerpo. Virtud: voluntad, la “decisión inquebrantable de ejercer la libre elección, así como el autocontrol".

e Iniciativa vs. Culpa (3 a 5 años). Actividad, imaginación y locuacidad. Virtud: propósito, "el valor necesario para vislumbrar y perseguir metas valoradas".

¬ Laboriosidad vs. Inferioridad (5 a 13 años). Hacer cosas junto con otros o de planearlas. Sentimiento de laboriosidad. Virtud: eficacia, “el libre ejercicio de la destreza y la inteligencia para la realización de tareas".

Búsqueda de Identidad vs. Difusión de identidad (13 a 21 años). Búsqueda de identidad. Crisis que reavivará los conflictos en cada una de las etapas anteriores. Virtud: fidelidad, "la capacidad para mantener lealtades libremente otorgadas".

e Intimidad frente a aislamiento (21 a 40 años). Posibilidad de estar cerca de otros, tanto con tu amante, como con tus amigos, compañeros y vecinos. Su virtud es el amor.

Ð Generatividad frente a estancamiento (40 a 60 años). Crianza de los niños. Equilibrio apropiado entre la productividad y el estancamiento, entendiendo la productividad como una extensión del amor hacia el futuro. “Crisis de la mediana edad” se pregunta “¿Qué estoy haciendo aquí?”. Virtud: cuidado.

Es en esta etapa en la que se centra el trabajo de investigación de virtudes en los textos latinos que a continuación se expondrá, concretamente sobre la PIEDAD FILIAL.

t Integridad frente a desesperación (60 años hasta la muerte). Integridad con un mínimo de desesperanza. Distanciamiento desde un sentimiento de inutilidad social y biológica. Virtud: sabiduría, la “integridad de la experiencia vital que cada generación transmite a la siguiente”.

Nos caracterizamos por elementos orgánicos: el desarrollo embrionario, la forma del aparato digestivo y su espina dorsal, nuestra postura corporal bípeda y los usos de las extremidades que esto nos permite, o por la capacidad de reflexionar y conocer.

Las características constitutivas del H. sapiens sapiens se ven reducidas en ancianos, un individuo por sí mismo no podría asegurarse su propia subsistencia.

Para asegurar la viabilidad, cuyo acumulo de conocimientos y procesos que los más jóvenes necesitan, comunidades simples o familiares, o estructuradas y complejas desde el punto de vista biológico como las instituciones.

2. Piedad filial.

Edad adulta de un individuo coincide normalmente con el de la senectud de sus progenitores.

Los hijos ejercen de padres de sus padres.

En la primera etapa de vida de un individuo y en la última, necesario el entorno familiar para mantener la integridad afectiva y biológica, ya que tanto en una como en otra somos incapaces de realizar la mayoría de funciones.

Cicerón: piedad es “lo que nos empuja a cumplir con nuestras obligaciones con nuestra patria, con nuestros padres y parientes; y la gratitud es el sentimiento que nos hace recordar y devolver los favores recibidos, los honores y los gestos de amistad”.

Para Cicerón la Piedad no sólo es la mayor virtud, sino la madre de todas las demás.

2.1. Representación simbólica.

Representación simbólica de la piedad filial: la cigüeña.

• Cumple con la ley natural de alimentar a sus mayores cuando éstos no pueden hacerlo por sí mismos.

• Numerosas fuentes literarias grecolatinas, además de la posterior emblemática renacentista y barroca en latín, que se ocupan del ave piadosa. Plinio: “Ciconiae nidos eosdem repetunt, genetricum senectant

invicem educant” (nat 10,63). Isidoro (orig 12, 7, 17). Erasmo (en Mutuam offici vicem rependere), que señala por otra

parte (quam pericles mortales negligunt).

Fig. 1. “Gratiam referemdam”. Alciato. Emblemata, 1531.

Nos da una mejor descripción de esta alegoría Sebastián de Covarrubias (Tesoro de la lengua castellana o española, 1611).

“Por otra parte vemos ser la cigüeña símbolo de la piedad, por cuanto en la vejez de sus padres se conduele dellos, y los trae de comer al nido, y los saca a volar sobre sus alas; y a esta causa pienso yo que los hebreos le dieron el nombre הסידה ,hasidah, que vale tanto como piadosa, del nombre הסד ,hesed, misericordia. A este propósito hace Alciato un emblema, con el título «Gratiam referendam» (fig. 1), que viene a este propósito. La pintura es una cigüeña que lleva a otra medio desplumada sobre sí;

Aerio insignis pietate ciconia nidoInvestes pullos pignora grata fovet,Taliaque exspectat sibi munera mutua reddi,Auxilio hoc quoties mater egebit anus,Nec pia spem soboles fallit, sed fessa parentumCorpora fert umeris, praestat et ore cibos. Tomado de los hieroglíficos de Oro Apolline Niliaco.

Y esto ha estado tan recebido que esta piedad que el hijo usa con su padre viejo, llamaron antipelargia,

π , ἀντι ελαργεῖν proverbialis figura, promerentibus gratiam in tempore referre, vicem rependere, a ciconiae natura sumptum, quae pelargus graece dicitur, quaeque eumdem nidum repetit, et genitricis senectam educat. Haec Lex. grae. Entre las demás leyes de Solón había una que declaraba por infame al hijo que no alimentaba a su padre necesitado, con estas palabras: «Si quis parentes non nutrierit, infamis esto». Y todas las leyes tocantes a esta materia, las llamaron por la mesma razón pelárgicas”.

2.2. Representación literaria.

Eneas es uno de los ejemplos literarios latinos en los que se refleja el amor a los padres.

Virgilo describe en la Eneida (ene lib. II, 705-711; 721-729) a Eneas huyendo de Troya en llamas, llevando consigo a hombros a su padre Anquises, que a su vez lleva en sus manos a los penates y los sacra de su patria, seguido por su hijo Julo, también nombrado como Ascanio, y su esposa Creúsa.

“dixerat ille, et iam per moenia clarior ignis705

auditur, propiusque aestus incendia volvunt.«ergo age, care pater, cervici imponere nostraeipse subibo umeris nec me labor iste gravabit;quo res cumque cadent, unum et commune periclum,una salus ambobus erit. mihi parvus Iulus 710sit comes, et longe servet vestigia coniunx”.

“Eso dijo, y ya por la muralla se oye el fuego 705

más claro y más cerca se revuelven las llamas del incendio. “Vamos entonces, padre querido, súbete a mis hombros, que yo te llevaré sobre mi espalda y no me pesará esta carga;pase lo que pase, uno y común será el peligro,para ambos una será la salvación. Venga conmigo 710 el pequeño Julo y siga detrás nuestros pasos mi esposa”.

“Haec fatus latos umeros subiectaque colla 721veste super fulvique insternor pelle leonis,succedoque oneri; dextrae se parvus Iulusimplicuit sequiturque patrem non passibus aequis;pone subit coniunx. ferimur per opaca locorum,

725et me, quem dudum non ulla iniecta movebanttela neque adverso glomerati examine Grai,nunc omnes terrent aurae, sonus excitat omnissuspensum et pariter comitique onerique timentem”.

“Dicho esto, me pongo una tela sobre mis anchos hombros 721

y el cuello agachado y encima la piel de un rubio león, y tomo mi carga; de mi diestra se cogeel pequeño Julo y sigue a su padre con pasos no iguales;detrás viene mi esposa. Avanzamos por ocultos caminos 725y hasta el aire me asusta ahora a mí, a quien todos los griegosjuntos enfrente ni todas sus flechas podían dar miedo, cualquier ruido me alerta de igual modotemiendo a la vez por mi compañero y por mi carga”.

Virgilio otorga al héroe emblema de Augusto los más altos honores:

“No hubo otro más justo que él por su piedad ni más grande por sus hazañas guerreras” (ene, I, 544).

Este poema épico fue encargado a Virgilio con motivo del triunfo de Octavio en el año 29 a. C., que toma el título de Augusto. Debía narrar la fundación de Roma por designio divino, en lugar de por Rómulo y Remo, por Eneas, padre del fundador de la familia Julia, a cuyo linaje pertenecía el emperador.

La misma escena troyana es descrita por Ovidio en la Metamorfosis (13, 624-626):

a su padre lleva en sus hombros, noble carga, el héroe Citereio. 625De tan noble carga, ese, piadoso, elige (…)

Otro ejemplo de filis pietas es el de los hermanos de Catania.

Reflejado en el poema épico didáctico de inspiración virgiliana Aetna (vv. 605-645), de la Apendix Vergiliana.

En la erupción del Etna, mientras la lava arrasa todo, algunos se esfuerzan en salvar sus bienes preciados como oro y armas, mientras que Anfínomo y su hermano Anapias, al ver que sus ancianos padres se detienen en la huida vencidos por el cansancio, deciden cargar a hombros con ellos, de forma que hasta las llamas conmovidas se retiran a su paso:

“Para ellos las únicas riquezas, su padre y su madre; este botín atrapan y se apresuran a salir por medio del fuego, ofreciéndoles él mismo su confianza. ¡Oh, piedad, la más grande de las virtudes y, con razón, la más segura para el hombre!” (v. 630-34)

Claudio Claudiano describe (Carmina minora, 39) una estatua erigida a los héroes frates catanenses.

Nombra a Eneas y a los hermanos de Argos Cléobis y Bitón.

También se ocupan de los excelentes hijos Higinio, Posidonio, Estrabón, Pausanias, Séneca, Valerio Máximo y Marcial, cambiándoles en nombre según el autor

Valerio Máximo dedica uno de sus facta memorabilia a dos hijas que amamantaron una a su madre y otra a su padre, encarcelados y condenados a morir de hambre.

Después cita a los hermanos de Argos y después a los de Catania.

Séneca en De beneficiis plantea la cuestión de si los hijos pueden proporcionar más beneficios a los padres que éstos a su progenie.

Señala los gestos de Eneas y el de los jóvenes sículos.

Denomina afortunado perdedor al anciano derrotado por sus hijos en beneficios.

2.3. Representación artística.

Son abundantes las representaciones de la alegoría de la Piedad Filial, portadora de enseñanza moral.

Monedas grecorromanas y medallas, tanto con el motivo de la cigüeña como el de Eneas, Anquises y Ascanio.

En ánforas, pinturas, mosaicos, gemas y lucernas, además de en multitud de grupos escultóricos.

Repetían el motivo del foro Augusto de Roma: la Piedad Augusta fue erigida por Octavio Augusto como su propio emblema descrita por Ovidio (fast. 5, 563-4):“Hinc videm Aeneam oneratum pondere carumEt tot iuleae nobilitatis avos”.

Fresco de Pompeya. Museo de Nápoles.

Boca de Ánfora.

(¿Griega?: arcaizante, letras).

Eneas llevando a su padre.Enócoe de figuras negras. Louvre, París.

Denario. 108-107 a.C. Herennia. Piedad diademada con Anfínomo llevando a su padre.

Grupo escultórico de Eneas (Museo Nacional de Arte Romano de Merida).

Eneas saliendo de Troya. Federico Barocci, 1598.

Eneas, Anquises y Ascanio. Bernini, 1619.

La Piedad (Eusebia en Grecia) recibió culto y sacrificios en Atenas, al igual que en Roma.

Aparece representada como una mujer con las manos oferentes, o bien que hace sacrificios con un braserillo en una mano donde quema perfumes, y un cuerno de la abundancia que presenta a unos niños que están a su lado, en ocasiones con una cigüeña a sus pies.

El catolicismo ha recogido y mantenido esta iconografía en sus imágenes.

Denario. Acuñada el 196-211 d.C. JULIA DOMNA. Piedad en pie junto a un altar alzando las manos.

Imperio Romano. Teodora. 1/2 centenional.

La Piedad en pie sosteniendo a un niño en sus brazos.

Piedad. Miguel Ángel, 1500.

Virgen de la Piedad. Gregorio Fernández. S. XVII.

3. Conclusiones.

Esperanza de vida al nacimiento (2010): • 78,66 años en los hombres • 84,65 en las mujeres. • una persona que alcance los 65 años esperaría

vivir, de media, 18,17 años más, si es hombre, y 22,10 más, si es mujer.

Fuente: Instituto Nacional de Estadística.

Edad mujer española a la maternidad (2010): 31,2 años

Cuando una persona anciana vuelve a necesitar atención, sus hijos y familiares tienen alrededor de 50 años, en plenitud de su actividad laboral.

Ciclo económico actual necesita a los dos componentes activos en el núcleo familiar en cuanto ingresos, principalmente para sufragar gastos relacionados con la vivienda.

Esta estructura desplaza a los ancianos, portadores de conocimientos y procesos que los individuos en formación necesitan, en obstáculos económicos para la familia.

SEO/Birdlife el 3 de febrero del 2011, día de San Blas, la población de cigüeñas en España sigue aumentando.

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