mujeres: poética del agua
Post on 10-Mar-2016
226 Views
Preview:
DESCRIPTION
TRANSCRIPT
MUJERESPoética
delagUa
Fotograf íasMarina Aoiz Monreal
MUJERESPoética
delagUa
MUJERESPoética
delagUa
Fotografías de Marina Aoiz Monreal
Mujeres. Poética del agua
© de los textos, las autoras
© Marina aoiz Monreal, de las fotografías
PriMera edición: Marzo de 2011diseño y Maquetación: M. aoiz
iMPresión: gráficas lizarra
carretera de tafalla, kM. 131132 Villatuerta. naVarra
dl.: na-1553-2011
este libro se ha realizado con la ayuda de las siguientes entidades: crAnA (centro de recursos aMbientales de naVarra); Patronato MuniciPal de cultura del ayuntaMiento de tafalla; ayuntaMiento de olite; ayuntaMiento de Milagro; y MancoMunidad de Mairaga.
A las niñas que recorren cada día kilómetros de tierras áridas
para llenar un cubo o una garrafa de agua, sin poder asistir a la escuela.
A las niñas que escuchan atentas el murmullo de las fuentes, manantiales, arroyos o riachuelos
y comprenden su mensaje.
A las niñas que consideran al agua “maestra del lenguaje fluido” como escribió Bachelard
y aprenden con deleite palabras sonoras: acequia, aljibe, alberca, alcorque, jofaina, noria, albañal…
A las niñas que cuando llueve, siempre meten los pies en los charcos.
A las madres, hijas, tías y abuelas que saben “mojarse”.
PRESENTaCIÓN
MUJERES. Poética del agua
Este libro se suma de una manera poética a la reflexión sobre la importancia del Agua realizada en la ciudad de Tafalla, así como en otras 16 localidades, a través del proyecto Sud’eau. El proyecto Sud’eau, “Gestión Local y Participativa del Agua y los ríos del Sudoeste Europeo”, inscrito en el Programa Operativo de coope-ración Territorial del Espacio Sudoeste Europeo, SUDOE InTErrEG IV B, desarrolló como objetivo la mejora y sostenibilidad para la protección y conservación del medio ambiente y el entorno natural. El proyecto puso en marcha experiencias demostrativas a nivel local, encaminadas a las buenas prácticas de referencia para la gestión sostenible del agua. Estas experiencias llevadas a cabo en el marco de procesos participativos, aportaron cauces hacia el aprendizaje colectivo en la aplicación de medidas de gestión sostenible, para poder ser transfe-ridas a otras regiones europeas.
apostar por la regeneración del agua
El día 18 de mayo de 2010 el “consejo Internacional de las Trece Abuelas Indígenas” invitó a todas las personas interesadas, a realizar un acto de sanación de las aguas: “Para caminar sobre la tierra como lo hi-cieron nuestros ancestros hemos de reconocer y honrar todo aquello que vive con nosotros. Las antiguas enseñanzas nos dicen que el agua es la medicina más poderosa sobre la tierra. Sin este elemento puro la vida se acabaría. Hay una correlación directa entre la salud de nuestras aguas y la salud de todos los seres vivos que beben de ellas. Somos conscientes del daño que hemos ocasionado al tratar de cambiar la manera en la que funciona la Madre Tierra y también sabemos que la sanación de las aguas es nuestra responsabilidad. Estamos reuniéndonos para aunar la fuerza,
la sabiduría y la comprensión que necesitamos para combatir las energías negativas que afectan a las vías fluviales de todo el mundo. El reto es llegar a los millones de personas afectadas por la escasez y la contaminación de las aguas que no tienen acceso a los medios de comunicación”. Aquel 18 de mayo el “consejo Internacional de las Trece Abuelas Indígenas” unió corazón e intención para devolver la pureza, la abundan-cia y el equilibrio a las aguas, para todas y todos los habitantes del plane-ta. no hubo una única forma de practicar la ceremonia de la sanación de las aguas. Todas las acciones hechas desde el corazón sincero y amoro-so, según las Abuelas Indígenas, tendrían un efecto beneficioso. Las Trece Abuelas celebraron ceremonias en estos lugares: en la selva Africana de Gabón, lo hizo la Abuela Bernadette reviento; en los Grandes Lagos de Estados Unidos, la Abuela rita Blumenstein; en la loca-lidad de Huautla de Jiménez (Oaxaca, México), la Abuela Julieta casimiro; en el desierto del Sudoeste de Estados Unidos, la Abuela Mona Polacca; en Francia, la Abuela Flordemayo; en Black Hills de Dakota del Sur (Esta-dos Unidos), las Abuelas Beatrice y rita Long Visitor Holy Dance; en Mon-tana (Estados Unidos), la Abuela Margaret Behan; en río Hood de Oregón, la Abuela Agnes Baker Pilgrim; en Himalaya (nepal), la Abuela Aama Bom-bo; en Amazonas (Brasil), las Abuelas Maria Alice campos Freire y clara Shinobu Lura; en canadá, la Abuela Tsering Dolma Gyaltong realizó una ceremonia tibetana; y en nueva Zelanda, en un lugar llamado Mahia, Ao-tearoa, la Abuela Pauline Tangiora. En nueve lagos se practicaron ritos de purificación: Lago Tahoe, california; Lago Titicaca, Perú; Lago MacKay, Australia; Lago chad, Áfri-ca; Lago Bikkal, rusia; Lago Kissyk Kul, Kyrgyzstan; Lago Geneva, Suiza; y Lago Superior, Minnesota. Las Trece Abuelas agradecieron la participación de todas las per-sonas que de una u otra forma se unieron a la convocatoria, recordando que el acto se hacía por las próximas siete generaciones, por nuestra Ma-dre Tierra y nuestra Abuela Agua. Tras el desastre generado en la central nuclear de Fukushima, a raíz del terremoto y el tsunami ocurridos en Japón, el investigador Ma-saru Emoto, llamado “Mensajero del Agua”, invitó a la humanidad a rezar
el 31 de marzo de 2011 por la regeneración del agua. Sus investigaciones a lo largo de más de dos décadas le han llevado a revelar que el agua está influida por diversos factores como la música o la consciencia de las personas. Los ritos de sanación se pueden observar desde la racionalidad y concluir que no sirven para nada pero también desde lo más profundo del espíritu donde se intuye que todo gesto por la preservación de la vida es valioso. En esta sociedad tan avanzada técnicamente de la que formamos parte, no nos falta preocupación sobre el estado del agua. Las institucio-nes promueven campañas encaminadas a acrecentar la responsabilidad y percibir el valor del elemento esencial para la vida pero a veces olvida-mos lo más atávico y misterioso. Desde una posición de observadora, consciente de la importancia del agua limpia como elemento de supervivencia para nuestra especie, he querido participar con este trabajo, también como madre y abuela, en los ritos de sanación. Para ello, he seleccionado fragmentos de poemas alusivos al agua de una buena cantidad de mujeres y los he acompaña-do de fotografías (aunque sólo sea aprendiz de fotógrafa) tomadas en diferentes ríos, fuentes y océanos. Los versos elegidos nos conducen a una dimensión interior del agua invitándonos a sentir gracias a la expre-sión de mujeres de lugares variados y de distintas épocas. El agua, igual que la palabra, fluye. El agua limpia, revitaliza, esculpe paisajes, modela la tierra, viaja permanentemente. El agua precisa libertad y respeto como elemento vivo. En este libro, imagen y palabra se unen para ofrecer una Poética del agua. Mi sincero agradecimiento al crAnA (centro de recursos Am-bientales de navarra), organismo impulsor de este trabajo; a todas las mujeres que han escrito a lo largo del tiempo inspiradas en el agua; y a las instituciones o entidades que han apoyado la edición del libro.
Marina Aoiz Monreal
agUadulce
Y es siempre el jardín de lilas del otro lado del río. Si el alma pregunta si queda lejos se le
responderá: del otro lado del río, no éste sino aquél.
Alejandra Pizarnik
El pájaro con voz de estanque
la música.
Ada Salas
El agua sigue al agualo mismo que la sombra a nuestro cuerpo
y lleva desde arriba con el alma lluviavestida de plata,
y fluye desde abajo en manantiales miles,hacia la fuente, el riachuelo, la laguna,
hasta llenar el valle.
Milagros Salvador
¡Vivamos en el aguanuestro amor encendido!
Ángeles cardona
me sumerjome extiendome enredo
carmen Matute
Si pudiera, el tiempo no tendríalos límites movibles, como el río
ascendería ahora la corriente,ahora la quieta brisa de los sueños.
Gloria Lima
El Portador del Aguay su río celeste…
Yo, viviendo la noche:siempre menor que el ángel,
pero ya centinela.
Un planeta recóndito:mi corazón humano.
Lo descubro, lo pierdoy vuelvo a descubrirlo.
claudia Lars
Oh hija voluntariosa del ríoSúbete móntate en mí
Dánzame bailemos en el sagrado manantial
Zoé Valdés
río incendiado desciende,la deriva es el susurroque viene del fondo del mar.
Menchu Gutiérrez
Decidme, agua, fuego furioso, lluvia del infierno
Blanca Andreu
(…) la vieja canción del agua todavía no nacida
María Zambrano
Los pasos de cristal se hacen de agua.
Eurídice román de Dios
con qué gemido enternecer la rocaque amenaza las fuentes
y los mapas.con qué milagro esclarecer la bruma
que a mis ojos confundela danza el vuelo el brillodel cuervo y de la garza.
Ada Salas
La espuma me salpica como un rocío blancoY el viento me enmaraña el cabello en la frente;
A mi espalda está el verde respaldo del barrancoY a mis pies el gran río de elástica corriente.
Juana de Ibarbouru
¡Qué triste es el acorde fugaz de lo perfecto!
Pero escucha la voz que nacía empozada
de la cueva:franqueamos sus labios de verdines musgosos
y bajamos riendo al manantial oscurode la desolación.
Amparo Amorós
(…) En el manatialDel reclamo de vuestros corazones helados
Brota la ebriedad de las profundidades.Oh río: hundidas en tu abisal
corriente de plata, veo flotarA aquellas grandes diosas de la paz.
Piedra, piedra, llévame allí abajo.
Sylvia Plath
¿Dónde surgió el impulsode agua que busca la llanura sola?
¿Fue en un limo convulso.que nutre y enarbola
rama vivaz y salto de amapola?
claudia Lars
Señor Hojas de Hierbaconstelada de tu boca
súbeme gimiendoabre
que de tu boca se descuelguen peces—riachuelo humilde he de correr torcida—
deja que uno entre en mi bocaruédalo lengua sin huirloasido entre mis dientes
pónlo a hacer ríoslabio adentro
Heddy navarro Harris
Y esta agua apacible que deslumbra…¿Será la voz de la nada redimida?Será la armonía oculta en la penumbrade un dios que en la paz hace la vida?
En su luz el agua está tendida,hacia el reposo almo de la fuenteque mana de la mente hacia las manosy de ella al corazón que la presiente.
Ivonne Ochart
Danzo inmóvil,parada al margen de mí misma.Quietud vertiginosa…Libre de voz y gesto, soy, lejana de todo.¡Soy yo, en mis orillas!
Ernestina de champourcin
si digo agua ¿beberé?
Alejandra Pizarnik
Llovía,pero era en otro mundo. En el nuestro, jardines
de carne florecían, arboledas en ciernes;la rosa de tu vientre contradecía al otoño.
Josefa Parra ramos
La llave de las doce lluvias que nunca llovieron: la de leche, la de té, la de llanto, la de sangre, la de jugo de guayaba, la de calostro, la de cristal, la de perlas, la de sal, la de fuego, la de
saliva, la de espuma de ola.
Susana Barragués
El agua glu glu glauca lame limoglu glu en agua lilial el alhelí aglutina
y agua lila llorandoglu glu (…)
Ulalume González de León
(…) pasar a hurtadillas sin asustar a las aguas…
Marina Tsvietáieva
Aguas de soledadlampos internos de ternura
morada silenciosa donde se posa el rayo.Aguas maternas y sombrías
donde renazco.
Graciela Maturo
nada le pidoa las aguas junto al bosque,a veces esmeralda,a veces zafiro,a veces negras.
Wislawa Szymborska
El “milagro del agua”se repite otra vez
y enciende la mañana.
Ernestina de champourcin
nadie, mi Diospuede salvar al hombredel tránsito del tiempo.
Ese lento morir, desde que nace
con el primer aullido.
Despué viene la fuente de la vida
y luego un río que sólo desembocaen el oscuro mar
de los sargazos.
Silvia Tomasa rivera
Efluvios extraños de vida me atravesabanno supe qué eran
mis manos abiertas recibíanbien, mal, torrentes.
Y un ansia se acreció en mí.Por lo raro, lo extraño
de esa soledad.
Hanni Ossot
El agua en la noche me nombraba,abierto el ojo derecho me hizo muda
y sospechosa por mirar tan lejos.
carlota caulfield
En la mano el color de la rama más alta.
La piedraen el fondo
del agua.
Menchu Gutiérrez
Tu rostro es la piedra del río,canto rodado de un fluir continuoque se acerca al límite del líquido:
líquido-agua, líquido-forma, líquido-espacio.
neus Aguado
río del ansia copia y enamorasu soledad vibrante y conmovida,
mas para ser tu rosa preferidaes intocada rosa trepadora.
claudia Lars
Y el río es como un trámite vigente,y un hombre es como un río,
de la raíz del tiempo al polen más alado,de raíz de raíces, de la sorpresa del mar.
María de los reyes Fuentes
Mi memoria es verdory hojas
y espesura
Mi memoria se yergue frente a míy me contempla
Brota en la palidez de mi desnudocomo ángel doliente
una rama de agua
Mi memoria es un árbol.
María José Flores
Madre, descansa tu miradaLa niña elegirá sus colores
y te llevará a volarde la mano
para que juntascultiven
una y otra vezlo absurdo
lo irreverentedejando que los juncos
absorban los añosy el río
los imbuya entre las aguas
Y que el tiempo evaporela memoria
entre sus manos
Delfina Goldaracena
El pez nada y es bello o comestible.El pez nada y produce espantocuando la superficie líquida habitala zona abisal.
Andrea Luca
En mí los ríos lentosay los ríos heridos
por la aurora del cuerpo
María José Flores
Se han unido las aguascon sus brazos sin forma
y obedecen al devenir inevitable
que no conoce límites.
Milagros Salvador
corre una brisa de invisibles, millaresgotas de agua,
por mi corona de nochey almendra laminada.
Menchu Gutiérrez
EScrIBOpara que el agua envenenada
pueda beberse.
chantal Maillard
Flores amarillas constelan un círculo de tierra azul.El agua tiembla llena de viento.
Alejandra Pizarnik
Miré las aguasy vi su gesto grácil
y vi en mis ojos su miraday ardió el río
con el dardo de amor,y discurría mi cuerpo
con el suyoentre las llamas del agua.
clara Janés
nadie se baña dos veces en el mismo ríola mirada insiste
se desnuda siempre bajo el mismo arbustoolvida el sentido de dejar el cuerpo
al acechosólo así existe
y se baña y se baña y se baña
cristina Doménech
trémulo terciopelo fiel torrentede la hendida pezuña a la alba frente
paces pastos bravíos en el breve
bruñido bronce líquido del vientoama zeus tu dulce movimientovaca sin par en el olimpo leve
Aitana Alberti
(Agua y ternura llueve)
rubí Arana
Profundo amor de tiempo enamorado.compañero del agua, de ternuras sin nombre.
capitán de mis sueñosde mis piernas al alba.
Gioconda Belli
Me he conocidoy me he dado cuenta de mi profundidad
porque constato que estoy en mi superficie.
¿Qué hago aquí?
nADAnADO
¿Y al fondo?Todo.
Pilar González España
Quien lanza su botella a la corriente, tiene la certeza delfuturo que la rescatará.
Quien rompe el vidrio de lo ocurrido conoce y siente susentir; abre su casa y da hospedaje a un presente remoto.Y, al igual que el manantial profetiza los mares invisiblesy se precipita en su búsqueda, es posible que lo dejado
atrás haya percibido señales de lo venidero.Por eso, como un tenaz arroyo, a pesar de los desiertos, las umbrías o los pedregales, la escritura de entonces se
hizo cauce y caudal.Por eso se abrió camino.
Por eso perseveró, hasta que sus riadas nos alcanzaron.
Anna rossetti
¿De qué tentaciones se habla:de la propiedad, del agua?
Deja tus ojos brillantesque fluyan bajo mis manos.
Marina Tsvietáieva
¿Para qué el cauce hondo,si el raudal veloz
con su labio ardienteel sol lo absorbió?
María Olimpia de Obaldía
Y la sed, mi memoria es de la sed, yo abajo, en elfondo, en el pozo, yo bebía, recuerdo.
Alejandra Pizarnik
En el agua, nuestro reflejo temblaba,
desaparecíaal inclinarme para tocarlo.
natasha Trethewey
Pequeña isla soy. Tú me descubres.Tus abejas me invaden y, de pronto
—cera y miel— te me entregotibia, recién nacida.
Luego desapareces y despiertode bruces en la onda olvidada del agua.
Margarita Paz Paredes
También hay hombres en el mundo. A veces lo olvidamos y pensamos que sólo hay mujeres —interminables colinas y llanuras de
mujeres entregadas—. Bromeamos y nos consolamos unas a otras ynuestras vidas pasan deprisa. Pero de vez en cuando, es cierto, unhombre surge inesperadamente entre nosotras como un árbol, y
nos mira ferozmente y abatidas, en riadas, nos envía lejos aescondernos en cuevas y barrancos hasta que se ha ido.
Lydia Davis
Hay lagos en la memoriay en los ojos siete velos.
no te recuerdo —tus rasgosson una página en blanco.
Marina Tsvietáieva
El estanque me devuelve el cielo, las nubescielo y tierra en él se besan
confluyen.
Yo dibujo allí una imagen, la sueñomás no la alcanzo.
Hanni Ossott
Las flores acuáticas exhalan una luz tenue.Sus hojas no quieren que nos apresuremos:
Son redondas y lisas, cargadas de oscuras advertencias.
Sylvia Plath
Tu voz se acostumbra a nuevos paisajesy duerme en mi alma una voz de agua.
neus Aguado
En el río de aquietada lunael cisne refleja su tersura.
Un azaroso amor adolescentese enreda
entre las zarzas de la orilla.
Al paso de los años,el agua apagada
adolece del fuego de las mimbreras galantespero el amor de otoño,
sin ímpetus desorbitados,ha adquirido la templanza
de un vino delicioso.
Marina Aoiz Monreal
agUasalada
Un día, una tarde, tras de muchos días sin sol, lo sentí más que vi en la playa. como una herida ancha, reluciente al sol
en medio de su agua blanca, con más vida que la del mar. Un agua que salía del fondo de los mares. Y cuando llegué a
donde creía que estaría no estaba ya y sólo encontré una huella, una impronta con forma de pez. Era un pez
dibujado que se quedó allí mucho tiempo, pues el agua en la marea lo cubría, lo dejaba con más vida. Era mi secreto, que nunca a nadie revelé y distraía a los visitantes para que no
fueran por aquella parte de la orilla. Luego, un día de eclipse solar, un viento fuerte arremolinó la arena y la alzó hacia el
cielo negro. Y donde estaba el pez quedaron tan solo unas rayas, quizás
una palabra, que luego también se embebió en el agua, dejando una oquedad cambiante, como si fuese creada por un
invisible animal. Y así me he ido quedando a la orilla. Abandonada de la palabra, llorando interminablemente como si del mar subiera
el llanto, sin más signo de vida que el latir del corazón y el palpitar del tiempo en mis sienes,
en la indestructible noche de la vida. noche yo misma.
María Zambrano
sólo una vez lo hicepor debajo del agua
con el romancedesnuda
y el palacio del maracusándome de un robo
los caracoleslos peces
las aguas frías
(mi alma no resiste a tal belleza)
me matanme entierran
pero mi alma sigue viva
Delfina Goldaracena
Lleva entre mary mar
la palabra:exilio del exilio.
Maria-Mercè Marçal
Se me hundió en el mar una isla, otra.
Wislawa Szymborska
Un mar, creedme, necesito un mar,un mar donde llorar a mares
y que nadie lo note.
Francisca Aguirre
Mar sin nombre y sin orillas,soñé con un mar inmenso,
que era infinito y arcanocomo el espacio y los tiempos.
María Eugenia Vaz Ferreira
Mi nombrees una hechicería
de medias lunas vacías.
Aparecióde pronto,
del conjuro del marun día que estaba
triste.
Dlia Mc Donald Woolery
Las aguas del tiempolimaron la roca de mi condena.
Miren Agur Meabe
En la orilla yo siempreen plenitud de interrogantes:
¿Vendrá el maro un collar de planetas
y de soles si…si se lo pido por favor?
Dlia Mc Donald Woolery
Abuela, ¿a qué sabe el mar?El mar sabe a nostalgiacon un poquito de sal.
Martha Madrigal
Te he visto, océanote he galopado
a lomos de un violínde madera pulida
de un potro alabeadodel color del cerezo
y eres, océanoun prado de hierba azul en movimiento.
Blanca Andreu
A mitad de camino entre la mar y el sueloque hace fértil un gesto de vida proseguida,
sobre la arena oscura expuesta al sol, propongoyo misma mi balance entre fruta y olvido.
María Victoria Atencia
Varada invisibleen una barca.
En el fondo abisalnos reflejamos
sin vernos.
Menchu Gutiérrez
El mar me pertenecelo hago pasar entero
entre mis manos ávidas.Lo acaricio, le doy
la única miradasencilla que me queda
la que aún no han manchadoni el miedo ni la muerte.
Ernestina de champourcin
navego confiadapor el mar del otoño
en una barca de metáforas.Aguas adentro
establezco una alianza con las ondas.neptuno se ríe de mí a carcajadas.
Valiente me muestro. El señor de la mar traza la ruta. Yo sigo.
Marina Aoiz Monreal
nos bautizaremos de nuevo con piedras.
Tú no tendrás ya ningún nombrey yo ya no seré Penélope.
no habrá más hexámetros colgando a la intemperie de mi puerta.
Tal vez las mareas rojasno nos produzcan más deseo
sino ternura.
Pero entoncesserá que estamos llegando a la terminación
del barco, del telar y del viajey será bello.
Margarita Leoz
agua de vida
agua viva
Este libro se alumbró al comenzar la primavera de 2011
en Gráficas Lizarra.
L U X F U L G E T I n A Q U A
Este libro se suma de una manera poética a la reflexión sobre la importancia del Agua realizada en la ciudad de Tafalla, así como en otras 16 localidades, mediante el proyecto Sud’eau.
El proyecto Sud’eau, “Gestión Local y Participativa del Agua y los ríos del Sudoeste Europeo”, inscrito en el Programa Operativo de cooperación Territorial del Espacio Sudoeste Europeo, SUDOE InTErrEG IV B, desarrolló como objetivo la mejora y sostenibilidad para la protección y conservación del medio ambiente y el entorno natural. El proyecto puso en marcha experiencias demostrati-vas a nivel local, encaminadas a las buenas prácticas de refe-rencia para la gestión sostenible del Agua. Estas experiencias llevadas a cabo en el marco de procesos participativos, han ofrecido cauces hacia el aprendizaje colectivo en la aplicación de medidas de gestión sostenible, para poder ser transferidas a otras regiones europeas. (…) En este libro, imagen y palabra se unen para ofre-cer una Poética del agua. Los versos elegidos nos condu-cen a una dimensión interior del Agua invitándonos a sentir a través de la expresión de mujeres de lugares variados y de distintas épocas. El Agua, igual que la palabra, fluye. El Agua limpia, revitaliza, esculpe paisajes, modela la tierra, viaja per-manentemente. El Agua precisa libertad y respeto como ele-mento vivo.
top related