el corazón en ese instante. poesía (2015). nayla portas
Post on 24-Jul-2016
216 Views
Preview:
DESCRIPTION
TRANSCRIPT
Nayla Portas EL
CORAZÓN
EN ESE
INSTANTE
P O E S Í A
H E B E L
2
3
Nayla Portas
EL CORAZÓN EN ESE INSTANTE
POESÍA
HEBEL
4
5
HEBEL ediciones Humus | Poesía
Nayla Portas EL
CORAZÓN
EN ESE
INSTANTE
P O E S Í A
6
EL CORAZÓN EN ESE INSTANTE | POESÍA
© Nayla Portas, 2015.
© HEBEL Ediciones
Colección Humus | Poesía
Santiago de Chile, 2015.
www.benditapoesia.webs.com
Qué es HEBEL. Es un sello editorial sin fines de lucro. Término hebreo que denota lo
efímero, lo vano, lo pasajero, soplo leve que parte veloz. Así, este sello quiere ser
un gesto de frágil permanencia de las palabras, en ediciones siempre
preliminares, que se lanzan por el espacio y tiempo para hacer bien o
simplemente para inquietar la vida, que siempre está en permanente devenir, en
especial la de este "humus que mira el cielo".
7
Dejar el alma enganchada en una nube,
el corazón prendido de una estrella.
Volar sentada sobre un rayo de esos que
iluminan la noche.
Y nunca jamás regresar.
N.P.
8
9
Cartas leídas
Hay cartas largas y sin sentido,
hay cartas cortas pero que dicen mucho.
Depende la visión del que las lea y el significado
que les encuentre.
También del momento y la circunstancia.
Hay cartas que parecen no decir nada
trascendental en una simple lectura,
pero que leyéndolas minuciosamente pueden
transmitir los pensamientos más profundos.
Hay cartas que se pierden con el tiempo y que
elegimos no volver a leer jamás,
otras por las que buscamos en cada rincón para
recuperarlas tal cual las habíamos guardado;
pero que están grises, secas, deterioradas,
y preferimos no restaurarlas por temor a que se
quiebren en nuestras manos.
Hay cartas en sobres sin abrir, esperando a ser
leídas;
pero las más antiguas llenan el cajón y no permiten
verlas a simple vista.
Otras están pegadas y requieren de tiempo para
descubrirlas,
pero la prisa de la vida hace que las ignoremos.
Muchas hay perfumadas pero huecas de sentido,
mientras unas pocas sin muchos detalles desbordan
sinceridad.
Hay cartas tristes, y cartas que emiten paz;
algunas son muy fáciles de entender,
10
otras están escritas en idiomas incomprensibles
o simplemente hacen silencio.
Somos cartas leídas que se deterioran en el cajón
ajeno,
o que quizá llegan a mantenerse enteras.
11
Aquella extraña ciudad
¡Estoy perdida! - Exclamó con un grito agudo y
penetrante.
En aquella extraña ciudad la gente parecía tener
rasgos diferentes, los rostros pálidos dibujaban
una enorme sonrisa casi maquiavélica que
parecía haber sido atada como con hilos.
Como huyendo de quién sabe qué comenzó a
caminar por una calle gris y amplia y un tanto
solitaria, haciendo lo posible por esquivar
dichas caras.
Su pulso temblaba, unas pequeñas gotas nacían
en las palmas de sus manos, aun así era
imposible dejar de observar tales extrañas
facciones, y no encontraba explicación
alguna para tanta aparente felicidad
extrema, el solo hecho de contemplarlas le
producía una mezcla de familiaridad pero a
su vez de desconfianza.
Después de deambular por horas el sueño la venció
y cayó sobre un viejo banco de plaza.
Pero lejos de ser un descanso, su expresión tensa
mientras dormitaba era prueba suficiente
para saber que las imágenes de los habitantes
de aquel lugar permanecían en su
inconsciente.
Una molestia sobre su mejilla hizo que sus ojos se
abrieran en un segundo. Y el corazón en ese
instante pareció casi salirse de su pecho.
12
Dos ojos grandes y cristalinos la estaban
observando detenidamente, tal rostro no
asomaba siquiera rastros de aquellas sonrisas
exageradas y abrumadoras, y hasta parecía
transmitirle una leve sensación de paz.
Fue en ese preciso instante cuando descubrió que
no todos los moradores de esa ciudad tenían
iguales características y que la existencia de
al menos una mirada sincera hacía que los
retratos de esos extravagantes semblantes
comenzaran a esfumarse.
Entonces entendió que su paso por aquel
incomprensible lugar no sería en vano.
13
Silueta
No tenía sueño en absoluto, pero hubiera querido
dormir una semana entera y olvidarse de la
existencia.
Me destapé violentamente y casi sin pensarlo
comencé a caminar lentamente por un
sendero estrecho de luces parpadeantes y
solitarias, como cualquier calle de pleno
centro en madrugada.
A mi alrededor rayos y nubes bajas que dificultaban
la visión; mis piernas ya se movían por inercia,
calles y calles que parecían no terminar jamás
pasaban delante de mis ojos una y otra vez.
Hasta que una sombra extraña irrumpió tanta
monotonía. Una sombra singular pero que creí
reconocer aún en medio de tanta oscuridad.
Era esa misma silueta negra, la de todos los
días, la que soplaba mi oído cada vez que
anhelaba conciliar el sueño. No podía verla,
pero podía sentirla, sabía que era ella, lo
sabía.
¡Acá estoy! grité desconsolada, y en ese mismo
instante la tormenta que parecía haberse
extinguido volvió a la carga. Miré hacia el
cielo, y unas gotas cayeron sobre mi rostro
borrando el aroma a sombras y recuerdos de
cajón al menos por un instante. Al bajar la
vista mi corazón comenzó a latir más fuerte
que de costumbre, un haz de luz inmenso
14
partió el asfalto mojado abruptamente, y no
tuve más opción que correr. Sin parar miré
rápidamente hacia atrás, esperando divisar a
lo lejos aquella silueta, y teniendo la leve
esperanza de que hiciera algo por sacarme
de ese terrorífico lugar. Pero otra vez me
equivoqué, como esa primera vez que esperé
algo amable de su parte.
A esta altura ya no sabía si la realidad que estaba
viviendo era un mal sueño de una noche o la
pura verdad, las calles grises y mojadas
parecían ser lo único que mi vista alcanzaba
a vislumbrar.
Algo muy dentro de mi interior me indicaba que
aún había motivos por los cuales continuar
recorriendo esa oscura y desolada ciudad.
Aunque viera lo mismo una y otra vez, y mi
cuerpo se desvaneciera sobre el suelo
húmedo infinitamente, sabía que continuaría
mi camino hacia quién sabe dónde y que
algún día lograría atraparla.
Me caía y levantaba miles de veces, mi alma
estaba aún más desgarrada que mis fuerzas,
apenas podía moverme... mis rodillas parecían
quebrarse, entonces fue cuando me
desvanecí por completo y caí en un sueño
profundo del que nunca jamás nadie hubiera
deseado volver.
15
Viaje de una tarde
Lluvia en la ventana, gotas alborotadas que se
deslizan sobre el vidrio.
Una tarde como pocas, sentada espero la muerte
de un pedazo de mí. Golpean la puerta, me
levanto lentamente y espío por el borde de la
ventana. No logro reconocer al hombre de
lentes y sobretodo púrpura que aguarda
afuera.
Es la tercera vez que apoya su pulgar derecho
sobre el timbre y aún continúo inmóvil. Como
si alguien se hubiera apoderado de mí abro la
puerta con seguridad y un instante de mi ser
se vuela por la ventana.
- Hola, ¿en qué puedo ayudarlo? - pregunté.
- Regalo pasajes. - contestó amablemente el
sospechoso caballero.
- ¿Pasajes? ¿a dónde? - respondí con
desconfianza.
- Pasajes a donde su alma sea capaz de llevarla.
Y no llegué a mover mis labios que me encontré
frente a mi ventana húmeda bañada por la
lluvia.
Una lágrima cae sobre la palma de mi mano y me
incorporo violentamente, como si hubiera
soñado el más terrible de los sueños.
Me dirijo a la puerta sin pensar, y en el escalón de
entrada un papel arrugado que dice
"A donde tu alma sea capaz de llevarte".
16
Me inclino a levantarlo, pero se esfuma de mis
manos y de pronto me encuentro caminando
por una calle de Arabia.
Voy mirando gente, puestos, mis ojos brillan como si
hubiera pertenecido siempre a aquel lugar, y
como si aquella ventana empapada jamás
hubiera existido.
Entro a una casa antigua y chiquita, no puedo
saber con exactitud de donde soy
exactamente, pero me siento en casa. Me
acerco al fuego y un papel cae de entre mi
ropa. Un papel del que leo "A donde tu
alma.." y se quema frente a mis ojos. Y sin
razón mi boca esboza "...sea capaz de
llevarte". Y se abre mi entendimiento como si
un caudal de agua refrescara por completo
mis cinco sentidos. Y me encuentro sentada
sobre una superficie brillante, a millones de
años luz, encendida en fuego,
desintegrándome en completa paz. Y la brisa
del universo desparrama restos de mí en su
perfecta infinidad.
17
Raíces
Dibujan mi ser, raíces del desierto, hojas secas que
esparce el viento entre latitudes perdidas,
donde un pedazo de luna se desprende del
abismo y cae furiosamente entre mis pasos.
Camino lento, me cubro la cara de la arena que
intenta cegarme, es difícil continuar, un
remolino fugaz se acerca velozmente hacia
mí.
Detengo mi corazón por un instante y miro el cielo,
intentado sumergirme en su oscura
profundidad, la luna casi agonizante
comienza a desmoronarse en pedazos de luz.
Un golpe seco de aire en mi rostro me hace
reaccionar, el torbellino está cada vez más
cerca, a mi alrededor las dunas de arena se
funden con el mismo cielo, volviéndose un
paisaje infinito e ilógico, sin sitio posible donde
huir.
En la mitad del infinito un árbol seco, hueco, casi sin
vida. Sus raíces profundas albergan sueños
antiguos de caminantes perdidos, puedo
vislumbrar el reflejo de todos ellos en mi retina
como un sonido gris y asfixiante. La memoria
se transporta, y un retazo de mí que aún se
encuentra encerrado allí, como si alguna vez
hubiera pasado por ese lugar y lo hubiera
dejado olvidado. Me acerco temerosa y
18
enérgica contemplando sus ramas y en un
impulso las despedazo hasta hacerlas trizas.
Caigo rendida sobre la tierra, mis ojos estallan
como manantiales frescos que inundan el
espacio disolviendo estrellas y ahogando
constelaciones.
Puedo ver las raíces que comienzan a cobrar vida,
salen a través del suelo y derraman lágrimas
negras que tiñen todo en sombras. Y cada
tallo que sale a la superficie es una punzada
dolorosamente necesaria.
Y ahí estoy, inmerso en un paisaje eterno, tendido
sobre sombras, arrancando las raíces de mi
alma… con un destello de luz de luna entre
mis pasos.
19
Mix
Cuando solo inercia es el caminar,
y los ojos no ven tanta inmensidad
sentir, soñar, buscar que,
no existe algo tan difícil que
no sea capaz de ser resuelto,
de ser sanado,
de ser limpiado.
Saber,
entender,
que nada es demasiado que no pueda repararse,
que nada es suficiente para conformarse.
Desintegrarse como papel en el agua
al oír el crujido del alma como hojas secas de
otoño
pisoteadas por un caminante distraído.
Contemplando opaco el brillo de la luna
vago sin rumbo por un laberinto de pensamientos
donde no hay paradas de descanso.
Un reloj de arena se quiebra sobre mis pies,
veo a través de los vidrios rotos,
las astillas fueron quitadas,
las cicatrices rememoran en cada paso la
sensación de abismo,
el viento áspero pegando sobre mi rostro
20
en esa línea delgada que divide el todo de la
nada.
Oler el dulce aroma de regresar del vacío,
el dulce sabor de sobrevivir,
es entonces cuando comprendo otra vez
que nada es demasiado que no pueda repararse,
que nada es suficiente para conformarse.
21
Caminando
Siento como la brisa al caminar se va llevando los
vestigios de pensamientos vanos,
de telarañas sin sentido creadas por la imaginación
de un día opaco.
Y por un instante me vuelvo a perder en un mundo
donde no existe nada ni nadie,
donde las sombras se apagan,
donde las luces se ven menos tenues,
donde puedo volar o simplemente existir sin
necesitar nada más.
22
Volar
Subir alto y más alto hasta cruzar la infinidad,
ver todo tan insignificante desde las alturas del
cielo.
Dejar el alma enganchada en una nube,
el corazón prendido de una estrella.
Volar sentada sobre un rayo de esos que iluminan
la noche.
Y nunca jamás regresar.
23
Navegando
La agudeza de un estruendo
anuncia la llegada de un rayo encendido
que deja en blanco el paisaje
por un milisegundo eterno.
Inmerso en un mar gigante y abrumador,
cae fugazmente en aguas profundas sin destino
fijo.
Me agarro fuertemente de él,
pero es imposible retener su brillo,
solo algunos destellos se escurren en las puntas de
mis dedos,
y se caen como gotas fundidas
entre las pequeñas olas púrpura
que acarician mi rostro en medio del más absoluto
silencio.
24
Burbuja
Desearía que la brisa que ahora sopla en mi cara
fuera constante,
que las piedras del camino no me rasparan tanto,
que existiera una manera instantánea de eliminar
ese aroma gris.
Duermo dentro de una burbuja de cristal,
donde cada lágrima congelada se funde con las
paredes,
volviéndola cada vez más impenetrable.
Mis ojos se secan de tanto soñar,
y el cristal firme alrededor se vuelve helado.
Quiero despertar, quiero escapar,
sacar la escarcha de mis huesos,
salir al exterior,
y volar hasta tocar la punta de una estrella fugaz.
25
Aire dorado
Cuando tu mirada fija logra teñir de sombras el sol
de amanecer.
Beber trozos de papel gastado volviéndote neblina,
algunas hojas se enredan en el pelo,
y millares de agujas encuentran su hogar entre las
nubes.
Respirar aire de fuego,
soplar tan fuerte hasta hacer temblar el piso,
cerrar bien los ojos,
inmovilizar los pies y mover la tierra.
Zambullirse en un mar agitado a contracorriente,
absorber algunos restos de aire tan escaso.
Quemar con la lupa una estrella hueca,
juntar pedazos de arco iris y esparcirlos hasta
ahogar de dorado el universo.
26
Lágrima
Una lágrima helada trata de escapar
silenciosamente,
no puede esperar más,
necesita ser libre y
desintegrarse en el aire.
Mis ojos no la dejan huir,
se niegan a que corte con su filo la piel,
se vuelve vidrio,
y de todas maneras corta por dentro.
No queda más que liberarla,
sentir el roce en la mejilla,
dejarla correr hasta disolverse.
Saborear su gusto agrio sin sentido,
no lograr verla, no entenderla.
Se vuelve espesa,
y sigue brotando como manantial seco,
se siente como ahoga el alma,
como empapa miles de imágenes
en un solo segundo.
Y quisiera haberla dejado quieta,
paralizada,
congelándose de un golpe
de aliento luminoso.
27
Estrella fría
Luces, ruido, sombras,
un murmullo ensordecedor sin sentido.
Y trago el silencio,
el ardor me congela,
un grito punzante se asfixia en la palma de mi
mano.
Las palabras no tienen alas,
se pegan en el vidrio,
se disuelven,
intentan despegar,
estallar hasta llover letras.
Un cóctel de piedras en la garganta
que ata hilos de alambre en mis labios.
Camino entre sombras apuradas,
algunas gotas que se disparan
e intentan liberarme por un instante
pasan desapercibidas salpicando mi alrededor
y volviendo todo invisible.
Las palabras se vuelven agua,
saltan en el aire,
hasta mojar de gris cada átomo de oxígeno.
Y mientras voy contando los segundos para quemar
28
mi estrella fría me entrego a un sueño mentiroso
sobre consonantes húmedas.
29
Vidrios partidos
Juntando las piezas de lo que solía ser,
cuando el mundo se veía maravillosamente
brillante
a través de los vidrios de mi universo.
Con una seda blanca comencé a limpiarlos,
mis brazos están exhaustos.
El brillo de la tela oscurece lenta y dolorosamente,
bebo un sorbo de rayos y la soplo hasta el
cansancio
desparramando destellos de luz dorada,
y me quita la respiración pensar que pueden
extinguirse.
Lanzo un pedazo al fuego y veo como se derrite
despidiendo humo color violeta con aroma a
jazmín seco.
Y puedo oír ardiendo los gritos más silenciosos de mi
alma,
aquellos que nadie oyó, y que nadie podría oír
jamás.
30
Capullo
Un capullo espinoso con flores de terciopelo
tiene muchas hojas, miles, demasiadas.
Necesitan deshojarse, arrancarse, pero
se bañan con luces celestes tiñéndose de fórmulas.
De la punta del capullo gotean lágrimas de metal
y se derraman en un río tan agitado
que se hunden en las profundidades,
donde el sonido es agudo, incesante,
y se resbala entre el agua con aroma a un pétalo
perdido,
casi extinto..tan amargo
Un láser que incinere eternamente,
aire y fuego para encenderlo.
Y mientras llueve el alma, una brisa incompresible
que riega la tierra y la humedece un momento
para regresar a la superficie.
31
Cristales
Frío e incomprensión.
y el corazón haciendo un viaje por túneles
desiertos.
Los ojos se pierden en el aire,
y no pueden fijar la mirada.
Un callejón gris que se pasea a toda velocidad
y no me deja frenar nunca.
Me vuelvo sombra e intento escabullirme
por una hendija,
y es demasiado doloroso,
casi inexplicable
nadie puede escuchar,
nadie puede ver.
Cierro los ojos y desaparezco entre cristales.
32
Colores
Sobre una estrella fugaz
vuela un mar de nubes radiantes.
Veo un rayo dorado atravesando el aire,
disolviendo en partículas el sol de mediodía.
Los colores se mezclan, se vuelven uno solo
y se desparraman por toda la habitación.
Gotean por entre medio de mis dedos
y pintan un paisaje blanco de árboles plateados
que emanan aroma a luz fresca.
Un puñado de tierra
que explota en el aire en forma de melodía.
Hojas azules que se materializan entre el viento,
y un sonido intermitente que me transporta hasta
tocar la luna.
33
Acople celeste
Una línea celeste que divide la visión
y se acopla con mis sentidos.
Volar más allá de lo que puedo ver,
sentir tan lejos que un pedazo de estrella se adhiera
a mi alma.
Explotar luces brillantes en mi boca
y soplar en el cielo inundándolo de soles.
Una gota de rayo cae en mi mano seca,
la tomo y pinto el contorno del universo.
Violeta, plateado, azul resuenan en mis oídos
como una canción astral,
y todo alrededor se ve tan mágico.
34
Ceniza roja
Como si el mundo se saliera de mí
y me dejara en una dimensión inerte,
blanca, honda, inespacial.
No hay lugar, no hay sitio donde
pueda caber este sonido.
Encapsularlo y lanzarlo al vacío,
tan lejos como incandescente,
se amplifica y vuela mis tímpanos.
Un mar de triángulos alrededor
donde navega un barco solitario
y se pierde en la inmensidad de la nada
flotando sobre puntas agudas.
Una puerta que se abre en medio del agua,
la extingo de un soplido,
ato la luna a tierra,
y las constelaciones siguen cayendo como ceniza
roja.
35
Agujero en el viento
Que un haz de certeza haga brillar el firmamento
las paredes grises se vuelvan blancas y
desaparezcan en el aire,
el infinito se caiga en tierra y revoloteen destellos
de paz
No existe razón, entendimiento,
solo palabras de metal
Y un agujero en el viento por el que inmoviliza
observar,
y aunque sea por un instante se borra entre tintas
Una tinta transparente en
un pincel de agua que derrita mis manos
La inmensidad que suena en mil palabras,
si el cielo se abriera y una gota de luz
mezclara colores en una canción fresca
La punta de un cometa dorado
se quiebra entre nubes densas,
y un pedazo de firmamento parte la tierra
Una medialuna con alas que despega,
un rayo de mar que la funde entre el viento
36
Nota de cristal
Como por un espejo,
no mirando las cosas que se ven
Entrando a través del vidrio
que se petrifica frente a mi rostro
Un aliento de nube que aclara los sentidos,
y puedo tocar una chispa de vislumbre que me
hace despegar
Vuelo a cielo abierto
y en el borde de una estrella,
una nota de cristal
Daría el infinito por alcanzarla,
tenerla entre mis manos,
y ver tal cual es
37
Fantasía púrpura
Soñando despierta
con un brillo alborotado de luna
que se mezcla entre imágenes secas.
Y tu rostro es el mío,
mis pasos se asfixian lentamente
entre latitudes desiertas
En el hueco de mi mano comprimo una gota de mí
y me derrito entre sonidos de mares.
Una fantasía púrpura
que inunda los astros y parece nunca acabar.
38
Lluvia en mi cabeza
Sintiendo la lluvia en mi cabeza
como un relámpago penetrante
que se hunde en el vacío gris
Necesito que me atrapes y te robes el sentir
Un rompecabezas de color
que tome forma a latidos
Una pieza perdida entre galaxias azules
flota entre estrellas que dejaron de existir
Sensación de lágrimas conocidas,
el miedo que inunda mis oídos con cristales rotos
Y la visión se nubla en rayos de fuego,
entre variables eternas de luces brillantes
39
Paseo eterno
Mar plateado,
hojas de cristal
y una brisa dorada que acaricia mi rostro
Navegar eternamente,
no tocar tierra por siglos
Perder la mirada en una constelación de estrellas
que me conduzcan al infinito
sentarme sobre la luna y contemplar
el universo entero
Sentir que no soy nada,
y que igual puedo escuchar la música suave del Sol
que se pone
Ahora solo quisiera pintar
un cuadro lleno de estrellas
y volar más allá de lo que se ve
40
Estrella de fuego
Mirar el cielo e iluminar los ojos
un momento
Tomar una estrella de fuego
entre mis manos frías y mojar los ojos con su fulgor
Desatar los astros que se esconden
entre sonidos agudos y lanzarlos al vacío
Ponerle alas al alma y dejarla
volar entre galaxias plateadas
Tomar una gota de Sol,
navegar en un arco iris de cristal líquido
Dejar fundir mi corazón entre gemas verdes,
respirar aire blanco y nunca regresar
41
Desatando estrellas
Voy por mi noche,
liberando estrellas
Camino por un sendero de tenues luces
y un manojo de astros atados con cuerdas de
alambre
derraman lágrimas que embellecen los mares
No hay mas gotas y rebalsa luz,
pisando cometas errantes voy pintando el cielo,
y una sinfonía magenta que me arrastra alrededor
de la luna
42
Comienzo
En una brisa de descanso busco mi alma entre
papeles,
y no la puedo encontrar,
se cayó en el camino de vuelta
Perdida entre vidrios fríos y gente amontonada
vaga por algún rincón de la ciudad
Mientras sigo en un viaje de ideas y sumergida en el
vacío,
quedó detenida en el tiempo,
entre flashes oscuros,
y una parte de mí que desea no recuperarla jamás
Gotas de tinta azul que queman mis pupilas,
y una cinta gris sin principio
43
Cometa errático
Un mar de lágrimas sin sentido
se refugian en laberintos sin puertas,
no hay espacio y en algún lugar derraman su furia
como una tormenta gris
Solo deseo que se apague,
que se extinga,
que una bocanada de fuego incendie las aguas
y ese cometa errático caiga sobre mis pies
44
Desierto
Inmóvil, paralizada.
Quiero romper el aire en mil pedazos de colores,
respirar intensamente y cargar mis pulmones de
melodías.
Mi sangre no podría transitar el mismo desierto
un oasis,
una gota,
algo que reviva mi corazón.
Una caricia que me despierte del sueño,
un rayo que parta mi alma,
y mi espíritu que se inunda de paz tan
incomprensible.
45
Paisaje
Paisaje atrofiado de sombras inertes,
una mano de plata que sale de la tierra
El miedo al mismísimo miedo,
el sueño que no se apaga
y un disco gastado que no cesa
Y no podrías beber el agua que rebalsa de la copa,
es amarga y fría
Una gota de luz en un rayo para
secar la inmensidad del vacío
46
Brillante
Vuelo en un mar de nubes equidistantes,
los rayos salen en forma de arco iris
dejando el espacio colmado de aromas
tornasolados
Una lágrima de cristal que tiñe de azul las
constelaciones
Un río de paz que recorre cada célula
inundándola de celeste brillante
La luz que penetra mis ojos y me ciega en altura
un haz eléctrico que cruza el tiempo,
agarro fuerte una chispa
y me pierdo entre los astros
47
Puntos
Necesito desatar la luna,
y los infinitos puntos plateados
que vuelan hacia mí con furia
Por un instante abro los ojos entre cenizas,
disparan una señal congelándolos en el espacio
Y una lágrima de luz que gotea por mi rostro,
encendiendo de fuego mi piel
48
Cenizas de mis ojos
Caminando sobre cristales,
un camino de luces que se apagan lentamente
y me vuelven a conducir hacia un túnel de paredes
ásperas
Las lágrimas petrifican mis ojos, los desintegran, se
desarman..
los convierten en cenizas de recuerdos vanos
que se esparcen por el aire bañándolo de grises
opacos
Y una gota punzante que cae sobre el suelo
partiéndolo en mil pedazos
que retumban en mis oídos como el vacío mismo
49
Luz
Cortinas desiertas de mares agitados,
lámparas de seda que se desvanecen en la
habitación
y disparan puntos luminosos cargando el aire.
Una brisa suave entra por la ventana y los
desparrama delante de mis pupilas
y todo se vuelve brillante,
como restos de una estrella caída,
como mil planetas que orbitan sobre mi sombra
transformándola en luz.
50
Perlas
Un río de líquidos luminosos, que corre
resplandeciendo de colores brillantes.
Las gotas que caen del cielo son como perlas
suaves que flotan en el aire y al llover sobre el
agua se transforman en diamantes.
Una balsa de platino transportando una estrella
va emanando aromas dorados de luces dulces que
dejan marcado el cielo.
Y una punta del astro que lanza señales cósmicas
me disuelve al infinito,
a un espacio de sombras transparentes
y de cometas anaranjados que navegan entre mil
mares de lunas heladas.
51
Viaje azul
El sol que se escurre por mi rostro
y emite una señal que me inunda de luz
Y tus alas que me envuelven hasta desaparecer por
completo,
en una dimensión perdida, tan lejos de este mundo
Atrapada entre tantos aromas que se transforman
delante de mis ojos en cataratas plateadas
Sumergirse hasta morir
y nunca volver,
me llevás a un viaje de cristal azul
52
Paisaje metálico
Paredes de agua a mi alrededor,
y un rayo de fuego que quiebra la luz
en medio de sonidos que transportan al espacio
Una línea débil que se esfuma en el viento
y se retuerce entre arena seca que la ahoga de frío
Una gota de mercurio cae del cielo,
se derrama como un mar embravecido
transformando el paisaje en una sombra
congelada y metálica
Un ala de ángel que cubre la tierra
53
Despertar
Los puntos congelan como el espacio mismo,
en un sentir de voces equilibradas que resuenan en
la mente
como campanadas graves
El tiempo fluye entre telas suaves de apariencia
eterna
y con un pedazo de alma se desliza velozmente
en un torbellino de palabras rotas
No se mirar, mis ojos se encienden
y queman todo a mi paso, como un rayo
disparado de lo más profundo del cielo,
como un cometa que se quiebra en mil pedazos
y cae en forma de polvo asfixiando la tierra de
grises
No sé si puedo despertar
54
Sueños inertes
Desperté entre sueños inertes
que se esparcían en mi almohada como agujas
opacas
y me acariciaban mientras dormía
Van a desaparecer, aunque eso signifique
vaciarse, pintarse de colores oscuros
y transformarse en una sombra casi inexistente..
Ni rastros de aires que puedo respirar
sin intoxicarme de ese aroma tétrico,
y hundirme en las profundidades del sonido
..volviéndome algo que no deseo ser
Un pedazo de cielo siempre tiende a caer sobre mi
cabeza
y llevarme al borde del universo
55
Alma volátil
Partiendo un rayo punzante que brota de la palma
de mi mano,
se derrite con tu mirada y no puede continuar,
lo ahogan tus sonidos y anhelo escuchar..
Una gota helada que se resbala entre paredes
secas,
ya no puedo ver si tu piel se escapa en
una dimensión irreal..
Es tan brillante y opaco a la vez,
un reloj que con formas estrelladas
se transforma en granos de arena..
Y solo se que mi alma se pierde en el aire
buscando la tuya
56
Haz
Un conjunto de estrellas que rebalsen al vacío de tu
sombra,
en una estela abrumadora de encanto celeste
Los rayos que queman el infinito
y juegan en una revolución de mares
que surcan el firmamento
Tan verde y sutil se desliza como una esfera tibia
por la inmensidad del abismo
Solo un segundo de luz y puedo extinguirme
en la profundidad del universo
para deshacer mi reflejo en un haz que quiebre el
aire
57
Lago
Debería perderme entre sombras
que se inclinan al vacío,
la luz del alma que siempre tiene
un poco mas..
Me baño en un lago cristalino,
y me voy desintegrando hasta ser
una minúscula gota como otras..
Puedo caminar alrededor y ver
flotar las cenizas de tu aura,
inundar el espacio con un golpe de sol,
absorberlo violentamente,
nadando en un refugio eterno
que me conduce al infinito...
Sumergir una nube en la profundidad del mar,
que ahogándose se desmorona hasta
convertirse en un suspiro azulado..
Zambullirse en el brillo de una estrella alejada
que por la noche tiñe el cielo de tantos colores
Desarmar el aire, hasta sentir entre mis dedos
pedazos de nada, de átomos transparentes
que me lleven al abismo, a las manos de Dios
58
Mirar el cielo
Sueños desperdiciados en el viento,
me golpean por dentro y escapan de un hueco
de llamas que incineran todo alrededor
Como el adiós desde un muelle que flota
entre galaxias y se deshace de palabras
impronunciables
Se oye infinitamente recursivo,
una seda dulce que se resbala de mis manos..
Podría detenerme y mirar el cielo
hasta que penetre mis pupilas e
inunde el alma
59
Nube cósmica
Escondida del mundo en alas de fuego,
puedo ver la luz y sentir el mar
amor eterno en nubes cósmicas,
se ve la aurora y siente vibrar el río
Sumergirme entre constelaciones de platino
que giran alrededor de cometas incandescentes,
lo azulado perpleja, como un cambio de órbita
en un planeta seco, sin vida
Tus manos aún me sostienen Dios,
un capullo rosado que se abre
lentamente en la inmensidad del horizonte,
es suave y de aroma dulce
Y podría acariciar mi rostro infinitamente,
pintar mi retina de dorado y quemar
las melodías amargas del alma
60
Habitación
Con un pedazo de estrella
me lanzo al vacío de luz brillante,
quema mis pies y los transforma en gotas
de aire que salpican el vértice de una galaxia
Una lluvia de colores que se vuelve
sólida y flota entre piedras cobrizas
que una llama vestida de aguas
desparrama en la habitación
Las paredes se deshacen, como hojas
lavadas por el tiempo.. se vuelven vidrio..
y en un corte fugaz del líquido brotan alas
que la llevan a lugares incomprensibles,
donde se queman aromas cítricos, tan cristalinos..
Y puedo tocar el sonido de una flor
que con sus hojas secas desparramadas en el viento
inunda de soles las paredes transparentes..
Un rayo que entra y traspasa el lugar,
es inmensamente brillante y se multiplica
cada vez que penetra el cubo..
Y una ventana se abre frente a mis ojos,
pueden entrar centenares de estrellas
y derramar cataratas de diamantes púrpura
hasta llenar el cuarto.
61
Lámina estrellada
Desvistiendo una estrella
de agua furiosa que fluye en el tiempo,
buceo entre silencios que hablan a mis oídos
y a veces gritan más alto de lo que puedo respirar
Una lágrima helada que no toca tierra,
en un puñado de pinceles enjaulados
que se escurren lentamente..
Se asoma un rayo de luna
que derrite el acero,
y un mar de colores recorre el universo
pintando constelaciones olvidadas..
El aliento divino que sopla entre
galaxias hace brotar vida..
Y una lámina estrellada se cae del cielo
como papel suave.. desborda aromas verdes,
envuelve el alma de infinito..
Podría extinguir mi piel
y volar entre luces azules
sin necesitar nada más que alas
62
Melodía tenue
El silencio de la brisa
que no dicen las palabras
se desarma airoso de tu bruma
Pujantes contra el viento
en un pétalo de luz
se deslizan los aromas
En una melodía tenue
cae una gota de mi sangre
que aún sigue soñando
en profundidades sin sombra
63
Espuma
Si la espuma de mis ojos
que no cesan de soñar
desbordara en un mar de cajas de cristal
podría rebalsar el universo
de cuentos celestes
Un paso firme que se ahúma
en recuerdos, un dibujo
marchito de ojos muertos
No tengo alas y anhelo despegar
viajar por las nubes,
ver el sol quemar
64
Brisa eléctrica
El rocío que disparan tus labios
puede desvestir el sol de su fuego,
llover letras blancas de mar en la cabeza
Desnudan el alma
y la dejan a la deriva
de tus pensamientos
Flotando en brisas eléctricas me encontraste,
y tus ojos me encapsularon
para nunca escapar
del recuerdo de tu piel
65
Remolino
La gota que cae en el desierto,
el agua que resbala mis sentidos penetra el abismo,
en una copa fría bebo la luz que nace de tus ojos
de plata,
un remolino de mar que me aferra a pasos infinitos
y me conduce al estrecho valle de tu sombra.
66
Beso astral
Sumergí la luna en el rocío magenta
que disparan tus ojos de rubí
Enterré el sol en lo más profundo
del mar y una bocanada de aire
penetró en el abismo de mi boca
Conté las estrellas y se dibujó entre
constantes de plata el dulce aroma
de una esmeralda helada
Sentí el reflejo de tu luz
y escribí en mi alma la canción
de un beso astral
67
Puerta azul
Una burbuja de arena entre aguas
se deshace de aire y cae en el mar
de mi pelo enredado
El viento que me aleja
y puede llevarme a dimensiones cósmicas,
la luna se acerca a mi cara
como un metal ardiente que quema mis labios
Y se vuelven nada,
como un latido
que vibra e intenta retenerse..
No descubrí de que
están hechas las notas que rodean,
abro la puerta azul y me zambullo
al otro lado de tus ojos
68
Lágrima
Siempre un poco más de aire
que me deshace entre palabras huecas,
en una sombra pasajera se refugia
una lágrima de mis ojos,
como anhelando escapar
del escalofrío que vuelve
a hacerme sentir nada.
69
Amor
Ojos de fuego penetran mi alma,
inunda el desierto, canción de amor.
Los labios que rozan la inmensidad
y se deshacen con tus ojos perlados,
no creo escapar del rocío azul
que derrama el cielo entre los dos.
70
Tus brazos
En la aurora de un beso cósmico
que invade mis sentidos,
se deshace de entendimiento una roca seca
que se parte en mil pedazos.
Y ahí solo quedas vos,
el anhelo que da vuelta mis venas
transportando tu perfume,
y una caricia que se escurre.
Cuando todo se ve tan gris,
solitario, tan extraño a mí
y solo deseo escapar..
tus brazos conocen la desnudez
de mi alma.
71
Viento
Esa escarcha que paraliza
el aliento, y hace cada paso eterno,
inundado de imágenes marchitas,
ahogado entre rayos escasos de luz
Remolino de aire viciado,
ceguera eléctrica en la luna
Un segundo que se escapa
de orbita y desmorona
la pendiente de una brisa inerte
que balancea constelaciones
en un impacto azulado de viento
72
Hojas quemadas
Quemando hojas, liberando recuerdos,
veo el sol que se asoma,
y la ilógica brisa de paz que entra por mi ventana
Renuevo de aire, arco iris naciente
colores suaves que invaden mis sentidos
perfume astral de una estrella
73
Pasos
Pasos de seda y un caminante de luna,
luces de mar enfocando los sentidos
En una gota cósmica me senté contemplando el
olvido,
el agua de lluvia brotó entre mis manos disolviendo
los ojos
Puedo ver todo encendido y las sombras huecas
alrededor
que se esparcen como nada
Manchas de fuego, rojos paisajes,
un rayo de sol dibujando mis pies
74
Manto
Eclipse de fuego sobre mis manos
dibujos elípticos de aromas tornasol
manto de miel cubriendo la noche
paisaje sideral de cometas caídos
75
Marfil
Una lágrima celeste
puede destruir estrellas
construir cielos
la más completa oscuridad
tu luz renaciente
una gota de marfil
golpea el océano penetrante de tus ojos secos
76
Sonrisa del alma
Sonrisa del alma,
luz del desierto
Tu mano, mi calma
despierto por dentro
Luna de mares,
enredada en el viento
tiñendo de luces,
paisaje eterno
77
Rayos negros
Gotas de plata surcando
los ojos cósmicos en la noche de mi piel
Derrama sonidos que asfixian el alma
se desintegran
en un estallido de rayos negros
Se pega en el viento,
y una escama de luz se vuela
resquebrajando el aire
Se inunda de cometas perdidos,
vagando en un cielo colmado
de nubes densas que retienen la voz
78
Selene
Selene llora pétalos de miel,
en la dulce melodía de una noche
se resbalan sobre el agua agobiada
y beso los mares recordando el olvido
79
Árbol
El árbol infinito,
hojas azuladas que se esparcen
entre las caricias ásperas del viento
Raíces húmedas, corazón seco
Alas magenta desplegando sombras
se extienden al espacio,
al inerte grito de mi piel quebrada
80
Flor
Soles de mayo
recurrente deseo,
escape eternal
Alas de acero se desvanecen
entre las gotas tibias que brotan de mis ojos
caídos, cansados.. brotando en fuego,
avivando el espacio
Renacer, se que voy a renacer
Resurgir en la flor de una nube eléctrica
81
Pétalos
Recuerdos, palabras, sonidos.
Estrellas, lunas, roto silencio de un llanto oxidado.
Pétalos luminosos flotando en la habitación.
82
Notas
Viaje sin fin de una melodía tenue
recostada sobre mi cuerpo dormido.
Notas deslizándose por el vidrio..
una bocanada las traspasa hacia mí,
desdibujando el contorno de tu imagen violeta.
83
Mirada lunar
Apretar los ojos fuerte
tocar el infinito
caer a tierra
como un rayo eléctrico..
Desintegrar los átomos de mi voz
y volverlos a unir en tu mirada lunar.
84
Brisa inerte
Como desprender hojas del desierto,
como arrancar el llanto de lo imposible
si encapsulada en el tiempo queda el alma
y cada vez que el mar trae sombras
la piel se sumerge hasta el infinito,
volviéndose una brisa inerte que flota entre
silencios.
85
Lágrima
Recuerdo en el viento,
el eco partido.
Y siempre el alma,
que intentando deshacerse
vaga destruyendo aves.
El fuego que incinera esa imagen perdida,
y agobia las caricias perdidas en el tiempo,
las palabras que no salieron
y las canciones que nunca fueron escritas
86
Aura
Más cerca de mí,
en el aura de tu boca se refugia
el sol de mediodía.
La luna no quiere salir esta noche,
un pedazo quedó electrizado en mi pecho.
87
Alba
En el barco frío de una sombra navego al infinito,
a esa nube de colores que enciende el alma,
la retuerce, la estrecha y vuelve a ensanchar.
Como perlas de mar, perlas secas que inundan
mi boca de inmensidad, y con un dolor
sobrenatural
me inclino a expulsar.
Los recuerdos del viento, de tus manos vacías,
de mi rostro pálido, de la frecuencia de la voz
llorando el alba.
88
Esperanza
La esperanza de un Dios vivo,
que dentro de mi inclina su mano y levanta la niña
que fui,
la toma en sus brazos firmes y recuesta en sedas.
No puedo comprender tanto amor,
más alto que mis pensamientos, más que el sol de
mediodía,
que se pone en la ventana esperando el viento,
para llevarlo al costado de mi almohada, y dormir
en paz,
con la brisa recién soplada de la mano del creador
sobre mi rostro semi dormido.
89
Moebius
Si mis alas se extendiesen alcanzando el infinito,
en tu cinta de moebius pegando el sol en la cara.
Tus rasgos resonantes en mi viento encarcelado,
de la mano de un ave esperando el mañana.
Cicatrices eclécticas inclinan los ojos,
desarmados de gotas suaves, vuelven a renacer.
90
Jazmines
El amor echa fuera el temor,
el amor huele a libertad,
a perfume de jazmín recién regado
por el rocío de la mañana.
91
Verde
Verde luz de párpados caídos,
iluminando, creciendo, inundando.
Alrededor voces y sonidos agudos,
te reconozco entre espirales,
la noche llena mi luna.
92
Sabotaje
Dulces ojos que sueñan infinidad,
estrella fugaz sobrevolando los labios.
Saboteas el espejo de mi alma.
93
Soles
Libres soles se dispersan por el viento,
salen de tu mano aguda hasta mí.
Me despinto, vuelvo a pintarme,
resucito, renazco, espero.
94
Alba
Fuego en brasas, perfume de recuerdos
invaden mi calma.
Te pierdo nuevamente en el viento.
Atrapo las cenizas con mis manos secas,
se deshacen como agua entre los dedos.
Surcando el espacio, me veo renacer.
Vendrá el alba rozando mi piel,
iluminando el camino.
95
Explosión
Las manos de la luna que tienen esa forma,
te lleva hacia el viento, al sonido del cielo.
La calma de la noche llenando el espacio,
puedo explotar en mil colores.
96
Buscándote
Puedo ver con mis manos,
intenta salir, escapar de mis ojos.
El mar sacude la ventana,
los vidrios caen frente a mí,
y me desarmo en mil pedazos
buscándote.
97
Cielo
Noche gris,
viento aterciopelado agudizándome.
La brisa de una estrella fría
soplando mi cara,
se enciende, cae a tierra.
El cielo se encierra entre mis manos.
98
Despertar
Y suelo despertar,
cuando la luna cae sobre mí.
Y de golpe titubeante el cielo,
sobre mis pies resonando.
99
Todavía
Yo todavía creo en las alas,
las mágicas alas que me llevan al borde del amor.
Todavía sueño, todavía río, todavía callo.
Las miradas que desbordan el mar,
los pétalos que caen de tu ventana.
Y todavía soy capaz de querer volar.
100
Astros
El misterio del amor,
de las palabras pronunciadas de tu boca.
Estrellas de miel que se deshacen en el cielo
y gotean mi cabeza como lluvia fresca,
sonidos del universo, canción de astros
llenando mis ojos.
101
Interconexión de vida
Interconexión de vida,
de recuerdos, de sensaciones, de formas,
de colores, de sonidos.
Interconexión de la esperanza,
que se expande, se enreda, se comprime
y se renueva.
El mar azul que alimenta la vida,
hundido y brillante, saliente del cielo.
Resurgir y crecer, y creer.
102
Brote
Todo lo que me hizo llorar
todo lo que me hace vivir.
Más cerca del cielo,
libre en tu amor.
Las alas extendiéndose,
el brillo del sol rozando
mi cara.
Más cerca del mundo,
Más cerca de mí.
Resucitando la esperanza,
desplegando ilusiones.
Imaginando.
Durmiendo sobre púrpuras,
colores en el aire
brotando del viento.
103
Cálidos
Retorno al mar,
las sensaciones ya eran extrañas.
Grises y aterciopeladas por momentos,
las palabras del ocaso.
Siento el viento pegando fuerte,
¿aún hay más por salir?
Nunca se agota la brisa,
tampoco las nubes.
Voy pintando el paisaje de cálidos.
104
Anhelo de encuentro
Recorriendo el espacio,
perdí el silencio
No sé dónde buscar,
se quedó acoplado a una estrella
De tanto callar se abrió el cielo,
ahora deambula ferviente sobre el crepúsculo.
Mis dedos escurren gotas,
los ojos siguen añorando lo que será.
Anhelo creer, sentir
encontrar el alma entera.
105
Aire
Aire, puedo respirar, una vez más
Palabras que se desarman
y se vuelven a construir
como un rompecabezas
de un juego cerebral
Puedo salir, estoy afuera
ya estoy a salvo,
no quiero recordar,
no puedo recordar,
saber, comprender
una parte de mi se perdió en el tiempo.
106
Realidad
Ansias de llegar, de quedarme quieta
No se a donde, no sé cuando,
necesito descansar
Puedo enhebrar tiempos,
nada sirve, la realidad no es así.
Otra sintonía mental,
otra frase,
otra poesía,
otro corazón
Late,
espera,
siente,
a veces duele
mucho,
demasiado,
no quiero.
La realidad es así.
107
Cielo
De nuevo toca,
esta vez no.
mañana no es igual
desarma, agota,
desespera..
Despertar sin haber sentido,
espaciar el tiempo en un soplido,
me deja sin aire,
sin aliento.
La dulce melodía
de tu astro,
el cielo espejado
que se pone sobre mi cara fría.
108
Carmesí
Mucho y nada,
todo,
algo.
Espero y una gota
carmesí me invade.
El alma, el universo se achica,
un haz azulado que brilla como el viento.
No comprendo ese sonido,
el de mi boca llorando piel.
Se cae el rojo de una pupila,
y se derrama al infinito.
109
Camino
Ojos grandes, rostro frío
Se desdibujan imágenes frente a mi cuerpo.
Refugio astral, ya me expulsa hacia el camino
Y se vuelve más nítido, algo gris, algo azul por
momentos.
Mi cara, lavada de lágrimas, intentando…
Todo parece opaco, a veces no…
Y otras tantas estoy aquí, y tampoco estoy en
ninguna parte
F I N
110
111
112
113
114
top related