crónica del conjunto arqueológico madinat al-zahra, año 1991. antonio vallejo trijano
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CT]ADERI\OSDE
MADix¿r AL-zAHRlt
voL.
3
cónooBA L99T
CIJADERNTOS DE MADINAT AL_ZAHRÁ'
SUMARIO. ACTAS DE LAS II JORNADAS DE MADINAT AL-ZAHRA
AL-ANDALUS ANTES DE MADiNAT AL-ZAHRA
S. GUTIERREZ LLORETL;r fornuciín de Tucltnlr dade la pu'iferia del Estado Islámico Pág. 9
A. MALPICA CUELLO - A. GOMEZ BECERRA
"Donde n//n.¿/ dnÍe.t h¿bía entr¿da tn ejírcito...,E/ pob/arniento de la costa de Granac/a en el rnarco
de la fornución del Estado lslátnico Pá9. 23
V. SALVATIERRA CUENCA _J. C. CASTILLO ARMENTEROSE/ poblaniento ntral: ¿Histórico o internporal?
El caso del arrol,o del Salado, Jaín Pág. 47
M. ACIEN ALMANSA'Utnar lb¡t Haf:ttn. Un problema bistariográfico Pá9.71
E. MANZANO MORENOSeñore¡ 1 ernires: Fantilias ari¡locráticas 1, soberanía ltltejtl en Al-Andalu¡ Pág. 97
A. CANTO GARCIADe la Ceca Al-Andalu a la de A[adtnat al-Zabra' Pág. 111
CHRISTIAN E\)rERTPrecarsares de A'Iadlnat a/-Zahra'. Los Pa/acir¡¡ 0melas )t 'abbásie¡
de oriente 1' sa ceremonial attlico Pág. I23
PATRICE CRESSIEREl Renacin¡iento de la esutlttu'a de capiteles en la ípoca entiral:
entre occidente 1 oriente Pág. 161
ALFONSO JIMENEZLa Qibla extrauiada Pás.189
. CRONICA DEL CONJUNTO
A. VALLEJO TRIANOCrí¡uca, aña 1991 Pás.213
CRONICA DEL CONJUI\TO
CRONICA, AÑO 1991
A. VALLEJO TRIANO
INTRODUCCION
La presente Crónica del Conjunto Arqueológi-co da cuenta de los trabajos desarrollados en
Madinat al-Zahra durante el año 1991. A niveladminist¡ativo hay que destacar el normal funcio-namiento de la Comisión Técnica creada en 1990,lo cual supone la puesta en marcha de la nueva
estructura administrativa emanada del Decreto de
creación del Conjunto aunque de manera parcial, a
falta del desarrollo de las áreas o departamentoscontemplados en dicho Decreto.
En el ámbito de la protección, la situaciónactual de Madinat al-Zahra se caracteriza por el
encargo definitivo de su Plan Especial que se ve
consolidado como marco para el futuro desarrollodel Conjunto a todos los niveles. Hay que desta-
car, asimismo, el comienzo de la apertura territo-riai en la concepción de1 yacimiento con la asimi-lación al mismo de elementos exteriores intrínse-camente vinculados a la existencia de Madinat al-Zahra como ciudad y a su actividad como nuevo
centro de poder de ai-Andalus.Entre los aspectos negativos hay que reiterar,
como venimos haciendo desde hace unos años, las
ca¡encias ostensibles de personal que sufre esta
Unidad para su normal desarrollo (Anexo I). Esta
deficiencia se ha manifestado du¡ante 1991 en una
significativa reducción del horario de visita públi-ca que ha pasado de 33,5 horas semanales duranteel período 1985-i990, a 20 horas semanales a par-tir de julio de 1991. El descenso del número de
visit¿rntes refleja de manera clara esta reducción(Anexo II).
1. PROTECCION
A partir del encargo del Plan Especial de
Madinat al-Zahra,la programación de trabajos del
Conjunto se superpone y coincide en algunosaspectos con la necesaria recogida de datos yobtención de nueva información sobre Madinatal-Zahra que, junto con la recopilación exhaustiva
de la existente, constituyen la fase de informacióny diagnosis del Plan, inexcusable para fijar las
medidas de protección y conservación necesarias
para la zona arqueológica.
La delimitación de Madinat al-Zahra y su
entorno constituye uno de estos traba.jos que plan-teamos como una actuación arqueoiógica de emer-
gencia rcalizada entre los meses de febrero y mayo
de i991.
1. I . Actuación arqueológica de emergenciaparala delimitación de Madinat al-Zahray su entorno
El objetivo fundamental del trabajo buscaba
definir los límites físicos reales de la zona arqueo-
lógica y los elementos urbanísticos exteriores al
perímetro amurallado de la ciudad, consustancia-
les con su propio funcionamiento, así como cono-
cer ias características de la organización del terri-torio en que se asienta la medina.
211
Metodológicamente, la intervención ha com-
binado una labor previa de investigación de las
fuentes documentales escritas y estudio de labibliografía existente , con el trabajo de campo
consistente en una prospección superficial apoya-
da por técnicas cartográficas y de fotografía aérea.
La prospección, aplicada en un área de algo más
de 33 Km.', distinguió tres zonas en las que varió
su intensidad: una primera, compuestr por dos
<transects>> perpendiculares, en los que se realizó
una prospección sistemática intensiva con el finde determinar la intensidad de restos en relación
con el alejamiento progresivo del núcleo urbano;
la segunda zona, también prospectada intensiva-
mente Ia constitlrían los espacios inmediatos a la
ciudad; y una tercera, en la que se incluían las
superficies más alejadas de la medina, donde se
practicó una prospección selectiva.
El material cartográfico empleado ha sido
fundamentalmente el Mapa Topográfico Nacional
E/l:i0.000 del Instituto Geográfico Nacional, el
Mapa Topográlico de Andalucía E/1:10.000 y1:1.000 y planimetría histórica de finales delsiglo XIX y principios del XX. El trabajo ha sido
realizado por los arqueólogos don Angel VenturaVillanueva y clon J. Manuel Bermírdez Cano.
Los ¡esultados obtenidos vienen a demostrarque la fundación de Madinat al-Zahra slrplrso una
transformación radical del territorio en que se
asienta, no sólo por 1a alteración de la topografía y
el paisaje originales de la sierra y la llanura, sino
también porque generó un complejo sistema de
infraestructuras, necesario para sll propio funcio-namiento, que 1a prospección ha permitidoreconstruir, al menos parcialmente. Entre losresultados más innovadores del trabajo hay que
señalar la identificación romana del acueducto de
Valdepuentes (1).
Los elementos principales de esta infraestruc-
tura, cteada <ex novo)> o reaprovechada sobreconstrucciones anteriores, la constituyen funda-mentalmente la red viaria, el sistema de abasteci-
miento de agua y los puntos de explotación del
materiai constrLLctivo pétreo.
De la red viaria se han detectado varios cami-nos, entre 1os que hemos de destacar dos, tantopor su significación como por la importancia de
los restos conservados:
2r4
- El camino de los Nogales que discurre al
pie de la sierra enlazando con las zonas
norte y este de Córdoba. Parte de su trazado
aparece fosilizado en caminos actuales. Con-serva restos de varios puentes y completo el
plrente de tres ojos que salvaba el arroyo de
los Nogales (lám. 1). Fue, sin duda, una de
las vías de comunicación más importantes ytransitadas entre Madinat al-Zahra y Cór-doba.
- El camino de las Almunias, el más meri-dional de todos, a 1o largo de cuyo recorridose pueden situar la mayoría de las almuniasdocumentadas en las fuentes escritas. Su
uazadc¡ es difícil de determinar con seguri-dad. pero se conservan puentrs. cimenrar io-nes y diversas estructuras que han permiti-do su reconstrucción hipotética.
Del sistema de aprovisionamiento de agua
destaca e1 Acueducto de Valdepuentes, que, pro-cedente de la Fuente de la Teja, abastecería de
agua a Madinat al-Zahra, para continuar hasta
Córdoba. De él se conserva un magnífico puentede tres arcos de herradura que salva 1a profundavaguada del arroyo del mismo nombre (Iám.2).
Dei conjunto de canteras localizadas, las más
importantes se encuentran al NE, en torno al cor-tijo de Santa Ana de la Albaida (láms. 3 y 4), aun-
que se han detectado extracciones al menos en
otros 7 puntos alineados en dirección E-\ü7
siguiendo la ladera del monte, integrando uncomplejo de explotaciones capaz de abastecer no
sólo a Madinat al-Zahra sino también a Córdoba.
haciendo posible el desarrollo urbano que se pro-duce a lo largo del siglo X.
Por otra parte, la prospección ha detectadonLlmerosos restos de infraestructura hidráulicapertenecientes a asentamientos relacionados con
explotaciones agrícolas o actividades mineras.Entre los yacimientos islámicos destacan Turru-ñuelos y Ia almunia al-Rummaniyya, conocidaesta ú1tima por Alamiriya en virtud de la erróne¿
identificación realizada por el arquirecro Yel.áz-
quez Bosco que la excavó en 1910. Constituye una
importante explotación agrícola organizada en tres
terÍazas irrigadas por una gran alberca, const¡uídapor Durri el Chico, tesorero de al-Hakam II, a
quien la regala en el año 913 (láms. I y 6).
Todos estos elementos componen una nueva
articulación del territorio en este sector occidental
de Córdoba qlre tiene por centro generador a lapropia Madinat al-Zahra; la mayor parte de esas
infraestructuras deben su existencia de una u otra
forma a la nueva fundación califal.Las zonas afectadas por la localización de res-
tos han sido cartografiadas a E/1:1.000, con equi-distancia de curvas de nivel de 1 m., que se ane-
xionará al plano existente de Madinat al.-Zahra.
l.2.El Plan Especial. Fase I de informaciónydiagnosis
En noviembre de 1990 se contrató la redac-
ción del Plan Especial de P¡otección de Madinatal-Zahra iniciándose en l99l con ios trabajos de
información y diagnosis, cuya realización es esen-
cial pues supone la base documental que determi-nará su redacción. Aunque esta fase de informa-ción se entiende siempre de forma global, su con-tr¿rtación aclminist¡ativa ha exigiclo clescomponer-
l¿r en dos fases, que abarcarán los años l99I y
r992.Los contenidos del trabajo contratado durante
la fase I han sido:
1 .- Estudio histórico y arqueológico de laciudad y valoración intrínseca de la misma. Este
estudio ha sido encargado a don Manuel AciénAlmansa.
2. Prospección arqueológica superficial del
entorno inmediato a la ciudad. Esta prospección,
ya comentada, ha sido encargada a un equipo de
arqueó1ogos bajo la dirección del que suscribe.
3.- Análisis de los criterios y alcance de las
intervenciones desarrolladas en Ia zona arqueoló-gica desde 191 t hasta la actualidad. Este trabajo
lo realiza ei propio equipo redactor del Plan Espe-
ciai dirigido por J. Ramón Menéndez de Luarca.
Asimismo, el trabajo incluye el documento de
Metodología qr-re ha sido encargado en junio de
I99L En él el equipo ¡edactor define los objetivosgenerales del Plan de acuerdo con la especificidadde la ciudad y las circunstancias que la rodean,
realizando una reflexión a nivel conceptual sobre
su naturaleza y estado actual, alcance y criteriosde las futuras inrervenciones, definición del espa-
cio objeto del Plan (ciudad y territorio), posibili-dades y necesidad de explotación cultural. Se esta-
blecen también las características de la informa-
ción sobre la ciudad que ha de generar el Plan(redefinición de datos existentes y elaboración de
otros nuevos, revisión de la información gúfica ycreación de nuevas bases cartográficas y planimé-tricas) y las características de los trabajos a realizar
para su redacción con el objeto de clarificar laestrlrctura de la ciudad y su relación con el entor-
no, el diseño de políticas de intervención/conser-
vación y la posibilidad de su ejecución en untiempo determinado.
Se incluye al final una propuesta de índice del
documento del Plan Especial, que incluiría una
Memoria (general, sobre la información y sobre
los criterios), una Normativa (genérica, de protec-
ción y de actuación), un diseño de Gestión (orga-
nización administrativa, mantenimiento, explota-
ción cultural, etc.), un Pian de Etapas (planes de
acruación, financiación, calendario, etc.) y diver-sos Anexos (documentactón gráfica y otros).
2. INVESTIGACION
2.1. Investigación palinológica en elJardínAlto
La investigación paleobotánica de Madinar al-
Zahra, fruto de la colaboración mantenida desde
1985 entre este Conjunto Arqueológico y el Jar-dín Botánico de Córdoba, constituye una de las
cuatro actuaciones básicas de un amplio proyecto
interdisciplinar que tiene por objeto la ¡estaura-
ción paisajística de los jardines de la ciudad. La
envergadura del trabajo emprendido y la necesi-
dad de estructurarlo metodológicamente de forma
coherente, obligaron a dividirlo en varias fases
consecutivas: la primera corresponde a la Recopi-
lación documental y bibliográfica sobre los aspec-
tos relativos ai paisaje y a la jardinería islámica; la
segunda, referente a la Prospección de las especies
asilvestradas existentes en la actualidad en el inte-rior de la zona arqueológica. En junio de 1991 se
ha procedido al inicio de la tercera fase, aún en
curso, cuyo objeto es la investigación palinológi-ca.
Los trabajos de esta fase durante 1991 se han
desarrollado en el interior del yacimiento, concre-
tamente en el Jardín Alto, no habiéndose iniciadolos que estaban previstos en el entorno, en las pro-ximidades de la conducción de agua que abastece
aI A\cázar, junto al Acueducto de Valdepuentes.
2r5
En el Jardín Alto se han extraído 149 mues-tras de tierra en 8 puntos, disranciados cada uno20 m., en una línea de dirección E-\l paralela a1
amurallado sur del Jardín y a unos 15 m. de su
cara interior, emplazamiento elegido por consri-tuir 1os márgenes meridionales, las mejores zonas
desde el punto de vista deposicional.La extracción se ha realizado mediante una
sonda manual de 40 mm. Los análisis ha sido rea-
lizados por doña Enriquera Martín-ConsuegraFernández, del Departamento de Biología Vegetaly Ecología de la Facultad de Ciencias de Córdoba,recogiéndose los resultados en informes parcialesemitidos sobre cada uno de los 8 puntos sondea-
dos(láms.7y8)El informe referido al análisis de 1as 18 mues-
tras dei primer punto fue entregado en noviembrede 1991. En é1 se especifican los diferentes riposde pólenes fosiiizados y las especies a los que per-tenecen, sus estratificaciones y porcentajes, desta-cando en las conclusiones el "claro predominiodel polen no arbóreo sobre el polen arbóreo". Asi-mismo se avanza una interpretación del paisajededucido de estos resultados, qlre se caracterizapor ser .un medio antropizado con influenciatanto de los cultivos cercanos al yacimiento, comode 1¿r sierra próxima y de las plantas que acrual-mente forman parte del jardín".
2.2. Actuación Arqueológica de Emergenciade apoyo a la consolidación en el lienzoparalelo y exterior a la muralla norte dela ciudad. Realización de sondeos alexterior del segundo lienzo
El camino norte de acceso al Alcázar discurreparalelo a la muralla septentrional y exterior a lamisma, entre ese propio amurallado y un segundoparamento que soportan contrafuertes regular-mente espaciados en algunos tramos. Este cami-no, que penetra por la esquina NE de la ciudad,desemboca en la puerra septentrional del Alcázar.La excavación de esta zona se vinculó siempre a lade1 amurallado norte. El tramo más occidentalcontigüo a la mencionada puerta había quedadoexcavado en 1926, mientras que el sector orientalde la muralla con el camino y muro que comenta-mos lo había sido en lc)7 1. La diferencia en eltiempo de ambas excavaciones explica el desigualtratamiento que presenran los dos tramos; mien-
216
t¡as el occidental fue inmediatamenre consolidadomediante un recrecido homogéneo con mampos-tería en su coronación, el occidental, con unamayor altura de muro original conservado, no fueobjeto de intervención alguna. La zona de contac-to entre los dos tramos no llegó a excavarse.
El grave estado de deterioro de ese lienzoexterior a la muralla obligó a una consolidaciónde emergencia consistenre, entre otras actuacio-nes, en el vaciado de las tierras superiores que se
realizó con metodología arqueoló¡¡ica.
La actuación se concreró en la realización de 3
sondeos estratigráficos, vi¡¡ilancia y seguimientode la excavación mecánica de Ia zanja de dreneje,así como 1a vigilancia y control de la limpieza ydesescomb¡o de la cara interna del lienzo de muroobjeto de consolidación. La intervención arqueo-lógica se desarrolló entre 1os meses de octubre ynoviembre, si bien 1as obras de consolidación se
polongaron hasta febrero de 1992.
El trabajo, realizado por el arqueólogo J.Manuel Bermúdez bajo 1a dirección del que sus-
cribe, comenzó con la excavación de una trincherade 15 x 1.5 m. adosada ala cara externa del murodonde éste presentaba mayor altura de fábrica ori-ginal conservada y, por tanro, mayor potenciaarqueológica (lám. 9). Se excavó, en toda su
extensión, un estrato de 40 cm. de espesor forma-do por tier¡as de arrollada y mareriales de acarreo,
de formación reciente, tras 1o cual se hizo necesa-
rio un cambio de estrategia que permitiera reali-zaÍ, efl menof tiempo, una documentación estrari-gtáfica exhaustiva, con el fin de conocer la secuen-
cia deposicional en esta zona sin rener que excavar
la totalidad de la trinchera con metodologíaarqueoió¡¡ica. Se optó pues, por plantear 3 sonde-os de 1,i m. de lado, separados 5,25 m. cada uno,que se practicaron en el interior de la rrincheraoriginal.
La metodología empleada en la excavación se
basó en los principios de la esrratigrafía arqueoló-gica sistematizados por Harris, elaborando unúnico diagrama de secuencias para los tres.
En la estratigrafía documentada se distinguen6 niveles, clryo proceso de sedimen¡ación aparece
determinado por 1as caracrerísricas orográficas de
esra zona de ladera y las modificaciones introduci-das por la acción antrópica en los perfiles edáficosnaturales (fig. 1).
El estrato excavado más profundo (U.S.6) está
formado por una capa laminada de potencia varia-
ble , ser-rsiblemente horizontal, producto de 1a des-
composición acelerada cle materiales de construc-
ción calizos. Se pr-rede interpretar como el hori-zonte de construcción de Ia estructura adyacente y
ma¡ca la primera fase de sedimentación antró¡icaque rellena un nivel de arenas y gravas de forma-
ción geológica, truncado por la construcción del
paramento. Sobre este horizonte constrlrctivo apa-
rece un estrato (U.S.t) formado por arenas ferru-ginosas muy finas y poco compactas, producto de
r-rna sedimentación inducida por la acción humana
de interponer una estrlrctlrra en ia ladera creando
un nuevo suelo. Por encima se dispone un estrato(U.S.4) de gran potencia, formado por una marrizarenosa de la misma naturaleza que la anterior,aunque con mezcla cle abundantes esquistos. Este
relleno pedregoso constituyó r-rna colmataciónintencionada que se realizó con materiales extraí-
dos de algr,rna zona cercana pues presenta caracte-
rísticas similares a los perfiles ecláficos locales. El
paramento se recreció entonces (U.S.3) cambiando
la alineación de sus hiladas que siguen ahora la
pendiente del camino. Finalmente, colmatando el
conjunto, aparecen dos estratos (U.S.2 y U.S.1),
productos ambos de un proceso de sedimentación
diferencial, que ha ido creando capas lenticulares
cle cal y cascotes, con el mismo tipo de marriz
¡e.l regora descri ¡o anreriormen rr.La extensión total del lienzo de muro puesto
al descubierto es de unos 18 m. ya que la trinche-ra inicial de 15 m. se amplió 3 m. más hacia el E.
ai excavar ),a zanja de drenaje. Su alzado oscila
entre 1os 2,30 y i,20 m. de altura. En su fábrica
de sillares, aparejada a soga y tizón, se distinguendos momentos cronológicos. Una primera fase
corresponde a un paramento exento de hiladas
sensiblemente horizontales y sillares perfectamen-
te tallados con juntas muy finas, que aparece jalo-
nada al interior y exterior por contrafuertes alter-
nos de los cuales Lrno conserva la coronación tro-copiramidal, testigo único, por el momento, en
toda la zona arqueológica {Lám. 10 y fig. 2). Este
paramento, enlucido y pintado, que actuaba como
muro de separación del camino con otras edifica-
ciones exte¡iores, sufrió un proceso de colmata-ción rápida e intencionada quedando soterrado a1
exterior en su totalidad. La segunda fase corres-
ponde a su transformación en un muro de conten-
ción, mediante un recrecido posterior a la colma-tación, de fábrica más descuidada y con un sensi-
ble cambio en la alineación de las hiladas respecto
a la construcción primit iva.
Estos resultados contribuyen a aclarat y
reconstruir parte del proceso de transformaciónsufrido en el exterior de 1a muralla norte donde ya
habíamos constatado la presencia de construccio-nes que fueron condenadas en un momento tem-prano del período de vida activa en la ciudad (2).
Se confirma, pues, la existencia de una estructuraaterrazada con edificaciones en el exterior de lamuralla que pudo haberse amortizado, a nivel de
hipótesis, con motivo de la restructuración del
camino norte de acceso a la ciudad.
3. CONSERVACION Y RESTAURACION
3.1. Consolidación arquitectónica
3.1.1. Obra de Emergencia de Consolidaci,í¡t
del lienzo para/e/o j exteriar a /a tnura/la norte
de la ciudad
Como ya hemos señalado, el muro objeto de
intervención constituye el paramento septentrio-nal del camino norte de acceso al AIcázar que dis-
curre pararelo a la muralla de la ciudad.De los 110 m. conservados de dicho camino y
paramentos de flanqueo, el tramo más oriental del
paramento exterior, con una longitud de 25 m.,está formado por ,l paños de 1 m. cada uno deli-mitados por 5 pequeños contrafuerres de 1 m. de
frente y 0,70 m. de profundidad. Su altura oscila
entre 1,20 m. y 3,50 m.Actualmente el muro presenta sólo una cara
vista, 1a que da al camino, puesto que está actuan-
do como muro de contención de todas las tierras
superiores, constituyendo e1 elemento originalemergente más septentrional de toda la ciudad.
Su estado de degradación en su coronación y lainexistencia de desagüe de las tierras que soporta,
han provocado la descomposición de los sillares de
caliza tanto en los machones como en los paños
intermedios, con pérdida de masa, en algunoscasos, de entre 0,10 y 0,20 m. y en otros su desa-
parición casi total. El empuje de las tierras ha oca-
sionado, asímismo, un desplome que llega aI I0%en algunos puntos y la caída de numerosos silla-res. Estos empujes estaban acrecentados por verti-dos de tierras de excavaciones anteriores que
actuaban sobre ei muro (lám. 11).
217
La intervención ha consistido en:
1: Vaciado de las cierras superiores med.ianteexcavación arqueoló¡¡ica, como ya ha que-dado indicado, con un ancho de 1 m. en
toda su longitud. Sobre el fondo de1 huecoexc¿rvado se formaron pendientes con arci-lia para conducir el agua hacia un peque-ño tubo de plástico introducido por Lrn
hueco existente a través del muro y sobre
las arcillas se rellenó con grava hastarematar, finalmente, con orra capa de arci-lla para formar ias pendientes a nivel de lasuperficie del terreno y recoger el a¡;uahacia ¡-rn canal de teja cerámica que impi-de que ésta caiga sobre el muro.
2: Sustitución por siliares nuevos de aquellosque por su mal estado eran necesarios para1a esrabilidad del paramento (fig. 3). Se
eligió una piedra idéntica a la originalprocedente de la cantera que explora laempres¿1 Asland en Córdoba.
No se ha desmontado ninguna partedel muro ni era recomendable dada la fra-gilidad de la piedra. Solamente algunossillares sueltos de la última hilada que se
habían desplazado fr-reron colocados en su
posición original. Las zonas reconstruídas,con sillería o mampliesto, son rotalmenteverticales, es decir, no se siguió el desplo-me que pfesenta el muro pof no ser conve-niente desde e1 punto de vista constructl-vo y de la estabilidad de1 conjunto.
Los sillares originales que se enconrra-ban partidos en varios trozos, caídos en elsuelo, se restalrrrron y se cosieron conalambre de acero inoxidable.
l: Finalmente, a lo largo del mlrro se rec¡ecióla coronación con mampLlesto, siguiendosu perfil actual, para proteger de la ero-sión los restos originales (lám. 12).
3.1.2. Reparación del lienzo NV/ de /¿ cet'ca de
nattpostería 1 sanean)enta del upacia al \Y del edificio
de enh'ada
La intervención, con carácter de emergencia,ha consistido en la limpieza, desescombro y eli-minación de las construcciones existenres cn eicostado \7 del edificio de entrada, que formabanparte de 1a vivienda del guarda, así como la repa-ración del tramo correspondiente de la cerca de
218
mampuesto a 1a que estaban adosadas (láms. 13 y14). Esta labor se ha realizado con el mismo crire-rio y tipo de materiales utilizados en 1989 en lareparación del tramo oriental de dicha cerca.
J. l . 3. Ort at in/et't'en¡i,,nes
La consolidación de las estructuras arquitec-tónicas en Madinat al-Zahra se realiza desde dos
tipos cle intervención distintos: por una parte laredacción y ejecución de proyectos de obra queafectan a conjuntos homogéneos donde la actua-ción qr-riere ser integral, incluyendo la consolida-ción de pintura mural, e1 tratamiento de pevi-mentos, la recuperación en la medida de lo posi-b1e de los bienes muebles o inmuebles asociados yalgunos intentos de restauración que faciliten lalectura del monumento. El objetivo último de
estos proyectos no es sólo mejorar el estado de
conservación de las estructuras o, al menos, ralen-tizar su proceso de deterioro, sino rambién la ade-cuación de esos coniuntos a la visit¿r pública.
Desde esta perspectiva se encarÉja en I99l Ia
redacción del Proyecto de Consolidación y ade-cuación a la visita pírblica de las Unidades Resi-denciales Sr-rperiores y Espacio Trapezoidal al surde las mismas, en el que se contempla una conso-lidación completa de las estructuras: limpieza de
las fábricas originales, toma de juntas, reparaciónde sillares y sustitución de aquellos excesivamentedeteriorados por piezas nuevas, restitución delagunas, eliminación de enfoscados de cemento y
sustitución por otros cie cal, recrecidos regulado-res de altura y coronamiento de protección, pre-servación de pavimentos originales de barro e ins-talación de otros nLrevos con piezas de idénticasdimensiones y textura, consolidación de pinturamural. etc.
Otro tipo de intervención se reaiiza desde 1a
óptica del mantenimiento y la reparación diarias,donde se contemplan toda una serie de pequeñasintervenciones, unificadas en sus objetivos y plan-teamientos teóricos, tendentes a garanttzar La
supervivencia de elementos muy deterioradoshasta la definitiva intervención mediante un pro-yecto de consolidación. A este segundo tipo per-tenecen 1as actuaciones llevadas a cabo por perso-nal del Conjunto a lo largo de 1991, retomandoexperiencias de otros años.
Constituyen por naturaleza intervencionesmuy puntuales destinadas a consolidar elementos
deterioradr¡s que se materializan en el resanado dejuntas entre sillares y su posterior consolidacióncon mortero de cal y arena, reposición de elemen-
tos desprendidos como frtrgmentos de sillares, de
mochetas, poyetes, etc., cllLe pueden provocar des-
piomes y derrumbamiencos mayores. La interven-ción no afecta, pues, a la cotalidad de la estructti-ra, sino a sus pllntos más deteriorados o elementosmlry concretos, con e1 objetivo de paralizar unproceso de deterioro más grave y preservar datos
arqueológicos importantes para la investigación.Este tipo de trabajos con carácter cle urgenciaconstituyen sólo medidas caucelares que en nin-gúrn momento eliminan la posibilidad y necesidad
de e je cutar proyectos de consolidación másamplios.
E1 mortero utilizado en estas consolidaciones
es de cal. Con frecuencia la reposición de elemen-
tos o piezas en su lu¡¡ar ori¡¡inal ha necesitado la
introducción de grapns cle acero inoxidable clue
permitieran una írptima fijación cle las piezas. En
ningún momento se han completado lagunas,recrecidos de cuzrlquier tipo o sustituciones de
piezas muy deterioradas por otras nuevas, opera-
ciones que formarían parte ya de actuaciones de
mayor envergadura.
Con estos criterios. se han realizado 33 inter-venciones en las siguientes zonas y estrllcturas de1
Alcázar:
- Crttlía r,rcidenta/ del Jardin fi'ontero al eúficir.t
basilical superior,
Dos intervenciones de restitllción de fragmen-tos desprendidos, y posterior consolidación,pertenecientes al voladizo del banco cor¡idoadosado al muro occidental.Tres intervenciones de cor¡ección de desplaza-
mientos y desplomes de piezas, y posterior con-solidación de fábricas, en otros tantos puntosde los bordes del pavimento de sillares (láms.
li y 16).
- Pírtico.
Una intervención de saneamiento y consolida-ción de la fáb¡ica del poyete adosado a la jamba
meridional del arco central.
- Andín l{orte d.e/ Jardín Alto.Tres intervenciones de restitlrción y consolida-ción de fragmentos desprendidos del voladizode1 andén.
Pabellón Central del Jardín Alto, Estancias ubica-
das en el costada \Xr de la alberca S.
Una intervención de restitución y consolida-ción de fragmentos originales desprendidos,pertenecientes a la jamba S de la estancia ubi-cada al N de la letrina.
Carnint, de Ronda Bajo, Extrerno orienta/ de/ tnura
Norfe.
Una intervención destinada a corregir desplaza-mientos y desplomes, y posterior consolida-ción, de los sillares de la hilada superior.
Baño de la¡ /cabitaciones anejas al Salón de Abd a/-Rabtnan IIL Leñera ) erl,tncia.t c0ntigii.t.t.
Tres intervenciones de restitución de fra¡¡men-tos desprendidos de sillares, corrección de des-
plazamientos de piezas y posterior consolida-ción, en el muro S de 1a estancia ubicada al Ede la leñera, jamba \ü7 de la puerta N de ésta y
andén E del patio de la leñera.
S abat.
Dos intervenciones de restitución de fragmen-tos desprendidos y posterior consolidación en
los contrafuertes meridionales del muro occi-dental (Lims. 17 y 18).
Espado Ti'apezoida/.
Tres intervenciones destinadas a corregir los
clesplazamientos de los peldaños superiores en
cada una de las 3 escaleras existentes en dichorspacio (láms. l9 y 20).
flna intervención de restitución y consolida-ción de un fragmento desprendido del salmer Eperteneciente al arco trilobulado de la escalera
occidental.
Vit i,nda orien/a/ de Serui¡i0,,
ljna intervención consistente en la restitucióny posterior consolidación de fragmentos de
sillares desprendidos, pertenecientes a 1a jamba
E de la puerta de acceso al corredor que comu-nica con la casa de Ya'far.
Casa de Ya'far.
Cuatro intervenciones de restitución de frag-mentos de sillares desprendidos, corrección de
desplazamientos de piezas y posterior consoli-dación en estructuras pertenecientes a las es-
tancias de acceso y en 1a escalera del patio prin-cipal.
Baííc, de la terraza superior (Baño de Ya'far). E:-lancia c/e acce.ro c/esde /a ca.ra de Ya'far,
)10
Una intervención de restitución de sillar des-
prendido y consolidación general'de la fábricadesmembrada que conforma la jamba \)7 de 1a
puerta S.
- Viuienda de la ¿lherca.
Dos intervenciones destinadas a corregir des-
plazzrmientos de piezas originales, reposiciónde fragmentos desprendidos y posterior conso-
lidación en los escalones superiores del t¡amoW de la escalera y en el muro E de Ia alacena
bajo e1 tramo oriental de la misma.
- Patio de lot Pilare¡.
lJna intervención de restitución y consolida-ción de sillar original en e1 4.' pilar del pórticooriental.
3.2. Consolidación de pintura mural
3,2, L Acluaciín arqueolígica de emergencia para
/a conso/idación de /a pintura rnara/ en /d "ttittiendade/ patto de /a a/l.terca,
Esta vivienda constituye una importante edi-ficación que organiza su estructura alrededor de
un patio central ocupado por un pequeño jardín
con alberca. En el costado N, una monumentalescalera de doble tiro establece la comunicacióncon los edificios del escaión superior. En cada unode los lados pequeños del jardín (E y \XZ), se abren
habitaciones paralelas mediante sendas portadas
de triple arquería decoradas con ataurique. Excep-
to éstas, todos los paramentos del edificio ibanrecubiertos del usual enlucido de mor¡ero pintadoen blanco con zócalc¡ de color rojo almagra cuya
técnica es presumiblemente al fresco, variando en
su ejeci-rción e1 volumen y las capas o estratos de
mortero para Llniformar las irregularidades delsopofte.
Antes de la intervención las pinturas presen-
taban un alto grado de deterioro, provocado porla degradación del soporte de sillares (disgrega-
ciones superficiales, arenización, eflorescenciassalinas, etc.) que originó el de los revoques, afec-
tados por sensibles separaciones de 1os paramen-tos, creando cavidades ¡ellenas de depósitos que
agravan el proceso sobre todo en los bordes supe-
riores, los cuales aparecían generaimente arquea-
dos hacia fuera produciendo el desprendimientode los fragmentos. La superficie pictórica aparecía
muy carbonatada, producto del afloramiento y
220
precipitación de sales disueltas por la humedadambiental, a 1o que se unía 1a acción de los micro-organismos, líquenes y musgos, cuya concentra-ción provocó calvas en el intónaco o bufamientosinternos que generaron la desmembración delmortero (Iám. 2l).
La intervención comenzó por la realización de
una limpieza de las superficies pictóricas, elimi-nando, en seco, acúmulos terrosos, depósitos orgá-
nicos y estratos salinos. El tratamiento de consoli-dación de ios morteros requería una fijación pre-via de la película pictórica con el fin de quepudiera ser manipulada en húmedo sin suf¡ir alte-raciones. Para ello se utilizó Paraloid B-72 diluí-do en disolvente nitroceluloso, cuya trama abiertapermite la transpiración natural del muro duranteel desarrollo de ia intervención, eliminándolo de
las superficies una vez finalizadas las operaciones
de consolidación.En la consolidación de los morteros y su fija-
ción al soporte se utilizó un material aná1ogo al
original, eligiendo para ello hidróxido y carbona-
to cálcicos, en proporción 1:1, con adición de un
3% de Primal AC-)3, aplicados mediante inyec-ción para rellenar las cavidades internas. Se trata-ron con este método todos los revestimientos cuya
fijación al soporte no presentaba grandes proble-mas de desprendimiento, corrigiéndose a1 mismotiempo los desplazamientos existentes. En los
casos en que el excesivo deterioro del soporte hizoimposible este tipo de tratamiento, se procedió al
arranque del revestimiento para sanear e1 para-mento de sillares, reponiéndolo en su lugar orir:i-nal una vez consoiidado convenientemente. Comcr
adhesivo se empleó mortero de cal y arena de síli-ce en proporción l:2. Asimismo, se restituyeron a
su lugar original, con idéntico adhesivo, diversos
fragmentos desprendidos. Por ú1timo se resanaron
y consolidaron 1os bordes con mortero de ca1 y
arena dándoles una textura y caída adecuadas para
evitar los depósitos de agua.
La intervención concluyó con un tratamientoherbicida y fungicida general con el fin de evitarel surgimiento de vegetación parásita y el creci-miento de microorganismos (Iám. 22).
La obra de consolidación ha afectado a untotal de 18 m'de pintura mural (fig.4). En ellos
se incluyen algunos fragmentos que ya habíansido intervenidos con anterioridad, pero cuyo ace-
lerado deterioro hacía aconsejable una revisión de
las consolidaciones y la aplicación de un nuevotratamiento más adecuado.
La ejecución del proyecto fue llevada a cabo
entre los meses de junio y agosto de 1991 por laempresa AGORA, S. L., contando con un presu-puesto global de 2.521 .840 ptas.
3.3. Mantenimiento y obras de infraestructura.Proyecto IARA
En su segunda anualidad, con un presupuestoglobal de 27.500.000 ptas., este proyecto se haconcretado en .l unidades de actuación referidas
fundamentalme nte a obras de infraestructura.limpieza y purificación paisajística y ordenación e
integración de espacios pertenecientes al exteriorde la zona excavada de1 Alcázar.
3.3.1 . I-inpieza 1 pttrificación paisajística de los
Jardines Alro 1 Bajo
Concluído a finales de 1990 1o esencial de
esta actuación, se ha proseguido durante los pri-meros meses de 1991 la labor de limpieza y puri-ficación paisajística de los dos jardines, procedién-dose a la poda y saneamiento de las especies arbó-reas y arbustivas, sin sustituir ninguna de las exis-tentes hasta tanto no se posean los resultados defi-nitivos de la investigación paleobotánica actual-mente en curso (n ambos espacios.
i.3.2. Tratarn)ento y Ttoda de especies arbustiuas 1arbórea¡ 1 fratarniento herbicida genera/
Incardinada en la actividad diaria de manteni-miento de Madinat al-Zahra,la actuación ha con-tinuado la labor, iniciada también en 1990, de
poda de todas las especies del Conjunto, tanto las
de los jardines ya reseñados como 1as existentes en
el jardín frontero al edificio basilical superior.
Asimismo, se ha continuado durante todo199L, el tratamiento herbicida de muros, pavi-mentos y demás estructlrras arquitectónicas que
iban siendo objeto de limpieza, con el fin de pre-venir y/o eliminar 1os daños causados por la vege-tación parásita.
3.3.3. Lintpieza de canalizaciones
Concluída en 1990 1a acometida y distribu-ción interior de agua, al quedar instaladas las
tuberías y bocas de riego que aprovisionan de
a¡¡ua potable al AIcázar, el trabajo sobre el s.istema
de saneamiento original se ha cent¡ado, durante199I, en la limpieza y desescombro de las dos
redes de canalizaciones existentes en la viviendaoriental de servicios y en la llamada casa de Ya'far.
Ambos conjuntos no pudieron ser plenamenteprospectados en su momento, ni efectuar el consi-
guiente levantamiento planimétrico compieto,debido a que se encont¡aban muy colmatados porderrumbes y sedimentos provenientes de arrastres
y acumulaciones antiguas.
El desescombro total ha afectado a unos 75
m. lineales. Esto ha permitido clarificar el. trazado
exacto de las redes señaladas y sus conexiones con
otras secundarias. Tanto en la vivienda de servi-cios como en la casa de Ya'far, el sistema aparece
estructurado mediante una canalización maestra
que drena de E a \7 y en la que desembocan cana-
lizaciones perpendiculares de orientación N-S ó S-
N, que vierten las aguas procedentes de letrinas ypatios.
Esta labor de desescombro y limpieza, llevada
a cabo durante los meses de octubre a diciembre,ha proporcionado un abundantísimo materialcerámico, de vidrio y huesos, muy fragmentado y
rodado, concentrado fundamentalmente en dos
puntos: la canalización E-\7 de la vivienda orien-tal de servicios, en las inmediaciones del horno de
cocina, y la canalización E-S7 que atraviesa el
patio principal de la casa de Ya'far, en las proxi-midades del registro ubicado en su andén orien-tal.
Integrado por un volumen extraordinario de
piezas, algunas de ellas completas, la importanciadel material cerámico exhumado radica en el
hecho de constituir un repertorio bastante com-pleto de formas y técnicas, bien documentadotopográfica y estratigráficamente, cuyo estudiopermitirá aclarar, al menos en parte, la problemá-tica planteada por 1a cerámica aparecida en ante-
riores excavaciones, cuya carencia de referencias
exactas limita grandemente el alcance de 1a infor-mación arqueológica que proporciona.
3.3.4. 0rdenaci6n upacial y parificación pai.rajít-tica de /a zona Norte exterior de Madinat al-Za/tra
Desde la perspectiva del paisaje, la zona de lasierra que se eleva al norte de Madinat al-Zahraconstituye una parte esencial del entorno geográ-fico y natural de la ciudad, cuya integración en
221
este medio físico realza ios valores topográficos yvisuales que justifican su emplazamiento en este
lugar preciso, y que se revelan determinantes paraentender el propio yacimiento. De ahí e1 especialin¡erés puesto en su cuidado y conservación.
La ordenación espacial y purificacion paisajís-tica de esta zona norte se materiahzó en dos inter-venciones simultáneas. Una de ellas. comenzadaen diciembre de 1991, tenía como objetivo laordenación paisajística del borde inferior de laiadera del monte, concretándose en la plantaciónde diversas especies arbóreas y arbustivas simila-res a las existentes en el entorno del yacimientoque habían sido empleados en el período de vidade 1a ciudad, como son almeces, olivos, encinas,arrayanes, adelfas, etc. Destaca la repoblación delterreno alrededor dei depósito regulador de agua,que tiene por objeto su semiocultación medianteuna panralla de árboles.
La otra intervención se ha centrado en elcamino clue discurre paralelo por el exterior a Iacerca de mampostería que cierrtr Maclinat al-Zahra por su lado norte. La cerca había sido ya
consolidada y rehecha parcialmente en 1989. Elcamino tiene su inicio en la puerta de entrada aledificio de recepción del Conjunto y desembocaen 1a carretera cerca del cruce que lleva a SantaMaría de Trassierra. Su reparación y acondiciona-miento ha consistido en la creación de un firmenuevo en todo su recorrido. El pavimento es de
tierra apisonada entre la carretera y la cancela y de
cantos rodados entre ésta y la puerta de entrada alCon junto, quedando los bordes delimitadosmediante fábrica de piedra. Por úlcimo, en elborde norte se ha dispuesto una pequeña cunetapara canalJzación y drenaje del agua de lluvia,mientras que se ha mantenido y limpiado de
escoml¡ros y vegetación ei foso que separa elcamino de la cerca de mampuesto. El camino se
cierra a la circulación de vehículos en su enlacecon la carretera mediante una cadena entre dos
pivotes de granito (láms. 2i, 21y 21, fig. 5).
La intervención dio comienzo en diciembrede 1990 y finalizó en diciembre de 1991, ejecu-tando el proyecto redactado por 1os arquitectosdon Jerónimo Sanz Cabrera y don Juan CuencaMontilla. La dirección de esta obra recayó en elarquitecto don José A. Gómez Luengo.
Con un claro criterio museográfico, el acondi-cionamiento del camino tenía por objeto hacer de
él un paseo y mirador sobre la medina, suscepti-ble de aprovechamiento por parte dei público
222
visitante, así como disponer de una vía de acceso
al Conjunto para entrada de materiales en eltramo central del Alcázar.
4. DIFUSION
4. L Mater ial didáctic<-r
El crecimiento ininterrumpido del número de
visitantes en Madinat al-Zahn desde 1985, gene-ró la necesidad de orientar la visita, desde unaperspectiva divulgadora, ofreciendo una mínimainformación que hiciera inteligibies las diversasestructuras y espacios que componen el recorrido.Durante estos años, dicha necesid¿rd se ha idocubriendo mediante la distribución gratuita de
un políptico que se reveló como un instrumentoválido en este sentido. En 1991 se realizó unareimpresión de 3.000 ejemplares que ha satisfe-cho, aunque de manera parcial, las exigencias en
este aspecto.
Sin embargo, el nivel alcanzaclo en la infor-mación sobre la ciudad a través de estos trípticosse ha ido revelando insuficiente. El avance experi-mentado por los trabajos de protección y conser-vación y, sobre todo, la profundización de lainvestigación, que ha aumentado considerable-mente nuestros conocimientos sobre 1a ciudad.precisaba de la creación de otros instrumentos de
divulgación que enriquecieran los ya existentes(políptico, carteles en el recorrido de visita, etc.).Así, entre diciembre de i990 y manzo de 1991, se
comenzó a preparar, para su futura publicación,una carpeta informativa compllesta por fichas de
cada una de 1as partes del recorrido de visita, conplanos, fotografías y textos lo suficientementeamplios como para transmitir una informaciónmucho más completa sobre el yacimiento. Se pre-tende con ésto la diversificación progresiva de 1os
canales divulgativos, permitiendo al público iaelección de los niveles de información que desee o
necesite.
4.2. Celebración de las "II Jornadas sobreMadinat al-Zahra"
La celebración de las I Jornadas sobre Madi-nat al-Zahra en noviembre de 1987, dos años des-
pués de iniciado el nuevo período de trabajos en
la ciudad, tenía como objetivo el efectuar unanecesaria puesta al día del estado de nuestrosconocimientos, al mismo riempo que pretendíaconvertir las Jornadas en una reunión periódica
que sirviera de forum para el debate científicosobre los avances de la investigación referidos a lapropia Madinat al.-Zahra y a1 período califal.
El aporte de los distintos especialistas partici-pantes, que habían trabajado de forma sistemátic¿sobre Madinat al-Zahra o habían centrado su
investigación en el mundo califal, evidenció laenorme dificultad de conocer este período de al-Andalus sin el concurso de los datos proporciona-clos por esta cir-rdad. Unos y otros piantearon e1
estado de la cuestión y, sobre todo, señalaron e1
tipo de interrogantes que la ciudad debía resolveren el fi-rturo inmediato.
El avance real experimentado durante estos
años en el conocimiento de Madinat al-Zahra,las-trado en buena medida por el aún inmaduro pro-ceso de organización administrativa y la escasez de
las intervenciones, se reveló insuficiente paraplantear las II Jornadas como Lrna nueva puesta aldía clel estado de nuestros conocimientos sobre laciudad y sobre la más general del Califato andalu-sí. Por ello, nos centramos en el mundo del Emi-rato, a la búsqueda de los ¿rntecedentes socioeco-nómicos, políticos y artísticos que hicieron posi-ble el surgimiento de la ciudad como culminaciónde un nuevo orclen de cosas que hoy valoramoscomo el triunfo definitivo del estado islámico en
al-Andalus.Desde esta perspectiva, Madinat al-Zahra se
convierte en la concreción fo¡mal del triunfo de
ese nlrevo estado y permite que el ConjuntoArqueoló¡¡ico recoja una investigación sólida,pero ¿rlin dispersa, tealtzada en estos últimos años
sobre el período emiral, que debe tener como refe-rente último a la propia cir-rdad. De ahí la signifi-cación que adquiere el título genérico dado a estas
II Jornadas, .al-Andaius antes de Madinat al-Zahra,', revelador del papel que debe jugar elConjunto en la actual investigación sobre e1
mundo andalusí durante los siglos VIII al XI.Las jornadas se celebraron durante los días 2
al i de diciembre en el Palacio de Congresos de
Có¡doba y contaron con la participación de doce
especialistas nacionales y extranjeros que aborda-ron cuatro temas principales:
- Ltr conquista y el poblamiento (referido éste a lazona g,eot\táfica de las actuales Andaiucía,Levante y Algarbe portugués), tratado en 7
ponencias que recogían los últimos resultadosde la investi¡¡ación sobre el proceso de islamiza-ción de a1-Andalus.
- La política fiscal y monetaria.La organización social.
- La cultura material, tratada en 3 ponencias so-
bre arquitectura y decoración.
El éxito de la reunión se evidencia por los más
de 300 asistentes inscritos.E1 presente volumen de los Cuadernos de
Madinat aI-Zahra está declicado íntegramente a iapublicación de las actas de estas Jornadas.
4.3. Publicación del vol. 2 de los Cuadernosde Madinat al-Zahrc
En la presentación de la revista que donManuel Ocaña hacía en el vol. 1 de los Cuadernc¡s
de Madinat aI-Zahra, salidos a la luz en 1988,expresaba su deseo de que la publicación se conso-
lidara como el instrumento que proyectara a lacomunidad científica, nacional e internacional, el
proceso seguido para la reclrperación de este Con-junto Arqueológico, y que se planteara, al mismotiempo, como Lrna revista rigurosa y abierta en laque se atendieran todos los aspectos relacionadoscon la cultura material islámica de los sigios IX yX
Esta consolidación, comprometida por el lap-sus de 4 años en que no se ha editado, aparece ya
como una realidad con 1a salida, en diciembre de
1991, del vol. 2. En ese número se ha respetado la
estfllctura prevista en sll primer volumen, agru-pando los trabajos en tres secciones. La de Estu-dios está integrada por 6 artícuios, 4 de ellossobre temas arqueológicos no referidos a Madinatal-Zahn, entre los que destaca un artículo póstu-mo cle Manuel Ocaña sobre las "Inscripcionesfundacionales de la Mezquita de Córdoba", y
otros dos sobre materiales de la propia ciudad(escuituras romanas y cerámica); la sección Variacontiene un artículo sobre el avance de los resulta-dos de la I.A.U. en la muralla isiámica cordobesa:
por último, la Crónica da cuenta de los trabajosrealizados en el Conjunto durante el trienio 1 988-90.
Esta estructura se verá modificada, como ocu-rrió en e1 primer volumen e igual que en el pre-sente, cuando se haga necesaria la publicación de
las Actas cle las Jornadas sol¡re Madinat al-Zahra.La publicación de los Cuadernos supone un
reto importante para el Conjunto Arqueológico.No sóio por 1a necesidad de contar con un adecua-
do instrumento de difusión entre la comunidadcientífica nacional e internacional, sino también,
I l2
y fundamentalmente, porque expresa la voluntadde potenciar el papel de esta ciudad como catali-zador de un amplio segmento de la investigaciónactual sobre arqueología islámica andalusí.
4.4.VI Campo Internacional de tabajo deMadinat al-Zahra.
En el marco de la pro¡¡ramación *Verano
Joven !1" de la Junta de Andalucía, y como venía
siendo habitual desde 1986, durante los días 16
al 30 de julio se celebró el VI Campo Internacio-na1 de Trabajo de Madinat al-Zahra. La experien-cia de años anteriores aconsejó en esta ocasión el
diseño de actividades arqueológicas en directaconexión con el programa de trabajo desarrolladoen el Conjunto, propiciando al mismo tiempo elcontacto directo de los participantes con ei mate-rial arqueológico del yacimiento.
Esta VI edición ha contado con dos puntos de
interés:
- Limpieza, desescombro y eliminación de vege-tación parásita en las estancias ubicadas en elcostado occidental del Patio de los Pilares. Se
trataba de realizar una de licada labor de limpie-za tntegral, controlada arqueológicamente porpersonal del Conjunto, que paliara los proble-mas de deterioro causados por la vegetaciónespontánea y los acúmulos terrosos en las zonas
bajas de los muros, pinturas murales y camas de
mortero) preservando datos arqueológicos esen-
ciales para la interpretación de las estrlrcturas ydel espacio edificado.
En esta actividad se incluyó la limpieza mecáni-ca total y una ordenación básica del abundantematerial decorativo existente en la zona, así
como el tratamiento herbicida de suelos y fng-mentos de ataurique.
- Limpieza, inve ntario y almacenamiento delmate¡ial epigráfico perteneciente al PabellónCentral de1 Jardín Alto y a la Mezquita.
Como en ediciones anteriores, se ha cuidadoespecialmente e1 carácter formativo del Campo.La actividad diaria se ha completado con abun-dantes expiicaciones sobre el u¡banismo de la ciu-dad, 1a importancia de sus materiales específicos yla metodología de trabajo seguida en e1 Conl'unto,en un intento por acercar a los participanres laproblemática de la protección, conservación e
i nvesrigación del yaci m ienro.
224
4.5. Biblioteca
Iniciada a finales de 1989, período en que se
catalogó una sexta parte del fondo bibliográfico,la tarea de Inventario y Catalogación de la Biblio-teca del Conjunto, realizada por la bibliotec¿riadoña Adela Redondo Ecija, ha quedado práctica-mente concluída durante los meses de julio a sep-tiembre de 1991.
En esta labor de catalogación y clasificaciónse ha utilizado el siguiente material:
- Reglas de Catalogación, editadas por ia Direc-ción Generai del Libro y Bibliotecas del Minis-terio de Cultura en 1989.
- Lista de encabezamientos de materias para las
Bibliotecas Públicas, editada igualmente poresa Dirección General en 1987.
- Clasificación Decimal Universal (C.D.U.), 5.'edición.
Pretendemos, en un futuro próximo, la for-mación de un .,tesauro" de términos precisos, conIa concreción y especificidad que la bibliotecarequiere.
El fondo catalogado -algo menos de las apro-ximadamente 100 monografías que se poseenjunto con unos 15 títulos de publicaciones perió-dicas completas- se encuentra ya en condicionesde ser consultado, disponiéndose en los ficherosde varios ingresos: autores, títulos, mate rias,C.D.U., lugares, etc.
No obstante, el progresrvo e ininrerrumpidocrecimiento de la Biblioteca con fondos de disrin-ta procedencia (compra, intercambios con otrasinstituciones, donativos, etc.), aconseja el plantea-miento de un trabajo continuado, para evitar laacumulación de fondos sin catalogar y permitir supronta disponibilidad por e1 púrblico.
Como objetivos básicos para un futuro próxi-mo se plantean la informatización de la bibliotecay la rcalización del vaciado bibliográfico del con-tenido de las revistas, dos trabajos importantesque redundarán en la mejora técnica y de los ser-vicios oFrecidos por ella.
I{OTAS
1. VENTURA VILLANUEVA, A., El abastecitúeüo de agtaen la Círdob¿ ranana. I El Acuedacto tle Val¿epilente\, Cór-doba,1993.
2. VALLEJO TRIANO, 4., "Crónica dei Conjunto. Años1988-1990", Caaderttos de lladinat al-Zahra, vol. 2,(1988-90), Córdoba, 1991.
ANEXO IRELACION DE PUESTOS
DE TRABAJO DEMADINAT AL-ZAHRA
DENOMINACION DEL P{JESTO DE TRABAJO A B
GRUPOADirector 1 1
GRUPO A Titulado Superior. 1-
GRUPO B Restaurador.............. I
GRUPO C Encargado
GRUPO C Delineante . . ... ... 1
GRUPO C Oficial 1." de Oficios ... 22
GRUPODAuxiliarAdministrativo.. 1 1
cRUPOEVgilante 1 t
GRUPO E Peón
GRUPO E Limpiadora
A: PLAZAS CONTE]VTPLADAS POI{ LA DIRECCION GENERALDE LA FUNCION PUBLICA AL 1' 07.9I,
B: ESTADO DE EFLCTIVOS REALES DTJRANTE 1991.
EI{ERO 3.r56 3.153 3.t32
FEBRERO...... 4.665 i,788 5.27 4
M4R2O......... 9.472 6.710 r0.21t
ABRIL 70.241 t2.924 lt.t021l MAYO 10.401 nt47 13.3t9
JUNTO. 4.624 1.105 5.274
JULIO 2.410 2.151 2.088
SEPTIEMBRE., '.424 '.1\1
3.372
OCTUBRE....... 5.485 t.506 7.362
NOVIEMBRE 1.096 5.827 1.078)2 DICIEMBRE.... 3.272 3.669 2.97 5
l1 TOTAL............. 66.163 12.294 67.738
ANEXO IIVISITAS EFECTUADAS EN ELCONJUNTO ARQUEOLOGICO
DE MADINAT AL-ZAHARATRIENIO 1989-199I
I 990 1991
T4 000
T3000
12000
11.O00
10 000
9.OO0
I 000
7 000
6.000
5000
4.000
3.000
2000
1 000
0Dtc
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ENE FEB MAB ABN MAY JUN JUL SEP ocr
EN
Fig. l: Sondeo 2.
Estatigrafía.
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226
17.7.
'P¿2Pxlr '1
aP aU,u t211pra/u pl t1
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Fig. 3: Alzado de cara sur
¿/¿/ /j¿a2n parale/o 1, ,treriur
a la nnr¿lla norte dp la ciad¿d.
228
Fig. 1: Localización
de /as pinturas
intenenidas en laouiuienda del patia
de la a/berca,.
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Fig. 5: Düa//e cautractiul del ca¡nina conso/idado a/ exteriar de la cerca
210
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L¿ít¡¡. 2: Aorc¡lucto Jlhre el drrq, de Vtldeprenfet,
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=itf-;-=¡;::i,,-ii:.*'ir=.,.i1 ,..:i,,;tg:-
:"..L,ít¡¡. .):(,¡¡¡ter¿s en tn cl cort)j,,,/,5.tnt,t Au,t
'1, lt All,,tiJa
Ltín. 1: Canter¡.¡ cn e/
cortijo de Sant¡ Anatle /¡ A/L¿ir/¿.
232
--4::. a;-l:-
u:a=
::i'i::;lji':i--:5-::
:É.::i:
L,í¡1, 5; ,\I¡tro de c jerre occ jdcnta/ r/t l¿ ¡/n¡ttn jrt d/-Rtttttrtttrt4l'a
[,í¡¡¡. 6: Albau,la /¿ ¡/¡tutni¡ ttl-Rtrttuttartilla.
2ll
f:ii1;¡l+1¡
, . lri ,'::.
Lán¡, 7: To¡¡t¿ de
,tile;lft tt,n ¡and¿t
.lardh Alrti.
L¿ín¡. 8: To¡¡u de
il / /./.e-t tf tl J t'o n I oil d¿t.
lardin Alto.
214
' il} ;.r'd'j, .. I i'., i,] '
'
!1ld '".'i,, :rq'g{i
,.t,¡". .
lr. "-
..' \,
[-án. 9: Apertttra de trincheu
de excat¿tirht en el /ienzo parale/o
1, *letior a /a ntur¡t//¿ nart¿
de /¿ ciadad.
+L
Lán. 1(): Rerrute toncopir'¿t¡¿id¿l de crtntraftrerte en ld c./n/ N. del liutzo parale/t, 1 exteri,Lr a la ntur¿l/¿ narte de la titda.d.
*i,$l'i"i't''r
t,;,*,#". "
.\'\
,:
235
I'cín. I I: Estalo fret)o a l¡t interteniún t/e/ Iienzo para/e/a 1, exterior a lct luu.¿lla n,Lrte tle l¿t citdtr/.
L¿ít¡¡. l2: Inlen,ención en el lienza para/e/o 1' ¿xterilr tl lLt ilulr¿///d n¡trte dt /a ci¡t¡/¿d
236
Lcít¡¡. l3:E.rtadopru'io¿t/¿tinten'encióude/ esp'tcioa/\Y.de/edtficiocleeatdda
L¿íu. l1: Ejt././0 pliter)0r t lct )nÍertenúín del espacio ttl \V. del edific)o de enrra¿la.
231
:
Lát¡¡. l5: Desp/aru t/.e fiat,innuto ea crtjíz \Y. & edi.liio bas)l)ca/ sQerior.
Láa¡. 16: Parit¡¡er¡ta consttlid¿¿la en cnrjh V, de edificio batilical tuperior
238
219
''qt'itit""
[,tít¡¡. ] 9: Pa/t/¿ñat Jt e.¡ulera \Y. tlt Eslt¿¡io'1'rtpe:oidal
Ltit¡¡. 2l:Estala tfu /t littlwtt ¡¡t¡trtt/ tn /'t "tiuit¡Ldt tfu /tt t/berct,
240
Ltlt¡¡. )): E¡t'tdo th ltr ftirtltrr tttttrt/ tlt.t:ptít le lt jnttn'tntiú¡
i;:::€.:*::tk:a*; .4; .'
Ltit¡t. 2-): Ctiltiilri ilortc t\teri01' t/ /.tt .crLt/
211
Lrít¡¡. 2ti:
Cdtuino norte exterior
a /a cerca desltttís
de /¿ intertenciín.
Lcín.2i:C¿¡nintt norfe exterir.tr
a la nrta despuís
dt la inten¿nciín,
242
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