construcción de sentidos subjetivos y discapacidad intelectual
Post on 28-Nov-2021
12 Views
Preview:
TRANSCRIPT
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 1
Construcción de sentidos subjetivos y discapacidad intelectual
Laura Isabel Urrea Acevedo
Universidad Católica de Pereira
Facultad de ciencias humanas, sociales y de la educación
Programa de psicología
Línea de investigación en formación, cognición y cultura
Pereira
2011
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 2
Artículo de investigación
Construcción de sentidos subjetivos y discapacidad intelectual
Laura Isabel Urrea Acevedo
Tutora
Adriana Morales Franco
Neuropsicóloga
Universidad Católica de Pereira
Facultad de ciencias humanas, sociales y de la educación
Programa de psicología
Línea de investigación en formación, cognición y cultura
Pereira
2011
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 3
Tabla de contenido
Tabla de contenido ...................................................................................................................... 3
Introducción ............................................................................................................................... 5
La discapacidad como un constructo social .................................................................................. 6
Sentidos subjetivos ...................................................................................................................... 7
Los sentidos subjetivos de una persona en situación de discapacidad intelectual leve .................... 9
Conclusiones ............................................................................................................................. 10
Referencias ............................................................................................................................... 11
Navas, P., Verdugo, M. y Gómez, L. (2008). Diagnóstico y clasificación en discapacidad intelectual. Intervención Psicosocial, 17, 143-152. Recuperado en marzo de 2011, de http://redalyc.uaemex.mx/redalyc/pdf/1798/179814018004 .................................................... 12 Rojas, S. (2008). La "voz" de las personas con discapacidad intelectual en investigación educativa. Revista de educación, 345, 377-398. Recuperado en enero de 2011, de http://www.revistaeducacion.mec.es/re345/re345_16.pdf ......................................................... 12
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 4
Construcción de sentidos subjetivos y discapacidad intelectual1
Laura Isabel Urrea Acevedo2
Resumen
Este artículo fue realizado con la intención de indagar en torno a las categorías de sentidos
subjetivos, discapacidad intelectual y contexto; analizando cómo se interrelacionan, cuál es el
resultado de ello, cuáles las posibilidades de lograrse un acercamiento y hasta dónde se ha
estudiado, cuáles son las consecuencias de visibilizar estos conceptos y que implicaciones tiene
para el sujeto. Se recogen las narrativas de una persona en situación de discapacidad leve
buscando un acercamiento general sobre sus sentidos subjetivos alrededor de la discapacidad en
relación a su contexto.
Palabras clave: Discapacidad intelectual, Sentidos Subjetivos, Contexto, Subjetividad, Identidad
Abstract
This article has been written with the purpose to know around subjective senses, intellectual
disability and context; analyzing how they are related, and what is the objective, and also know
the possibilities to get an approach to this persons, taking into account the different concepts for
this person, some narratives has been studied to know a general sense of the subjective meaning
around disability related with the context.
1 Este artículo es realizado como requisito para optar al grado como Psicóloga y está articulado al proyecto de investigación denominado Representaciones Sociales de la Discapacidad Intelectual y su influencia en el desarrollo de Destrezas Adaptativas de Vida en Comunidad.
2 Estudiante de X semestre del Programa de Psicología de la Facultad de Ciencias Sociales, Humanas y de la Educación de la Universidad Católica Popular del Risaralda. Adscrita al grupo de investigación en Cognición, Educación y Formación en la línea de investigación de Cognición y Cultura.
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 5
Key Words: Intellectual disability, Subjective Senses, Context, Subjectivity, Identity‘’El sujeto es la voluntad del individuo de obrar
y ser reconocido como actor…
pues actor no es aquel que obra con arreglo
al lugar que ocupa en la organización social,
sino aquel que modifica el ambiente material
y sobre todo social en que está colocado…’’
Alain Touraine (1994), citado por Eroles; 2003
Introducción
Este artículo surge del interés en construir nuevos conocimientos alrededor de la
discapacidad intelectual, partiendo de la pregunta por las subjetividades de quienes se
encuentran en esta situación; aunque las consideraciones de los estudiosos de este
constructo son valiosas, se pretende resaltar los sentires que surgen en la cotidianidad de
las personas que la vivencian. Para ello se realizó una revisión sobre el estado de arte del
tema y otra teórica con el fin de contextualizar y centrar los intereses conceptuales; se
plantearon unos presupuestos sobre las formas como la sociedad tradicionalmente ha
comprendido y por tanto se ha relacionado con la discapacidad y con los sujetos en esta
situación y sobre la posibilidad de tener un acercamiento a lo subjetivo de acuerdo a las
características de los niveles de discapacidad.
Se indagó sobre los Sentidos Subjetivos de una persona a través de sus narrativas,
para finalmente visibilizar cuáles son las implicaciones que esto trae para sí mismo y de
qué forma se da la interacción con su contexto de acuerdo a ello. Aunque el sujeto nace
inserto en una cultura, en la que interactúa y construye alrededor de unas representaciones
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 6
ya elaboradas, sobre hechos o situaciones de diferente índole, cada quien a partir de ello,
se significa y contribuye a modificar lo ya entretejido por discursos previos.
Se decide trabajar principalmente alrededor de los sentidos subjetivos ya que se
consideran como unos de los componentes principales de la subjetividad, la socialización,
la construcción de identidad, entre otros fenómenos que transversalizan e inciden en la
lectura particular del mundo y por tanto, la posición que se asume en él. Se toma el
sentido como una formación sin limitación en relación a la palabra (González Rey, 2010),
es decir, el sentir particular no es inherente al lenguaje mismo, sino al contexto en el que
sea puesto, entendiéndose también, que a la vez, una misma unidad semántica está dotada
de disímiles sentidos otorgados por una misma persona; aunque en un contexto o cultura
se tienen ciertas convenciones o se legitiman comportamientos como un sinfín de
subjetividades convergentes, todos los actores sociales viven esas convencionalidades de
manera diferente.
La población en situación de discapacidad como el eje central de la investigación
denominada Representaciones Sociales de la Discapacidad Intelectual y su influencia en
el desarrollo de Destrezas Adaptativas de Vida en Comunidad, realizada por el grupo de
investigación en Cognición, Educación y Formación de la Universidad Católica de
Pereira, sigue siendo aún en medio de los planteamientos modernos que desde afuera
permean las investigaciones latinoamericanas, un sector marcado, excluido y fuente de
muchos aspectos a explorar.
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 7
El interés de este artículo, reside en la pregunta por las significaciones
individuales y subjetivas, que van construyendo individuos en situación de discapacidad a
lo largo de sus vidas, en un mundo que entreteje de significado su situación de una
manera tal vez diferente a lo que el mismo lo hace; las personas alrededor de los sujetos
en situación de discapacidad, construyen representaciones en torno a ellos y al tenerlos a
su cuidado piensan y determinan su futuro, pero, ¿cómo se leen estas personas en
situación de discapacidad a sí mismas?
Lo novedoso al realizar esta indagación, se encuentra en relación a la poca
visibilización de subjetividades encontradas en las investigaciones de los actores
principales del tema abordado, ¿cómo es el proceso de su construcción y hasta qué punto
las mismas están determinadas o limitadas por las deficiencias orgánicas?.
Sacar a flote las vivencias del sujeto y los entramados de sus experiencias
particulares, es en sí mismo un fin valioso, pero igualmente es enriquecedor para el
contexto, especialmente para quienes más interactúan con ellos, tanto familia, escuela,
pares, entre otros. Las investigaciones encontradas alrededor de la discapacidad, muestran
unas búsquedas por los sentidos e interpretaciones que desde afuera le dan terceros a esta
situación, pero muy poco se encuentra acerca de las voces de los directamente implicados.
Rojas (2008), realizó un estudio llamado ‘’La voz de las personas con
discapacidad intelectual en la investigación educativa’’ en Santander, España, con el
objetivo de dar a conocer cómo un grupo de jóvenes de un hogar institucional era
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 8
apoyado o limitado en las elecciones, decisiones o gestiones que debía realizar
diariamente; se realizaron revisiones de documentos institucionales, se entrevistaron a los
profesionales del hogar y se tuvieron en cuenta las observaciones hechas por los jóvenes
en situación de discapacidad. Los resultados obtenidos hacen referencia a que por más
autodeterminación que manifiesten estos sujetos, es subestimada por el contexto
inmediato, es decir, el hogar en el que se encuentran, obteniendo con ello una
subyugación de sus intereses a cambio de los que los profesionales que los asisten,
suponen que ellos necesitan.
La autora de este estudio, destaca la importancia de realizar investigación donde
se hagan partícipes las personas en situación de discapacidad y aplicar los resultados a su
beneficio, pues aunque no con una intención negativa, la mayoría del conocimiento
construido en torno a este tema, viene de personas que conviven con ellos, y son quienes
disponen del conocimiento de su situación.
La discapacidad como un constructo social
Hablar de discapacidad es introducir un tema tratado por muchos autores; varios de ellos,
en su tarea de humanizar y desprender la característica de ‘’discapacidad’’ de la
configuración total como ser monolítico, subsumido a esta designación, han transformado
lo teorizado desde las posiciones etiológicas que la asumen como una condición, una
marca o un estigma, llegando hasta el punto de categorizar el concepto como parte de una
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 9
situación, es decir, un apéndice de la vida del sujeto que aunque transversaliza su
desarrollo y es una característica de su ser, su existencia no es leída desde allí.
La discapacidad, como una de las categorías en las que se ha enmarcado el mundo
con la intención de comprenderlo y concretarlo, surge en contraposición a la categoría de
lo normal, entendiendo este último concepto como la “conducta que concuerda con los
ideales de una cultura dada’’ (Ardila y Bunge, 2002, p. 268), así como se conciben unos
parámetros de normalidad orgánica, el contexto también establece unos límites para
connotar que es ‘’aceptable’’ y que no lo es. Con relación al desarrollo cerebral normal,
este concepto, sería explicado como lo esperado de un sujeto nacido bajo condiciones
óptimas, de allí que la discapacidad pueda entenderse como una ‘’característica más de la
diversidad humana que resulta de la interacción entre la persona y el entorno social que la
rodea, que será el responsable último de que una dificultad se convierta en una
discapacidad…’’ (Navas, Verdugo y Gómez, 2008, p. 147).
La discapacidad intelectual, equivale a la convergencia entre una deficiencia y la
limitación que la misma pueda generar a nivel social; en este caso sería consecuencia de
un daño o una falencia a nivel biológico, por naturaleza ubicado en el cerebro, pues como
bien se sabe, cada función fisiológica y psicológica básica y superior, está en correlación
con el funcionamiento cerebral. Ardila et al. (2002), afirman que:
A medida que el cerebro se desarrolla, emergen una cantidad de nuevas facultades
o habilidades (…) el período comprendido entre el nacimiento y el fin de la
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 10
adolescencia, es el de crecimiento cognitivo y conductual más rápido siempre que
las circunstancias ambientales lo permitan (p.162-163).
Al generarse un daño cerebral, se obtiene una repercusión en la conducta
adaptativa, en la toma de decisiones, el razonamiento, la planificación, la independencia,
entre otros, ubicando al sujeto en desventaja a nivel social; su diagnóstico tal y como lo
afirman Navas et al. (2008), partía anteriormente del análisis del desempeño en tres
ámbitos: limitaciones significativas en el funcionamiento intelectual, limitaciones
significativas en la conducta adaptativa (manifestada en habilidades conceptuales,
sociales y prácticas) y por último, que haya tenido su inicio antes de los dieciocho años;
estos aspectos a evaluar contribuyeron inicialmente a que se hiciera una clasificación en
función de la ayuda y beneficios que pudieran recibir los sujetos en situación de
discapacidad. Actualmente desde una perspectiva multidimensional que busca
comprender y evaluar la discapacidad desde un funcionamiento integral y no como partes
aisladas, se tienen en cuenta para el diagnóstico algunas áreas más que hacen parte de los
procesos del sujeto susceptibles a evaluar, tales como, funcionamiento intelectual,
conducta adaptativa, salud, contexto e interacciones, participación y roles sociales (Navas
et al.).
El Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, (DSM IV – TR,
2002), no hace referencia al concepto de Discapacidad Intelectual, sino que clasifica el de
Retardo Mental para lo que se toma en cuenta únicamente el Coeficiente Intelectual (CI)
en los siguientes niveles: leve, moderado, grave y profundo. El nivel leve, se considera
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 11
ubicado en el 85% de la población en esta situación, se diagnostica si se identifica un CI
de 70 a 50/55, un mínimo deterioro en las áreas sensorio-motoras, se da la posibilidad de
aprender habilidades académicas hasta el nivel de educación primaria, pueden necesitar
orientación y asistencia cuando se encuentren sometidos a situaciones de estrés.
El nivel moderado, corresponde al 10% de la población con discapacidad, con un
CI de 50-55 a 40-35, se da un desarrollo social muy pobre, durante la etapa escolar
progresa hasta alcanzar el nivel de 2º o 3º de educación primaria, en el área laboral se
espera que realice algún trabajo semiespecializado o sin especializar bajo supervisión y
también requieren de orientación y supervisión cuando se encuentran bajo estrés. El nivel
grave, afecta del 3 al 4 % de la población con discapacidad intelectual, se encuentra un CI
de 40/35 a 25/20, hay un desarrollo motor y del lenguaje expresivo mínimo, aprenden a
conversar y son educados en hábitos de higiene y en el ámbito laboral realizan tareas
simples bajo una estrecha vigilancia. Por último, el nivel profundo, corresponde a un CI
inferior a 25-20, en el que se encuentra un mínimo funcionamiento sensoriomotor,
requiriendo un entorno muy estructurado con supervisión constante y pudiendo
perfeccionar por medio de entrenamiento, la autonomía y las habilidades de
comunicación básicas, según el DSM IV-TR (2002).
Esta información, sin pretender un alejamiento de la perspectiva del documento, se
considera relevante en primer lugar en cuanto a las predicciones que aunque no son fijas,
suelen mostrar un bosquejo de lo que a partir del CI puede identificarse en las personas
evaluadas y en segundo lugar con el fin de visualizar las restricciones que se obtienen al
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 12
hacer una indagación únicamente alrededor de las ‘’capacidades’’ del sujeto;
comprendiendo con esta clasificación, que innegablemente la marca física, uno de los
vértices de la situación de discapacidad intelectual, está en estrecha relación con sus
capacidades y permitiría de alguna manera decir de que es capaz la persona en el
momento de la evaluación, pero una vez más, no es ese el interés central aquí, pues lo que
pretende revisarse es la posibilidad por la indagación en lo subjetivo frente a la
discapacidad.
Los aspectos psíquicos sin correlativo orgánico alguno, es decir, los que no son
consecuencia de un daño o estímulo químico, producen una reacción biológica, pero
como genuinamente psicológicos, llegan a ser igual de incapacitantes. Los procesos que
escapan a lo físico, a lo tangible o sea los aspectos subjetivos, los que son construídos y
no son dados genéticamente, juegan un papel importante no sólo en relación a la situación
de discapacidad, sino también a cada una de las diversas condiciones que componen el
ser; siendo entonces importante reconocer que ante un hecho dado, se construyen
alrededor del mismo, significados y sentidos disímiles, constituyendo éstos una realidad.
De esta manera, la discapacidad intelectual connotada como una situación, no es un hecho
de características fijas, sino que varía de acuerdo a las condiciones bajo las que sea
abordada y principalmente bajo el contexto en el que se desenvuelva el sujeto.
Barrios (2005), realizó una investigación en Cali, Colombia, con el objetivo de
explicar el autoconcepto y el funcionamiento de las familias de niños que eran resilientes
frente a la discapacidad; la metodología utilizada fue estudio de caso con múltiples
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 13
fuentes de evidencia, siendo la población 5 niños y sus padres. La población se abordó
mediante entrevistas a profundidad y una técnica proyectiva llamada complementación y
los instrumentos usados fueron, Escala de percepción del autoconcepto infantil y una lista
de frases para complementar. Los resultados obtenidos hacen referencia a que los niños
presentan un autoconcepto y unas características familiares fundamentalmente positivas,
el autoconcepto favorecedor está relacionado con el saber que son y que sienten por ellos
mismos, cuales son sus lugares favoritos, entre otras preferencias, saben que son capaces
de hacer y cuales son las personas importantes para ellos siendo principalmente su
familia; se encuentra en los niños un amor hacia sí mismos y confianza en lo que hacen
exitosamente, encontrándose en mayor porcentaje una imagen positivamente en ellos. Se
encontraron según Barrios, características familiares positivas, enmarcadas en núcleos
familiares unidos, con padres cálidos y participativos en la cotidianidad de sus hijos,
concluyendo finalmente, que la interrelación de dichos elementos les permitió a los niños
desarrollar un estilo de vida resiliente.
En esta investigación de corte cualitativo, es de rescatar de la misma manera en la
que pretende el interés del artículo, que aspectos de orden psíquico tienen un gran
potencial para brindar una calidad de vida mejor y unas connotaciones que permeen una
mayor funcionalidad en la vida cotidiana. Es importante visibilizar que reconociendo la
particularidad del sujeto en situación de discapacidad, en una relación circular, quienes
están a su alrededor, en este caso los padres, sacan a flote los aspectos positivos de la
situación y los niños construyen una concepción de sí mismos más ‘’sana’’.
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 14
En otra investigación llevada a cabo en Salamanca, España, ‘’ Calidad de vida
relacionada con la salud en personas con discapacidad intelectual en España’’, realizada
por Mirón, Alonso, Serrano y Sáenz (2008), se tuvo el propósito de estudiar las
percepciones que tienen personas en situación de discapacidad, sobre la Calidad de Vida
Relacionada con la Salud (CVRS). Dicha investigación se realizó por medio de un
estudio descriptivo transversal, con 265 personas que fueron entrevistadas personalmente
y además desarrollaron el cuestionario de salud SF-36, buscando explorar ocho
dimensiones de la calidad de vida. En los resultados del estudio, se encontró que los
participantes perciben su calidad de vida relacionada con la salud como buena, en mayor
medida en las dimensiones de rol físico relacionado con aspectos de sus actividades
diarias y función física relacionada con la realización de actividades habituales en la vida
diaria, y se obtuvo la percepción más negativa en la dimensión de función social, que
abarca el análisis de la función de integración a la comunidad; los autores destacan la
importancia en desarrollar nuevos métodos para evaluar la calidad de vida para cada nivel
de intensidad de la discapacidad intelectual, propuesta que aboga nuevamente por la
indagación de subjetividades.
Es importante tener en cuenta que se encontró que las personas en situación de
discapacidad, se sienten más satisfechas al estar vinculadas laboralmente y al estar en una
comunidad y no en una institución, pues disfrutan más los roles que asumen, así, siendo
valioso este estudio como medio para hacer notar que en un nivel medio la percepción de
CVRS es positiva y que algunos aspectos que son connotados como no asequibles para
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 15
ellos como el trabajo, o una integración a un hogar, no son imposibles de alcanzar por el
hecho de estar en situación de discapacidad intelectual, sino potenciadores de motivación.
Sentidos subjetivos
‘’La subjetividad, tanto individual como social, está en desarrollo constante,
y resulta afectada por las condiciones en que el sujeto se exprese. ’’
González-Rey (2000)
A un lado del diagnóstico y el discurso científico sobre los aspectos orgánicos y sus
recomendaciones sobre los pasos a seguir, el actuar frente a un hecho, está mediado por lo
que se conoce o lo que se cree de él; de esta manera las personas pueden no tener
conocimiento científico alguno sobre un tema y sin embargo le suponen algunas
características a partir de lo que en el contexto próximo se construye con base en las
percepciones, constituyendo una realidad particular. Este proceso hace parte de una
aproximación y significación subjetiva tal y como lo son los sentidos subjetivos. Para lo
que nos concierne, se ha tomado la subjetividad desde la concepción de González-Rey
(2000), de la siguiente manera:
Sistema de significaciones y sentidos subjetivos en los que se organiza la vida
psíquica del sujeto y de la sociedad, por tanto, la subjetividad no es una
organización intrapsíquica que se agota en el individuo, sino un sistema abierto y en
progreso que caracteriza también la constitución de los procesos sociales (p.24).
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 16
La categoría de sentido según lo afirma González Rey (2010), fue utilizada por
Vigotsky, teórico de origen soviético, en su perspectiva histórico cultural, siendo
equiparada en la psicología occidental con la categoría de significado. Inicialmente, el
autor la trató como un ente fluctuante según las circunstancias; esta concepción, estaba
inclinada a explicar el funcionamiento de la psique como un sistema. No obstante, no
estaba anudada su comprensión a un acercamiento a través de dicho concepto a la
personalidad.
Más adelante abordó la categoría de sentido como lo que da cuenta de lo afectivo
y lo cognitivo, hasta que finalmente, afirma González Rey (2010), Vigotsky determinó la
categoría de sentido como “… una formación dinámica, fluida y compleja que tiene
varias zonas,… el significado es una de estas zonas”. Teniendo en cuenta estos
planteamientos, sería preciso entonces afirmar que si bien hay un significado
convencional para cuanto compone el mundo, y éste tiende a ser fijo, no es lo único que
enmarca la lectura individual, pues el sentido de la palabra y/o el pensamiento, concepto
en el que vendría incluido el significado, está determinado también por un afecto. A esto
también se le agrega como conclusión, que además de desligar el sentido del lugar en el
que se encontraba como un paralelo con el significado, se le constituye como una
categoría en sí misma, de una naturaleza variable, pues sólo el significado está dado de
manera universal.
Las disertaciones de Vigotsky sobre el sentido y el significado, sirven de base a las
construcciones teóricas sobre el tema de interés para este artículo, pues más adelante en la
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 17
historia y en el trasegar del abordaje investigativo de tendencia cualitativa, González-Rey,
rescata la categoría de sentido para darle forma a una planteada por él, Sentido Subjetivo,
como una unidad susceptible de abordaje al momento de investigar fenómenos sociales o
individuales, pues la determinó como una “articulación compleja de emociones, procesos
simbólicos y significados que toman formas variables…” (P 251) y tomando lo subjetivo
como una configuración de subjetividades que se organizan en las prácticas de individuos
y grupos, producciones propias de la cultura y lo social, pero no determinadas finalmente
por ellos.
Como se ha venido diciendo, los primeros sentidos se construyen socialmente,
para luego construir los individuales, no en un sentido cronológico sino en un sentido
psicológico, un proceso permite que se dé el otro, entonces, es en el escenario familiar
generalmente donde el sujeto interactúa por primera vez y se nutre de las concepciones
del mismo y de acuerdo a esto se prepara para la relación con el contexto; podría decirse
que las relaciones allí gestadas tienen la naturaleza de dotar al sujeto de herramientas,
unas veces más adecuadas que otras, para lograr una independencia y funcionalidad como
un sujeto individual y autónomo.
Con base en las representaciones construídas alrededor de la discapacidad, es
constante identificar en el discurso de los padres, en especial en el de las madres, un
desprendimiento de la vida propia para asistir a sus hijos, al “discapacitado”, produciendo
un amalgamiento entre ambos que en ocasiones llega a ser perjudicial, al imposibilitar la
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 18
autonomía, la posibilidad de asumirse como alguien independiente psicológicamente de
su cuidador, quien hace todo por él, así como lo describe Schorn (2002):
El exceso de dependencia que entretejen los padres y la familia con ese ser con
discapacidad, no ayuda al logro de una independencia (…) es una dependencia
mutua de los padres con el hijo y de ellos con sus familiares (…). El hijo no puede
ocupar “un lugar” si solamente ha sido marcado por lo que marca la discapacidad,
el no puedo (p.173).
Una de las influencias más significativas en los procesos de todo sujeto, y por
tanto quienes están en situación de discapacidad, es su familia más cercana, educadores y
demás personas con que interactúe regularmente, y de allí a que sean ellos los llamados a
plantearse estos cuestionamientos y a poner en práctica métodos diferentes para abordar
esta población. No se trata de decir simplemente que ellos también son personas, que
tienen una u otra capacidad en medio de su discapacidad, lo cual los marca
inevitablemente de la misma manera y continúan siendo juzgados ante los otros; es
necesario entonces, reconocerlos en su situación particular, en sus sentires subjetivos y
desde allí, darles un lugar en el mundo.
Tal y como lo afirman Berger y Luckmann (2003), la identidad constituye un
elemento clave de la realidad subjetiva ya que se encuentra en una relación dialéctica con
la sociedad, y es formada por medio de procesos colectivos, siendo así mismo mantenida
y transformada por las relaciones sociales. De allí que aunque hayan identidades
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 19
colectivas que cobijan a un grupo o comunidad determinados, la misma ha sido
construida por identidades individuales que cobran sentido a la luz del contexto en el que
se encuentran, pero que no es reductible a sus características. La identidad y subjetividad
como pilar de sentidos de vida, son construcciones cuyo marco de referencia es el
contexto socio-cultural en el que se dan los procesos de socialización, en medio del
intercambio de saberes inherentes y comunes a quienes han vivido inmersos en una
cultura determinada; dichos procesos de socialización se dan de manera natural, la
convivencia en familia, con las demás personas del contexto, la socialización en la
escuela, que brindó un conocimiento más útil y acorde al contexto, entre otras.
Díaz y Muñoz (2005), realizaron una investigación con el objetivo de explorar el
concepto de género como una categoría de construcción sociocultural, política e histórica,
y su relación con el concepto de discapacidad. El objetivo fue demostrar la urgencia de
definir las implicaciones que dicha relación tiene en la construcción de la identidad y la
subjetividad de las personas con discapacidad. La metodología utilizada fue un estudio
cualitativo de corte fenomenológico, sirviéndose de la revisión de documentales y
documentos teóricos alrededor de las categorías principales. Los resultados hacen
referencia a que la construcción de la categoría de género planteada como producto
sociocultural, político e histórico, influye en la construcción de la identidad y la
subjetividad a partir de cuerpos sexuados, como determinantes en sus posiciones dentro
de una cultura, teniendo al mismo tiempo repercusión en la situación de discapacidad.
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 20
A partir de esta investigación puede indagarse no solamente por la relación entre
género y discapacidad, sino también muchos otros factores que combinados llevan a
complejizar las representaciones que se tienen sobre los individuos enmarcados con estas
características, pues si bien el individuo orgánicamente tiene una alteración que ya lo está
excluyendo de lo que se considera normal, también los entramados psicosociales en los
que se van envolviendo y significando y como se ha venido viendo, es desde los mismos
que construyen su identidad. De acuerdo a esto entonces sería coherente afirmar que ante
un contexto sociocultural con construcciones diferentes sobre la discapacidad, género,
condición social, entre otras, el sujeto sienta y se identifique de manera diferente.
Sin embargo, a pesar de todos los elementos favorecedores o desfavorecedores del
contexto, involucrados a la hora de construir sentidos, se hace necesario tener en cuenta
que la indagación sobre los mismos, está mediada de acuerdo a los niveles de severidad
anteriormente mencionados, pues cada uno de ellos, tiene aunque no de manera rígida y
determinante, unos unas características intelectuales de partida en relación a las
dimensiones que se evalúan, es decir, no por hablar de construcciones subjetivas debe
asumirse un fácil acceso a lo que se pretende conocer de ellas, dependiendo entonces de
la consideración del funcionamiento intelectual, por una parte, los procesos cognitivos de
memoria, atención, percepción, razonamiento, producción y comprensión de lenguaje,
metacognición, solución de problemas, entre otros, que no se desarrollan de manera
óptima para lograr los propósitos ya mencionados, aún sabiendo que:
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 21
…la investigación en procesos cognitivos de sujetos con retraso se ha
aplicado a examinar sus diferencias…y lo que se ha hallado es, sin perjuicio de la
indudable evidencia de específicos déficit en ciertas fases, operaciones y/o
funciones del proceso cognitivo, las disfunciones más patentes son las que se dan
en las estrategias o procedimientos generales con que esos sujetos abordan la
información, la experiencia y las tareas (Marchesi, Coll y Palacios, 1999, p.279).
Además la conducta adaptativa, la forma en la que interactúe la persona, son
igualmente determinantes en la posibilidad de una comunicación funcional; pensando
entonces al nivel de discapacidad leve, como el que más permite la indagación por los
sentidos subjetivos.
Los sentidos subjetivos de una persona en situación de discapacidad intelectual leve
Como se introdujo inicialmente, uno de los intereses principales de este artículo es el de
visibilizar a los sujetos en situación de discapacidad; en este apartado, se exponen algunas
de las narrativas de F, un jóven colombiano en situación de discapacidad leve. Se
realizaron acercamientos por medio de entrevistas semiestructuradas que estuvieron
orientados a percepciones globales de su situación de discapacidad y de su vida en
general, no obstante, un gran porcentaje del contenido se direccionó con la intención de
rastrear aspectos sobre la socialización y los matices particulares que este sujeto en
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 22
situación de discapacidad experimenta y cómo los significa o les asigna sus propios
sentidos subjetivos.
En primer lugar se considera importante mencionar que en F no se identifica un
nombramiento literal de la discapacidad intelectual, de esta manera al hablar con él,
menciona su falta de entusiasmo en el estudio y su asistencia a un colegio de educación
especial durante algún tiempo en su infancia y adolescencia:
Pregunta: Bueno F, y cuéntame sobre tu estudio.
F: Pues, ¿sobre mi estudio? Yo estuve hasta tercero, estuve hasta tercero y ya ahí ya no
volví a estudiar, me iba… cómo le digo yo a usted… regular, porque… tuve un problema
allá con …con un pelado y tuve un problema con la profesora, le vendí la lotería a la
profesora y me… y de ahí ya no he vuelto a estudiar, primero estudié fue por allá por…
pa’allá… ¿cómo es que se llama eso?, pa’ Zaragoza, y después ya entré a estudiar a
Pinceladas .
Pregunta: ¿Estabas en un programa de educación especial?
F: Sí
Pregunta: ¿Por qué era un programa de educación especial?
F: Ah, pelaos que no pueden caminar, pelaos así que… que toca llevarlos al baño y todo,
darles la… darles la comidas a ellos y todo eso… les ponía cuidado a ellos y todo.
Pregunta: ¿Tú te pareces a ellos? ¿Tienes algo en común con ellos?
F: No… yo… ¿cómo le digo yo a usted?... yo soy buenos amigos de ellos, me gusta pasar
tiempo con ellos pero ya hace mucho tiempo que no veo a los pelaos que iban a allá;
Pregunta: ¿Por qué ibas a un colegio de educación especial y no a uno normal?
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 23
F: Mi mamá me quiso meter allá. Mi mamá y la hermana mia. Como yo me mantengo…
con los compañeros… tenía una recocha ahí de los compañeros y todo…llegaba a la casa
y llegaba allá… a veces me ponían a hacer aseo allá y de todo.
No obstante, F reconoce que le iba mal en las materias en general y su
inconformidad y poca disposición para permanecer en las aulas de clase debido a sus
cortos períodos de atención; al respecto dice sentirse bien al no dedicarse a actividades
similares pero igualmente hay un sentir enmarcado en la frustración, pues a pesar del
reconocimiento de incapacidad, manifiesta un interés por haber aprendido.
P: ¿Hay algo que no seas capaz de hacer?
F: Con las matemáticas Eehhh…me va más o menos, a mí en matemáticas y en español,
más o menos
P: ¿Y tú qué piensas de que te vaya más o menos?
F: Ah que es muy duro la… ah, matemáticas es muy duro pa’… ¿ pa’ qué?, pa’… sumar,
pa…la suma es muy dura pa…pa sumar, pa dividir, pa todas esas cosas es muy duro, a mi
me gustaría aprender y me gustaría...
Dentro de la institución a la que asistía F, los estudiantes ocasionalmente
desempeñaban otras funciones como hacer esculturas, pintar, tejer, aprender música,
danza, hacían mandados dentro de la institución, aseo, entre otras, -“Pregunta: ¿Te ponían
a hacer aseo allá dónde estudiabas? ¿Cómo te parecía eso?, - F: Eso me parece bien, a mi
me gusta… a mi me gusta… a mi me gusta, barrer, trapear, arreglar cocina, tender la
cama, y así…-Pregunta: ¿Te gusta trabajar?-F: Si me gusta’’. Esto hacía que F se sintiera
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 24
útil, siendo contrario en tiempos de desempleo en el que permanece en su casa solo gran
parte del tiempo produciéndole tristeza; lo que además de parecer una inferencia lógica,
es relevante para la situación de interés para este artículo, pues estas personas no
encuentran un trabajo fácilmente.
F ha trabajado en varias actividades, vendiendo bingo, vendiendo frutas,
empacando en supermercados y esto mismo lo ha pensado para su futuro, así como
también se siente tranquilo al pensar en vivir en pareja más adelante, “además de la
familia, en el futuro me gustaría vivir con la novia, aunque si mi mamá se muere ahora, le
diría a una tía que vive en España que mande por mí para irme pa’donde ella, a mi me
gusta mucho hablar con mi mamá y con mi hermana, cuando yo tengo un problema, mi
mamá es la que me aconseja, yo le digo…yo le digo…que tengo un problema y ella…y
ella, me ayuda o me aconseja”; lo anterior evidencia un sentimiento de seguridad frente a
su futuro, aún pensando en depender de alguien mas adelante, se percibe un manejo de
sus planes y consideración de las posibilidades que su contexto le ofrece.
Durante las narrativas de F, se observa un manejo del lenguaje por medio del que
se hace relativamente fácil tener una comunicación funcional con él y realizar un
acercamiento a sus sentires y percepciones; se encuentra que constantemente hay vacíos o
falta de rápida respuesta en aspectos que se asumen como cotidianos, tales como hablar
de sus miedos o dificultades, sería arriesgado asegurar sin una evaluación previa a que se
deben, no obstante se atribuyen tal vez al nivel de abstracción de alguna de las preguntas
hechas durante el diálogo, en contraposición al nivel de desarrollo cognitivo descrito
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 25
como concreto que desde lo teorizado acerca de la discapacidad intelectual, se le supone a
quienes se ubican en un nivel leve.
Conclusiones
La revisión de la relación entre las categorías sentidos subjetivos y discapacidad
intelectual, deja varios puntos importantes a considerar. El primero de ellos es resaltar lo
indispensable que se hace el continuar con la investigación cualitativa en torno a la
subjetividad de las personas en situación de discapacidad, pero ello con un fin además de
teórico, uno práctico que brinde transformaciones; si bien es innegable que la misma
puede indagarse hasta el punto que las habilidades intelectuales y sociales lo permitan.
Tratar de comprender y explicar la discapacidad sin haber hecho un acercamiento
a percepciones, representaciones, significaciones, sentidos y en sí a todo el conjunto de
subjetividades que la enmarcan, es un intento que sin duda arrojará resultados
incompletos, cada aspecto vértice de la discapacidad permite ver una realidad que
contribuye al constructo total que permitirá aprehender hasta dónde el mundo simbólico
lo permite, una situación encarnada desde la diferencia.
En el caso particular revisado en el apartado en el que se recogen algunas
narrativas, puede constatarse que esta persona en situación de discapacidad, tiene una
significación positiva de sí mismo en el sentido en que le permite ser funcional para el
contexto y para su cotidianidad; el sentirse como una persona capaz de hacer muchas
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 26
cosas para verse útil y tener su propio ingreso económico le provee de un sentido
diferente.
En cuanto al estudio anteriormente referenciado, en el que se relacionan
autoconcepto y características familiares con la prevalencia de resiliencia, podría decirse
que se encuentran convergencias, pues aunque no hubo un acercamiento a la familia, se
infieren de las narrativas de F, unas relaciones familiares favorecedoras, su madre está
ubicada en un lugar de colaboración y su hermana de compañía; de una manera similar se
evidencia un concepto de sí mismo adecuado para una independencia y desarrollo
personal; se piensa en unas figuras y relaciones familiares posibilitadoras encontradas en
el discurso de F, en la medida en la que constantemente al narrar actividades de su vida
cotidiana en varios contextos, las ubica como quienes le acompañan y aconsejan, más no
quienes lo coartan, necesariamente tiene un acompañamiento económico y de apoyo en
algunos aspectos, no obstante, no se lee en sus narrativas una inconformidad al respecto.
En relación al estudio realizado sobre las percepciones de personas en situación de
discapacidad intelectual institucionalizadas, se encuentran discrepancias en las narrativas
de F, pues se observa que, aunque en sus primeros años estuvo en un colegio como sería
lo convencional y lo requerido según lo dictan las políticas de primera infancia, más
adelante en su historia no se lee un sentir de subyugación o menosprecio de su voluntad,
si bien es cierto a este sujeto le gustaría aprender algunas actividades en las que le fue
regular en sus años escolares, se ha desempeñado en actividades que le producen
satisfacción. Es importante no dejar de lado que esto se debe en gran parte a las
características de su situación de discapacidad, pues como ya se mencionó, en los niveles
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 27
de mayor severidad los apoyos requeridos son mayores y por tanto, también su nivel de
dependencia física y psicológica; sin embargo la propuesta está en que aunque sean otros
quienes decidan por ellos y de quienes dependan, sean rastreados elementos de su
subjetividad y tenidos en cuenta para tomar decisiones más inclusivas en cuanto a
aspectos que los van a afectar directamente y situaciones de su vida cotidiana en las que
otros influyen.
Por otra parte, aunque las indagaciones se hicieron en un sujeto en situación de
discapacidad leve, se encontraron algunas dificultades en la aproximación, pues aunque
en algunas de estas personas se encuentran generalmente presencia de lenguaje, el mismo
tiende a ser muy concreto, lo que a su vez, siendo un reflejo de sus procesos mentales de
cognición y memoria, refleja que su lectura de la realidad no llega a un nivel muy
abstracto que permitiera hacer un estudio más profundo de sus sentires subjetivos, no
obstante, el interés reside en estudiarlos por si mismos y darles el tratamiento de sentidos,
más allá del tipo de pensamiento de una persona. Se sabe que el nivel leve, enmarca el
mayor porcentaje de personas en situación de discapacidad, por lo que se considera
importante que aún en medio de las limitantes encontradas y sin ir en detrimento de la
individualidad, estas subjetividades sean consideradas como un reflejo del sentir de estos
sujetos. Para llegar al punto de rescatar las subjetividades de estas personas, sería
necesario un acompañamiento de los profesionales pertinentes para que en su contexto se
den las transformaciones requeridas y que aquí se proponen, ya que aunque es necesaria,
no es un asunto de voluntad propia de padres o cuidadores, sino en gran medida un
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 28
aprovechamiento de los estudios realizados alrededor de la subjetividad en la
discapacidad.
Referencias
Ardila, R. & Bunge, M. (2002). Filosofía de la psicología. Barcelona, España: Siglo XXI
Editores.
Barrios, A. (2005). Autoconcepto y características familiares de niños resilientes con
discapacidad, el caso de una población del Caribe colombiano. Investigación y
desarrollo, 45 (2), 108-127.
Berger, P. & Luckmann, T. (2003). La construcción social de la realidad. Buenos Aires,
Argentina: Amorrortu Editores.
Díaz, L. & Muñoz, P. (2005). Implicaciones del género y la discapacidad, en la
construcción de identidad y la subjetividad. Revista Ciencias de la Salud, 3 (002),
157-167. Recuperado en marzo de 2010, de http://redalyc.uaemex.mx/pdf/562/
56230206.pdf
González-Rey, F. (2000). Investigación cualitativa en psicología, rumbos y desafíos.
México: International Thomson Editores.
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 29
González-Rey, F. (2010). Las categorías de sentido, sentido personal y sentido subjetivo
en una perspectiva histórico-cultural: un camino hacia una nueva definición de
subjetividad. Universitas Psychologica, 9, 241-253. Recuperado en agosto de 2010,
de http://redalyc.uaemex.mx/redalyc/pdf/647/64712156019
Asociación de Psiquiatría Americana. (2002). Manual Diagnóstico y estadístico de los
trastornos mentales, texto revisado. (DSM-IV-TR). Barcelona, España: Editorial
Masson.
Marchesi, Á. Coll, C. y Palacios, J. (1999). Desarrollo psicológico y educación. 3.
Trastornos del desarrollo y necesidades educativas especiales. Madrid, España:
Alianza Editorial.
Mirón, J., Alonso, M., Serrano, A. y Sáenz, M. (2008). Calidad de vida relacionada con la
salúd en personas con discapacidad intelectual en España. Revista Panamericana de
Salud Pública, 24 (5), 336-344. Recuperado en abril de 2011 de http://www.scielosp.
org/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1020-49892008001100006&lang=pt
Navas, P., Verdugo, M. y Gómez, L. (2008). Diagnóstico y clasificación en discapacidad
intelectual. Intervención Psicosocial, 17, 143-152. Recuperado en marzo de 2011,
de http://redalyc.uaemex.mx/redalyc/pdf/1798/179814018004
Sentidos subjetivos y discapacidad intelectual 30
Rojas, S. (2008). La "voz" de las personas con discapacidad intelectual en
investigación educativa. Revista de educación, 345, 377-398. Recuperado en enero
de 2011, de http://www.revistaeducacion.mec.es/re345/re345_16.pdf
Schorn, M. (2002). Discapacidad, Una mirada distinta, una escucha diferente. Buenos
Aires, Argentina: Lugar Editorial.
top related