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Cada antífona es uno de los nombres de Cristo, uno de sus atributos mencionados en las Escrituras

Cada antífona es uno de los nombres de Cristo, uno de sus atributos mencionados en las Escrituras

En la tradición católica romana, las antífonas de Adviento se cantan o se recitan en las Vísperas desde el

17 de diciembre hasta el 23 de diciembre.

En la tradición católica romana, las antífonas de Adviento se cantan o se recitan en las Vísperas desde el

17 de diciembre hasta el 23 de diciembre.

Además, cada una se refiere a la profecía de Isaías sobre la venida del Mesías.

Además, cada una se refiere a la profecía de Isaías sobre la venida del Mesías.

Al final, en esta presentación, se incluye una antífona dedicada a la Virgen María.

Al final, en esta presentación, se incluye una antífona dedicada a la Virgen María.

¡Oh Sabiduría!¡Oh Sabiduría!

Oh Sabiduría, que brotaste de los labios

del Altísimo, abarcando del

uno al otro confín, y ordenándolo

todo con firmeza y suavidad:

ven y muéstranos el camino de la

salvación.

Oh Sabiduría, que brotaste de los labios

del Altísimo, abarcando del

uno al otro confín, y ordenándolo

todo con firmeza y suavidad:

ven y muéstranos el camino de la

salvación.

«Reposará sobre él el espíritu de

Yahveh: espíritu de sabiduría

e inteligencia, espíritu de

consejo y fortaleza, espíritu de ciencia y temor de Yahveh.

Y le inspirará en el temor de Yahveh.» Isaías 11, 2 -

3

«Reposará sobre él el espíritu de

Yahveh: espíritu de sabiduría

e inteligencia, espíritu de

consejo y fortaleza, espíritu de ciencia y temor de Yahveh.

Y le inspirará en el temor de Yahveh.» Isaías 11, 2 -

3

¡Oh Adonai!¡Oh Adonai!

Oh Adonai, Pastor de la casa de

Israel, que te

apareciste a Moisés

en la zarza ardiente

y en el Sinaí

le diste tu ley: ven a

librarnos con el

poder de tu brazo.

Oh Adonai, Pastor de la casa de

Israel, que te

apareciste a Moisés

en la zarza ardiente

y en el Sinaí

le diste tu ley: ven a

librarnos con el

poder de tu brazo.

«Juzgará con justicia

a los débiles, y sentenciará con

rectitud a los pobres

de la tierra.

«Juzgará con justicia

a los débiles, y sentenciará con

rectitud a los pobres

de la tierra. Herirá al hombre cruel con la vara de su boca, con el

soplo de sus labios

matará al malvado.

Herirá al hombre cruel con la vara de su boca, con el

soplo de sus labios

matará al malvado. Justicia será el

ceñidor de su cintura,

verdad el cinturón de sus flancos.» Isaías 11, 4 - 5

Justicia será el ceñidor de su

cintura, verdad el cinturón de sus flancos.» Isaías 11, 4 - 5

¡Oh Raíz de Jesé!¡Oh Raíz de Jesé!

Oh Renuevo del tronco de Jesé, que te

alzas como un signo para los

pueblos; ante quien

los reyes enmudecen, y cuyo auxilio

imploran las naciones:

ven a librarnos, no tardes

más.

Oh Renuevo del tronco de Jesé, que te

alzas como un signo para los

pueblos; ante quien

los reyes enmudecen, y cuyo auxilio

imploran las naciones:

ven a librarnos, no tardes

más.

«Saldrá un vástago del tronco de Jesé,

y un retoño de sus raíces

brotará.» Isaías 11, 1

«Saldrá un vástago del tronco de Jesé,

y un retoño de sus raíces

brotará.» Isaías 11, 1

¡Oh Llave

de David!

¡Oh Llave

de David!

Oh Llave de David y Cetro de la casa de

Israel; que abres y nadie puede

cerrar; cierras y

nadie puede abrir:

ven y libra a los cautivos

que viven en tinieblas y en sombra de muerte.

Oh Llave de David y Cetro de la casa de

Israel; que abres y nadie puede

cerrar; cierras y

nadie puede abrir:

ven y libra a los cautivos

que viven en tinieblas y en sombra de muerte.

«Pondré la llave de la casa de

David sobre su hombro; abrirá, y

nadie cerrará, cerrará, y nadie

abrirá.» Isaías 22, 22

«Pondré la llave de la casa de

David sobre su hombro; abrirá, y

nadie cerrará, cerrará, y nadie

abrirá.» Isaías 22, 22

¡Oh Amanecer!¡Oh Amanecer!

Oh Sol que naces de lo

alto, Resplandor

de la luz eterna, Sol de

justicia: ven ahora a iluminar a los que

viven en tinieblas y en sombra de muerte.

Oh Sol que naces de lo

alto, Resplandor

de la luz eterna, Sol de

justicia: ven ahora a iluminar a los que

viven en tinieblas y en sombra de muerte.

«El pueblo que andaba a oscuras vio una luz grande. Los que vivían en tierra

de sombras, una luz brilló sobre ellos.» Isaías 9, 1 - 2

«El pueblo que andaba a oscuras vio una luz grande. Los que vivían en tierra

de sombras, una luz brilló sobre ellos.» Isaías 9, 1 - 2

¡Oh Rey de las

naciones!

¡Oh Rey de las

naciones!

Oh Rey de las naciones y

deseado de los pueblos,

Piedra angular de la Iglesia, que haces de

dos pueblos uno solo:

ven y salva al hombre,

que formaste del barro de la

tierra.

Oh Rey de las naciones y

deseado de los pueblos,

Piedra angular de la Iglesia, que haces de

dos pueblos uno solo:

ven y salva al hombre,

que formaste del barro de la

tierra.

«Porque una criatura nos ha nacido, un hijo se nos ha dado.

Estará el señorío sobre su hombro, y se llamará su nombre

"Maravilla de Consejero",

"Dios Fuerte", "Siempre Padre",

"Príncipe de Paz".» Isaías 9,

5

«Porque una criatura nos ha nacido, un hijo se nos ha dado.

Estará el señorío sobre su hombro, y se llamará su nombre

"Maravilla de Consejero",

"Dios Fuerte", "Siempre Padre",

"Príncipe de Paz".» Isaías 9,

5

¡Oh Emmanuel!¡Oh Emmanuel!

Oh Emmanuel,

rey y legislador nuestro,

esperanza de las naciones y salvador

de los pueblos:

ven a salvarnos, Señor Dios nuestro.

Oh Emmanuel,

rey y legislador nuestro,

esperanza de las naciones y salvador

de los pueblos:

ven a salvarnos, Señor Dios nuestro.

«Pues bien, el Señor mismo

va a daros una señal: He aquí

que una doncella está

encinta y va a dar a luz

un hijo, y le pondrá por

nombre Emmanuel.» Isaías 7, 14

«Pues bien, el Señor mismo

va a daros una señal: He aquí

que una doncella está

encinta y va a dar a luz

un hijo, y le pondrá por

nombre Emmanuel.» Isaías 7, 14

¡Oh Virgen de las

Vírgenes!

¡Oh Virgen de las

Vírgenes!

Oh Vírgen de las Vírgenes,

¿cómo sucederá esto? Porque ni antes se vio otra semejante a Ti.

¿Por qué me admiráis, hijas

de Jerusalén? Lo que estáis

viendo es un misterio divino.

Oh Vírgen de las Vírgenes,

¿cómo sucederá esto? Porque ni antes se vio otra semejante a Ti.

¿Por qué me admiráis, hijas

de Jerusalén? Lo que estáis

viendo es un misterio divino.

O magnum mysterium, et admirabile sacramentum,

ut animalia viderent Dominus natum,

jacentem in praesepio. O beata Virgo,

cuius viscera meruerunt portare Dominum Iesum Christum.

Alleluia, alleluia

O magnum mysterium, et admirabile sacramentum,

ut animalia viderent Dominus natum,

jacentem in praesepio. O beata Virgo,

cuius viscera meruerunt portare Dominum Iesum Christum.

Alleluia, alleluia

¡Oh gran misterio y admirable sacramento, que las criaturas vieran

al Señor nacido, acostado en un pesebre!

¡Oh bienaventurada Virgen, cuyas entrañas merecieron llevar

a Jesucristo, el Señor!¡Aleluya, aleluya!

¡Oh gran misterio y admirable sacramento, que las criaturas vieran

al Señor nacido, acostado en un pesebre!

¡Oh bienaventurada Virgen, cuyas entrañas merecieron llevar

a Jesucristo, el Señor!¡Aleluya, aleluya!

(Texto de la música coral). (Texto de la música coral).

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Felipe de Urca

Realizado por Yadira Mora Alfaro. Realizado por Yadira Mora Alfaro.

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