amalgama y embarazo[1]

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Page 1: Amalgama y Embarazo[1]

FA. García Gómez, CI. Fernández Hernández, JF. Martín Morales, J. Pesquera

60 DENTUM 2005;5(2):60-62

Original

Francisco A. GarcíaGómez1

Cayetano I. FernándezHernández2

José F. Martín Morales2

Jorge Pesquera2

1 Profesor titular URJC2Profesor asociado

URJC

DENTUM 2005;5(2):60-62

Amalgama y embarazo

Correspondencia:Francisco A. García GómezURJC. Ciencias de la Salud

Facultad de OdontologíaAvda. Atenas s/n

28922 Alcorcón. MadridE-mail:

[email protected]

Resumen

En la actualidad existe una gran controversia con respecto a la colo-cación y remoción de resaturaciones de amalgama, en la pacienteembarazada, debido a la posible toxicidad que pueda producir a nivelfetal o materno. El objetivo de este estudio es realizar una revisiónacerca del paso del mercurio a través de la barrera placentaria, y suacumulación en los tejidos, así como, sus efectos negativos. Existenestudios que demuestran el paso de todas las formas de mercurio através de la barrera placentaria en diferentes cantidades, pero no hayevidencias científicas que demuestren relaciones entre la aparición depatologías y la existencia de obturaciones de amalgama. Por consi-guiente es necesaria la realización de más investigaciones que permitanllegar a resultados concluyentes.

Palabras clave: Amalgama. Mercurio. Embarazo. Seguridad. Toxici-dad.

Summary

Currently there is a great controversy about the placement and theremotion of amalgam fillings in pregnant pacients, because of thepossibiliy of toxicity to fetal or maternal level. The study objective isto revise all the information about the mercury pass across theplacental barrier, its acumulation on tissues and the negative effects.There are studies that show that all mercury forms can pass acrossthe placental barrier but there is not scientific evidence of relationshipbetween amalgam fillings and pathology. Its necessary more studiesto arrive at conclusive results.

Key words: Amalgam. Mercury. Pregnancy. Safety. Toxicity.

Introducción

Los materiales empleados en las restauracionesodontológicas deben tener unas características idealesde biocompatibilidad, estabilidad y estética. Las condi-ciones específicas del medio oral (corrosión, cambios enla temperatura, microflora oral...) pueden producir mo-dificaciones en los materiales, posibilitando la apariciónde efectos secundarios.

En este artículo nos vamos a centrar en la controversiatodavía existente alrededor del uso de la amalgama yconcretamente en las pacientes embarazadas.

Generalidades

El elemento que más se ha investigado de la amalgamadental es el mercurio, se libera en forma de vapores que

serían los responsables de la posible aparición de efec-tos secundarios. El nivel de mercurio máximo permitidopara el organismo por evaporación es de 40 a 50 µγ1.

Los niveles de mercurio han sido estudiados en: sangre,orina y en el líquido amniótico2.

Niveles de mercurio en orinaSe han realizado numerosas investigaciones para cuan-tificar el mercurio que se excreta por la orina, siendo elnivel promedio de mercurio en orina de 0 a 20 µγ/l. Elnivel mínimo necesario para que aparezcan evidenciasde neurotoxicidad es de 25 mg/g, siendo este valor seisveces superior a los niveles de mercurio en orina atribui-dos a la presencia de amalgamas dentales3,4. La acumu-lación de mercurio inorgánico a nivel renal va a indicaruna exposición a largo plazo5.

Niveles de mercurio en sangreEl nivel normal de mercurio en sangre es de 1mg/100ml.El mercurio evaporado o inhalado es absorbido en un80-90% por el tracto respiratorio, pasa a los alveolospulmonares y se disuelve en la sangre6. El contenido demercurio en el torrente sanguíneo atraviesa la membranacelular de los eritrocitos gracias a sus propiedadeslipofílicas, allí se oxida y forma iones de mercurio7.

La presencia de vapor de mercurio en el ambiente va aser el responsable del aumento de estos niveles, por loque se concluye que estarán más expuestos a toxicidadaquellos individuos que estén mayor tiempo en contactocon éstos. Existen estudios que revelan la gran correla-ción existente entre los valores de mercurio en plasma yorina, y el número de amalgamas presentes en boca8. enun estudio realizado por Grandjean y col se observó unanotable asociación entre el aumento de mercurio en lasangre y la presencia de cuatro o más restauraciones deamalgama en boca9,10. Aunque también aparecen en laliteratura estudios que muestran lo contrario como en elrealizado por Stoz, et al11 . No existen evidencias quemuestren que las amalgamas colocadas en boca liberenmercurio a niveles perjudiciales para la salud12 En nues-tra profesión el personal de riesgo serían los odontólogosy el personal auxiliar, por lo que cabe considerar el tomaralgunas medidas de precaución. La utilización de unabuena irrigación y una correcta aspiración van a dismi-

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nuir el nivel de exposición a mercurio, evitando así losposibles efectos secundarios13.

Vías de contaminación

El origen de la contaminación en odontología sería porderrame accidental, errores en la manipulación de laamalgama y mal sellado de las cápsulas. También hasido detectada en las restauraciones de la boca del pa-ciente durante la aplicación, remoción y desgaste de lasuperficie de la amalgama14-16 (la remoción de amalga-mas mediante fresado multiplica los niveles de vapor demercurio hasta quince veces el máximo permitido)9. Elmercurio puede ser inhalado o ingerido, excepto la formaiónica del mercurio inorgánico, el mercurio elemental y elmercurio orgánico de cadena corta, al ser soluble en loslípidos atraviesa sin resistencia las biomembranas y seacumula en el organismo a través de la vía sanguínea,donde puede transformarse y volverse más tóxico. Tam-bién hay que tener en cuenta los procesos de evaporacióny corrosión que ocurren en boca y que pueden originar laliberación del mercurio, su paso a saliva y por tanto altorrente circulatorio.

El principal lugar donde encontramos acúmulo de mer-curio es el cerebro, donde puede originarse una toxicidadirreversible. El mercurio acumulado en el cerebro es oxi-dado y retenido, se aumenta la permeabilidad de la mem-brana plasmática al calcio lo que origina laneurotoxicidad16-18. Se ha demostrado la correlación exis-tente entre el número de amalgamas y su tamaño, y lacantidad de mercurio en el cortex occipital en humanos.Para otros autores como Eley, el principal órgano dondese va a acumular el mercurio son los riñones5.

La intoxicación crónica por mercurio causa el mercu-rialismo, cuyos síntomas son alteraciones neurológicas,mentales, hipersalivación, sabor metálico, insomnio, te-mor, pérdida de memoria, irritabilidad, modificacionesen el comportamiento, transtornos renales, inmunes ysexuales entre otros6,18.

A nivel fetal la intoxicación por mercurio va a produciralteraciones en el desarrollo, cambios en el tono muscu-lar y problemas con la deambulación .

Mercurio y embarazo

La placenta tiene un papel fundamental a la hora deproporcionar los nutrientes necesarios y el oxígeno alfeto, así como la protección frente a agentes tóxicos. Elmercurio de la amalgama puede atravesar la barreraplacentaria5,19,20, existen numerosos estudios en ani-males que muestran que todas las formas del mercurio(mercurio elemental y orgánico) atraviesan la barreraplacentaria en diferentes cantidades. El mercurio se vaa acumular principalmente en hígado, riñones y cere-bro fetal5,21,22, En un estudio realizado en ratas emba-razadas se observó que la concentración de mercuriotendía a aumentar al incrementarse las superficies con

amalgamas, es decir que el vapor de mercurio liberadoera dosis-dependiente de la cantidad de obturacionesde amalgama23. También se ha demostrado que la con-centración de mercurio inorgánico en el feto humano(sobretodo a nivel de hígado) aumenta según el núme-ro de restauraciones de amalgama que tenga la madre,y será mayor cuando se retire una amalgama mediantefresado para colocar otra7,24-27. Pero no todos los es-tudios realizados muestran esta clara correlación en-tre la presencia de mercurio y su paso a nivel fetal sinotodo lo contrario, así hay estudios acerca de los nive-les de mercurio en el líquido amniótico, que no de-muestran relación alguna con la presencia de amalga-mas dentales5.

Lindow, et al. midieron los niveles de mercurio en el pelofetal y materno en madres de un hospital, para estableceruna posible relación entre la existencia de restauracionesde amalgama en la madre y el aumento de los niveles demercurio fetal. LLegaron a la conclusión, que aunque síexistía un aumento en los niveles de mercurio en lasmadres que llevaban este tipo de restauraciones con res-pecto a las que no las tenían, no existía evidencia depatogenicidad28.

Los Estudios realizados en odontólogas y personal auxi-liar embarazadas acerca de la exposición ocupacional almercurio muestran la ausencia de daños o alteracionescongénitas tanto en la madre como en el bebé29,30.

Por tanto las investigaciones realizadas hasta el mo-mento actual no logran establecer parámetros definiti-vos que determinen su toxicidad, porque no existen evi-dencias científicas que soporten la teoría del daño fetalque podría producir el uso de amalgamas durante elembarazo4,20,31.

Conclusiones

– No se conocen los efectos reales del mercurio libera-do de la amalgama dental en el embarazo.

– El mercurio de la amalgama dental puede atravesarla barrera placentaria.

– La mayoría de los estudios analizados muestranque el uso de la amalgama dental es seguro.

– No hay evidencias científicas que muestren que lapresencia de amalgamas dentales produzcan alte-raciones del tipo neurológico, inmunológicas o de-fectos en el nacimiento.

– Se necesitan una mayor cantidad de estudios a largoplazo.

– Es necesario administrar a nuestras pacientes infor-mación veraz acerca de la seguridad de los materia-les dentales.

– Se deben tomar medidas de precaución específicaspara prevenir potenciales situaciones de riesgo.

– Se deben realizar controles periódicos de la concen-tración del mercurio en el aire (<50 mg/cm3) paraevitar riesgos innecesarios.

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