alternativa Época ii - nº 44

Montevideo

15 de abril de 2012

Época II Nº 44

350 MIL VECES

¡GRACIAS!

Por Pedro Bordaberry

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Vamos a Más Jóvenes

La fiesta la hacemos entre todos

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El sistema de seguridad interior en Argentina

Por el Dr. Jorge Alejandro Suárez Saponaro

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Liceos de Playa Pascual y Libertad

Por el diputado Gustavo Cersósimo

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AlternativaAlternativaAlternativaAlternativa Otra herencia maldita

de Tabaré Vázquez La deuda de Uruguay de la que no se quiere hablar

En la reciente y rauda visita del presidente José Mujica a su par venezolano Hugo Chávez, unos de los asuntos conversados fue la deuda que mantiene Uruguay para con Venezuela, a consecuencia de los acuerdos firmados en 2005 por el presidente en aquel momento, Tabaré Vázquez, con el mismo Chávez.

En 2005, Ancap realizó un convenio con Venezuela para financiar el 25 por ciento de las compras de crudo a 15 años, con dos de gracia y una tasa de interés del 2% anual. En aquella instancia se decía que un acuerdo de ese tenor era muy beneficioso para Uruguay.

Sin embargo, con el correr de los años, se ha vuelto una deuda que se ha acrecentado, a punto de hablarse de entre 700 y 830 millones de dólares su monto actual.

Ha trascendido que Ancap habría alcanzado un acuerdo con PDVSA por el cual se pagaría por anticipado con una quita en la deuda acumulada, siendo ello financiado por el Tesoro uruguayo, pero sin indicarse cifras, que se cerraría en las próximas semanas, según informaron El Observador y la Agencia Reuters.

El gobierno de Tabaré Vázquez que asumió ya en pleno crecimiento del país en aquel momento, le generó una deuda al Uruguay -que aún hoy día sigue sin ser clara en sus razones-, que heredó su sucesor Mujica, quien aún no ha solucionado a pesar de la bonanza económica y de constante aumento de la recaudación por concepto de impuestos.

Si se tienen recursos propios para afrontar compras internacionales y se ahorrara, ¿se necesitaría contraer deudas que se acumulan por su no pago? Foto: elrevolucionario.org

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350 MIL VECES ¡GRACIAS! Por Pedro Bordaberry

Trescientas cincuenta mil personas equivalen a ocho Centenarios llenos.

Si uno cierra los ojos y se imagina el Estadio Centenario lleno de gente, impresiona. Pero más impresiona imaginarse ocho estadios Centenarios llenos de gente.

Son más de trescientas cincuenta mil personas las que firmaron en la propuesta de Reforma constitucional que entregaremos con todo el Partido Colorado, el Sector del Herrerismo del Partido Nacional e integrantes de la sociedad civil el próximo Martes a la una.

Ocho Estadios Centenarios.

Pero si impacta la cantidad de firmas más llama la atención la velocidad con que se reunieron: en once meses. Algo inédito en la historia del país.

Cuando comenzó la campaña hubo dudas. Partidos sin tradición reciente de éxitos en este tipo de emprendimientos éramos los encargados de llevarla adelante.

Pero las dudas se disiparon el primer fin de semana cuando, sin promoción alguna, se reunieron cuarenta mil voluntades.

¡Un Estadio Centenario entero había

firmado el primer fin de semana!

En ese momento nos dimos cuenta que no era una cuestión de experiencia sino de propuestas sensatas.

La de la campaña para Vivir en Paz y con Más Seguridad no sólo lo es sino que fue visualizada por la población como una respuesta a los problemas gravísimos que enfrentamos hoy como sociedad.

Atención Se informa que por razones de agenda, se fijó como nueva fecha para el evento Política 2.0 el día miércoles 25 de abril, en lugar del 17 de abril oportunamente informado. Los esperamos!


La rápida adhesión de uruguayos de todos los Partidos, y los contundentes estudios de opinión de las encuestadoras (todas estiman la aceptación de la propuesta en guarismos cercanos al 70%), tuvieron un primer resultado.

El gobierno y los legisladores del oficialismo se dieron cuenta que debían cambiar su equivocada política en materia de seguridad ciudadana.

Tímidamente empezaron a caminar en el sentido que debían hacerlo.

Las firmas empezaron a lograr su cometido. Aunque todavía falta mucho.

La puesta en funcionamiento del SIRPA, un Instituto especializado en los menores que delinquen, es un ejemplo de ello. Si la propuesta de Reforma Constitucional no hubiera contenido la creación de un Instituto especializado en los menores delincuentes, seguiríamos como antes.

Pero no alcanza. El SIRPA debe estar fuera del INAU como se propone en la Reforma puesto que es distinto el tratamiento reeducativo, de seguridad, etc. que recibe un menor que delinque del que no lo hace.

El mantenimiento de los antecedentes de los menores más allá de los veinte años es otro ejemplo. Hoy se mantienen sólo hasta esa edad. Pero cayó el argumento del Gobierno de que “son sólo 450 los que delinquen”. En pocos meses ya existe un registro de 700.

Ese registro no es para estigmatizar ni para sancionar. Es para que el Juez, el día de mañana si un menor vuelve a delinquir siendo mayor, adopte las medidas de seguridad para proteger a las posibles futuras víctimas.

Penalizar más duramente a los mayores que utilizan a los menores para delinquir,

como proponemos, es otra necesidad. Hoy asistimos a muchos casos de mayores que utilizan a menores para violar la ley.

Bajar la edad de imputabilidad a los 16 años permitirá que no ocurran hechos como los que estamos viviendo. Por ejemplo, que no vuelva a suceder lo que pasó esta semana: un menor que mató a una madre y su hija, incendiándoles la casa, está en libertad por imperio de las normas vigentes.

Todo esto, sin embargo, no alcanza.

La entrega de las firmas el próximo Martes a la una de la tarde en el Palacio Legislativo es un comienzo. Lo que hace es habilitar el plebiscito que se realizará dentro de dos años.

Debemos seguir trabajando para que todos los uruguayos, sin importar de que Partido sean, enviemos un mensaje bien claro de que queremos vivir en Paz y con seguridad personal.

Esta no es una cuestión partidaria, sino de todos los uruguayos.

El paso que daremos el próximo Martes será, sin embargo, muy importante.

Más allá de todo será un grito bien fuerte del reclamo de todos los uruguayos de su deseo de empezar a recuperar la Paz que teníamos hace siete u ocho años y hemos perdido.

Será un grito que den ocho Estadios Centenarios llenos a la vez.

Nadie podrá decir que no lo escuchó.

Por ello gracias a las 350 mil voces que lo dieron con su firma.

Fuente: facebook.com/pedrobordaberryherran

Facebook:

Fitzgerald Cantero

Piali

Twitter:

@DipFitzgeraldcp


La fiesta la hacemos entre todos Como muchos recordarán, en el marco del partido Uruguay- Sudáfrica por el Mundial 2010 el Ministro del Interior Eduardo Bonomi concurrió junto a Diego Aguirre (en ese momento DT de Peñarol) al Liceo Nº 61 del Cerro para ver el encuentro. En dicha ocasión el Ministro presentó el ambicioso Programa “Pelota al medio a la esperan za” que pretendía consolidarse como una herramienta para el fomento del deporte si n violencia y con inclusión social. El anuncio desde un liceo fue oportuno ya que se asociaba la violencia en los liceos como una extensión de la rivalidad futbolística. Recordemos que en ese contexto se estaban desarrollando protestas por la inseguridad en los liceos Nº 13 (Ituzaingó), 57 (Cerro), 38 (La Teja) y 65 (Maroñas). ¿Qué ha sucedido desde entonces?

Lamentablemente la violencia continuó y las accione s del Ministerio del Interior han dejado mucho que desear. El punto de mayor tensión se alcanzó en Abril del 2011 cuando los enfrentamientos entre las barras de Lucas Píriz (Na cional) y Los pibes del carbonero (Peñarol) terminaron con la muerte del hincha Rodri go Aguirre. Pese a los antecedentes que existían al respecto, el conflicto en el barrio Aguada y las amenazas en la web, desde el Ministerio del Interior se desvincularon los hechos. Otra singularidad del fracaso de la política en esta materia se refleja en la inversión que Danubio ha realizado en cámaras de seguridad (U$S 30.000) pese a lo cual no se han obtenido resu ltados. Recientemente, el domingo 8 de abril del corriente en el Parque Capurro se enfrentaron Fénix y Racing registrándose nuevos enfrentamientos entre las parcialidades que ameritaron la suspensión del encuentro.

A pesar de la inoperancia, desde el 8 de Enero de 2006 la violencia en el deporte tiene un


marco regulatorio. Puntualmente la ley 17.951 en su artículo primero establece: “Se entiende por violencia en el deporte toda conducta agresiva, de hecho o de palabra, dirigida contra el público en general, participantes o autoridades organizativas de un espectáculo, que tienda a perturbar su normal desarrollo o a incidir en el resultado por medio de la coacción física o verbal. Se incluye, asimismo, la conducta de tales características producida en las inmediaciones del escenario y como consecuencia de la celebración del evento deportivo”.

Para sorpresa de todos , en el pasado mes de marzo el Ministerio del Interior anunció que estudia la forma de transferir la responsabilidad d e la seguridad interna de los estadios a los clubes. En este sentido, se informó que la Dirección Nacional de Información e Inteligencia tiene identificados a los cabecillas de las barras pero el derecho de admisión le corresponde a los clubes en la medida que los espectáculos son de “carácter privado”. De esta forma el gobierno busca deslindarse de toda responsabilidad por los disturbios en los partidos.

Para tomar en cuenta: A pocos días de comenzar el Mundial Sub 20 el pasado año en Colombia la acción de las barras bravas se agudizó en el torneo local. Esto motivó la acción de las autoridades que se vieron en la disyuntiva de apelara medidas de educación o de represión. Los legisladores avanzaron en un proyecto de ley a través del cual se tipificaron los delitos cometidos por menores de edad dentro de los recintos deportivos y la sanción a los adultos responsables. La ley castiga el ingreso de armas blancas o de fuego, e incluso el porte de algún fragmento de arma o corte. A su vez se reconoce que solo si el Estado, las entidades deportivas y los barristas establecen pautas de convivencia se podrá solucionar el “problema de raíz”.

En un caso singular, el club Deportivo Cali no toleró más los problemas ocasionados por su propia barra (Frente Radical Verdiblanco) tomando la dura decisión de suspender por 10 fechas el ingreso de los integrantes de la misma (previamente identificados). A su vez, cumplido el castigo se determinó que dicha barra no entrara al estadio con banderas ni instrumentos musicales por el período de un año.

NUESTRA OPINIÓN

Quienes concurrimos asiduamente a ver al club de nuestros amores queremos que en la cancha gane la pasión, pero nunca la violencia. La rivalidad bien entendida se manifiesta en el recibimiento, en el aliento constante, pero nunca con las armas ni en acciones pandilleras y cobardes. Quienes fomentan esto último por suerte son los menos y ya están identificados. Por

AlternativaAlternativaAlternativaAlternativa es una publicación quincenal producida con la cola boración de adherentes y de amigos de Alternativa Independiente, así como por el apoyo, c on artículos de opinión e información, de otros act ores políticos, sociales y técnicos, cuyo objetivo es di fundir las actividades de interés social, cultural y político que hacen a nuestro país, al Partido Colorado y a n uestra Agrupación, así como poner en conocimiento artículos de los diversos medios de prensa, que pue den resultar de particular interés. Nota: Las opiniones e informaciones vertidas son de exc lusiva responsabilidad de quienes suscriben los artículos, no comprometiendo la opinión de la publi cación ni de la agrupación política. Contacto : Tel. 099.777.269, E-mail : [email protected] Dirección: Fitzgerald Cantero Piali. Coordinación General: Leonardo Monzillo Costa. Colaboran en este número: Pedro Bordaberry; Vamos a Más Jóvenes; A.G.; Javier Suárez; Dr. Jorge Alejandro Suárez Saponaro; Gustavo Cersósimo; Gustavo Toledo.


lo cual, estimamos que la respuesta a la violencia debe poner en práctica el soporte jurídico existente y recaer sobre aquellos pocos inadaptados. La peor señal que puede dar un gobierno, es la inacción o el traspaso de responsabilidades a los clubes, como efectivamente se está haciendo. La consigna debería ser la siguiente: o se adaptan o de lo contrario quedan excluidos de los eventos deportivos.

Naturalmente, reconocemos que cualquier solución al problema de la violencia en el deporte deberá contar necesariamente con los esfuerzos del gobierno, periodistas, clubes y sus hinchas. No hay soluciones mágicas para un problema tan complejo. Pero por el mismo motivo, el gobierno no puede “pasar la pelota” a los clubes. La acción de los clubes debe ser complementaria a la voluntad rectora del gobierno.

A. G. Fuentes: http://www.elpais.com.uy/100617/pnacio-496031/nacional/Lanzan-plan-contra-violencia-en-el-deporte/ http://www.elpais.com.uy/110518/pnacio-567183/nacional/Violencia-en-el-deporte-alertan-sobre-pandillas-e-inaccion-policial/ http://www.lr21.com.uy/comunidad/1026817-policia-pasara-a-privados-control-interno-de-canchas-y-estadios http://www.ovaciondigital.com.uy/110407/futinter-558543/futbolinternacional/Colombia-intenta-frenar-a-los-barras-bravas/ http://www.ovaciondigital.com.uy/110512/futinter-566002/futbolinternacional/deportivo-cali-toma-medidas-contra-barras-bravas/

La opinión con altura y firmeza del diputado Fitzgerald Cantero Piali

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Domingo Arena y el Batllismo Por Javier Suárez (*)

Es muy probable que no le falte razón a Ortega y Gasset cuando define al Hombre por su naturaleza y la circunstancia que lo rodea. Más aún si nos retrotraemos a ese Uruguay del 900 que todo lo podía para hacer referencia a uno de ellos.

Quizás, como sostuviera Manuel Flores Mora, “Maneco”, la clave para comprender la vigencia de Domingo Arena a través de las generaciones esté en el rechazo a la solemnidad, virtud de todo aquello que es auténtico, verdadero y vivo.

De cualquier modo, a diferencia de lo que se oscila efectuar en estas ocasiones, comenzaremos por el final. En 1936, a sólo tres años de lo que sería su despedida, un cansado pero no por ello menos entusiasta Arena recordaría en un reportaje al conmemorarse el cincuentenario de “El Día” los difíciles como prometedores inicios del abogado, periodista y político junto al fundador del diario, José Batlle y Ordóñez.

Sin temor a equivocarnos, difícilmente se pueda ser testigo de una amistad tan entrañable entre dos personas: la del nieto de catalanes cuya obra marcará un mojón indiscutible y la del italiano Arena que, con mucha dedicación y algunos regalos de por medio a un maestro de Tacuarembó, dejaba su hogar infantil con el certificado salvador para continuar sus estudios universitarios en la capital.

En realidad, disociar su vida del Batllismo, así como su leal y fervoroso accionar de la trayectoria del líder histórico, resulta una quimera difícil de sobrellevar. La obra “Domingo Arena: realidades y utopías” de Miguel Lagrotta se muestra sumamente esclarecedora en dicho sentido.

Como legislador en ambas Cámaras, constituyente en 1917, gobernante, o bien,

desde la tribuna partidaria y el matutino “El Día” donde trabajó desde joven ocupando distintos cargos de redacción hasta alcanzar la dirección, supo ser uno de los principales animadores de las leyes sociales vinculadas a la jornada laboral, el salario mínimo, la abolición de la pena de muerte o el divorcio por causales o mutuo consentimiento.

Tampoco fue ajeno a los debates por la separación de la Iglesia y el Estado, por el ejecutivo pluripersonal, y, en definitiva, por la libertad y la sensibilidad hacia los desamparados.

Tal vez, en la vida de Domingo Arena, un pobre y desconocido inmigrante que supo ascender por méritos y virtudes, apasionado en las tareas, incondicional en todo momento pero con espíritu crítico e ideas de avanzadas, se trasluzca el paradigma reformista del Batllismo de las primeras décadas del siglo XX.

Consecuente con el proyecto en todo momento, romántico, idealista –recalcitrante colorado como el mismo se calificó– confidente y, al mismo tiempo, uno de los mejores, sino el mejor asimilador de las ideas de Don Pepe, rápidamente supo convertirse en el portavoz oficial de la política renovadora de la época.

A pesar de estar en las cumbres del poder nunca olvidó su humilde origen rural y la lejana Calabria natal, al sur de Italia, aquella que lo acunó el 7 de abril de 1870. De allí surgió la simpatía por el anarquismo. Sin embargo, al poner un pie en el país miró el cielo y entendió que en Uruguay no podía ser otra cosa más que Batllista.

Prefiriendo la lucha de ideas a la lucha de clases, sin doctrinarismos inflexibles pero si radicales, creyó posible eliminar los


enfrentamientos sociales mediante la intervención reformista del Estado al asegurar la tranquilidad pública y la justicia social con un manto protector a todos los excluidos.

En definitiva, al tiempo que la sociedad se estatizaba y el estado se socializaba, el propio Arena le demandaba a su colectividad política incorporar ciertas ideas de avanzadas, sin pensar, claro está, en la destrucción social ni mucho menos en la negación de las tradiciones partidarias. La política como la ciencia –decía– debe estar en continuo movimiento si quiere responder a las necesidades del momento. Para ello –agregaba– el partido para no quedar rezagado en relación a sus adversarios debe ser “tan liberal como el Partido Liberal y asimilarse todo lo humano, todo lo práctico, todo lo realizable todo lo que no sea utopía del Partido Socialista”.

Sean cuales fueren las confusas interpretaciones del caso, pese a ser apresuradamente identificado por algunos con ciertas tendencias revolucionarias,

Domingo Arena y el Batllismo nunca estuvieron ni estarán con el socialismo. Lo que no significa amparar en absoluto la salvaje mercantilización de la sociedad o el canto de sirena del populismo estatal.

Acordando que sólo se mantiene en el tiempo lo que se transforma, no podemos olvidar que en la confrontación dogmática que jamás debió desviarse para hacer creer que el Estado es un fin en sí mismo, lo más importante –y en lo que el Arena anarquista hasta llegar al Arena reformista creyó– fue, es, y será, en última instancia, la promoción de un poco más de justicia sin excesos ni rupturas de ningún tipo.

Con todo, no cabe duda que la vida se nos debe ir –como se le fue a él– defendiendo a los débiles y estimulando a los emprendedores sin dádivas para los primeros ni castigos para los segundos dentro de un republicanismo de tinte liberal.

(*) Edil (s) por Vamos Uruguay, docente.


El sistema de seguridad interior en Argentina

Sus principales desafíos

Por el Dr. Jorge Alejandro Suárez Saponaro

En 1992 se sanciona la ley 24.059 que crea el Sistema de Seguridad Interior, que según dice el texto de la norma tiene como finalidad determinar las políticas de seguridad así como planificar, coordinar, dirigir, controlar y apoyar el esfuerzo nacional de policía dirigido al cumplimiento de esas políticas. La ley señala que forman parte del sistema, el Presidente de la Nación; los gobernadores de las provincias que se adhieran al sistema; Ministerios de defensa, interior, y justicia; Policía Federal; policías provinciales adherentes al

sistema; Gendarmería nacional y Prefectura naval. La legislación prevé mecanismos de interven-ción de las fuerzas armadas en la seguridad interior, que por cierto lo hace sumamente restric-tivo. La movilización de estas solo debe limitarse en caso de declaración del estado de sitio, y una vez que las fuerzas policiales y de seguridad se vean sobrepasadas. La ley prohíbe que la seguridad interna incida en el adiestramiento, doctrina, y equipamiento de las fuerzas armadas. Además de prohibir expresamente, que sus servicios de inteligencia tengan injerencia en la seguridad interior. Esta situación genera –haciendo un rápido análisis– dudas sobre la eficacia de la intervención militar en casos de desórdenes graves.

La ley establece un consejo de seguridad interior, una suerte de

gabinete presidido por el ministro de interior., cuya función es asistirlo en la elaboración de políticas específicas para el área. Cuanta con miembros permanentes: secretario de prevención y lucha contra el narcotráfico (conocido generalmente en Argentina como SEDRONAR), subsecreta-rio de seguridad, jefes de Policía Federal, gendar-mería y prefectura naval, como cinco jefes policiales provinciales de los gobiernos adheridos al sistema. Asimismo se establecen consejos de complementación en las provincias adheridas. En casos de crisis, la ley establece un comité de crisis presidido por el ministro del interior y el gobernador/es afectado/s por casos de conmoción o crisis de seguridad. Estos comités tienen la misión de conducir las fuerzas federales y provinciales.

En estos últimos años la Argentina se vio


afectada por una escalada del delito, en particular en el área metropolitana de Buenos Aires. Las respuestas dadas por las diferentes gestiones han recibido un alud de críticas. Y los resultados limitados. Razones de índole política impiden que el Estado nacional, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y la Provincia de Buenos Aires puedan acordar mecanismos comunes para enfrentar al delito. En el caso de la provincia de Buenos Aires, ha llevado de manera infructuosa dos importantes reformas de su cuerpo policial. La “todopoderosa” “Bonaerense” fue disuelta allá por 1995, que terminó en un modelo descentralizado, con complejos mecanismos de coordinación. Actualmente la gestión provincial ha decidido profundizar el proceso de descentralización en la prevención del delito a nivel municipal. A pesar de cambios en la legislación procesal – como la creación del fuero penal juvenil – y diversas medidas para incrementar la eficacia policial, el drama de la inseguridad sigue siendo un problema. A

pesar de no se reconocido oficialmente, existen diversas medidas con el objetivo de mejorar los niveles de seguridad pública. Un ejemplo de ello fue la movilización de 6.000 gendarmes para el área metropolitana para brindar apoyo a las fuerzas policiales provinciales. Esta situación implica un reconocimiento tácito, de que la provincia de Buenos Aires tiene dificultades para enfrentar sus problemas de seguridad pública. Debe destacarse que no existe acuerdo con otras fuerzas políticas, lo que genera dudas sobre la continuidad de dichas políticas.

En el ámbito federal, se decidió la creación del Ministerio de seguridad, que cumple con las funciones asignadas por la ley de seguridad interior, asignadas anteriormente al Ministerio del interior (como dato de curiosidad la ley de seguridad interior no fue reformada). La nueva conducción está empeñada en incrementar las facultades del Ministerio en la conducción de las fuerzas federales, particularmente la Policía Federal, que en estos últimos meses ha sido objeto de serias críticas, en

particular sobre la situación de la prostitución y la trata de personas. En este proceso, existen dos instituciones que se han beneficiado de la confianza del liderazgo político: Gendarmería Nacional y Prefectura Naval. Dichas fuerzas de seguridad han incrementado sus efectivos y presupuestos. La Gendarmería de 17.000 efectivos en 2003 hoy ronda los casi 30.000, con un presupuesto de unos US$ 900 millones (frente a US$ 100 millones hace siete años); y la Prefectura Naval, de 12.000 efectivos en 2003 ha pasado a unos 17.000 en 2011 (su presupuesto alcanza hoy US$ 570 millones, que se quintuplicó en siete años). Dichas fuerzas han recibido fuertes inversiones en equipamiento, con la compra de vehículos, embarcaciones, sistemas de comunicaciones, aeronaves. Cabe destacar en este proceso de cambios, fue creada en 2004 la Policía de Seguridad Aeroportuaria, una fuerza policial en el ámbito de aeropuertos creada sobre la base de la Policía Aeronáutica Nacional cuando esta era un organismo de la Fuerza Aérea. Hoy cuenta con


3.000 efectivos.

En 2011 dado el problema de los vuelos clandestinos que violan el espacio aéreo, generalmente vinculados a la comisión de ilícitos. Según los medios de comunicación masiva en Argentina, gran parte de estos vuelos se dedican al tráfico de drogas, y ello a la necesidad de incrementar la presencia

del Estado en las porosas fronteras del norte, determinó la puesta en marcha del Operativo Escudo Norte. Esto consiste en el despliegue de medios de la Fuerza Aérea y Ejército (aviones de ataque liviano, helicópteros, radares), así como de las fuerzas de seguridad destinados a disuadir la violación de las fronteras terrestres, fluviales y el espacio aéreo

propio. En este último caso cada tanto se debate - en los medios de prensa – la necesidad de una ley de Derribos, tal como tiene Brasil (que aplica con éxito) como mecanismo eficaz para terminar con la constante violación del espacio aéreo.

Observando a “simple vista” las acciones tomadas en estos últimos años, indican las dificultades de los estados provinciales para enfrentar sus problemas de seguridad, lo que los lleva a requerir el apoyo federal. Hoy la Gendarmería y Prefectura Naval, instituciones que forman parte también del sistema de defensa nacional, han incrementado sus responsabilidades en materia policial. Situación no exenta de críticas, dado a la complejidad y extensión de las fronteras argentinas, ahora presionadas por desafíos tales como el narcotráfico, la trata de personas, el contrabando, tráfico de fauna, tráfico de armas y otros delitos, que demandan recursos y medios para actuar


eficazmente frente a dichos desafíos. Mientras estas fuerzas se modernizan y se adaptan a las exigencias cada vez mayores que le impone el liderazgo político, se observa que las fuerzas policiales provinciales no lo acompañan de la misma manera. La nueva realidad delictiva implica fuerzas policiales de alta calidad, con eficaces mecanismos de coordinación e interconexión en materia de inteligencia. Quedan pendientes otras cuestiones, como la

creación de bancos de datos criminales modernos, capaces de enviar información de manera rápida y segura de un juez de una provincia a otra.

El sistema de seguridad interior, creado en 1992, precisa sin ninguna duda cambios, para que el Estado federal por un lado racionalice estructuras y realice un aprovechamiento óptimo de los recursos disponibles, sin desperdiciar medios y esfuerzos, y por otro crear mecanismos de

cooperación eficaces y flexibles, ante los requerimientos de las autoridades provinciales. Sin ninguna duda se debe discutir sobre equipamiento, introducción de nuevas tecnologías, educación, operaciones conjuntas, y respuestas ante un delito cada vez más violento como complejo. La clave del éxito, sin ninguna duda recae en la construcción de un consenso entre las principales fuerzas políticas, para que la seguridad interior sea una política de Estado.

Comuníquese con el diputado Fitzgerald Cantero Piali: Edificio Artigas, Anexo al Palacio Legislativo. Despacho 313 Tel. 142 Interno 3323 Celular: 099 777 269 E-mail: [email protected]


Liceos de Playa Pascual y Libertad El representante nacional por San José, Dr. Gustavo Cersósimo (Vamos Uruguay), en oportunidad de uso de la media hora previa de una sesión de la Cámara de Diputados, exhortó a las autoridades de Secundaria a que se concreten las promesas de solución para los reclamos justificados y urgentes, en relación a los problemas en los liceos, máxime en estos momentos en que hay plena coincidencia de todos los partidos políticos en cuanto a la necesidad de invertir en mejorar la educación y se asignan cada vez más recursos para ello, a propósito de la ocupación acaecida en el liceo de Playa Pascual, por parte de docentes con el apoyo de padres de los alumnos de la

localidad, marchas y asambleas.

Reseñó que el motivo fue la importante sobrepoblación de alumnos y los graves problemas edilicios de filtración del agua de lluvia y térmicos, así como la necesidad de contar con el servicio de funcionarios administrativos (adscriptos).

Se reclamó, por lo menos, la instalación de tres aulas prefabricadas, la designación de dos adscriptos y acondicionamiento térmico pues las aulas llegan a tener temperaturas de hasta 40 grados en esta época y fríos extremos en invierno.

El diferendo se ha visto suspendido porque las autoridades del Consejo de Educación Secundaria prometieron cumplir con la instalación de nuevas aulas, la designación de un adscripto y la asignación de horas para la administración en horario nocturno.

Señaló el diputado que tuvo la oportunidad de comprobar las deficiencias y necesidades que dieron lugar a los reclamos y de conversar con el profesor Mario Bango integrante de Fenapes para interiorizarse de la problemática. Ha llegado a su conocimiento que similares inconvenientes y reclamos hay en Montevideo, Ciudad de la Costa, San José, Rivera y Tacuarembó.

En abril de 2011, el diputado Cersósimo había cursado un pedido de informes al Ministerio de Educación y Cultura y por su intermedio al Consejo de Educación Secundaria, por el que solicitaba conocer ¿Cuál es el estado de cumplimiento de las obras de ampliación (por superpoblación estudiantil), refacción (rampa de acceso para discapacitados), construcción de alero y otro baño y espacio acondicionado para educación física, que se habían comprometido a principio del año 2010 en el Liceo de Playa Pascual del departamento de San José?; ¿Cuándo comienzan y cuándo se prevé la terminación de las obras de construcción de aulas en el Liceo de Delta del Tigre?; ¿En qué estado está la instalación del aula prefabricada para ese liceo?; ¿Cuándo comienza la construcción de un nuevo edificio en el Liceo de Delta del Tigre?; ¿Cuándo se inician las obras de refacción de la instalación eléctrica y techo de la biblioteca y del gimnasio del Liceo Departamental de San José, Dr. Alfonso Espínola, donde se están usando los patrios y el salón de actos, para dictar clases?

A su vez, el 29 de junio de 2011, promovió un segundo pedido de informes a dichos organismos para que dieran cuenta de qué medidas se habían tomado para resolver los problemas del Liceo de la Ciudad de Libertad (Departamento de San José) referentes a falta de personal suficiente de limpieza y portería, ausencia de servicio policial para la seguridad de las personas e instalaciones y existencia de vidrios rotos y ausencia de vidrios en diversas aberturas y rotura de paredes en dependencias del Instituto.

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¡Bienvenidos al Club! Por Gustavo Toledo

Diez años después de que Standard & Poor´s fuera la primera calificadora de riesgo en quitarle el Investment grade a nuestro país es ahora también la primera en devolvérselo. Para muchos uruguayos puede parecer un dato sin importancia, una de esas noticias para consumo interno de “La City”, sin embargo no lo es. Posee un doble valor: por un lado, nos permite acceder a nuevas fuentes de financiación y a créditos más baratos, y, por el otro, constituye una prueba más del acertado camino iniciado en materia económica por el gobierno del Dr. Jorge Batlle y continuado por las dos administraciones frenteamplistas que le siguieron.

Según el economista Aldo Lema este logro es fruto del “buen manejo de la deuda” (restructuración “exitosa y amigable”, desdolarización, creación de la Oficina de Deuda en el MEF) y a los equipos económicos que se sucedieron desde 2002, pero, sobre todo de la continuidad de ciertos lineamientos macro-económicos.

“Si el gobierno uruguayo plantea que el grado inversor fue un logro transversal de los últimos gobiernos habrá un gran pilar para construir nuevos consensos”, sugirió Lema.

Salvo al presidente del Banco Central, Mario Bergara, y en forma bastante tangencial debo decir, no escuché a nadie reconocer el trabajo realizado por las autoridades económicas del último gobierno colorado. Por lo visto, todavía prima la falsa idea de que la historia comenzó con ellos, en 2005.

Aun así, y pese a la mezquindad que

abunda, si algo es claro y a esta altura está fuera de discusión -salvo para un puñado de nostálgicos arrinconados en el PCU y el PIT-CNT, valga la redundancia- es precisamente la política económica. Ya nadie pone en tela de juicio la importancia de tener una inflación baja, de no toquetear el tipo de cambio, de abrir nuevos mercados para nuestros productos y no atarnos a los arrebatos populistas de nuestros vecinos, de ser moderados en el gasto y no cargar con impuestos al aparato productivo.

Si muchos de estos principios se aplican a regañadientes, no es importante. Si a veces el sector del presidente lanza algún dislate en sentido contrario o el propio presidente formula planteos alejados de la lógica económica imperante, tampoco lo es. Se trata de concesiones simbólicas que está obligado a hacer a sus compañeros más radicales para mantenerlos contentos y al mismo tiempo sostener la superstición de llamarse “progresistas”. Lo que realmente importa es que la economía sigue rigiéndose por los parámetros que delinearon Atchugarry, Alfie, De Brun y Davrieux. Y, lo que es más importante, sus frutos están a la vista.

¿O acaso alguien cree que esto es obra de la aplicación del recetario económico del Frente Amplio? Si algún mérito hay que reconocerle a este gobierno y al anterior, es no haber tocado nada. Prueba de ello es que no designaron a Curiel al frente del MEF ni a Olesker en la OPP, sino a los máximos exponentes de su ala “socialdemócrata” (un eufemismo detrás del cual se esconden los neoliberales culposos).


Luego de despotricar contra el mercado y el capitalismo, de plantearse a sí mismos como “alternativa” al sistema dominante, descubrieron que ningún táper ideológico es capaz de encerrar la realidad. No hay espacio para inventos, ni para locuras. Solo el sentido común y la responsabilidad son capaces de despertar la confianza de los agentes económicos y generar riqueza.

Un amigo se preguntaba ayer mismo, poco después de conocerse esta noticia, ¿qué hubiese sucedido si Batlle le decía que sí a Vázquez y declaraba el default o aplicaba las recetas económicas que la izquierda enarbolaba por aquel entonces? ¿Gozaríamos hoy de los actuales índices de desempleo? ¿Habríamos reducido la pobreza del modo que lo hicimos, aumentado nuestras exportaciones y conseguido el Investment grade del que todos nos alegramos?

Obviamente no. Y si alguien tiene dudas, que le pregunte a Astori o a Lorenzo.

Gráfico de evolución de la tasa de desempleo


Leonardo da Vinci Leonardo da Vinci (Leonardo di ser Piero da Vinci ) nació en Vinci (Florencia) el 15 de abril de 1452 y falleció en Amboise el 2 de mayo de 1519.

Fue anatomista, arquitecto, artista, botánico, científico, escritor, escultor, filósofo, ingeniero, inventor, músico, pintor, poeta y urbanista.

Frecuentemente descrito como un arquetipo y símbolo del hombre del Renacimiento, genio universal, además de filósofo humanista cuya curiosidad infinita sólo puede ser equiparable a su capacidad inventiva, Leonardo da Vinci es considerado como uno de los más grandes pintores de todos los tiempos y, probablemente, es la persona con el mayor número de talentos en múltiples disciplinas que jamás ha existido.

(Leonardo da Vinci, Autorretrato hecho entre 1512 y 1515)

Su trascendencia histórica más famosa ha sido por la pintura, siendo dos de sus obras más célebres, La Gioconda y La Última Cena, copiadas y parodiadas en varias ocasiones, al igual que su dibujo del Hombre de Vitruvio, que llegaría a ser retomado en numerosos

trabajos derivados. No obstante, sólo se conocen una quincena de sus obras, debido principalmente a sus constantes (y a veces desastrosos) experimentos con nuevas técnicas y a su inconstancia crónica.

Este reducido número de creaciones, junto con sus cuadernos que contienen dibujos, diagramas científicos y reflexiones sobre la naturaleza de la pintura, constituyen un legado para las sucesivas generaciones de artistas, llegando a ser igualado únicamente por Miguel Ángel.

Como ingeniero e inventor, Leonardo desarrolló ideas muy adelantadas a su tiempo, tales como el helicóptero, el carro de combate, el submarino y el automóvil. Muy pocos de sus proyectos llegaron a construirse (entre ellos la máquina para medir el límite elástico de un cable), puesto que la mayoría no eran realizables aún en esa época.

Como científico, Leonardo da Vinci hizo progresar mucho el conocimiento en las áreas de anatomía, la ingeniería civil, la óptica y la hidrodinámica. Fuente y fotos: Wikipedia.org

La Monalisa es el retrato que más literatura ha generado a lo largo de toda la historia del arte. Una explicación, fundada en las propias

anotaciones de Leonardo dice que el maestro hizo aflorar esa expresión a su modelo con el tañido del laúd.

Decía Vasari: “Monalisa era muy bella y Leonardo, mientras pintaba, procuraba que siempre hubiese alguien cantando, tocando algún

instrumento o bromeando. De esta manera, la modelo se mantenía de buen humor y no adoptaba un aspecto triste, fatigado [...]”

alternativa Época ii - nº 44

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