al vacÍo nº25

18
9 ¿al vacío. . .? Revista Literaria y Crónica del Grupo Literario ¿al vacío...? de los Valles del Tuy N° 25. Año IX. Diciembre, 2013 http://grupoliterarioalvacio.blogspot.com ESTA REVISTA CIRCULA CON EL APOYO DEL SISTEMA NACIONAL DE I MPRENTAS, SEDE MIRANDA Y EL GABINETE CULTURAL MIRANDA DEL MPPPC http://imprentademiranda.blogspot.com no ANIVERSARIO ¿al vacío. . .?

Upload: isaac-morales-fernandez

Post on 08-Feb-2016

438 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: AL VACÍO Nº25

9¿al vacío. . .?

Revista Literaria y Crónica del Grupo Literario ¿al vacío...? de los Valles del TuyN ° 2 5 . A ñ o I X . D i c i e m b r e , 2 0 1 3

http://grupoliterarioalvacio.blogspot.com

ESTA REVISTA CIRCULA CON EL APOYO DEL SISTEMA NACIONAL DE IMPRENTAS, SEDE MIRANDA Y EL GABINETE CULTURAL MIRANDA DEL MPPPC

http://imprentademiranda.blogspot.com

no

ANIVERSARIO

¿al vacío. . .?

Page 2: AL VACÍO Nº25

c o n t e n i d oESTAMPAS SENCILLAS

Desfile por los 9 años de ¿al vacío...?, por Isaac Morales Fernández Pág. -15

NARRATIVA MIRANDINA

El diluvio universal en Altagracia de la Montaña - Tácata, por Héctor Seijas Pág. -11

POESÍA MIRANDINA

Isaac Morales Fernández - Sthéphany Sierra - Marcelo Seguel Bon - Julio Valderrey - Ana Karina Rondón - Leonardo Delgado Pág. -8

ENSAYOS LITERARIOS

El arte digital como propuesta estética del siglo XXI por Yhonaís Lemus Pág. -6

COMENTALIBROS

4 monólogos sin logos de Oswaldo González por Isaac Morales Fernández Pág. -3

PARA LA FORMACIÓN

El animador sociocultural y su rol en la transformación, por Marcelo Seguel Bon Pág. -2

TUYEDADES

Poeta asusta niños - Escritor científico loco - Poeta fantasma - Chiquito pero grande por Leonardo Delgado Pág. -1

Parranda de San Pedro (afiche) Pág. 0

e d i t o r i a lPasada la furia del combate del pueblo por asegurar o mantener

sus derechos como habitantes de una comunidad que busca justicia, igualdad social y mantener el amor que debemos conservar como seres humanos, dignos de una tierra que ha costado sueños y luchas; pasada la tormenta y tranquilos a primera vista los aires que mueven parte de las pasiones humanas tocamos tierra y volvemos al sueño, a la palabra que conmueve y por la que estamos aquí, en la poesía, tratando de conformar y afirmar un país.

Pero no todo podía salir bien, murió Nelson Mandela. No todo es perfecto y algo nos enseña: el hecho de que sí puede haber justicia e igualdad en el reino de los hombres y las mujeres, es decir aquí en la tierra y cada día nos acercamos más a esa utopía. Mandela estuvo 27 años preso y encadenado en pleno siglo XX por quienes mantie-nen un mundo dividido en pobres y ricos con su ostracismo racial. Es la ironía de quienes lo mantuvieron preso, lo maltrataron y luego fueron a su sepelio.

¡Bravo! Madiba, gracias por tu ejemplo de hombre más digno que todos los que te despreciaron y te condenaron. Ellos en su hipo-cresía también te enaltecieron para tratar de quitarse un poco el car-go de conciencia pero quizás más para reírse desde sus estercoleros.

Muere uno y nacen cien seguidores de la utopía que realizare-mos aquí en la tierra con la anuencia de la poesía y la nobleza de los que andan en esta búsqueda. Cada vez somos más quienes tran-sitamos por estos amaneceres, los amaneceres que dan sensación de libertad y gloria y por eso estamos nuevamente aquí, en esta colina trinchera llamada ¿al vacío…? hoy en su 9no aniversario, en su edición número 25. Una revista que logró reunir a un grupo de creadores y que juega con el arte y la crónica de un pueblo que se niega a no tener historia, que nació como premisa para facilitar la palabra escrita, la palabra elevada a su máxima dignidad, a lo sagra-do y a lo profano, lo que indica que aún quedan amaneceres a donde debemos llegar con la poesía y el arte en general como antorchas para ser merecedores de vivir en esta tierra que debemos recuperar cuando hayamos superado esta anomalía histórica del capitalismo donde impera la desigualdad social y las injusticias. No queda más que celebrar por la vida y un futuro difícil pero sabemos glorioso. Salud, larga vida y que viva la poesía.

J.V.

¿AL VACÍO...?Julio Valderrey, Isaac Morales Fernández, Leonardo Delgado, Danna Urdaneta, Marcelo Seguel Bon, Leonard Delgado, Rosa Anyélica Guevara, Ana Karina Rondón, Magdalena Goncalves, Michelle Antoine, Yhonais Lemus, Angélica Aguilar, Hamlet Yaraima Marín, Leandro Blanco.COLABORAN EN ESTE NÚMERO: HÉCTOR SEIJAS, MARCELO SEGUEL BON, STHEPHANY SIERRA, YHONAÍS LEMUS. ANA KARINA RONDÓN

CORREO: [email protected]ÁGINA: http://grupoliterarioalvacio.blogspot.com

Page 3: AL VACÍO Nº25

¿al vacío...? ___________________________________________________________________________-15

Desfi le por los 9 años de ¿al vacío...?por Isaac Morales Fernández

esta

mp

as se

nc

illas

Mucha gente ha pasado por las manos del grupo ¿al vacío...? y las páginas de su revista homó-nima. Recordemos que aunque son 9 años de

la revista, el grupo tiene 12 años de existencia, por lo tanto comenzaremos desde esa época, año 2001. Hagamos precisa-mente un “pase de revista” por esta marcha:

BATUTA: Tres tristes tigres hablaban paja en un banquito de la plaza. Sus nombres: Iván Espinoza, Javier Pérez e Isa-ac Morales. Era el año 2000, en Santa Teresa del Tuy. Que-rían una revolución literaria para el pueblo. Frecuentemente Eduardo López, mejor conocido como “El poeta del Morra-lito”, se unía a tales ensoñaciones. Pero no había brújula. La brújula llegó en 2001: la traía en un bolsillo Julio Valderrey, vestido de basketbolista de los Celtics (creo, porque recuer-do que era verde). Sólo unos locos como nosotros podíamos creer en tan peculiar astrolabio. Afortunadamente, ¡la pega-mos! Poco tardamos en darnos cuenta de que habíamos halla-do el derrotero correcto.

FORMACIÓN: Iván Espinoza, Javiér Pérez, Eduardo Ló-pez, así como las amigas Elleri Chacín y Yelitza Lira, y sin ol-vidar a este servidor, estuvimos entre los primeros asistentes más consuetudinarios al primer taller de Julio Valderrey en Santa Teresa, en el año 2001. Es decir, hubo otros, pero fue-ron “sinsuetudinarios”. El taller fue en la Casa de la Cultura Juan España, gracias al apoyo del entonces director de cultura Andy Pérez. Al terminar el taller decidimos seguir reunién-donos, por lo que nos constituimos como el Círculo de Reu-niones Literarias de Santa Teresa del Tuy.

MARCHA: No sé exactamente cuando fue, sólo sé que fue una tarde loca entre finales de 2001 y principios de 2002 cuando, ebrios, sudados, lustrosos y risueños, en un aparta-mento mínimo y sin ventanas donde (medio-mal)vivía Iván con un ventiladorcito y su pequeña Ammi, le pusimos el nombre “oficial” al grupo: ¿al vacío...? Todo fue mi culpa. Lo admito y sabré acarrear con las consecuencias. Había estado leyendo más física cuántica de la que realmente podía enten-der por entonces, y pegado de Mandelbrot, Hawking, Davies, y además con un empeño loco en ver si después del Dadá se podía ser más “inventón”, la palabra “vacío” me inundó -iró-nicamente- viendo un día un documental sobre los mayas y la invención del cero. El término “vacuista” vendría mucho más tarde.

PROCESIÓN: Por esa misma época, Julio se trajo a Julián.

Julián Márquez fue nuestro segundo maestro: el de narrativa. Nos impactó su Simulacro de Helena y su manera inédita de be-ber más que todos los demás sin rascarse. Pero sobre todo su gran sencillez y su solidaridad con nuestras inquietudes. Por esa época se sumaron a nosotros Jonny Galué, Jen Martínez Martínez, Miguel Bellorín y una chica llamada Tania que nos tenía mucho cariño a todos pero no nos soportaba. También la camarada Morelbis Aguiar anduvo un tiempo entre noso-tros, soportándonos. Organizamos algunos recitales y “mara-tones” de poesía (porque un recital de poesía de casi 8 horas es casi un festival de Woodstock: Un tercio de día de música, amor y ladilla). Algunos poetas panas de Caracas como Roger Herrera, Joel Rojas, Diego Sequera, Álvar Trujillo vinieron a leer en alguna ocasión de esas.

CORTEJO: A mediados de 2002 comenzamos con la idea revolucionaria de crear una revista exclusivcamente literaria y “vanguardista” para el Tuy, y comenzó la Revolución a tener sus primeras contradicciones y contraindicaciones posológi-cas: al alcaldesillo de entonces se le ocurrió la brillante idea de “remodelar” la Casa de la Cultura, y lo que hizo fue man-tenerla derruida durante dos años, hasta 2004. A princpios de 2003 publiqué mi primer libro, Glosario de una vida (con Luis Lacave y su Editorial Toromaina), y poco después me atreví a dar mi primer Taller de Iniciación literaria, en las instalacio-nes del Centro de Formación Cultural “Federico Bello Klie”. También comencé a dar clases de literatura de Secundaria (y Julio durante un breve lapso, literalmente, también), y por esas vías captamos más gente para el amor por las letras.

COMPARSA: De los liceos, se nos sumaron Michelle Antoine, Rosa Guevara, Danna Urdaneta (es decir, Daniela Moreno) y Ana Karina Rondón. De los talleres, se nos suma-ron Leonardo Delgado, su hermano Leonard. También por esos talleres pasaron personas que recordamos con aprecio como Ingrid García, Rita Mercado y sus hijas Carolina y Ra-sec Barrios, Ana Teresa Carmona, José “Cheo” Franquiz (hoy fallecido), entre muchos otros. Hasta que por fin logramos hacer la revista. El primer número, de diciembre de 2004, lo imprimimos en una impresorita de escritorio gracias al apo-yo del entonces director de cultura Luis Alexi Salas, a quien asignaron en el cargo cuando por fin la Casa de la Cultura fue reconstruida en lo que es ahora: un “galpón” para cual-quier cosa. Lo importante fue que gracias al trabajo sosteni-do de Iván Espinoza, quien era promotor de cultura de ese

Page 4: AL VACÍO Nº25

¿al vacío...? ___________________________________________________________________________-14

est

am

pa

s se

nc

illa

s

ente municipal, y con “financiamiento” de la Dirección de Cultura como tal (al menos para imprimir), pudimos sacar 50 ejemplares de la primera revista literaria de los Valles del Tuy, en formato media carta y de apenas 8 páginas (2 hojas). También nos ayudó la compañera Doris Osorio, quien estaba creando una Fundación Pro-Lectura que lamentablemente no duró mucho tiempo. El cronista municipal Jesús Silva Yrazá-bal también participaron en el nacimiento de la revista. In-cluso mi madre Yrene Fernández y mi esposa María Eugenia González también publicaron algunas veces en los primeros números de la revista. La profesora Magdalena Goncalves fue la madrina de ese primer número, y ella fue, por cierto, la primera sorprendida.

CARROZA: Entre 2005 y 2006 nos activamos con más talleres y concursos literarios. Hicimos un taller triple: los jueves yo daba el de dramaturgia, los viernes Julio daba el de poesía y los sábados Julián daba el de narrativa. Allí se nos sumaron Ariany Rodríguez, Angélica Aguilar, Susana García, Gladys Muñoz de Ramos, Isaac Valderrama y Michelina Flam-mia pasaron por esos talleres y los culminaron exitosamente. Al mismo tiempo nos sumamos a la creación de la Red Na-cional de Escritores. Julio, que quedó como vocero por el Estado Miranda, y yo que simplemente me dispuse a acom-pañarlo, nos dedicamos durante un mes entero a recorrer los seis municipios tuyeros, a hacer reuniones con escritores para censarlos, y a soñar con un futuro venturoso para la literatura de estas tierras.

CABALGATA: Con la revista consolidada a través de 5 números publicados en dos años, entramos en el año 2007 con más grandes planes: una imprenta que se logró producto de nuestro trabajo articulado con esa incipiente Red Nacional de Escritores que creció como espuma por todos los rincones de Venezuela y en que apenas un año ya rendía frutos efec-tivos, con un apoyo importantísimo de otro ente que nacía por la misma época: el Ministerio del Poder Popular para la Cultura. En seguida la Redve se convirtió, oficialmente, en “Aliado estratégico” del MPPC para todo lo que fuera política editorial y de promoción de lectura. Fue así como en marzo de 2007 el Director de Cultura Luis Alexi Salas nos abre las puertas y nos entrega la llave de la oficina número 3 de la Casa Municipal de la Cultura “Juan España”. Cabe destacar que por ese tiempo ocurría la separación paulatina del partido PO-DEMOS de las filas revolucionarias, y a ese partido pertene-cía el alcalde de entonces de este municipio Independencia, pero Luis Alexi supo mantenerse de bajo perfil para prote-gernos. En abril instalamos las máquinas y comenzamos a tra-bajar y finalmente, en diciembre de ese mismo año, mientras

el partido de gobierno municipal se declaraba abiertamente opositor en las elecciones para la Reforma Constitucional, la imprenta, es decir, el Gobierno nacional a través del Minis-terio del P.P. para la Cultura, tenía tomado totalmente el es-pacio y estaba presentando sus cuatro primeros libros, entre los que destaca el del 4to Festival Mundial de Poesía Capítulo Miranda, evento que habíamos organizado en el mes de junio de ese mismo año, también articulado con el MPPC a través de la Casa de Bello, el Gabinete de Miranda del MPPC. Igual-mente, ese mismo año 2007, en noviembre, con respaldo del Centro Nacional del Libro (CENAL) organizamos en la Plaza Bolívar de Santa Teresa la Feria Internacional del Libro capí-tulo Miranda. El año 2007 fue tan bueno que nos valió para que por fin el primer reconocido escritor tereseño Metodio Aurely (1933-2009) se nos uniera, nos apoyara y se bebiera unas cuantas con nosotros. ¡Por fin nos habíamos ganado su respeto! Estaba desesperanzado ya después de tantos años de aspirantes a escritores anteriores a nosotros que no escribían más de tres versos cursis por quinquenio. Falleció poco des-pués de que le publicáramos su último libro, la novela La aldea del cerro. Creo que murió tranquilo sabiendo que su obra, con nosotros aquí, ya no pasaría en vano. Otros grandes amigos pasaron por la Imprenta en sus primeros tiempos, dejando buena huella: Usbaldo Volcán, Neolani Capurso, Ulises Ore-llano, mi tío Frank Fernández (1951-2011), el loco de Ri-cardo Alustiza, Keny Loaiza y Omar Alfonso Requena, entre otros menos comunes.

RECORRIDO: Así avanzamos con el Sistema Nacional de Imprentas Regionales Sede Miranda, publicando libros de mucha gente de todo el estado. Sesenta títulos se han publi-cado en estos seis años, desde 2007 hasta 2013, y para 2014 seguiremos publicando más libros. En 2008 acatamos la nue-va estructura de la Redve y asumimos parte de la directiva estadal, repitiendo en 2010 la responsabilidad de acarrear con la Redve-Miranda y para 2013 haremos otro buen inten-to. Asímismo, más recientemente se nos han sumado Yhonaís Lemus, Marcelo Seguel Bon, Hamlet Yaraima Marín, Leandro Blanco y Sthephany Sierra, entre otros. Cabe destacar que en 2009 lanzamos nuestro primer Manifiesto Literario, y desde entonces ya van cuatro, todos publicados en posteriores edi-ciones de la revista.

ACOMPAÑAMIENTO: Igualmente es importante desta-car que ¿al vacío...?, tanto como grupo y como revista no han sido mezquinos ni estériles. Con la imprenta como verdadera artillería indestructible del pensamiento revolucionario (como dice el eslogan que tenemos de letrero en la oficina) ha dado lugar no solo a libros, sino a publicaciones periódicas de diferentes

Page 5: AL VACÍO Nº25

¿al vacío...? ___________________________________________________________________________-13

esta

mp

as se

nc

illas

Page 6: AL VACÍO Nº25

¿al vacío...? ___________________________________________________________________________

est

am

pa

s se

nc

illa

s -12

¿al vacío...? te recomienda visitar los siguientes enlaces en internet:grupoliterarioalvacio.blogspot.comhayqueocuparlosespacios.blogspot.comimprentademiranda.blogspot.commasdelodebidoymenosdeloquerido.blogspot.comgabineteculturalmiranda.blogspot.comrevistamatria.wordpress.comtucuy.wordpress.comredescritoresmiranda.wordpress.comen Facebook:Colectivo Editorial Venceremos

Gabinete MirandaEscritores Mirandinos con ChávezCultores de MirandaMopiactivaNotiMirandaY en twitter: @snimprentas@Venceremostuy@guapotori@GabineteMiranda

colectivos del pueblo mirandino, que son a la vez publica-ciones hermanas e hijas de ¿al vacío...? La primera de ellas fue Mi Querencia, una publicación infantil de la que salieron 4 números entre 2008 y 2009, dirigida por nuestra entrañable amiga Rosa Virginia Rodríguez, de Yare. Noticultura, de la Mi-sión Cultura fue una pequeña publicación de la que salieron tres números por la misma época, y la dirigía el amigo Pedro Mata. En julio de 2009 surge el mensuario VENceremos, en el que buena parte del grupo ¿al vacío...? participa activa-mente, una publicación política y forma-tiva coordinada por Leonardo Caraballo y que actualmente cuenta ya con cuatro años ininterrumpidos, con 39 ediciones hasta ahora. Allí participamos activamente junto con Mabel González, Morelbis Aguiar, Víc-tor Quintero, Cándido Riera, entre muchos otros. Surgirán otras publicaciones apoyadas por nosotros, pero la siguiente en lograr un éxito continuo será MopiActiva, un medio alternativo coordinado por el poe-ta Leonardo Delgado para su comunidad, que desde hace un año ya, desde noviembre de 2012, ha salido ya en seis ediciones. En MopiActiva participamos activamente junto a Ruffo Batatima, Manuel Díaz y Georgina Méndez. Y más recientemente la revista de historia regional y local Matria, coor-dinada por Iván López y Arturo Lev lleva ya tres números y promete convertirse en un éxito continuo también. En Matria par-ticipamos activamente junto a Ossiel Andra-de, Manuel Rico, Antonio Delgado y otros camaradas. Y así seguiremos en revolución constante, llenando al mundo de palabras, de

muchas palabras, hasta romper de una vez por todas con el silencio sepulcral que adormeció a estos pueblos olvidados del Tuy por siglos, y por aquí seguirán desfilando más y más almas hasta que toda esta región sea una especie de Distrito de la algarabía de la luz, el conocimiento y la sensibilidad, ¿la Alcaldía Mayor de la Poesía...?

Page 7: AL VACÍO Nº25

¿al vacío...? ___________________________________________________________________________-11

na

rrativa

mira

nd

ina

El diluvio universal en Altagracia de la Montañapor Héctor Seijas

La atmósfera condensaba gigantescas nubes que se trasladaban y se unían a los vapores del mar Caribe, y en las montañas comenzaban las corrientes del cielo a

caer musicalmente a la tierra. Al principio las gotas resbalaban acariciando el verde oscuro de los cafetos. Humedeciendo raí-ces de sedientos chaparrales. Aumentando el cauce de cientos de quebraditas y manantiales brotados del boscaje. Los árboles exhalaban un aliento de alivio. Poco a poco las gotas cobraban vivacidad y sus deslizamientos se tornaban nerviosos, cada vez más apuraditas. La lluvia orquestaba un segundo movimiento musical precedido por tímpanos de truenos. Una obertura de los cielos y la tierra sedienta. Una misa vociferada, en los plati-llos metálicos de la aurora. Los caminos se cerraban por la caí-da de un árbol o la irrupción de las torrenteras desde las oscu-ras bocas de las picas que habían sido abiertas a paso de mula. El diluvio universal se fraguaba por allá por las montañas de Altagracia. Y abajo, en San José de Tácata, estaba escrita la pala-bra que atañe al destino de los seres humanos. La posibilidad de muerte por agua. O por un rayo desprendido del párpado de aquél animal que bramaba como un toro cimarrón. Tía Trina lavaba ropa junto a otras mujeres que permanecían al borde de las peñas cubiertas de medio fondo. Pues, siempre los ojos masculinos encontraban una veredita detrás de los matorrales para espiar. José Herrera conducía un camión rumbo al trapi-che que estaba en la otra banda del río. El cauce había mengua-do a causa del fuerte verano. Nadie que no hubiese nacido a la orilla, imaginaría aquellas corrientes de remansos, convertidas en una bestia feroz, ciega, arrolladora. El río preparaba, velado en la aparente quietud, pequeñas pero también lamentables tragedias en la humanidad de alguien a quien arrastró y de quien nunca más se supo, no obstante las pesquisas y los perros y el rastreo para regresar con un vacío de nostalgia a casa sin nada que decir a no ser que el río se lo había llevado. Y el gana-do que había rodado en un precipicio que succionaba y que mermaba sus fuerzas en un santiamén de remolinos. Y la carre-ta de bueyes, averiada en mitad de un ojo de agua, el cual, de repente adquirió una forma descomunal como del tamaño de un genio terrible provisto de voz de trueno. Y el árbol que se desploma porque las raíces no son capaces de contener tanto barro desprendido, podrido de repente. Y los pájaros resisten ateridos y desaparecen hasta confundirse con la sombra de las hojas que tiemblan también como ellos y son una sola y emplu-mada emoción de espanto, guarecidos en las ramas protectoras. Y una iguana que había sido atrapada por un grupo de vegueros ebrios, desprovista de sus óvulos y cocida luego de haberle ex-traído las vísceras, hojas verdes y tiernas y bien colocadas en el lugar de las entrañas, para que la piel de la pobre iguana rege-

nerara, desprovista de ovarios para la reproducción. Y había un placer enfermizo asociado a la ebriedad y a la falta de compa-sión hacia la naturaleza en el alma de aquellos hombres que no permitían una manifestación de amor hacia otros seres, como lo era el caso de la iguana suturada, y menos aún a seres de su misma especie, es decir, a otros hombres y mujeres, niñas y niños. La iguana que había sido cocida con hilachas de yute, aparecía y desaparecía por debajo de la superficie y permanecía en la profundidad del pozo y el miedo a ser mordido en la ba-rriga crecía mientras nadaba. Tarde o temprano la iguana haría lo mismo que le hicieron a ella y mordería debajo del ombligo con sus dientes afilados de diminutas sierras y esa herida sería un signo de las retribuciones. Adentro de la iglesia el cura Búcar clamaba por la justicia divina y anunciaba nuevas y terribles tempestades. Dios era inescrutable en sus asuntos. Éste solía comunicarse con los seres humanos mediante la voz de un orá-culo o la anunciación de un ángel, arcángel, santo, santa o vir-gen. Tales eran las convicciones de Búcar. Heredadas de la otra España: la oscura. Y una de las causas agravantes de la tempes-tad y sus secuelas estaba en la cantidad de parejas arrejuntadas sin la debida bendición sacerdotal. No podía ser que todavía hubiese quienes preferían unirse por el monte como los anima-les sin el consentimiento de la autoridad representada por el cura Búcar. Cuyo radio de acción comprendía azules montañas a lo lejos; maniguas donde había que resistir el calor, los zancu-dos, los animales ponzoñosos y a una que otra emboscada; en la profusa, inextricable serranía de Aragua y Miranda. Siendo muy joven ingresó, por mandato de la familia, a uno de los monasterios que albergaban a toda clase de frailecitos o pros-pectos de frailecitos mendicantes que posteriormente serían enviados a continuar mendigando en nombre de la Santa Iglesia por las selvas, los desiertos, los lagos, los mares y los pueblos de África, Asia, América, Oriente y Oceanía. Un apóstol capaz de llevar adelante durante toda la vida una cruzada cuyo final ni él mismo conocía. Como tampoco su lógica y su posible desenla-ce. Y en eso consistía el drama de la fe para el cura Búcar, luego de haber superado la precariedad económica mediante favores retribuidos por los ricos hacendados. Y cuyas esposas, despro-vistas de ocupación, cultivaban con lujos y artimañas teologales las virtudes del yugo matrimonial, y también jugaban, pero muy en serio, a ser casamenteras. Tía Blanca era una de aquellas mujeres, capaz de llegar a los últimos rincones de la montaña con el empeño de hacer posible la reversión religiosa del con-cubinato. Para llevar a cabo esta misión contaba con informan-tes que mantenían a tía Blanca al tanto de la herejía menor del barraganato, al que combatía a fuerza de piedad inquebranta-ble, asesorada por el cura Búcar, confesor de la familia y fiel

Page 8: AL VACÍO Nº25

¿al vacío...? ___________________________________________________________________________-10

na

rra

tiva

mir

an

din

a

ejecutante de los proyectos de tía Blanca. Entre los cuales figu-raban bautizos, confirmaciones, primeras comuniones y los santos oleos cuando la llegada del cura ahuyentaba el olor de la muerte por medio de oraciones y salpicaduras de agua bendita. Lo difícil para Búcar no consistía en la intensidad del trabajo sacerdotal si no en la extensión, o las extensiones, que debía salvar para llegar a tiempo antes que un moribundo se fuera sin haber sido rociado. Contaba con su mula, Margarita, y un mo-naguillo con cara de bebé mongol que le acompañaba con leal-tad de Sancho Panza. El monaguillo era supersticioso y en sumo grado chismoso: Ramoncito Farías, hijo de Guillermina Farías, quien era nieta de Marcial Pérez, contrabandista cuyo trasunto mercadeaba allende las bocas del otrora navegable río Tuy. En uno de sus viajes a España, el cura Búcar había adquiri-do una innovación del arte y la fantasía: una rudimentaria má-quina proyectora de imágenes cinematográficas. Esta innova-ción potenciaba las astucias seductoras del cura. Improvisó el patio de la casa parroquial, el cual logró convertir en una par-ticular sala de cine, centrada la atención en una gran sábana colocada al fondo en una pared derruida. Sillas y bancos trasla-dados de la capilla y un cajón que fungía de tarima. Además de la máquina proyectora el cura poseía un tocadistos que venía enfundado en un maletín de duras tapas. Colocaba marchas, aires bufonescos, antes de iniciar la sesión, muy concurrida y expectante, entre cuyos protagonistas estaban un pavo que no

abandonaba la sala en ningún momento, dos perros asilados, un gato barcino, jaulas colgadas de los muros y una mata de grana-das plantada en el medio. La función tardaba en comenzar y a veces nunca comenzaba, pero era más el escozor de la espera y el misterio que escondía aquella caja de metal con un foco en la punta. Y Búcar se hacía el loco y a propósito permitía que la espera se prolongara con la intención de retener el rebaño a buen seguro dentro de los rediles de la iglesia. El río temblaba por debajo: mugía bajito. Tía Trina y sus compañeras decidieron retirarse. Las chicharras habían acallado su estridente concier-to. Y de pronto sucedió que la boca del toro cimarrón se abrió y de sus entrañas salió vomitado un amasijo de árboles arrastra-dos que eran vapuleados de una manera sorprendente y a la vez humillante. La cresta enarbolada de un venado asomó por un instante y duró lo que dura la visión de un fragmento de deli-rio. Y José Herrera, a bordo del camión que trasladaba la caña, no pudo solucionar la avería con la urgencia requerida y no le quedó otra, si no regresar a la cabina y protegerse del fuerte impacto de la embestida que lo arrastró al camión y lo devoró sin dejar señales. La volubilidad, unida a la fuerza descomunal de las aguas, permitían los cambios bruscos, feroces de fisono-mía. La figura del toro cimarrón cambió por una boa constric-tora que se retorcía como látigo de los infiernos. Y de lo más profundo de arriba una centella reflejó el rostro terrible de Dios. Un rostro de ángel impasible. El cura Búcar interpretó el

Fotografía intervenida del Cem

enterio de Altagracia de la M

ontaña. Im

agen tomada de w

ww.psicoexcesos.com

Page 9: AL VACÍO Nº25

¿al vacío...? ___________________________________________________________________________ na

rrativa

mira

nd

ina

-9

fenómeno atmosférico como un mandato divino que había que acatar ipso facto. ¡Los santos nuevos! ¡Los santos nuevos! ¡Trai-gan los santos nuevos! Pero primero hay que desalojar a los santos viejos de la iglesia y lanzarlos al río. Dicho y hecho: mu-jeres y hombres comenzaron a bajar de sus nichos a los viejos santos que ya no hacían milagros. El primero en ser derrocado fue San Antonio, despojado del aura milagrera, depuesto: quien lo hizo fue una dama que había sufrido un intenso y prolongado despecho a causa de la taimada intervención de este santo casa-mentero, procurador de enlaces amorosos, algo pícaro, a pesar de la circunspección, y sospechosamente hermafrodita. Al lado de San Antonio estaba San Onofre barbudo y cubierto de una pátina impregnada de tiempo que había que abolir ¡Abajo los santos viejos! Era el lema de estos iconoclastas tardíos a cuya cabeza estaba el cura Búcar dando órdenes y manoteando de un lado para otro. Afuera el aguacero había cambiado la faz del mundo. El río comenzaba a hincharse a medi-da que devoraba los elementos del paisaje: conucos, empalizadas, piedras asomadas como efigies, perros vagabundos, burros, ga-llineros, puentes rotos. Y volvió a caer otra centella como pidiendo mayor celeridad a los ritos que debían calmar la tempestad. Uno a uno, los santos viejos salían de la iglesia de-portados, despreciados por sus antiguos fie-les. A la pobre Virgen nadie en principio se atrevía desalojar de aquel espacio que había sido consagrado por la adoración: era como deshacerse de una abuela buena, a quien, a la hora de la verdad, abandonamos en un asilo, y preferimos esta Virgen Santísima que le aven-taja en novedad a la otra, y a quien nunca co-noceremos porque, quiérase o no, siempre será una recién lle-gada. Pero los mandamientos del cura Búcar eran inapelables, así que manos a la obra. A un angelote regordete que merodea-ba por los lados de la sacristía se le chorreó la pintura que daba rubor a los redondeados cachetes y el pobre gimoteaba como un bebe sin saber qué hacer ante aquella histérica turbamulta que avanzaba poseída, dispuesta a salvar sus pertenencias y sus vidas así fuera a costa de los santos viejos de quienes estaban desencantados. Así pues, era necesario renovar la fe mediante un golpe de estado: caída y mesa limpia. No quedó ni uno solo de aquella corte. Reunidos afuera en un pelotón disminuido. Apretujados, abandonados a la orfandad del desprecio, a la es-pera de una “solución final”. Florencio Aristiguieta, un veguero rimador de coplas, motivado por la química pendenciera de la caña clara, propuso que fuesen quemados en una pira y que se levantara una crónica del evento para memoria del futuro. Ésta moción fue desaprobada de inmediato en vista de las condicio-nes atmosféricas que dificultaban sobremanera la posibilidad de encender una fogata bajo aquel proverbial chaparrón y además porque Florencio Aristiguieta no tenía ni voz ni voto en los

asuntos de Dios. Para eso estaba el cura, único encargado de transmitir la palabra del Altísimo. Hubo disidencias entre quie-nes sentían dolor por la manera en que habían sido desalojados los santos de la iglesia. Clarita Farías, devota de San Judas Ta-deo, hizo todo lo posible por abrirse paso y llegar hasta donde estaba el santo con la cabeza ladeada sobre un montículo. Lo acarició como se acaricia a un padre o a un hijo fallecido, y sus lágrimas, que se confundían con las gotas de lluvia, destilaban sentimiento de luto. Y de nada le valieron a Clarita Farías las rogativas y el empeño por darle asilo en su casa a San Judas Ta-deo, el viejo. El cura fue tajante: que no quede ni uno solo en pie, todos al río. Y el interior de la iglesia quedó desnudo, des-alojado por la revuelta iconoclasta, menos la cruz del altar, el resto era desolación. La capilla había sido despojada de sus me-táforas y los protagonistas del santoral cristiano proscritos. Cualquiera, curtido en asuntos milenaristas, hubiera predicho

que se trataba de una revolución y que sucedía cada montón de años. Pero no. La cosa no iba tan lejos, ni tan alto. Pues, el cura hacía sim-plemente lo que hacen muchas amas de casa de las grandes ciudades donde sobrevive una clase de desclasados consumistas que tiran a la basura los enseres domésticos, aunque puedan encontrarse en buen estado, porque han ad-quirido otros nuevos. Las razones del cura Bú-car eran eminentemente prácticas, concisas. Él botaba la casa por la ventana gracias al ha-llazgo de unas morocotas y a la inspiración onírica del Arcángel Gabriel. Y es que para este cura que había prestado su servicio mili-tar en Marruecos, en plena acometida de Franco, la metafísica, la teología y el misticis-

mo no trascendían la necesidad de comer como Dios manda y hacer la siesta con el estómago lleno. Los santos viejos fueron lanzados uno a uno por un barranco lateral a la plaza. Rodaron cuesta abajo dando tumbos, rebotando contra las raíces que sobresalían, resbalando por el declive empantanado. Los cuer-pos de madera hacían maromas y luego se estrellaban. Cabezas y miembros discordes saltaron por los aires. Una a una las iba devorando a las maltrechas esculturas el río como un lagarto milenario. Una tercera centella cayo y plasmó por un instante en la memoria de todos los presentes, la marca de una cesárea relampagueante. Y el gran ojo solar apareció dispersando las nubes. El ojo de Dios del tamaño de una semilla de mamón fosforescente. Las aguas del cielo amainaron y el río comenzó a calmarse. Los pájaros salían de sus nidos y sacudían las plumas. Una vaca bramó buscando a un becerro perdido para siempre. A los santos viejos el río los había tragado. Y ahora los santos nuevos, adquiridos por el cura Búcar en España, ocupaban los nichos, los altares y la sacristía.

* * *

Page 10: AL VACÍO Nº25

¿al vacío...? ___________________________________________________________________________-8

po

esí

a m

ira

nd

ina

Isaac Morales Fernández

DÍA DEL ESCRITOR

A Gustavo Medina

Gustavo repartiendo volantes del partido comunistay yo huyendo desmoralizado rumbo a una cervezahoy es día del escritor carajoen la mañana hemos abortado un recitalcomo todo lo que toca la poesíatermino en el bar de las tres para abajoy yo uniformado del partido socialistay Gustavo repartiendo sus volantes rojosen una esquina de la Plaza Bolívar de Santa Teresa del Tuypero hoy es día del escritor valey el consejo comunal se me volvió mierda ayerqué más puedo hacer si sólo soy un escritornada célebrefugazmente atardecidocómo no celebrar que mi patria es tan hermosamente cruelque se acuerda de nosotros una vez al año y de vainacasi al final como si fuéramos un cóccixpor culpa de Andrés Bello qué culo somos verdaderamenteese carajo debió nacer el 4 de febrerocomo yocomo la Revolución no el puto e insignificante 29 de noviembreesta vaina es un estigma bohemiosiempre la retarguardiao de último como aquellas aviones del 27Nlo siento camarada Gustavo soy anarquista decimos los escritores para lavarnos las manosdisimular el hedorqué pastel posmodernoqué diría Axy de este museo de errorespero andamos con el candidato a alcalde a cuestasarreando concejales hipertensoscomo un nosferatu Ruy Díaz de Vivary este poema escrito en la tascacon Julio, Leo y Luz está dedicado a la sangre de la conscienciapero del gobierno hablaremos luegocuando llegues y si llegas creo que te salvaráscon todo y tus crucigramas literarios

Sthephany Sierra

bruñen sus huellas bajo la oscuridad en llardas de acero todas regadas en mi corazón pero ya no está pues la dis-tancia me lo arrebató... los dias están grises porque aún así las huellas del niño del perú quedaron marcadas en el silencio... no sé qué más podré decirte de la poesía, lo que sé es que la poesía es cuando cantan las palabras... pero mi ser entero se pregunta: ¿qué sueñan los tan-ques en la noche bajo una luna llena o bajo ninguna? ¿quién sabe? sólo mi ser conoce los paisajes que usa para quejarse porque recuerda los sueños de aquel hermoso joven.

Marcelo Seguel Bon

Plano americano: Un avión atravesando los paraísos envenenados de una mariposa que revolotea celosa de su sombra. Plano detalle: Un teléfono que suena y mi madre contesta, o ¿soy yo sentado en un banco de plaza bajo la luz del invierno? Es invierno, es traspasando la arena olvidada de mi cielo desconocido, imaginario y corrupto. Dices: Caballo. Dices: Flor: Fuga vetusta y de-vorada. Ahora mi canto es llameante santísimo y lluvia. Al amanecer desaparecen los pájaros atrapados por la MicroMáquinafilmadoraDelossueños

Page 11: AL VACÍO Nº25

¿al vacío...? ___________________________________________________________________________-7

po

esía

mira

nd

ina

Julio Valderrey

El viejo púgil, en su desamparosintió las semillasrecogidas en el desierto,bailoteóy retrocedió mareado.

(Soltó los guijarros y hojeóel álbumde sus grandes glorias,los rounds de sombra con la vida,cejas, ríos pulverizados,salones dejados atrás,trofeos cubiertos por el polvoorejas, cicatrices del alba)

Perdido el equilibrioel viejo púgil dobló las piernasy cayó sin querer nadaa no ser apoyarse en una cuerday esperar la cuenta regresiva.

Ana Karina Rondón

Los niños de mi barrio juegan con sus camionessus madres los asustan con la policía, pues los meterá presos con apenas 3 años.Los castigan llevándolos a la escuela, si se portan malallí les mandarán tarea y no podrán jugar en la calle.Los niños de mi barrio sueñan con sus novias fieles las pistolas y motos, con las que suceden las cosas más interesantes.Los niños de mi barrio, no sueñan con la muerteella es una amante, un pran que siempre los traiciona.Nacieron muertos, invisibilizados,con sueños de niños ricos y alma de calle.Los sueños de los niños de mi barrio son balas sin rumbo,son balas sin rumbo.

Leonardo Delgado

PESTILENCIA

Estatuas pusilánimes, rostros henchidos pidiendo la noche,la contemplación de las orgíaspáginas sociales que de sociales no tienenni mierda y se la pasan por el culo exponiendosus boyantes desdichas.Entonces sé del silencio que desaparece y sigo con ojos extrañoslas Infectas me alcanzan ¿quién dijo, ¡hágase la luz!?La calle no me es benévola, puedo morir en mi propio Regurgitoalguien ríe detrás de míleo guiones de prensa, certifico que nos morimos de amorNo me importa que cuelguen mis orejas y duerman mis testículos

Page 12: AL VACÍO Nº25

¿al vacío...? ___________________________________________________________________________-6

en

say

os

lite

rari

os

El arte digital como la propuesta estética del siglo XXIpor Yhonaís Lemus

El artista ha de tener algo que decir, pues su deber no es dominar la forma sino adecuarla a un contenido.

Wassily Kandinsky

En estas últimas décadas nos hemos encontrados ro-deados por nuevas tecnologías de las que se des-pliegan un sinfín de neologismo de los que aún no

nos hemos termínanos de acostumbrar. Estamos hablando de esquipo móviles, redes sociales, ciberespacio, nuevas mane-ras de hacer comunicación. Es por ello que el campo cultural, en el que estamos inmersos, no se puede concebir en la actua-lidad como un ente aislado del Internet, ya que hacemos vida desde ese espacio y se ha convertido en un hecho inherente que determina y representa a nuestra sociedad. De allí que se ha estado gestando, desde hace ya algunos años, una nueva manera de percibir el mundo, de asumir la realidad desde un sistema de representación específico que responden a una empresa meramente audiovisual (que depende, fundamental-mente, de nuestra atención visual y auditiva). Castrando esa parte sociabilizadora que demanda de nuestra corporeidad pero proliferando otra parte creativa asumida generalmente desde el alejamiento físico pero que se concreta de manera grupal en la realidad virtual.

Es de este modo que hacemos vida en los diversos espacio que nos ofrece el Internet, y por tanto asumimos este mundo virtual como una forma de expresión que articulamos y nos

articula. Es decir, es un espacio que permite, el desarrollo de nuestros lenguajes: político, religioso, económico, artístico. De esta manera, el artista y el intelectual han desarrollado sus lenguajes, formas expresivas, desde páginas web o bitácoras en líneas (ciberbitácoras) que les ha permitido renovar los conceptos y la experiencia artística. Por ejemplo: determina-do artista plástico, digamos aquí un escultor, puede colocar fotos de su obra en su blog y acompañarla, a través de un link, con un texto de algún escritor célebre publicado en la pági-na web del mismo y también puede acompañar su expresión artística con una experiencia auditiva acompañando dichas fotos de su obra con música.

Es así como la experiencia del internauta, que se expone al blog, se ensancha a través de todos estos enlaces. Ahora bien, así como el artista desarrolla sus lenguajes a través de ciberbitácoras también puede desarrollarlo sirviéndose de la misma tecnología. Es decir, desarrollar arte con tecnología, hecho que responde a nuevas formas de consumir el arte: ha-ciéndolo de acceso individual y a distancia, como la tecnolo-gía se concibe y permite. Transformando el papel del artista y su seguidor, y por ende, generando una gama de diferentes y singulares propuestas artísticas que demanda una sensibiliza-ción nueva para asimilar códigos nuevos. Alejándose cada vez más de los esquemas clásicos del arte, dada una tradición de la ruptura de la que se ha forjado siempre el quehacer artístico.

Si bien, como asegura el sociólogo Jean Baudrillard, nos

'Democracy', 70 cm x 170 cm. Marcin Owczarek

Page 13: AL VACÍO Nº25

¿al vacío...? ___________________________________________________________________________-5

en

say

os lite

rario

s

acercamos cada vez más a la alta definición de la imagen, a la perfección realista que esta nos ofrece, perdiendo el poder de la ilusión en la misma, podemos decir que a esta manera se ha buscado una novedosa configuración desde dicha perfec-ción, tal es el caso del Arte Digital.

Para acércanos a esta noción que entendemos por Arte Digital, primero debemos hacer un breve resumen de lo que le permitió darle un lugar histórico y cultural en nuestra so-ciedad. Tenemos que la Segunda Guerra Mundial hace perder a Europa su liderazgo artístico, trasladándose la nueva capi-talidad artística a Nueva York. La abstracción permitió ocul-tar lo figurativo ejerciendo dominio durante toda la década de los años cincuenta. El arte de la posguerra originó una ruptura con la mímesis de la apariencia, consolidando el Ex-presionismo Abstracto americano y el Informalismo europeo, corrientes que evadían el conocimiento exterior para asumir una interioridad desconocida. Instaurándose como una ex-presión, de cierta manera, hermética.

Esta expresión dejó de responder a una generación que reclamaba un arte en sintonía, ya que los recuerdos de la gue-rra se habían borrado por las imágenes del consumo, dando a lugar el Arte Pop, que surgió de las ideas de Duchamp, como manifestación de una nueva realidad marcada por la produc-ción industrial y los modernos medios de comunicación, es así como algunos artistas durante la década de los 50 comien-za a hacer collage utilizando imágenes de la ya crecida cultura en masa, podemos mencionar a Andy Warhol quien sacó de su taller imágenes en las que íconos del cine como Marilyn Monroe y Elvis Presley se repetían en distintos colores, tam-bién debemos nombrar a artistas como Roy Lichtenstein y Jasper Johns. Esta expresión crea vínculos entre el arte y la sociedad ya que se apropia de las imágenes de los medios de comunicación masiva, por tanto este arte abandona la idea de cambiar la realidad para ser simplemente su espejo.

Todo lo anterior hizo posible que se sustituyera el sujeto artístico por la formulación de la idea que le da vida, dando a lugar el Arte Conceptual. La nueva concepción de lo ar-tístico parte de su relación con el espectador. Es así como las propuestas no tratan de abolir los viejos territorios para sustituirlos por otro, sino que se hacen de su mismo espacio, se reafirman así mismas y para ello absorben y utilizan todo lo que necesiten para ampliar el campo de experimentación.

Podemos decir que el Arte Digital, como expresión de las últimas décadas del siglo XX, responde a estás concepciones y tiene su referente más cercano en el Fotorealismo y en el Hiperrealismo, ambas son respuestas de los años 60 y 70

ante el furor del Expresionismo Abstracto Norteamericano, encabezado por las figuras de Jackson Pollock, Franz Kline y Willem de Kooning. La primera tendencia, el Fotorealismo, apuntaba hacia la realización de retratos y paisajes urbanos con técnicas pictóricas que tuvieran la perfección de la fo-tografía. Su representante básico es Chuk Close, aunque de-bemos mencionar a Jhon Anibal Herrera Cueva y a Richard Estes. La segunda tendencia, el Hiperrealismo, propone re-producir la realidad con más fidelidad y objetividad que la fotografía misma. Los artistas hiperrealistas tratan de buscar, con el más radical de los verismos, una transcripción de la realidad usando los medios técnicos y fotográficos de la ma-nipulación de las imágenes. Consiguen con la pintura al óleo o la escultura, el mismo detallismo y encuadre que ofrece la fotografía. En este hiperrealismo contemporáneo tenemos a: Alyssa Monks, Gina Heyer, Javier Arizabalo, Roberto Bernar-di, Dennis Wojtkiewicz, entre muchos otros.

Ahora bien, en cuanto al Arte Digital, podemos decir que se trata éste de un producto de la tecnología informá-tica. Donde la tecnología se convierte en un instrumento o procedimiento que posibilita una creación artística, y en ese sentido no existe diferencia entre un pincel y una paleta grá-fica. De este modo la manipulación digital supone: imáge-nes tomadas con una cámara digital o por la digitalización de imágenes o negativos fotográficos escaneados, se ajustan las proporciones, se corrige la perspectiva y se cambia el color, sintetizando imágenes novedosas.

El Arte Digital desvanece totalmente la representación fiel de los objetos, engañando doblemente al espectador, puesto que lo que éste ve no es una representación natural ni tam-poco es lo que está representando. Todo lo que se encuentra detrás de las imágenes son códigos matemáticos.

Tomando en consideración a Alejandro Arturo Martínez, tenemos que las primeras creaciones de Arte Digital apare-cen en la segunda mitad del siglo XX cuando se empiezan a crear gráficos en el computador. El profesor Max Bense en el año 1949 escribió la Estética de la Información junto a Abra-ham A. Moles. Trabajo que puede considerarse como uno de los fundadores del Arte Digital ya que le serviría más tarde a George Nees para realizar la primera exposición sobre gráfi-cos generados por computadora.

Según el artista Frieder Nake, en consecuencia con Martí-nez, el arte por computadora se hace público el 5 de enero de 1965 en el octavo piso del edificio Hahn en la ciudad de Stutt-gart gracias a la exposición Computerfrafik de Georg Nees. Pero ya tres años antes, Michael Noll había realizado unos

Page 14: AL VACÍO Nº25

¿al vacío...? ___________________________________________________________________________

en

say

os

lite

rari

os -4

dibujos y los había impreso en los labortarios Bell. Tomemos en cuenta que para esta época las computadoras eran sólo uti-lizadas para fines científicos, este pequeño aporte avecina una nueva manera de concebir el utilitarismo de la computadora.

El artista digital tiene su propia propuesta y un estilo dis-tinto al de otros artistas digitales. Es así como se puede dar el caso de que la propuesta o el proyecto creador salga de la acepción que entendemos por Arte Digital debido a la hi-bridación de medios que maneja, ya que se articula en la confluencia entre diferentes saberes y lenguajes como la in-geniería, mecánica, neumática, robótica, biotecnología, elec-trónica, música. Estamos hablando de una nueva expresión que está en medio de su proliferación y exploración por tanto no se puede categorizar ni definir en cuanto a un concepto específico. La creación digital puede trabajarse de distintas formas, algunos le dan más importancia a la parte matemá-tica y algorítmica mientras que otros prefieren enfocarse en lo gráfico.

A su vez, el Arte Digital puede dividirse según las pro-puestas y posturas que se toman al utilizar lo digital en el arte. De allí surgen los Plots que son recreaciones a partir de algoritmos generados por computadora lo cual lo hacen único. Que luego son impresos con un plotter. El referente más conocido es George Nees, uno de los primeros artistas y teóricos del Arte Digital.

Las animaciones 3D, también es una manera de hacer arte digital. Éstas son creadas en computadora y trata de imágenes aisladas que se van mostrando rápidamente para dar la ilusión de movimiento.

Del mismo modo dentro de la universalidad del Arte Di-gital también entra diversos tó-picos para su expresión, es así como surge el surrealismo vi-sual, las metáforas visuales, arte digital orientado hacia la fanta-sía o la realidad, por tanto hay para todos los gustos.

Tenemos, por ejemplo, al artista de Shanghái que se hace llamar Maleonn, sus trabajos y composiciones fotográficas son an magnificas que lo han lleva-do a exponer en las principales galerías de todo el mundo y ser

considerado uno de los mejores exponentes actuales del su-rrealismo “digital”. Asimismo, se debe hacer mención a Ado-nis Julius Werther, artista alemán perteneciente también al surrealismo digital cuyas imágenes crean un mundo parale-lo, de igual modo Luís Pulo trabaja el arte digital surrealista tomando como referencia diverso conceptos orientándolos hacia la fantasía.

Por otro lado tenemos a Jeffrey Michael Harp, artista norteamericano, que trabaja muy bien el concepto de metá-foras visuales. Otro admirador del dadaísmo y el surrealismo es Marcin Owczarek, de Polonia, que se vale del collages y fotografías críticas que se enfocan en la degradación humana. Igualmente, se debe seguir la propuesta surrealista de Yves Lecoq, fotógrafo y artista digital francés. Así como el mundo inigualable que nos presenta Alexander Jansson, artista inde-pendiente sueco, que reúne en un mismo concepto la ilus-tración con el arte digital, a través de sus ilustraciones nos introduce en un extraño y oscuro mundo en el que la frontera entre los sueños y las pesadillas es tenue e indefinida.

En fin, del Arte Digital han surgido una variedad de artis-tas que responden al mundo de la tecnología y es por ello que el Internet ha transformado nuestras vidas así como nuestra manera de percibir el mundo y por lo tanto no resulta fá-cil evaluar las repercusiones en nuestro modo de entender el arte. A todas estas, podemos decir que diversas formas de arte electrónico han aparecido y compiten entre sí para ser legitimadas como formas de arte genuinamente contempo-ráneas, representativas y portadoras del espíritu de lo mo-derno.

REFERENTES BIBLIOGRÁFICOS:BAUDRILLARD, J (1997) La ilusión y la desilusión estética. Monte Ávila Editores Latinoamerica-na. Carcas, Venezuela.

MARTÍNEZ, A (2001) Arte y arqui-tectura del siglo XX. Vol. II. Mon-tesinos. España.

BOURDIEU, P (1967) Campo in-telectual y proyecto creador. Siglo XXI. México.

Link de wordpress en línea: http://elar tedig ital.word-press.com/historia/

'Nacer', 500pix x 390pix. Israel Alatorre.

Page 15: AL VACÍO Nº25

¿al vacío...? ___________________________________________________________________________ co

me

nta

libro

s

-3

4 monólogos sin logos de Oswaldo Gonzálezpor Isaac Morales Fernández

Este texto dramático de Oswaldo González se trata de una trilogía en la que 4 personajes conversan a lo largo de dos monólogos y una obra más que es

más bien un diálogo. Ellos son Cran Eola, Clav Ícula, Pésima Pornot y la tortuga Gea. Ellos son grotescos y también alegó-ricos, muy al estilo del clásico teatro absurdístico latinoame-ricano inaugurado por aquellos tres personajes de E Ultreja (1927) de Úslar Pietri. Pero no hay que hacer comparacio-nes muy exactas, pues esta trilogía de González, en la que evidentemente ni son cuatro ni son todos monólogos -cosa muy adrede- tiene un asidero simbólico muy bien definido al cual se le puede dar una lectura socio-histórica sin especular mucho. Bajo los temas del vacío, apocalípticos y ecologistas, subyace el tema de la destrucción del hombre por el hombre llevada a cabo por siglos de eso que conocemos como “capita-lismo” e “imperialismo”, conceptos que no son abstracciones, sino que son la realidad de la sociedad moderna, postmoder-na, dominada, oprimida, compulsiva y autodestructiva.

Pero esta obra no es un panfleto rojo para agitar al obrero sindicalizado buscando reivindicaciones, es un una obra de moderado hermetismo escrita para fastidiar a los intelectua-les de cafetín, esponjados, casi siempre profesores universi-tarios demasiado ocupados en su sabiduría como para bajar al estrato del pueblo. Dentro de su hermenéutica, estos perso-najes se presentan con lenguaje bien criollo y hasta tocando, o más bien maniatando, un cuatro, nuestro instrumento nacio-nal. Es decir, son universales como símbolos, sí, pero no te-men lucir circunscritos a nuestro contexto espacio-temporal (porque además la obra es futurista, en el sentido de cien-ciaficción del término), razón por la cual dicen mucho para nuestro momento histórico, este en el que la misma sociedad burguesa comienza a quitarse las lagañas para comenzar a en-trever a los monstruos de Monsanto, McDonald’s y Pepsico a los ojos, este en el que la lucha de clases a nivel mundial se agudiza porque ya la globalización de la explotación y el neoliberalismo toca fondo en Europa y NorteAmérica, que miran impávidos a una América Latina en plena revolución.

Ahora bien, Cran Eola es el personaje de la nostalgia, del hilo histórico roto a la mitad, en donde la mitad correspon-diente al futuro ha caído al abismo, y la otra corresponde al pasado y ha quedado insondablemente atrás, así que Cran Eola se encuentra en el eterno momento roto, permanece para siempre en un presente de purgatorio, en un ahora sin razón, sin logos, el no-porvenir. Su árbol, es decir, su raíz ha sido

meada por Colón, el primer gran glo-balizador en todo el sentido terrorífi-co y saqueador de la palabra, por lo tanto, en adelante, esta eternidad es peor que Esperan-do a Godot porque ya no hay nada que esperar, ya todo ha pasado:

“CRAN EOLA: Siento, desde lo más honde de mi corazón, que no tengo más nada que decir.”

El único consuelo de Cran Eola es haber sobrevivido a la hecatombe, sin embargo manifiesta sentirse “vacío” y “casi rendirse”: sabe que está en su fin, y se va.

Por su parte, Clav Ícula es la búsqueda de la última espe-ranza. Búsqueda eternamente trunca, pero que sigue siendo búsqueda, sigue siendo, como el nombre de su parte de la obra lo dice, “Primavera”. Aspira aún a algo, por ello dice:

“CLAV ÍCULA: Estoy muy cansado... Necesito reconcentrarme, refugiarme en mi vacío... compactarme...”

Y de esta misma manera, aún pide espacio para pensar, agarra el cuatro y entona algo, y se burla de la amenaza de un oso que aparece ferozmente en escena.

Pésima Pornot, finalmente, es el símbolo de la sociedad burguesa y consumista, destructiva y autodestructiva, triste-mente poderosa, la dueña de todo el caos y el desastre reinan-tes en el mundo de sus hijos Cran y Clav, de quienes guarda sus calaveras con cierto cinismo. Y está sobre la tortuga Gea, es decir, el símbolo perfecto de la Tierra, nuestra isla en el inconmensurable mar del universo, bastante aporreada, ve-jada, ultrajada... Esa tortuga podrida, lenta, arruinada, es el mundo, es la escenografía misma de la trilogía entera.

En fin, no ser conmovido, pero más que eso, movido, por esta obra de Oswaldo González (que bien funciona como tea-tro para ser leído), es haber sucumbido ya a la insensibilidad postmoderna. Ojalá no sea muy tarde ya para el lector.

Page 16: AL VACÍO Nº25

¿al vacío...? ___________________________________________________________________________

pa

ra l

a f

orm

ac

ión -2

El animador sociocultural y su rol en la transformaciónpor Marcelo Seguel Bon

Bajo los conceptos de “ahistórico” o “pre lógico” que fundó y proyectó, a través del tiempo, este con-glomerado sociocultural llamado Ilustración, de

índole academicista y capitalista, para definir la cosmovisión o manifestación cultural de nuestros antiguos pueblos indí-genas; hay que destacar que a pesar de la diversidad en las formas de concebir la realidad de las diferentes sociedades indígenas, es posible establecer una serie de rasgos genera-les que comparten todos nuestros pueblos indígenas y que constituyen uno de los elementos fundamentales de su iden-tidad cultural. La cosmovisión estaba íntimamente ligada a la religión, la política, la economía, la cultura, la educación y el medio ambiente. La cultura expresaba la relación de los hombres con los dioses, establecía el orden jerárquico del cosmos, la concepción del cuerpo humano, estructuraba la vida comunitaria y agrupaba el conjunto de los mitos que ex-plicaban el origen del mundo.

La cosmovisión indígena tiene un claro origen agrícola; en ella el medio ambiente; el territorio real y simbólico es un factor fundamental y tiene como uno de sus rasgos carac-terísticos el que no exista una separación -como en el pensa-miento occidental- entre naturaleza y cultura, orden natural y orden social, individuo y sociedad. Por lo tanto, todo estaba integrado y nuestras culturas indígenas tenían una memoria sólidamente desarrollada y transmitían sus tradiciones, en una forma oral, fuertemente encadenada por fórmulas donde se plasma la necesidad de crear un espacio a la fantasía e ima-ginación del narrador, a su deseo de ofrecer un testimonio, de satisfacer el deseo de sensación de toda la colectividad y de acrecentar el placer que él mismo siente en su relato, per-siguiendo un objetivo estético, ético y didáctico.

Con la llegada de los españoles se importó un proyecto que pretendía dar una visión totalizadora del mundo a par-tir de la racionalidad científica. Sin embargo, esta visión totalizadora trajo aparejada la fragmentación del sujeto. La gran paradoja es que la modernidad fue vista como la rei-vindicación del sujeto, pero tal proyecto se vio frustrado por la parcelación practicada en la subjetividad. Finalmente, las enormes desigualdades sociales que afectan, hoy, a América Latina, generadas por la imposición de un capitalismo depen-diente, neocolonial y neoliberal basado en la transferencia de riqueza desde los países de la periferia a los países hegemó-nicos agudizan permanentemente la pobreza, la exclusión, la opresión, la disociación, la desidentificación y dominación de

nuestros pueblos. Diferencias profundizadas por la expulsión de la clase campesina de los centros rurales a los urbanos, la destrucción de la industria, de la agricultura y la distribución desigual de la riqueza. No contamos con personas que persi-gan una búsqueda del sentido, ni de objetivos a largo plazo. Las grandes preguntas se han vuelto obsoletas. Ya no hay más que excesiva inmediatez; en una sociedad que entroniza la espontaneidad y lo efímero. En el marco de una cultura que pretende ser “divertida”, el tiempo del ocio reflexivo es susti-tuido por una sociedad del entretenimiento; donde lo educa-tivo y cultural parece representar lo “aburrido”, lo “lento”, lo que carece de efectos “inmediatos”. Vivimos en una sociedad hiperindividualista, que ha perdido sus viejas bases fundadas en los valores de la ilustración; esas viejas bases sólidas que daban sentido –y sentido en términos colectivos- se han di-luido y heredamos de nuestra formación académica teorías de la cognición que asocian el conocimiento con la transmisión de información y que ven la tarea de la educación y la cultura como un mero almacenamiento de conocimientos.

Con el advenimiento del Gobierno Revolucionario que li-deró el Comandante Hugo Chávez; el rol del animador socio cultural es el de impulsar -desde el pensamiento crítico- una praxis transformadora de educación y cultura popular orien-tada al análisis situacional y la planificación estratégica para crear, desarrollar, aplicar y acompañar a los colectivos y eva-luar en conjunto, con otros actores, proyectos comunitarios que articulen dialécticamente la educación en sus diferentes niveles y modalidades con la comunidad organizada, fomen-tando el fortalecimiento del Poder Popular. Desde esta pers-pectiva, el animador como intelectual y cultor orgánico en el marco socio-histórico venezolano tiene la misión de contri-buir a la formación de la conciencia de clase de los pueblos y, sobre todo, debe saber que la lectura constituye una vía de conocimiento e interrelación del individuo con su medio; una forma de construcción e interpretación de su realidad que adquiere tantas significaciones como subjetividades exis-tan. El acto de leer, con sus múltiples realizaciones individua-les y colectivas, representa una fuente de acceso a la cultura nacional y universal y, como tal, es un relevante elemento de promoción y condicionamiento del desarrollo social. Por lo tanto, el animador debe “tejer”, debe “remendar” a través de la palabra todo lo que el sistema capitalista ha disociado.

* * *

Page 17: AL VACÍO Nº25

¿al vacío...? ___________________________________________________________________________-1

Tuyedadespor Leonardo Delgado

Poeta asusta niños

Cierto día el poeta Valderrey se dirigía hacia Ca-racas para hacer alguna diligencia etílica, ¡perdón!, importante. Para ese entonces tenía el cabello largo y andaba un poco barbado. Una vez pegada tremen-da carrera para poder entrar en el vagón del metro, exhausto y casi sin respirar lo recibe un niño con voz estruendosa y señalando al poeta: mamá, ¿este es el loco que me va a asustar si no me porto bien?

Escritor científico loco

En otro capítulo donde un poeta entra a un vagón del metro, sucedió lo siguiente: en este caso el prota-gonista fue nuestro amigo del grupo ¿al vacío…?, el narrador Julián Márquez. Una vez entrado al vagón y sentado, una señora con un niño en sus piernas le dice a su hijo ¡si no te comes la comida te voy a echar al loco! se-ñalando a Julián y haciéndole un gesto de complicidad al poeta. Pero al instante responde el niño: mamá, ¿tú no ves que no es un loco? ¡Es un científi co!

Poeta fantasma

Hace pocos días el poeta Ruffo Batatima necesitaba hacer una diligencia que consistía en pedir un acta de defunción de un familiar en el Registro. Una vez apar-cado frente a la persona, le preguntan: ¿Qué desea señor? “Mire, pasa una cosa: yo necesito un acta de defun-ción”. A lo que le preguntaron: ¿es para usted? El poeta sintió que era un fantasma.

Chiquito pero grande

El poeta Isaac había comprado para su madre una biblioteca armable de más o menos 1,70mts. La lleva-ba en el lomo guardada en su respectiva caja, y mien-tras caminaba con la misma le envió mensaje de texto a su mamá, que no es más que nuestra amiga Yrene. ¡Mamá, a que no adivinas qué llevo aquí en el lomo! ¡Es chiquito pero grande a la vez! Y con otro mensaje de texto le responde la amiga Yrene ¡No me digas que vienes cargando al poeta Leonardo!

tuy

ed

ad

es

Acto de presentación y bautizo de tres libros apadrinados por el Alcalde (siendo aún candidato) Carlos Rodríguez, del Mun. Independencia, y con presencia de Virginia Palomo, Coordinadora General del Sistema Nacional de Imprentas Regionales.

Evento realizado el 18 de octubre de 2013 en la Plaza Bolívar de Santa Teresa del Tuy.

Page 18: AL VACÍO Nº25

¿al vacío...? ___________________________________________________________________________0

Afi che (en negativo) del Centro Estudios Artísticos Andrés Eloy Blanco de Guatire, alusivo a la

Parranda de San Pedro de Guarenas-Guatire. Patrimonio cultural de la Humanidad declarado el 5-12-2013

por la UNESCO.