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  • Vicente Huidobro

    POEMAS ARTICOS Y OTRAS ALQUIMIAS.

    (Seleccin y prologo Lord Cheselin)

    BIBLIOTECA VIRTUAL BEAT 57

  • Vicente Huidobro (1893-1948)

    1893 - Vicente Garca-Huidobro Fernndez nace el 10 de enero, en Santiago. Hijo de Vicente Garca-Huidobro y

    Mara Luisa Fernndez Bascun, pertenece a una rica y aristocrtica familia catlica. Huidobro era el primognito

    varn entre seis hermanos, y futuro rector de los bienes familiares. Su madre fue una figura destacada del feminismo

    en Chile y concentraba en sus salones relevantes figuras del quehacer cultural nacional. Todo esto constituy un

    aspecto importante en su formacin como escritor.

    1900 - Regresa a Chile desde Europa, donde se haba dirigido tempranamente junto a su familia. Institutrices

    europeas se encargan de su primera formacin, para luego ingresar al Colegio de San Ignacio dirigido por los Padres

    Jesuitas de Santiago.

    1905 - Cerca de los doce aos escribe su primera composicin en verso, titulada Ese soy yo, que fue corregida por

    su madre.

    1910 - Publica su primer poema El Cristo del monte, en La Estrella de Andacollo el 15 de octubre.

    1911 - Cursa estudios de literatura en la Universidad de Chile, Santiago. Publica Ecos del Alma (Santiago, Imprenta

    y Encuadernacin Chile), libro acorde a la tendencia modernista que imperaba en los crculos literarios

    latinoamericanos. En l recoge parte de su produccin literaria escolar.

    1912 - Contrae matrimonio con Manuela Portales Bello. Dirige la revista Musa Joven que funda en junio con Jorge

    Hbner Bezanilla. En ella publica Huidobro casi la totalidad de la poesa que aparecer luego en Canciones en la

    Noche, adems, su primer caligrafa Tringulo armnico, en octubre, en el sexto y ltimo nmero de la serie.

    1913 - Funda con Carlos Daz Loyola, quien posteriormente usar el seudnimo Pablo de Rokha, la revista Azul

    de la que aparecen tres nmeros. Las colaboraciones de Huidobro en esta publicacin son recogidas luego en La

    Gruta del Silencio. Escribe el libro Templo de Belleza, que no lleg a editar. ste es una coleccin de artculos

    apologticos sobre personajes relevantes para el autor, de los cuales nicamente publica A Verlaine en Azul

    N3. En mayo estrena con xito en el Palace Theatre de Santiago la obra Cuando el Amor se Vaya escrita en

    colaboracin con Gabry Rivas. Publica La Gruta del Silencio (Santiago, Imprenta Universitaria) y Canciones en

    la Noche (Santiago, Imprenta y Encuadernacin Chile). Este ltimo libro, aunque recopila la poesa ms

    temprana de Huidobro, se publica en ltimo lugar por problemas de imprenta.

    1923 - Realiza en febrero el Bal Travesti Transmental. Participa el 29 de abril en el recital de poesa

    vanguardista celebrado en la galera La Licorne. Colabora en la revista hngara Ma Teremteni. Guillermo de

    Torre, en un artculo de la revista Alfar de julio, polemiza con Huidobro al acusarlo de haber copiado el

    creacionismo al uruguayo Julio Herrera y Reissig. Escribe el guin cinematogrfico de Cagliostro, movido por

    el proyecto de montaje del director rumano Mime Mtzu. Publica Finis Britannia [sic], (Pars, Fiat Lux),

    manifestando una fuerte crtica contra el imperialismo britnico.

    1924 - Como consecuencia de la publicacin del Finis Britannia es supuestamente secuestrado, generando un gran

    inters en la prensa europea. Ingresa a la Gran Logia Masnica de Francia. Conoce a Miguel de Unamuno quien se

    encuentra exiliado en Pars. Aparece el nmero 3 de Cration, donde publica su Manifeste peut-tre. En la revista

    participan Tristn Tzara, Ren Crevel, Juan Larrea y Erik Satie. En ella se incluye el suplemento Al fin se descubre

    mi maestro que responde a las acusaciones de Guillermo de Torre. Colabora en otras revistas francesas. Escribe y

    publica Elega a la muerte de Lenin.

    1925 - Contina la polmica con Guillermo de Torre al publicar ste Literaturas europeas de Vanguardia, con

    nimo adverso a Huidobro. En pleno surgimiento del surrealismo, pronuncia la conferencia L'inconscient et

    I'inspiration artistique que cuenta con la presencia del destituido presidente de Chile, Arturo Alessandri Palma.

    Regresa a su pas natal en abril. Juan Emar publica en el diario La Nacin del 29 de abril una traduccin del

    Prefacio de Altazor bajo el ttulo de Altazur, junto con una entrevista realizada a Huidobro, donde relata su

    primera impresin del pas. Al poco tiempo se lanza al debate poltico con la publicacin del artculo El momento

    actual. Funda en agosto Accin. Diario de Purificacin Nacional. El mismo mes es golpeado frente a su casa al

    denunciar actividades fraudulentas de altas personalidades poltico-adminstrativas. La gran cobertura de la prensa lo

    convierte en figura nacional. El 21 de noviembre es clausurado Accin, y Huidobro contina su actividad poltica

    fundando el peridico La Reforma. Es proclamado candidato a la Presidencia de la Repblica por las juventudes

    progresistas. Huidobro acepta esta propuesta en trminos simblicos para dar espacio a este sector en las decisiones

    del pas. Sufre un segundo atentado al explotar una bomba frente a su casa. Colabora en las revistas Andamios,

    Panorama y Ariel. Publica Automne Rgulier (Pars, Librairie de france) y Tout coup (Pars, Au Sans Pareil),

  • con poemas que se oponen a las tendencias surrealistas. Tambin Manifestes (Pars, Revue Mondiale), en donde

    recoge una serie de ensayos y proclamas que expresan su posicin esttica.

    1926 - Publica en la revista Panorama de abril, a los 33 aos, un poema que sera un fragmento del Canto IV de

    Altazor. Otra anticipacin de esta obra figura en Favorables Paris Poema de octubre, dirigida por Juan Larrea y

    Csar Vallejo.

    Aparece el Indice de la Nueva Poesa Americana, Mxico y Buenos Aires, que prologa Huidobro junto a Alberto

    Hidalgo y Jorge Luis Borges. El escndalo sacude a la gran burguesa chilena cuando conoce y se enamora de su

    concuada, la joven Ximena Amuntegui, perteneciente a una familia con fuerte influencia poltica. Refirindose a

    esta relacin, publica el poema Pasin y muerte un viernes santo en La Nacin de Santiago. La familia de la

    muchacha los descubre en un encuentro furtivo y hace que la polica detenga a Huidobro, quien es obligado a dejar

    el pas bajo amenaza de muerte. Este hecho causa la separacin definitiva de su mujer e hijos. Publica Vientos

    Contrarios (Santiago de Chile, Nascimento).

    1927 - El 28 de enero se realiza en la Salle Comoedia de Pars, una presentacin de poemas actuados, con obras de

    Tzara, Apollinaire y Huidobro. Viaja a Nueva York donde conoce por medio de Edgar Varse a Charles Chaplin,

    Douglas Fairbanks y Gloria Swanson. Su novela Cagliostro es premiada por las posibilidades de ser llevada al cine

    con USD 10.000 por The League for Better Pictures. Escribe el Canto to Lindbergh poema de tono pico que

    exalta la hazaa del aviador.

    1928 - Se mantiene en comunicacin con Ximena Amuntegui quien acababa de alcanzar la mayora de edad, al

    conseguir la muchacha su pasaporte, la rapt a la salida del Liceo y se march de nuevo a Pars, en donde la feliz

    pareja se instal en el barrio de Montparnasse. Este hecho conmueve a la sociedad santiaguina. Una vez instalado en

    Europa dirige junto a Tristan Tzara la seccin literaria Feuille Volante de Cahiers d'Art

    Comienza a escribir su novela Mo Cid Campeador, para lo cual realiza estudios genealgicos de su familia.

    Descubre que es heredero del marquesado de Casa Real, ttulo nobiliario que su madre, en los aos siguientes, se

    encarga de tramitar.

    1929 - Contina el trabajo de Altazor y comienza el de Temblor de Cielo. Aproximadamente en esta poca, se casa

    con Ximena segn el rito mahometano, para lo cual Huidobro debe hacer votos dentro de esta fe religiosa. Publica

    Mo Cid Campeador (Madrid, Compaa Iberoamericana de Publicaciones), con ilustraciones de Santiago

    Ontan.

    1930 - Escribe en los Alpes italianos la novela de anticipacin, La Prxima, mientras pasa una temporada con su

    amigo Roberto Surez Barros. En esta obra narrativa proyecta construir una colonia de hombres nuevos. Publica en

    la Revue Europenne su poema Chanson de I'oeuf et de l'infini, recogido luego en espaol, en Ver y Palpar,

    (1941). Publica un fragmento de Altazor, en francs, en la revista Transition de junio.

    1931 - Viaja a Madrid donde permanece enero y febrero gestionando la publicacin de Altazor y Temblor de

    Cielo. Asiste al recital de Poeta en Nueva York de Federico Garca Lorca. Se genera una breve disputa epistolar

    con Luis Buuel por motivos polticos. Estando con Hans Arp de vacaciones en Arcachn, escriben los textos de

    Trois Nouvelles Exemplaires. Inicia amistad con el pintor uruguayo Joaqun Torres-Garca. Publica Portrait of a

    Paladn, Londres y Nueva York; versin en ingls del Mo Cid Campeador; Temblor de Cielo (Madrid, Editorial

    Plutarco) y Altazor o el Viaje en Paracadas (Madrid, Compaa Iberoamericana de Publicaciones).

    1932 - En viaje a Palma de Mallorca planea la aclimatacin de ruiseores en Chile. Regresa a Chile presionado por

    la crisis econmica mundial. Publica Gilles de Raiz (Pars, Totem), con un retrato de Joseph Simma y

    Tremblement de Ciel (Pars, L'As de Coeur), excelente versin francesa del poema en prosa Temblor de Cielo con

    un retrato de Juan Gris.

    1933 - Ya en Chile, vive una intensa actividad poltica en pro del Partido Comunista chileno. Ejerce influencia y se

    relaciona con la generacin artstico-literaria joven. Dicta conferencias en la librera de Julio Walton en Santiago, de

    carcter antibelicista, con amplia participacin de la juventud. En la revista Europa de Barcelona, publica el artculo

    Manifiesto a la juventud de Hispanoamrica donde propone la creacin de una repblica conformada por Bolivia,

    Chile, Paraguay y Uruguay.

    1934 - Escribe crtica cinematogrfica en la prensa santiaguina. Nace su quinto hijo Vladimir, nombre dado en honor

    a Lenin. Publica, en un ao de intensa actividad editorial: Cagliostro, (Santiago, Zig-Zag), novela-film; La

    Prxima. Historia que pas en un tiempo ms (Santiago, Walton); Pap o el diario de Alicia Mir (Santiago,

    Walton), novela escrita en forma de diario ntimo; y En la Luna (Santiago, Ercilla), teatro. Funda con Omar

    Cceres y Eduardo Anguita la revista Vital/Ombligo.

  • 1935 - Se desata la polmica entre Huidobro y Pablo Neruda al aparecer el primero en forma ms relevante en la

    Antologa de Poesa Chilena Nueva de Eduardo Anguita y Volodia Teitelboim. Del ttulo de la revista fundada el

    ao anterior sobrevive nicamente Vital con el nuevo y satrico subttulo de Higiene social. Esta le sirve de frente

    para polemizar con Neruda. Publica Tres Novelas Ejemplares (Santiago, Zig-Zag). Debido a la brevedad de stas

    debe agregar dos textos ms de los escritos con Hans Arp, por sugerencia de su editor.

    1936 - Junto a Pablo Picasso, Hans Arp, Vasily Kandinsky, Robert y Sonia Delaunay, entre otros, firma el

    Manifiesto Dimensionista. Escribe artculos polticos antifascistas para el diario La Opinin, en que alude la

    situacin de Italia, Alemania y Espaa. Adhiere al Frente Popular Chileno y escribe profusamente sobre la poltica

    contingente. Recibe la colaboracin, entre otros, de Pablo Picasso, Andr Breton, Salvador Dal, Hans Arp, Paul

    Eluard, Juan Larrea, y de algunos escritores chilenos para la revista Total, fundada por Huidobro. Organiza a los

    escritores chilenos en solidaridad con el pueblo espaol. Publica en Escritores y Artistas Chilenos a la Espaa

    Popular su poema Est sangrando Espaa. Viaja a este pas donde participa activamente en la guerra.

    1937 - La polmica con Neruda se acenta al encontrarse ambos en Espaa apoyando la causa republicana. La

    Association Internationale des Escrivains pour la Dfense de la Culture (A.I.D.C.) interviene desde Pars, en mayo,

    envindoles una carta a ambos donde les insta a deponer su actitud. Firman, entre otros, Tristan Tzara, Alejo

    Carpentier, Csar Vallejo y Juan Larrea. Estada en Valencia, participando en el Congreso de Intelectuales

    Antifascistas. De regreso a Chile, publica el poema en prosa Fuera de aqu contra militares fascistas italianos que

    visitan el pas, lo que provoca una agresin en su contra. Publica el poema Gloria y Sangre en Madre Espaa:

    Homenaje de los poetas chilenos, Santiago.

    1938 - Nace Mandrgora, movimiento surrealista chileno que se gesta en reuniones en casa de Huidobro. Muere

    Mara Luisa Fernndez, su madre. Publica en julio, el segundo y ltimo nmero de Total.

    1939 - Participa en la revista Multitud, dirigida por Pablo de Rokha, colaborando con los poemas que forman ms

    tarde sus dos ltimos libros. Publica Stiro o el Poder de las Palabras (Santiago, Zig-Zag).

    1940 - En El Mercurio y La Nacin de Santiago aparecen sus tres Cartas al To Sam.

    1941 - Publica Ver y Palpar (Santiago, Ercilla) y El Ciudadano del Olvido (Santiago, Ercilla), con recopilaciones.

    de poemas inditos y publicados en revistas nacionales y extranjeras.

    1942 - Aparecen publicadas en Santiago de Chile, segundas ediciones de Temblor de Cielo, Cagliostro y Mio Cid

    Campeador.

    1944 - Funda Actual, ltima revista creada por Huidobro, cuyo nico nmero aparece en septiembre. Rumbo a

    Europa, en noviembre, se detiene en Montevideo donde dicta la conferencia Introduccin a la poesa. Llega a

    Pars donde se une al ejrcito francs.

    1945 - Transmite desde Pars sus crnicas para La Voz de Amrica, mientras participa en la Segunda Guerra

    Mundial como corresponsal. Recibe carta de su mujer Ximena, anuncindole la separacin definitiva. Entra con las

    tropas aliadas en Berln. Es dado de baja y regresa a Santiago con su tercera mujer, Raquel Seoret. Trae consigo

    diversos objetos de guerra como trofeos, entre ellos lo que Huidobro seal como el telfono de Hitler. Se publica la

    Antologa (Santiago, Zig-Zag) de Vicente Huidobro, recopilada por Eduardo Anguita.

    1946 - Se instala en Cartagena, balneario costero de la regin central del pas. Publica Trois Nouvelles Exemplaires

    (Pars, Fontaine), que contiene slo los textos escritos con Hans Arp.

    1947 - Escribe en septiembre a Juan Larrea, acusando en estas lneas el enorme cansancio y desnimo que trajo de la

    guerra y lo invita a venir a Chile. A finales del ao sufre en Cartagena un derrame cerebral que se atribuye a una

    consecuencia de sus heridas de guerra.

    1948 - El 2 de enero muere en su casa de Cartagena y es enterrado, de acuerdo a sus deseos, en una colina frente al

    mar. Su hija mayor, Manuela. Manuela publica una recopilacin de textos inditos y publicaciones dispersas en

    revistas en Ultimos Poemas (Santiago, Talleres Grficos Ahus).

    AL FONDO SE VE EL MAR.

    Las actividades de Huidobro, de su vida y su obra no es lineal: poeta radicalmente innovador, novelista,

    dramaturgo, autor de guiones de cine, poltico, polemista de temer, corresponsal de guerra en el campo de batalla.

    Busc un nuevo arte -que correspondiera a su poca-, pero tambin aspir a transformar la vida. Escritor

    vanguardista chileno, fundador de su propio movimiento potico y defensor entusiasta de la experimentacin

  • artstica durante el periodo de entreguerras. Hijo de madre escritora, estudi en su ciudad natal, Santiago, y ya desde

    pequeo mostr un gran talento literario: sus primeros poemas los escribi a los doce aos. Siendo an adolescente,

    public un manifiesto en el que rechazaba toda la poesa anterior a l.

    Se traslad a Pars, donde pronto entrara en contacto con la literatura de los poetas surrealistas Guillaume

    Apollinaire y Pierre Reverdy, junto a los cuales fundara la revista Nord-Sud. Se distanci poco despus del

    surrealismo, al no aceptar la opinin de que el artista es un mero instrumento revelador de su inconsciente. Ya en

    Madrid (Espaa), fund el grupo creacionista, y su gran habilidad de comunicador contribuy a extender el

    entusiasmo por la experimentacin en la Europa de entreguerras. El objetivo que hay que precisar es la creacin

    pura; la naturaleza es slo una va para concluir en la creacin instantnea del poeta, una corriente revolucionaria

    que situaba al poeta a la altura de un dios, dedicado a crear un nuevo tipo de poesa que compitiera con la naturaleza

    en lugar de reflejarla, el artista descubre y acoge elementos del mundo objetivo; los transforma y as los transmite de

    nuevo al mundo, pero con un toque creativo y artstico que slo el poeta es capaz de entregar. Hay que romper con

    la poesa de reproduccin de la naturaleza para crear una obra independiente que tenga una arquitectura propia. Este

    concepto constituy el eje de su obra potica, sembrada de impactantes imgenes, de yuxtaposiciones efectistas y de

    letras y secuencias de palabras de carcter aleatorio. para Huidobro y el resto de los creacionistas que

    inmediatamente cerraron filas en torno a estas propuestas tan originales como transgresoras, el artista no deba

    limitarse a reflejar la Naturaleza, sino que deba mantener con ella una especie de competicin en la que poda

    mostrar el vitalismo de su propia obra. Lgicamente, esta concepcin del arte en general (y, en el caso del propio

    Huidobro, del hecho literario en particular) llevaba aparejada la necesidad de crear nuevas imgenes, tan coloristas

    como animadas e sorprendentes, e incluso, un novedoso lenguaje potico capaz de romper con todos los niveles de

    la lengua y generar tambin su propia sintaxis; de ah que la yuxtaposicin (de oraciones, vocablos o sonidos

    extraamente puestos en contacto) se convirtieraen una de las caractersticas ms acusadas del Creacionismo, al

    tiempo que las largas secuencias y enumeraciones de palabras y sintagmas contribuyeran decisivamente a dar al

    poema esa apariencia de objeto aleatorio, mera creacin de un dios absorto en las posibilidades estticas del material

    con que moldea su obra.

    En Poemas rticos (1918) aparece la nostalgia y se recupera imgenes del lugar de origen en el Nuevo

    Mundo. No slo la fuerza de estos recuerdos perfora la clausura del mundo creado: emergen tambin experiencias,

    pulsiones, deseos reprimidos, asociaciones que entran en conflicto productivo con la voluntad esttica del sujeto,

    alcanzando a sustituirla en mayor o menor medida.

    Los primeros aos de la dcada del veinte fueron muy activos para Huidobro. Funda Creacin, Revista

    internacional de arte -ms tarde Cration: aparecen en total tres nmeros- en que colaboran Raymond Radiguet,

    Gerardo Diego, Francis Picabia, Jean Cocteau, Tristn Tzara, Ivan Goll, Juan Larrea, Paul Derme, etc., se

    reproducen partituras (una de Schnberg), obras de Lipchitz, Braque, Gris, Picasso, etc. Publica artculos en L'Esprit

    Nouveau revista que quiere representar una modernidad constructiva-, disea "poemas-ropas" con Sonia Delaunay,

    Edgar Varse estrena en Nueva York una pieza musical con textos suyos, toma posiciones crticas frente a las

    concepciones poticas del naciente surrealismo, en especial, frente a la escritura automtica, escribe el guin de una

    pelcula "cubista" sobre Cagliostro, que realiza el director rumano Mine Miz, da numerosos recitales, pronuncia

    conferencias en Pars, Madrid, Estocolmo, Berln, procurando legitimar a nivel internacional sus ideas estticas,

    publica varios libros, entre ellos, uno sobre el imperialismo britnico (Finis Britannia,1923), finge que agentes

    britnicos lo secuestran como represalia, pero la polica descubre el fraude, perdiendo Huidobro para siempre a un

    amigo, Juan Gris, y tambin algo de crdito en los crculos en que se mueve.

    Fue en este periodo que da vida a los caligramas, que son figuras dibujadas con letras de poemas. Algunos

    de su poemas recuerdan los caligramas de Apollinaire. As, mientras algunos crticos literarios afirman que se trata

    simplemente de la produccin, muy poco interesante, de un charlatn empeado en promocionar su imagen, otros,

    en cambio, encuentran en Huidobro la voz de un poeta serio, capaz de expresarse con viveza, humor y gran

    inventiva.

    En los aos en que recopila una serie de textos sobre poesa y creacionsmo -publicados en Manifestes, (1925)- su

    poesa ha traspasado con demasiada frecuencia la clausura de la autonoma absoluta de sus representaciones y

    tambin la identificacin entre el sujeto y la conciencia activa y vigilante. Su escritura amplifica el mundo y el

    sujeto abrindose a una referencia, por supuesto, que va ms all del realismo. Por esa misma fecha, el ensayista

    peruano Jos Carlos Maritegui (1895-1930) constataba que, en esos momentos, "el realismo nos alejaba de la

    realidad", recubra o reduca las dimensiones de una realidad en acelerada transformacin. Y aada, en plena

    euforia revolucionaria: "slo podemos encontrar la realidad por los caminos de la fantasa".

    La situacin de Vicente Huidobro es la de un poeta ambivalente. Ambivalencia dada por su condicin de

    poeta bilinge que maneja ambas lenguas con igual maestra. Ambivalencia dada por su contradiccin esttica, por

    su balancearse entre lo americano y lo europeo. El intelectual de paises subdesarrollados est ms expuesto acaso

    que cualquier otro a desarrollar una personalidad bablica por la que hable la confusin de las lenguas, a adoptan

    una conducta cultural incongruente : Como si mi cerebro estuviese dividido en dos compartimientos absolutamente independientes, me senta atrado con igual pasin por el estudio de las ciencias, lo que me hizo seguir cursos en la

    Sorbona y otras universidades europea, sobre Biologa, Fisiologa y Psicologa Experimental, y por el estudio de lo

    maravilloso, lo que me hizo dedicar muchas horas a la Astrologa, a la Alquimia, a la Cbala antigua y al ocultismo

    en general. Su relacin con la historia de la cultura puede ser igualmente arbitraria, y, en el caso de Huidobro, su

  • irrealismo, su individualismo y su diletantismo de coleccionista cultural se corresponden. Tambin su espritu de

    contradiccin que no conlleva una actitud o una vocacin especiales para el juego dialctico de las ideas sino que

    surge de una relativa imposibilidad de ponerse de acuerdo consigo mismo o para poner de acuerdo ideas a las que se

    suscribe, procedentes de distintos, antagnicos o irreconciliables campos ideolgicos. Poesa de la poesa, crtica de

    la poesa, demolicin y construccin simultneas de un edificio verbal que niega los materiales de que se constituye,

    postulacin de una verdad artstica que empieza all donde termina la verdad de la vida pero que acusa por todas

    partes sus interrelaciones con un discurso ms vasto -el de la aspiracin de las escuelas de vanguardia a fundar una

    realidad vital de verdad-; horror de la vida y xtasis de la vida (Baudelaire).

    "Total" -un manifiesto algo desatendido hasta hace poco, pero de fundamental importancia para

    comprender el desarrollo de la obra de Huidobro- proclama una decidida voluntad de cambio del poeta en su

    comprensin del trabajo literario. Fue publicado en francs en 1932 -en Vertigral, revista del orfismo-; luego, en

    1933 en La Nacin de Buenos Aires, pero tambin en el primer nmero de Total (1936), revista fundada por

    Huidobro en Chile como "contribucin a una nueva cultura".

    "Total" impugna violentamente las representaciones fragmentarias del hombre. Critica a los poetas, sus

    "pequeas voces sutiles", sus preocupaciones por su "yo mezquino", su tendencia alienada a comprender la realidad

    en trminos de antagonismos insuperables. Huidobro proclama ahora "el canto del ser realizando su gran sueo, el

    canto de la nueva conciencia, el canto total del hombre total". El manifiesto finaliza pidiendo "un ancho espritu

    sinttico, un hombre total, que refleje toda nuestra poca, como esos grandes poetas que fueron la garganta de su

    siglo". La decisin de hacer literatura de esta especie -que pretende una visin totalizante del hombre y la sociedad,

    que establece una relacin entre literatura y cambio social- est notoriamente vinculada al fuerte compromiso

    poltico que asumi Huidobro a partir de su vuelta a Chile en 1933, poca en que -segn Ren de Costa- habra

    comenzado a militar en el Partido Comunista. Pero en esta " gran sntesis " -como advierte David Bary- la voluntad

    de cambio, de representacin social no puede perder de vista la angustia metafsica y el anhelo de comunicacin

    amorosa. No es simplemente realismo socialista -reduccin, falsificacin- en cualquiera de sus variantes.

    La insurreccin de Francisco Franco galvaniz an ms el trabajo poltico de Huidobro. Funda asociaciones

    de intelectuales en apoyo de la Repblica Espaola, escribe artculos y poemas, pronuncia discursos encendidos. En

    1936 viaja a Espaa y participa activamente en el conflicto. Visita el frente de batalla y quiere alistarse como

    voluntario, pero el General Lister decide que puede hacer ms con su palabra por la libertad de Espaa. Asiste en

    1937 al Congreso de Intelectuales Antifascistas que se celebra en Valencia que rene a intelectuales de Europa y

    Amrica.

    En 1941, el poeta publica dos libros simultneamente: Ver y palpar y El ciudadano del olvido, que renen

    poemas escritos desde 1923.Ver y palpar delata que el creacionismo no ha sido abandonado del todo en la prctica

    potica de Huidobro. El poeta ya no afirma la independencia de las imgenes respecto a la experiencia o la identidad

    absoluta entre sujeto y conciencia; el sujeto potico queda ms suelto, oscila, juega entre diversas posiciones, el

    sujeto de la escritura recurre a la imagen creada, a las "situaciones creadas" para representar experiencias en que la

    libertad abre el espacio del juego, la asuncin ldica de la vida y la muerte. El "non sense" (Lewis Carroll), la

    reiteracin obsesiva de formas paralelas, la sucesin de palabras semejantes en el sonido o el significado, la

    circularidad de los poemas.

    En 1944 -deseoso de participar en la Segunda Guerra Mundial -Huidobro parte a Europa como corresponsal

    de guerra. Es autorizado a llevar uniforme norteamericano. Trabaja para las emisiones de la Voz de Amrica. Segn

    recuerda Juan Larrea, fue "herido en la cabeza, como Apollinaire. Entr con las tropas libertadoras en Berln,

    trayendo como botn de guerra un telfono personal de Hitler. Regres a Santiago en 1945 unido a su tercera esposa,

    una chilena esplndida (Raquel Seoret) que descubri en la Embajada de su pas en Londres".

    Supo mantener su vigor creacionista hasta en el epitafio que dej escrito para su lpida: "Abrid esta tumba:

    al fondo se ve el mar". Frente al mar, en Cartagena (Chile), muri Vicente Huidobro en 1948, y frente al mar (o tal

    vez sobre l, como reza su epitafio) reposan sus restos en el camposanto de la bella localidad chilena.

    LORD CHESELIN.

  • Poemas Articos (1918)

    A Juan Gris y Jacques Lipchitz

    Recordando nuestras charlas vesperales en aquel rincn de Francia

  • HORAS

    El villorio

    Un tren detenido sobre el llano

    En cada charco

    duermen estrellas sordas

    Y el agua tiembla

    Cortinaje al viento

    La noche cuelga en la arboleda

    En el campanario florecido

    Una gotera viva

    Desangra las estrellas

    De cuando en cuando

    Las horas maduras

    Caen sobre la vida.

  • EXPRES

    Una corona yo me hara

    De todas las ciudades recorridas

    Londres Madrid Pars

    Roma Npoles Zurich

    Silban en los llanos

    Locomotoras cubiertas de algas

    Aqu nadie ha encontrado

    de todos los ros navegados

    Yo me hara un collar

    El Amazonas El Sena

    El Tmesis El Rin

    Cien embarcaciones sabias

    Que han plegado las alas

    Y mi cancin de marinero hurfano

    Diciendo adis a las playas

    Aspirar el aroma del Monte Rosa

    Trenzar las canas errantes del Monte Blanco

    Y sobre el Zenit del Monte Cenis

    Encender en el sol muriente

    El ltimo cigarro

    Un silbido horada el aire

    No es un juego de agua

    Adelante

    Apeninos gibosos

    Marchan hacia el desierto

    Las estrellas del oasis

    Nos darn miel de sus dtiles

    En la montaa

    El viento hace crujir las jarcias

    Y todos los montes dominados

    Los volcanes bien cargados

    Levarn el ancla.

    ALLA ME ESPERAN

    HASTA MANANA

    Buen viaje

    Un poco ms lejos

    Termina la Tierra

    Pasan los ros bajo las barcas

    La vida ha de pasar

  • NOCHE

    Sobre la nieve se oye resbalar la noche

    La cancin caa de los rboles

    Y tras la niebla daban voces

    De una mirada encend mi cigarro

    Cada vez que abro los labios

    Inundo de nubes el vaco

    En el puerto

    Los mstiles estn llenos de nidos

    Y el viento

    gime entre las alas de los pjaros

    Las Olas Mecen El Navo Muerto

    Yo en la orilla silbando

    Miro la estrella que humea entre mis dedos

  • ALERTA

    Media noche

    En el jardn

    Cada sombra es un arroyo

    Aquel ruido que se acerca no es un coche

    Sobre el cielo de Pars

    Otto Von Zeppeln

    Las sirenas cantan

    Entre las olas negras

    Y este clarn que llama ahora

    No es un clarn de la Victoria

    Cien aeroplanos

    Vuelan en torno de la luna

    Apaga Tu Pipa

    Los obuses estallan como rosas maduras

    Y las bombas agujerean los das

    Canciones cortadas

    Tiemblan entre las ramas

    El viento cortisona las calles

    Como Apagar La Estrella Del Estanque.

  • CAMINO

    Un cigarro en el vaco

    A lo largo del camino

    He deshojado mis dedos

    Y jams mirar atrs

    Mi cabellera

    Y el humo de esta pipa

    Aquella luz me conduca

    Todos los pjaros son alas

    En mis hombros cantaron

    Pero mi corazn fatigado

    Muri en el ltimo nido

    Llueve sobre el camino

    Y voy buscando el sitio

    donde mis lgrimas han cado.

  • EMIGRANTE A AMERICA

    Estrellas elctricas

    Se encienden en el viento

    Y algunos signos astrolgicos

    Han cado al mar

    Ese emigrante que canta

    Partir maana

    Vivir

    Buscar

    Atado al barco

    como a un horscopo

    Veinte das sobre el mar

    Bajo las aguas

    Nadan los pulpos vegetales

    Detrs del horizonte abierto

    El otro puerto

    Entre el boscaje

    Las rosas deshojadas

    iluminan las calles.

  • CANTAR DE LOS CANTARES

    Cantar

    Todos los das

    Cantar

    Ella vendr tan rpida

    Que su sombra se quedar olvidada

    Sin poder encontrar

    En el camino

    Las nubes hidrfilas

    Se rasgan en las cimas de las hojas

    La lluvia

    Detrs del agua

    El sol

    Al final de una cancin

    Alguien doblar los aos

    Y caer en mis brazos.

  • ASTRO

    El libro

    Y la puerta

    Que el viento cierra

    Mi cabeza inclinada

    Sobre la sombra del humo

    Y esta pgina blanca que se aleja

    Escucha el ruido de las tardes vivas

    Reloj del horizonte

    Bajo la niebla envejecida

    Se dir un astro de resorte

    Mi alcoba tiembla como un barco

    Pero eres t

    T sola

    El astro de mi plafn

    Yo miro tu recuerdo nufrago

    Y aquel pjaro ingenuo

    Bebiendo el agua del espejo.

  • NIO

    Aquella casa

    Sentada en el tiempo

    Sobre las nubes

    que alejaba el viento

    Iba un pjaro muerto

    Caen sus plumas sobre el otoo

    Un nio sin alas

    mira en la ventana

    Los peces temen trizar el agua

    Y bajo la sombra de los mstiles

    El balandro resbala

    Se olvid el nombre de la madre

    Tras la puerta que bate

    como una bandera

    El techo est agujereado de estrellas

    El abuelo duerme

    Cae de su barba

    Un poco de nieve.

  • CASA

    Sobre la mesa

    El abanico tierno

    Un pjaro muerto en pleno vuelo

    La casa de enfrente

    blanca de yeso y nieve

    En el jardn ignorado

    Alguien pasea

    Y un ngel equivocado

    Se ha dormido sobre el humo de la chimenea

    Para seguir el camino

    Hay que recomenzar

    Quin Escondi Las Llaves

    Haba tantas cosas que no pude contar.

  • RUTA

    Ultima lluvia

    Los ngeles heridos

    Dejarn hoy el hospital

    He olvidado la cancin comenzada

    Aquel pjaro que vol de mi pecho

    Ha perdido el camino

    Bajo los puentes

    el ro muere de trecho en trecho

    Dnde Ests

    Sigue tu marcha tras de mis canciones

    La ruta ciega

    como los lagos secos

    Todas las estrellas han cado

    Y las que cuelgan en las ramas

    Caern tambin

    En el boscaje oblicuo

    Se qued mi cancin

    Ultima lluvia

    La luna y el pauelo

    Se secaban al sol.

  • GARE

    La tropa desembarca

    En el fondo de la noche

    Los soldados olvidaron sus nombres

    Bajo aquel humo cnico

    El tren se aleja como un mensaje telefnico

    En las espaldas de un mutilado

    Las dos pequeas alas se han plegado

    Y en todos los caminos se ha perdido una estrella

    Las nubes pasaron

    Balando hacia el Oriente

    Alguien busca su propia huella

    Entre las alas olvidadas

    Uno

    Dos

    Diez

    Veinte

    Y aquella mariposa que jug entre las flores de los cuadernos

    Revolotea en torno de mi cigarro.

  • EGLOGA

    Sol muriente

    Hay una panne en el motor

    Y un olor primaveral

    Deja en el aire al pasar

    En algn sitio

    un cancin

    En Dnde Ests

    Una tarde como sta

    Te busqu en vano

    Sobre la niebla de todos los caminos

    Me encontraba a m mismo

    Y en el humo de mi cigarro

    Haba un pjaro perdido

    Nadie responda

    Los ltimos pastores se ahogaron

    Y los corderon equivocados

    Coman flores y no daban miel

    El viento que pasaba

    Amontona sus lanas

    Entre las nubes

    Mojadas de mis lgrimas

    A qu otra vez llorar

    lo ya llorado

    Y pues que las ovejas comen flores

    Seal que ya has pasado.

  • BALANDRO

    Los recuerdos

    se han fatigado de seguirme

    La Senda Era Tan Larga

    Este viento vena de unas alas

    Y los das pasan aullando al horizonte

    Como un balandro joven

    Cruc muchas tormentas

    Entre canciones marineras

    Todas las gaviotas

    dejaron plumas en mis manos

    Tras la ltima montaa

    los meses descendan

    Un pstumo cantar nos cerr la salida.

  • INVIERNO

    La rubia agreste

    De los ojos trizados

    Muerta esta maana

    El invierno pasaba por las calles

    Aquel rbol frgil

    guarda todas las lluvias

    Estrellas prisioneras

    Iban

    Hacia las fras celdas

    Esta llovizna

    Humedece mis pupilas

    En un tiempo

    los pjaron cantaron

    Y cogieron nuestras manos

    Las flores que crecan sobre el ro

    Hay Una Luz

    Que Nos Sostiene Del Vaco.

  • HIJO

    Las ventanas cerradas

    Y algunas decoraciones deshojadas

    La noche viene de los ojos ajenos

    Al fondo de los aos

    Un ruiseor cantaba en vano

    La luna viva

    Blanca de la nieve que caa

    Y sobre los recuerdos

    Una luz que agoniza entre los dedos

    Maana Primavera

    Silencio familiar

    Bajo las bujas florecidas

    Una cancin

    asciende sobre el humo

    Y t

    Hijo

    hermoso como un dios desnudo

    Los arroyos que van lejos

    Todo lo han visto los arroyos hurfanos

    Un da tendrs recuerdos.

  • HORIZONTE

    Pasar el horizonte envejecido

    Y mirar en el fondo de los sueos

    La estrellas que palpita

    Eras tan hermosa

    que no pudiste hablar

    Y me alej

    Pero llevo en la mana

    Aquel cielo nativo

    Con un sol gastado

    Esta tarde

    en un caf

    he bebido

    un licor tembloroso

    Como un pescado rojo

    Y otra vez en el vaso escondido

    Ese sueo filial

    Eras tan hermosa

    que no pudiste hablar

    En tu pecho algo agonizaba

    Eran verdes tus ojos

    pero yo me alejaba

    Eras tan hermosa

    que aprend a cantar.

  • VERMOUTH

    Bebo en un caf

    al fondo de las horas olvidadas MONTMARTRE

    Vasos de vino ardiente

    y estrellas fermentadas

    Todas Las Vendimias

    De Las Horas Pasadas

    Una angustia de amor cierra los ojos

    Y pesa sobre los sueos este ramo

    Llevo los siglos entreabiertos en mis hombros

    Llevo todos los siblos y no caigo

    Bebedores de vinos rojos

    Y de cielos gastados

    Algo se esconde al fondo de los vasos

    Bebedores de mares y de vidas

    Yo os doy mi sangre en hostias lricas

    Mi sangre que hizo rojas las auroras boreales

    Viene de enfermedades vesperales

    Filial Licor

    Campesinos frangates

    Ordeaban el sol

    Los rboles tienen orejas para esta voz que canta

    Todos los siglos cantan en mi garganta.

  • LLUEVE

    Todo oscuro bajo la lluvia electrizada

    La casa

    junto al mar vaco

    Y entre los hilos de agua

    Se sostiene un nido

    Donde me he ocultado

    Sea yo un astro quebrantado

    O bien una lucirnaga

    Hay mariposas en mi pecho

    Y sobre la cancin que asciende

    Una luz coloniza los desiertos

    Esta alondra de nieve se me muerte

    Un Da Partiremos

    Los barcos hacia mares en sordina

    Mi estrella hacia la yerba viva

    Acaso esta obscuridad

    viene del armario

    En Donde Me He Ocultado

    El patio y la vida llenos de musgos

    Del sexto piso

    desciende el ascensor mejor que un buzo.

  • ADIOS

    Pars

    Una estrella desnuda

    Se alumbra sobre el llano

    Esta estrella la llevara un mi mano

    En Notre Dame

    los ngeles se quejan

    Al batir las alas nacen albas

    Mas mis ojos se alejan

    Todas las maanas

    Baja el sol a tu hostia que se eleva

    Y en Montmartre los molinos

    la atmsfera renuevan

    Pars

    En medio de las albas que se quiebran

    Yo he florecido tu Obelisco

    Y all cant sobre una estrella nueva

    Adios

    Llevo sobre el pecho

    Un collar de tus calles luminosas

    Todas tus calles

    me llamaban al irme

    Y en todas las banderas

    Palpitaban adioses

    Tus banderas de los nobles ardores

    Al pasar

    arrojo al Sena

    un ramo de flores

    Y entre los balandros que se alejan

    Tus balandros que pacen en las tardes

    Dejar quisiera el ms bello poema

    El Sena

    bajo sus puentes se desliza

    Y en mi garganta un pjaro agoniza.

  • LUNA

    Estbamos tan lejos de la vida

    Que el viento nos haca suspirar

    La Luna Suena Como Un Reloj

    Intilmente hemos huido

    El Invierno cay en nuestro camino

    Y el pasado lleno de hojas secas

    Pierde el sendero de la floresta

    Tanto fumamos bajo los rboles

    Que los almendros huelen a tabaco

    Media Noche

    Sobre la vida lejana

    Alguien llora

    Y la luna olvid dar la hora.

  • CRUZ

    Algo se ha quedado

    Sobre las ms tibias lejanas

    En todas las rutas

    Haba sangre de mis plumas

    Al querer recogerlas

    He visto que eran muchas

    No es el Cristo que ha pasado

    Lento como las horas del Oriente

    Mi cruz no carg mis espaldas

    Ni vuela sobre los techos

    En La Campaa Haba Puntos Rojos

    Mi cruz sin alas iba en mi pecho

    Y no ha querido nunca cerrar los ojos

    Un pjaro se quema en el Ocaso

    Cuntas cosas hemos olvidado

    Mirando hacia la vida

    He visto mi cigarro

    Que humea en las ms tibias lejanas

  • OSRAM

    Dame tus collares encendidos

    Bajo el azul simtrico

    En el rbol inverso

    Donde nacen las lluvias

    Tanto bati las alas

    Que desat la nieve

    Y los pinos blancos all sobre los lagos

    Eran mstiles reflorecidos

    Jarcias bajo la bruma

    Jarcias entre la espuma

    En las olas gastadas

    Cuerdas de arpas naufragadas

    Alumbra El Faro Boreal

    Mira las islas que danzan sobre el mar

    Nunca fuiste tan bella

    Al borde del camino arrojas una estrella

    Vamos

    Mi clarn llamando hacia los mares rticos

    Y tu pupila abierta para todos los nufragos.

  • PAQUEBOT

    He visto una mujer hermosa

    Sobre el mar del Norte

    Todas las aguas eran su cabellera

    Y en su mirada vuelta hacia las playas

    Un pjaro silbaba

    Las olas truenan tan roncas

    Que mis cabellos han cado

    Recostada sobre la lejana

    Su vientre y su pecho no latan

    Sin embargo sus lgrimas vivan

    Inclinado sobre mis das

    Bajo tres soles

    Miraba all lejos

    El paquebot errante que cort en dos el horizonte.

  • MARINO

    Aquel pjaro que vuela por primera vez

    Se aleja del nido mirando hacia atrs

    Con el dedo en los labios

    Os he llamado

    Yo invent juegos de agua

    En la cima de los rboles

    Te hice la ms bella de las mujeres

    Tan bella que enrojecas en las tardes

    La luna se aleja de nosotros

    Y arroja una corona sobre el polo

    Hice correr ros

    que nunca han existido

    De un grito elev una montaa

    Y en torno bailamos una nueva danza

    Cort todas las rosas

    De las nubes del Este

    Y ense a cantar un pjaro de nieve

    Marchemos sobre los meses desatados

    Soy el viejo marino

    Que cose los horizontes cortados.

  • ZENIT

    lejos de los llanos oblicuos

    Las campanas cantando sobre el Zenit

    Ayer crucificados en la neblina

    Pas das y das

    Con los brazos abiertos

    Entre los barcos que se iban

    Donde no encontrar mis huellas

    Algo Me Encierra Por Los

    Cuatro Costados

    La noche

    El sacristn equivocado

    Que apag las estrellas

    Rezaba entre las vrgenes de cerca

  • NADADOR

    Esta noche

    El cielo tan obscuro

    Que los cabellos eran slo humo

    En mis dedos hay secretos de alquimia

    Apretando un botn

    Todos los astros se iluminan

    Y t

    que te alejas cantando entre delfines

    Y planetas vivos

    Nadador pensativo

    De todos los jardines

    Una tarde traas en tus manos

    Cientos de astros enanos

    Nadador pensativo

    Entre la niebla vesperal

    Anoche

    La luna enferma muri en el hospital.

  • CUATRO

    El mar electrizado

    Y las piletas de ballenas clavadas

    Levando el ancla

    Las cuatro estaciones van a la isla de Pascua

    All sin florecer me esperas

    Al despertar te elevas

    Tu vida es una hostia matinal

    Y escucho graznar el guila en la roca natal

    Entre sombras que pasan

    Se desprenden del pecho los recuerdos

    Esos navos han levado el ancla

    Yo te envo los corderos nativos de mis versos

    En medio del Pacfico enmohecido

    La Isla de Pascua es un ramo

    Que muere todos los aos

    All En La Vida Los Adioses

    Y t

    desnuda entre tus brazos

    Durmiendo sobre cuatro horizontes.

  • DEPART

    La barca se alejaba

    Sobre las olas cncavas

    De qu garganta sin plumas

    brotaban las canciones

    Una nube de humo y un pauelo

    se batan al viento

    Las flores de solsticio

    Florecen al vaco

    Y en vano hemos llorado

    Sin poder recogerlas

    El ltimo verso nunca ser cantado

    Levantando un nio al viento

    Una mujer deca adis desde la playa

    Todas Las Golondrinas Se Rompieron Las Alas

  • DONJON

    El castao en medio del cielo

    Palpando como un ciego

    Una campana ha llorado

    sobre el mal y el bien

    Los frutos que caen son olvidados

    Y las horas tambin

    En la crcel de enfrente

    Las auroras cautivas

    Cantaban y geman

    Los ahorcados de hace siglos

    Al morir miraron los caminos

    Donde los otros pasaran

    En marcha

    En marcha

    El amor se exalta

    Tras la alondra filial de tu garganta

  • CIGARRO

    Aquello que cae de los rboles

    Es la noche

    El mar en mi vaso de aguardiente

    Y sobre el mar

    tu sombrero vertical

    A Dnde Vas Eternamente

    Alguien ha muerto en tu jardn

    La golondrina indiferente

    Duerme sobre una cuerda del violn

    Yo he tenido en mis manos

    todo lo que se iba

    Y esta luna malherida

    Indecisa entre el mar y los jardines

    Perfumando los aos

    Una nube montaba de mis labios

    Y mi cigarro

    Es la nica luz de los confines.

  • LUNA O RELOJ

    Las tardes prisioneras

    En los rincones fros

    Y las canciones cnicas de los jardines

    Golondrinas sin alas

    Entre la niebla slida

    Angustia en mi garganta

    Sobre la Frente la corona seca

    Y en tus manos una estrella fresca

    Despus en el valle sin sol

    Un mismo ruido

    La luna y el reloj.

  • PRIMAVERA

    El postre electrizado

    Orillas del arroyo

    Aquel pjaro adormilado

    Cantaba como un trompo

    El violinista ha muerto esta maana

    Pero canta el violn de la ventana

    En todas las ramas

    Mil canciones mecnicas

    Unas venan

    otras se alejaban

    La Primavera Da Vueltas Al Manubrio

    Mas no vimos las notas

    Esas alondras

    Anidan en los tubos

    La tarde boreal se aleja sobre el humo.

  • ETERNIDAD

    Palabras puntiagudas en el azul del viento

    Y el enjambre que brilla y que no canta

    La Noche En Tu Garganta

    Acaso Dios se muere

    Entre almohadones blancos

    Bajo el agua gastada de sus prpados

    El aire triangular

    para colgar estrellas

    Y sobre la verdura nativa de aquel mar

    Ir buscando tus huellas

    Sin mirar hacia atrs.

  • CAMPANARIO

    A cada son de la campana

    Un pjaro volaba

    Pjaros de ala inversa

    Que mueren entre las tejas

    Donde ha cado la primera cancin

    Al fondo de la tarde

    Las llamas vegetales

    En cada hoja tiembla el corazn

    Y una estrella se enciende a cada paso

    Los ojos guardan algo

    Que palpita en la voz

    Sobre la lejana

    Un reloj se vaca.

  • UNIVERSO

    Bajo la enramada

    Una cancin solidificada

    En dnde estamos

    El mundo ha cambiado de lugar

    Y estrellas falsas brillan en el cielo

    Cordajes de guitarra sobre el mar

    La sombra es algo que alza el vuelo

    Junto al aire voltaico

    Un aeroplano daba vueltas

    En el aire un pauelo

    Y ninguna casa tena puertas

    Un lago oblicuo El camino sobre

    Hace el espacio el campo inverso

    Maana ser el fin del universo.

  • EN MARCHA

    Cantando se alejaban

    sobre el meridiano

    En Cada Mano Un Nido

    El vagabundo cotidiano

    Recorri todo el siglo

    De los aos pasados

    Hicieron sus collares

    Tan largos que cruzaban los mares

    Iban buscando el primer da

    La sombra de aquel que se qued perdida

    Sobre la ruta la encontr dormida

    Adis

    Adis

    Otro planeta ocupa el sitio del sol.

  • SOMBRA

    La sombra es un pedazo que se aleja

    Camino de otras playas

    En mi memoria un ruiseor que se queja

    Ruiseor de las batallas

    Que canta sobre todas las balas

    Hasta Cundo Sangrarn La Vida

    La misma luna herida

    No tiene una ala

    El corazn hizo su nido

    En medio del vaco

    Sin embargo

    Al borde del mundo florecen las encinas

    Y La Primavera Viene

    Sobre Las Golondrinas

  • BAY RUM

    En tus cabellos se ha dormido

    Aquella que vol cantando

    Cul Era Mi Camino

    Nunca pude encontrarlo

    Las cascadas

    Pequeas cabelleras en la orilla

    Sus estrellas resbalan y no brillan

    En el cielo despoblado

    Tan solo tu cabellera sideral

    Suelta sobre la tarde

    Aquellas llamas que arden

    Oracin o cantar

    Dame tu mano

    Vamos

    Hay un poco de msica en el musgo

    Huir

    hacia el ltimo bosque

    Y en la noche

    Vaciar tu cabellera sobre el mundo.

  • WAGON-LIT

    Camino de otras constelaciones

    El tren que se desprende de los astros

    Va cortando la noche

    Mis secretos al borde de la almohada

    Esta celda errante

    atraviesa los aos

    Y contra los uros se rompieron mis alas

    En el aire dos manos

    Tu y yo

    Nunca ms habr sol

    Mas seguiremos la jornada

    Valles

    Selvas

    Montaas

    El invierno

    Viene de aquel cementerio

  • PUERTO

    Cruzamiento de alas

    Bajo el cielo nuevo

    El azar de los dados en el alma

    Y la estrella domstica que canta

    Con las velas al viento

    Adonde van mis das

    En donde naufragaron

    mis naves florecidas

    El puerto es una selva que se mece

    Entre mstiles y jarcias

    La alondra momentnea se alejaba

    Anclar

    All en el aura vesperal

    El astro corriente en los arroyos

    Ha perdido el piloto

    Aquella cabeza flotadora es un escollo.

  • HP

    Pronto llegaremos

    Al ltimos paralelo

    La tarde

    Mi mano

    Dirige el automvil

    Igual que un autopiano

    La estepa en silencio

    80 caballos de fuerza

    La estepa

    Ir cruzando la tierra

    Alguien ha dejado sus alas en el suelo

    Y hay golondrinas en tu pecho

    Esta maana

    Cruzaremos las playas

    Entre los pjaros vuelan

    Las primeras campanadas

    Sobre los mares y las primaveras

    El barco en que se alejan las mujeres ms bellas.

  • VASO

    La puerta

    abierta hacia la noche

    Y el pjaro sonmbulo en los bosques

    Bebe

    Estas auroras rojas

    Los dioses blancos de tu boca

    Ahogndose en el vaso

    Aquel mar es tan profundo

    Que temblaban los barcos

    Sigamos

    Mis ojos entre el humo

    Y a la orilla del mundo

    Tu mano

    tendida a los naufragios

    Ahora nadie canta

    El planeta vaco que dorma en la copa

    Est en mi garganta

    Pequeo ruiseor

    Por Qu Muri

    He buscad en tu cuerpo la cancin

    Alguien lleva un tesoro entre las manos

    Es Un Astro Apagado

  • O

    Una Rosa Madura

    Tantas plumas

    Tantas plumas

    Y mi pecho desierto

    Ayer henchidos de versos

  • MARES ARTICOS

    Los mares rticos

    Colgados del ocaso

    Entre las nubes se quema un pjaro

    Da a da

    Las plumas iban cayendo

    Sobre las tejas de todos los tejados

    Quien ha desenrollado el arco-iris

    Ya no hay descanso

    Blando de alas

    Era mi lecho

    Sobre los mares rticos

    Busco la alondra que vol de mi pecho.

    [Estos poemas escritos en Pars entre 1917 y Abril 1918 fueron publicados en agosto del mismo ao por la

    imprenta Pueyo de Madrid].

  • ARTE POTICA

    Que el verso sea como una llave

    que abra mil puertas.

    Una hoja cae; algo pasa volando;

    cuanto miren los ojos creado sea,

    y el alma del oyente quede temblando.

    Inventa mundos nuevos y cuida tu palabra;

    el adjetivo, cuando no da vida, mata.

    Estamos en el ciclo de los nervios.

    El msculo cuelga,

    como recuerdo, en los museos;

    mas no por eso tenemos menos fuerza:

    el vigor verdadero

    reside en la cabeza.

    Por qu cantis la rosa, oh poetas!

    hacedla florecer en el poema.

    Slo para nosotros

    viven todas las cosas bajo el sol.

    El poeta es un pequeo Dios.

  • Basta seora arpa de las bellas imgenes

    De los furtivos comos iluminados

    Otra cosa otra cosa buscamos

    Sabemos posar un beso como una mirada

    Plantar miradas como rboles

    Enjaular rboles como pjaros

    Regar pjaros como heliotropos

    Tocar un heliotropo como una msica

    Vaciar una msica como un saco

    Degollar un saco como un pingino

    Cultivar pinginos como viedos

    Ordear un viedo como una vaca

    Desarbolar vacas como veleros

    Peinar un velero como un cometa

    Desembarcar cometas como turistas

    Embrujar turistas como serpientes

    Cosechar serpientes como almendras

    Desnudar una almendra como un atleta

    Lear atletas como cipreses

    Iluminar cipreses como faroles

    Anidar faroles como alondras

    Exhalar alondras como suspiros

    Bordar suspiros como sedas

    Derramar sedas como ros

    Tremolar un ro como una bandera

    Desplumar una bandera como un gallo

    Apagar un gallo como un incendio

    Bogar en incendios como en mares

    Segar mares como trigales

    Repicar trigales como campanas

    Desangrar campanas como corderos

    Dibujar corderos como sonrisas

    Embotellar sonrisas como licores

    Engastar licores como alhajas

    Electrizar alhajas como crepsculos

    Tripular crepsculos como navos

    Descalzar un navo como un rey

    Colgar reyes como auroras

    Crucificar auroras como profetas

    Etc. etc. etc.

    Basta seor violn hundido en una ola ola

    Cotidiana ola de religin miseria

    De sueo en sueo posesin de pedreras

  • EL ESPEJO DE AGUA

    Mi espejo, corriente por las noches,

    Se hace arroyo y se aleja de mi cuarto.

    Mi espejo, ms profundo que el orbe

    Donde todos los cisnes se ahogaron.

    Es un estanque verde en la muralla

    Y en medio duerme tu desnudez anclada.

    Sobre sus olas, bajo cielos sonmbulos,

    Mis ensueos se alejan como barcos.

    De pie en la popa siempre me veris cantando.

    Una rosa secreta se hincha en mi pecho

    Y un ruiseor ebrio aletea en mi dedo.

  • EL ESPEJO DE AGUA

    Mi espejo, corriente por las noches,

    Se hace arroyo y se aleja de mi cuarto.

    Mi espejo, ms profundo que el orbe

    Donde todos los cisnes se ahogaron.

    Es un estanque verde en la muralla

    Y en medio duerme tu desnudez anclada.

    Sobre sus olas, bajo cielos sonmbulos,

    Mis ensueos se alejan como barcos.

    De pie en la popa siempre me veris cantando.

    Una rosa secreta se hincha en mi pecho

    Y un ruiseor ebrio aletea en mi dedo.

  • Mujer el mundo est amueblado por tus ojos Se hace ms alto el cielo en tu presencia

    La tierra se prolonga de rosa en rosa

    Y el aire se prolonga de paloma en paloma

    Al irte dejas una estrella en tu sitio

    Dejas caer tus luces como el barco que pasa

    Mientras te sigue mi canto embrujado

    Como una serpiente fiel y melanclica

    Y t vuelves la cabeza detrs de algn astro

    Qu combate se libra en el espacio?

    Esas lanzas de luz entre planetas

    Reflejo de armaduras despiadadas

    Qu estrella sanguinaria no quiere ceder el paso?

    En dnde ests triste noctmbula

    Dadora de infinito

    Que pasea en el bosque de los sueos

    Heme aqu perdido entre mares desiertos

    Solo como la pluma que se cae de un pjaro en la noche

    Heme aqu en una torre de fro

    Abrigado del recuerdo de tus labios martimos

    Del recuerdo de tus complacencias y de tu cabellera

    Luminosa y desatada como los ros de montaa

    Iras a ser ciega que Dios te dio esas manos?

    Te pregunto otra vez

    El arco de tus cejas tendido para las armas de los ojos

    En la ofensiva alada vencedora segura con orgullos de flor

    Te hablan por m las piedras aporreadas

    Te hablan por m las olas de pjaros sin cielo

    Te habla por m el rebao de ovejas taciturnas

    Dormido en tu memoria

    Te habla por m el arroyo descubierto

    La yerba sobreviviente atada a la aventura

    Aventura de luz y sangre de horizonte

    Sin ms abrigo que una flor que se apaga

    Si hay un poco de viento

    Las llanuras se pierden bajo tu gracia frgil

    Se pierde el mundo bajo tu andar invisible

    Pues todo es artificio cuando t te presentas

    Con tu luz peligrosa

    Inocente armona sin fatiga ni olvido

    Elemento de lgrima que rueda hacia adentro

    Construido de miedo altivo y de silencio

    Haces dudar al tiempo

    Y al cielo con instintos de infinito

    Lejos de ti todo es mortal

    Lanzas la agona por la tierra humillada de noches

    Slo lo que piensa en ti tiene sabor a eternidad

    He aqu tu estrella que pasa

    Con tu respiracin de fatigas lejanas

    Con tus gestos y tu modo de andar

    Con el espacio magnetizado que te saluda

    Que nos separa con leguas de noche

    Sin embargo te advierto que estamos cosidos

    A la misma estrella

    Estamos cosidos por la misma msica tendida

    De uno a otro

    Por la misma sombra gigante agitada como rbol

    Seamos ese pedazo de cielo

    Ese trozo en que pasa la aventura misteriosa

    La aventura del planeta que estalla en ptalos de sueo

  • En vano trataras de evadirte de mi voz

    Y de saltar los muros de mis alabanzas

    Estamos cosidos por la misma estrella

    Ests atada al ruiseor de la noche

    Que tiene un ritual sagrado en la garganta

    Qu me importan los signos de la noche

    Y la raz y el eco funerario que tengan en mi pecho

    Qu me importa el enigma luminoso

    Los emblemas que alumbran el azar

    Y esas islas que viajan por el caos sin destino a mis ojos

    Qu me importa ese miedo de flor en el vaco

    Qu me importa el nombre de la nada

    El nombre del desierto infinito

    O de la voluntad o del azar que representan

    Y si en ese desierto cada estrella es un deseo de oasis

    O banderas de presagio y de muerte

    Tengo una atmsfera propia en tu aliento

    La fabulosa seguridad de tu mirada con sus constelaciones ntimas

    Con su propio lenguaje de semilla

    Tu frente luminosa como un anillo de Dios

    Ms firme que toda la flora del cielo

    Sin torbellinos de universo que se encabrita

    Como un caballo a causa de su sombra en el aire

    Te pregunto otra vez

    Iras a ser muda que Dios te dio esos ojos?

    Tengo esa voz tuya para toda defensa

    Esa voz que sale de ti en latidos de corazn

    Esa voz en que cae la eternidad

    Y se rompe en pedazos de esferas fosforescentes

    Qu sera la vida si no hubieras nacido?

    Un cometa sin manto murindose de fro

    Te hall como una lgrima en un libro olvidado

    Con tu nombre sensible desde antes en mi pecho

    Tu nombre hecho del ruido de palomas que se vuelan

    Traes en ti el recuerdo de otras vidas ms altas

    De un Dios encontrado en alguna parte

    Y al fondo de ti misma recuerdas que eras t

    El pjaro de antao en la clave del poeta

    Sueo en un sueo sumergido

    La cabellera que se ata hace el da

    La cabellera al desatarse hace la noche

    La vida se contempla en el olvido

    Slo viven tus ojos en el mundo

    El nico sistema planetario sin fatiga

    Serena piel anclada en las alturas

    Ajena a toda red y estratagema

    En su fuerza de luz ensimismada

    Detrs de ti la vida siente miedo

    Porque eres la profundidad de toda cosa

    El mundo deviene majestuoso cuando pasas

    Se oyen caer lgrimas del cielo

    Y borras en el alma adormecida

    La amargura de ser vivo

    Se hace liviano el orbe en las espaldas

    Mi alegra es or el ruido del viento en tus cabellos

    (Reconozco ese ruido desde lejos)

    Cuando las barcas zozobran y el ro arrastra troncos de rbol

    Eres una lmpara de carne en la tormenta

    Con los cabellos a todo viento

    Tus cabellos donde va el sol a buscar sus mejores sueos

    Mi alegra es mirarte solitaria en el divn del mundo

    Como la mano de una princesa soolienta

  • Con tus ojos que evocan un piano de olores

    Una bebida de paroxismos

    Una flor que est dejando de perfumar

    Tus ojos hipnotizan la soledad

    Como la rueda que sigue girando detrs de la catstrofe

    Mi alegra es mirarte cuando escuchas

    Ese rayo de luz que camina hacia el fondo del agua

    Y te quedas suspensa largo rato

    Tantas estrellas pasadas por el harnero del mar

    Nada tiene entonces semejante emocin

    Ni un mstil pidiendo viento

    Ni un aeroplano ciego palpando el infinito

    Ni la paloma demacrada dormida sobre un lamento

    Ni el arcoiris con las alas selladas

    Ms bello que la parbola de un verso

    La parbola tendida en puente nocturno de alma a alma

    Nacida en todos los sitios donde pongo los ojos

    Con la cabeza levantada

    Y todo el cabello al viento

    Eres ms hermosa que el relincho de un potro en la montaa

    Que la sirena de un barco que deja escapar toda su alma

    Que un faro en la neblina buscando a quien salvar

    Eres ms hermosa que la golondrina atravesada por el viento

    Eres el ruido del mar en el verano

    Eres el ruido de una calle populosa llena de admiracin

    Mi gloria est en tus ojos

    Vestida del lujo de tus ojos y de su brillo interno

    Estoy sentado en el rincn ms sensible de tu mirada

    Bajo el silencio esttico de inmviles pestaas

    Viene saliendo un augurio del fondo de tus ojos

    Y un viento de ocano ondula tus pupilas

    Nada se compara a esa leyenda de semillas que deja tu presencia

    A esa voz que busca un astro muerto que volver a la vida

    Tu voz hace un imperio en el espacio

    Y esa mano que se levanta en ti como si fuera a colgar soles en el aire

    Y ese mirar que escribe mundos en el infinito

    Y esa cabeza que se dobla para escuchar un murmullo en la eternidad

    Y ese pie que es la fiesta de los caminos encadenados

    Y esos prpados donde vienen a vararse las centellas del ter

    Y ese beso que hincha la proa de tus labios

    Y esa sonrisa como un estandarte al frente de tu vida

    Y ese secreto que dirige las mareas de tu pecho

    Dormido a la sombra de tus senos

    Si t murieras

    Las estrellas a pesar de su lmpara encendida

    Perderan el camino

    Qu sera del universo?

    "Altazor" Vicente Huidobro

  • LA POESA ES UN ATENTADO CELESTE

    Yo estoy ausente pero en el fondo de esta ausencia

    Hay la espera de m mismo

    Y esta espera es otro modo de presencia

    La espera de mi retorno

    Yo estoy en otros objetos

    Ando en viaje dando un poco de mi vida

    A ciertos rboles y a ciertas piedras

    Que me han esperado muchos aos

    Se cansaron de esperarme y se sentaron

    Yo no estoy y estoy

    Estoy ausente y estoy presente en estado de espera

    Ellos querran mi lenguaje para expresarse

    Y yo querra el de ellos para expresarlos

    He aqu el equvoco el atroz equvoco

    Angustioso lamentable

    Me voy adentrando en estas plantas

    Voy dejando mis ropas

    Se me van cayendo las carnes

    Y mi esqueleto se va revistiendo de cortezas

    Me estoy haciendo rbol Cuntas cosas me he ido convirtiendo en

    [otras cosas...

    Es doloroso y lleno de ternura

    Podra dar un grito pero se espantara la transubstanciacin

    Hay que guardar silencio Esperar en silencio

    De ltimos poemas, 1948

  • POEMA FUNERARIO

    El pjaro de lujo ha mudado de estrella

    Aparejad bajo la tempestad de las lgrimas

    Vuestro atad a vela

    Donde se aleja el instrumento del encanto

    En las vegetaciones de los recuerdos

    Las horas en torno de nosotros hacen sus viajes

    Va rpido

    Va rpido impulsado por los suspiros

    El mar est cargado de naufragios

    Y yo he alfombrado el mar para su paso

    As es el viaje primordial y sin pasaje

    El viaje instructivo y secreto

    En los corredores del viento

    Las nubes se apartan para que l pueda pasar

    Y las estrellas se encienden para mostrar el camino

    Qu buscas en los bolsillos de tu chaqueta

    Has perdido la llave

    En medio de ese zumbido celeste

    Vuelves a encontrar en todas partes tus horas envejecidas

    El viento es negro y hay estalactitas en mi voz

    Dime Guillermo

    Has perdido la llave del infinito

    Una estrella impaciente iba a decir que hace fro

    La lluvia aguzada comienza a coser la noche

    De Automne rgulier, 1925

  • MONUMENTO AL MAR

    Paz sobre la constelacin cantante de las aguas

    Entrechocadas como los hombros de la multitud

    Paz en el mar a las olas de buena voluntad

    Paz sobre la lpida de los naufragios

    Paz sobre los tambores del orgullo y las pupilas tenebrosas

    Y si yo soy el traductor de las olas

    Paz tambin sobre m.

    He aqu el molde lleno de trizaduras del destino

    El molde de la venganza

    Con sus frases iracundas despegndose de los labios

    He aqu el molde lleno de gracia

    Cuando eres dulce y ests all hipnotizado por las estrellas

    He aqu la muerte inagotable desde el principio del mundo

    Porque un da nadie se pasear por el tiempo

    Nadie a lo largo del tiempo empedrado de planetas difuntos

    Este es el mar

    El mar con sus olas propias

    Con sus propios sentidos

    El mar tratando de romper sus cadenas

    Queriendo imitar la eternidad

    Queriendo ser pulmn o neblina de pjaros en pena

    O el jardn de los astros que pesan en el cielo

    Sobre las tinieblas que arrastramos

    O que acaso nos arrastran

    Cuando vuelan de repente todas las palomas de la luna

    Y se hace ms oscuro que las encrucijadas de la muerte

    El mar entra en la carroza de la noche

    Y se aleja hacia el misterio de sus parajes profundos

    Se oye apenas el ruido de las ruedas

    Y el ala de los astros que penan en el cielo

    Este es el mar

    Saludando all lejos la eternidad

    Saludando a los astros olvidados

    Y a las estrellas conocidas.

    Este es el mar que se despierta como el llanto de un nio

    El mar abriendo los ojos y buscando el sol con sus pequeas

    /manos temblorosas

    El mar empujando las olas

    Sus olas que barajan los destinos

    Levntate y saluda el amor de los hombres

    Escucha nuestras risas y tambin nuestro llanto

    Escucha los pasos de millones de esclavos

    Escucha la protesta interminable

    De esa angustia que se llama hombre

    Escucha el dolor milenario de los pechos de carne

    Y la esperanza que renace de sus propias cenizas cada da.

    Tambin nosotros te escuchamos

    Rumiando tantos astros atrapados en tus redes

    Rumiando eternamente los siglos naufragados

    Tambin nosotros te escuchamos

    Cuando te revuelcas en tu lecho de dolor

    Cuando tus gladiadores se baten entre s

  • Cuando tu clera hace estallar los meridianos

    O bien cuando te agitas como un gran mercado en fiesta

    O bien cuando maldices a los hombres

    O te haces el dormido

    Tembloroso en tu gran telaraa esperando la presa.

    Lloras sin saber por qu lloras

    Y nosotros lloramos creyendo saber por qu lloramos

    Sufres sufres como sufren los hombres

    Que oiga rechinar tus dientes en la noche

    Y te revuelques en tu lecho

    Que el insomnio no te deje calmar tus sufrimientos

    Que los nios apedreen tus ventanas

    Que te arranquen el pelo

    Tose tose revienta en sangre tus pulmones

    Que tus resortes enmohezcan

    Y te veas pisoteado como csped de tumba

    Pero soy vagabundo y tengo miedo que me oigas

    Tengo miedo de tus venganzas

    Olvida mis maldiciones y cantemos juntos esta noche

    Hazte hombre te digo como yo a veces me hago mar

    Olvida los presagios funestos

    Olvida la explosin de mis praderas

    Yo te tiendo las manos como flores

    Hagamos las paces te digo

    T eres el ms poderoso

    Que yo estreche tus manos en las mas

    Y sea la paz entre nosotros

    Junto a mi corazn te siento

    Cuando oigo el gemir de tus violines

    Cuando ests ah tendido como el llanto de un nio

    Cuando ests pensativo frente al cielo

    Cuando ests dolorido en tus almohadas

    Cuando te siento llorar detrs de mi ventana

    Cuando lloramos sin razn como t lloras

    He aqu el mar

    El mar donde viene a estrellarse el olor de las ciudades

    Con su regazo lleno de barcas y peces y otras cosas alegres

    Esas barcas que pescan a la orilla del cielo

    Esos peces que escuchan cada rayo de luz

    Esas algas con sueos seculares

    Y esa ola que canta mejor que las otras

    He aqu el mar

    El mar que se estira y se aferra a sus orillas

    El mar que envuelve las estrellas en sus olas

    El mar con su piel martirizada

    Y los sobresaltos de sus venas

    Con sus das de paz y sus noches de histeria

    Y al otro lado qu hay al otro lado

    Qu escondes mar al otro lado

    El comienzo de la vida largo como una serpiente

    O el comienzo de la muerte ms honda que t mismo

    Y ms alta que todos los montes

    Qu hay al otro lado

    La milenaria voluntad de hacer una forma y un ritmo

    O el torbellino eterno de ptalos tronchados

    He ah el mar

    El mar abierto de par en par

    He ah el mar quebrado de repente

    Para que el ojo vea el comienzo del mundo

  • He ah el mar

    De una ola a la otra hay el tiempo de la vida

    De sus olas a mis ojos hay la distancia de la muerte

    De ltimos Poemas Pstumo, 1948

  • INVIERNO PAR BEBERLO

    El invierno ha llegado al llamado de alguien

    Y las miradas emigran hacia los calores conocidos

    Esta noche el viento arrastra sus chales de viento

    Tejed queridos pjaros mos un techo de cantos sobre las avenidas

    Od crepitar el arcoiris mojado

    Bajo el peso de los pjaros se ha plegado

    La amargura teme a las interperies

    Pero nos queda un poco de ceniza del ocaso

    Golondrinas de mi pecho qu mal hacis

    Sacudiendo siempre ese abanico vegetal

    Seducciones de antesala en grado de aguardiente

    Alejemos en seguida el coche de las nieves

    Bebo lentamente tus miradas de justas caloras

    El saln se hincha con el vapor de las bocas

    Las miradas congeladas cuelgan de la lmpara

    Y hay moscas

    Sobre los suspiros petrificados

    Los ojos estn llenos de un lquido viajero

    Y cada ojo tiene un perfume especial

    El silencio es una planta que brota al interior

    Si el corazn conserva su calefaccin igual

    Afuera se acerca el coche de las nieves

    Trayendo su termmetro de ultratumba

    Y me adormezco con el ruido del piano lunar

    Cuando se estrujan las nubes y cae la lluvia

    Cae

    Nieve con gusto a universo

    Cae

    Nieve que huele a mar

    Cae

    Nieve perfecta de los violines

    Cae

    La nieve sobre las mariposas

    Cae

    Nieve en copos de olores

    La nieve en tubo inconsistente

    Cae

    Nieve a paso de flor

    Nieva nieve sobre todos los rincones del tiempo

    Simiente de sonido de campanas

    Sobre los naufragios ms lejanos

    Calentad vuestros suspiros en los bolsillos

    Que el cielo peina sus nubes antiguas

    Siguiendo los gestos de nuestras manos

    Lgrimas astrolgicas sobre nuestras miserias

    Y sobre la cabeza del patriarca guardin del fro

    El cielo emblanquece nuestra atmsfera

    Entre las palabras heladas a medio camino

    Ahora que el patriarca se ha dormido

    La nieve se desliza se desliza

    se desliza

    Desde su barba pulida

    De Automne rgulier, 1925

  • ELLA

    Ella daba dos pasos hacia delante

    Daba dos pasos hacia atrs

    El primer paso deca buenos das seor

    El segundo paso deca buenos das seora

    Y los otros decan cmo est la familia

    Hoy es un da hermoso como una paloma en el cielo

    Ella llevaba una camisa ardiente

    Ella tena ojos de adormecedora de mares

    Ella haba escondido un sueo en un armario oscuro

    Ella haba encontrado un muerto en medio de su cabeza

    Cuando ella llegaba dejaba una parte ms hermosa muy lejos

    Cuando ella se iba algo se formaba en el horizonte para esperarla

    Sus miradas estaban heridas y sangraban sobre la colina

    Tena los senos abiertos y cantaba las tinieblas de su edad

    Era hermosa como un cielo bajo una paloma

    Tena una boca de acero

    Y una bandera mortal dibujada entre los labios

    Rea como el mar que siente carbones en su vientre

    Como el mar cuando la luna se mira ahogarse

    Como el mar que ha mordido todas las playas

    El mar que desborda y cae en el vaco en los tiempos de abundancia

    Cuando las estrellas arrullan sobre nuestras cabezas

    Antes que el viento norte abra sus ojos

    Era hermosa en sus horizontes de huesos

    Con su camisa ardiente y sus miradas de rbol fatigado

    Como el cielo a caballo sobre las palomas

    De Ver y palpar,1941

  • CANCIN NUEVA

    Dentro del horizonte

    ALGUIEN CANTABA

    Su voz

    No es conocida

    DE DNDE VIENE

    Entre las ramas

    No se ve a nadie

    Hasta la luna era una oreja

    Y no se oye

    ningn ruido

    Sin embargo

    una estrella desclavada

    Ha cado en el estanque

    EL HORIZONTE

    SE HA CERRADO

    Y no hay salida

    De Horizon Carr, 1917

  • 1914

    Nubes sobre el surtidor del verano

    De noche

    Todas las torres de Europa se hablan en secreto

    De pronto un ojo se abre

    El cuerno de la luna grita

    Halal Halal

    Las torres son clarines colgados

    AGOSTO DE 1914

    Es la vendimia de las fronteras

    Tras el horizonte algo ocurre

    En la horca de la aurora son colgadas todas las ciudades

    Las ciudades que humean como pipas

    Halal Halal

    Pero sta no es una cancin

    Los hombres se alejan

    De Halal, 1918

    Traduccin de Jos Zaartu

  • AEROPLANO

    Una cruz

    se ha venido al suelo

    Un grito quebr las ventanas

    Y todos se inclinan

    sobre el ltimo aeroplano

    El viento

    que haba limpiado el aire

    Naufrag en las primeras olas

    La vibracin

    persiste an

    sobre las nubes

    Y el tambor

    llama a alguien

    Que nadie conoce

    Palabras

    tras los rboles

    La linterna que alguien agitaba

    era una bandera

    Alumbra tanto como el sol

    Pero los gritos que atraviesan los techos

    no son de rebelda

    A pesar de los muros que sepultan

    LA CRUZ DEL SUR

    Es el nico avin

    que subsiste

    De Horizon carr, 1917

  • 18

    Heme aqu al borde del espacio y lejos de las circunstancias

    Me voy tiernamente como una luz

    Hacia el camino de las apariencias

    Volver a sentarme en las rodillas de mi padre

    Una hermosa primavera refrescada por el abanico de las alas

    Cuando los peces deshacen la cortina del mar

    Y el vaco se hincha por una mirada posible

    Volver sobre las aguas del cielo

    Me gusta viajar como el barco del ojo

    Que va y viene en cada parpadeo

    He tocado ya seis veces el umbral

    Del infinito que encierra el viento

    Nada en la vida

    Salvo un grito de antesala

    Nerviosas ocenicas qu desgracia nos persigue

    En la urna de las flores impacientes

    Se encuentran las emociones en ritmo definido

    De Tout- - coup, 1925

  • AFORISMOS

  • Conoc un hombre interesante: no tena principios.

    Un hombre, un verdadero hombre, no tiene principio ni fin. Como Dios.

    Los perros le ladran porque iba vestido de Excepcin.

    El reloj del cementerio se adelanta un poco.

    No hay nada ms difcil que saber ser loco. Qu cantidad de buen criterio se necesita para ser loco!

    Aydate, que Dios no te ayudar.

    Desarrolla tus defectos, que son acaso lo ms interesante de tu persona.

    Un hombre desnudo pesa ms que vestido.

    Ver la paja en el ojo ajeno y la viga tambin.

    Has despedazado las leyes de tu corazn para someterte a las leyes de tu tribu.

    En nombre del Arte.

    En nombre de la Belleza.

    En nombre de la Verdad.

    En nombre del Orden.

    En nombre de la Ley.

    En nombre de la Bondad.

    En nombre del Deber...

    Palabras, palabras

    He odo un ruido de cadenas que se rompen. Ha nacido un hombre.

    No hay amor ilegtimo.

    El mayor enemigo del poema es la poesa.

    Axioma para los msicos: Los pjaros cantan mal.

    Otro axioma para los msicos: Los barcos cantan mejor que las sirenas.

    La vida es una cuestin de vida o muerte.

    Es incomprensible que un individuo que haya estudiado profundamente la sociedad actual no sea comunista.

    Es incomprensible que un individuo que haya estudiado profundamente el comunismo, no sea anarquista.

    Un juez que en el momento de dar una sentencia no se est riendo interiormente de s mismo y de la sociedad es un

    perfecto imbcil.

    -Soy abogado, soy ingeniero, soy...

    -Y a m qu? Eso slo prueba que posees un diploma de limitacin.

    Una cortesana llena de melindres es tan repugnante como un ladrn econmico

    Estpido, para qu arrojas cscaras de pltano en mi camino?

    Consejo a los pintores: Para estrangular a la Naturaleza hay que tener dedos de hada.

    Mis versos son clculos de evasin.

    Nada amo tanto como lo imprevisto. Una gitana en Budapest me ley el porvenir en las lneas de la mano.

    Yo me ech vitriolo y las borr.

    La mayor de las degeneraciones y de las morbosidades es el espiritualismo.

  • Era tan mal actor, que lloraba de veras.

    Eva en el Paraso regalaba la manzana; despus sali del Paraso y empez a venderla.

    Las mejores cosas sobre m las han dicho mis enemigos.

    La Poesa soy yo.

    Huir del hombre, huir de la naturaleza y sentarse encima del arco iris con una pluma en la mano.

    Poco no importan los errores o las verdades en un gran autor.

    Por mi parte puedo asegurar que muchos autores me gustan ms en sus imperfecciones que en sus aciertos.

    Lo que nos interesa en Nietzsche no son las verdades de Nietzsche sino la nietzschesidad de Nietzsche.

    Oh, qu delicia! Jugar con fuego.

    Las creencias religiosas tienen como origen la ley del menor esfuerzo.

    Mascar cadenas, he ah el plato ms delicioso para el Hombre.

    Las caricias son araazos de animal domstico.

  • NARRATIVA

  • La Hija Del Guardaagujas

    La casita del guardagujas est junto a la lnea frrea, al pie de una montaa tan empinada que slo algunos rboles

    especiales pueden escalonar a gatas, aferrndose con sus races afiladas, agarrndose a los terrones hasta llegar a la

    cumbre.

    La casita de madera desvencijada a causa del estremecimiento constante y los fragores. La casita pequea en un

    terrapln de veinte metros junto a tres lneas.

    All vive el guardagujas con su mujer, contemplando pasar los trenes cargados de fantasmas que van de ciudad a

    ciudad. Cientos de trenes, trenes del norte al sur y trenes del sur al norte. Todos los das, todas las semanas, todo el

    ao. Miles de trenes con millones de fantasmas, haciendo crujir los huesos de la montaa.

    La mujer, como buena mujer, le ayuda a enhebrar los trenes por el justo camino.

    La responsabilidad de tantas vidas satisfechas les ha puesto un gesto trgico en el rostro. Apenas si pueden sonrer

    cuando se quedan como suspendidos mirando a su pequea, una criatura de tres aos, graciosa, delicada, con gestos

    de flor y de paloma.

    Pasan los trenes con el fragor de hierros y largos metales arrastrados de toda una ciudad que soltara sus amarras, de

    tantos fantasmas desencadenados y ebrios de libertad.

    La hija del guardagujas juega entre los trenes de su montaa con una confianza aterradora. Ignora que los nios ricos

    de la ciudad se entretienen con unos trenes pequeos como ratones sobre rieles de lata. Ella posee los trenes ms

    grandes del mundo... y ya empieza a mirarlos con desprecio.

    Es un encanto de niita. Viva, despreocupada, suelta como si no quisiera apegarse a nadie. Se dira que un tren la

    arrojo all al pasar como por casualidad.

    En cambio sus padres viven pendientes de ella, la contemplan, mientras todava es tiempo, la miman, la adoran.

    Ellos saben que un da la va a matar un tren.

  • La joven del abrigo largo

    Cruza todos los das la plaza en el mismo sentido.

    Es hermosa. Ni alta ni baja, tal vez un poco gruesa. Grandes ojos, nariz regular, boca madura que azucara el aire y

    no quiere caer de la rama.

    Sin embargo, tiene un gesto amargado y siempre lleva un abrigo largo y suelto. Aunque haga un calor excepcional.

    Esta prenda no cae jams de su cuerpo. Invierno y verano, ms grueso o ms delgado, siempre el sobretodo como

    escondiendo algo. Es que ella es tmida? Es que tiene vergenza de tanta calle intil?

    Ese abrigo es la fortaleza de un secreto sentimiento de inferioridad? No sera nada raro. Por eso tiene un estilo

    arquitectnico que no sabra definir, pero que, seguramente, cualquier arquitecto conoce.

    Tal vez tiene el talle muy alto o muy bajo, o no tiene cintura. Tal vez quiere ocultar un embarazo, pero es un

    embarazo demasiado largo, de algunos aos. O ser para sentirse ms sola o para que todas sus clulas puedan

    pensar mejor. Saborea un recuerdo dentro de ese claustro lejos del mundo.

    Acaso quiere slo ocultar que su padre cometi un crimen cuando ella tena quince aos

    (1) Nota: en esta edicin se reproduce la versin publicada en la antologa de Eduardo Anguita (Santiago, Zig-Zag,

    1945)

  • Tragedia

    Mara Olga es una mujer encantadora. Especialmente la parte que se llama Olga.

    Se cas con un mocetn grande y fornido, un poco torpe, lleno de ideas honorficas, reglamentadas como rboles de

    paseo.

    Pero la parte que ella cas era su parte que se llamaba Mara. Su parte Olga permaneca soltera y tom un amante

    que viva en adoracin ante sus ojos.

    Ella no poda comprender que su marido se enfureciera y le reprochara infidelidad. Mara era fiel. Qu tena l que

    meterse con Olga? Ella no comprenda que l no comprendiera. Mara cumpla con su deber, la parte Olga adoraba a

    su amante.

    Era ella culpable de tener un nombre doble y de las consecuencias que esto puede traer consigo?

    As, cuando el marido cogi el revlver, ella abri los ojos enormes, no asustados, sino llenos de asombro, por no

    poder comprender un gesto tan absurdo.

    Pero sucedi que el marido se equivoc y mat a Mara, a la parte suya, en vez de matar a la otra. Olga continu

    viviendo en brazos de su amante, y creo que an sigue feliz, muy feliz, sintiendo slo que es un poco zurda.

  • Procreacin

    Es la noche. Una noche castellana de mediados de agosto en el ao 1040. El calor sofocante del da ha calmado un

    poco, gracias a un viento sin sol que sopla infatigable desde hace tres horas cargado de olor a campo y de rumores

    de chopos.

    Durante el da el cielo se haba dejado caer con todo su sol sobre la tierra, la pobre tierra sedienta, sofocada, tratando

    de sacar la cabeza y poder respirar brisas verdes.

    La noche ha trado una tregua y todo duerme pesadamente, como embotado, como embrutecido.

    La casa de Diego Lanez, una inmensa casona de piedra en el pueblo de Vivar, medio fortaleza, medio casa de

    campo, tratando de mantenerse fra a fuerza de piedra, levanta sus lneas duras y precisas, su adusta majestad en

    medio de un sueo de piedra.

    Piedra. Piedra. Piedra. He aqu la casa de Diego Lanez. Casa de silencios de piedra, de sueos de piedra, de

    palabras de piedra, de honradez de piedra, de sentimientos de piedra (quin ha dicho que las piedras no tienen

    sentimientos?; oh error!), de energas de piedra, de hombres de piedra.

    Casa sealada por el dedo de piedra del Destino!

    Diego Lanez, gran guerrero, ganador de batallas, sostn del trono de sus reyes, heredero de la sangre de Lan Calvo;

    Diego Lanez, que pele en la batalla en que el conde Fernn Gonzlez venci a Almanzor, ha vuelto de una

    consulta a que le llamara el rey y no puede conciliar el sueo.

    Mil preocupaciones le asaltan. Desnudo sobre el lecho, en vano se revuelve de un lado a otro. La respiracin

    inquieta de su pecho fuerte retumba en las paredes como golpes de encarcelado.

    Las imgenes del insomnio se cruzan en su cabeza, pasan, repasan; se precipitan unas sobre otras y dilatan su

    cerebro en fiebre.

    Espaa se le aparece como una olla de grillos, despedazada, diseminada, deshecha en mil trozos separados e

    incongruentes. Provincias, ciudades, fortalezas independientes. Un reyezuelo por aqu, un condado por all, un

    general moro proclamndose amo de un terruo conquistado. Cristianos luchando contra cristianos, moros contra

    moros. Alianzas de moros y cristianos para luchar contra otros cristianos u otros moros. Rotos los pactos al da

    siguiente, los efmeros aliados se destrozan entre s. En el momento de calarse las armaduras de combate no se sabe

    contra quin se va a pelear.

    Este es el cuadro que aparece a Dego Lanez. Hace ya ms de trescientos aos los musulmanes invadieron Espaa,

    y el imperio visigodo cay con el rey Rodrigo en las aguas del Guadalete y se deshizo en ondas hasta el mar.

    El gran imperio musulmn, despus de llegar a su cenit y de haber sometido a toda Espaa a excepcin de don

    Pelayo, empezaba tambin a disgregarse en guerras intestinas y deshacerse en molicies de apogeo. Del califato de

    Crdoba, que haba sido de una magnificencia de cuento oriental, quedaban como restos dispersos, como trozos de

    un planeta que ha estallado, los reinos moros de Granada, de Sevilla, de Murcia, de Denia, de Valencia, de Badajoz,

    de Toledo, de Zaragoza.

    Don Pelayo, ese solo trozo independiente de la pennsula, desprendindose de roca en roca desde la cueva de

    Covadonga haba empezado la reconquista. Don Pelayo no es un hombre, es un aluvin, es una bola de nieve.

    Cmo admira a don Pelayo Diego Lanez! Se le aparece como el dragn de las grutas del destino, lanzando fuego

    por los ojos, triturando moros entre los dientes, aplastando fortalezas bajo las garras.

    Debido a don Pelayo, los cristianos poseen ahora, en medio de esos reinos moros, los condados de Barcelona,