906e_10-10-06_anuariorsc2006.pdf

Upload: panta-altamirano

Post on 08-Jan-2016

220 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

  • ANUARIO SOBRE RESPONSABILIDAD SOCIAL EMPRESARIALEN ESPAA

    2006FUNDACIN ECOLOGA Y DESARROLLOY FUNDACIN ALTERNATIVAS

  • ANUARIO SOBRE RESPONSABILIDAD SOCIAL EMPRESARIALEN ESPAA

    2006

    FUNDACIN ECOLOGA Y DESARROLLOY FUNDACIN ALTERNATIVAS

  • Edita: Fundacin Ecologa y Desarrollo y Fundacin Alternativas

    Direccin: Vctor Viuales y Juan Manuel Eguiagaray

    Redaccin (en orden alfabtico): Sandra Benbeniste, Mercedes Korin, Eva Ramos, Arnzazu Romero y Pablo Zapatero

    Colaboracin (en orden alfabtico): Asun Cano, Aurelio Garca, Jess Llara, Jos Mariano Moneva, Javier Ortiz, Isabel Roser,Alberto Sanz

    Correccin de textos: Ana Mastral

    Imprime: Grficas Sender Ediciones

    ISBN: 84-930817-8-7

    Dep. Legal: Z-1.403/2006

    Este informe se termin de imprimir en Zaragoza el 5 de junio

    Esta publicacin forma parte de la lnea de investigacin sobre Responsabilidad Social Empresarial llevada a cabo por FundacinEcologa y Desarrollo con el apoyo del Gobierno de Aragn

    Se permite difundir, citar y copiar literalmente los materiales propios, de forma ntegra o parcial, por cualquier medio y para cualquier propsito no comercial, siempreque no sean modificados y se cite autor y procedencia.

  • [5] PREFACIO

    [9] LA RSE EN EL MUNDO

    [11] INSTITUCIONES PBLICASINTERNACIONALES

    [11] Unin Europea

    [13] Organizacin para la Cooperacin y elDesarrollo Econmicos

    [14] ONU-Pacto Mundial

    [15] ONU-Convencin contra la Corrupcin

    [15] Organizacin Internacional del Trabajo

    [16] OTRAS INICIATIVAS INTERNACIONALES

    [16] Transparencia informativa (GRI)

    [17] La verificacin y el aseguramiento

    [18] ISO 26000: Gua orientadora sobre RSE

    [21] LA RSE EN ESPAA

    [23] INICIATIVAS DEL SECTOR PBLICO

    [23] Parlamento y Gobierno

    [27] La Comisin Nacional del Mercado deValores

    [30] Administraciones autonmicas ymunicipales

    [32] INICIATIVAS DE OTROS SECTORES

    [32] Agrupaciones empresariales

    [35] Organizaciones de la sociedad civil

    [37] Instituciones acadmicas

    [38] CONSUMO RESPONSABLE

    [40] INVERSIN RESPONSABLE

    [40] Productos financieros

    [43] ndices de sostenibilidad

    [43] Sectores excluidos y nuevos criterios enFTSE4Good

    [44] Presencia espaola en el CarbonLeadership Index

    SUMARIO [45] LA RSE EN LAS EMPRESASESPAOLAS

    [47] EMPRESAS COTIZADAS: INDICADORESRSE DE LAS EMPRESAS DEL IBEX35

    [47] Indicadores de Gobierno Corporativo

    [47] Responsabilidad RSE en el Consejo deAdministracin

    [48] Riesgos no financieros

    [50] Participacin de mujeres en los consejosde administracin

    [51] Indicadores Sociales

    [51] Compromiso de No Discriminacin

    [51] Salud y seguridad en las Compaas delIbex 35

    [52] Indicadores Medioambientales

    [52] Sistemas de Gestin Medioambiental enel Ibex 35

    [52] Informacin pblica de Indicadores deactuacin medioambiental

    [54] RSE EN PYMES Y EMPRESAS NOCOTIZADAS

    [54] Promocin

    [55] Las cooperativas

    [55] Buenas prcticas

    [56] EL AUGE DE LAS MEMORIAS DESOSTENIBILIDAD EN ESPAA

    [59] RECOMENDACIONES

    [61] 25 RECOMENDACIONES PARAPROMOVER UNA CULTURA DERESPONSABILIDAD SOCIAL EN ESPAA

    [65] ANEXOS

    [75] BIBLIOGRAFA

  • PREFACIO

  • Prefacio

    En marzo de 2006 se cumplen seisaos de la Agenda de Lisboa, el pro-grama que acordaron los jefes de Esta-do y de Gobierno de la Unin Europea(UE) para que en 2010 la UE se con-vierta en la economa del conocimien-to ms competitiva y ms dinmica delmundo, capaz de crecer econmica-mente de manera sostenible con ms ymejores empleos y con mayor cohe-sin social1. La estrategia europea dedesarrollo sostenible se ampli enton-ces para incluir no slo consideracio-nes medioambientales sino tambinconsideraciones sociales.

    El Consejo Europeo hizo en aquellaocasin un llamamiento especial alsentido de responsabilidad social delas empresas con respecto a lasprcticas idneas en relacin con laformacin continua, la organizacindel trabajo, la igualdad de oportuni-dades, la integracin social y el desa-rrollo sostenible2.

    Como corolario de esa Cumbre y deposteriores acuerdos internacionalesen el campo de la ResponsabilidadSocial de las Empresas (RSE), lasautoridades pblicas tambin lasespaolas se han visto abocadas apromover iniciativas que respondan a

    las exigencias de modernizacin,transparencia y cohesin social.

    En los aos transcurridos desde laasuncin de este compromiso se hacomprobado que la inclusin de la res-ponsabilidad social empresarial en laagenda poltica mediante una estrate-gia sencilla y bien definida se ha mos-trado eficaz para promover este enfo-que de gestin empresarial. Un casoparadigmtico sigue siendo el del Rei-no Unido que ha creado un Ministeriode RSE desde el que coordina todossus esfuerzos en esta materia.

    En Espaa cada vez ms organismosestn impulsando iniciativas de diver-sa ndole en el campo de la RSE. Laproliferacin de guas, indicadores,observatorios, espacios de reflexin,premios y reconocimientos, conferen-cias, seminarios, talleres, etc. no seve, sin embargo, reflejada plenamen-te en un cambio en la cultura empre-sarial. No faltan incluso quienes sepreguntan si tanta actividad externano tendr como efecto la prdida decredibilidad de las iniciativas adopta-das y la banalizacin del significadomismo de Responsabilidad SocialEmpresarial. Efectivamente, stepodra ser el efecto de la abrumadora

    1. Conclusin 5 en Consejo Europeo de Lisboa (2000): Conclusiones de la Presidencia. Unin Europea, 23 y 24 de marzo de 2000.

    2. Conclusin 39, op.cit.

  • Anuario sobre Responsibilidad Social Empresarial en Espaa 20068

    presencia de documentos y del even-tual abuso de trminos relativos a laRSE si esta realidad no viniera acom-paada de alteraciones estratgicas yoperativas en la forma de gestin delas empresas. Las abundantes y enf-ticas declaraciones de compromisocon la RSE serviran meramente paradar una imagen ms amable de lasempresas involucradas sin que, des-graciadamente, pudieran distinguirsela seriedad y las buenas prcticas demuchas de ellas de los cosmticosanuncios de otras.

    Pero no cedamos al pesimismo. Jun-to a las legtimas dudas, se constatanalgunos avances: el ms significativoen el campo de la transparenciainformativa, evidenciado por el cre-ciente numero de memorias de sos-tenibilidad publicado, sobre todoentre las grandes empresas. No obs-tante, su cobertura no satisface toda-va a todos sus grupos de inters. Elloha originado un cierto debate sobre ladiferencia entre comunicacin y ren-dicin de cuentas, tras la constata-cin de que la mayora de las empre-sas espaolas se encuentran todavaen una fase centrada ms en la pri-mera que en la segunda.

    Queda, sin duda, mucho camino porandar para ampliar el conocimientode las acciones emprendidas, exten-der la cultura de la RSE e integrar losobjetivos de las empresas y sus prc-ticas de gestin en los comporta-mientos que la sociedad considerams plausibles y dignos de crdito.

    La Fundacin Ecologa y Desarrollo yla Fundacin Alternativas han reali-zado este Anuario de Responsabili-dad Social de la Empresa con el obje-to de ofrecer una visin de conjuntode la evolucin de la RSE en Espaadurante 2005, analizar los pasos quese han dado y contribuir a extenderlas buenas prcticas en que se asien-ta. Estamos convencidos de que la

    RSE puede ser una importante palan-ca de cambio social y de mejora de lagestin empresarial, a condicin deque sepamos crear los medios idneospara diferenciar las prcticas respon-sables de las que estn dictadas porla presin de la moda, los diseosfundados de los meramente cosmti-cos. Una opinin pblica bien infor-mada y la disponibilidad de instru-mentos fiables de anlisis, resultanas del mayor inters.

    Con estos objetivos presentes y a finde contribuir a enriquecer la informa-cin y el juicio de la sociedad, el pri-mer captulo presenta los principaleshitos acaecidos a nivel internacional,detenindose el segundo captulo enlos diversos actores, colectivos e ins-tituciones implicados en la promocinde la RSE en nuestro pas. Por suimportancia como impulsores de laRSE se destacan tambin tres temasde forma monogrfica: las compraspblicas, el consumo responsable y lainversin socialmente responsable.En el tercer captulo se analizan algu-nos indicadores que reflejan la situa-cin RSE en las empresas espaolas.Por ltimo, se recogen 25 propuestaspara impulsar la RSE desde cada unode los colectivos implicados.

    Frente a la persistencia de ciertaambigedad sobre el concepto deResponsabilidad Social Empresarial,cabe volver a definir este trmino,como hicimos en las ediciones ante-riores de este Anuario: Se dice quelas organizaciones ejercen su res-ponsabilidad social cuando prestanatencin a las expectativas que tienensobre su comportamiento sus dife-rentes grupos de inters. La adopcinde criterios de RSE en la gestinempresarial entraa la formalizacinde polticas y sistemas de gestin enlos mbitos econmico, social ymedioambiental; tambin, la trans-parencia informativa respecto de losresultados alcanzados en tales mbi-

    tos; y, finalmente, el escrutinio exter-no de los mismos.

    En este tercer Anuario nos hemosdecantado por utilizar el trmino RSE(Responsabilidad Social Empresarial)en lugar de RSC (ResponsabilidadSocial Corporativa) lo que implica unapostura: la responsabilidad socialdebe ser inherente a todas lasempresas, de cualquier tipo y tama-o, sean grandes grupos econmi-cos, pymes o cooperativas. En estesentido, cuando se menciona el tr-mino Responsabilidad Social Corpo-rativa o RSC es porque las fuentescitadas as lo hacen o porque se tratade alguna cuestin vinculada a la res-ponsabilidad de las corporaciones.

    Por ltimo deseamos agradecer suapoyo a las personas que han facilita-do la realizacin de este Anuario:Jos Lus Batalla, Charles Castro,Sandra Len, Pepe Prez y EnriqueTordesillas, as como a la empresaEuroaragn. Tambin a aquellos quehan enriquecido su contenido elabo-rando secciones de opinin: ArianeArpa, Directora General de Intermon-OXFAM; Salvador Garca Atance, Pre-sidente de la Asociacin Espaola delPacto Mundial; Juan Jos Barrera,Director General de Economa Social,del Trabjao Autnomo y del FondoSocial del Ministerio de Trabajo yAsuntos Sociales; Fernando Casado,Coordinador General en Espaa de laCampaa de los Objetivos del Mileniode Naciones Unidas; John Elkington,Chief Entrepreneur de Sustainability;Ass Martn, Presidente Ejecutivo deEuropa Press; Joaqun Nieto, Secre-tario Confederal de Medio Ambientede Comisiones Obreras, y Lus Ulla,Director Ejecutivo del Instituto Argen-tino de Responsabilidad Social.

    Vctor ViualesDirector Fundacin Ecologa y Desarrollo

    Juan Manuel EguiagarayDirector del Laboratorio

    de la Fundacin Alternativas

  • LA RSE EN EL MUNDO

  • LA RSE EN EL MUNDO

    [11] INSTITUCIONES PBLICASINTERNACIONALES

    [11] Unin Europea

    [13] Organizacin para la Cooperacin y elDesarrollo Econmicos

    [14] ONU-Pacto Mundial

    [15] ONU-Convencin contra la Corrupcin

    [15] Organizacin Internacional del Trabajo

    [16] OTRAS INICIATIVASINTERNACIONALES

    [16] Transparencia informativa (GRI)

    [17] La verificacin y el aseguramiento

    [18] ISO 26000: Gua orientadora sobre RSE

  • La RSE en el mundo

    INSTITUCIONES PBLICASINTERNACIONALES

    A nivel internacional varias organizacio-nes pblicas han seguido trabajando enla promocin y desarrollo de la RSE,especialmente desde la Unin Europea,la Organizacin para la Cooperacin y elDesarrollo Econmicos, el Pacto Mun-dial impulsado por Naciones Unidas y laOrganizacin Internacional del Trabajo,instituciones que tienen como eje de sugestin optimizar el impacto de lasempresas transnacionales en una eco-noma globalizada. Los motivos son cla-ros y es que operando con responsabili-dad social transparencia en lasoperaciones, respeto por los proveedo-res y empleados locales, cuidado de losrecursos ambientales, sana interaccincon el Estado, citando slo algunosaspectos de la RSE las multinacionalespueden resultar un motor de crecimien-to de los pases en desarrollo, mientrasque si actan con irresponsabilidad ymirada cortoplacista, pueden resultartremendamente dainas.

    UNIN EUROPEA

    La Unin Europea (UE) ha estado menosactiva en materia de RSE durante 2005que en aos anteriores, limitndose acontinuar con las acciones de fomento(concesin de ayudas para proyectos deRSE) y sensibilizacin (conferencias,bases de datos) iniciadas en aos anterio-res, lideradas por la Direccin General deEmpleo y Asuntos Sociales3.

    Como novedad, la Direccin General deEmpresa e Industria4 lanz en mayo suprimera convocatoria de ayudas en elcampo de la RSE Mainstreaming CorporateSocial Responsibility (CSR) Among SMEs. Elobjetivo de esta lnea de subvenciones esayudar a las pequeas empresas y admi-nistraciones pblicas a poner en prcticalas recomendaciones del Foro multisec-torial para la RSE5 con el propsito defacilitar la adopcin de buenas prcticaspor parte de las empresas europeas, enparticular las pymes, para mejorar sucompetitividad a largo plazo. La convoca-toria se propone apoyar dos de las reco-mendaciones del Foro: (i) sensibilizaciny mejora del conocimiento disponiblesobre la RSE; y (ii) desarrollo de las capa-cidades para promover la adopcin deprcticas de RSE en las empresas.

    3. http://europa.eu.int/comm/dgs/employment_social/

    4. http://europa.eu.int/comm/enterprise/

    5. El Foro Multilateral Europeo sobre la RSE auspiciado por la Comisin Europea reuni, entre octubre de 2002 y junio de 2004, en una primera experiencia de dilogo civil o social,a una veintena de organizaciones que representaban a empresarios, redes de empresas, trabajadores, sociedad civil representativa de otros interlocutores y otras partes intere-sadas. El mtodo de trabajo basado en la bsqueda de consenso tena por objeto alcanzar un diagnstico comn de los factores que favorecen la RSE y los que la obstaculizan y,a ser posible, recomendaciones conjuntas sobre la forma de avanzar. En junio de 2004 el Foro present un informe final de sus actividades con 9 recomendaciones, en el que, entreotras propuestas, recomendaba la adopcin de medidas por parte de la Comisin para promover la RSC entre las pymes.

  • Anuario sobre Responsibilidad Social Empresarial en Espaa 200612

    Por su parte el Comit Econmico ySocial Europeo (CESE) public en junio undictamen sobre el tema Instrumentos deinformacin y evaluacin de la responsa-bilidad social de las empresas en unaeconoma globalizada6 con el que pre-tende contribuir al debate sobre las medi-das necesarias para hacer ms fiable yms transparente la medicin de la RSE yextender el uso y mejorar la calidad delos instrumentos existentes.

    En su dictamen, el CESE indica que, apesar de que la prctica de elaborarinformes anuales tiende a generalizarseen las grandes empresas, la calidad de lainformacin sigue siendo muy desigual, ypor consiguiente, debe mejorarse. Paraello, es necesario conciliar la unidad delos principios y el respeto de la diversidady sera conveniente que los criterios deinformacin y los indicadores sean esta-blecidos conjuntamente por los socios deldilogo social sectorial, previa consulta alas otras partes interesadas y en concer-tacin con los poderes pblicos. El CESEreconoce tambin la importancia de lasdirectrices de la GRI (Global Reporting Ini-tiative) como criterio de referencia privadoreputado, y recomienda que los interlocu-tores europeos participen activamente enlos trabajos de este organismo, con el finde adaptar mejor al contexto europeo susmtodos y sus criterios.

    Por ltimo el CESE, propone la creacinde un portal de informacin sobre lasprcticas de responsabilidad social de lasgrandes empresas, basado en datos pro-porcionados por ellas mismas y contras-tado con las valoraciones de los gruposde inters a travs de un observador ins-titucional que podra ser la FundacinEuropea para la Mejora de las Condicio-nes de Vida y de Trabajo de Dubln. Paraello propone que este tema se debata enel seno del Observatorio Europeo delCambio7.

    Inicialmente proyectada para su lanza-miento en mayo 2005, la publicacin de laesperada nueva comunicacin sobre RSCde la Comisin Europea fue retrasada aoctubre8 y finalmente a marzo de 2006.

    Segn Ethical Corporation Magazine, pare-ce que los retrasos en la publicacin de laComunicacin se debieron principalmen-te a la falta de consenso sobre la ltimade las recomendaciones, el uso de la RSEcomo instrumento de poltica comunitariaa travs de una posible regulacin. Otrasreas controvertidas han sido el tema dela normalizacin, los sistemas de incenti-vos y el equilibrio entre los distintos gru-pos de inters9. Finalmente, parece serque la balanza se ha inclinado finalmentedel lado de las empresas.

    Estos retrasos pusieron en evidencia lastensiones entre las diferentes visiones delas dos Direcciones Generales que estncoordinando el proceso de definicin de unmarco europeo para la RSE. Por un lado laDireccin General de Trabajo y AsuntosSociales, que desde un principio asumi elliderazgo en este campo en la Comisinmediante la elaboracin del Libro Verde, yque parece mucho ms dispuesta a propo-ner un marco regulatorio, y por otro laDireccin General de Empresa e Industria,que se incorpor ms recientemente aeste debate y se muestra mucho ms rea-cia a usar la RSE como un instrumento depoltica social, ante el temor de que lasempresas europeas pierdan competitivi-dad en una economa globalizada.

    Al parecer, algunos comisarios, particu-larmente el responsable de Industria yempresa Gnter Verheugen, han mostra-do su reticencia a la aparicin de requeri-mientos regulatorios o incluso a un siste-ma de benchmarking o certificacin, por loque las referencias a estos aspectos hansido eliminadas de la nueva Comunica-cin. Segn Financial Times citando pala-

    bras textuales del Comisario Verheughen:Los planes originales de la Comisineran bastante diferentes. Inicialmente sepropuso incluso la publicacin de una lis-ta negra y la creacin de un sistema deseguimiento para la implantacin de prin-cipios de la RSC. Pero tuve que parar tan-to entusiasmo por regular. De acuerdocon Financial Times, la Comisin Europeaplanea alinearse con las empresas y dejarde lado a los sindicatos y a las ONGmediante el lanzamiento de una AlianzaEuropea por la RSC que no demandarresultados a las empresas participantes10.

    La respuesta de las ONG no se hizo espe-rar y el mismo da de la filtracin, la Coa-licin de ONG por la rendicin de cuen-tas11 emiti un comunicado con un ttulorevelador El Comisario Verheugensecuestra el proceso europeo de defini-cin de un marco por la RSE: el plan de laUE carece de sustancia 12. El comunicadoafirma que mientras que originalmente laComisin deseaba mejorar el impactomedioambiental y social, actualmenteslo desea mejorar la competitividadempresarial y los beneficios. Tambindenuncia que no se han tenido en cuentamuchas de las recomendaciones del ForoMultisectorial por la RSE, especialmentelas realizadas por las ONG que defendie-ron la necesidad de un marco regulatorioque lleve a la RSE ms all de la volunta-riedad, por lo que considera que los dosaos invertidos en las reuniones del ForoMultisectorial para alcanzar algn tipo deconsenso han sido una prdida de tiempo.

    Por su parte, la Comisin respondi aestas acusaciones indicando que las ONGno han sido excluidas, ni lo sern13 a loque la Coalicin de ONG por la rendicinde cuentas ha contestado que aunquealgunos prrafos de la Comunicacin pue-den ser interpretados como concesiones alos grupos de inters, es ms que proba-ble que no tengan ningn impacto real14.

    6. http://eescopinions.esc.eu.int/viewdoc.aspx?doc=\\esppub1\esp_public\ces\soc\soc192\es\ ces692-2005_ac_es.doc

    7. El Observatorio Europeo del Cambio o European Monitoring Centre on Change (http://www.emcc.eurofound.eu.int/)) fue creado en 2001. Forma parte de la Fundacin Europea parala Mejora de las Condiciones de Vida y de Trabajo de Dubln. Su misin es facilitar a los agentes europeos la informacin necesaria para anticipar y gestionar los cambios econ-micos y sociales que afectan a la economa europea. Ms especficamente, identificar, recabar, evaluar y analizar informacin y tendencias que permita a las empresas, los sin-dicatos y las autoridades pblicas comprender, anticipar y gestionar los cambios industriales originados por innovaciones tecnolgicas, legislativas, organizativas, nuevos mode-los de negocio, etc.

    8. www.europa.eu.int

    9. Gardner, S. (2006): European Commission and corporate responsibility: favouring a light touch. Ethical Corporation Magazine, 14 marzo 2006.

    10. Williamson, H., Minder, R. y Proissl, W. (2006): Brussels to side with business on CSR. Financial Times, 13 marzo 2006.

    11. La Coalicin est formada por Amigos de la Tierra (Europa), Manitese (Italia), La plataforma MVO (Holanda), El Centro de Investigacin de Corporaciones Multinacionales-SOMO(Holanda), CORE (Reino Unido), Germanwatch (Alemania), Forum Citoyen pour la RSE (Francia) y SETEM (Espaa).

    12. Coalition of NGOs working on corporate accountability (2006): Commissioner Verheugen hijacks EU process on CSR: Corporate Social Responsibility plan EU totally lacks subs-tance. of NGOs working on corporate accountability, 13 marzo 2006.

    13. Euroactiv (2006): CSR initiative provokes NGO protests. Euroactiv, 20 marzo 2006.

    14. Coalition of NGOs working on corporate accountability (2006): New communication on CSR: NGOs denounce verbal concessions to other stakeholders, which will however have noreal impact. Coalition of NGOs working on corporate accountability, 22 marzo 2006.

  • 13Anuario sobre Responsibilidad Social Empresarial en Espaa 2006

    La nueva comunicacin fue lanzada final-mente el 22 de marzo de 2006 con el ttu-lo Implantando una alianza para el creci-miento y el empleo: haciendo de Europaun polo de excelencia en RSC15. En ellase ha descolgado toda alusin al desarro-llo sostenible, a diferencia de la Comuni-cacin de 2002 titulada La Responsabilidadsocial de las empresas: una contribucinempresarial al desarrollo sostenible. En lamisma la Comisin manifiesta que esnecesario un nuevo enfoque poltico queevite la imposicin de obligaciones yrequerimientos administrativos y reco-nozca que las empresas son las principa-les protagonistas de la RSE, sin desdearla importancia del dilogo con todos losgrupos de inters16. Este nuevo enfoquesignifica la victoria de la visin de la DGde Empresa e Industria que da cobijo ensu Web a la nueva comunicacin tal ycomo en su da lo hizo la DG de Trabajo yAsuntos Sociales con la Comunicacin de2002.

    La nueva Comunicacin sigue, en granparte, la lnea marcada por las reco-mendaciones del Foro Multisectorial RSE:(i) sensibilizacin e intercambio de bue-nas prcticas; (ii) apoyo a iniciativas mul-tisectoriales; (iii) Cooperacin entre losEstados Miembros; (iv) Informacin a losconsumidores y transparencia; (v) Investi-gacin; (vi) Educacin; (vii) pymes; (viii) ladimensin internacional de la RSE y pro-pone el establecimiento de una AlianzaEuropea por la RSC.

    En definitiva, podra parecer que la UninEuropea respalda una iniciativa parecidaa la lanzada por Naciones Unidas a travsdel Pacto Mundial, si bien la Comunica-cin explicita que la Alianza Europea porla RSC no es un instrumento jurdico quedeban de firmar las empresas (el Pactotampoco es un instrumento jurdico aun-que si debe de ser firmado por las empre-sas que deseen adherirse), sino un marcopoltico general para las iniciativas encurso o que vayan a emprender las gran-des empresas, las pymes y los grupos deinters. Segn la comunicacin, y a dife-rencia del Pacto Mundial, la Alianza sesustentar en iniciativas empresarialesya existentes activas en el campo de laRSC, no habr requerimientos formalespara integrarse en ella, y la Comisin nomantendr un registro de las empresasadheridas, si bien se solicita a las empre-sas participantes que comuniquen losresultados alcanzados en el contexto dela Estrategia Europea de Crecimiento yEmpleo. A pesar de la aparente falta deincentivos para participar en la Alianza(no requerimientos, no visibilidad), laComisin expresa en la Comunicacinsus expectativas de que la iniciativa tengaun impacto significativo en la actitud delas empresas hacia la RSE.

    ORGANIZACIN PARA LACOOPERACIN Y EL DESARROLLOECONMICOS

    La Organizacin para la Cooperacin y elDesarrollo Econmicos (OCDE)17 es unade las organizaciones internacionalesms activas en materia de RSE, tantoabordando aspectos globales, principal-mente a travs de las Directrices para lasEmpresas Multinacionales, como aspec-tos especficos, por ejemplo en el mbitode la lucha contra la corrupcin.

    Las Directrices de la OCDE para lasEmpresas Multinacionales incluyen reco-mendaciones sobre la publicacin deinformacin, el empleo y las relacioneslaborales, el medio ambiente, la luchacontra la corrupcin, los intereses de losconsumidores, la ciencia y la tecnologa,la competencia y la fiscalidad. En el mar-co de los instrumentos para su segui-miento, la OCDE celebra anualmente enPars una reunin de sus Puntos Nacio-nales de Contacto (cada PNC es respon-sable de promover el respeto de lasDirectrices en su mbito nacional, ascomo de asegurar que stos sean conoci-dos y comprendidos por el mundo de losnegocios y el resto de partes interesadasdel pas donde se localizan). En las con-clusiones del documento Reunin anual2005 de los PNC-Informe del Presidente, seindica un avance en los PNC como instru-mento de resolucin (106 demandas deresolucin de circunstancias especficashan sido presentadas en los ltimos cincoaos) y se observa inquietud sobre lapublicacin en Internet de las partesimplicadas y las circunstancias de cadacaso, sealando que esto no favorece elestablecimiento de la relacin de mutuaconfianza necesaria para un dilogo mul-tilateral eficaz.

    En cuanto a la lucha contra la corrup-cin, la OCDE es pionera en la materia,logrando que en los pases miembrosrija desde 1999 la primera herramientainternacional exclusivamente dirigida alcombate de la corrupcin transnacional:el Convenio de Lucha contra la Corrup-cin de Agentes Pblicos Extranjeros enlas Transacciones Comerciales Interna-cionales. Para su seguimiento, peridi-camente la OCDE evala su cumplimien-to por parte de los pases que lo hanratificado. La revisin del cumplimientopor parte de Espaa, que lo ratific en elao 2000, est prevista para 2006, paralo cual la OCDE llev a cabo en octubrede 2005 una misin de evaluacin. Comoparte de sus labores de difusin sobre laprevencin de la corrupcin en diciem-bre de 2005 la OCDE public el informeFighting Corruption and Promoting Inte-grity in Public Procurement.

    15. European Commission (2006): Implementing the Partnership for Growth and Jobs: Making Europe a Pole of excellence on CSR. COM (136) 2006 final, 22 marzo 2006.

    16. Comisin Europea (2006): Lanzamiento de la Alianza Europea para la RSE. Comisin Europea. Nota de prensa, 22 de marzo 2006.

    17. www.oecd.org

  • Anuario sobre Responsibilidad Social Empresarial en Espaa 200614

    ONU-PACTO MUNDIAL

    PRINCIPIOS DEL PACTO MUNDIAL

    Principio No. 1Las empresas apoyarn y respetarn la proteccin de los derechos humanos reconocidosinternacionalmente dentro de su esfera de influencia.

    Principio No. 2Las empresas se asegurarn de no actuar como cmplices de violaciones de los derechoshumanos.

    Principio No. 3Las empresas apoyarn la libertad de asociacin y el reconocimiento efectivo del derechoa la negociacin colectiva.

    Principio No. 4Las empresas promovern la eliminacin de todas las formas de trabajo forzoso y obliga-torio.

    Principio No. 5 Las empresas promovern la abolicin efectiva del trabajo infantil.

    Principio No. 6

    Principio No. 7

    Principio No. 8

    Principio No. 9

    Principio No. 10

    Las empresas promovern la eliminacin de la discriminacin en el empleo y la ocupacin.

    Las empresas apoyarn el Principio de Precaucin respecto de los problemas ambienta-les.

    Las empresas adoptarn iniciativas para promover una mayor responsabilidad ambiental.

    Las empresas fomentarn el desarrollo y la difusin de tecnologas ecolgicamente racio-nales.

    Las empresas trabajarn contra la corrupcin en todas sus formas, incluyendo la extorsiny el soborno.

    DERECHOS HUMANOS

    TRABAJO

    MEDIO AMBIENTE

    ORGANIZACIONES FIRMANTES DEL PACTO MUNDIAL, POR PAS

    Firmantes % sobre Firmantes % sobre Firmantes % sobre Firmantes % sobre (19/12/02) el total (01/08/03) el total (31/06/04) el total (29/12/05) el total

    Brasil 19 3 76 6,1 109 6,3 151 5,5

    Espaa 117 19 126 10,1 216 12,5 277 10,2

    EE UU 40 6 69 5,5 61 3,5 123 4,5

    Filipinas 91 15 93 7,5 137 7,9 139 5,1

    Francia 16 2,6 186 15 339 19,7 401 14,7

    India 85 14 85 7 93 5,4 110 4,0

    Polonia 22 3 176 14,1 4 0,2 12 0,4

    Resto 211 35 427 34,5 758 44,1 1514 55,5

    Total 581 100,0 1.238 100,0 1.717 100,0 2.727 100,0

    Fuente: Elaboracin propia con informacin de www.unglobalcompact.org

    Durante 2005 ha continuado creciendo confuerza el nmero de organizaciones adhe-ridas al Pacto Mundial18, impulsado por

    Naciones Unidas para promover la mejorade las empresas en materia de DerechosHumanos, Trabajo, Medio Ambiente y

    Lucha contra la Corrupcin, de maneraque a finales de ao sus miembros eran2.727, de los cuales 277 son espaoles.

    18. www.unglobalcompact.org

  • LA GLOBALIZACIN NO EST CREANDO EMPLEOS NUEVOS Y DECALIDAD NI REDUCIENDO LA POBREZA

    La cuarta edicin de la publicacin Indicadores Claves del Mercado de Trabajo(ICMT) de la OIT considera que existen importantes desequilibrios en lo que res-pecta a los salarios y a los beneficios derivados de la productividad. El crecimientoeconmico mundial no se traduce en la generacin de los empleos de calidad nece-sarios para avanzar hacia la reduccin de la pobreza. Esta tendencia mundial semanifiesta de (en) forma diversa al considerar indicadores como la creacin deempleos, la productividad, las mejoras salariales y la reduccin de la pobreza enlas diferentes regiones del mundo.

    El estudio revela que, si bien en algunas zonas de Asia la expansin econmica estpromoviendo un crecimiento slido del empleo y mejoras de las condiciones devida, en otras zonas, como frica y en algunas partes de Amrica Latina, se obser-va un nmero creciente de personas que trabajan en condiciones menos favora-bles, en particular en el sector agrcola. Segn los ICMT, para millones de trabaja-dores los nuevos empleos apenas proporcionan ingresos que permitan traspasar elumbral de pobreza, o bien se encuentran muy por debajo de lo que cabra calificarde trabajo satisfactorio y productivo. En el ltimo decenio el nmero total de traba-jadores que viven con menos de dos dlares al da no ha descendido y sigue siendode 1.380 millones, aunque proporcionalmente representa algo menos del 50% delos empleados del mundo (del empelo mundial), lo que supone una disminucinrespecto de 1994 (57%).

    Fuente: OIT (2005): La globalizacin no est creando empleos nuevos y de calidad ni reduciendo la pobre-za. Comunicado de prensa, diciembre de 2005:

    15Anuario sobre Responsibilidad Social Empresarial en Espaa 2006

    Para dar credibilidad al Pacto, en abril de2005 se solicit la elaboracin de los Infor-mes de Progreso a las entidades firmantesque hasta el momento no haban presenta-do ningn tipo de comunicacin al respec-to. Se fijaba el 30 de junio como fecha topepara comunicar a la oficina del Pacto Mun-dial los avances logrados en la implanta-cin de los diez Principios del Pacto. Parafacilitar este proceso, el Pacto Mundial, encolaboracin con varias organizacionesadheridas, ha publicado una nueva herra-mienta de seguimiento: Practical Guide toCommunication on ProgressAdvice for Pac-to Mundial Participating Companies. Prepa-ring their Communication on Progress, tam-bin disponible en espaol. Sin embargo, afinales de 2005 todava 613 empresas uorganizaciones (de ellas, 94 espaolas),siguen sin haber realizado un Informe deProgreso.

    Tambin en 2005, el Pacto ha impulsadoactivamente el Dcimo Principio, referidoa la lucha contra la corrupcin, para locual ha publicado La gua de implemen-tacin del Dcimo Principio. Es de desta-car tambin su participacin en la coali-cin formada en diciembre 2005 para elcombate a la corrupcin, PartneringAgainst Corruption Initiative (PACI), juntoal Foro Econmico Mundial19, la Cmarade Comercio Internacional20 y Transpa-rencia Internacional21.

    Por ltimo, durante el 2005 Naciones Uni-das apoy adems el lanzamiento de Pac-to Mundial Plus, un programa informticoal que se accede previo pago en Internet ydel que es responsable la empresa Inno-vest. Este nuevo producto indicar regu-larmente si las 1700 compaas msgrandes del mundo cumplen los 10 prin-cipios ticos incluidos en el Pacto Mun-dial de la ONU.

    ONU-CONVENCIN CONTRA LACORRUPCIN

    El ao 2005 fue muy activo en la elabora-cin de instrumentos internacionalespara la lucha contra la corrupcin22,reconociendo la gravedad de sta y susimplicaciones en los problemas de desa-rrollo de muchos pases. Adems delmencionado dcimo principio del PactoMundial, en diciembre entr en vigor laConvencin de Naciones Unidas contra laCorrupcin, que es el primer instrumen-to jurdico global en esta materia y quevincula tanto a los Estados como a lasempresas. Espaa ha firmado esta Con-vencin y a finales de 2005 haba iniciadolos trmites para su ratificacin23.

    ORGANIZACIN INTERNACIONALDEL TRABAJO

    La Organizacin Internacional del Trabajo(OIT)24 considera la Declaracin tripartitade principios sobre las empresas multina-cionales y la poltica social, de 1977, comoel nico instrumento orientado al desa-rrollo en el rea de la RSE que est basa-do en principios y estndares universales yque tiene el apoyo de empresarios, traba-jadores y gobiernos25. Para la promocin yseguimiento de esta Declaracin, la OIT hacreado un grupo de trabajo, el Equipo deEmpresas Multinacionales, que es, ade-ms, responsable de la coordinacin desus iniciativas relacionadas con RSE, y enparticular de su participacin en el PactoMundial. Durante 2005 este equipo ha con-tinuado promoviendo la integracin de losestndares internacionales laborales enotros instrumentos internacionales enmateria de RSE a travs de actividades depromocin e investigacin. Cabe destacarla relevancia otorgada por la OIT a lasempresas en materia de cooperacin aldesarrollo. En este sentido son reseableslas investigaciones realizadas sobre laspolticas y prcticas de las multinacionalesy la inversin directa extranjera en subre-giones de frica, Asia y Amrica Latina, elprograma Sustainable Development throughthe Global Compact y el programa PilotingCorporate Social Responsibility through glo-bally-agreed guidelines.

    19. www.weforum.org

    20. www.iccwbo.org

    21. www.transparency.org

    22. Un anlisis de las iniciativas ms relevantes sobrela lucha internacional contra la corrupcin y la sis-tematizacin de una base conceptual sobre estetema se presenta en el informe Negocios limpios,desarrollo global. El rol de las empresas en la luchainternacional contra la corrupcin, elaborado por laFundacin Ecologa y Desarrollo y la FundacinCarolina (2006).

    23. Ver documento 110/000126 de diciembre de 2005 dela Convencin de las Naciones Unidas contra lacorrupcin, hecha en Nueva York el 31 de octubre de2003 y Declaracin que Espaa va a formular en elmomento de su ratificacin. Disponible en www.con-greso.es

    24. www.ilo.org

    25. www.ilo.org/public/english/employment/multi/index.htm

  • Anuario sobre Responsibilidad Social Empresarial en Espaa 200616

    OTRAS INICIATIVASINTERNACIONALES

    Dos organizaciones internacionales conamplia participacin intersectorial sonespecialmente significativas en relacin aaspectos fundamentales de la RSE: laGlobal Reporting Initiative (GRI) y la Inter-nacional Standard Association (ISO).

    En el campo de la informacin para latransparencia, el modelo de GlobalReporting Initiative es usado ao tras aopor un nmero cada vez mayor deempresas, y existen iniciativas comple-mentarias, si bien incipientes, encami-nadas al aseguramiento y verificacin delos informes que siguen tal modelo. Sinembargo, hasta el momento no se haestablecido un modelo de sistema degestin certificable, que contenga todoslos aspectos de la RSE aplicable interna-cionalmente y, que, por tanto, pueda darrespuesta y satisfacer la demanda exis-tente a nivel mundial. Tal vez la respues-ta a esta carencia sea que un estndarde estas caractersticas es inviable. Sinembargo, la ISO ha seguido dando pasosdurante el 2005 para la elaboracin deuna Gua RSE que con el nombre de ISO26000 ver la luz en 2008.

    TRANSPARENCIA INFORMATIVA(GRI)

    La publicacin de memorias de sostenibi-lidad es una respuesta a la demanda detransparencia, pilar bsico de la respon-sabilidad social. SustainAbility, el Progra-ma de Naciones Unidas para el MedioAmbiente y la agencia de calificacinStandard & Poors publican cada dos aosel informe Global Reporters, un estudioacerca de la evolucin de la calidad de lasmemorias de sostenibilidad de las mayo-res empresas del mundo. Durante 2005este informe no se ha editado. Caberecordar que en la edicin de 2004 ningu-na empresa espaola figuraba en el Top50 de estas organizaciones; que la calidadde la informacin haba mejorado respec-to a la anterior edicin (2002); y que losresultados del informe ponan de mani-fiesto una cierta vinculacin entre la cali-

    dad de la informacin sobre sostenibili-dad y las calificaciones de crdito otorga-das por las agencias de referencia.

    Para suplir la ausencia de este estudio, sepuede recurrir al Estudio internacional 2005sobre informes de Responsabilidad Corpora-tiva, elaborado por KPMG y la Universidadde msterdam. Sus resultados indican quela elaboracin de informes de RSE ha cre-cido de forma continuada desde 1993: en2005, el 64% de las 250 mayores empresasdel mundo public informacin de sosteni-bilidad; aunque tan slo un 33% de estosinformes cuenta con verificacin externa.Los pases lderes en la comunicacin dela RSE, de acuerdo con el estudio, son elReino Unido y Japn. Sin embargo, los pa-ses donde se ha experimentado un mayorcrecimiento en la publicacin de memo-rias de sostenibilidad son Francia, Canad,Italia y Espaa, hasta el punto de que se hapodido leer en la prensa econmica queEspaa es el dcimo pas del mundo conms memorias de sostenibilidad26.

    En los ltimos aos se ha impuesto comomodelo para la elaboracin de memoriasde sostenibilidad el propuesto por laorganizacin Global Reporting Initiative(GRI)27. GRI es una iniciativa internacionalde enfoque multidisciplinar, en la queparticipan empresas, instituciones aca-dmicas y organizaciones de la sociedadcivil, y cuyo trabajo se ha orientado haciael diseo de un marco globalmente acep-tado para la elaboracin de memorias desostenibilidad a travs de una Gua parala elaboracin de memorias de sostenibi-lidad publicada en 2002. El nmero deempresas y organizaciones que usanestas directrices se duplica ao tras ao,desde el comienzo de la actual dcada.

    Durante los ltimos aos se ha defendidola importancia del diseo y difusin demodelos adaptados a las peculiaridadesde los diferentes sectores econmicos. Eneste sentido, destaca la preocupacin deGlobal Reporting Initiative por disear,editar y difundir suplementos sectorialescomplementarios a su Gua para la elabo-racin de memorias de sostenibilidad.

    A finales de 2004 Global Reporting Initia-tive anunci la revisin de sus Directri-

    ces de 2002. Esta revisin debe conducirdurante el 2006 a la elaboracin de latercera generacin de directrices, deno-minada G3.

    Los trabajos de revisin del GRI incluyenla innovacin en indicadores, la gua parael proceso de elaboracin de memorias yel establecimiento de vnculos entre elnuevo estndar de GRI y otras iniciativassobre responsabilidad social empresarial.A principios de enero de 2006 se presentun primer borrador del nuevo estndarG3, para su consulta pblica durante unperodo de tres meses28. GRI invita a susdiferentes grupos de inters a formarparte del proceso de revisin, por ejem-plo, formando parte de los diferentes gru-pos de trabajo creados a tal efecto. Desta-ca tambin, como novedad, el desarrolloen paralelo de un software que permitir lacompatibilidad del nuevo estndar de GRIcon el lenguaje XBRL, eXtensible BusinessReporting Language, posible nueva revolu-cin (por su inmediatez) en el mbito dela comunicacin empresarial.

    Al mismo tiempo, GRI ha anunciado doscuestiones relevantes, que afectan a lanaturaleza de la iniciativa y de su princi-pal y ms conocido producto. Por un lado,su intencin de consolidar su modelocomo un estndar de comunicacin yaque GRI se ha convertido durante los lti-mos aos en el estndar de facto parala elaboracin de memorias de sostenibi-lidad. Ahora se dar el paso, definitivo, desus guas-recomendaciones a un estn-dar formal. Por otro lado, GRI comenza-r a buscar la sostenibilidad econmicade la iniciativa, ya que hasta el momentoGRI se ha mantenido econmicamentemediante la filantropa y las contribucio-nes voluntarias de sus usuarios; tambin,mediante soluciones imaginativas, comosubastar el asentamiento de su sedeeuropea en la ciudad que le ofrecieramayores facilidades. Para ello se finan-ciar parcialmente mediante la provisinde productos y servicios de apoyo al nue-vo estndar ya que, y aunque sta no hasido la finalidad de la iniciativa, desde susorgenes GRI no ha dejado de recibir peti-ciones de apoyo por parte de empresas yotras organizaciones, para la puesta enprcticas de sus recomendaciones.

    26. Cinco Das. Espaa, 16 de junio de 2005.

    27. www.globalreporting.org

    28. www.grig3.org

  • 17Anuario sobre Responsibilidad Social Empresarial en Espaa 2006

    La verificacin y el aseguramiento

    La importancia creciente de la informa-cin RSE en muchos entornos, como losmercados financieros, ha acelerado lanecesidad de proporcionar credibilidad ala informacin extra-financiera de lasempresas ofrecida a travs de memoriasde sostenibilidad mediante su verificacinexterna, de la misma forma que la audito-ra contable aporta credibilidad a la infor-macin financiera.

    En este sentido, la Gua GRI 2002, consi-dera la verificacin externa como una delas cuestiones a tener en cuenta para ase-gurar la credibilidad de los informes. Elprincipio de auditabilidad, recogido en laparte B de la Gua, proporciona las basespara la realizacin de esta verificacin.

    Esta tendencia hacia la mejora de la cre-dibilidad est directamente relacionadacon la erosin de la confianza en lasempresas por parte de los grupos de inte-rs29, ocasionada por escndalos comolos de Enron en el mbito contable.

    La verificacin de las memorias de soste-nibilidad es un proceso emergente, reali-zado por varios tipos de proveedores deservicios. Los siguientes datos, obtenidosde la informacin publicada por CertifiedPublic Accountants (CPA) de Australia,nos demuestran la diferente naturalezade los verificadores.

    Dentro de la verificacin se distinguen dostipod de servicios: (i) la validacin (confir-macin a travs de la obtencin y evalua-cin de evidencia objetiva de que losrequerimientos para una aplicacin hansido completados) y (ii) el aseguramiento(provisin de confianza o certidumbre porun proveedor independiente de asegura-miento a un partcipe o grupo de partci-pes en relacin con una materia).

    TIPO DE PROVEEDORES PARA LA VERIFICACIN DE MEMORIAS DE SOSTENIBILIDAD

    N declaraciones Firmas de Consultores Consultores Otrosde verificacin contabilidad medioambientales de ingeniera (ONGs, expertos)

    Reino Unido 48 11 26 2 9

    Europa 52 31 10 4 7

    Japn 16 6 1 0 9

    Australia 33 5 15 9 5

    TOTAL 149 53 52 15 30

    Fuente: CPA Australia (2004) y elaboracin propia.

    Fuente: KPMG (2005): Internacional Survey on Corporate Social Reporting. KPMG

    MEMORIAS DE SOSTENIBILIDAD CON Y SIN ASEGURAMIENTO, POR PAS.COMPARATIVA 2002-2005

    0 10 20 30 40 50 60 70 80

    (1/36)(1/32)

    EE.UU.

    Suecia

    Canad

    Blgica

    Sudfrica

    Alemania

    Noruega

    Finlandia

    Dinamarca

    Australia

    Holanda

    Espaa

    Francia

    Italia

    Japn

    Reino Unido

    (4/26)(1/20)

    (2/19)(4/41)

    Number of CR reports with assurance statement, 2005

    Total number of CR reports, 2005

    Number of CR reports with assurance statement, 2002

    Total number of CR reports, 2002

    Number of reports with assurance/total number of reports(a/b)

    (4/11)(4/9)

    (1/1)(4/18)

    (2/32)(5/36)

    (6/29)(5/15)

    (7/32)(6/31)

    (9/20)(7/22)

    (6/14)(10/23)

    (10/26)(11/29)

    (3/11)(11/25)

    (3/21)(16/40)

    (8/12)(22/31)

    (19/72)(25/80)

    (26/49)(38/71)

    29. Trust us, SustainAbility y UNEP.

  • Anuario sobre Responsibilidad Social Empresarial en Espaa 200618

    La validacin es un servicio con cierto xi-to entre las empresas espaolas, perocuyo objetivo est muy limitado a confir-mar la concordancia entre las exigenciasde una norma, habitualmente las directri-ces GRI, y los indicadores proporciona-dos. De ah su utilizacin para facilitar elacceso al reconocimiento de acuerdo con(in accordance) de la GRI. Por su parte, elaseguramiento (assurance) es el enfoquede verificacin hacia el que se orienta laGRI en su anexo 4, y que ms se aproximaa la finalidad de credibilidad. En la prcti-ca, el principal referente para los verifica-dores independientes de las memorias desostenibilidad es la norma AA1000AS,publicada por la organizacin britnicaAccountAbility en marzo de 2003 tras unproceso de consulta abierto a todos losgrupos de inters.

    El aumento de la verificacin externa dela informacin sobre RSE es un hechoevidente. As, de acuerdo con un estudiorealizado por la Association of CharteredCertified Accountants (ACCA) se observaque a nivel internacional cerca del 40% delos informes del ao 2003 incluyen uninforme de verificacin externo, frente amenos de un 10% en 1993.

    El crecimiento de esta actividad, susten-tada en los mecanismos de verificacinexistentes AA1000AS e ISAE 3000 (Inter-national Standard on Assurance Engage-ments) no est exento de problemas.Ambos mecanismos deben hacer frente adiversos retos que les permitan alcanzarel estatus de instrumentos de credibilidadque se les ha otorgado. Entre los aspectosms relevantes se pueden destacar:

    La definicin de los expertos indepen-dientes que puedan llevar a cabo elservicio de aseguramiento y de susresponsabilidades.

    La implantacin de normas especfi-cas que consideren los objetivos delservicio, sus principios bsicos, loscriterios y metodologas a realizar ylos modelos de informes a elevar a losgrupos de inters.

    El establecimiento de criterios preci-sos en los lmites de la informacin desostenibilidad, especialmente en lostemas relativos a la configuracin dela entidad.

    El desarrollo de los denominadosinformes anuales integrados, en losque conviven los estados financierosjunto a la informacin sobre respon-sabilidad social empresarial (informeanual de gobierno corporativo e infor-me de sostenibilidad).

    ISO 26000: GUA ORIENTADORASOBRE RSE

    La Organizacin Internacional de Estan-darizacin (International Organization forStandardization, ISO)30 sigue trabajando enel diseo de una gua sobre RSE, ISO2600031, cuya publicacin se prev parafines de 2008, lo que sin duda proporcio-nar una importante seal de mercadosobre la importancia de la RSE a lasempresas de todo el mundo, dado elprestigio y uso generalizado de los pro-ductos de ISO.

    Tal como qued recogido en la edicinanterior de este Anuario, durante la Con-ferencia de Estocolmo en junio de 2004 laISO tom la decisin de no trabajar en laelaboracin de un sistema de gestinestandarizado sino de una gua orientati-va que no contendr requisitos certifica-bles. De acuerdo a las previsiones de ISO,la gua se limitar a proveer a las empre-sas e instituciones de principios orienta-dores en materia de RSE.

    Para ello la ISO constituy un grupo detrabajo de RSE cuya direccin y liderazgocorrespondi a los representantes deBrasil y Suecia. Su primer encuentro tuvolugar en Salvador de Baha (Brasil), enmarzo de 2005. En el mismo participaron300 delegados acreditados (entre exper-tos y observadores), de 43 pases, miem-bros de ISO, entre los cuales se incluyen21 pases en vas de desarrollo, as comorepresentantes de organizaciones comola OIT o el Pacto Mundial. La multiplici-dad de participantes, aunque sin dudacontribuir a ralentizar el proceso, pre-tende asegurar que el resultado final delproceso sea una Gua que representenequitativamente la visin de todos losgrupos de inters: de empresas, gobier-no, sindicatos, consumidores, ONG yotros. Para ello, en la seleccin de loscoordinadores de los distintos grupos detrabajo se tienen en cuenta el equilibrioentre sectores, gnero y representacin

    geogrfica (pases en desarrollo y pasesdesarrollados).

    El segundo encuentro ha tenido lugar enseptiembre de 2005 en Bangkok. En elmismo se dio un paso importante al defi-nirse la estructura y la mayora de conte-nidos de la ISO 26000, acordndose laredaccin de las siguientes partes funda-mentales:

    objeto y campo de aplicacin,

    normas para su consulta,

    trminos y definiciones,

    el contexto de la ResponsabilidadSocial en el cual opera la organiza-cin,

    principios importantes para las orga-nizaciones,

    orientaciones sobre los temas y mate-rias centrales de RSE, as como paraimplementarla en las distintas entida-des.

    En este encuentro se estableci el objeti-vo de publicar la Gua en el ltimo trimes-tre de 2008 y se fij, adems, la necesidadde armonizarla con los principios deNaciones Unidas.

    Debido a que ISO 26000 debe reflejar elconsenso internacional entre todas lascategoras de grupos de inters afectadaspor la responsabilidad social, en elencuentro se continuaron explorando for-mas de comunicacin del trabajo paraampliar las posibilidades de participacinen el proceso de otros grupos de interssubrepresentados.32 Para ello se propusoidentificar grupos que no se hayan involu-crado hasta ahora, aumentar la participa-cin de las categoras de grupos de inte-rs que cuentan con baja representaciny encontrar organizaciones patrocinado-ras y otras fuentes de financiamientopara esta participacin.

    Es de suponer (y de esperar en pro de lacoherencia para que la formalizacin dela RSE prospere en las empresas) que laISO 26.000 servir de marco de referen-cia a la futura gua de AENOR (vase eneste trabajo II, 3.2 La lnea de trabajo deAENOR).

    30. www.iso.org

    31. www.iso.org/iso/en/commcentre/pressreleases/2005/Ref947.html?printable=true

    32. Este aspecto se intenta con la creacin del sitio Web www.iso.org/sr

  • 19Anuario sobre Responsibilidad Social Empresarial en Espaa 2006

    PRONSTICO PARA 2006JOHN ELKINGTON, FUNDADOR & CHIEF ENTREPRENEUR, SUSTAINABILITY

    Cmo se avecina el 2006 para las agendas de la responsabilidad social empresarial (RSE) y el desarrollo sostenible? Algunaspistas se hicieron visibles durante la celebracin este ao del Foro Economico Mundial en Davos, Suiza. El ao pasado, para sor-presa de muchos de los participantes del mundo poltico y empresarial, cuestiones como la pobreza y el cambio climticoencabezaron la lista de prioridades identificadas durante una sesin de votacin electrnica entre 700 asistentes al evento. Esteao, y a pesar de la reducida participacin de representantes de ONG, medioambiente y el desarrollo sostenible en China eIndia encabezaron la lista de prioridades.

    El mensaje que serva de cabecera a la cumbre de 2006 fue: Preprate para disrupciones radicales de mercados, sociedades yecosistemas. En una de las sesiones con mayor aceptacin, el ex presidente de EE UU Bill Clinton nombr el cambio climtico,las desiguales globales y las divisiones culturales y religiosas como los mayores retos que tiene el mundo hoy en da. Duranteuna conversacin con el profesor Klaus Schwab, fundador y presidente del Foro Econmico Mundial (FEM), Clinton coment queel cambio climtico es el nico problema que tiene el poder para frenar el avance de la civilizacin tal como la conocemos.

    Muchos otros riesgos, incluido el dficit presupuestario de EE UU, inminentes crisis fiscales, subidas del precio de petrleo, pan-demias, terrorismo y la falsificacin tambin fueron subrayados en el reciente estudio del FEM Global Risks 2006. Sin embargo,cuando presid una sesin del grupo de Riesgos Globales, centrada en el Medioambiente y la Cuenta de Resultados, el nimogeneral era marcadamente diferente al de mi primera participacin en la cumbre del FEM hace cinco aos. Las agendas de RSEy del desarrollo sostenible ahora forman parte de la corriente general, aunque eso no signifique que los presidentes y otros lde-res empresariales vean el mundo de la misma manera que nosotros.

    Desde SustainAbility creemos que las agendas medioambientales, de RSE y del desarrollo sostenible han sido conducidas portres grandes olas de inters pblico hasta el momento. La primera ola, que alcanz su punto mximo entre 1969 y 1973, empu-j a las industrias a una posicin defensiva y a actuar conforme a la ley. La segunda ola, que alcanz su punto mximo entre 1988y 1991, impuls un enfoque empresarial nuevo de estrategias verdes. La tercera ola, que alcanz su punto mximo entre 1999y 2002, estaba enfocada en la globalizacin y el buen gobierno corporativo.

    Hace poco Lee Scout, presidente de Wal-Mart, lanzaba una propuesta empresarial en esta direccin de la que hablamos. Traslos acontecimientos del huracn Katrina, el empresario, enfrentado a una intensa campaa de presin pblica por parte de acti-vistas y clientes, comprometa a su empresa a limpiar su inmensa cadena global de distribucin comercial as como a realizaravances en reas como derroche cero, energas renovables y pesca sostenible. (http://walmartstores.com/GlobalWMStores-Web/navigate.do?catg=217)

    Nuestro pronstico es que la siguiente ola de presin y cambio operar en un mbito an ms amplio y se enfocar en reascomo avances en la innovacin, la creatividad, soluciones empresariales a los grandes retos de la sociedad y reflexiones sobrecmo replicar y llevar a escala experimentos exitosos. Probablemente el anuncio ms significativo ltimamente ha sido el lan-zamiento por parte de General Electric de su iniciativa Ecomagination (http://www.ge.com/en/product/ecomagination/), queest siendo liderada desde arriba por el presidente de la empresa, Jeff Immelt. Pero, adems de trabajar con estas grandesempresas, tambin estamos interesados cada vez ms en apoyar al nuevo tipo de emprendedores sociales destacados pororganizaciones como Ashoka (www.ashoka.org), la Fundacin Schwab (www.schwabfound.org) y la Fundacin Skoll(www.skollfoundation.org).

  • LA RSE EN ESPAA

  • LA RSE EN ESPAA

    [23] INICIATIVAS DEL SECTOR PBLICO

    [23] Parlamento y Gobierno

    [27] La Comisin Nacional del Mercado deValores

    [30] Administraciones autonmicas ymunicipales

    [32] INICIATIVAS DE OTROS SECTORES

    [32] Agrupaciones empresariales

    [35] Organizaciones de la sociedad civil

    [37] Instituciones acadmicas

    [38] CONSUMO RESPONSABLE

    [40] INVERSIN RESPONSABLE

    [40] Productos financieros

    [43] ndices de sostenibilidad

    [43] Sectores excluidos y nuevos criterios enFTSE4Good

    [44] Presencia espaola en el CarbonLeadership Index

  • La RSE en Espaa

    INICIATIVAS DEL SECTORPBLICO

    El incremento de iniciativas del sectorpblico en Espaa en torno a la RSEdurante 2005 es notable. El Gobiernoest mostrando inters por analizar lasopciones existentes en la materia y poractivar mecanismos para una transfor-macin empresarial; de hecho, por vezprimera, el trmino responsabilidadsocial corporativa fue incluido en elprograma electoral del actual equipo degobierno. Y las iniciativas en materia deRSE han comenzado a abrirse un lugaren las agendas polticas de los gobiernosautonmicos y municipales. En suma,existe variedad tanto en el enfoque adop-tado (ms global, ms parcial), como enlos medios dedicados al xito de las ini-ciativas. Sin duda la importancia que elsector pblico le est otorgando al temaes esperanzadora, pero debe de consoli-darse mediante medidas concretas ycoordinadas en los distintos niveles de laAdministracin.

    PARLAMENTO Y GOBIERNO

    Parlamento

    En el mbito parlamentario la Subcomi-sin para Potenciar y Promover la Res-ponsabilidad Social de las Empresas,constituida en el seno de la Comisin deTrabajo y Asuntos Sociales del Congresode los Diputados, y liderada por los dipu-

    tados Ramn Juregui y Carles Campu-zano, recibi las aportaciones de unos 60comparecientes durante las sesionescelebradas entre marzo y noviembre de2005. Representando a muy diversoscolectivos (administracin pblica, uni-versidad, sector privado, sindicatos,organizaciones de la sociedad civil, etc.),los comparecientes presentaron susapreciaciones y expectativas sobre lasorientaciones que deberan guiar la pol-tica de RSE en Espaa.

    A partir de una sntesis de estas compa-recencias, elaborada por ESADE y la Fun-dacin Ecologa y Desarrollo, la Subcomi-sin present, en 2006 un Libro Blancoque formula las recomendaciones que,desde el Congreso, se hacen llegar alGobierno y al conjunto de la sociedadpara potenciar y promover la RSE.

    Tambin en el Congreso de los Diputa-dos, en diciembre de 2005, la Comisinde Cooperacin Internacional para elDesarrollo present una propuesta deapoyo a la Iniciativa para la Transparen-cia de la Industria Extractiva (ExtractiveIndustries Transparency Initiative, EITI).La EITI, lanzada por el Primer Ministrobritnico Tony Blair en el escenario de laCumbre Mundial sobre Desarrollo Soste-nible de Johannesburgo en 2002, tienesu origen muy ligado a la campaa sobretransparencia en las industrias extracti-vas promovida por Publish What You Pay(Publica lo que pagas), una coalicininternacional de organizaciones nogubernamentales que cuenta con msde doscientos miembros; entre ellos, las

  • Anuario sobre Responsibilidad Social Empresarial en Espaa 200624

    organizaciones espaolas Intermn-Oxfam y Fundacin Ecologa y Desarro-llo. Por iniciativa del diputado de CiU(Convergncia i Uni) Carles Campuza-no, la Comisin aprob que se solicitasea las empresas espaolas del sectorextractivo que publicasen los ingresos ylos gastos obtenidos en pases en vas endesarrollo. Esta solicitud est en lneacon la realizada por el Parlamento Euro-peo a los Estados miembros. Numerososrepresentantes de las industrias deminera, gas y petrleo se han adheridoformalmente a la EITI; Repsol-YPF es lanica empresa espaola firmante a dade hoy.

    Ministerio de Trabajo y AsuntosSociales

    En el mbito del Poder Ejecutivo, elMinisterio de Trabajo y Asuntos Socia-les33 promueve desde marzo de 2005 unForo de Expertos de RSE que ha estadodebatiendo las posibles medidas parafomentar prcticas de tica social ymedioambiental dentro del marco deldesarrollo sostenible definido por lasinstituciones de la Unin Europea. ElForo est compuesto por representantesde distintos Ministerios y expertos deorganizaciones de la sociedad civil y delmbito acadmico. Fruto de las tres pri-meras sesiones de trabajo se ha publica-do un documento consensuado sobre Elmbito y la Definicin de la RSE. El Forode Expertos cerr en julio 2005 el primerbloque de trabajo que acord la siguien-te definicin de la RSE:

    DEFINICIN DE RSE PROPUESTA POR EL FORO DE EXPERTOS DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES

    La RSE es, adems del cumplimiento estricto de las obligaciones legales vigentes, la integracin voluntaria en su gobierno ygestin, en su estrategia, polticas y procedimientos, de las preocupaciones sociales, laborales, medio ambientales y de respetoa los derechos humanos que surgen de la relacin y el dilogo transparentes con sus grupos de inters, responsabilizndose asde las consecuencias y los impactos que se derivan de sus acciones.

    Una empresa es socialmente responsable cuando responde satisfactoriamente a las expectativas que sobre su funcionamientotienen los distintos grupos de inters. La RSE se refiere a cmo las empresas son gobernadas respecto a los intereses de sustrabajadores, sus clientes, proveedores, sus accionistas y su impacto ecolgico y social en la sociedad en general, es decir, a unagestin de la empresa que respeta a todos sus grupos de inters y supone un planteamiento de tipo estratgico que debe for-mar parte de la gestin cotidiana de la toma de decisiones y de las operaciones de toda la organizacin, creando valor en el lar-go plazo y contribuyendo significativamente a la obtencin de ventajas competitivas duraderas. De ah la importancia de que tan-to los rganos de gobierno como la direccin de las empresas asuman la perspectiva de la RSE.

    Si bien la responsabilidad social corresponde en primer lugar a las empresas, se extiende a todas las organizaciones que apor-tan un valor aadido a la sociedad, sean pblicas y privadas, con nimo o sin nimo de lucro.

    Fuente: Foro de Expertos de RSE (2005): I, II y III Sesin de trabajo: Definicin y mbito de la RSE, Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, Madrid.

    EL FORO DE EXPERTOS DE RSE Y SUS CONCLUSIONES SOBREPOLTICAS PBLICAS

    El Foro de Expertos de RSE convocado por el Ministerio de Trabajo y Asuntos Socia-les determin que deben adoptarse polticas pblicas en la lnea de:

    Promocin e incentivos de la RSE en grandes, medianas y pequeas empresas.

    Regulacin, universalizacin y verificacin de los informes de las empresas.

    Fomento de la RSE tanto entre los agentes de la sociedad civil como en la socie-dad en general, y entre las empresas y sus directivos.

    Consolidacin de la voz de las partes interesadas (consumidores, trabajadores,organizaciones medioambientales, de Derechos Humanos, etc.).

    Instrumentos de deliberacin y concertacin para mediar entre las partes inte-resadas y las empresas.

    Impulso, dentro del Estado (en todas sus actividades econmicas, empresaspblicas y organismos pblicos), de las mismas pautas de conducta responsa-ble que intenta promover en la sociedad.

    Utilizacin de criterios de Responsabilidad Social como gua para toda la nor-mativa administrativa con el fin de proteger, entre otros, los derechos de losconsumidores, los derechos humanos, alcanzar estndares laborales dignos yno discriminatorios, respetar el medioambiente y erradicar la corrupcin.

    Fuente: Foro de Expertos de RSE (2005): I, II y III Sesin de trabajo Definicin y mbito de la RSE,Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, Madrid.

    33. www.mtas.es

    34. Luna, J. (2005): El Foro de Expertos llega a un principio de acuerdo sobre lo que es la RSE, aunque habr una segunda lectura. www.responsables.biz, 22 de julio de 2005.

    Aunque las organizaciones participantesen general han valorado positivamentela iniciativa del Foro, algunas en parti-cular han expresado su disconformidadcon la definicin propuesta. Es el casode Amnista Internacional que indicque el documento olvida hacer referen-cia a la legislacin internacional vigente,especialmente a las normas de dere-chos humanos en relacin con lasempresas, que Amnista considera queno recibe el tratamiento adecuado. Apesar de ello, Amnista tambin recono-ci que aunque la composicin del Foro

    no es la ideal al no estar representadasempresas y sindicatos (que estn pre-sentes en una Mesa de Dilogo Social),la iniciativa es positiva y muestra elmayor inters del actual gobierno porabordar este tema34.

    Puesto que el principal objetivo del Foroes debatir las posibles medidas parafomentar prcticas de responsabilidadsocial, estas son algunas de las conclu-siones obtenidas sobre el tipo de medidasque podran adoptarse desde la adminis-tracin pblica:

  • 25Anuario sobre Responsibilidad Social Empresarial en Espaa 2006

    Adems, el Ministerio de Trabajo estable-ci una Mesa de Dilogo Social dedicada ala RSE, donde estn presentes el Gobier-no, organizaciones de trabajadores yempresarios.

    El Foro de Expertos y la Mesa de DilogoSocial se suman a otras dos acciones queya venan realizndose en este Ministerio:la ayuda para el fomento de la RSE, conconvocatorias anuales desde 2004 para laconcesin de subvenciones a las activida-des de promocin de la economa social,la responsabilidad social de la empresa yel autoempleo, y para sufragar los gastosde funcionamiento de las asociaciones decooperativas, de sociedades laborales, detrabajadores autnomos y otros entesrepresentativos de la economa social dembito estatal; y el Programa ptima,desarrollado por el Instituto de la Mujer35

    desde 1996 con el objetivo de introduciren las empresas la igualdad de oportuni-dades en materia de gnero, a travs deun plan de accin positiva.

    PROMOCIN PBLICA DE LA RSE EN ESPAA

    JUAN JOS BARRERA CEREZAL, DTOR. GRAL. DE ECONOMA SOCIAL, DEL TRABAJO AUTNOMO Y DEL FONDO SOCIAL EUROPEO,

    MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES

    El fenmeno de la globalizacin ha llevado a las instituciones internacionales aimpulsar un nuevo modelo de crecimiento econmico basado en el desarrollosostenible, entendiendo que no solo vale que la economa crezca en trminoscuantitativos, sino que tambin lo haga de forma cualitativa respetando elmedio ambiente y favoreciendo la cohesin social.

    En ese contexto, se considera que las empresas, adems de aportar riqueza yempleo como resultado fundamental de su actuacin, pueden y deben realizarprcticas de transparencia en su gestin y propiciar acciones sociales y medio-ambientales, lo que viene denominndose responsabilidad social de las empre-sas, RSE.

    La Unin Europea, ha venido adoptando diversos acuerdos en materia de res-ponsabilidad social de las empresas desde la Cumbre de Lisboa de Jefes deEstado celebrada en el ao 2000. El Libro Verde es un importante referente enla determinacin de lo que los europeos entendemos por RSE, cuando estable-ce que es la integracin voluntaria por parte de las empresas, de las preocu-paciones sociales y medioambientales en sus operaciones comerciales y susrelaciones con los interlocutores

    Pero, tambin, la RSE representa un nuevo modelo de empresa, que incorporaen la estrategia y gestin mayor dosis de transparencia y de participacin,mejorando las relaciones laborares, propiciando la empleabilidad como factorde permanente formacin y cualificacin de los trabajadores, y apostando poruna forma de trabajar ms social en la que se tiene en cuenta la conciliacin dela vida personal, familiar y laboral, y en la que se promueve la igualdad de gne-ro, eliminando discriminaciones por sexo. Todos estos aspectos mejoran la pro-ductividad de las empresas y facilitan un mayor nivel de adaptabilidad a loscambios resultantes de la competitividad en los mercados.

    En este sentido, el papel que quieren desempear los poderes pblicos es el defomento de la RSE, considerando las orientaciones de la Unin Europea y la opi-nin que resulte de las partes interesadas, empresarios, trabajadores y el con-junto de la sociedad.

    En este momento debemos destacar el trabajo que ha realizado el Congreso delos Diputados creando una Subcomisin sobre RSE cuyos resultados se tendrnprximamente.

    La Mesa de Dilogo Social, en la que se ha incorporado el tema de la RSE porparte del Gobierno y las organizaciones representativas de los empresarios y delos trabajadores.

    Y el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, que ha constituido en el ao2005 un Foro de Expertos en RSE, con la participacin de distintos Ministe-rios, grupos de empresas y organizaciones de la sociedad civil interesadas enRSE, cuyo objeto es elaborar durante el presente ao un documento que sir-va, con las conclusiones de la Subcomisin Parlamentaria y del DialogoSocial, para que el Gobierno de la Nacin disee la poltica de RSE quecorresponda a la Administracin General del Estado, que se va a concretar enactividades de fomento y estimulo a la adopcin de prcticas de RSE por par-te de las empresas, de las organizaciones y de las propias administracionespblicas.

    En la definicin de esta poltica de fomento, se tendrn en cuenta las lneasmarcadas por la nueva Comunicacin sobre RSE que apruebe la ComisinEuropea, en la que venimos trabajando los representantes de los Estadosmiembros.

    35. www.mtas.es/mujer

  • Anuario sobre Responsibilidad Social Empresarial en Espaa 200626

    Ministerio de Asuntos Exteriores yde Cooperacin

    Por su parte, el Ministerio de AsuntosExteriores y de Cooperacin36 determinen el Plan Director de la CooperacinEspaola 2005-2008 que las empresasque accedan a los Fondos de Ayuda alDesarrollo deben estar sujetas al cumpli-miento de las prcticas y regulacin en elmbito internacional (Organizacin Inter-nacional del Trabajo, Naciones Unidas,

    Organizacin para la Cooperacin y elDesarrollo Econmicos) y nacional relati-vas a la RSE. De hecho, la Secretara deCooperacin del Ministerio hace mencinexpresa de la RSE en varias de las estra-tegias del Plan Director, sealando suimportancia como mecanismo de mejoramedioambiental y de desarrollo de lospases del Sur o estableciendo la forma-cin en RSE como prioritaria para el apo-yo a la micro y pequea empresa de laeconoma social.

    Ministerio de Fomento

    Otros dos ministerios, Fomento y MedioAmbiente, han dado tambin pasosdurante el 2005 para introducir criteriosde RSE en las contrataciones pblicas,una herramienta que puede resultar unfuerte impulso en la transformacin delas empresas.

    EL PODER DE LAS CONTRATACIONES PBLICAS

    Tanto el Gobierno Central como varias administraciones autonmicas y municipales estn empezando a imponer criteriosde RSE a la hora de adquirir bienes o servicios. Con ello, las administraciones hacen uso de su poder como consumidorespara impulsar la responsabilidad social de sus proveedores y subcontratistas. Los criterios ms utilizados hasta ahora hansido los medioambientales, con las llamadas compras verdes, si bien paulatinamente se estn empezando a incluir crite-rios sociales.

    Como muestra de estas tendencias el Gobierno elabor en 2005 un Anteproyecto de Ley de Contratos del Sector Pblico, sobreel cual el Consejo de Ministros37 recibi el 16 de diciembre de 2005 un informe del Ministro de Economa y Hacienda. Durante supresentacin, el Gobierno destac la utilidad de la futura norma para promover el empleo de personas con especiales dificulta-des de insercin en el mercado laboral, eliminar desigualdades entre el hombre y la mujer, facilitar la formacin en el centro detrabajo y apoyar la poltica medioambiental impulsada por los poderes pblicos. La nueva ley tambin pretende suprimir barre-ras de entrada para acceder a los contratos y reducir los costes para los licitadores facilitando el acceso y tramitacin electr-nica mediante una nueva plataforma de contratacin del Estado38.

    En agosto de 2005 se hicieron pblicos los nuevos pliegos de contratacin del Ministerio de Fomento que, por primera vez, inclu-yeron objetivos sociales: estabilidad en el empleo, empleo femenino, empleo de discapacitados, aumento de la seguridad labo-ral; y objetivos ambientales. De acuerdo con el Ministerio, los nuevos pliegos tomaron en cuenta las recomendaciones de un Gru-po de Trabajo en el que participaron tanto las instancias competentes del Ministerio de Fomento como organizacionesempresariales (SEOPAN, ANCI, AERCO y TECNIBERIA) y sindicales.

    Segn los nuevos pliegos, se solicita a las empresas que cumplan ciertas condiciones en la fase de ejecucin de obras, dado quela legislacin comunitaria no permite la inclusin de criterios sociales en las fases anteriores del proceso de contratacin:

    El porcentaje de personal laboral fijo debe de superar el 40% de la plantilla

    El porcentaje de personal femenino sobre el total de los nuevos empleados que se contraten para la ejecucin del contratodebe de superar en 1 punto la media nacional del sector de construccin,

    El nmero de trabajadores minusvlidos debe de ser igual o superior al 2% (que es el mnimo propuesto por la Ley de Inte-gracin Social de los Minusvlidos (LISMI),

    Por ltimo, debe velarse por la salud y seguridad en la ejecucin de los trabajos.

    Como medida disuasoria del incumplimiento de estas condiciones de ejecucin de carcter social, se establece que el incum-plimiento ser considerado infraccin grave a los efectos del artculo 33.2 del texto refundido de la Ley de Contratos de las Admi-nistraciones Pblicas, lo que conllevara la suspensin de la clasificacin de la empresa adjudicataria en el caso de que:

    El porcentaje de trabajadores fijos no alcance el 20%,

    El porcentaje de trabajadoras no alcance la media nacional en el sector de construccin,

    El porcentaje de trabajadores minusvlidos no alcance el 1% de la plantilla,

    En el periodo de un ao se hayan producido dos sanciones muy graves como consecuencia del incumplimiento de la legisla-cin en materia de riesgos laborales.

    Fuente: Salazar, A. (2005): Clusulas sociales en los nuevos pliegos de clusulas administrativas particulares. Gabinete Tcnico de la Secretara Gral. de Infra-estructuras del Ministerio de Fomento. Madrid. Presentacin efectuada en el marco del Grupo de trabajo sobre la acreditacin del cumplimiento de crite-rios de responsabilidad social por parte de las empresas proveedoras del Gobierno de Aragn, organizada por el Departamento de Economa, Hacienda yEmpleo y Fundacin Ecologa y Desarrollo, 14 noviembre 2005.

    36. www.mae.es

    37. www.la-moncloa.es/ConsejodeMinistros

    38. El Pas. Espaa, 16 de diciembre de 2005.

  • 27Anuario sobre Responsibilidad Social Empresarial en Espaa 2006

    LA COMISIN NACIONAL DELMERCADO DE VALORES

    La propuesta de Cdigo Unificado

    Durante el ao 2005 el grupo de trabajoespecial sobre buen gobierno de lassociedades cotizadas, dirigido por el pre-sidente de la CNMV e integrado pormiembros de la Administracin y del sec-tor privado, ha estado elaborando unapropuesta de Cdigo Unificado de Reco-mendaciones sobre Buen Gobierno de lassociedades cotizadas en bolsa. El Cdigose abri a consulta pblica en enero 2006,y se prev su aprobacin definitiva antesdel 31 de marzo de 2006.

    El Cdigo tiene como objeto armonizar yactualizar las recomendaciones conteni-das en los informes Olivencia y Aldama, eincorporar las recomendaciones y pro-puestas aprobadas con posterioridad porla Comisin Europea y otras instituciones.Teniendo en cuenta que una de las quejashistricas de las grandes compaas coti-zadas es la diversidad de cdigos queexisten en el mundo, una de las noveda-des del Cdigo es la transposicin enEspaa de las recomendaciones que hizoen su da la Unin Europea en temas debuen gobierno corporativo.

    El Cdigo menciona en su introduccinque sus recomendaciones se limitan algobierno interno de las empresas cotiza-das sin aventurarse en el terreno de laresponsabilidad social empresarial (RSE).Esta afirmacin muestra una comprensinrestrictiva de la responsabilidad social yaque la RSE tambin se refiere a las rela-ciones de la empresa con sus accionistas,por lo que el gobierno corporativo consti-tuye una de sus piedras angulares.

    Consecuentemente, dos de las recomen-daciones del Cdigo son especialmenterelevantes para el debate sobre la res-ponsabilidad social empresarial en nues-tro pas:

    La referente al nmero de consejerosindependientes. El nuevo cdigo esta-blece que el nmero de independientesdeber ser al menos tres y representa-r un tercio de todos los miembros del

    consejo de administracin. Se reco-mienda que sean designados por unacomisin de nombramiento de formatal que no slo sean independientesdel capital sino tambin de la direccinde la empresa, con lo que se esperaque tengan ms incentivos para abor-dar las expectativas de los accionistasminoritarios.

    La referente a la presencia de mujeresen el consejo (analizada en mayor pro-fundidad en la seccin Participacin demujeres en los consejos de adminis-tracin). El borrador contempla que,cuando el nmero de consejeras seaescaso o nulo, las empresas debanexplicar los motivos y las iniciativaspara corregir esa situacin. Adems,insta al comit de nombramientos paraque vele por la bsqueda 'deliberada-mente' de mujeres cuando quedenvacantes. Adems, el informe anual debuen gobierno deber incluir un apar-tado especfico sobre diversidad degnero que detalle la distribucin porsexos del personal de la sociedad entodos las categoras y niveles y loscambios producidos en esa distribu-cin a lo largo del ejercicio. Se trata deuno de los aspectos ms novedosos delnuevo Cdigo. Adems del proyectoespaol, slo el cdigo sueco incluyeuna recomendacin para favorecer lapresencia femenina en los consejos.Aqu est todo por hacer. El 74,3% delas firmas del Ibex no tiene ni una solaconsejera y en las que s hay stas sonuna clara minora. FCC tiene el rcordcon cuatro mujeres de un total de 15consejeros39.

    Por ltimo, vale la pena mencionar algu-nas de las ausencias del cdigo. A pesarde que en la introduccin el Cdigo reco-noce la importancia de disponer de unapoltica de responsabilidad social empre-sarial e incluye entre las competenciasdel consejo la de su aprobacin, no hacereferencia en ninguna de sus disposicio-nes a la responsabilidad del consejosobre la supervisin de la aplicacin de lapoltica RSE o a la conveniencia de identi-ficar, valorar y gestionar los riesgos yoportunidades asociados a aspectossociales, ambientales y ticos (SAE). Sinembargo, la importancia de la gestin de

    los riesgos SAE ha sido reconocida porotros cdigos de buen gobierno o direc-trices, por ejemplo en el Reino Unido,que son considerados por muchosexpertos como el listn sobre el quedeben de medirse las propuestas delCdigo Unificado.

    Concretamente, la Association of BritishInsurers (ABI) incluy esta recomendacinen sus directrices Disclosure Guidelines onSocially Responsable Investment40 publica-das en 2001, en las que describe el tipo deinformacin que los inversores social-mente responsables esperaban ver en losinformes anuales de empresas cotizadasrespecto a las responsabilidades de losconsejos, polticas, procedimientos y sis-temas de verificacin de los aspectos SAE.La importancia de ABI como prescriptorde buenas prcticas en su pas no debeser minusvalorada ya que representa msde 400 empresas aseguradoras, quecubren ms del 97% del mercado britni-co y que invierten ms de 1.100 billones delibras esterlinas en la bolsa.

    Tambin el British Combined Code on Cor-porate Governance41, publicado en 2003por el Financial Reporting Council, elregulador britnico en materia de gobier-no e informacin corporativa, aunque nohace referencia explcita a los riesgosSAE, s se refiere implcitamente a ellosal recomendar que, como parte de la eva-luacin de los procesos de control deriesgos de la empresa se verifique si noexisten riesgos significativos de tipo ope-rativo, financieros, de cumplimiento yotros riesgos (por ejemplo, de mercado,de crdito, de liquidez, tecnolgicos,legales, de salud y seguridad, medioam-bientales, reputacionales y de integridadcorporativa).

    La opinin de las empresas

    Las propuestas del nuevo Cdigo han sidotibiamente o incluso framente recibidaspor muchas empresas, que las hantachado de intervencionistas. a lo queManuel Conthe, presidente de la CNMV,se pregunt pblicamente cmo puedeser intervencionista algo que tiene carc-ter voluntario y respondi a las crticas

    39. Amaya Irbar (2006): La CNMV pone los consejos patas arriba: Ninguna firma del IBEX cumplira hoy las recomendaciones del nuevo Cdigo de Buen Gobierno, que an no es defi-nitivo, El Pas, 22 de enero de 2006.

    40. Association of British Insurers (2001): Disclosure guidelines on socially responsible investment. Association of British Insurers, Londres.

    41. Financial Reporting Council (2003): British Combined Code on Corporate Governance. Financial Reporting Council, Londres.

  • Anuario sobre Responsibilidad Social Empresarial en Espaa 200628

    afirmando que en Espaa se largamucho y se escribe poco42.

    El abanico de reacciones del sectorempresarial a las recomendaciones delCdigo ha sido amplio, mientras algunoscomo Bankinter reconocan que ve[n]positivo el Cdigo unificado de buengobierno y [] ya cumple el 90% de susmedidas 43 otros como BSCH manifesta-ban su temor de que tal y como estredactado actualmente, puede poner enpeligro la unidad que debe existir en elseno de los consejos de administracinde las empresas44. Botn no ha sido elnico banquero que ha criticado el Cdi-go. En esa misma lnea el presidente delBanco Popular, ngel Ron, dijo que estareglamentacin es una iniciativa enexceso reglamentista que deja en des-ventaja a las empresas espaolas frente asus competidoras internacionales. Rontambin critic que con ese intento decontrolarlo todo, la CNMV est dando unmensaje de desconfianza sobre losadministradores de las sociedades queno es bueno. Por su parte, el presidentede BBVA, Francisco Gonzlez, fue msmoderado al limitarse a pedir a la CNMVque las recomendaciones finales estnen lnea con la realidad45. Otras vocescrticas han sido las de Enrique Aldama,ex presidente de la comisin que lleva sunombre sobre recomendaciones de buengobierno, y el presidente de la asegura-dora Mapfre, Jos Manuel Martnez, queconsideran que el texto ha sido redactadoen trminos excesivamente reglamenta-rios y no de recomendacin46.

    De acuerdo a las declaraciones pblicasde varias empresas, las mayores quejasse refieren a que no tiene sentido que sehable del carcter voluntario del Cdigocuando, a la vez, se pide a las empresasque expliquen los motivos por los que nocumplen las recomendaciones. Tambinha recibido fuertes crticas la medida quesolicita que cuando el presidente de unaempresa sea a su vez consejero delegado,se nombre a un vicepresidente no ejecuti-

    vo de entre los consejeros independien-tes, que evaluara al propio presidente.Tampoco estn de acuerdo en las reco-mendaciones que animan a fijar unnmero determinado de consejeros, unporcentaje mnimo de mujeres o el totalde reuniones anuales que se deben cele-brar, y no creen conveniente que se con-sidere igual a todas las empresas, sintener en cuenta su tamao o actividad47.

    Como respuesta a las crticas, Conthedeclar que el Cdigo es perfectible yque en el borrador existen recomendacio-nes poco maduras. Conthe asegur quela calidad del documento no es homog-nea, y reconoci que 'hay medidas msmaduras que otras. Segn el presidentede la CNMV, las que ataen al consejo deadministracin estn ms maduras quelas recomendaciones dirigidas al Gobier-no o las relativas a la cotizacin de lassociedades integradas en grupo, dondehay menos madurez y sern objeto dems debate.48

    Al trmino del plazo de audiencia pblicaa finales de febrero, se haban recibido 82alegaciones. Manuel Conthe destac que5 de ellas pertenecan a inversoresextranjeros. Conthe incidi en que secambiarn algunos tiempos verbales delas recomendaciones, de manera que evi-tarn el debern. Sin embargo, comen-t que hay muchas observaciones nojustificadas y que parten de un error con-ceptual e insisti en el tema de que lasrecomendaciones son voluntarias. Tam-bin expres su sorpresa de que la CEOEsea tan crtica con el Cdigo, aunque entrelas 82 alegaciones recibidas no haba nin-guna de la patronal. Por ltimo destacque respecto de las alegaciones de inver-sores extranjeros, las cinco apoyaban eltexto y que, incluso en algn caso, consi-deraban que se queda corto49.

    La respuesta de las empresas cotizadasen el Ibex al borrador del Cdigo no sehizo esperar y 22 empresas que en con-junto representan ms del 80% del Ibex

    35 y 5 no presentes en el ndice, han remi-tido una carta al presidente de la Comi-sin Nacional del Mercado de Valores,rechazando el proyecto de Cdigo Unifica-do de buen gobierno de las empresascotizadas, al considerar que es muyintervencionista.

    Como respuesta a esta misiva ManuelConthe calific de pintorescas las crti-cas transmitidas a travs de BME por lasgrandes compaas, a las que, adems,denomin un grupo innominado. Segnel presidente de la CNMV, no sabemos niquines son, ni cuntas [empresas] son,ni qu porcentaje del Ibex 35 represen-tan. Conthe asegur que el documento leha llegado identificado slo bajo BME,pese a que este organismo ha sealadoen los ltimos das que a l se han adhe-rido 26 de las 35 compaas del Ibex 3550.

    Otras compaas como FCC y REE hanenviado alegaciones individuales. El Clubde Excelencia en Sostenibilidad, foro deresponsabilidad social empresarial cuyos20 miembros representan el 18% del PIBespaol, tambin se ha pronunciado en lalnea de las empresas del Ibex 3551.

    Por otra parte la CEOE hizo pblico unescrito, en el que emplazaba al vicepresi-dente econmico, Pedro Solbes, para qued las rdenes e instrucciones precisaspara que el texto se someta a una pro-funda reconsideracin en el fondo y en laforma. Para Cuevas, el Cdigo Unificadoparece realizado partiendo de un men-saje de desconfianza en los administra-dores de las empresas, por cuanto todosellos pasan a ser considerados, comopersonas sospechosas a vigilar y haciael sistema de economa de mercado. Enla carta enviada a Solbes, CEOE afirmaque el Cdigo usa un lenguaje imperati-vo, ms propio de un reglamento que deunas recomendaciones, con un impactoen el buen gobierno corporativo, cuandomenos, dudoso y, en general, irrelevan-te52. Por su parte el presidente de la Aso-ciacin Espaola de Normalizacin y Cer-

    42. Europa Press (2006): Conthe responde a las crticas afirmando que en Espaa se larga mucho y se escribe poco. Europa Press, 13 de febrero de 2006.

    43. Europa Press (2006): Bankinter ve positivo el cdigo unificado de buen gobierno y dice que ya cumple el 90% de sus medidas. Europa Press, 19 de enero de 2006.

    44. EFE (2006): Botn critica el nuevo cdigo de buen gobierno de la CNMV. Agencia EFE, 7 de febrero de 2006.

    45. Op. Cit.

    46. Universia Knowledge@Wharton (2006): Espaa quiere decir adis a los escndalos financieros. Universia Knowledge@Wharton, 8 de marzo de 2006.

    47. EFE (2006): Varias empresas del Ibex preparan un texto comn crtico con el Cdigo Conthe. Agencia EFE, 20 de febrero de 2006.

    48. Cinco Das (2006): Conthe reconoce que el cdigo de buen gobierno 'es perfectible'. Cinco das, 19 de enero de 2006.

    49. Cinco Das (2006): La CNMV recibe 82 alegaciones al Cdigo Unificado de Buen Gobierno. Cinco Das, 3 de marzo de 2006.

    50. Op. Cit.

    51. Expansin (2006): CEOE se opone al Cdigo Conthe: El nuevo cdigo de gobierno corporativo sigui ayer, justo cuando se cumpli el plazo para recibir las alegaciones al proyec-to presentado por la CNMV, levantando ampollas. Expansin, 1 de marzo de 2006.

    52. Op. Cit.

  • 29Anuario sobre Responsibilidad Social Empresarial en Espaa 2006

    tificacin (AENOR), Manuel Lpez Cache-ro, seal que el proyecto de Cdigo deBuen Gobierno elaborado por la ComisinNacional del Mercado de Valores (CNMV)cuenta con el mismo rechazo de losinterlocutores que evit en su momentola elaboracin y puesta en marcha de unanorma de responsabilidad social empre-sarial.53

    La CNMV se comprometi a analizar loscomentarios recibidos para redactar eltexto definitivo del Cdigo Unificado yaprobarlo. Su intencin es hacer pblicoun resumen con los comentarios recibi-

    dos a cada punto del proyecto, aunque sinidentificar su origen54.

    La opinin de los expertos

    Por su parte la mayora de los expertos engobierno corporativo han calificado elborrador como positivo. En opinin deJoan Enric, profesor de la escuela denegocios IESE, en Barcelona, los puntostratados son positivos y recuerda que eldocumento actual es slo una propuestaabierta al debate pblico, por lo que sepuede opinar antes de que se cierre el

    texto definitivo. En la misma lnea seexpresa el director del Centro de Gobier-no Corporativo del Instituto de Empresa(IE) en Madrid, Jos Lus lvarez, que serefiere al carcter voluntario en su apli-cacin. Por su parte, el Instituto de Con-sejeros-Administradores (ICA), que aglu-tina cerca de doscientos representantesde los rganos de administracin de lasgrandes sociedades espaolas, no sloha considerado que el Cdigo es un buenpunto de partida, sino que deberaampliarse y mejorarse a lo largo de unproceso de consulta pblica. Y sorpren-dentemente el ICA ha afirmado que el

    MS DEL 80% DE LA BOLSA ESPAOLA RECHAZA EL CDIGO CONTHE

    Empresas que en conjunto representan ms del 80% del Ibex 35 han remitido una carta al presidente de la Comisin Nacional delMercado de Valores, Manuel Conthe, rechazando el proyecto de Cdigo Unificado de buen gobierno de las empresas cotizadas, alconsiderar que es muy intervencionista y coarta la libertad de empresa, informaron a Europa Press en fuentes empresariales.

    La carta viene firmada por el presidente del holding Bolsas y Mercados Espaoles (BME), Antonio Zoido, e incluye un documen-to de 56 folios que cuestiona puntopor punto cada una de las recomendaciones recogidas en el proyecto de Cdigo Unificado, porlo que puede considerarse prcticamente como una enmienda a la totalidad.

    La carta ha sido suscrita por 22 de las empresas del Ibex, as como por cinco que no estn presentes en el ndice selectivo de laBolsa. En concreto, las empresas del Ibex que han estampado su firma en el documento son Teleci