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PRECIO AL PÚBLICO 15 PESOS AÑO 6 NÚMERO 69 FEB 15 COLUMNAS / BERNARDO FERNÁNDEZ_-BEF / ANTONIO MALPICA / DIEGO RABASA / RAQUEL CASTRO / KAREN CHACEK TEXTOS / CYNTIA VENEGAS / Ricardo Sánchez / ESTEBAN GOVEA / AUGUSTO LEDESMA ENTREVISTAS / RUTA SEPETYS / BENJAMIN LACOMBE LISTAS / LOS MÁS VENDIDOS / PARA VER Y OÍR / NOVEDADES DEL MES

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Lee+ se crea con la idea de tener una publicación incluyente y accesible, que acerque a los lectores que visitan nuestras librerías a lo mejor del arte, la cultura y el entretenimiento; es así que nuestro principal objetivo es desarrollar contenidos inteligentes que despierten la curiosidad del lector sin caer en la excesiva erudición o en el academicismo formal.

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PRECIO AL PÚBLICO 15 PESOS

AÑO 6 NÚMERO 69 FEB 15

COLUMNAS / BERNARDO FERNÁNDEZ__-BEF / ANTONIO MALPICA / DIEGO RABASA / RAQUEL CASTRO / KAREN CHACEKTEXTOS / CYNTIA VENEGAS / Ricardo Sánchez / ESTEBAN GOVEA / AUGUSTO LEDESMAENTREVISTAS / RUTA SEPETYS / BENJAMIN LACOMBE LISTAS / LOS MÁS VENDIDOS / PARA VER Y OÍR / NOVEDADES DEL MES

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ENVÍA TUS COMENTARIOS_ A [email protected] _VISITA WWW.REVISTALEEMAS.COM.MX_ WWW.MASCULTURA.COM.MX

Directora generalYara Sánchez de laBarquera Vidal

Editor ycoordinador editorialJorge Vázquez Ángeles

Director de arteVictor Baca Vargas

Cuidado editorialPerla Holguín Pérez

IlustracionesSalvador Verano

Difusión y promociónAlexis Jiménez Calderón

Consejo editorial Alberto AcharJorge Lebedev

Contacto y publicidad (55) 4437 [email protected]

Editor responsable: Yara Beatriz Sánchez De la Barquera Vidal, Información: 44 37 83 03, Ventas Publicidad: 44 37 83 03, Correo electrónico: [email protected], Distribución: Librerías Gandhi, S.A. de C.V., Dirección: Benjamín Franklin 98, Piso 1 y 3, Escandón, Delegación Miguel Hidalgo, 11800, Mexico, D.F. Número de Reserva al Título ante el Instituto Nacional del Derecho de Autor: 04-2009-051820092500-102. Certificado de Licitud de Título No. 14505 y Certificado de Licitud de Contenido No. 12078 expedidos en la Comisión Calificadora de Publicaciones y Revistas Ilustradas de la Secretaría de Gobernación. Registro Postal EN TRÁMITE. Preprensa e impresión: Multigráfica Publicitaria S.A. de C.V. en Avena núm.15 Colonia Granjas Esmeralda. Iztapalapa. C.P. 09810, México D. F. Título incorporado en el Padrón Nacional de Medios Impresos de la Secretaría de Gobernación. Queda prohibida la reproducción parcial o total, directa e indirecta, por cualquier medio o procedimiento, del contenido de la presente obra, sin contar con la autorización previa, expresa y por escrito del editor, en términos de la legislación autoral y, en su caso, de los tratados internacionales aplicables, la persona que infrinja esta disposición se hará acreedora a las sanciones correspondientes. El contenido de los artículos es responsabilidad de los autores.Hecho en México.

EDITORIAL+

LOS COLORESSi bien es cierto que las imágenes en blanco y negro —sean fotografías o películas— poseen el encanto de lo vintage y nos hacen revivir las atmósferas de tiempos pasados, la vida a color es inigualable, no hay manera de describir los cientos de colores que pueden apreciarse en un terreno de girasoles al atardecer, o las tonalidades que adquieren las nubes cuando cubren el sol. Antes de que se inventaran la radio y la televisión, la literatura fue, durante muchos siglos, el único medio de comunicación a colores, en una época en que el concepto “blanco y negro” no existía. ¿Cómo es eso? ¿El color ya existía en la literatura? Desde luego: la capa de la reina era roja y de un solemne gris las piedras de la ermita, se describían campos verdes y floridos, y así todas las cosas que pudieran observarse. Una literatura en blanco y negro era impensable.

Este nuevo número está dedicado al color de los libros. En su columna, Bef se concentra en los tonos rojos y negros de la literatura, los que pintan la bandera del género policiaco; Tortuga y Aquiles, de Antonio Malpica, discuten sobre cómo hasta el más inocente de los libros, visto a través de un filtro especial, puede convertirse en una pesadilla gracias a la dispersión cromática; Diego Rabasa, por su parte, habla de los casos clínicos expuestos por Oliver Sacks sobre personas cuyas mentes se inundan de colores al escuchar música, y de Paul Theroux y el análisis que hace sobre los colores primarios a lo largo de la historia en distintas culturas. Raquel Castro, quien se incorpora a partir de este mes al equipo de Lee+ para hablar de literatura juvenil, nos cuenta sobre los periodos de colores en que se sumerge dependiendo de los libros que ocupen su mente; por último, pero no menos importante, Karen Chacek, en Niños a ¡leer!, aprovecha el colorido propio de los libros infantiles para recomendarnos cuatro textos que van de la más amplia gama cromática al blanco y negro. En portada quisimos destacar el color en movimiento con el artista norteamericano Jackson Pollock en el momento de pintar con todos esos tonos industriales, de esmaltes metalizados.

Jackson Pollock/Getty Images®

EN BLANCOCyntia Venegas Santoyo

CUADERNOS DE COLORESRicardo Sánchez

NOTA ROJA Y OTROS TONOSNerd Plus/Bernardo Fernández, Bef

RUTA SEPETYSEntrevista

BENJAMIN LACOMBEEntrevista

DISPERSIÓN CROMÁTICAFábulas del tío Hofs/Antonio Malpica

CARNAVALInsomnio/Diego Rabasa

EL VESTIDO NEGROY OTRAS PRENDASEsteban Govea

LIBROS COMOPASTELES DE FRAMBUESAAdoleescentes/Raquel Castro

UNA BANDERA CONLOS COLORES DEL ARCOÍRISAugusto Ledesma

LECTURA TECNICOLORNiños a ¡leer!, Karen Chacek

JACKSON POLLOCKFrase napalm

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LOS AÑOS DE PEREGRINACIÓNDEL CHICO SIN COLOR

Haruki MurakamiTUSQUETS

ALMAS GRISESPhilippe ClaudelSALAMANDRA

Estoy en Suiza, a bordo del expreso más lento del mundo para conocer los glaciares. Me espera un recorrido de casi ocho horas. No veré otra cosa que los Alpes. El tren avanza lentamente. Desde sus ventanales puedo observar la inmensidad de las montañas cubiertas por la nieve. Los árboles, las casas, el pasto, la tierra, todo, absolutamente todo está cubierto de blanco. Los demás pasajeros contemplan la caída de los copos de nieve con la mirada de un bebé que ve por primera vez el mar. Pienso en los colores. Mi mente se traslada a los columpios donde solía pasar las tardes cuando era niña; por allá se encuentra el pasto, la que está acostada sin calcetines soy yo, mis ojos están cerrados. A un lado de mí, papá habla despacio y pone sus manos sobre mis pies, me está enseñando una meditación con colores. Tengo seis años, no sé que cada parte de mi cuerpo es de un color, que estoy aprendiendo a sentir la temperatura de cada uno sobre mí. Tengo seis años y nadie me ha dicho que la vida dependerá de mis emociones, que el enojo es amarillo y el azul marino representa a la mente.

Ahora lo sé: nuestro cuerpo es un océano de memoria sensorial. Los momentos que nos han dejado marcados viven en una parte de nosotros y son violetas, marrones, blancos y hasta dorados. Nuestra relación con los colores es algo tan orgánico que incluso

se usan para nombrar a la gente: Blanca, Violeta, Griselda y Rosa, tan comunes en México. En Japón uno puede llamarse Rojo, Azul, Verde o Amarillo. En Los años de peregrinación del chico sin color, los mejores amigos de Tsukuru se llamaban así. Eran chicos con personalidades distintas que, unidas, daban armonía a la vida de Tsukuru. En la universidad, Tsukuru fue el único que salió de casa para irse a vivir solo, aunque este no fue el motivo por el que sus mejores amigos, sin explicación, dejaron de hablarle. El alma de Tsukuru se apagó poco a poco, no le fue sencillo volver a tener amigos ni novia. Por su mente desfilaba una sola idea: suicidarse. Este tipo de momentos quedan en nuestra memoria sensorial y aunque transcurran muchos años y se pueda pensar que son temas superados, no es cierto. No reconciliarse con el pasado es una carga. Tsukuru bloqueó el pasado, pero cuando conoce a Sara, ella le pide que descubra las causas por las que sus amigos le dejaron de hablar. Entre sombras del pasado, sueños extraños y muertes, este libro nos acerca a los colores del pasado de un hombre gris.

La memoria sensorial no se reduce a experiencias sin resolver. Hay un gran espacio en nosotros para recordar las veces que hemos salido victoriosos de batallas tan grandes como hacer que una chica de la preparatoria nos volteé a ver. La adolescencia es una

LOS DÍAS DEL ARCOÍRIS Antonio Skármeta

PLANETA

BLANCA COMO LA NIEVE,ROJA COMO LA SANGRE

Alessandro D’Avenia DEBOLSILLO

etapa donde se descubren emociones que suelen ser transparentes, visibles, como en Blanca como la nieve, roja como la sangre, historia narrada a través de los ojos de Leo, un joven que mira el color de las emociones. El azul, para él, es el color de su mejor amiga. Para Leo el rojo, color del amor y la pasión, es sinónimo de: Beatrice. Cuando descubre que ella tiene una enfermedad mortal, realiza todo lo posible por hacerla feliz. Un despertar así nos hace descubrir el sabor de los colores, la gran iniciación al enfrentarnos a nosotros mismos para entender el mundo. Leo, por su parte, descubre de manera muy profunda el sentido de la vida y sus matices.

Nuestra memoria corporal va del interior al exterior. Somos parte de una porción de tiempo y espacio que jamás puede desligarse de la historia. Por ello las emociones colectivas, además de influirnos, pasan a formar parte de cómo vemos “lo que vemos”. Sociedades que han sufrido guerras tienen miradas cuyas sombras o miedos son similares. No hay gente blanca ni negra, simplemente hay gente gris. Bajo esta idea Philippe Claudel escribe Almas grises, historia que se desarrolla en un pequeño pueblo de Francia. Guiados por la voz de un policía que intenta reconstruir la muerte de la pequeña y hermosa Belle, ocurrida veinte años atrás, en la búsqueda por conocer a detalle lo ocurrido, nos trasladamos al año 1917. En esta historia no hay personajes buenos, todos tienen sombras, las circunstancias los han arrastrado a ser víctimas, son personas con dolor, personas cuyo pesar es la muerte, y aunque tienen corazón, ese corazón está vacío.

Contrario a lo gris y llena de contrastes luminosos, Los días del arcoíris, de Antonio Skármeta, nos lleva a Chile cuando Augusto Pinochet quiso legitimar su régimen por medio de un voto a favor, ¡un sí! La historia comienza cuando un maestro imparte clase y de pronto la policía se lo lleva por estar en contra del régimen del dictador. Nico, su hijo, atestigua la acción. Su enamorada, Patricia Bettini, hija de un conocido publicista, le acompaña y sin darse cuenta impulsa a su padre a escuchar las voces de la gente con las que logrará desarrollar la campaña para que la gente vote “NO”. El logotipo de la campaña: un arcoíris. El nacimiento de una sociedad esperanzada bailando al ritmo del no, ideologías distintas con el mismo objetivo: un cambio social, el bien común.

He llegado a mi destino final. El tren ha pasado por 91 túneles y 291 puentes. Es tiempo de bajar a St. Moritz. Me perderé en el blanco hasta quedar vacía, hasta que el hielo no deje espacio para ninguna idea, ninguna sensación, ninguna palabra en la mente, sólo silencio y nieve. +

Por Cyntia Venegas Santoyo

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CUADERNO DE FLORESLuis Felipe Lomelí

TUSQUETS

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EL CUADERNO ROJOPaul Auster

BOOKET

FRAGMENTOS DE UNCUADERNO MANCHADO DE VINO

Charles BukowskiANAGRAMA

Son cuatro cuadernos de colores colocados sobre una mesa: El cuaderno rojo, El cuaderno dorado, Cuaderno de flores y Fragmentos de un cuaderno manchado de vino. ¿Qué tenemos aquí? Archivos. Literatura, ener-gía y modalidades del deseo en distintos documentos. Anotaciones, sueños, libros hechos desde diferentes temporalidades de escritura. Acontecimientos sobre la piel de la vida, no importa si —verdad o ficción— su-cedió, se trata de escribir una realidad liberada o llena de potencia en alguna otra parte.

Un número equivocado es el acontecimiento que da origen a El cuaderno rojo, de Paul Auster. Existe la posi-bilidad de una trama alterna a partir de una llamada de teléfono, aunque sea un número equivocado. El mundo habla con el lenguaje del misterio y del azar. De eso es-cribe aquí Auster, nuestro cazador de coincidencias, en su cuaderno rojo (como el cuaderno donde Quinn va haciendo sus trazos y anotaciones en Ciudad de cristal): detectives que no lo son, suplantaciones de identidad, recuerdos de juventud, laberintos afectivos, espectros, historias de infancia bajo una tormenta de relámpagos o en un estadio de béisbol… Narraciones configuradas desde diferentes representaciones del azar. Cruces, in-tersecciones, la ausencia del padre. Anécdotas contadas en pocas páginas sobre sujetos engarzados por el tiem-po, el espacio y las casualidades del destino; historias

que de pronto alcanzan esa dimensión desconocida en donde lo fantástico transcurre como un acontecimiento verdadero plagado de magia y de aquellas conexiones inconscientes que nunca son certeramente rastreables a la primera mirada. “Esto, aunque sea ficción, ha sucedi-do en verdad.” Sí, querido Paul, el mundo, la realidad y la vida son misterios azarosos.

El segundo es Cuaderno de flores, de Luis Felipe Lomelí. Aquí un ingeniero mexicano viaja de Guadalajara a Mede-llín buscando suerte en un empleo temporal. Detrás de su avión se va quedando México y Carolina, su mujer. El futuro se abre ante lo incierto cuando José Manuel arri-ba a Colombia para laborar en el único empleo que pudo conseguir. Nada en su llegada parece sencillo: guerrilleros, paramilitares y sicarios se enfrentan por todas las calles de la ciudad. José Manuel se encuentra con una extraña sen-sación de libertad entre la violencia y el terror producido por el estallido social. Poco a poco se va posicionando y acomodando en él una singular maldad. Así transcurren los días, con la intensa realidad marcada por la guerra, cuando conoce a una chica: Natalia. La incandescencia lle-ga a su punto más alto y José Manuel decide quedarse más de lo previsto. Justo cuando todo está encendido, cuando todo arde en llamas, él tendrá que decidir si regresar a Mé-xico con su prometida a vivir una vida segura, tranquila, o quedarse con Natalia en la región del fuego.

En los Fragmentos de un cuaderno manchado de vino se encuentran treinta y seis archivos y piezas que cons-tituyen una narrativa imprescindible para todo escritor maldito que sigue las andanzas y peripecias de Bukows-ki. Piezas o archivos en las cuales se logra la silueta, o el contorno de un carácter autobiográfico de Charles Bukowski: manifiestos literarios que rebasan aquellos “asuntos” que Hank ha desplegado en otros libros. Mientras avanzamos en la lectura nos damos cuenta de que, de pronto, estamos ante eslabones fundamenta-les en el desarrollo de su estética. Emocionan piezas de carácter experimental (como la que da título al libro), su amplio conocimiento de la “alta cultura” (la que siempre despreció, atacó y criticó ferozmente), y el re-lato en el que cuenta su amistad con John Fante. Hay en este libro manchado de vino un tono surrealista que hace de hilo conductor en ciertos textos. El viejo Hank, el entrañable Bukowski y todos los demás semblantes que han existido al interior de su obra se encuentran reunidos, ante la energía de sus excesos, su potencia y su dinamismo, en este cuaderno-libro. En estos frag-mentos hay joyas, sin duda, un gran material que este grandioso viejo indecente nos ha legado.

Un documento valioso es El cuaderno dorado, de Doris Lessing, en el que acontece la historia de la escritora Anna Wulf y de sus cuatro cuadernos en donde ella va narrando y documentando todos los rasgos de su vida. Ficción de su propio espacio interior —exploración de la ruptura mental, social y espiritual de su tiempo—, que intenta estructurar y amarrar en un quinto cuader-no, el cuaderno de color dorado. Cada cuaderno tiene un sentido: el cuaderno negro trata sobre las mujeres libres, en donde explora la feminidad, su feminidad, el ser mujer, mientras alterna la narración con su expe-riencia en África; en el cuaderno rojo se despliega el relato de su vida como militante en el partido comu-nista británico y la izquierda europea; en el cuaderno amarillo está la novela en desarrollo que contiene su trágica y dolorosa historia de amor; el cuaderno azul es el diario donde Anna anota recuerdos, sueños y senti-mientos emergentes de su vida afectiva. Regresando a cada cuaderno de vez en vez es como ella va hilando, superponiendo y ensamblando la novela que corres-ponderá al cuaderno dorado. A lo largo de la trama se nos aparecerán dos temas principales y recurrentes: el primero corresponde a la lucha de las mujeres por un lugar ante los conflictos laborales, la sexualidad, el amor, la maternidad y el movimiento feminista como política; el segundo, me parece, es una justa crítica des-de un amplio análisis de los errores y excesos del comu-nismo y del Partido Comunista en la Inglaterra de los años cincuenta. +

Por Ricardo Sánchez

EL CUADERNO DORADODoris LessingDEBOLSILLO

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Conocí a Eugenio Aguirre en la Semana Negra de Gijón hace varios años. Desde entonces somos buenos amigos. En aquella ocasión platicábamos de sus novelas policíacas. Una de ellas se llama Los niños de colores, brutal historia sobre tráfico de órganos humanos.

—Ah, como la canción punk—le dije.—No la conozco —contestó.

Efectivamente, la legendaria banda española Los Toreros Muertos cantaba, mejor dicho berreaba una canción con ese mismo título. La pieza era un chiste privado entre bandas de la llamada movida madrile-ña, que tomó por asalto la escena cultural española tras la muerte de Franco. Y aunque parece una burla evidente a Mecano, nunca nadie me ha podido ex-plicar del todo el chascarrillo.

Los mismos Toreros, lidereados por el carismático y delirante Pablo Carbonell, se popularizaron en Mé-xico hace ya casi treinta años con aquella muestra de poesía pura llamada “Mi agüita amarilla”. Como amarilla es la portada de El Abogánster, la más re-ciente novela de Eugenio Aguirre, que trata sobre un insólito personaje, Bernabé Jurado.

Jurado fue un abogado penalista mexicano de media-dos del siglo XX. Sus métodos ilegales y leguleyos le ganaron el apodo que titula la novela. Defensor de asesinos, estafadores y demás criminales, se hizo fa-moso por dos anécdotas. La primera cuenta que en una ocasión pidió un expediente judicial que conte-

nía la evidencia incriminatoria: un cheque sin fondos. Ante la mirada atónita de todos en el juzgado, se co-mió el papel. Su cliente salió libre por falta de pruebas.

La otra fue que sacó a William Burroughs de la cár-cel de Lecumberri cuando en septiembre de 1951 el futuro escritor beat asesinó imprudencial y estúpi-damente a su esposa jugando a Guillermo Tell con una pistola, en un apartamento de la Colonia Roma (pero ese es el tema de mi novela gráfica Uncle Bill, así que no abundo más). Bernabé Jurado fue un pro-tagonista consuetudinario de la nota roja.

El decano de la nota roja en México fue Eduardo Téllez, apodado el Güero, legendario periodista que parecía salido de una novela de Luis Spota. El llorado José Ramón Garmabella, heredero natural del Güero, escribió un anecdotario delicioso so-bre el legendario cronista llamado El Güero Téllez ¡Reportero de policía!

En el libro, Téllez cuenta con la sabrosura de un buen conversador sobre su vida como reportero de la fuente criminal. Garmabella, muerto hace cinco años, recoge la voz del Güero para deleite de sus lectores. Desde el asesinato de Trotsky hasta la his-toria del estrangulador de Tacuba, el veterano re-portero pinta una colorida acuarela del submundo del crimen y el hampa de los años cuarenta y cin-cuenta en la que predominan los colores rojos.

Las historias de Téllez van de lo delirante, como la del empresario que llenó un avión de empleados suyos a

quienes había comprado seguros de vida a su nombre sólo para sabotearlo, esperando que se estrellara, has-ta la resolución de un caso en el que el propio perio-dista fungió de detective como en una novela negra.

Hablando de novelas negras, Patricia Valladares pu-blicó el año pasado Tan frío como el infierno, policial que inicia una serie protagonizada por la detective Milena Ruiz, ex judicial metida a investigadora pri-vada. Las novelas de género (policiaco, ciencia fic-ción, terror, fantasy...) escritas por mujeres siempre son bienvenidas. Patricia no decepciona, la historia va duro y al hocico. Violenta y sin concesiones bara-tas, la serie promete colocarse entre los favoritos de los lectores mexicanos del género negro.

Para ellos, recientemente se publicó Vivir y morir en USA, los mejores cuentos policiacos de Akashic Noir, antología que reúne treinta y dos cuentos de la célebre colección de la editorial Akashic, dedicada a hacer compilaciones “geográficas”.

Me explico: cada volumen está dedicado a una ciudad y los autores de policiaco que la habitan. Así, hay desde Baltimore Noir hasta Seattle Noir, y cada volumen reúne a un puñado de narrado-res oriundos del lugar de marras para escribir un cuento sobre su terruño. La colección no se limita a ciudades gringas. Toronto, Moscú, Bombay, Ma-nila y hasta la Ciudad de México han sido tema de las antologías de Akashic.

Ahora, una selección de los mejores cuentos situa-dos en los Estados Unidos es traducida al español para deleite de los lectores hispanoparlantes. Lo que parece la Selección Nacional de escritores po-liciacos gringos es además traducida por su con-traparte mexicana: cada una de las historias fue trasladada a nuestro idioma por un narrador local en un intercambio cultural sin precedentes. (No puedo dejar de preguntarme cuántos escritores norteamericanos serían capaces de traducir cuen-tos del español, pero esa es otra historia).

Hablando de negro, ¿ya les dije que Bernardo Es-quinca es el mejor cuentista de horror de mi gene-ración? ¿Y que su último libro, Mar negro, es una delicia? ¿No?

El cómic del mes: Sexo, a eso sabe la reina, compi-lación de caricaturas y dibujos eróticos de Jis (to-dos de un tono rojo subido). Jis es un genio y este libro lo demuestra. +

MAR NEGROBernardo Esquinca

ALMADÍA

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LOS+VENDIDOS GANDHIFICCIÓN NO FICCIÓN

EL CAPITAL EN EL SIGLO XXIThomas PikettyFCEEl lector encontrará en estas páginas un muy detallado análisis de cómo se han distribuido el ingreso y la riqueza en el mundo, desde el siglo XVIII y hasta nuestros días. A partir de una rica base de datos económicos de una veintena de países disponible en línea para quien quiera profundizar en tal o cual asunto, y con certeras pinceladas literarias de Balzac y Austen que sir-ven para dar ejemplos de cómo las sociedades han entendido su relación con el dinero, Piketty hace un minucioso recorrido histórico y estadístico para identificar ciertos patrones en el proceso de acumulación del patrimonio.

YO SOY MALALAMalala YousafzaiPATRIAYo soy Malala es el excepcional relato de una familia desterrada por el terro-rismo global, de la lucha por la educación de las niñas, de un padre que, él mismo propietario de una escuela, apoyó a su hija y la alentó a escribir y a ir al colegio, y de unos padres valientes que quieren a su hija por encima de todo en una sociedad que privilegia a los hijos varones. A los dieciséis años, Malala se ha convertido en un símbolo global de la protesta pacífica, y es la ganadora más joven de la historia del premio Nobel de la Paz.

¡CREAR O MORIR!Andrés OppenheimerDEBATE¿Qué debemos hacer como personas y países para avanzar en la eco-nomía de la innovación? ¿Qué debemos hacer para producir innovado-res de talla mundial, como Steve Jobs? Andrés Oppenheimer explora los secretos de las brillantes trayectorias de varios innovadores en la actualidad. Entre otros, analiza casos como el de Pep Guardiola o el chef Gastón Acurio, quien convirtió la comida peruana en un motor de crecimiento económico.

Y COLORÍN COLORADO...Odin DupeyronDISIDENTEY colorín colorado este cuento aún no se ha acabado se editó por pri-mera vez en el año 2001 y desde esa primera edición ha sido leído y releído, regalado, prestado y recomendado por lectores de todas las edades, de todos los géneros, de distintas religiones, preferencias y países. Se ha convertido en best-seller nacional con más de ciento cin-cuenta mil ejemplares vendidos en menos de cinco años, y ha tocado profundamente el corazón y la vida de miles de personas.

AMARRES PERROSJorge G. CastañedaALFAGUARAAmarres perros es el testimonio de la vida política y cultural de Mé-xico, desde los años cuarenta del siglo pasado hasta nuestros días. Es un minucioso análisis político, histórico, familiar y personal de un hombre que ha sido pieza clave en el camino hacia la democracia en México, Jorge G. Castañeda. El movimiento del 68, sus años en París, su encuentro y amistad con Carlos Fuentes y García Márquez, de quien dice, “pensé haber sido su amigo, sin haberlo sido nunca”.

ADIÓS A LOS PADRESHéctor Aguilar Camín RANDOM HOUSE La foto anticipa y esconde la historia de una familia. Siguiendo los brillos que esa foto abre en su memoria, Héctor Aguilar Camín ha producido un texto de entrañable intimidad y transparencia sobre las huellas familia-res, sobre la urgencia personal de una narrativa capaz de decir quiénes fueron tus abuelos, cómo se conocieron tus padres, por qué se casaron, por qué se separaron, por qué fueron como fueron y por qué eres como eres. Todos hemos imaginado alguna vez esa indagación.

ADULTERIOPaulo CoelhoGRIJALBOA pesar de que parece tenerlo todo, Linda no se siente feliz. Su ma-trimonio con un hombre adinerado, un físico envidiable, dos hijos, una bonita vivienda en Suiza y un buen trabajo como periodista no son motivos suficientes para otorgarle la satisfacción personal que tanto ansía. Por otra parte, cuando piensa en sí misma de forma objetiva, es capaz de darse cuenta de todo lo que tiene, aunque a su vez siente remordimientos por no saber disfrutarlo.

MILENA O EL FÉMUR MÁS BELLO DEL MUNDOJorge Zepeda PattersonPLANETA La belleza de Milena también fue su perdición. Convertida en esclava sexual desde la adolescencia, intenta huir cuando muere su protector, un magnate de la comunicación que sufre un fallo cardiaco mientras hace el amor con ella. En su angustiosa fuga, se cruza con los Azules, un trío de justicieros formado por el periodista Tomás Arizmendi, la política Amelia Navarro y el especialista en alta seguridad Jaime Lemus.

EL PSICOANALISTAJohn KatzenbachZETA BOLSILLO “Feliz 53 cumpleaños, doctor. Bienvenido al primer día de su muerte”. Así comienza el anónimo que recibe Frederick Starks, psicoanalista con una larga experiencia y una vida tranquila. Starks tendrá que emplear toda su astucia y rapidez para, en quince días, averiguar quién es el autor de esa amenazadora misiva que promete hacerle la existencia imposible. De no conseguir su objetivo, deberá elegir entre suicidarse o ser testigo de cómo, uno tras otro, sus familiares y conocidos mueren por obra de un asesino, un psicópata decidido a llevar hasta el fin su sed de venganza.

LA FIESTA DE LA INSIGNIFICANCIAMilan KunderaTUSQUETS Proyectar una luz sobre los problemas y a la vez no pronunciar una sola frase seria, estar fascinado por la realidad del mundo contemporáneo y, a la vez, evitar todo realismo, así es La fiesta de la insignificancia. Quien co-nozca las obras anteriores de Kundera sabe que en él no son en absoluto inesperadas las ganas de incorporar en una novela algo. En esta novela Kundera ve por fin plenamente cumplido su viejo sueño estético, que puede leerse como un sorprendente resumen de toda su obra.

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UNOS PRISMÁTICOS,UNA MADAME Y NUEVA ORLEANS

ENTREVISTA con Ruta Sepetys

Hay algo en las historias de burdeles, bajos fondos y adversidades que fas-cina. ¿Por qué será? Tras el éxito abrumador de su primera novela Entre tonos de gris, Ruta Sepetys, escritora estadounidense de origen lituano, buscaba un sitio dónde refugiarse después de haber escrito sobre temas tan personales y emotivos. El día de su cumpleaños le regalaron unos an-tiguos prismáticos de ópera fabricados por un joyero de Nueva Orleans. Dentro del estuche original, un nombre grabado llamó la atención de la escritora: Willie. A tal grado llegó su obsesión por saber más sobre los prismáticos y estos personajes, que contrató a un investigador que en poco tiempo descubrió que el destino del joyero quedó sellado el día que comió una docena de ostras que le provocaron la muerte por envene-namiento, y que la propietaria de los prismáticos pasó buena parte de su vida en el Barrio Francés de la principal ciudad de Luisiana. Con estos datos, a Ruta no le fue difícil elegir Nueva Orleans como sitio de reposo.

Un día, una repentina lluvia la sorprendió en la calle. A toda prisa entró a una librería para guarecerse. De pronto se encontró un libro en el mostra-dor (¿o deberíamos decir que el libro la encontró a ella?) sobre la historia de la última madame de Nueva Orleans. Devoró el libro de una sentada y los datos que de nueva cuenta había hallado, trazaron el camino para que Ruta emprendiera la pesada tarea de documentar una historia sobre la vida de una joven de diecisiete años, Josie Moraine, hija de una prostituta, protagonista de El color de los sueños (OCEANO).

“El libro es sobre esperanza y libertad, y sobre la gente en Nueva Orleans que trata de ser algo que no es”, dice la autora, hija de un refugiado litua-no que escapó de las atrocidades de Stalin y que tras vivir nueve años en campos de refugiados, vino a Estados Unidos como inmigrante: “A pesar de la familia en que nació, Josie quiere construir su propio futuro, quiere ser la autora de su propio destino y decide que quiere ir a la universidad, pero se ve enredada en la investigación de un homicidio.”

Ambientada en la década de 1950, El color de los sueños transcurre entre dos ambientes distintos, quizás antagónicos, quizás afines: una librería y un burdel. “A Josie los libros le dan valor. Los personajes de los libros son como ella, y por primera vez el mundo es menos solitario, ya no se siente sola. En la librería toma el coraje que necesita para ir al burdel, de modo que lucha para no convertirse en parte de ese estilo de vida y crearse un futuro diferente. Trabajar por la mañana en la librería le ayuda a luchar por la tarde en el burdel.”

A lo largo de la novela, Josie se da cuenta de que si quiere salir adelante, debe romper con muchas cosas, incluida su madre y su oficio. “Yo creo que no nos definimos por la familia en la que nacemos”, dice Ruta: “A veces las familias que construimos pueden ser más fuertes que aquellas en las que nacemos. Por eso Josie decide que va a construirse una nueva familia, aunque al principio sea inventada, integrada por los personajes de los libros. Luego se da cuenta de que tiene la capacidad de crear una nueva familia y Cookie, su amigo de la librería, un conductor de taxi, se vuelve parte de ella. En 1950 que una joven fuera tan cercana a un taxista negro no era aceptable, pero ella descubre la verdadera persona que es, por lo que construye una familia muy peculiar, lo que después le dará el valor para salir de Nueva Orleans.”

La parte más complicada de la vida de Josie será decidir si deja a su madre o no: “Eso es difícil: darte cuenta de que puedes perder la única oportunidad que te queda en la vida si no dejas a un pariente, en este caso su madre.”

Así como en Entre tonos de gris los secretos son parte fundamental de la trama, también sucede en El color de los sueños. Definida como una divul-gadora de secretos, Ruta habla de su encanto por la ficción histórica: “Me fascinan los secretos. A lo largo de mi escritura y las entrevistas de investi-gación que he hecho para mis libros, he conocido a personas que han guar-dado secretos durante setenta y cinco años. Son dolorosos y destructivos. La gente que he conocido piensa que no les afectan, pero sí lo hacen. En mi primera novela, había personas que creían que el mundo nunca conocería su historia y los guardaban. En El color de los sueños cada personaje tiene un secreto, pero los otros no lo saben, creen que son los únicos con uno. Josie no se da cuenta de que su mejor amigo, Patrick, guarda un secreto y ella acaba juzgándolo mal. Si en una novela los secretos son un asunto delicado en la vida real es peor. Todos tenemos cosas que quizá no queremos contar al mundo. Descubrí que si compartimos nuestra historia, si es difícil o triste, nos ayuda a identificarnos con otras personas.”

Al final, la vida de Josie dependerá de sus propias decisiones, como ocurre en la vida real: “Creo que a través de Josie nos damos cuenta de que las deci-siones, por más difíciles que sean, pueden dar forma a nuestro destino, mol-dearlo, y que no podemos permitir que otros las tomen por nosotros”. +

Por Alexis Jiménez Calderón

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PREFIERO A LAS BRUJASEN VEZ DE LAS PRINCESAS

ENTREVISTA con Benjamin Lacombe

“Tengo que admitir que me gusta el rojo, un color verdaderamente fuer-te”, dice Benjamin Lacombe, ilustrador francés cuyos trabajos sobrepasan el mero acto de hacer dibujos para representar una historia: “Es el color de la interioridad, el que cada persona tiene en la sangre, en los labios y en la lengua. Es un color muy interesante, con muchas formas de expresión. Es el color de la pasión, del diablo. Y también es el color de las brujas.”

Benjamin utiliza los colores de manera narrativa, como un medio para con-tar una historia, como en Madama Butterfly (EDELVIVES), donde los colo-res azul y crema, al igual que el color de la mañana, predominan al inicio de la historia. Después, cuando ella despierta al amor, cuando se enamora de Pinkerton, la paleta se torna de colores cálidos, en contraste con los tonos oscuros, azul o violeta que toman por asalto las ilustraciones cuando Cio-Cio-San es abandonada por Pinkerton. Y a su muerte, Lacombe retoma los tonos del inicio, simbolizando la llegada de una nueva mañana.

“Fue lo mismo con Cereza guinda”, continúa Benjamin, mientras charla con Lee+ minutos antes del inicio de una firma de ejemplares que ha reunido a cientos de personas: “Por ejemplo hay un color café muy oscuro al principio, y cuando ella conoce al perro, justo después hay colores muy vívidos, brillan-tes, porque su vida se vuelve así a causa del perro. Y cuando éste se va, otra vez hay más colores cafés, y al final aparece el rosa porque hay una historia de amor. Así es como uso el color, para contar una historia.”

Su carrera inició al terminar sus estudios en la Escuela Superior de Artes Decorativas de París (ENSAD). Ante la falta de un libro que ilustrar, deci-dió hacer el suyo, precisamente Cereza guinda, que debutó por la puerta grande al obtener decenas de premios y ser reconocido por la revista Times como uno de los mejores libros para niños del 2007. El New York Times, por su parte, lo consideró como un libro ‘notable’. “Fue abrir las alas”, dice, al tiempo que sonríe.

Otro distintivo de su obra son los volúmenes de gran formato, sus preferi-dos, en los que puede expresar todos sus sentimientos: “Siempre decido el tamaño y el tipo de papel, hago los diseños y escribo la mayor parte de mis libros. Soy un poco obsesivo con el control, porque para mí un libro es una especie de viaje, desde la portada hasta el final. Cuando voy a una editorial tengo un proyecto muy específico.”

Cuando habla de libros de gran tamaño y formato, Benjamin no bromea ni escatima: Nuestra Señora de París, el célebre libro de Dumas, le costó tres años de trabajo continuo para producir las más de 100 imágenes que apa-recen en sus 670 páginas. O el caso de Los amantes mariposa, un libro que se despliega y alcanza los diez metros. “Así tiene que ser”, responde con una

sonrisa como de niño que ha cometido una travesura, “porque aunque sea muy difícil para la gente abrirlo por completo en una casa, este libro es como la ópera. La ópera no es chiquita, no es la vida, ¡es más grande que la vida!, tiene una gran voz, tonos altos, tonos bajos, maquillaje extravagante, luces, disfraces. Para poder expresar este espectáculo tenía que usar algo enorme, espectacular. Abres el libro y es como si nunca terminara, ese fue el objeto a realizar y por eso es tan especial. Tiene dos partes, como dos alas, como una mariposa. La primera se abre como un libro normal y la otra es como la metamorfosis de una mariposa. Es una metáfora de la historia.”

Cuando Benjamin habla de la ópera, se revela de pronto su gusto temprano por este género musical que alcanzó su mayor plenitud en el siglo XIX, tiene mucho que ver con su obra, con el simbolismo de sus trabajos, incluido el dejo de melancolía tan típico de ese siglo, reflejado en la mirada de sus per-sonajes: “Mi madre solía llevarme cuando yo tenía seis o siete años. Lo hacía porque a mi padre no le gusta la ópera, y no quería ir sola. La primera ópera con la que me descubrí llorando fue, precisamente, Madama Butterfly. Y quería expresar exactamente ese mismo sentimiento porque creo que si no tienes la voz, si no tienes la obra, tienes la historia y los personajes tan fuer-tes que sobrepasan décadas, culturas y países, por eso tenía tantas ganas de hacer este libro.”

El aria “Un bel di vedremo” con que finaliza Madama Butterfly es la preferida de Benjamin. Desde luego que sus gustos no se quedan sólo en historias tristes o melancólicas, como él mismo nos lo explica: “Cada libro es diferen-te. Algunos de ellos son dramáticos, los que más recuerda la gente, por la intensidad de las emociones fuertes, y quienes se sienten más conmovidos por ese tipo de historias son los niños. Siempre dicen ’¿puedes leerlo otra vez?’. También he hecho publicaciones no dramáticas como Melodía en la ciudad, o Balanceo de Navidad y Ruiseñor, muy positivas. Incluso en María Antonieta hay muchas cosas divertidas, hay recetas, peinados o cómo usar un lunar postizo.”

Hablando de los niños y los adultos, ambos sectores admiran y aprecian los libros de este joven de treinta y tres años nacido en París en 1982. Cons-ciente del impacto de sus obras, Benjamin se da tiempo de ir a colegios para convivir con los niños, aunque sabe que ambos públicos son difíciles: “En las sesiones de firmas veo sobre todo a muchos adultos porque los niños no quieren esperar dos, tres, cuatro horas por una firma, ya que no es im-portante para ellos. Cuando voy a escuelas en Francia, los chicos adoran los libros y son fans. También cuando hago concursos muchos niños pequeños participan. Tengo ambas audiencias.” +

Por Yara Sánchez de la Barquera Vidal

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Aquiles: Le agradezco mucho que haya aceptado. Siéntese aquí, por favor.Tortuga: No cante victoria aún. La verdad es que sigo sin estar convencido.Aquiles: Ya se lo dije. Condonadas todas sus deudas conmigo. Claro que vale la pena. “Probando... uno... dos... tres... rojo... amarillo... café...”Tortuga: ¿Dolerá?Aquiles: Nada más recuerde cuando lo sorprendí agarrándole la mano a aque-lla novia mía regiomontana.Tortuga: En mi defensa diré que estaba muy oscuro y que creí que era la mano de mi tía Remedios. Ya ve que es grandota y del norte y también vino a esa fiesta.Aquiles: Debí haberlo arrojado por la ventana. Pero no lo hice. Tiempo de pagar. “Negro... marrón... violeta...”Tortuga: Algo me dice que voy a lamentar no haber surcado los aires aquella noche. ¿Puedo ir al baño?Aquiles: No. Tome el libro. Y siéntese derecho. Mire hacia la lente de la cámara.Tortuga: ¿También están incluidos aquellos cinco mil pesos que...?Aquiles: Silencio, que ya está grabando. Ejem... buenas tardes, amigos de mi canal de videos. Tal y como lo prometí, estoy de regreso. Y en esta ocasión quiero documentar un experimento que, creo, revolucionará la forma de leer un libro. La he llamado, “La dispersión cromática en la narrativa contemporá-nea”. Aplaudan hasta el final, por favor. Ese que está ahí es nuestro conejillo de indias. Salude, por favor.Tortuga: Eh... si me permite un minuto...Aquiles: No. No se lo permito. Y siéntese derecho, que lo están viendo en El Cairo y en La Habana al mismo tiempo. Decíamos. “Dispersión cromática”. Y trata de lo siguiente. Tortuga: ¿Siempre usa ese tono tan amanerado cuando graba sus videos?Aquiles: Todos sabemos que el color interviene en una obra plástica creando un vínculo entre la obra y su receptor. Por ejemplo... miren ustedes este paisaje, que no tiene nada de especial. El cielo azul, el césped verde, la vaca color vaca... ¡oiga, no se levante!Tortuga: Es que no alcanzo a ver.Aquiles: ¿Y quién le dijo que usted tenía que verlo? Vuelva a su sitio. Y nosotros al dibujo, amigos. Ahora bien... ¿qué pasa si observamos esta obra a través de un filtro que nos obligue a verlo con tintes de un color en particular? ¿Por ejemplo... el rojo? Ajajá... algo ha cambiado, ¿cierto? Algo hay ahora de diabólico en esa vaca que antes sólo era una vaca feliz de Bob Ross. Ahora es una pesadilla de Goya.Tortuga: Está loco de remate.

Aquiles: Bien, pues lo mismo podemos hacer con la narrativa. Podemos utili-zar un prisma que proyecte, en cualquier texto, un sentimiento en particular. Haciendo que sea ese color el que predomine. Y para ello hemos invitado al sujeto a mis espaldas. ¿Podría sentarse derecho?Tortuga: Qué lata.Aquiles: Abra el libro que tiene en las manos y lea la primera página, que es un extracto de El Principito.Tortuga: ¿Esta página negra? ¿En serio? Y seguro quiere que lea en voz alta.Aquiles: No haga pasar a nuestra audiencia por el incordio de su mala dic-ción. Hágalo en silencio.Tortuga: Qué maldita lata.Aquiles: Amigos, no pierdan detalle.Tortuga: ¡Pero qué horrible abominación! ¿Cómo se atreve a hacerme leer esto tan despreciable?Aquiles: ¿Lo notaron, amigos? Ahora, si nos hace favor, lea la página siguien-te, la rosa pastel, que es un extracto de Los ciento veinte días de Sodoma.Tortuga: No se burle pero estoy conmovido hasta las lágrimas.Aquiles: Y eso, amigos, fue una demostración de la dispersión cromática en la literatura universal. Espero sus comentarios en mi blog. Tortuga: ¡Maldita brujería! ¿Cómo lo logró? Aquiles: Usando filtros ópticos, como expliqué al principio.Tortuga: Usted tiene pacto con el diablo.Aquiles: En realidad lo que tengo son fotos pixeleadas que disparan sentimien-tos específicos, y que pude poner detrás de cada página. Usted leía sin reparar en esas imágenes. Aquí la que estaba detrás de su lectura del Marqués.Tortuga: ¿Una foto de mi primera comunión? ¿De dónde sacó esto?Aquiles: Y aquí la que contemplaba sin darse cuenta mientras leía al pequeño Príncipe.Tortuga: ¿Mi tía Remedios como Dios la trajo al mundo? Maldito pervertido. ¡Ya decía yo que en esa fiesta no perdió el tiempo! Tengo que usar el baño. Discúlpeme con su audiencia, por favor.Aquiles: ¡Y eso es en venganza por los cinco mil pesos que perdió en Aca-pulco! Maldito estúpido. ¿A quién se le ocurre meterse a nadar con todo y cartera? ¡Comentarios en mi blog, amigos! +

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LOS+VENDIDOS GANDHIELECTRÓNICOS ARTE

CIENTO UN PUEBLOS BELLOS EN MÉXICOGuillermo García OropezaILUSTRADisfrute de un espléndido viaje a través de los pequeños grandes te-soros de un país deliciosamente exótico y poseedor de algunos de los sitios más hermosos del mundo. Ciento un pueblos bellos de México des-cubre desde milenarios asentamientos de las culturas precolombinas hasta los modernos y paradisíacos destinos de íntimas playas bañadas por las aguas turquesa caribeñas o del mar de Cortés.

MÉXICO MARAVILLOSOFernando De Haro LebrijaAM EDITORESLo maravilloso de México está en cada mañana, cada tarde y cada noche, su belleza se encuentra dibujada en su geografía arraigada en sus raíces, integrada en sus personas y desbordada en la magia de sus historias. Podemos ser tan hábiles para cambiar el matiz del panorama, reavivar la intensidad de un color o simplemente para pintar nuestra visión de otro.

THE SPIDER-MAN VAULTRobert GreenbergerRUNNING PRESSEsta vívida colección de imágenes y memorabilia se centra en una ex-ploración dinámica del personaje de Spider-Man, proporcionando una biografía completa a través de su desarrollo en los cómics, los medios de comunicación y la cultura. A partir de los cómics clásicos que han transitado a la gran pantalla, Spider-Man Vault es una completa colec-ción de arte extraída desde el fondo de los archivos arácnidos hacia los brazos de todos sus fans alrededor del mundo.

FRIDA KAHLOGerry SouterNUMEN Detrás de los retratos de Frida Kahlo se oculta tanto la historia de su vida como la de su obra. Es precisamente esta combinación lo que cautiva al espectador. La obra de Frida es testimonio de su vida. Pocas veces se puede aprender tanto acerca de una arista con sólo contemplar lo que inscribe dentro del marco de sus cuadros. Frida Kahlo es sin lugar a dudas la ofrenda de México a la historia del arte.

DÉCADATerence McNameePHAIDON Durante esta primera década del siglo XXI nos han bombardeado con imágenes de algunos de los sucesos clave que se han producido sobre la faz de la tierra. Un día cualquiera, un periódico recibe más de 6,000 fo-tografías. El 11-S en Manhattan, el tsunami del Océano Índico, los aten-tados en el metro de Londres y el reciente terremoto de Haití han dado lugar a algunas de las más desgarradoras escenas jamás captadas. Ahora ya no importa con qué se ha obtenido una imagen: un teléfono móvil, una cámara de televisión o un video doméstico. Todo vale.

¡CREAR O MORIR!Andrés OppenheimerDEBATE Con un sorprendente optimismo sobre el futuro de América Latina, Andrés Oppenheimer revela en este libro las claves del éxito en el siglo XXI, en que la innovación y la creatividad serán los pilares del progreso. ¿Qué debemos hacer como personas y países para avanzar en la economía de la innovación? ¿Qué debemos hacer para producir innovadores de talla mundial, como Steve Jobs?

SINSAJOSuzanne CollinsRBA El distrito 13 ha surgido de entre las sombras y quiere acabar con el Capitolio. Al parecer todos han tenido que ver con el meticuloso plan, todos menos Katniss. Katniss Everdeen ha sobrevivido de nuevo a Los Juegos. Gale ha escapado. Su familia está a salvo. El distrito 13 existe de verdad. Hay rebeldes. Hay nuevos líderes. El plan de rescate para sacar a Katniss de la arena del cruel e inquietante Vasallaje de los Veinticinco no fue casual, como tampoco lo fue que llevara tiempo formando parte de la revolución sin saberlo.

LA DIETA DEL METABOLISMO ACELERADOHaylie PomroyGRIJALBO Ésta no es una dieta de moda. Es un método clínicamente probado que se vale de la comida para combatir la obesidad, curar enfermedades crónicas y sanar un metabolismo dañado. Conocida como la gurú del metabolismo, Haylie nos recuerda que la comida no es el enemigo: la comida es, por el contrario, la rehabilitación que necesitas para revita-lizar tu metabolismo lento y averiado, y convertir así tu cuerpo en una máquina quemagrasa.

SATÁNYehuda BergKABBALAH PUBLISHING Se dice que el mejor engaño que el Adversario haya llevado a cabo fue convencernos de que él no existía. A pesar de que Yehuda haya usado su creatividad en la narrativa de este libro, presenta una fran-ca y profunda representación kabbalística del concepto del Ego, también conocido como el adversario. Éste reside dentro de cada uno de nosotros, manifestándose como una constante vocecita de incertidumbre y negatividad que crea estragos en nuestra vida y en el mundo.

ADMINISTRACIÓNStephen P. RobbinsPEARSONEl libro muestra las aplicaciones en el mundo real de los conceptos de la administración y hace que ésta cobre vida al reunir a los adminis-tradores y a los estudiantes. Cada capítulo se inicia con un dilema que enfrentan los administradores y cómo lo resolverían. En capítulos se-lectos se presentan entrevistas a administradores, quienes responden a las más variadas preguntas. Además en esta nueva edición se destacan cinco temas de integración: globalización, ética, diversidad, servicio a clientes e innovación.

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La hora de la comida no tiene porque ser aburrida, monótona o monocromática. Si ya los alimentos poseen un color que junto con su aroma los hace apetecibles, la atmósfera alrededor de los platos no debe dejarse de lado. La serie de libros-manteles titulados 48 placemats ofrece distintos tipos para toda ocasión: motivos japoneses, mosaicos o art nouveau. Que tu comida no sea gris. Estos manteles te van a gustar tanto que no vas a querer ensuciarlos. Y no tienes que hacerlo, puedes enmarcarlos. +

ARTEDISEÑOARQ.

PARA COMER A COLOR

48 PLACEMATSTHE PEPIN PRESS

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“se rasgaron los ojos/ para ver/ el velo colorado que nos ciega/ se rasgaron los ojos/ como tela/ que esconde la verdad/ se rasgaron”. Clarisse Nicoïdski, El color del tiempo.

En su libro Musicofilia el escritor norteamericano Oliver Sacks recorre, con su habitual maestría y eru-dición, una serie de casos clínicos de pacientes con algún tipo de trastorno o padecimiento mental que conllevan alguna particularidad sobresaliente en la forma en la que el paciente en cuestión vive la música.

Uno de los casos más entrañables cuenta la historia de una mujer cuya mente se teñía de colores ante la experiencia musical. Los colores, está claro, son símbolos que pueden servir para representar desde partituras hasta leyes de tráfico. Aunque la utiliza-ción de los colores es ubicua a todas las civilizaciones humanas cada cultura realiza construcciones simbó-licas que atribuyen diversos significados a un mismo

color. Mucho más que simples accidentes de la luz, los colores recogen en su interior la capacidad de asociación simbólica de los seres humanos, como lo demuestra Alexander Theroux en su fascinante libro Los colores primarios:

“Para los aztecas, Xiuhtecuhtli (‘el príncipe de la tur-quesa’) es el nombre tanto para el color solar (mas-culino) como para la falda de jade que luce la diosa de la eterna renovación. La práctica de pintar de azul las casas de las vírgenes que están a punto de casarse persiste aún en las costumbres populares polacas, y en el antiguo folklore bretón, mujeres desnudas pin-tadas de azul participaban en rituales religiosos […] Wallace Stevens llamaba al amarillo ‘el primer color’ […] Es el color de la cobardía [yellow, ‘gallina’], del tercer premio, de la bandera de precaución en los cir-cuitos de carrera, del tejido adiposo, de los escones y la miel, el halo de los santos, los camiones escolares, la orina, las placas de los autos en Nuevo México, la

enfermedad, las mejillas de los pingüinos, la casaca del sexto perro en las carreras de galgos […] En el extremo rojo del espectro, las ondas lumínicas son desde luego más largas, y en el extremo violeta, más cortas. El planeta Marte gira en un remolino de polvo de óxido de hierro. Antares, el ojo de Escor-pio, una supergigante roja veintisiete millones de veces más grande que el sol, es la más roja de todas las estrellas de primera magnitud, y luego está la estrella entre roja y rosada de Aldebarán, en Tauro”.

El recorrido de Theroux por campos que van desde la estética hasta la cocina pasando por la religión, el cine, la poesía o la botánica, entre muchas otras disciplinas, demuestra el valor fundamental de los colores en nuestra capacidad de percibir, crear o transmitir conocimiento.

Aunque Los colores primarios demuestra la amplia diversidad de significados que un mismo color pue-de tener dependiendo del contexto en el que sea invocado y el estrecho apego que tenemos por teñir nuestra vida de colores, el color negro –el antico-lor– es sin duda uno de los más importantes. Señal casi ubicua de luto y tristeza, el negro es quizás el color más complejo y críptico, uno que mide nues-tra capacidad de entender la efímera condición de nuestra especie. En La moda negra. Duelo, melan-colía y depresión, el psicoanalista y ensayista inglés Darian Leader aborda la contemporánea compul-sión por el consumo de ansiolíticos y antidepresivos para combatir el malestar en el mundo. Los fárma-cos comisionados con distraer nuestra atención de la tristeza de nuestro espíritu, combaten la oscuri-dad proyectando sobre ella una luz blanca, morte-cina como de sala de espera de hospital. No obstan-te, el negro, plantea Leader, para aquel que tiene la fortaleza de permitir que sus ojos se acostumbren a la oscuridad y se atreva a mirar lo que se esconde detrás del velo de nuestra conciencia, contiene in-formación fundamental acerca de quiénes somos. La comprensión de nuestra propia naturaleza, la aceptación (afirmación, diría Nietzsche) de nuestra singularidad, es esencial para lidiar con un mundo que no podemos descifrar. Este camino, plantea Leader, se obstaculiza mediante la intromisión ena-jenante de los fármacos que sugieren que es mejor deambular por el mundo en un estado de duerme-vela con tal de no tener que enfrentarse a uno mis-mo. La oscuridad es a los colores lo que el silencio a la música: un espacio que nos obliga a dejar, aunque sea por unos momentos, nuestra infinita capacidad de ignorar los fundamentos que nos constituyen. +

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SUEÑOS DE ESCARABAJO Guillermo Samperio

FCELibro electrónico

EL HOMBRE DEL TRAJE GRISSloan Wilson

LIBROS DEL ASTEROIDE

UNA PASIÓN VINTAGEIsabel Wolff

DEBOLSILLO

HISTORIA DEUN VESTIDO NEGRO

Guillermo SamperioFCE

Los colores tienen esa capacidad para evocar ideas y pasiones que los psicólogos y los mercadólogos han sabido explotar para fines a menudo perversos. El tono adecuado puede teñir nuestro estado de ánimo para tranquilizarnos, ponernos alerta, alegrarnos o entristecernos. Los colores nos vuelven parte de algo, sea de la norma, de la rebeldía, del protagonismo o de la pandilla de la cuadra. Vestimos de diferentes co-lores para distintas ocasiones según nuestro estado de ánimo, y reservamos con frecuencia el rojo para cuando nos ponemos más íntimos con nuestra pareja y el negro para ocasiones fúnebres. La solemnidad del gris difícilmente caza con la irreverencia del morado. El payaso no se viste de blanco y negro por temor a ser tomado por un mimo, sino porque los colores que usa deben divertirnos.

En la literatura, el color de la ropa de un personaje es con frecuencia descrito por el autor para dar una idea de su estado de ánimo o de su carácter, su posición social o inclinación política pero, en ocasiones, el escritor decide expresar algo más con una prenda o, por el contrario, se decanta por leer en ella un hecho específico, a veces una historia completa, a modo de Sherlock Holmes.

En ocasiones, deambulando por la calle, una mujer llama nuestra atención por su vestimenta, no porque

sea exótica o erótica sino porque su prenda nos hace sentir algo, por ejemplo, nostalgia, alegría, descon-fianza. Entonces, la ropa se vuelve el centro de nues-tras cavilaciones. Un ejemplo de esto lo encontramos en La mujer de la gabardina roja y otras mujeres, del mexicano Guillermo Samperio, cuentista consolidado en su arte, autor también de Sueños de escarabajo, que nos entrega con este cuento una muestra de su narrativa audaz y desafiante. Una mujer desconsolada y a punto del llanto deambula en la tarde por la calle, vestida con la prenda que da título a la narración. Hace tiempo que no fuma, pero ahora algo la hace recaer en el vicio. Decide ir a un sitio público para no llorar y, en medio de la tristeza, evoca situaciones pasadas, los matrimonios de su madre, la cadena de causas y efectos que la llevó a ese sitio ese día. ¿Por qué llora? Hay que leer este cuento para saberlo, y la respuesta nos dejará fríos. En el mismo volumen se encuentran otros cuentos clásicos del mexicano como “La señori-ta Green” y “Cualquier día sábado”. A veces una prenda de cierto color se vuelve emble-mática de toda una clase social, de sus anhelos, sus esperanzas, sus valores. En El hombre del traje gris, Sloan Wilson nos lleva de la mano por uno de los más evocadores escenarios de la ficción: los suburbios nor-teamericanos de los cincuenta, donde reina el orden

del conformismo. Tom Rath tiene una mujer hermosa, una casa en los suburbios, un trabajo tranquilo en una organización caritativa, hijos adorables. Sin embargo, no todo es color de rosa, pues a Tom lo asaltan recuer-dos obsesivos de su participación en el ejército duran-te la Segunda Guerra Mundial, donde, vestido de ver-de, asesinó a diecisiete hombres. Encima, su esposa, para quien Tom ha cambiado radicalmente desde la guerra, piensa que el empleo de su marido paga muy poco, por lo que lo presiona para que aplique para un trabajo en una cadena de televisión en Nueva York. Tom es contratado y asignado a una importante cam-paña nacional de psiquiatría. Todo parece mejorar y, sin embargo, las cosas se pondrán mucho peor. Una novela que habla de la búsqueda de sentido en un am-biente tan gris como el traje que utiliza Rath.

La pasión por los colores, la moda y las historias es-condidas detrás de las prendas viejas está retrata-da con un estilo adictivo en Una pasión vintage. En esta novela, Phoebe Swift, una muchacha apasionada por la moda, que tiene un trabajo en las subastas de Sotheby, renuncia para perseguir su sueño: abrir una boutique vintage en Londres. La Villa Vintage, su ne-gocio, poco a poco va ganando notoriedad gracias a las labores de Phoebe, quien busca incansablemente en áticos, sótanos y roperos viejos prendas verdade-ramente valiosas. Luego, ella misma las repara en su taller. Pronto, un abrigo de niño cambiará su mundo de maneras inesperadas cuando la historia detrás de la prenda surja. Con este libro, Isabel Wolff nos abre el complicado y apasionante mundo de la moda vin-tage, de lado de una protagonista que debe enfrentar lastres de su pasado y una buena dosis de conflicto con la madre, una mujer terca y difícil. Se trata de un libro con una historia ágil, con un estilo desenfadado y sencillo que atrapa desde el prólogo.

De la pluma de Guillermo Samperio nos llega otra historia relativa a la ropa y los colores, titulada His-toria de un vestido negro. Se trata de uno de los cuentos en una colección con el mismo nombre. En él, Rosario, una mujer suicida, pretende estrenar un vestido negro en la gala cabaretera de Luigi, escri-tor. El cuento nos lleva a contemplar la vida priva-da de dicho vestido negro que se enfrasca, con la demás ropa de Rosario, en diálogos en los que no falta alguno que otro verso de Novalis. El vestido ya sueña con ser estrenado y está ansioso, pero Luigi ha pedido a Rosario que no utilice colores oscuros en su homenaje. Por fin, llega la velada, en la que el vestido juega un papel protagónico, causando dis-tintas reacciones en los asistentes. +

Por Esteban Govea

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La primera vez que se me acercó Daniel me puse de to-dos colores. Yo estaba sentada en una jardinera en la pre-pa, leyendo El umbral de la noche, un libro de cuentos de Stephen King. La verdad es que estaba un poco escondi-da: mi amiga Montse, que quería estudiar ciencias políti-cas, decía que los cuentos de horror eran un desperdicio; y mi amiga Haydée, que iba a estudiar letras clásicas, de-cía que eran como el fast-food de la lectura. Pero yo esta-ba enganchadísima con el libro de King, así que les había inventado algo de una tarea que se me había olvidado y llevaba toda la mañana sentada en la jardinera, con el trasero helado y la espalda torcida, incapaz de ponerle atención a nada o a nadie… excepto, claro, a Daniel. Era como un elfo de Tolkien: tenía el cabello rubio, los ojos verdes y sólo le faltaban las orejas puntiagudas para ser perfecto. Como elfo, caminaba sin hacer ruido, así que casi me da un infarto cuando se acercó a decirme que ése era su libro favorito y que luego podíamos intercambiar novelas de horror. Terminamos intercambiando babas,

pero eso fue meses después y no viene a cuento. Tam-poco importa decir que después nos peleamos horrible y que la última vez que lo vi, en la boda de unos ami-gos, fingí que no lo conocía y me encerré en el baño. Ya andamos por los cuarenta y él parece más hobbit que elfo, pero igual me puse de todos colores. Lo bueno es que la experiencia no me quitó el gusto por El umbral de la noche, que es uno de los pocos libros que me han causado insomnio, así de bueno es.

Por otra parte, los libros y los colores siempre se han relacionado mucho para mí. Por ejemplo, cuando leí Las ventajas de ser invisible, de Stephen Chbosky, yo veía todo azul. El azul es el color que en mi cabeza se asocia con la melancolía: esa especie de tristeza ama-ble, benigna, que nos duele poquito y nos hace un nudo chiquito en la garganta, que nos obliga a suspirar cada dos minutos pero que, a fin de cuentas, es sabrosa. Dan ganas de estacionarse en ella en una tarde nublada con

un té de menta y manzanilla. Y un buen libro, claro, Las ventajas de ser invisible puede ser ese libro: cuenta una historia divertida y triste, llena de episodios simpáticos y algunos muy canijos; te enamora y te hace pensar y pensar y pensar en ella. Dicen que la película es muy buena también, pero yo todavía no la veo, la tengo en mi lista de pendientes para mi próximo periodo azul.

Otras veces me da una temporada verde. En esas, lo mejor es llevarme al campo o al zoológico y dar-me a leer libros como El único e incomparable Iván. Dicen que éste es un libro para niños, pero yo creo que todo amante de los animales tendría que echarle el ojo. Para empezar, ¡el protagonista y narrador es un gorila! Y está tan bien escrito que de verdad se lo crees. Y si a eso le agregas que es un libro basado en la historia real de un gorila que vivió más de veinte años encerrado en un centro comercial sin tener contacto con otros miembros de su especie, pero sin caer en lo amarillista o deprimente, como que sí te hace reflexio-nar acerca de la relación de los seres humanos con los otros habitantes del planeta.

También me pasa en ocasiones que caigo en “modo anaranjado”. Eso significa que traigo ganas de aven-turas, jícamas con chile piquín y libros como El hogar de Miss Peregrine para niños peculiares, que es una mezcla extraña entre historia-de-secretos-familiares con súper-héroes-adolescentes-mutantes. Las ilus-traciones, que son fotos antiguas extrañas y a veces macabras, le dan un toque extra muy enigmático y adecuado para un ánimo inquieto y curiosón.

Ahora, mientras escribo, estoy en una etapa rosa de la vida. Pero antes de que piensen que estoy en ánimo cursi, permítanme explicarles que, para mí, el rosa no es de princesas sino de pastel de frambuesas con tres leches (soy una glotona de lo peor, pero no lo pue-do –ni lo quiero- evitar). Es el color de estar conten-ta, a gusto, disfrutando de los placeres de la vida: los buenos ratos con los amigos, la comida sabrosa… y un buen libro. Uno de mis favoritos para una etapa rosa es La doncella de la sal, de Francisco Haghenbeck, porque la protagonista es una chica simpática e inte-ligente, que de trabajar de mesera pasa a ser la pro-tegida de un noble que le enseña a usar la espada. En este libro hay un dragón y un unicornio, y hay también guerra, intriga, mucho humor y buena comida. Ade-más, de pronto aparecen personajes históricos reales, lo que a mí me encanta.

Y ustedes, ¿con qué colores asocian sus estados de áni-mo y qué les gusta leer en cada uno? +

R A Q U E L C A S T R O

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PARA VERYOÍR VIDEO MÚSICA

KEITH JARRETT TRIOSomewhereECMUno de los mejores discos en la carrera del afamado y excelso pia-nista norteamericano junto a sus compañeros musicales más cer-canos y de toda la vida, Jack DeJohnette y Gary Peacock. En este disco dan un recorrido a temas de Miles Davis, Leonard Bernstein y Johnny Mercer.

NEKTARTime machineODISEA PRODUCCIONESGloriosa banda alemana de rock progresivo que sigue produciendo grandes obras en un género que continua vigente y con más adep-tos que no lo dejan morir a más de cuarenta años de su creación. En este disco, Nektar deja constancia de su calidad en diez temas épicos.

ENRIQUE BUNBURYMadrid Área 51 WARNER MUSICQuizá este disco marque el retiro temporal o definitivo, Bunbury no ha dado más detalles al respecto, de uno de los pilares del rock ibérico. Un set con discos y DVD que serán el disfrute total de los fans del cantante español.

GIDON KREMERArvo Pärt: Tabula RasaECMArvo Pärt es uno de los compositores contemporáneos más respetados y prolíficos de la historia; Tabula Rasa es una de sus obras fundamentales que debe ser escuchada en esta ver-

sión con el Maestro Gidon Kremer.

VARIOSThe art of McCartneySONY MUSICHomenaje en vida con una pléyade de estrellas del mundo del rock a uno de los personajes más venerados, Sir Paul McCart-ney; en este disco podremos encontrar magníficas versiones a clásicos de su autoría tanto de su etapa con The Beatles como de solista.

MAI MORIREEnrique RiveroEN PANTALLAChayo vuelve a Xochimilco para cuidar de su anciana madre pero la comodidad de la vida tradicional le hace escoger un matrimonio que la hará abandonar sus ideales. Sus particulares percepciones y su fe abso-luta en la vida, la obligarán a cometer el mayor sacrificio que una madre puede hacer.

LAS RAZONES DEL CORAZÓNArturo RipsteinMUNDO EN DVDEmilia, un ama de casa frustrada por la mediocridad de su vida, por los fracasos de su marido y por una maternidad agobiante y mal llevada, siente que el vaso de su paciencia está a punto de desbordarse. Para colmo en un mismo día la abandona su desde-ñoso amante y le embargan la tarjeta de crédito. En su aparta-mento, vacío y desolado, decide tomar por fin una decisión larga-mente meditada: el suicidio.

DUCHAS FRÍASAntony CordierZATMENI DISTRIBUCIÓNAnálisis de los problemas de tres adolescentes de una pequeña población francesa: ¿Cómo soportar a una madre que corta la corriente eléctrica durante dos semanas? ¿Quién es el más fuer-te entre los judokas y los karatecas? ¿Se le puede reprochar a un padre que beba en exceso? ¿Cómo perder 8 kilos en seis sema-nas? ¿Cómo vaciar completamente el tubo de pasta de dientes? ¿Existen personas que aman las desgracias? ¿Cómo hacer un trío amoroso en un hotel?

AMOR O SEXOCate ShortlandZATMENI DISTRIBUCIÓNUna película visualmente inquietante, situado al pie de las pistas de esquí de Australia, Somersault es la historia del viaje sensorial de una joven a través del cual aprende el verdadero significado del amor, la familia y la amistad. Tras huir de Canberra, Heidi conoce a Joe, el hijo de un agricultor, e inicia un romance que

retará sus ideas sobre la sexualidad, la clase y su futuro.

UN CORAZÓN NORMALRyan MurphyWARNER HOME VIDEOEn la época de mayor virulencia del SIDA, se ignoraba casi todo sobre una enfermedad que se calificó como “el cáncer gay”. El film cuen-ta cómo la sociedad estadounidense fue asimilando la expansión de la gran epidemia. El guionista Larry Kramer traslada a la pantalla su propia experiencia vital en Nueva York a comienzos de los años 80.

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TENGO QUE MORIRTODAS LAS NOCHES

Guillermo OsornoDEBATE

EL VAMPIRODE LA COLONIA ROMA

Luis ZapataDEBOLSILLO

AMORES DE SEGUNDA MANOEnrique SernaCAL Y ARENA

EL BESO DE LA MUJER ARAÑAManuel PuigDEBOLSILLO

Si los sesenta fueron la década de la revolución sexual, de los derechos civiles y de la liberación femenina, la de los setenta se caracterizó por la lucha de otro grupo numeroso y bien organizado, que saltó de la oscuridad a la luz pública ondeando una bandera con los colores del arcoíris: el movimiento gay.

México no fue la excepción. Como nos cuenta Guillermo Osorno en la crónica Tengo que morir todas las noches, la Zona Rosa se convirtió en el epicentro de una revolución que impactaría la vida cultural del país, en una época marcada por el declive definitivo de las viejas estructuras sociales, políticas y económicas. La apertura de un bar llamado El Nueve, en 1974, marcaría para siempre a toda una generación de artistas underground que salieron de los hoyos fonqui para demostrar la fuerza de la contracultura y sus propuestas en prácticamente todos los campos. De acuerdo con este trabajo de Osorno, El Nueve no sólo permitió la “normalización” del mundo gay a ojos de la sociedad, mundo que generalmente permanecía oculto, condenado a los arrabales de la periferia y la clandestinidad, sino que su audacia permitiría que años más tarde existieran otros sitios como este, o lugares donde el rock, esa música proscrita durante muchos años, contara con espacios para su difusión. Aunque ni las razias ni los roces con la autoridad cesaron, El Nueve dejó grandes historias y anécdotas, como la de Irma Serrano,

madrina de la inauguración del sitio, a quien le pareció buena idea romper una botella de champaña contra una chimenea de cantera.

No es descabellado pensar que Adonis García, protagonista de la más famosa novela de Luis Zapata, El vampiro de la colonia Roma, se diera una vuelta por el número 156 de la calle de Londres para pasársela bien, y hasta puede que conociera a Henri Donnadieu, el francés que dirigió el mítico bar hasta 1989. Publicada originalmente en 1979, esta novela trata sobre la vida de este neopícaro, un chichifo que hace de la calle su centro de trabajo y diversión, aunque también hace de las suyas en baños públicos, bares y cualquier lugar de ambiente, en la época previa a la aparición del VIH.

Narrada como si fuera una larga entrevista, frente al micrófono Adonis va desgranado su historia, sus anhelos y sueños que por el impacto de la realidad debe de ir dejando para después, sin perder el ánimo ni la fuerza para dedicarse al “talón”. En lugar de capítulos, la obra se divide en casetes, y mediante un lenguaje fuerte y directo, a veces soez, Zapata escandalizó a la sociedad de la época. Una de las aportaciones de este texto a la literatura mexicana es la manera en que se cuenta la historia: partiendo de la idea de que el personaje está siendo grabado, Zapata deja de lado los signos de

puntuación, empleando sólo dobles espacios que hacen las veces de comas y puntos. Considerada como la novela homosexual mexicana por excelencia, El vampiro de la colonia Roma está pintada por el negro de la noche, pero salpicada por los tonos festivos y siempre alegres de las marchas del orgullo gay.

Es muy probable que entre tantas aventuras, Adonis García conociera a Mauro Llamas, un dramaturgo homosexual de grandes dotes artísticas, y que pudo haber montado alguna obra o performance en El Nueve, porque el lugar organizó y apadrinó diversos espectáculos, como desfiles de moda y obras de teatro. Junto con Germán Lugo, un joven aspirante a escritor, y su madre Paula Recillas, estos tres personajes son la columna vertebral de Fruta verde, de Enrique Serna, autor del libro de cuentos Amores de segunda mano. La historia transcurre a comienzos de los ochenta, esa incomprendida década que a ojos de muchos fue gris pero que se pintó de todos los colores posibles, y que coincide con las aventuras del vampiro Adonis, y con la época de oro de El Nueve. Novela sobre la amistad, el amor materno, el amor de los amigos, el despertar de una vocación y el camino iniciático de un joven buga que se resiste a los escarceos de un gay, Fruta verde pone en evidencia las fobias de la sociedad mexicana que se dice muy abierta y liberal respecto al mundo homosexual.

Si bien es cierto que en los libros anteriores impera una atmósfera más bien festiva en la que apenas si hay atisbos de discriminación, encono o represión en contra del mundo gay, otra novela nos muestra el reverso de la moneda. Clásico de la literatura, El beso de la mujer araña, de Manuel Puig, es una lucha de contrarios: sentimiento contra razón, cuerpo contra mente, deseo contra el deber.

Contada a través de un largo diálogo entre dos presos en una cárcel de Buenos Aires, Luis Molina y Valentín Arregui encarnan la persecución de la dictadura argentina: el primero esta preso por corrupción de menores aunque en realidad se debe a su condición de homosexual, el segundo por su activismo político. Dentro de la celda, ambos personajes nos dejarán ver sus personalidades a través de las opiniones que expresan sobre las películas que Molina cuenta cada noche para hacer más llevadero el encierro, y tratar de seducir a Valentín. Publicada en 1976, tres años antes que El vampiro de la colonia Roma y dos años después de la apertura de El Nueve, El beso de la mujer araña deja en claro que frente a nuestros temores o prejuicios, cuando los encaramos porque no hay escapatoria, el distinto, el diferente es tan similar a nosotros que descubrimos que donde termina el arcoíris, en realidad inician la alegría y el gozo de la igualdad. +

Por Augusto Ledesma

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¿Qué pasaría si unos diminutos extraterrestres llega-ran a la Tierra desde un planeta lejano y —con todo y su nave espacial, impulsada por una extraña y colorida tecnología— se internaran en una casa cualquiera para observar cómo es que viven sus habitantes? Según Da-vid Wiesner, autor de Sr. Minino (Oceano Travesía): si tal cosa sucediera las personas de la casa ni siquiera no-tarían la presencia de los visitantes. Su gato, obviamen-te, no le vería mucho caso al intercambio de informa-ción con seres de otras especies, así que se limitaría a patear la nave hasta aburrirse. Los únicos que notarían la llegada de los forasteros serían los insectos que se ocultan del gato y con los que los visitantes consiguen comunicarse bastante bien. (Quizás esto resuelva el enigma de por qué algunos insectos sobreviven días en el refrigerador o en el interior del horno de microondas. ¡Secretos alienígenas!). Los colores de este libro pare-cen tomados de otra galaxia. (No por nada David Wies-ner ha ganado tres veces la Medalla Caldecott. Dedica años a crear cada libro. A veces incluso fabrica modelos tridimensionales de objetos que no existen para añadir autenticidad a sus dibujos).

Claro que no todas las buenas soluciones tienen que llegar de otro planeta. En la Tierra cada tanto nacen personas que pueden observar el mundo con una mi-rada distinta: ver otras posibilidades. Sembrar color y vida donde nadie lo imaginaba posible —incluso en las ciudades más grises, feas y rotas, cuyos habitantes

son seres crueles y tristes—. En La promesa (Castillo), de Nicola Davies, esa oportunidad se le presenta a una niña que sobrevive de robar en la calle, al momento de arrebatarle la bolsa a una anciana. En lugar de hallar dentro dinero y comida, la niña encuentra otra cosa: una promesa. Lo que acabas de leer quizá te suene a fábula o a cuento urbano de hadas. Pero cuando termi-nes de leer el libro notarás en tu pulso que la historia es tan real como los lápices y crayones de los que se valió Laura Carlin para realizar las ilustraciones.

Y cuando creíamos que Anthony Browne había llegado a la cúspide como autor de libros para niños, llega ¿Qué tal si..? (FCE), relato de lo más sencillo que ni parece historia, pero que evoca algunos de los mayores dile-mas de la vida: el miedo a lo desconocido, al rechazo… y a descubrir. Joe acudirá por primera vez solo a una fiesta. Ya de camino, con una caja de regalo en las ma-nos, se pregunta si acaso en la fiesta habrá mucha gen-te —gente horrible de los que comen cosas asquerosas y practican juegos que dan miedo—. Eso que Joe teme lo vemos plasmado en unas increíbles ilustraciones que mezclan realidad y fantasía, en colores tan intensos que amenazan con escurrirse de las páginas. El libro es una celebración de los eventos ordinarios del día con día, en los que se cristaliza esa peculiaridad que nos hace personas y también un misterio: cajitas de regalo que provocan asombro, sobresalto, extrañeza y maravilla en los demás, pero sobre todo en nosotros mismos.

El libro de la negación (Ediciones El Naranjo) NO tiene colores. Ricardo Chávez Castañeda nos cuenta una his-toria terrible que renuncia a esa regla general que com-parten los juegos y las historias de terror: No es verdad. La historia debiera ocurrir solamente en el libro. No sucede así. Podrás quemarlo, tijeretearlo, hundirlo en agua, pero el libro se reconstituirá de nuevo (hasta que hagamos algo para detenerlo). Emprender la huida de nada sirve: “Lo peor es descubrir que todos los caminos llevan lejos de casa, pero que realmente el único que conocemos es el de regreso.” A diario mueren niños en el mundo. ¿Es que los adultos estamos en guerra con ellos? ¿Puede transformarse la historia de nuestra más terrible humanidad? ¿Qué tan poderoso es un NO? Si acaso la angustia que sentimos a veces en la oscuridad se debe a la ausencia de colores, El libro de la negación transcurre como una noche de sueños inquietantes en blanco y negro. Una noche que le pertenece al niño que narra, y a quienes lo acompañamos leyendo. Es la peor historia del mundo, como se nos advierte en la primera página y en cada una de las metáforas ilustradas de Ale-jandro Magallanes, donde la letra es una voz que crece y se achica. Sin embargo, al cerrar el libro te sucede algo estremecedor y maravilloso: descubres que los colores a tu alrededor relucen —la persona que eres ahora, tras haber crecido en el transcurso del libro, sabe que en la propagación del NO está la esperanza. +

INFANTIL Y JUVENILLOS+VENDIDOS GANDHITHE MAZE RUNNER 1

James DashnerVYR

THE MAZE RUNNER 2James Dashner

VYR

DESTROZA ESTE DIARIOKeri SmithPAIDÓS

FANGIRLRainbow Rowell

ALFAGUARA JUVENIL

THE MAZE RUNNER 3James Dashner

VYR

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Cultura a domicilio.

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NOVEDADES LEE+ LOS LIBROS DEL MES ELEGIDOS POR LOS EDITORES

El inicio de la era atómica puede resultar anec-dótico, pero los detalles del proyecto Man-hattan, una de las empresas más extrañas y monumentales de la era moderna, son incluso descabellados. Las esposas de Los Álamos es, sin embargo, la reconstrucción imaginaria de lo que no sabemos, contada por un “nosotras” que es la voz de la colmena y el pensamiento popular, pero también de la reflexión: la de unas mujeres jóvenes y cosmopolitas, esposas educadas que venían de Berkeley y de Cambridge, que habían huido de París, solían vivir en Londres y Chicago, y que, sin darse cuenta, o un poco a sabiendas, contribuyeron a desatar la fuerza más destructi-va de la historia. (TURNER) +

UNCLE BILLBernardo Fernández, Bef

SEXTO PISO

CARTHAGEJoyce Carol Oates

ALFAGUARA

NO DUERMAS,HAY SERPIENTESDaniel L. Everett

TURNER

EL URANISTALuis PaniniTUSQUETS

MI COLOR FAVORITO ES VERTEPilar EyrePLANETA

Un joven aspirante a escritor coincide con una pareja de paso en un París invernal. Él es adicto al juego y ella sueña con viajar a Mallorca. Los tres forman un vago triángulo amoroso, hasta la irrup-ción de un hombre misterioso llamado Cartaud. Novela romántica, policiaca, de aventuras y road movie, Más allá del olvido es también la historia de una obsesión. Una obra clave para descubrir o redescubrir a Patrick Modiano, Premio Nobel de Literatura. Una historia de amor desdibujada por el recuerdo -tema recurrente en la literatu-ra- puede ser también la excusa más eficaz para delatar la ambigüedad y el desasosiego en que discurre la vida. (ALFAGUARA) +

Después de vivir durante diez años en París, Henry Miller emprende un viaje en automóvil por Estados Unidos. El país le parece magnífico pero terrible a la vez; comprueba que en ninguna parte como allí el divorcio entre el hombre y la naturaleza es tan fla-grante. Deplora que los ideales democráticos de la libertad se hayan esfumado; que el hombre del Nor-te se haya convertido en un ser ávido de dinero; que las industrias exploten a sus trabajadores y contami-nen el ambiente; y que la cultura sea menospreciada. Sólo en el Sur captará el perfume de un tiempo sin aceleraciones y conocerá a algunos raros individuos que representan para él aquel añorado pensamiento original sobre la vida opuesto a la mecanización de la mente y del alma. (NAVONA) +

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Claudio es cubano, vive en Nueva York y trabaja en una editorial. Cecilia es mexicana, vive en París y es estudiante. En el pasado de él hay recuerdos de La Habana y el dolor por la pérdida de su prime-ra novia, y en su presente, la complicada relación con Ruth. En el pasado de ella hay una adolescen-cia difícil, y en su presente, la relación con Tom, un chico de salud delicada con quien comparte su afición por los cementerios. Será durante un viaje de Claudio a París cuando sus destinos se entre-crucen. Mientras Claudio y Cecilia describen con minuciosidad su día a día en París y Nueva York, ambos dejan traslucir sus neurosis, sus pasiones, sus fobias y las reminiscencias del pasado que dic-tan sus miedos. (ANAGRAMA) +

¿Quién es Enric Marco? Un nonagenario barcelonés que se hizo pasar por superviviente de los campos nazis y que fue desenmascarado en mayo de 2005, después de presidir durante tres años la asociación española de los supervivientes, pronunciar centena-res de conferencias, conceder decenas de entrevis-tas, recibir importantes distinciones y conmover en algún caso hasta las lágrimas a los parlamentarios es-pañoles reunidos para rendir homenaje por vez pri-mera a los republicanos deportados por el III Reich. El caso dio la vuelta al mundo y convirtió a Marco en el gran impostor y el gran maldito. Ahora, Javier Cercas asedia, en este thriller hipnótico que es también un banquete con muchos platos el enigma del persona-je, su verdad y sus falsedades. (RANDOM HOUSE) +

LA VIDA EN EL MISISIPIMark TwainALMADÍA

DE ANIMALES A DIOSESYuval Noah Harari

DEBATE

LOS MONSTRUOSDEL SILENCIO

Johanna LozoyaTAURUS

ERA LA GUERRA DE LAS TRINCHERAS

TardiSEXTO PISO

NOS IMPUTARON LA MUERTE DEL PERRO DE ENFRENTE

Alejandro HernándezPLANETA

Etgar tiene todo por hacer y sin embargo no quiere hacer nada. Etgar tiene problemas de adolescen-te y miedos de adulto. Etgar sólo quiere ver do-cumentales marinos y comedias sin muerte, pero clica en los vídeos virales más sádicos. Etgar es aún un crío, pero ya escribe cartas imaginarias a sus hi-jos que no nacerán. Etgar querría beber siempre té con Nesquik, pero vacía una botella de alcohol tras otra. Los amigos de Etgar también lloran, como él, pero siempre despiden sus mensajes con una risa. Pasea por las calles grises de su pueblo, pero es en internet donde Etgar descubre el desamor más cruel y también el amor más cálido y extraño. Un juego de identidades que deberá resolver en la vida real. (BLACKIE BOOKS) +

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EN EL PISO ME SIENTO MÁS A GUSTO. ME SIENTO MÁS CERCANO, MÁS PAR-TE DE LA PINTURA, ASÍ PUEDO CAMINAR ALREDEDOR DE ELLA, TRABAJAR

DESDE LOS CUATRO LADOS Y LITERALMENTE ESTAR EN LA PINTURA.

LA APREHENSIÓN DE LO ABSURDO EN JACKSON POLLOCKNacido en Wyoming en 1912, Jackson Pollock comprendió que su época necesitaba otro tipo de expresión. Sus trabajos sobre el expresionismo abstracto se ca-racterizan por una falta de la representación y de un acercamiento a un concepto de ejecución. Esta rama del arte nació de la fusión del surrealismo, un cubismo sintético y el neoplasticismo. “Action Painting” implica un desarrollo de la obra en sí misma, sin trazos previos o esquemas de lo que se va a desarrollar. Pollock trataría de aislar sensaciones concretas de la memoria universal. Sus goteos de pintura podían expresar un beso o un cataclismo, pero se necesitaba entender que es la misma energía que un cuadro impresionista en el que la imagen, dependiendo de cada espectador, se traduce de manera diferente. “Action painting” es un testimonio de la continuidad de la energía absurda que inunda la vida.

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