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UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA FACULTAD NACIONAL DE SALUD PÚBLICA HÉCTOR ABAD GÓMEZ” DEPARTAMENTO DE CIENCIAS ESPECÍFICAS EN SALUD El BIPARTIDISMO COLOMBIANO M3340 Preparado por: LUIS ALFREDO GUTIERREZ M. Profesor Administración Medellín - Colombia 1992 INTRODUCCIÓN Se pretende con el desarrollo del siguiente trabajo lograr unos de los objetivos que, seguramente, tiene la asignatura dentro de la cual nos ha correspondido llevarla a cabo, cual es el de posibilitar una adecuada visión del concierto político - administrativo del país, a la vez que permitir al estudiante una ubicación con criterio y ánimo crítico frente a la existencia efectiva de los organismos y mecanismos a través de los cuales se cumple la tarea directiva de la nación. La verdadera importancia de este ensayo reside propiamente en la oportunidad que ha constituido para llegar a conocer algo del papel desempeñado por una de las agrupaciones políticas tradicionales en nuestro medio que, al decir de algunos, ha actuado mancomunadamente en pro de la democracia que también, según algunos nos caracteriza y es motivo de orgullo para los colombianos. Pero el objeto al cual hacemos referencia, es la incidencia real del partido liberal en nuestra existencia republicana; papel que no es fundamentalmente diferente al correspondiente a su partido opuesto, si se analizan desde el punto de vista de la teoría de la lucha de clases todas sus realizaciones.

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UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA

FACULTAD NACIONAL DE SALUD PÚBLICA

“HÉCTOR ABAD GÓMEZ”

DEPARTAMENTO DE CIENCIAS ESPECÍFICAS EN SALUD

El BIPARTIDISMO COLOMBIANO

M3340

Preparado por: LUIS ALFREDO GUTIERREZ M.

Profesor Administración

Medellín - Colombia

1992

INTRODUCCIÓN

Se pretende con el desarrollo del siguiente trabajo lograr unos de los objetivos que, seguramente, tiene la asignatura dentro de la cual nos ha correspondido llevarla a cabo, cual es el de posibilitar una adecuada visión del concierto político - administrativo del país, a la vez que permitir al estudiante una ubicación con criterio y ánimo crítico frente a la existencia efectiva de los organismos y mecanismos a través de los cuales se cumple la tarea directiva de la nación.

La verdadera importancia de este ensayo reside propiamente en la oportunidad que ha constituido para llegar a conocer algo del papel desempeñado por una de las agrupaciones políticas tradicionales en nuestro medio que, al decir de algunos, ha actuado mancomunadamente en pro de la democracia que también, según algunos nos caracteriza y es motivo de orgullo para los colombianos. Pero el objeto al cual hacemos referencia, es la incidencia real del partido liberal en nuestra existencia republicana; papel que no es fundamentalmente diferente al correspondiente a su partido opuesto, si se analizan desde el punto de vista de la teoría de la lucha de clases todas sus realizaciones.

Es significativamente grande la existencia de material escrito que contiene las diversas concepciones, explicaciones y teorías sobre la vida de nuestros partidos políticos, lo que simultáneamente, surte dos efectos: uno es el de apreciar el carácter apasionante de que está revestido el estudio de la cuestión política de nuestro país; el otro es la dificultad que se encuentra cuando se pretende sistematizar toda esa avalancha de datos y de ideas de tal manera que se pueda decir algo que sea nuevo sobre el particular y no resulte ser una repetición de lo dicho ya por otros, al señalar particularmente al liberalismo su predilección por la libertad individual y del Estado desempeñando un papel de gobierno moderado y sin extremismos, se induce a pensar en su “bondad”, virtud que podrá o no, abandonársele después de que se le investigue concienzudamente mediante la utilización de los recursos referidos .

Es preciso decir que en un momento oportuno nos ha tocado efectuar este trabajo que indudablemente tiene un gran mérito y un gran significado dentro de la profesión en la cual estamos ubicándonos, ya que nos permite recoger algunos elementos mediante los cuales, a nivel individual, se desecha la concepción falsa de que al administrador no le compete trabajo alguno dentro del campo político y que tal actividad está reservada a otros sectores de la sociedad profesional como es el caso de los sociólogos, abogados y los políticos de oficio. Nosotros no podemos ser simples espectadores del acontecer social y político, sino que nuestra actitud debe ser positivamente activa cualquiera que sea nuestra especialidad dentro del mundo económico.

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Es, de acuerdo con estas consideraciones que se da en nosotros la satisfacción de haber efectuado este estudio, la que contrarresta las dificultades, no pocas por cierto, encontradas durante su desarrollo.

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LOS PARTIDOS POLÍTICOS

Definición.

Como desarrollo, ó mejor para el desarrollo del presente trabajo, es necesario esbozar algunas premisas para una sociología política.

Debido a su característica de elemento deliberante con capacidad decisoria, es que el hombre actúa siempre entre dos fuerzas que a través de la historia han configurado los conciertos políticos y que son: Gobierno y oposición, conformismo e inconformismo, estabilidad y cambio, tradicionalismo y revolución. Se genera la evolución de las comunidades políticas a partir de la tesis y de la antítesis constituidas, y de aquellas nacen los partidos políticos como medios de canalización de la opinión pública, como instrumentos a través de los cuales la voluntad colectiva se expresa y revela fenómenos sociológicos característicos.

Para el estudio de un partido político los sociólogos se dirigen a los aspectos pensamiento, organización y acción.

Ante todo, el hombre piensa, analiza, discute; después dispone lo necesario para que su opinión pueda ser expresada eficazmente e incida efectivamente sobre el acontecimiento comunitario y, finalmente actúa en forma individual o colectiva a fin de que su pensamiento se convierta en hechos de acuerdo con formas de actuar, previamente definidas.

El partido político tiene una estructura y una dinámica. La primera está conformada por las ideas y por los hombres. Las ideas constituyen la doctrina del partido, esto es sus programas y los hombres, la base de su organización material. La dinámica es la acción desplegada por los hombres, la que puede ser a nivel interno y, a la vez, externo del partido, pués este se proyecta sobre la comunidad.

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Contiene el partido un conjunto de normas, de principios de acción acordes con las realidades sociales, con lo que se evita la sujeción, de la dinámica a los cambios circunstanciales caprichosos. Se requiere por lo tanto cierto grado de capacidad y flexibilidad para capitalizar las circunstancias amoldándose a ellas sin llegar a sacrificar los principios fundamentales que inspiran sus doctrinas.

Se debe definir entonces una estrategia dirigida a defender la organización y los programas, suponiendo la búsqueda de mejores medios para conquistar y/o conservar, el poder así como para desarrollar las tareas primarias , de influenciar a la comunidad y de conservar y/o aumentar el número de parciales , su prestigio y la solidez de sus programas.

De acuerdo con lo planteado hasta aquí, esta sería la concepción aproximada de Partido político: “…agrupación temporal o permanente de personas guiadas por una directiva, singular o plural, unidas por intereses ó aspiraciones comunes, de acuerdo con un programa de principios y de conforme a una estrategia la conquista o la conservación del poder público ó para ampliar su radio de influencia en el manejo de la comunidad”.

No obstante, es preciso, para el objetivo ,de nuestro trabajo, ampliar los elementos contenidos en el anterior concepto.

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Un grupo de personas; el elemento esencial y objetivo de unpartido político lo constituyen los individuos, ellos son su base material. Esto en virtud de la calidad de gregario y deliberante que tiene el hombre.

Es temporal. Los partidos nacen, esto es, aparecen y opueden muy bien desaparecer ó al contrario, mantenerse por largo tiempo. Un partido tiende a desaparecer cuando se estatiza, si no está al tanto del acontecer socia. Por otro lado permanecer por largo tiempo si esta evolucionando, si tiene normas y programas acordes con las situaciones que se den en el conglomerado, programas básicos.

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Tiene una directiva. Por el simple requisito de que todo organismo ha de tener una dirección, el partido debe tener y tiene de hecho una jefatura que traza los lineamientos para su actividad.

Intereses y aspiraciones comunes. El elemento aglutinante y de unión en un partido, es la comunidad de intereses y de fines. Los fines perseguidos por las agrupaciones de personas, incluyendo las organizaciones políticas, son de diversos órdenes.

El programa. La doctrina o sea el programa político es el conjunto de normas que el presuma realizables dentro de la supuesta o perseguida poseción del poder, para lograr el bienestar colectivo. Los programas son de dos tipos distintos;

Básicos. Son los principios fundamentales y permanentes que conforman el marco ideológico característico de las actuaciones de los miembros del partido. Son los principios que dan permanencia y duración a un partido político.

Mínimo. Son eventuales y están dirigidos a tratar asuntos específicos , momentáneos o transitorios.

La organización. La organización interna del partido es parte fundamental de su modo de operación frente a las diversas cosas que le competen. Esta organización no es más que la definición de las jerarquías conformando una pirámide administrativa con niveles de autoridad y responsabilidad definidos: además de la jefatura ó directiva de que se habló y que está en la cuspide de la pirámide, el partido cuenta con órganos operativos a los que se les definen objetivos tendientes al logro de la responsabilidad que se haya propuesto aquel.

La dinámica. El desarrollo lógico de los partidos implica necesariamente dos movimientos:

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Uno interno al partido en virtud del cual se suceden sus cambios estructurales, es la dinámica interna

Otro de proyección externa que está ligado con el anterior como efecto de él y que permite la influencia del partido sobre la comunidad; es la dinámica externa.

La estrategia. Está muy relacionada con la dinámica y suele confundirse con ella . Consiste en un conjunto de principios de acción encaminados a “conservar el poder, a conquistarlo por los medios pacíficos ó violentos ó a ampliar su radio de acción ó de ingerencia en el manejo de la cosa pública”. Puede ser de tres modalidades la estrategia :

De conservación del poder: La que procura mantener invariables las condiciones que hicieron posible el arribo del partido al poder.

De refuerzo: Dirigida a conquistar la simpatía pública, a ganar adeptos ó a influir en el manejo de los instrumentos del poder.

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De oposición: Consistente en presentar la controversia las actuaciones del partido de gobierno. La oposición puede ser pacífica o violenta.

CLASES DE PARTIDOS POLÍTICOS.

Se había afirmado que son diversas las finalidades perseguidas por las agrupaciones de personas y esto mismo es lo que permite entonces, distinguir entre varias clases de partidos políticos:

Regional. Se dá cuando el móvil de la agrupación de las personas consiste en la lucha por las reivindicaciones de una provincia, país o continente determinado

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Racista. Es aquel que propende por los interéses de un grupo étnico determinado.

Religioso. Es aquel que tiene principios y programas filosófico de carácter religioso.

Clasista. Es aquel que se caracteriza por reunir a individuos de una misma clase social y por tener programas dirigidos a establecer un gobierno de clase ó ajustado a los intereses de la misma clase.

Gremial. Su movil es la lucha en pro de los intereses de un grupo social dedicado a una actividad específica. Estas organizaciones son de tipo transitorio.

En síntesis, puede haber un sinnúmero de partidos que lo son en virtud de su interés común aglutinante demográfico que origina sus doctrinas y la expresión de sus programas.

Después de estas consideraciones de tipo conceptual que consideramos necesarias, se presenta el desarrollo del importante tema central de este ensayo: el partido liberal, como parte componente del bipartidismo.

ORIGEN DEL BIPARTIDISMO COLOMBIANO

A. Teorías varias.

Dado que la historia política del país ha girado desde sus comienzos en torno siempre a dos partidos ó dos grandes corrientes ideológicas, las mismas que durante 150 años han manejado los destinos patrios, al hablar de historia de alguno de estos grupos hay, por necesidad de hablar del grupo opositor, lo que podríamos condensar en una sola frase: HISTORIA SOBRE LOS ORIGENES DEL BIPARTIDISMO COLOMBIANO.

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Casi la gran mayoría de los autores que se han interesado en el tema, sostiene que nuestro bipartidismo apareció al promediar el siglo XIX.

Como ideología, el liberalismo venía influyendo fuertemente en la vida política del país, hasta el punto que muchos estudiosos remontan sus orígenes al año 1810, cuando el 20 de julio de ese mismo año, hicieron explosión las tesis de libertad política y autonomía del individuo, que constituyen la esencia de la escuela liberal

Otros autores sostiene la hipótesis de que nuestro bipartidismo apareció en 1826 cuando se produjo la ruptura política entre los dos más grandes lideres de ese entonces: Santander, que pasó a ser cabecilla de los llamados “Liberales (Hecho por el cual se le conoce como el padre del liberalismo) y Bolivar, que pasó a ser jefe del ala conservadora ó “Bolivariana” que fué como se llamo en esa época. Sinembargo, parece que el

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verdadero origen de nuestros partidos políticos está contenido en una carta fechada en Medellín el 21 de septiembre de 19829, en la cual, el General José María Cordoba dá por terminadas sus relaciones políticas con Bolivar - que hasta ese mmomento fueron siempre armónicas y anuncia su apelación a las armas a fin de evitar la instauración de una monarquía e impedir que la incipiente economía de la Nueva Granada cayera “en manos de voluntades entreguistas en favor de las potencias extranjeras, principalmente Inglaterra”. El desacuerdo entre Córdoba y Bolivar surgió a raíz del proyecto de constitución para Bolivia, redactada por Bolivar.

Transcurrió el tiempo y lo que en 1837 se conocía como conservatismo (Bolivarismo), se acabo con el hundimiento de la dictadura del General Urdaneta. Por su parte el movimiento Santanderista se dividio en dos grandes grupos que, después de algunas reformas y actualizaciones cronológicas, son los mismos que hoy se conocen como “partidos tradicionales”: de un lado estaban los llamados “liberales moderados” ó, lo que es lo mismo, “liberales conservadores” que conforman lo que hoy es el partido conservador y, del otro lado estaban “los liberales progresistas” ó “liberales rojos”, fundadores de lo que a partir de entonces se conoce como partido liberal.

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-La terminología entre comillas corresponde a la usada por don Mariano Ospina Rodriguez quién, con José Eusebio Caro, procedió a la organización del “Conservatismo” en 1848 y 1849. En este año, 1849 nace formalmente el conservatismo con la promulgación de lo que fue su primer programa político, que viera la luz pública a través del periódico “lLa Civilización”, propiedad de don Mariano Ospina Rodriguez. Este programa por lo demás, constituye un modelo de Síntesis doctrinaria.

No podemos eludir aquí un comentario que, por lógico y por común, se hace obligatorio. Dado el tradicionalismo de la época y el fanatismo casi enfermizo que se profesaba por las ideas y por los nombres y a pesar de que todavía no se tenían claramente definidos los límites doctrinarios de los partidos, era demasiado arriesgado tomar cualquiera denominación a cambio de otra ó modificar alguna ya preexistente ; esto fué lo que sucedió con el conservatismo en 1849; de “liberales conservadores” pasaron a ser el “partido conservador” con funestas consecuencias para es partido y que, contradictoriamente, redundó en revitalizador provecho de un Liberalismo que que aunque incipiente, contaba con gran potencial humano.

En un principio, el nombre le creó problemas al conservatismo pués a muchos no les - gustó -sobre todo a los liberales, como dijera don José Eusebio Caro, que trataron de ridiculizarlo cambiándolo irónicamente por el de “Conserveros”. Y continúa el señor Caro haciendo una clara defensa de los principios conservadores como quien pretende salvar, al mismo tiempo su propio nombre : “Los hombres de órden, los amantes y defensores de la libertad legal a quienes los rojos (liberales) quisieron llamarnos oligarcas, absolutistas, estacionarlos y retrógrados, nos llamamos hoy conservadores, lo mismo que en Europa”. Y cuando los liberales le preguntan ¡conservadores de qué?, el señor Caro responde:

“Conservador de lo que hay que conservar, conservador de la república, conservador de la sociedad, conservador de los principios y de las bases eternas de la sociedad y de toda república”. Y esto se convirtió en la “piedra angular del conservatismo y al mismo tiempo, en caballito de batalla, que, analizado a la luz de la realidad actual, es la causa de los

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rotundos triunfos liberrales, puesto que ya no es compatible con el momento defender “principios eternos”, sino, realidad cambiante.

Pero volviendo al recuento histórico sobre el origen de nuestros partidos, hay autores que sostienen que sus raíces ó nacimiento está vinculado a la pugna entre Bolivianos y Santanderistas (de Bolivar y Santander, respectivamente). Esta hipótesis no es absolutamente cierta pués uno de los fundadores del conservatismo, don Mariano Ospina Rodriguez, por ejemplo, participó en su juventud en la conspiración contra el libertador en septiembre de 1828, siendo ambos conservadores. Pero más tarde, es el mismo señor Ospina quien

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explica el origen de los partidos políticos en la Nueva Granada en una publicación hecha en el periódico “La Civilización” en noviembre de 1849. Para Ospina, en el primer deceni del siglo pasado hubo dos partidos; el de los llamados “godos” ó “monárquicos “ y el de los “patriotas” ó amigos de la independencia. Después se acabó aquel y éste último se dividió en “centralistas” y “federalistas”.

A raíz del proyecto de constitución para Bolívia, el partido de la independencia conoció otros nombres y divisiones: Bolivianos y Liberales, por ejemplo.

A la muerte del libertador, el partido Boliviano se dispersó pero durante la campaña electoral del General Santander y durante su administración , conformaron un grupo llamado “de oposición” y más tarde tomaron el nombre de “ministeriales”. Pero realmente el grupo que aparte de gobernar, primaba es esa época como mayoría, era el liberalismo, a la sasón integrado por dos corrientes: “los liberales moderados” y “los liberales rojos”, ya mencionados. El primero de estos grupos llevó la candidatura de Marquez al poder de 1837, frente a la candidatura del General Obando, sostenida por Santander.

EXPLICACIÓN SOCIOECONÓMICA

Otros autores explican al proceso de formación de nuestros partidos políticos con base a un entrelazamiento de hechos sociales y económicos. Es bien sabido que el liberalismo

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propugnaba el cambio y encarnaba los intereses políticos de los comerciantes, artesanos, esclavos y pueblo en general (también sus interese económicos). Por el contrario el

conservatismo se aferraba al estatus que representaba los intereses de la iglesia y, en consecuencia, de los terratenientes y esclavistas.

Para Germán Colmenares, historiador bastante conocido en el país por sus méritos como tal, los partidos surgieron y se desarrollaron simplemente como mecanismos para proteger a u grupo de las acciones arbitrarias de un Estado controlado por otro grupo. Y sdolo en 1840 surgieron dos tendencias ideológicas divididas por interese de clase: Los conservadores terratenientes ty la incipiente burguesía comerciamte liberal que apenas empezaba a mostrar algún poder decisorio.

LA EXPLICACIÓN ANECDOTICA

Sobre los orígenes de nuestros partidos políticos no han faltado las expliciones de tipo anecdótico. Por ejemplo, una que es sugerida por el general Carlos Cuervo Márquez y que vincula el distanciamiento personal acontecido en 1835 entre el presidente Santander y el Vicepresidente Jose Ignacio de Márquez, con el proceso de división del liberalismo y que dió origen a las dos grandes corrientes políticas. La mencionada anécdota es comentada por el jurista Leopoldo Umprimny de la siguiente manera más o menos aproximada: Debido a que gran parte de la historia de nuestro país no está todavía escrita, pocas personas saben que la ruptura entre el general Santander y Marquez no se debió a diferencias de tipo político sino a un choque por motivos personales en casa de doña Nicolasa Ibañez de caro. Dícese que a raíz del cumpleaños de doña Nicolasa y hallándose reunidos en esa el presidente y vicepresidente , el doctor Marquez, impresionado por la belleza de la señora Ibañez la pretendió de amores y como esto llegara a oídos de Santander, el presidente, lleno de incontrolables celos al verse suplantado ante la que era su amada, se lanzó contra el doctor Marquez a quien alzó en vilo debido a que era un pequeño y lo hubiera lanzado por la ventana del segundo piso hacia la calle pero doña Nicolasa se lo impidió interponiéndose entre ellos. Desde

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entonces se cabó un profundo abismo entre los dos altos personajes que mucho incidió en la historia Colombiana.

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Doña Nicolasa Ibañez fué la madre del fundador del conservatismo don Jose Eusebio Caro y abuela del también presidente de Colombia don Miguel Antonio Caro.

Todos los anteriores planteamientos encierran verdades parciales. Solamente una cosa es cierta y es la de que el origen de nuestros partidos y especialmente del liberalismo, hay que buscarlo en la doble revolución francesa: en la revolución francesa de 1789 y en la revolución posterior de 1848. En este mismo año es lanzado en Colombia el primer programa liberal, autoría de Ezequiel Rojas, quien a la postre es el padre de la organización del partido en sus comienzos; al año siguiente responden Caro y Ospina con el programa conservador.

D. LA REVOLUCION FRANCESA

Enorme fue la influencia que ejerció la Revolución Francesa de febrero de 1848 sobre el proceso de diferenciación doctrinaria de los partidos políticos colombianos; en esa revolución se produjo la caida de Luis Felipe de Orleans y sucesivamente la proclamación de la segunda república, los motines proletarios, el gobierno provisional del que hacía parte Lamartine, la reacción contra los socialistaas, la formación de un partido bonapartista, la insurrección obrera, el asesinato del arzobispo de París, monseñor Affre, las medidas de seguridad contra la anarquía adoptadas por el general Cavaignac, la elección por cinco millones y medio de votos de Luis Napoleón como una especie de principe, presidente, según lo anota Jacquez Bainville. Pero no sólo Francia vivía un período de cambio de la realidad social. Toda Europa se veía sacudida por vientos revolucionarios., que a us vez, hacían necesaria la reacción defensiva de la sociedad y la autoridad. En Roma, el papa huía; en Berlín el principe heredero hacia otro tanto ; en Viena, frente a la revuelta callejera, dimitía el odiado Metternich; en Bohemia y Humgría estallaba la revolución: en Francfort se reunía el parlamento; y Marx y Engels lanzaban su

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famoso “manifiesto comunista” con la consigna: “proletarios de todos los países, uníos” sin embargo , el sentido marcadamente socilaista de la revolucón de 1848 no recogía aún los motivos del manifiiesto Comunista.

La revolución de 1848 fue, en gran parte, el resultado de una alianza de la literatura romántica con el socialismo utópico de ówen, Fourier y Saint Simon. En Colombia el romanticismo, se convirtió en la fuerza que cautivó la mente y los corazanes de los políticos de aquella época. Lamartine, Victor Hugo, Prroudhon y el socialista Luis Blanc se convirtieron en los ídolos del momento. Por su parte, la juventud granadina leía a los románticos españoles como Espronceda, Zorrilla. Este románticismo literario y político contagió a no pocos miembros del conservatismo, como fué el caso de José Eusebio Caro. No obstante el románticismo de Caro tuvo mucho de afirmación de los valores nacionales hasta el punto de que en muchos matices se parece al romanticismo del Visconde de Chateaubriand. Pero serían los radicales granadinos, como Murillo Toro, Camacho Roldan y Rojas Garrido, quienes tratarían de implantar dentro de nuestra incipiente democracia aquellos principios de la revolución de 1848.

Una cosa puede sacarse en claro; el liberalismo ha sido individualista y romántico , con exponentes como Santiago Pérez, Jorge Isaacs, Diógenes A. Arrieta, Julio Florez, Antonio José Restrepo. Hay desde luego excepciones, con las que hubo en Europa, pero un liberal que se vuelve clásico se hace conservador romántico no deja de tener sus rasgos liberales.

LOS PRINCIPALES PROGRAMAS LIBERALES

Como ya se dijo antes, en 1848 vió la luz pública un documento del puño y letra del doctor Ezequiel Rojas, que, a no dudarlo, constituye el mejor compendio programático de la época del incipiente liberalismo.

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Ese luminoso ensayo, ante la imposibilidad de transcribirlo textualmente, lo podemos resumir en los siguientes términos consignados en casi todos los textos constitucionales:

1. Abolición de la esclavitud.

2. Libertad absoluta de imprenta (prensa) y de palabra.

3. Libertad religiosa

4. Libertad de enseñanza.

5. Libertad de industria y comercio, inclusive el de armas y municiones.

6. Desafuerzo eclesiástico

7. Sufragio universal directo y secreto

8. Supresión de la pena de muerte y dulcificación de los castigos

9. Abolición de la prisión de deudas

10. Juicios por jurados

11. Disminución de los poderes y funciones del poder ejecutivo

12. Fortalecimiento de las provincias (departamentos)

13. Abolición de los monopolios, los diezmos y los censos

14. Libre cambio

15. Impuesto único y directo

16. Abolición del ejército permanente por considerarlo como una amenaza para la paz pública.

17. Expulsión de los jesuítas como principal fuerza de oposición.

Sobre este programa fuertemente influenciado por el liberaismo francés e inglés, se movió el liberalismo colmbianao del siglo pasado. En el presente siglo ha venido girando en torno al programa socializante del insigne tribuno Rafael Uribe Uribe, expuesto en 1903, mientras dictaba una conferencia en el teatro municipal de Bogotá. Algunos de esos planteamientos están ya superados por la realidad, pero no por ello pierden validez histórica. Por la importancia de las ideas , aquí transcribimos ese programa en su parte esencial.

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Cambiar el senado, de cámara política en camara de trabajo, por lo cual no debe ser elegida como la de representantes, por votación popular, sino por los gremios, los propietarios rurales y urbanos, el comercio, los agricultores, los industriales, los mineros, los trabajadores, las universidades y académias, el clero y el ejército . La circunstancia de que en los parlamentos prevalezcan las profesiones liberales, sobre todo lo que Uribe U. Llamó “La abogadocracia”, y de que rara vez haya ahí un hombre práctico, conduce al predominio de la retórica y a que sólo por excepción se dicten buenas leyes. Este planteamieno fué alentado por el hecho de que en esa época, los gremios capitalistas eran débiles.

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Modificar el sistema tributario a fín de obtener por medio del impuesto, la nivelación de los ingresos y de la fortuna. Quien recibe mayores beneficios del estado, por lo mismo que tiene buenas rentas y crecido capital, debe pagar más. El arsenal socialista es rico en medidas al respecto, las que van desde el impuesto progresivosobre la renta y el impuesto proporcional sobre la riqueza a partir de una cifra determinada, hasta la excensión de todo derecho para los artículos de primera necesidad.

Reformar el sistema de la herencia. Nada más legítin¡mo que el hombre ecoja y goce del producto de su trabajo, que recoja el fruto de la simiente que sembró; pero parece menos legítimo que transmita el resultado de su trabajo a otro hombre, si eso ha de dar por resultado, la ociosidad del que hereda y los vicios que la ociosidad engendra. Sino heredando sería , por necesidad, un ciudadano trabajador y virtuoso, es un mal la herencia que lo convierte en un holgazan corrompido. En consecuencia , esas riquezas pasarán a poder del estado para que se disponga de ellas en beneficio de los pobres.

Legislación social. Establecer indemnización por accidentes de trabajo, las pensiones de vejez e invalidez, el seguro por muerte, el control de las condiciones higiénicas de los talleres y sitios de trabajo. Por estas y otras aseveraciones , Uribe Uribe es considerado como “el padre del derecho laboral colombiano”.

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Organizar la asistencia pública como manera de eliminar la caridad. La frase de que a los indigentes “les parece mejor recibir como limosna lo que consideran que se les debe por derecho”, anuncia una de las más grandes conquistas del pensamiento jurídico en los últimos años;: el principio de que en frente del Estado, el hombre es un acreedor. Como tal, el indigente tiene derecho al trabajo y el Estado debe propiciar el hecho mediante préstamos y subsidios.

El Estado debe costear por su cuenta médicos y abogados para los pobres a fin de librarlos de curanderos y tinterillos.

Uribe es considerado el padre de la educación tecnificada desde la escuela, pensamiento que dejó sentado en el siguiente raciocinio: “la educación debe ser gratuita y obligatoria pero la escuela le dará primacía al trabajo manual del alumno”.

Defendió con ardor lo que hoy es el ministerio de agricultuara con el fin de “estimular el cultivo de la tierra, la expoltación racional de los bosques e impedir el latifundio”.

El descanso obrero en la forma del establecimiento por el estao de teatros populare, salas de música, bibliotecas, museo, centros de recreación, gimnacios, etc.

Otras propuestas como la protección estatal a las industrias nacionales, participación del trabajador en las ganancias de la empresa, el establecimiento de bancos especiales para que el obrero adquiera facilmente el dinero necesario para organizarse como productor autónomo, fomento del cooperativismo, etc. Completaron el programa de Uribe Uribe.

Este, es a grandes rasgos, el programa socializante que expuso quien fuera uno de los más grandes hombres de la república y gran caudillo liberal. Lo dicho por él puede parecernos poco si se mira a la luz de la realidad actual, pero para la Colombia de 1903 era mucho; era romper toda una larga lista de prejuicios, era romper la tradición clásica en

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que se desenvolvía la política de ese entonces, era como declarse enemigo abierto de lo ya establecido.

Par nuestros día, he aquí los puntos que constituyen la base ó ideario político del liberalismo.

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El liberalismo solo reconoce aquella autoridad concebida mediante el sufragio, auténtica representación del pueblo.

El sufragio es la base de la democracia y esta es el nervio de la doctrina liberal.

El poder estatal no es absoluto ni puede ser ejercido arbitrariamente, el estado se halla limitado por los derechos individuales.

La ley es la expresión suma de la soberanía democrática, cuando ella es el fruto de un sistema representativo.

El parlamento es formado por personas escogidas por la masa de la sociedad anónima, mediante el ejercicio del sufragio.

Solo en los últimos años, gracias al esfuerzo de parte y parte, se ha logrado un entendimiento entre la iglesia y el liberalismo, pués es bien sabido que los principales liberales desconocen toda autoridad clerical.

La propiedad privada es absolutamente inviolable; esto se refrenda cuando se define y se defiende la libertad de industria, de comercio, de trabajo y de contratar.

La propiedad es el derecho de una persona sobre una cosa, objeto ó idea alguna, desde el campo jurídico, Humanamente, es el goce, el disfrute de algo.

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El liberalismo reconoce a la familia toda su importancia jurídica y su alcance sociológico trascendental. Es la célula inicial donde brota la cadena exquisita de la continuidad humana.

Los sindicatos de trabajadores y asociaciones gremiales nacieron como una reacción a los abusos de los patrones con sus trabajadores y con un medio de defensa y ayuda mútua de los agremiados. En el fondo, comulgan los principios casi idénticos del liberalismo y del sindicalismo, cuyas relaciones han sido siempre cordiales.

El Liberalismo defiende con ardor la soberanía nacional. Condena violentamente las intervenciones arbitrarias de otras naciones en el seno de la nuestra, ya sea bajo la forma de asesoría ó en forma bélica. Considera aceptable sólo la vía diplomática.

El liberalismo es partidiario de organizaciones internacionales como la ONU y la OEA, cuya intervención acepta solo en casos muy especiales.

Podemos concluir con Beneyto en que “La base del liberalismo ha sido el principio de la libertad que es el sistema de condiciones de dignidad humana. Y su éxito ha sido alcanzado a una doctrina que cualifica a través del amplio período de la vida contemporánea, la forma política por excelencia: el estado liberal sometido a un órden jurídico”.

Mas, sería injusto dar por teminadas estas líneas sin mencionar así sea de paso, los tres vértices, los tres términos cualificados que sirvieron de bandera al liberalismo en su nacimiento: Libertad, igualdad y fraternidad.

Dar a los problemas sociales, políticos y económicos soluciones conforme a la libertad, he ahí la idea madre del liberalismo.

Por eso, el programa liberal se resume en una concepción clara y sencilla:

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Libertad civil y religiosa para todos los ciudadanos, igualdad delante de la ley, derecho común, mejora de la suerte de los ,trabajadores.

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EL PROGRAMA CONSERVADOR EN 1849

“El partido conservador es el que reconoce y sostiene el programa siguiente:

El orden constitucional contra la dictadura;

La legalidad contra las vías de hecho;

La moral del cristianismo y sus doctrinas civilizadoras contra la inmoralidad y las doctrinas corruptoras del materialismo y del ateismo.

La libertad racional, en todas sus diferentes aplicaciones, contra la opresión y el despotismo monárquico, militar, demagógico, literario, etc.

La igualdad legal contra el privilegio aristocrático, oclocrático, universitario o cualquiera otro.

La tolerancia real y efectiva contra el exclusivismo y la persecución, sea del católico contra el protestante y el deísta, o del ateísmo contra el jesuíta y el fraile etc.

La propiedad contra el robo y la usurpación ejercida por los comunistas, los socialistas, los supremos o cualesquiera otro.

La seguridad contra la arbitrariedad de cualquier género que sea.

La civilización, en fin, contra la barbarie;

En consecuencia, el que no acepta algo de estos artículos no es conservador.

El conservador condena todo acto contra el orden constitucional, contra la legalidad, contra la moral, contra la libertad, contra la igualdad. Contra la tolerancia, contra la

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propiedad, contra la seguridad y contra la civilización, sea quien fuere el que lo haya cometido.

Y aprueba todos los actos en favor de estos grandes objetivos, sea quien fuere el que los haya ejecutado.

Ser o no haber sido amigo de Santander, Azuero y López no es ser conservador porque Santander, Azuero y López defendieron también, en diferentes épocas, principios conservadores.

Haber sido amigo de éstos o de aquellos caudillo en las guerras por la independencia, por la libertad o por la constitución, no constituye a nadie conservador; porque algunos de esos caudillos han defendido también alguna vez principios anti - conservadores.

El conservador no tiene por guía a ningún hombre; eso es esencial en su programa.

Si algunos o muchos de los hombres eminentes del partido se apartan del programa, el partido los abandona, los rechaza.

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El partido conservador no quiere aumentar sus filas con hombres que no profesen teórica y prácticamente los principios de su programa; por el contrario, le convendría que si en sus filas se hallan algunos que no acepten con sinceridad estos principios, desartasen de una vez.

EL PROGRAMA CONSERVADOR MODERNO

Ante todo es preciso anticipar que el conservatismo es una concepción que la vida que se revela en la actuación diaria de quien se adhiere a ella, en la perspectiva de contribuir a la constitución de la vida de los públicos. Para ello, se alimenta permanentemente del pasado para dar los pasos presentes y futuros en forma mas segura, teniendo siempre

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como fuente de inspiración los valores esenciales del hombre, para lo cual no tiene inconveniente en tocar la noción del absoluto y la moral.

El conservatismo concibe el Estado de derecho como la plenitud de la creación del hombre materializado en la sociedad civil en paz.

El conservatismo defiende yo afirma el cuerpo social, las instituciones, los paritidos, los usos y las costumbres predominantes, con el objetivo último del conservar al hombre. Se sabe así mismo, porta - estandarte de la ilustración y gestor de las ideas que mantiene el estado de la república.

La acción política

La acción política del conservatismo se orienta a crear las condiciones que permitan el desarrollo armónico de la reforma en interacción con la naturaleza y la sociedad.

Por consiguiente, la acción política tiene una dimensión ética de proyección social: la participación de todos, fundada en la naturaleza social del hombreen su dignidad, en su libertad y en la justa participación dentro de la vida comunitaria.

La acción política conservadora tiene sentido en la medida en que se orientaa la protección y realización de la vida y al logro del bien común.

En resumen, los fines primordiales de la acción conservadora son:

La defensa de los derechos de la persona humana dentro de un orden político propicio para su realización

La promoción de la justicia social entendida como la equitativa participación de todos en los beneficios y responsabilidades de la riqueza, el poder y la cultura.

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La garantía de la seguridad entendida como el disfrute pacífico de los derechos y la tutela efectiva de los mismos, como condición indispensable para la paz.

El logro de esa democracia participativa

El ordenamiento de la sociedad en el contexto de la garantía de la libertad personal y grupal con la intervención del Estado.

La promoción, coordinación y apoyo a la iniciativa privada que busque el bien común

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La preservación y utilización racional de los recursos y ecosistemas naturales en beneficio de todos.

La Economía: Para el conservatismo, la política económica tiene el fin primordial de mejorar el nivel de vida de la población en forma permanente y sostenida dentro de una concepción en la cual la iniciativa y la creatividad individual juega un papel preponderante La generación de empleo bien remunerado es máxima preocupación conservadora. La acción del Estado debe garantizar un efecto redistributivo de la riqueza de la sociedad.

En general, el conservatismo concibe la economía en su más pura ortodoxia y como tal obra.

Para lograr lo previsto antes, el conservatismo se vale de la facultad interventora del Estado a fin de lograr la equidad y la justicia, una intervención encaminada a lograr la solidaridad y el equilibrio, a partir de la participación de todos en un gran pacto social que se materializa en los llamados “ Gobiernos Nacionales ” a partir del bipartidismo tradicional.